Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Liga Índigo Parte 1: Demoledores

Meseta Índigo...

La llama de Moltres fue encendida sin ningún contratiempo, lo cual siempre era un alivio para el presidente del comité de competencias de la Liga Pokémon. Si había algo que pudiera arruinar una ceremonia de apertura en la opinión de Charles Goodshow, era que hubiese alguien tratando de robar las llamas sagradas.

Se encontraba de pie enfrente de todos los entrenadores reunidos, y no pudo más que sonreírles a todos. Había caras antiguas y familiares, novatos recién llegados y frescos, aquellos que buscaban probar algo, y aquellos que sabían lo que debían hacer. Era una magia que solo podía verse en la Liga Pokémon.

- Bienvenidos, valientes entrenadores, a la Conferencia Índigo de este año. Estar aquí significa que todos ustedes se han probado a sí mismos contra los líderes de gimnasio de Kanto, y que han superado sus dificultades y retos personales para llegar hasta aquí. Aunque les aseguro que todavía quedarán más desafíos por delante. Esta es una verdad que no solo aplica para la vida, sino para este torneo.

»Ahora, estoy seguro de que habrán notado que hay muchos de ustedes. De hecho, este año tenemos muchos más participantes de lo usual.

Dependiendo a quién le preguntasen, habría diferentes explicaciones para esto. Electra creía que solo era parte de cómo iban las cosas, ya que el número de participantes nunca era una constante. Él por otro lado, creía que había competidores veteranos que se inspiraron para venir con toda su fuerza, debido al ascenso de nuevos e impresionantes novatos, mientras que dichos super novatos inspiraban a sus colegas a esforzarse mucho más.

Había otras teorías aparte de esas, pero eso no era ni aquí ni allá.

- Siendo así, las reglas del torneo irán de la siguiente manera: tendremos diez rondas en total. Hoy tenemos reunidos a mil y veinticuatro de ustedes, y después de la primera ronda quedarán solo quinientos doce. Después de eso tendremos doscientos cincuenta y seis, ciento veintiocho, sesenta y cuatro, treinta y dos, dieciséis, ocho, cuatro, dos, y después de eso solo quedará uno. Y ese uno, como probablemente habrán adivinado, será nuestro ganador.

»Las primeras cuatro rondas tendrán lugar en estadios secundarios, con campos de batalla temáticos elegidos al azar cada vez. Lo único garantizado es que ninguno de ustedes peleará en el mismo campo dos veces, y que cada batalla será de tres contra tres. Una vez que lleguemos a los mejores treinta y dos, las batallas tendrán lugar en el estadio principal. Las primeras dos rondas en el estadio principal serán también de tres contra tres, pero los octavos de final, cuartos, semifinales y la final serán batallas totales.

Había otros detalles que podría haber mencionado aquí, como hablar sobre la información o el hecho de que habría comida gratis para todos los entrenadores activos, y para los eliminados por un período de gracia de veinticuatro horas, pero esos eran detalles secundarios y los podrían encontrar en los panfletos que repartían por la ciudad.

- Peleen con todo el espíritu y habilidad que hayan adquirido en sus carreras, y cuando hayamos vuelto aquí para coronar al ganador, todos sabrán lo que han logrado dominar y lo que necesitan mejorar. Ganen o pierdan, todos aprenderán algo de este torneo. Ahora, les desearía suerte a todos, pero esto es algo que ustedes y sus Pokémon deberán hacer por su cuenta. Dennos buenas batallas y recuerden, sean siempre los mejores.

De inmediato estallaron los vítores al terminar su discurso, y no pudo evitar sonreír. Como le encantaba su trabajo.

(--0--)

Más tarde...

- No tengo idea de qué haya sido ese chocolate o como lo pronuncies, ¡pero quiero más!

Por suerte para ellos, tendrían comida gratis mientras Ash siguiera en la competencia, y Misty estaba tomando ventaja de ello pidiendo una segunda ración de un postre kalosiano que acababa de descubrir. El camarero asintió amablemente antes de salir corriendo por más, y Ash no pudo evitar preguntarse cómo hacían para pagarles por el torneo. ¿Acaso la liga les reembolsaba?

Dichos pensamientos no le venían a la cabeza, ya que estaba muy ocupado demoliendo el enorme sándwich en frente de él. Le faltaba algo de lo que tenía la cocina de su mamá, pero seguía siendo un buen sándwich.

