La sala de reuniones del Instituto Cerise estaba recubierta con un velo de secretismo y sigilo. Un solo ocupante de la instalación no debía saber de lo que estaba hablando en absoluto, ¡o sino toda la angustia adolescente proveniente de la quinceañera Chloe Cerise sería terrorífica!

Su angustia a los diez años fue de tal magnitud, que Ciudad Vermillion todavía le daba escalofríos. Pensar en lo que ahora podía hacer ahora que era mayor...

Afortunadamente, no fue demasiado sigilo, pues cuando Chloe Cerise se encontraba en el laboratorio, usualmente lo ocupaba para ella sola. Una tarea mucho más fácil desde que Parker Cerise fue castigado, y ella temporalmente tomó prestado su Switch para ella. La chica se había interesado bastante en los juegos online, con el internet más estable del Laboratorio Cerise, y a menos que se estuviera esforzando más de la cuenta, no se daría cuenta que estaban teniendo una reunión secreta.

Y hablando de dicha reunión secreta...

- Mi hija necesita más amigos. – dijo sin reparos el Profesor Cerise, poseedor de varios títulos universitarios. Los otros dos adultos en la habitación estaban de acuerdo con él.

- Quiero decir, me tiene a mí, y a Goh... no puede ser todo, ¿verdad? – cuestionó Ash Ketchum, de dieciocho años, asistente investigador a medio tiempo para asignaciones peligrosas como préstamo del Profesor Oak.

- ... De hecho, tal vez solo sea yo. Tú te esfuerzas, Ash, pero no estoy seguro de que ella realmente aprecie el esfuerzo. – corrigió Goh, el asistente de quince años a tiempo completo.

- Goh, tú... no es que seas un mal amigo. Pero dos personas introvertidas pueden... tener dificultades para congeniar en todas las necesidades. Además, ser una chica adolescente es complicado. – le corrigió Chryssa amablemente. Ash. ya familiarizado con muchas chicas adolescentes como ella, asintió estando de acuerdo. – También es un problema de la escuela.

- ¿Escuela? – Ash, que no había estado en la escuela desde los diez, y por ende no sería el mejor para corregir las cuentas en el laboratorio, no tenía idea de cuál podría ser el problema. – ¿Qué sucede?

- ...Mi hija... tiene algunos problemas. No con sus calificaciones, de hecho le va bien en sus estudios. Es solo... bueno, con todo lo demás.

- ¿Hay algo más en la escuela aparte de las calificaciones? – Goh, que tenía calificaciones tan buenas como las de Chloe pese a que casi nunca asistía a las clases regulares, no estaba seguro.

- ¿Entonces es un problema social?

- ¿Eso existe en la escuela?

- Así es, y Chloe... bueno, diría que tiene dificultades para hacer amigos, pero realmente no se trata de eso. Más bien pareciera que todos en la escuela la odian. – explicó el Profesor Cerise con gravedad.

- Hasta donde podemos ver. Chloe realmente no habla de la escuela, y no tiene ningún diario. Así que tuvimos que hacer algo de trabajo de detective... – admitió Renji.

Renji y Chryssa se dieron la vuelta a un lado con aspecto contemplativo, mientras los demás solo... se quedaban mirando.

- Profesor, ¿qué están haciendo? – preguntó Goh.

- Teniendo un flashback al trabajo de detective que hicieron.

Ash hizo una pausa. – Sí saben que no podemos verlo, ¿cierto?

- Déjalos que lo hagan. – habló gravemente el Profesor Cerise. – Ha sido una semana dura.

- La escuela siempre lo es... – Goh, que asistía a la escuela con tan poca frecuencia como podía, asintió estando de acuerdo.

- Demasiadas... tonterías... de adolescentes... – Chryssa sonaba a haber vuelto de una guerra.

- Niveles... de drama... apenas disminuyendo a lo seguro... – A Renji solo le faltaba pitar como una máquina que acababa de evitar desconectarse por sobrecalentamiento.

- Siempre me pregunté por qué Chloe seguía viniendo aquí luego de que ese show de talentos hace unos años salió... terriblemente mal. Dejé de requerirlo cuando dejé de escuchar sobre la escuela y había terminado con la jardinería. No pensé mucho en eso ya que todavía no había contratado a Chryssa, y Renji estaba en año sabático por lo que me sentía solo. Pero por lo que podemos ver, todo el cuerpo estudiantil parece despreciarla.

- Eso... ¡eso es estúpido! – A Goh no se le ocurría una mejor palabra que decir. Era igual de tonto para todos.

- ... Entonces ¿por qué no hacer que se vaya o que asista a otra escuela? – preguntó Ash.

- Sí, o bien podría ir solo para tomar los exámenes, ¡como yo! – añadió Goh.

- Chloe no quiere ser entrenadora Pokémon, y no es tan fácil abandonar la escuela en Vermillion como lo es en Pueblo Paleta. Es una diferencia legal. – explicó in Chryssa.

En Pueblo Paleta y muchos otros lugares, los niños eran libres de abandonar la escuela a la edad de diez años y hacer lo que quisieran, usualmente si involucraba entrenamiento de algún tipo. Vermillion no lo tenía tan fácil, bajo la idea de que dejar que niños de diez años dictaran sus futuros conllevaba a que tomasen decisiones cuestionables.

La mayoría de niños de diez años no llegaban a ser Ash Ketchum. Ash Ketchum llegó a ser quién era con trabajo duro, tiempo, y algo de suerte.

- Además, ¿alguna vez te has transferido a mitad del año. Eso... eso nunca es bueno. Siempre es el último recurso, y solo para el final de este año. – añadió Renji, temblando por un mal recuerdo.

- Chloe también tendría que pasar más tiempo conmigo si no fuera a la escuela, y es una adolescente... – admitió el Profesor Cerise con tristeza.

- Así que solo necesita conocer a gente fuera de la escuela... ¿quieres que la traigamos por la fuerza para que venga con nosotros? Ash probablemente podría cargar a Chloe por su cuenta, y conocemos a toda clase de personas, la mayoría de las cuales son amigables si bien ocasionalmente algo raras.

Chryssa le echó una mirada rápida a Ash, y asintió. El chico a sus dieciocho tenía una constitución grande y fuerte, y Chloe no era particularmente grande. Probablemente podría cargarla en su aventura como un trozo de equipaje si quisiera... pero si Chloe era cargada de ese modo probablemente le dejaría cicatrices físicas a Ash, por clavarle las uñas y patearlo todo el tiempo.

- ... Debe haber alguna solución que no involucre eso... mayormente porque sospecho que legalmente eso se considera secuestro. – El Profesor Cerise parecía estar imaginándose el sonido de un mazo de juez reconociéndolo como tal.

- ¡Oh, tengo una idea! Profesor, ¿Chloe necesita algo que cueste dinero y no tenga? – Ash de pronto pareció tener un rapto de inspiración.

El Profesor Cerise se tocó el mentón por un rato.

- Sabes... mencionó el otro día tres libros que realmente quiere conseguir que saldrán a la venta al mismo tiempo. Son de tapa gruesa, así que costarán mucho dinero...

- ¡Perfecto! En Pueblo Paleta mi mamá y yo vamos a tener una reunión familiar. Habrá mucha gente alrededor de la edad de Chloe, y tal vez conozca a alguien que le guste. Y hey, si no lo hace... podemos pagarle. Mamá dijo que sería más como unas vacaciones pagadas para cualquiera que contrate como ayuda.

- Entonces, ¿crees que tal vez conozca a alguien que le guste entre tus primos...? – El Profesor Cerise parecía estar pensando en la idea. La parte de las vacaciones, aunque fuesen específicamente pagadas, cubriría muy bien el próximo descanso de la escuela.

Aun si no estuviese alineado con las vacaciones, el dinero sería una excelente carnada para hacer que Chloe cooperase, y sería una buena lección parental del valor del trabajo duro que un padre necesitaba constantemente reforzar en sus hijos... y llenaría su cuota del mes en relación a Chloe.

- Nah, solo tengo tres primos y ninguno está invitado. Me agradan, pero dos de ellos son hijos de la hermana de mi mamá, y ellas dos se odian tanto que acordaron quedarse en los lados opuestos del Monte Luna hasta que alguna de las dos muera. Y por desgracia, Trey y Troy no pueden evitar que su mamá se la pase leyendo sus emails o mensajes de texto, así que no podemos traerlos de contrabando. Tengo una tercera prima en Orre, pero ella no podrá llegar y nos pidió que no le enviáramos invitación. Algo sobre su abuelo, también conocido como mi tío, haciéndose daño con el internet... creo que estaba leyendo una sección de comentarios y de la rabia atravesó el monitor de un puñetazo o algo por el estilo...

El Profesor Cerise quiso señalar que "mi tío es el abuelo de ella" era una relación distinta de "mi mamá y la de esos dos son hermanas", pero solo eran semánticas que realmente no importaban.