- Y bien, ¿qué pasará si ganas? – le preguntó Iris, haciéndolo bajar por un momento su sándwich.

- Bueno, probablemente me pondré a saltar en el aire y gritar de alegría, supongo. Tal vez hasta arroje a Pikachu en el aire tan alto como pueda antes de darme cuenta que sea estúpido, pero no creo que se enfade mucho por eso.

- Pikapi. [Tal vez no lo esté en ese momento, pero sí te electrocutaría en cuanto termines de celebrar en público.]

- ¿Y después de eso? – Ante la pregunta de Iris, Ash empezó a pensar que tendría una idea de lo que realmente estaba preguntándole.

- Todavía hay mucho del mundo que quiero ver. Ustedes han estado conmigo a través de secuestros, locuras familiares, y elecciones completamente lógicas sobre surf...

Por un momento estuvo seguro de que Misty acababa de darle una mirada sobre "elecciones completamente lógicas sobre surf", aun con la boca llena. Anabel simplemente rodó los ojos, e Iris le dio una mirada fulminante de desaprobación.

- ...así que sería muy cruel de mi parte abandonarlas después de esto. Me quedaré con ustedes por el tiempo que ustedes decidan.

- Entonces será para siempre. – dijo Iris.

- Si así lo quieren.

Fue después que las palabras se le salieron de su boca que se dio cuenta exactamente de lo que Iris estaba hablando, y sintió que su cara empezaba a calentarse. Si su cara estaba tan roja como las de Misty y Anabel, podría hacer una buena imitación de un Darumaka. La cara de Iris, por su parte, solo se veía ligeramente teñida.

- Oh cielos, sabía que había una razón por la que debía haber traído una jarra de hielo conmigo.

El camarero dejó la segunda ración para Misty segundos antes de rellenarles todos sus vasos con agua helada, dejando la jarra en la mesa. Ash de inmediato cogió un sorbo de dicha refrescante agua helada, y también lo hicieron Misty y Anabel.

- Muy bien. Ahora, viendo que estarás ocupado no te pondré a hacer tanto como de costumbre. Sin embargo, seguiremos haciendo más carreras matutinas.

Iris no necesitaba refrescarse, aunque seguía ligeramente sonrojada.

(--0--)

Al día siguiente...

De los mil y veinticuatro que había hasta llegar a la cima. Tenía diez rondas por ganar, y Red estaba listo para ir toda la distancia.

Eso por supuesto implicaba vencer a cada entrenador en su camino, y eso incluía al primer oponente al cual se estaba enfrentando en el Campo de Hielo. Dicho oponente se veía más o menos un año o poco más mayor que él; una figura delgada que lo veía como si ya tuviese el encuentro ganado.

- Vaya, qué suerte que tengo. Me toca contra un novato, y el Campo de Hielo nada menos. Las posibilidades no podrían estar más a mi favor.

Red miró a su oponente, que se veía muy confiado y se burlaba de él.

- ¿Oh, qué pasa, dudas de mí? ¡Créeme, chico, a diferencia de ti, este no es mi primer rodeo!

Con esa provocación, la batalla se declaró abierta, y ambos enviaron a su primer Pokémon. Su oponente sacó a un Jumpluff, que flotó sobre el campo. Entretanto, la suya aterrizó en el campo con un traqueteo de grietas bastante audible.

Al verlo, su oponente estalló en carcajadas.

- Solo estaba exagerando un poco, pero acabas de probar lo que dije. ¡Eso de ahí es un Snorlax que acabas de mandar!

Sí, y el Snorlax no estaba dormido. No estaba completamente de pie, pero para un Snorlax sentarse derecho era una buena forma de mostrarse bien alerta.

- ¡La artillería pesada es para guardarse como arma secreta, no para desperdiciarla en tu primera batalla! ¡Ni siquiera es apto para el terreno donde peleas! ¿Cómo diablos entraste a la Liga sin saber eso?

- Amnesia. – dijo Red, y Snorlax bostezó mientras su oponente se seguía riendo.

- ¡Olvidarlo no te dará reinicio, novato! ¡Jumpluff, usa Lazo de Hierba!

Jumpluff flasheó de verde mientras flotaba sobre Snorlax, y desde algunas zonas del hielo que Snorlax había agrietado emergieron varias enredaderas que comenzaron a enrollarse alrededor de los pies de Snorlax. No estaban apretándole particularmente fuerte, y tampoco hacían mucho daño.