- Si no son tus primos... – Renji estuvo a punto de preguntar con confusión, mientras Gengar descendía flotando con un enorme trozo de papel que, al doblarse, llenaba toda la habitación con un solitario y masivo árbol genealógico. O mejor dicho solo podía describirse como el mayor arbusto genealógico enredado de las pesadillas.

- Es para todos mis medios hermanos que he encontrado a lo largo de los años.

- ¡QUE ARCEUS SE APIADE DE NOSOTROS! – jadeó Chryssa.

- ¡MIS OJOS! ¡NO PUEDO NI VER LOS DETALLES! – Los ojos de Goh daban vueltas mientras intentaba hacer algún registro serio de cualquier trozo de información, como si alguien hubiese intentado leer un documento legal excesivamente complicado. Cada vez que intentaba volver a enfocar la mirada, la profundidad del documento hacía que la concentración volviera a huir de in terror.

- ¡¿QUÉ DIABLOS ES ESTO?! – cuestionó Renji.

- ¿Cuánto tiempo tardaste en hacer esto? – preguntó el Profesor Cerise en tono plano, más por estar estupefacto por el intrínseco diseño del árbol que por la montaña de información.

- Sí, mi padre biológico tuvo esta extraña idea de tener hijos por todo el mundo, y dejó esparcidos miles por todos lados. Fue muy extraño cuando a los diez años algunas madres me confundían con sus hijos, y me preguntaba por qué este que era un patán se parecía tanto a mí, pero al final todo tuvo sentido. – explicó Ash, como si solo fuese una broma. – Además, el tipo es un completo desgraciado del que todos nos alegramos que haya muerto y que no llegamos a conocerlo, porque aparentemente fue una persona horrible. Oh, y tenemos que seguir haciendo nuevos árboles genealógicos porque todavía seguimos encontrándonos nueva familia. Se ve que estuvo... ocupado.

- En serio, Ash, las cosas que dices manteniendo una cara normal... – suspiró Goh, negando con la cabeza.

- He tenido ocho años para acostumbrarme a ello.

- De pronto me siento como el padre del año. Está bien, pero... ahora siento la inexplicable necesidad de disculparme contigo. – admitió el Profesor Cerise. Había cometido algunos errores de crianza paterna, como que debió haber hecho algo sobre el gusto de Parker por la violencia antes, pero eso...

- Oh, no se preocupe, mi mamá es tan genial que sin duda lo compensa con creces.

- Entonces... ¿cuántos de ellos...? Bueno, ¿qué tal si comenzamos con los de la edad de Chloe...?

- Ya encontramos unos doscientos siete que tienen quince, y ciento cuarenta que pronto los cumplirán. Obvio que no invitaremos a los que son malvados o están muertos, y algunos no podrán venir o simplemente no quieren. Así que, son ciento cuarenta de la edad de Chloe, y dependiendo de qué tan arriba o abajo en edad quieran ir... – Ash frunció el rostro mientras trataba de hacer los cálculos. Pikachu chirrió algo y aplaudió.

- Estoy pensando... son poco más de cuatrocientos que son de la edad de Chloe, o solo un año mayores o menores. Seguro que Chloe encontrará a alguien con quien quiera hacerse amigos.

Nadie comentó del hecho que Ash necesitaba que el ratón eléctrico hiciera matemáticas por él, o del hecho que pudiese entender a Pikachu tan claramente. A estas alturas todos lo sabían muy bien.

- Entonces esta es... de alguna manera, la mejor idea que tenemos. Pagarle a Chloe para que se involucre en la... reunión familiar de Ash, a falta de una mejor palabra, y esperar que haga amigos. Entonces, um... ¿qué pasará si encuentra a alguien que realmente le guste? – cuestionó Renji.

- ¿Cómo un mejor amigo? – preguntó Goh levantando una ceja.

- ... Chloe y un chico o chica, solos en el bosque...

- ...En este punto, ella necesita de alguien. Si es por mí, puede traer a casa a tres novios al mismo tiempo. Solo quiero verla sonreír más y que haga amigos. – El Profesor Cerise estaba listo para enfrentarse a una realidad convertida en un drama de telenovelas si eso significaba que su única hija sería feliz.

...

Luego de la reunión, el profesor y compañía fueron a ver a Chloe, y aunque ella solo estaba jugando con el Switch de Parker, se sentía bastante imponente hablar con ella. Era como hablar con un Electrode, como si Chloe pudiera hacer explosión en cualquier momento.

- Chloe, ¿podemos hablar?

La pelirroja pausó su juego, miró a su padre, y suspiró antes de dejar de lado la consola de juegos.

- Seguro, ¿de qué? – le preguntó, en su clásica paciencia de adolescente puesta a prueba, sonando a pocas sílabas de explotar en rabia.

- ¿Has estado...?

- Papá, lo que sea que quieras sugerir, no lo necesito. Lo que ahora necesito es descubrir cómo funcionan los Bloodliners.

El Profesor Cerise parpadeó. – ¿Y por qué necesitas saber eso?

- ¡Porque no les encuentro ningún sentido! – espetó Chloe. – Quiero decir, ¿qué habría pasado si mamá fuese algo estúpido, como una Bloodliner de tipo Especie Smeargle? ¿Me habría convertido en una yo? ¿Lo sería Parker? ¡¿Ambos?! ¡¿Ninguno?! ¡La falta de respuestas me está matando, y necesito distraer mi mente con esto o me volveré loca!

Solo Goh notó que Ash se mordía su lengua.

- Puedes preguntarle al que está en la habitación...

- Oh claro, por supuesto, ¿por qué no se me ocurrió? – preguntó Chloe, con la voz chorreando de sarcasmo. – Tal vez si no me pidiera ir de expedición cada vez que hablamos, lo consideraría.

- ¿Qué hay de las veces que te preguntó si necesitabas algo de la tienda? – Goh no parecía registrar que la mirada que recibió de Chloe gritaba "Eso son solo semánticas".

El Profesor, sin embargo, sí notó su mirada, por lo que rápidamente desvió el tema:

- ¿Te gustaría trabajar con Ash en algo? No es un trabajo para mí, así que...

- ... ¿Acaso involucra viajar a alguna jungla para luchar contra hordas de la muerte?

Los asistentes miraron a Ash, que se encogió de hombros como para decirles "No he hecho eso en un año". No le pidieron más contexto.

- Te pagarán. – añadió su padre, y una chispa de interés apareció en los ojos de Chloe.

- ... Continúa.

Lo que vino después fue un breve resumen de lo que trataría el trabajo, y Chloe... no pareció molestarle mucho. Seguro, la idea de hacer que Ash, citando textualmente "le restregase sus victorias en la cara" era molesta, pero mantuvo bastante la calma a pesar de todo.

- ... Entonces ¿a quiénes debo evitar? ¿Quién es el tío Grab-em?

- ¿Huh? – cuestionó Ash, sin estar seguro de lo que Chloe querría decir con eso.

- ... ¿La tía Nag-em? – Chloe sonó un poco menos calmada en su pregunta, y algo más agravada.

- No invitamos a la tía Hilary.

- ¿El primo Smack-em? – El tono de Chloe sonaba casi igual que con la pregunta anterior.

- Mi apellido es Ketchum, así que...

Chloe lo miró como si fuese tonto. Prácticamente ya era un hombre, ¡¿cómo era que no entendía los comentarios sugestivos tan obvios?!

- Sé muy bien de lo que van estas reuniones familiares. Siempre hay ese sujeto al que tienes que invitar, pero es alguien terrible y que es mejor evitar. Mamá tiene a su hermano cuando salga de prisión, Goh tiene a su tía...

- Oh... – Ash por fin le entendió. – Oh, no te preocupes. No invitamos a los malvados.

- ¿Entonces a quiénes invitaste?

...

- ¡Profesor! ¡Chloe se acaba de desmayar! – gritó Ash justo después que el cuerpo de Chloe se puso flácido y se desplomó encima de él. Estaba tan en shock que se le olvidó que el Profesor estaba allí mismo para verlo todo.

- ¡No te preocupes, solo ábrele un contenedor de helado de menta con chispas de chocolate! ¡Es de su lugar favorito al que solemos ir, eso la despertará! Y si no funciona, solo reproduce ese DVD que está en el estante de arriba. El tema musical lo hará.

(--0--)

Varios días después...

Decir que la mente de Chloe era un desorden total sería... bueno, habría que verlo uno mismo:

- Es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero, es por el dinero....

Ash era... bueno, era una nueva presencia que a ella no le agradaba. Se llevaba demasiado bien con Goh, siempre preguntándole si quería hacer cosas, y comía demasiado.

Lo cual, lo admitía, no podía evitarlo por ser un Bloodliner, ¡pero al menos podía compartir! ¡O por lo menos podría comerse solo lo que a ella no le gustaba!

Nunca sintió que él fuese peligroso, jamás tendría la necesidad mental de llamarlo "Ash Grab-em" o algo así, pero eso era... bueno, era estresante. Y ya tenía suficiente de eso. Y la idea de estar alrededor de cientos como él era algo que parecía digno de una trama en una antología de horror.