El oponente y su Jumpluff miraron ambos a Snorlax abriendo sus bocas en shock mutuo, mientras Red negaba con la cabeza. Cuando dijo Amnesia, quiso decir un movimiento que aumentaba la resistencia de un Pokémon a los movimientos especiales. No lo dijo gritando a todo pulmón como si estuviera dando una orden, fue solo que su oponente creyó que solo estaba diciendo la palabra "amnesia", en vez de ordenarle usar el movimiento Amnesia que un Pokémon podía realizar.

Tampoco era ignorante sobre utilizar a un Snorlax tan temprano en la competencia, sin embargo, había muchos problemas sobre cómo podría resultar esta batalla. El primero, Snorlax no era ni de lejos su Pokémon más fuerte. El segundo, fue que no estaba pensando en mostrarlo por presumir. Había pensado en ello, y por eso estaba haciéndolo. Snorlax tal vez no fuese su Pokémon más fuerte, pero bastaría para derrotarlo.

Había planeado de hecho ganar solo con Snorlax, y esconder el resto de sus Pokémon para rondas posteriores. Por eso era que tenía a Yellow con Pikachu en la banca en vez de tenerlo sobre su hombro. Estaba preparado para usar un segundo o tercer Pokémon el día de hoy, pero la fuerza de Pikachu, entre otras cosas, la guardaría para sorpresas posteriores.

El tercero era que el Campo de Hielo era definitivamente un lugar terrible para usar a Snorlax, pero él ya había pensado un poco en ello. Después de hablarlo con Yellow, y de utilizar Vista de Victoria, ambos estuvieron de acuerdo en que tenía un buen punto: Snorlax no era realmente el combatiente más ágil, y cualquier Pokémon que utilizaran contra él no sería un buen oponente.

En ese sentido, el hecho de que un Snorlax sobre hielo no podría moverse bien no sería un problema.

- ¡Avalancha de Rocas!

Esa orden la dijo en un tono más claro que Amnesia, y Snorlax abrió sus brazos ampliamente para formar un gran aro de color azul sobre Jumpluff.

- ¡Protégete!

El grito de su oponente fue seguido por Jumpluff rodeándose en una esfera azul, que recibió el ataque de rocas de frente, escudando a Jumpluff de todo daño.

- ¡Bueno, lo están viendo aquí en el Campo de Hielo, amigos! ¡Lo que parecía una decisión inusual de parte del entrenador novato Red ha demostrado ser más efectivo de lo que podríamos haber imaginado, y la gran masa inamovible y la planta móvil ahora están en punto muerto! ¡No hay forma de adivinar quién ganará esta batalla, o este encuentro!

La respuesta era obvia; ese iba a ser él.

- Bien, yo no pienso perder aquí, ¡así que obviamente voy a ganar! ¡Jumpluff, vuela cerca de esa bola de grasa y dispárale Brillo Mágico constantemente! ¡Cánsalo cerca de él para que no pueda utilizar Avalancha de Roca!

En cuanto Jumpluff se lanzó contra Snorlax a toda la velocidad que pudo moverse, ya disparando chispitas brillantes, Red sonrió. Estaba poniéndose a tiro. Sus posibilidades de victoria ahora se volvían muy seguras, y ni siquiera estaba usando sus poderes para verificarlas.

...

- ¡Y con un sorpresivo y aplastante desempeño, el novato Red Tajiri de Ciudad Viridian obtiene su primera victoria con solo su Snorlax!

...

- ¡Usa Terreno Eléctrico!

Raichu siguió la orden de Alexander lanzando un rayo de electricidad a las aguas del Campo de Agua, que se esparció a todo el escenario cubriéndolo con una energía eléctrica amarilla. Raichu volaba sobre el campo con facilidad, mientras que dentro de la piscina, el Kingdra atrapado se quedaba echando chispas y paralizado por la acción de la física eléctrica sola.

- ¡Con un solo movimiento, la mayor ventaja de un Pokémon tipo Agua en este campo de batalla se le ha volteado totalmente! ¡Esta es toda una experiencia de la Liga Pokémon, fanáticos!

Y era algo que se le había ocurrido en el calor del momento, pues no tenía datos sobre su oponente. Qué buen trabajo había hecho.

- ¡Kingdra, trata de aguantar! ¡Ese terreno no puede durar para siempre!

- Cierto, pero tampoco lo hará esta batalla. ¡Raichu, Trueno!

Y con esa orden, Raichu hizo caer un masivo relámpago desde arriba, electrificando todavía más la piscina con su gran poder eléctrico. La intensa luz brevemente los cegó, pero aun así él sonrió. Esto no era más que un calentamiento. Los verdaderos oponentes le aguardaban más lejos en este torneo.

...

- ¡Y el favorito para ganar la Liga, Alexander Silph, acaba con su oponente usando solo dos Pokémon, sin perder ninguno de los suyos! Y también, ese Golisopod suyo todavía me asusta...

...

Ritchie no pudo más que temblar al ver como su ventaja temprana era aplastada en el Campo de Roca. Había empezado superando a su oponente al inicio utilizando a su Eevee, Chase, que utilizó su agilidad para saltar alrededor de las rocas y superar en maniobras al Golem de su oponente mientras lo golpeaba con Cola de Hierro. Dicho movimiento, junto con Ataque Rápido y Avivar, le había permitido ganar el primer asalto con poco costo para Chase, más allá de quedar un poco exhausto.

El segundo Pokémon que su oponente envió era un Haunter, y pronto tuvo una buena idea de por qué su oponente no dio una de las líneas que normalmente podías escuchar cuando utilizabas a un Eevee en una Liga Pokémon. El Haunter estaba, al igual que su Eevee, sin evolucionar totalmente, e igual que Chase también era bueno para patear traseros.

El trasero de Chase en este caso, quien se encontraba siendo azotado por el campo por palmas fantasmales, cuya fuente no podía ser rastreada. Fue solo gracias al brillo helado de un Puño Hielo que tuvo una señal de que se encontraba allí, antes de que Haunter desapareciera y reapareciera a la vista y sólido, y Chase recibía uno tras otro.

- ¡Chase, usa Bofetón de Lodo a todas partes! ¡Intenta cubrir a Haunter con lodo!

Chase saltó en el aire, solo para resultar golpeado en el estómago por un puño llameante y caer de vuelta en el suelo derrotado, mientras Haunter se materializaba a plena vista.

- ¡Eevee es incapaz de continuar!

Ritchie retornó a Chase, agradeciéndole por lo duro que había peleado, observando al sonriente Haunter mientras consideraba sus opciones. Necesitaba un Pokemon que pudiera golpear a Haunter: ¿tal vez alguien que pudiera golpear en un área amplia como Sparky? Había leído los panfletos, sabía que Sparky era bien conocido. Se encontraba siempre en su hombro, después de todo, a plena vista.

No, aun así, eso no era lo que debería hacer. La fuerza de Sparky podría ser obvia para algunos después de ver la de Chase, pero probablemente sería mejor mantener sus capacidades exactas para sí mismo. En vez de eso cogió un Pokémon diferente. Uno un poco menos experimentado, claro: todavía no estaba seguro de cómo la había obtenido. Pero este sería un buen encuentro para ella, quizás mejor que para Sparky.

Sacó la extraña Pokébola de su cinturón: una Pokébola mayormente de color rosa con un solo punto rojo en la parte superior y un patrón ondulado en la parte inferior, y la lanzó al campo.

- ¡Rose, vamos!

Su oponente pareció algo divertido de ver su elección.

- ¿Un Taillow? No he visto muchos de esos. Unos pocos idiotas que intentan Intercambio Milagroso consiguieron algunos de esos mientras todavía me estaba ganando medallas, pero no estoy seguro de lo que planeas lograr allí. ¡Tuviste ventaja de velocidad con ese Eevee, y ni eso te ayudó! ¡Muéstrale a lo que nos referimos, Haunter!

Haunter desapareció de la vista una vez más. No que eso le fuera a servir esta vez.

- ¡Rose, usa Estruendo por todo el campo de batalla!

Rose se elevó en el aire, agitando sus alas con más fuerza y más rápido mientras su oponente negaba con la cabeza.

- Novato, ya sé lo que intentas hacer. Romper las rocas, golpear a Haunter, y probablemente usar As Aéreo o algo así. Sin embargo, eso no te va a...

No se equivocaba: las rocas del campo de batalla no volaron en pedazos, solo se agrietaron enormemente. Sin embargo, las rocas no eran su objetivo. Su objetivo real era Haunter, que se manifestó visiblemente una vez más mientras se agarraba la cabeza y temblaba con la fuerza sónica.

- ¡Imposible! ¡El tipo de movimiento está todo mal! ¡Todo...!