Pero ella realmente necesitaba más dinero, y Parker estaba haciendo todas las tareas que ella haría normalmente como fuente de un ingreso fácil. La escuela la suspendería si tomaba un trabajo de medio tiempo una vez que las clases se reanudaran luego del descanso, y no había otra opción para conseguirlo rápidamente.

Y había visto el salario que le pagarían: era más que suficiente para sus libros, algunos juegos nuevos mientras el dispositivo de Parker era suyo, y diablos, si duraba lo suficiente (y Ash le dijo que podría ser así, especialmente si ella llegaba temprano o las festividades se prolongaban más tiempo) se podría comprar una consola propia para cuando Parker terminara con su castigo. Parecía un trato con el diablo, pero este bien podría valer la pena.

- De acuerdo, qué bueno que estés a bordo. ¡El capitalismo es tan buena razón para comenzar como cualquiera! – sonrió Ash, mientras su Dragonite y un Charizard que utilizaba en algunas batallas recientemente (o tal vez tendría más de ellos que solo éste, Chloe solo había oído hablar al respecto) se acercaban a él cuando se los indicó.

- Llegaremos a Pueblo Paleta más rápido de este modo. ¿Prefieres ir con Charizard o Dragonite? Ya conoces a Dragonite, pero Charizard es menos probable que haga rizos mientras vuela como lo hace Dragonite. Por otro lado, probablemente sí reaccione a ver a un Articuno para enfrentarlo en una batalla como la última vez.

Charizard no parecía avergonzarse de la memoria.

- ...Otra vez, Ash, dices eso tan despreocupadamente. – cuestionó Goh.

- A veces pasa. Tú viste un Zapdos y trataste de atraparlo, Goh. Esa pelea contra Articuno me hizo llegar tarde para el cumpleaños de mi mamá...

- ...Uf. – gimió Chryssa.

- No se preocupen, Charizard asumió toda la culpa, y mamá lo puso a quemar aquel campo como castigo. Lo obligó a hacerlo con mucho cuidado.

Nadie le preguntó a Ash por qué su mamá querría quemar un campo, o cómo haría alguien para que un Charizard quemara algo con precisión.

- Entonces, Chloe. – dijo Ash, tratando de cambiar el tema antes de que le pidieran más contexto. – ¿Te atraen los chicos, o las chicas?

Ash y Chloe fallaron en ver que Renji se pellizcaba la frente por la pregunta tan falta de tacto de Ash, como parte de la operación "compañía para Chloe", que Chryssa negaba con la cabeza, y la mirada general de interés del Profesor Cerise en el tema. Chloe jamás le diría la respuesta por sí sola, después de todo.

- Los Bloodliners.

- Bueno... viendo que a todos los que no son padres o compañeros románticos lo son, y que varios de los compañeros románticos también son bloodliners...

Chloe de pronto se sonrojó, como si recibir esa respuesta requiriese que ella diera una propia, lo que la dejó algo indispuesta de decirlo de frente.

- ¡E-es solo que encuentro a los Bloodliners interesantes, ¿de acuerdo?!

- ¿Eso significa que encuentras interesante a Ash? – se preguntó Goh en voz alta. – ¿Eso no te convierte en una de esas, creo que le llaman tsundere, hacia él...?

Chloe necesitó de toda su fortaleza mental para no darle una cachetada a Goh por el comentario. Aunque viéndolo por el lado amable, sí pensó en algo para cambiar el tema. Aunque era uno que demostraba que Chloe no era una estudiante de la escuela del tacto, casi tanto como Ash.

- Y bien, Ash, disculpa la pregunta, pero... ¿cómo es el deseo sexual de un Bloodliner?

Ash se detuvo. – ¿Discúlpame?

- El deseo sexual. La libido. La necesidad de fornicar. De reproducirse. ¡Esa mierda!

Ash se quedó en silencio.

- ¡Vamos, Ash, si estás rodeado constantemente de varias mujeres, y los números de tu familia se cuenta en cientos! ¡No me puedes decir que no conoces la respuesta!

- ... Bueno sí, pero eso ya es personal.

Chloe resopló burlonamente. – Entonces, ¿no me vas a decir qué probabilidades tengo de que alguien quiera conmigo?

Un silencio se formó en el espacio fuera del laboratorio, y Charizard hizo un gesto de "más o menos" con las garras.

- ¡CHLOE!

- ¡Oh, cierra la boca, papá! ¡Ya tengo quince, prácticamente soy una mujer, y voy a una reunión familiar cuyo patriarca se metió en cualquier cosa que se moviera! ¡Quiero conocer los peligros al frente!

El Profesor Cerise parecía dividido entre sus instintos paternales, y su deseo de que Chloe tuviese compañías más íntimas, fuesen platónicas o algo más.

- ...Um ... bueno... ¿quieres subirte a Dragonite para que nos vayamos? – preguntó Ash débilmente, tratando de evitar que el Profesor Cerise tuviera que hacerlo.

- Bien. Igual me parece más linda que Charizard.

Dragonite lanzó un chillido feliz, mientras que Charizard resopló con desdén.

....

- ... Sabes, no creía que Talia tuviese que colar esos condones en su equipaje antes de irse, pero ahora me alegro que lo hiciera. – suspiró el Profesor Cerise.

- Intuición de una madre. – dijo Chryssa. – Además, ella siempre ha conocido a Chloe mejor que usted, Profesor. Sin ofender.

- No me ofendo. – gruñó el profesor. – Solo espero que Chloe no tome esto como una excusa para volverse loca.

- Creo que le debería dar algo de crédito a Chloe, Profesor. – dijo Renji. – Seguro, puede que sea una adolescente cuyas hormonas a veces la dominan, pero sabe mantenerlas dentro de sus pantalones.

- O al menos cómo evitar problemas a largo plazo con ellas. – añadió Chryssa mientras el Profesor arrugaba la nariz.

- ...Entonces, ¿ahora a mí me toca vigilar a Parker...? – se preguntó Goh en voz alta.

¿Tendría que ir hasta la casa Cerise cuando los padres estaban ocupados y no había escuela, solo para mantener a Parker lejos de los cuchillos?

Eso era otra historia, para otro día.

...

Ash le había explicado mientras volaban cuál sería el plan básico. La verdadera gran fiesta iba a suceder en un lago en las colinas alrededor de Pueblo Paleta. Era algo que Ash había comprado con su dinero de "Soy el Campeón" que compartió con el Profesor Oak luego que él y sus amigos (y "amigas") terminaron expandiendo el conteo de Pokémon del laboratorio extensivamente. En los dos días previos a la gran fiesta, mientras todos llegaban, se quedarían en la posada/restaurante de su madre junto con aquellos que llegaron antes, para ayudarles o guiarlos, o solo para saludar (a Ash y los otros) antes que iniciara la fiesta.

Estaban fuera de temporada, así que la mamá de Ash tenía espacio más que suficiente y no mucho por hacer. Además, aparentemente le gustaba "hacerle de mamá a los más pequeños, porque ahora Ash ponía a Serena a hacerle los sándwiches la mayor parte del tiempo".

Muchos se levantaban temprano para tener espacio para sí mismos. Cientos de ellos iban a estar allí después de todo, y a Ash se le coló decir que muchos de los que se levantaban temprano eran parejas.

Parejas solas en los bosques... una puerta abierta a la imaginación.

Y una vez que llegaron a la modesta casa de campo roja y blanca de Ash, fueron saludados por una mujer muy familiar.

- Soy Delia Ketchum, la madre de Ash. Tú debes ser Chloe, realmente te agradezco tu ayuda.

Delia le dio a Chloe la primera advertencia de lo que debía esperarse. Específicamente, al compararla a ella con Ash y notar que había sacado más del padre de los miles, una comparación que nunca antes había hecho antes de hoy, pero ahora era bastante necesaria.

Era... moderadamente preocupante. Para empezar, Delia Ketchum se veía no menos de un pie más baja de estatura que su hijo, tenía menos constitución, y cabello castaño oscuro.

El último era menos preocupante, pero necesitaba un tercer elemento en la lista o sino no se sentiría bien.

- Me alegro de estar aquí. – ¿Era eso una mentira? No era que estuviese exactamente miserable and, y había venido por voluntad propia, pero aun así sentía una inminente sensación de temor.

- Me alegra escucharlo. Espero que la pases bien, incluso mientras no estés desengrasando trastes.

- ¿Cuánta gente ya ha llegado hasta ahora? – preguntó Ash, luego de indicarles a sus dos Pokémon Voladores que se fueran al rancho de Oak a descansar.

- ¿Y cuántos de ellos son legítimos? – añadió Chloe.

- Hmmm... – Delia parecía pensativa.

- Bueno... nadie que esté emparentado conmigo excepto mamá, así que...

- ¡Ash!

La pregunta se quedó en el aire cuando una mancha rubia apareció de la nada y lo abrazó, gesto que rápidamente él correspondió. Cuando la pequeña mancha cariñosa se calmó lo suficiente para verse lo bastante clara, pudo ver que se trataba de una chica. Bastante atractiva, de paso.

Era rubia, con una larga cabellera en un estilo, tono y longitud diferentes de los de Sara (afortunadamente). Sus ojos eran amarillos y debajo de estos había unas familiares marcas con forma de Z. Aunque no era tan alta como Ash, probablemente superaba los seis pies, ¿y ya había mencionado que era muy bonita?

También le resultaba ligeramente familiar, aunque no sabía con exactitud por qué.

- ¡Betty! ¡Qué gusto de verte!

- ¡Pi-Pika!

Algo empezó a sacudirse en el cabello rubio de la chica, y una especie de bichito amarillo, un Joltik, que recordaba haber visto en un libro sobre la especie de Yamper, saltó para saludar a Pikachu también.

- ¡También me alegra verte! ¡No puedo creer que no nos hemos visto desde la última reunión! ¿De verdad ha pasado tanto tiempo?

- Sí, supongo. El tiempo vuela cuando ayudas a los Profesores Oak y Cerise, pruebas la Serie de Coronación Mundial, y terminas en la región Kaskade por error durante un mes entero.

- Cielos, realmente quiero intentar la Serie de Coronación Mundial, pero siempre me surgen cosas. No es que ganar una conferencia de la Liga Kalos haya sido una distracción o algo así...

- ¡Te vi por televisión! ¡Estuviste asombrosa! Oh, ¿está Jamie por aquí?

- De hecho, ahora está haciéndole de segundo a tu mamá...

- Estoy perdida. – dijo Chloe para sí misma, mientras los dos hermanos se ponían al día.

- Oh, déjame ayudarte entonces. Esta es Betty Snyder. Es una de las hermanas mayores de Ash, así que tiene diecinueve. Es lo más alto que llegan los hijos en esta loca familia hasta donde sabemos. Es de Unova y es una gran fanática de los Pokémon Eléctricos. Por eso llevaba un Joltik en la cabeza. – explicó Delia.

- Oh, y yo pensando que sería para que le vaya mejor en las batallas. – bromeó Chloe.

- No, eso es un Musharna. Luego que Black ganó la liga con uno chupándole los pensamientos excesivos, se volvió una moda ponerse un Munna o Musharna en la cabeza para que te chupe los pensamientos excesivos y pelear mejor en Unova. Black no está emparentado con ninguno de ellos, por cierto. – agregó Delia como dato adicional, como si tuviera que asegurarle que no, no todos eran parientes de Ash de alguna manera.

- ...Betty Snyder... siento que he escuchado ese nombre en alguna parte, y realmente no sigo las batallas. Y también Jamie...

- Oh, ese es su novio. Han estado juntos desde hace tiempo, y sin ningún tropiezo. Y como debes haber escuchado, es mi segundo al mando en la operación "alimentar la hambruna infinita". Así que será uno de tus jefes.

- Por un tiempo, ¿eh? ¿Cuánto llevan juntos exactamente?

- Lo suficiente para cuestionarme por qué sigo sin tener un yerno. – habló una tercera voz, de mujer adulta con acento unovano, y en ese instante se les unió otra mujer rubia mayor, mientras los dos hermanos que hablaban de alturas no les prestaba atención en su propio mundo. No necesitó que le dijeran que esta era la madre de Betty, pues las dos se parecían mucho: Betty solo era más alta y tenía algunos atributos de más que su madre no, pero la mujer (que se veía mayor Delia) parecía haber envejecido muy bien. E igual que con su hija, Chloe sentía haberla visto en alguna parte antes, y de pronto parecía tener una mejor idea de por qué.

- Dígame algo, y tal vez suene un poco extraño, ¿pero usted de casualidad no es una modelo? – le preguntó a la mujer mayor, que sonrió.

- Estás en lo correcto. – La mujer hizo una pose, por efecto de anunciar su nombre más por reflejo o algo así. – Elizabeth Snyder es mi nombre, y lo he hecho todo. Soy una modelo en mis cuarenta, entreno a mis propios Pokémon, y crie a mi hija por mí misma para que sea una joven brillante. Ya desearía yo que se case con Jamie, pero quién sabe, quizás están jugando el juego del Combusken con el anillo. Es solo un problema menor en el gran esquema de las cosas.

- Oh sí, ahora veo por qué me parecían familiares. Creo que una de las revistas donde mi mamá trabajó tiene anuncios publicitarios donde usted sale con su hija. Algo sobre consejos para padres y eso... admito que no lo leí, no porque fuese por la historia sino porque la portada me atrajo... – Se detuvo antes de poder explicar que falló en leer más al respecto porque Sara se la había quitado, al darse cuenta de algo.

Había muchas modelos a las que no reconoció en la gran imagen de portada, y una de ellas era una mujer de cabello castaño rojizo con un traje de baño verde de una pieza. Se veía bastante atractiva, y solo entonces se dio cuenta de que había estado hablando con esa mujer cuando estuvo al lado de la modelo que estaba en el centro de dicha imagen. Como si se diera cuenta de lo que recordaba, las dos reflexivamente igualaron la imagen con la pose, solo que sin trajes de baño, y se rieron.

- ¡Oh sí, la última reunión fue en Isla Kumquat! Fue muy divertido hacer esa sesión con los demás, y esos artículos ayudaron a cubrir los costos por el lado de Luana. Pensar que volví al modelaje a mis treintas...

- Nunca es demasiado tarde, Delia. Realmente deberías considerar hacer más sesiones. Has envejecido remarcablemente bien...

Y las dos rápidamente empezaron a rememorar, igual que sus hijos, sobre eventos del pasado, mientras la mente de Chloe se iba a otra parte.

La primera hermana de Ash que conoció era una entrenadora barra modelo, cuya madre también era una entrenadora barra modelo.

Oh, estos días sí que iban a doler. Aunque ¿tal vez fuesen a doler de forma divertida?

...

- ...ayuda mucho, por supuesto, que Pueblo Paleta es tan pequeño que yo soy dueña de su único restaurante. Lo mismo con el negocio de hotel, se podría decir que tengo un pequeño monopolio. – La mamá de Ash se los había llevado a ella, al propio Ash y a las rubias consigo, para hacer un pequeño tour, y le estaba mostrando la parte pública del restaurante. Era un restaurante campestre, ¿qué podría decir al respecto?

- Entonces, ¿aquí cocinan comida campestre, kalosiana, o...?

- Un poco de esto, y de aquello. Puedo cocinar cualquier cosa que quiera después de todo, y la única competencia que tengo es la comida de las tiendas. – dijo Delia restándole importancia. – Oh, y ya que estamos aquí...

- ¿Tienes que mostrárselo...? – Ash casi gimió. Betty se rio y eso solo confundió a Chloe. ¿Mostrarle qué cosa?

- Por supuesto que sí, Ash, soy una madre orgullosa después de todo. Lo hice así de grande para tener algo más por qué presumir. Ahora, ¡permíteme enseñarte el muro de trofeos de los Ketchum!

El muro estaba cubierto de cajones y marcos de cristal, todos los cuales contenían una exhibición tras otra. Había dioramas de medallas y símbolos, recolectados de todo el mundo hasta donde podía ver. Estantes de trofeos de ligar: oro, plata y bronce, y uno que parecía un premio de participación. Premios por cosas como Poké-Aros, Sumo, batalla de Tauros, Concursos Pokémon, y más alineados en toda la sección. Era un gran monumento a los ocho años de Ash viajando por el mundo.

Aunque no solo aparecía Ash en el muro, si bien la mayoría eran suyos. Vio también algunos trofeos de Delia: premios a restaurantes, portadas de revistas y similares, y vio otra generación de Ketchum, quienes presumió que eran los padres de Delia. La mujer tenía su propio rango ecléctico de premios mientras que el padre tenía una mezcla de premios de restaurante y medallas por servicio militar. No era que fuese una experta, pero creyó que algunas eran mezcla de "salvar muchas vidas valientemente" y "matar a muchos hombres".

No había señal de la odiada hermana de Delia, y tal vez lo mejor fuese no preguntar.

Ella solo pudo mirarlo todo. Era como el muro donde sus padres le ponían sus premios y diplomas, pero más elegante. Los registros de los Cerise records eran más para orgullo propio, pero estos estaban a plena vista para todo mundo.

- Es un poco de vanidad maternal y orgullo familiar, pero a veces, es que tienes demasiado vidrio de sobra, y que quieres que Carl se calle cuando viene por sus panqueques. – admitió Delia.

- Nada de malo con eso. A mí me encanta presumir de los logros de mi bebé. – dijo Elizabeth estando de acuerdo.

- Mamá... nunca puedes decir eso sin que suene embarazoso. – gruñó Betty, la hija más alta mientras su madre Elizabeth se reía.

- Las madres que crían grandes hijos tienen permitido presumir. Es nuestro derecho.

- Y en serio, ¿qué más iba a hacer con todo ese cristal de sobra sino mostrar todo esto?