- ¡Doble Filo!

Rose detuvo su asalto sónico, retrayendo sus alas contra su cuerpo, y descendió contra Haunter desde arriba a una velocidad arrolladora. Chocó contra el fantasma, estampándolo contra la tierra misma, y se fue volando dejando atrás un Haunter derrotado, y a un entrenador confuso y estupefacto.

- ¡Haunter está fuera del encuentro!

...

- Huh, no habíamos visto a Ritchie todavía. Me alegra ver que sigue aquí, ¿y ahora tiene un Taillow? Eso es genial.

- Pikapi. [Una botella de kétchup a que ahora está emparentado contigo.]

Ash no iba a aceptar esa apuesta, incluso mientras veía a Ritchie ganar su propio combate con solo un Eevee y Taillow. El Taillow quedó básicamente molido al final del encuentro, pero una victoria era una victoria, y con ello Ritchie avanzaría a la siguiente ronda.

- Saben, todavía me queda una hora para decidir los Pokémon que voy a utilizar. Me toca en el Campo de Hierba, ¿correcto?

- Correcto, humano. Tu encuentro en la primera ronda será en el Campo de Hierba, y el nombre de tu oponente es Pava Gilbane. No tengo información de ella a la mano, y aunque podría obtenerla ya me has dicho que no quieres romper las reglas.

Ash asintió, y con ello el Pokédex continuó hablando.

- Viendo que estás bastante familiarizado con la idea de guardarte tus cartas de triunfo, repetiré lo que ya sabes para asegurarme de que no lo olvides. Es imperativo que ocultes la fuerza de tu Pikachu por el mayor tiempo posible, junto con tus Movimientos-Z, Charizard, Serperior, Lucario, Goodra, y Gigalith.

- Te aseguro que estás pensando demasiado en la evolución. Goodra y Gigalith son muy fuertes, pero no me atrevo a decir que sean los más fuertes que tengo. Además, estoy seguro de que Lucario no tiene interés en pelear en este torneo.

Mientras hacía su "discurso motivacional" de último minuto para los Pokémon que pensaba en utilizar aquí (los cuales incluían algunos de los murciélagos que capturó en Seafoam, Raichu, y algunos de los otros Vivillons), Lucario había sido el menos entusiasmado. Raichu se veía más animada al respecto, lo cual ya era decir bastante.

- Bueno, eres sorprendentemente bueno influenciando a la gente, ya sean humanos o Pokémon. Quizás puedas hacer que cambie de opinión. Sería una buena idea, como estoy seguro que entenderás. Ahora, sobre tu equipo para la batalla que se aproxima...

Ash le sonrió al Pokédex.

- Ya tengo un plan. Pikachu se quedará con Anabel durante este encuentro, y traeré seis Pokémon para elegir. Ya pensé en dos Pokémon que podrías llamar cartas de triunfo, y cuatro que pensarías que servirán para mostrar en las rondas preliminares. Estaba pensando en...

Les dijo entonces el equipo que tenía planeado, lo que llevó a una reacción de incredulidad tanto del ratón como de la máquina.

- ¡¿PiPiPi?!

- ¡No puedo llamar a eso una carta de triunfo ni estirando la imaginación!

...

Dejando atrás sus desacuerdos con su elección de terminología y posibilidades en batalla, Ash se encontró frente a frente con el Campo de Hierba antes del almuerzo. Se encontraba en la plataforma roja, encarando a su oponente de la primera ronda sobre la plataforma verde.

Pava Gilbane, una chica algo bajita de estatura cuyos brazos se veían a pesar de todo en buena forma. Con el pelo rubio bastante corto y vestida con una chaqueta púrpura y jeans como elección de atuendo, parecía emitir un aura de estar bastante nerviosa.

Hasta él podía verlo desde donde estaba, lo cual era muy extraño. Normalmente, los oponentes en las ligas tenían o suficiente confianza en sí mismos o demasiada, dependiendo de cómo lo vieras. La única persona que recordaba que no estaba así era Morrison, y eso fue solo durante su encuentro.

Pava no tenía razón para estar nerviosa por el mismo motivo, ya que no era ni nativa de Pueblo Paleta ni lo bastante cercana en apariencia a él como para ser añadida a su árbol familiar que seguía creciendo más y más.

- ¡Hey! – le gritó a Pava, que retrocedió y le dirigió una mirada con los ojos nerviosos. – ¡Solo hazlo lo mejor que puedas! ¡Pelea con todas tus fuerzas y lo harás bien!