- Querías tener un invernadero...

- Pero ya tengo uno, y este tipo de vidrio no sirve para eso.

Chloe no tenía nada qué decir. ¿Necesitaban que le recordasen que a Ash... le iba bien en todo?'

- ... Saben, esto me hace parecer como si nunca hubiese metido la pata, y eso es una imagen falsa. – admitió Ash, como si hubiese notado esa sensación de desesperanza en ella.

- ... ¿De verdad? – preguntó mientras tanto Ash como Delia asentían.

- Oh sí, ni siquiera se levantó a tiempo. – dijo la segunda. – Hasta rompió sus relojes despertadores.

- ¿Relojes? – preguntó incrédula.

- Estaba seguro de que con tres sería a prueba de tontos...

- Todos estaban diseñados como Pokébolas, y se puso a entrenar dormido. – se rio Delia. ¿Así que los arrojó contra la pared mientras dormía, probablemente murmurando "¡Yo te elijo!"? Eso en realidad era muy divertido de imaginar.

- Es solo que he tenido mucho tiempo para ganar en algunas cosas... con el tiempo se volvió más fácil, es cierto, pero todos tienen sus inicios. Una vez que comiences, tú también tendrás tu propio muro de trofeos. Probablemente algunos diplomas también, y yo jamás tendré uno de esos. Yo no puedo estudiar aunque mi vida dependiera de ello.

Ninguno de los Ketchum tenía diplomas, ahora que lo pensaba,

- Bueno, te tocará empezar en alguna parte. Vamos a enseñarte dónde vas a trabajar.

...

- De verdad lo siento mucho por el pobre infortunado que tenga que proveer comida para este tipo de cosas. – admitió Chloe. Los Ketchum y las Snyder, luego de abandonar el canal de los recuerdos, se la llevaron para mostrarle donde haría su parte de "trabajo" en sus vacaciones laborables. Ya había visto cocinas, almacenes de comida, y otras áreas que básicamente le dejaban en claro que cada comida iba a ser para el final del camino al menos unos cuantos centenares de personas.

Y varios de esos centenares, de hecho, les habían detenido en su tour en varias ocasiones para saludar a Ash y Betty. Y fuera de "conocerse por primera vez", ambos devolvían los saludos cálidamente. Hermanos que veían a los dos como asombrosos, grandes, queridos, geniales, inspiración, y cualquier otra cosa positiva que se pudiera decir en el tema de "hermanos mayores geniales a los que amamos".

- ¿La replicación de la comida existe? Debería decirle a mi papá que trate de volverla real.

- Nos estás ayudando a cocinar... – señaló Betty.

- Sí, pero ¿quién la está pagando? No vi ninguna sesión de fotos por aquí.

- Bueno, en realidad no es tanto como parece. Aquí pongo a crecer muchas de mis propias bayas, así que eso me ahorra un montón. Muchísimas bayas... ¿te gustan las bayas, espero? – cuestionó Delia, sonando a que estaría preocupada si ese no era el caso.

- Sí me gustan.

- De hecho, yo estoy pagándolo. – Ash confesó ser el que estaba pagando la cuenta. Ahora que lo pensaba, a menudo compraba boletos de avión para llevar a Goh a lugares o cubrir costos en los cuales incurría...

- Eso todavía suena a que cuesta mucho.

- Tengo un buen consultor financiero. – Por alguna razón, Ash se tocó el bolsillo donde ella sabía que guardaba su viejo Pokédex. ¿Qué, acaso ese era su consultor? No tuvo oportunidad de preguntar más al respecto antes que le mostraran las áreas residenciales y su habitación, donde la dejaron para que pudiera establecerse cómoda antes de que la llamaran a servicio para preparar la cena.

Su cuarto era bastante agradable. Muy acogedor, campestre, pero con clase. No había televisión, pero sí vio la contraseña del wifi. Al igual que a su nueva compañera de cuarto.

- Oh, así que tú serás mi compañera. La señora Ketchum dijo que una de las ayudantes invitadas se quedaría conmigo. Hola, mi nombre es Lita Allegro, y esta es mi primera reunión familiar. ¿Cuál es el tuyo?

Chloe, sin embargo, no pudo evitar mantener sus ojos fijos en la chica de cabello negro. En serio, ¿cómo era posible que las chicas Bloodliners parecían todas tener cuerpos de supermodelos? Esta chica era preciosa, igual que Betty...

De hecho, mejor retiraba eso, ¡¿cómo era posible que todos los Bloodliners lucieran como supermodelos?! Incluso cuando no eran en realidad modelos.

No ayudó en nada que justo entró a la habitación cuando la chica se estaba cambiando. Chloe Cerise se sintió como una protagonista de un anime o algo. Podía ver exactamente el tipo de ropa interior que llevaba la chica, y le hizo pensar en la desventaja de altura que tendría a comparación con Betty la compensaba en otras áreas.

- Chloe. Chloe Cerise. Perdón por entrar así...

Aunque Lita estaba algo sonrojada, no parecía estar tan mal como alguien a quien la veían mientras se cambiaba. No hubo objetos arrojados ni nada. Diablos, si hasta ella estaba más sonrojada por ver a Lita.

- No hay problema. Culpa mía por no poner el cerrojo.

Dejó su bolsa sobre la cama, empezando a descargar las cosas mientras Lita se ponía algo de ropa encima. Sus ojos se vieron algo atraídos hacia ella mientras ocurría.

- Muy bien... hey, ¿cuál es tu... relación con Ash? – preguntó Lita mientras sacaba un par de jeans.

- ¡¿H-Huh?! – Chloe no perdió un instante en ponerse a la defensiva. – ¡¿P-por qué la pregunta?!

- Te vi llegar volando con él. Quiero decir, es uno de los chicos más geniales en todo Kanto, y es mi hermano. Digo, al principio no lo creía, pero las pruebas de ADN no mienten, y mi mamá y la suya están de acuerdo en que se acostaron con el mismo tipo. No hay muchos orreanos que miden más de dos metros de alto en Kanto, menos con ojos rojos.

Lita, como finalmente pudo notar, tenía ojos diferentes a los de Ash. Tenía el cabello oscuro igual que Ash, marcas con forma de Z como Ash, pero los ojos de ella eran rojos y los de Ash marrones. Aunque en su defensa, tenía... um... problemas mirándola directo a la cara. Estatura y... eh... medidas específicas y todo eso.

- Digo, no solo es que sea genial porque sea un entrenador asombroso, sino porque es alguien muy real. O sea, a veces ves a la gente que parece estar demasiado limpia. Ash hace bromas durante las entrevistas y se siente como si fuese lo que realmente es...

- Es alguien auténtico, le concedo eso. – admitió Chloe. – Está haciendo trabajo con mi padre. Él es un científico, y mi amigo Goh es su asistente de campo. Pero Goh estudia de los libros, y Ash está allí cuando tiene que ir a lugares donde podría matarse o algo. La ayuda de Ash es asegurarse que Goh pueda manejarse por sí mismo algún día... y supongo que ser amigo de Goh. Creo que eso pasó ayer por primera vez, de alguna manera.

- ... ¿Entonces eres su amiga?

La garganta de Chloe se sintió seca como desierto.

- Él me llamaría amiga. – No estaba mintiendo.

Lita cogió una camiseta, y ahora estaba totalmente vestida.

- Ser amiga de alguien como Ash... no puedo ni imaginármelo. Y yo soy su media hermana...

- Intenta imaginártelo, puedo decirte si es verdad.

- ¡¿Acaso involucra viajar por el mundo?! Llegar a esto fue mi primer viaje por mi cuenta como entrenadora y siendo independiente, ¡y fue increíble! ¡La gente como Ash y Red viaja por el mundo todo el tiempo, ¿verdad?!

- Claro... – asintió.

En realidad, sí era cómo se lo imaginaba. Ash yéndose de aventura y ofreciéndose a llevarte de compañía.

- ... es la primera vez que salgo de Ciudad Vermillion City en una eternidad. – admitió Chloe, esperando el cuestionario de cómo podría ser eso posible. Sorprendentemente, nunca vino.

- Entonces, supongo que ambas somos primerizas en esto. – dijo Lita de una forma que hizo sonar que la chica más alta lo veía como si se acabara de formar una gran conexión entre ambas.

Y aun así, una pregunta seguía viniéndole a Chloe. Una que, si no hacía y obtenía la respuesta que estaba esperando, la dejaría con la sensación de que estaría en peligro por el resto de... lo que durase este evento.

- Entonces, Lita... ¿para qué lado juegas?

La chica más alta alzó una ceja. – ¿A qué te refieres?

- ¿Te atraen los chicos o las chicas? – se forzó Chloe a decir a través de dientes apretados. – ¿Debería preocuparme porque intentes hacerme algo?

- ¿Debería yo preocuparme por ti? – replicó Lita con seriedad, haciéndola sonrojarse y empezar a tartamudear. ¿Ella, hacerle algo a una chica más grande que ella? ¡¿Cómo?!

Ante su tartamudeo, Lita se rio y agitó la mano restándole importante.

- Oh, no te preocupes por nada, Chloe. Parece que te gustan las chicas, y a mí también. Estaremos bien. Si una de las dos se queda mirando, la otra puede devolver las miradas. Así de simple. Ahora, la pregunta es si a ti también te gustan los chicos...

- No hay mucho que ver aquí... – murmuró quedamente, aunque Lita aparentemente sí le oyó.

- No te infravalores. ¡Te ves perfectamente maravillosa! Seguro, me gustan mucho las pelirrojas, pero aunque tuvieras el cabello de otro color sigues siendo muy bonita.

Así que ella era del tipo de Lita...

- Tengo quince. – Seguramente ella sería mayor que eso, y tal vez...

- ¡Igual que yo! – Lita lo dijo como si eso lo hiciera mucho más fácil. Lo cual, para Lita, tal vez fuese cierta. Para ella... bueno, al menos podía imaginarse a Sara igual de estupefacta que ella al oír esa edad salir de la boca de Lita.

- OK, entonces me voy a cambiar y... ¿nos veremos luego?

- ¡Claro! – Lita le dio un doble pulgar arriba. – ¡Eso suena bien para mí!

Chloe le devolvió el gesto, y prontamente se cambió antes de salir corriendo de allí más rápido que un Pikachu persiguiendo una botella de kétchup. Probablemente... podría haber pensado en la posibilidad de cambiarse enfrente de la otra chica, pero ahora que estaban "a mano" en ese aspecto, solo se le ocurrió más tarde.

...

Una vez a salvo de la potencialmente-interesada-románticamente-en-ella Lita, Chloe se sentó junto a Ash en una banca.

- ¿Por qué todas tus primas son tan increíblemente sexys y bien proporcionadas, Ash? – le preguntó luego de llegar con él. Su tamaño de muestra probablemente no quedaba a escrutinio científico, pero ya había visto a unas cuantas y todas lucían...

- Hermanas... y sí, eso es común. La mayoría somos muy altos, y muchos de los chicos somos de constitución muy grande...

Parecía estar sacando un punto a añadir a lo que decía, incluso aunque ella se preguntaba por qué se fue de lengua diciendo primas por default. Tal vez era que todavía tenía dificultades descubriendo cómo alguien podría tener cientos de hermanos.

- Pero es un rasgo de la familia. La mayoría de los otros se ven más como tú o Goh.

¿En serio? ¿Habría gente aquí que no era capaz de hacer pesas con la casa de fieras de Goh, o que llevaba ropa interior que ella podría llevar de sombrero?

- ...Oh ¡Vedia! ¡Hey Vedia, ¿puedes venir un minuto?! – Ash notó a alguien y atrajo su atención, una chica bajita. La chica parecía que podría estar en su mismo año, con gafas, cabello castaño corto, y no parecía del tipo que le daría complejos con el cuerpo a Sara. Parecía una persona normal. La chica nueva, Vedia, reconoció a Ash con un asentimiento y se le acercó.

- Chloe, como te estaba diciendo, la mayoría de los Bloodliners no se ven como yo. Conoce a Vedia, por ejemplo.

- Saludos. – dijo la chica estoicamente, mientras Chloe la observaba. Ella era más alta que Vedia.

- Entonces, ¿eres una Bloodliner? – le preguntó dudosamente,

- Lo soy.

- ... ¿Tienes diez años?

- Diecinueve. – dijo la chica en tono defensivo, aunque solo lo suficiente para darse cuenta que era muy sensible con eso. Chloe no pudo evitar hacer un ruidito reflexivo de incredulidad.

- Perdón, perdón, es solo que... aquí todos son altos y muy sexys, y tú... te ves como yo...

La chica no dijo nada.

- Quiero decir, como si pudiera verte en mi escuela, con otras personas normales. – No era su intención decirlo como un insulto, y esperaba que Ash supiera lo obvio de cómo podría serlo.

- Entonces, como no tengo los mismos genes que Ash o Belladonna, ¿estás asumiendo que no soy una Bloodliner? – concluyó Vedia.

- No sé quién es Belladonna ("Su novia, y una de mis hermanas mayores," le explicó rápidamente Ash), pero... tal vez...

Se detuvo de hablar cuando sus labios fueron cerrados de un pellizco. Sus ojos se ensancharon al ver que una sombra se había alzado desde la suya para cerrárselos. Vedia apenas estaba sonriendo.

- ¿Es esto evidencia suficiente de lo contrario?

Chloe asintió rápidamente para que liberasen sus labios, y la sonrisa de Vedia se fue tan rápido como vino.

- Seguro que debes hacer un gran espectáculo de sombras de manos.

Vedia hizo una pausa. – No tengo idea de qué es eso.

Ella... no estaba hablando en serio, ¿verdad? Oh... sí que lo estaba.

- Oh, es muy simple, en serio: pones las manos cerca de una fuente de luz y mueves tus dedos para hacer figuras. – explicó Chloe, tratando de hacer un conejo con sus manos. – En mi clase lo hacían todo el tiempo cuando era más pequeña.

- ... Lo tendré en mente. Suena interesante. – Y con eso, la chica mayor se dio la vuelta y se marchó.

- Bueno, parece amigable. – remarcó Chloe secamente.

- Originalmente era una mala persona. Pero ahora todas son buenas. – dijo Ash, como si fuese una declaración de tipo "hoy hará sol" o "me gustan las tostadas". Le preguntaría qué la hizo "mala", pero su sano juicio le dijo que era mejor no preguntar.

- Mientras no trate de matarme, está bien en mi libro. – Dejó entonces la pregunta donde se quedó.

Y con el transcurrir del día, Chloe conoció a más miembros en la familia extendida de Ash. La mayoría de ellos no capturaron su interés realmente, aunque estaba bastante segura de que algunos de ellos parecían haberle echado el ojo por alguna razón, hasta que conoció a cierto peculiar miembro de la familia.

Y la razón por la cual era tan interesante estaba justo en su nombre: Red Tajiri.

Red. Su nombre literalmente significaba "Rojo". Un dichoso color del arcoíris. Necesitaba investigar más sobre esto.

- Entonces, tu nombre es Red. – dijo Chloe, acercándose al chico con una ceja alzada. – ¿Por qué tu mamá te puso el nombre por un color?

Él no le respondió, pero entonces se volvió justo cuando Ash acababa de entrar al cuarto. Estaba a punto de llamarla a ella, pero se detuvo cuando vio a Red. Los dos se miraron fijamente, y la mente de Chloe comenzó a reproducir varias pistas de música de jefes de videojuegos.

Las manos de los dos estaban temblando, como si estuviesen a punto de agarrar Pokébolas, o a desenfundar para un duelo de pistolas del viejo oeste.

- ¡Oh Red, aquí estás! ¡Ash! ¡Qué genial verte!

Una chica que no tenía cabello negro, sino rubio y que llevaba un sombrero de paja, apareció entre los dos antes de que se pudiera convertir en una pelea entre dos entrenadores de nivel Campeón en un espacio pequeño y confinado, donde ella estaba en todo el centro. Lo cual era otra forma de decir "peligrosa".

Y de repente, la música de jefe desapareció, igual que sus expectativas de una bola de maleza rodando entre ambos. Los dos chicos mayores casi sonrieron, pero era menos una sonrisa de tipo "feliz" y más del tipo de primos aterradores.

- Ash. – dijo Red cautelosamente.

- Red. – Ash sonaba mucho más serio de lo que ella jamás lo había oído antes.

Los dos parecieron mirarse fijamente por un momento, antes de darse la vuelta y alejarse del otro.

- ¿Y qué fue todo eso? – le preguntó a la rubia, cuya edad solo pudo especular, ya que los dos chicos rápidamente se estaban alejando del otro.

- Oh, esos dos son rivales realmente intensos. Han sido así desde hace años... ¿me creerías si te digo que han mejorado mucho desde que se conocieron?

¡¿Mejorado?!

- ...Entonces, ¿sobre lo de los colores? – Tal vez esta chica hablaría con ella.

- Oh, muchos de nosotros tienen nombres relacionados a colores. Ese era Red, y yo soy Yellow, y está también Midori, Vermell, Grayson... técnicamente el apellido de Belladonna significa un tipo de púrpura, ahora que lo pienso...

¿Eso era un tema?

- Entonces, ¿ustedes se multiplicaron tanto que sus padres se dieron por vencidos en el departamento de nombres? – le preguntó luego de que varias docenas más de nombres basados en colores se añadieron a la lista.

Afortunadamente, parecía que la única persona por aquí que tomaba sus palabras directas de mala manera era Vedia, así que Yellow se sintió feliz de elaborar.