Los ojos de la chica se ensancharon, y luego asintió rápidamente. Parecía estar un poco menos nerviosa ahora, lo cual era algo bueno. Una batalla contra alguien que estaba totalmente aterrorizado estaría mal de maneras que él jamás podría describir.

- ¡Y con esa muestra de buen espíritu del entrenador rojo, estamos a punto de comenzar este encuentro de la primera ronda de la Conferencia Índigo en el Campo de Hierba! ¡Esta será una batalla de tres a tres entre Ash Ketchum de Pueblo Paleta y Pava Gilbane de Ciudad Vermillion! ¡La batalla terminará cuando tres Pokémon de cualquier lado sean incapaces de seguir luchando! ¡¿Entrenadores listos?!

- ¡Vamos! – gritaron ambos, aunque el grito de Ash fue más fuerte, enviando al campo a su primer Pokémon.

Para Ash, su primer Pokémon era un Tauros, que aterrizó en el campo resoplando ruidosamente al salir de una Bola Safari. Para Pava, su primer Pokémon fue un Beedrill, que flotó sobre el campo al salir de una Bola de Parque.

Su primer oponente en el Campo de Hierba era un Beedrill, eso era nostálgico.

- ¡Comiencen!

- ¡Tenemos que hacer esto si queremos ganar! ¡Beedrill, usa Púas Tóxicas!

Beedrill se elevó más alto en el aire cuando Pava dio su orden, y sus aguijones brillaron de púrpura mientras materializaba unas esferas del mismo color en las puntas.

- ¡Derríbalas con Incinerar!

Tauros mugió afirmativamente, formando unas diminutas bolas de fuego en su cabeza antes de disparar. Estas volaron rápidamente, destruyendo las Púas Tóxicas antes que estas tocaran el suelo, explotando y enviando a Beedrill a volar dando vueltas por las explosiones.

- ¡Beedrill!

- ¡Y con eso el novato de Pueblo Paleta abre con un tiro explosivo! ¡Sin perder ni un instante impide el intento de Beedrill de colocar el campo de batalla a favor de Pava! ¡¿Podrá recuperarse?!

- Yo... ¡claro que puedo! Quiero decir, que podemos hacerlo... ¡Beedrill, Misil Aguja!

Beedrill se estabilizó en el aire, y comenzó a disparar agujas púrpuras desde lo alto directo hacia Tauros.

- ¡Protección, luego Incinerar!

Tauros resopló mientras formaba una esfera protectora de color azul, desviando la lluvia de agujas, para luego desvanecerse y abrirse paso para formar las esferas llameantes que de inmediato disparó contra Beedrill. La abeja descendió para evitarlas, pero no fue lo bastante rápida para escapar totalmente y recibió algunas quemaduras en las alas. El bicho se precipitó hacia el suelo, y Pava dejó escapar un grito ahogado de horror.

- ¡Beedrill, no!

- ¡Cabezazo!

Tauros se lanzó a la carga contra el bicho que iba cayendo, saltando en el aire para embestirlo mientras seguía descendiendo. Esto mandó a Beedrill a estrellarse contra el suelo con un golpe seco, y Tauros aterrizó sin ningún problema.

- ¡Beedrill es incapaz de continuar!

...

- ¡Sí! ¡Vamos Ash! ¡Acaba con ese bicho!

- ¡Pikapi!

No cabía duda de que Ash escucharía claramente las fuertes porras de Misty en las tribunas.

Anabel por su parte miró a la desanimada Pava mientras retornaba a su primer Pokémon con el cejo fruncido. Algo estaba muy mal con esa batalla, y no estaba del todo segura de qué.

- Estos tapones para los oídos son buenos para todo el ruido que hay aquí, pero aun así desearía que no hubiera tanta gente. ¿Están seguras de que este lugar se va a llenar todavía más?

Anabel notó como estaban las tribunas para un encuentro de primera ronda, y asintió sin dudarlo en la dirección de Iris. Todavía quedaban asientos vacíos aquí, pero el Estadio Índigo estaría muchísimo más lleno.

...

- ¡Y el segundo Pokémon de Pava Gilbane es un Machoke, un feroz Pokémon tipo Luchador! ¡¿Acaso Ash retornará a Tauros, o tendrá una estrategia para esto?!

El Machoke que acababa de salir flexionó sus músculos frente a él y Tauros, y Ash notó que se tenía más... de algo que el Beedrill. Y no estaba hablando solo de músculos. Miró a Tauros, que resopló sin tener que tomar aliento.

- Tauros, ¿estás de humor para otro asalto? – Tauros pisoteó con sus cascos a su manera de decir "sí", y Ash sonrió. – ¡Asombroso! ¡Hagamos esto un dos por dos!

- ¡No nos subestimes! ¡Machoke, agárralo por los cuernos!

Machoke cargó contra Tauros, abriendo sus enormes manos y listo para agarrarlo.

- ¡Usa Doble Equipo, y luego Cabezazo!

Tauros asintió y luego empezó a brillar levemente. Machoke agarró los cuernos, solo para que el toro desapareciera. La revelación del señuelo lo atrapó desprevenido, al igual que el cabezazo que le llegó por detrás, enviando al Pokémon Luchador a revolcarse en la hierba y quedara en el suelo boca abajo.

- ¡Tauros evade el agarre de Machoke, y contraataca!

Machoke hizo un esfuerzo por volverse a levantar, y Ash notó que tenía una mancha de hierba en su pecho al darse la vuelta y mirar desafiante a Tauros.

- ¡Usa Incinerar!

- ¡Desvíalo con Karatazo, y luego usa Sumisión!

Las bolas de fuego que Tauros disparó salieron desviadas por Machoke, que las golpeó para alejarlas con algo de esfuerzo pero no pareció sufrir ningún daño visible. Luego se lanzó hacia Tauros, de nuevo tratando de atraparlo en un agarre.

- ¡Protección, y luego Cabezazo!

Las manos listas para ejecutar Sumisión fueron a parar directo en la Protección, y al ser desviadas provocó que los brazos de Machoke se abrieran violentamente y expusieran el cuerpo sin ningún tipo de guardia. Tauros tomó la abertura y embistió con su cabeza a Machoke, enviando al Pokémon musculoso de espaldas con un poderoso golpe.

Machoke quedó de rodillas, mirando desafiante a Tauros. A pesar de todo, todavía no estaba derrotado.

- Todavía estás de pie, Machoke. Gracias, todavía podemos darle la vuelta. ¡Revancha!

Machoke brilló de color naranja, y el aura a su alrededor alcanzó su punto álgido antes de correr hacia Tauros, que instintivamente formó de nuevo el Doble Equipo. Machoke se dio la vuelta ante el primer impacto, apenas golpeando al primer señuelo antes de correr hacia otros dos.

- ¡Cabezazo!

Machoke sonrió ampliamente al embestir a dos Tauros, solo para que la sonrisa desapareciera cuando se dio cuenta de que ambos eran falsos. Y definitivamente no estaba sonriendo cuando el verdadero Tauros lo embistió desde un lado con un Cabezazo, enviándolo directo al suelo.

- ¡Machoke es incapaz de continuar!

...

- ¡Wow, todo indica que esto será un barrido total! ¡No me había dado cuenta de que ese Tauros era tan fuerte!

- No lo es.

Misty se volteó a ver a Iris, que negaba con la cabeza.

- Yo no diría que ese Tauros sea el más fuerte de los que Ash tiene en su rebaño. Ese Machoke era más fuerte que el Beedrill, pero ninguno está cerca del nivel de fuerza de Ash. Si tuviera que pensar en ello, parecían estar más cerca de la fuerza de Ash justo después de vencer a Janine.

Misty miró a la chica con quien Ash estaba peleando, que retornaba a su Machoke con tristeza.

- Y entonces, ¿cómo hizo para llegar hasta aquí?

...

- De verdad esperaba no tener que hacer esto. Siempre ocurre lo mismo, y quería poder evitarlo solo una vez mientras estuviera aquí.

Ante las palabras incómodas de Pava, Ash le sonrió.

- ¿Le darás la vuelta al encuentro con solo un Pokémon? No es la primera vez que oigo de eso, y aun así sigue siendo una victoria. Es bueno ver que quieras evitar hacerlo demasiado, pero es bueno tener algunos Pokémon con los que puedas contar para salvarte.

- ¿Pero qué pasa si es un Pokémon, y solo un Pokémon? – Al pronunciar estas palabras, Pava arrojó una Pokébola que explotó en el campo. – Siento mucho que siempre ocurra esto, ¡pero necesito que nos hagas otro milagro!