- En realidad solo es una coincidencia. Ash y Red fueron concebidos con un día de diferencia, y sus mamás ni siquiera llegaron a conocerse... er, porque la mamá de Red murió antes que él se fuera para ser entrenador. La coincidencia de nombres con todos los demás que llevan nombres relacionados a árboles fresnos, cosas musicales y dragones... solo sucedió, aunque hay muchos que no los tienen, y otros que llevan nombres de múltiples cosas. El apellido de Grayson es Bebop, por ejemplo.

Chloe pareció quedarse en blanco por un momento. – A mí me pusieron mi nombre por los cerezos en flor.

- ¡Whoa, genial! – La chica rubia parpadeó. – ¿Qué es un cerezo en flor?

¿Por qué Chloe se sorprendió de que algunos de los miembros de la familia de Ash compartieran su estupidez? Estaba dispuesta a apostar que tendría mayor nivel de educación que la vasta mayoría de ellos, después de todo.

- Muy bien, déjame explicar...

...

- ... ¿Y dijiste que ese lugar donde será la verdadera fiesta tiene un lago? – le preguntó Chloe a Ash mientras caminaban por el sendero de una colina algo difícil. Al menos para ella... para Ash parecía como si solo fuera por algo al refrigerador. Una ventaja de caminar por continentes enteros como un hobby, se imaginó.

- Sip. ¡Muy bueno para ir a nadar! – le aseguró Ash. – Hemos estado trabajando mucho en ello. Incluso cuando no tenemos fiestas, nos gusta pasarlo bien por allá.

Ella no escuchó realmente la última parte, pues sintió una oleada de terror invadirla. Oh cielos... ¡personas sexys en trajes de baño!

Y cuando llegaron al lago, días antes de que la fiesta comenzara de verdad, se volvió todavía peor.

¡Personas realmente sexys en trajes de baño! ¡La peor clase de personas sexys en trajes de baño!

Había chicos en shorts y el ocasionales mini-calzoncillo, chicas en bikinis y bañadores de una pieza de todas las tallas y colores. Todos altos, sexys, riéndose y...

Sintió que sus ojos se querían salir de sus cuencas solos únicamente por mirarlos a todos. ¡¿Cuántos ya habían llegado aquí?!

- Pikapi.

Ash asintió. ¿Qué? ¡No debía solo asentir, tenía que traducirle!

- Wow, ya tenemos a muchos. ¡Supongo que a todos les gusta pasarla bien!

Comenzó a señalar a algunos de ellos.

- ¡Ese de allá es Vermell! Fue el primero de nosotros en ganar un campeonato de la liga, años antes de que yo lo hiciera, y es como Red excepto que menos patán y no puede respirar fuego. No habla mucho, pero sí es capaz de sonreír. – Señaló a un chico de cabello oscuro sentado sobre un flotador en el lago, leyendo un libro.

También, ¡¿dijo respirar fuego?!

- ¡Y allá está Belladonna! – señaló a una chica realmente alta y realmente... realmente... voluptuosa, sexy con el cabello negro teñido de verde en los extremos. Vedia se encontraba con ella, jugando al voleibol con otras dos chicas en una de múltiples redes. – Es muy agradable cuando no te ve como un enemigo. Si no es así, es terrorífica.

Esa era... una forma algo inquietante de decirlo.

- ¡Oh, esa es Iolani! Es una Capitana de Pruebas en Alola. – Señaló a una tercera chica con un bikini blanco que les saludó con la mano, habiéndolo notado a diferencia de los otros dos. – Es la mentora de un amigo mío llamado Kiawe, y planea retirarse de la posición en el transcurso de este año.

»Y allá está Travis, su mamá fue la anfitriona de la última reunión. También es un poco...

- ¿Puedes nombrarlos a todos? – Chloe tuvo que preguntarle a Ash antes de que pudiese elaborar sobre la mamá de Travis. Era una pregunta legítima.

- Si estudio primero el árbol, y sin él puedo recordar a muchos... solo que no a todos. – admitió Ash cuando un pensamiento acababa de llegar a la cabeza de ella, el cual solo acababa de notar a medias debido a... distracciones...

Distracciones de quince años de edad.

- No empaqué un traje de baño. – le dijo, pero tal vez algo más fuerte de lo que quería, pues varias personas en la orilla del lago la escucharon y vinieron a averiguar. Muy similares a como lo haría Ash si se mencionaba cualquier cosa a su alrededor.

- ¡Está bien! – dijo alegremente una de las chicas. – ¡Traje algunos de sobra! – Esta hermana de Ash parecía pasar por alto el hecho de que al menos era unos quince centímetros, si no quizás treinta, más alta que ella, y que tenía... prácticamente todo mucho más grande.

- Pendula... – Una hermana de Ash que se veía sorprendentemente menos voluptuosa, luciendo más como una versión femenina y más delgada de Ash, se atrevió a corregirla mientras parpadeaba.

- Oh... – Pareció solo entonces darse cuenta del problema. – Ups... lo siento, Manna.

- Te ofrecería uno, pero... – se disculpó Manna, la chica que no parecía sentirse avergonzada alrededor de sus hermanas más voluptuosas. Aún era más alta que Chloe por un buen margen, y solo porque no era ultra súper sexy... no significaba que no fuese más grande de talla que ella.

- Tal vez algunas de las chicas más jóvenes de podrían prestar alguna. ¿Cuántas de trece años ya están aquí ahora? – preguntó otra chica mayor de cabello color miel, sin marcas de Z en el rostro y vestida con un sling bikini. Por alguna razón no lo dijo en tono burlón, sino más bien como si hubiera pensado primero la pregunta para adivinar el rango correcto de edad para poder buscar.

- Unas siete, creo... los menores tardarán un poco en venir.

- ¡TENGO QUINCE!

Sintió como si una flecha le hubiese atravesado el orgullo. La hermana rubia parecía algo arrepentida.

- Lo siento, pero es que a todos la pubertad nos tocó fuerte, y además...

- También hay algunas de doce... – intercedió alguien más. – Tal vez alguna de ellas tenga algo de sobra que le quede...

Y más flechas directo al orgullo. ¡¿Qué había hecho para merecer esto?! Aparte de posiblemente ser demasiado grosera con Ash de lo que él lo habría sido con ella, tal vez, podría haber sido... ¡pero seguramente esa no era la razón!

...

Buenas noticias: Chloe no tuvo que ponerse un bikini de dos piezas, o un hilo dental, o nada que fuese tan provocativo, sino un traje modesto de una pieza que acentuaba su figura, seguro, pero a pesar de todo se sentía cómodo. ¡Y era blanco, su color favorito!

Malas noticias: todavía seguía rodeada por personas súper sexys cuyos trajes de baños solo enfatizaban lo poco sexy que era ella en comparación. Su única ventaja era el tabú de incesto si acaso llegaba a eso.

- ¡Hey, te queda muy bien mi traje de baño! ¿Quieres quedártelo? – le dijo una chica de cabello verde con ojos rojos, Celesta de Johto, trece años y un cuarto de edad y a quien le había tomado prestado el susodicho traje de baño blanco, luego de salir tras ponérselo.

- Digo, supongo que... ¿estás segura que no lo quieres de vuelta? – preguntó con cautela mientras Celesta suspiraba, tocándose el costado del bikini negro que llevaba puesto.

- Ya quisiera, pero estaba empezando a quedarme pequeño. Realmente ese me gustaba mucho... –Miró hacia la orilla del lago, donde Betty estaba tendida sobre una silla de playa mientras Jamie, el cocinero segundo al mano, le colocaba loción bronceadora en la espalda. – ... pero la pubertad no estaba de acuerdo.

A ella la ropa le quedaba pequeña bastante rápido, pero ¿qué tan malo era para todos estos hermanos de Ash?

- Quiero decir... no puede ser tan malo si puedes ver los resultados. – le aseguró la chica, cuya cara era lo único que realmente mostraba que era más joven, pues tenía una redondez más juvenil que la de cualquiera de su edad podría tener.

- Digo, supongo... – admitió Celesta, mirándose como si ella misma dudase que algún día se vería como sus hermanas. Chloe podía sentirse identificada... su mamá era una mujer muy hermosa, y siempre se preguntó si crecería para verse como ella.

- ¿Tu primera vez... aquí? – añadió rápidamente la última parte.

- De hecho, es mi segunda. – corrigió Celesta.

- Entonces, Chloe, ¿ya lograste aclimatarte? – intervino Delia, y ella quiso responderle, pero... pero...

¡La mamá de Ash era sexy! Llevaba un traje de baño de una pieza que no solo acentuaba su figura, sino que era el mismo que vio en aquel artículo que Sara le había quitado. La mujer mayor todavía se veía bien en él, y la hacía lucir tan... tan... tan...

¡Gah!

Delia se rio, y Chloe estaba insegura de si eso era algo bueno o malo.

- Tomaré eso como un sí. Juega duro, Chloe, ya que empezarás a trabajar muy duro esta noche. Te iré a buscar cuando sea hora de empezar a preparar la cena.

Chloe tragó saliva y asintió con una sonrisa. Muy bien, así que los miembros de la familia de Ash ya estaban aquí, ¿pero acaso había invitado amigos?

Pensándolo bien, mejor retirar eso, no necesitaba saberlo...

- ¡Hi, Ash!

¡Arceus, maldición!

Chloe se forzó a darse la vuelta, y al hacerlo, vio a un par de chicas aproximándose al grupo: una moderadamente alta con cabello hasta los hombros castaño siena y un bikini rosa, y otra chica de pelo morado más bajita que Chloe, con un traje de una pieza púrpura.

- ¡Serena! ¡Acerola! – saludó Ash. – ¡Vinieron!

- ¡Hey, Ash! – saludó la chica más bajita. – Lo siento, Serena y yo nos tardamos un poco. La mamá de Serena se trajo algunos... objetos inesperados y eso nos retrasó un poco.

- ¿Qué clase de objetos inesperados? – preguntó Chloe directamente.

Pero en vez de obtener una respuesta que pudiese decirle algo más tarde, lo que Chloe vio a continuación fue a las dos chicas besando a Ash en las mejillas, antes de despedirse de él y zambullirse en el agua.

- Ah, esas dos. – sonrió Ash. – Tan cariñosas como siempre. Oh, podría habértelas presentado apropiadamente, pero fue demasiado rápido y realmente nunca parecías interesada en hablar con ellas cuando venían al laboratorio. Tal vez luego...

- ¿Como siempre? – repitió Chloe. – ¿Qué, hacen esto a menudo? ¿Qué son esas dos, tus novias?

- Sip.

¡¿Por qué era la única que parecía estupefacta?! ¡Nadie pareció escuchar eso y ponerse en plan "eso no es normal"! ¡¿Por qué ella era la única que lo veía como si hubiera pasado algo muy raro?!

- ¡Espera, ¿en serio estás saliendo con múltiples chicas?! – Ella tal vez podría haber estado interesada, pero estaba segura de que Ash era... bueno, ¡que era Ash! Había hecho comentarios sarcásticos, se había burlado, había dicho cosas que no eran mentiras, pero... ¡¿Ash!? Estaba segura de que, o bien ella había malinterpretado lo que sucedió, o que Ash no lo había notado.

¡¿Acababan de besarlo dos chicas en las mejillas como si fuese lo más normal para todo mundo?!

- Oh sí... tal vez eso te sorprenda un poco. – dijo Delia, que no se había puesto en modo "¡Mi hijo no es un playboy degenerado como su padre!" durante los besos, y de hecho estaba sonriendo, como si fuese un detalle menor de "cuando se apagan las luces", o algo por el estilo.

- ¿Sorprenderme de qué?

- Oh, que muchos de nosotros tenemos relaciones así. Como estas tres, son mis personas favoritas en todo el mundo. – Belladonna, que acababa de acercarse antes para saludar a Ash en persona, abrazaba a las tres chicas con las que había estado jugando voleibol con mucha fuerza. Chloe estaba segura de que Vedia estaba sonriéndole mientras recibía el abrazo, de una manera que dejaba claro que no se le había olvidado cómo la habían comparado antes con una niña.

No le tengas envidia a la chica bajita...

- ...qué.... – Chloe apenas pudo soltar un chillido.

Ash asintió. – Sip.

- ... ¡¿Cómo rayos sucedió eso con múltiples de ustedes?!

- Bueno, yo no estoy muy seguro... no podría decirte por qué...

Ella lo interrumpió.

- No, no te estoy preguntando cómo te las arreglas para no darte cuenta de todo lo que acaba de suceder antes de volverse completamente obvio. Podría totalmente verte encantar a un montón de personas haciendo que se enamoraran de ti y que no te dieras cuenta. Podría verte totalmente con la guardia baja cuando se te confiesan. Eres tan... orientado a tus metas... que se te escapan cosas. Pero ¿por qué tantos... por qué los demás...?

- Tendrías que preguntárselos a cada uno para que te cuenten sus historias. No hay una sola respuesta para todos. – Ash parpadeó. – ¿Por casualidad eso le sonó cursi a alguien aparte de mí?

- Lo hizo. – Manna estaba de acuerdo.

- Sip. – Travis se encogió de hombros.

- Sigue siendo cierto, pero es tan cursi que me dan ganas de ir por palomitas ahora mismo. – terció Belladonna.

Y mientras la charla continuaba en el mismo tópico, Chloe se inclinó hacia atrás y gruñó. Esta serían unas vacaciones laborables muy, muy largas...

...

- ¿Dijiste que tu padre era un científico? ¿Qué clase de científico? – preguntó Lita. Luego de todo lo que pasó durante el día, era hora de retirarse e irse a dormir un poco para la mañana, y las dos se iban a retirar por la noche en sus camas individuales.

- Un Profesor Pokémon. – explicó simplemente, honestamente porque no le prestaba atención a más de lo necesario como para dar nada más específico.

- ...Mi mamá también es Profesora. – admitió Lita, y Chloe sintió que su curiosidad se alzaba más de saber eso que de ver el aspecto de las pijamas de Lita.

- ... ¿Cuántos doctorados?

- Tres con ocho menores.

- Cinco con seis aquí.

Si estuviera más familiarizada con cómo la gente peleaba con sus posturas respecto a la educación, probablemente podría llevar esto a territorio de "mi papá es más inteligente que tu mamá", pero no tenía idea de cómo hacer debates mezquinos en esa área específica.

- Mi mamá estudia portales a otros mundos. Ultra Umbrales, el Mundo de Sueños, ese tipo de cosas. – explicó Lita.

- No sé lo que sea ninguno de esos... aunque supongo que no pongo mucha atención. Para mí solo es trabajo.

Ella realmente no quería admitirlo, pero no tenía idea de lo que hacía su papá. Dejaba de escucharlo a menudo, y solo era... trabajo. El trabajo de su mamá era dibujar y eso ella lo entendía por completo, pero su padre solo trabajaba y ya.

- Bueno, es difícil no entenderlo cuando tu mamá te hace que la ayudes. – Lita no hablaba con amargura, aunque Chloe lo habría hecho. Tenía experiencia, después de todo, aunque fuese mayormente de cuando la suspendieron por defenderse (así que tal vez, solo tal vez, había un minúsculo ápice de proyección).

- ¿Con la limpieza?

Lita se tocó un lado de la cabeza.

- Con encontrar rastros de portales. Ya sabes por boca de Ash que lo que nos hace a él, a mí y al resto de nuestros hermanos diferentes del resto es que tenemos dos bloodlines, ¿verdad? Es por eso que el donante de esperma buscaba a una mujer específica para seducir.

- Sí... – mintió. Ella no lo sabía. Er, tal vez fuera culpa suya por nunca preguntarle nada sobre nada a Ash, excepto por qué elegía comerse sus papas fritas cuando podría comerse más de la comida de Renji.

(Renji aparentemente había escondido su ración.)

Pero en su defensa, no le gustaba andar buscando a la gente para que le contara sus cosas, y Ash usualmente venía para preguntarle si quería acompañar a Goh en bosques y cuevas, y si quería que le fueran a buscar algo de la tienda porque se comió todas las botanas y tendría que reemplazarlas, antes de irse para ayudar a Goh a atravesar los bosques y cuevas.

- Una de las cosas que puedo hacer es detectar residuos de portales, a falta de un mejor término. El que proviene del Mundo de Sueños es rosa como un Munna, el amarillo es de Ultra Umbral, el verde es... bueno, algo. Realmente no lo sabemos todavía, solo que hace que la gente desaparezca por un largo tiempo. Mamá quería averiguar cómo encontrar esas cosas con tecnología para que todos puedan hacerlo.

- Entonces ¿tú fuiste su prototipo? – se aventuró sombríamente, mientras Lita cruzaba los brazos en forma de X para mostrar una negativa.

- ¡No, no, nada de eso! Mamá jamás me trató mal ni nada, solo me llevó a lugares en todas partes para observar las cosas mientras ella usaba los artefactos eléctricos.

Lita sonrió.

- De hecho, terminó de construir un escáner portátil con la ayuda de una mujer rubia de la región Alola. Lusamine, creo que era su nombre... jamás la había visto tan feliz. Había logrado dar un gran paso como había deseado por años, y no necesitaba tenerme alrededor, sino que podría dejarme hacer las cosas que quería, y su situación monetaria mejoró.

- ...Nosotros nunca tuvimos que preocuparnos de eso. – dijo Chloe cautelosamente, y sintiéndose algo intranquila. Por toda la falta de interés que tenía en el trabajo de su padre, sabía que mantenía las cosas andando. Nunca oyó a sus padres discutir por el dinero, y siempre recibía bastante de ellos.

La casa no era tan a prueba de ruidos como pensaban que era...

- No tienes que disculparte por eso. No es nada de qué avergonzarse. Eso solo significa que a mí me llevó más tiempo vivir mi vida para hacer lo que quería. – Lita sonrió, como si se imaginaba lograr todo lo que quería y soñaba. – ¿Qué quieres hacer tú?

- ... No lo sé. – admitió Chloe.

Esta historia continuará...