Dicho hacedor de milagros ahora estaba totalmente visible, y Ash tuvo que admitir que no era el tipo de Pokémon que se estaba esperando.

- ¡Yaaa!

- Dragonair, un Pokémon dragón nativo del fondo de los lagos. Se les conoce por su rareza y su capacidad de manipular el clima.

El Dragonair que Pava había enviado observó a Tauros, que a estas alturas ya se encontraba respirando con algo de dificultad.

- Tauros, ¿quieres tomar un descanso, o vemos a dónde llevará esto? – preguntó Ash. Tauros asintió, todavía respirando a bocanadas pero asintiendo a pesar de todo. – ¡Muy bien, veamos lo que hace este Pokémon con ataques de largo alcance! ¡Incinerar!

Tauros formó varias bolas de fuego a su alrededor para dispararlas contra Dragonair, cuya perla en el cuello comenzó a brillar de púrpura. Luego alargó su cuello totalmente, y disparó desde él una esfera de Pulso Dragón.

El Pulso Dragón disipó las bolas de fuego sin ningún esfuerzo e impactó a Tauros, enviando al toro a volar contra el podio. Ash tuvo que aferrarse a la baranda para evitar caerse con el impacto, y cogió la Bola Safari para retornar a Tauros.

- ¡Tauros es incapaz de continuar!

- ¡Y qué les parece, el último Pokémon de Pava es un verdadero as bajo la manga!

Ash le dio las gracias a Tauros por el esfuerzo mientras observaba al Dragonair. Ya había considerado la posibilidad de que alguien utilizara un tipo Dragón en la primera ronda, y por lo cual Togepi era uno de los Pokémon que llevaba consigo.

Sin embargo, ese ataque fue bastante fuerte, y no había podido ver los otros movimientos del Dragonair. Este Pokémon posiblemente hasta tuviera más de cuatro movimientos, y usar a Togepi contra él sin conocer de lo que era capaz era algo a lo que no iba a arriesgarse.

Además, en su cabeza se imaginaba utilizar a Togepi contra un tipo Dragón que pertenecía a alguien mucho más arrogante y pesado de lo que era Pava. Usar a Togepi y ganar contra ella honestamente sería muy cruel de su parte. Por fortuna, tenía otra estrategia a la mano.

- ¡Vamos!

Envió entonces una segunda Bola Safari, y con ella un segundo Tauros, que mugió con fuerza desafiando al tenso Dragonair.

- ¡Y nuestro retador de Pueblo Paleta saca a un segundo Tauros! ¿Acaso esta repetición será una jugada inteligente o tonta de su parte?

- ¡Rayo de Hielo!

La bola de energía blanca que se formó entre los cuernos de Tauros era una jugada inteligente, al menos si alguien le preguntaba al respecto.

- ¡Lanzallamas!

El Dragonair sopló sus llamas contra el Rayo de Hielo, y los dos ataques colisionaron en medio del campo. Los dos parecían bastante igualados, así que tendría que acercarse más.

- ¡Tauros, carga de frente para un ataque directo!

Tauros asintió, pisoteando un poco antes de lanzarse contra Dragonair, quien tuvo que serpentear para reorganizar su cuerpo, levantando su cola.

- ¡Aqua Cola!

- ¡Cabezazo Zen!

Cola y cabeza chocaron de frente, y la cabeza fue quien ganó ya que Tauros logró empujar hacia adelante y envió a Dragonair a dar vueltas. El Pokémon no recibió daño, pero estaba con las patas para atrás. Por decirlo de alguna manera, ya que Dragonair no tenía patas hasta haber evolucionado.

- ¡Rayo de Hielo!

Con esa abertura, Tauros disparó otro rayo congelador, el cual golpeó a Dragonair y mandó al Pokémon serpentino a girar por la hierba como un tronco perdido. Dragonair recuperó el control antes de estrellarse contra el podio verde, y miró desafiante a Tauros que solamente resopló.

- ¡Pava tuvo suerte de que ese Rayo de Hielo superefectivo no congeló al contacto! ¡Sin duda eso habría representado el fin del juego para ella, amigos!

Suerte no era la palabra correcta. El Tauros que estaba utilizando tenía la habilidad de Fuerza Bruta. Congelar al contacto con ese Rayo de Hielo no era posible para él.

- ¡Pulso Dragón!

La perla en el cuello de Dragonair volvió a brillar otra vez. Sin embargo, Ash tenía una idea de qué hacer con esto.

- ¡Usa Cola de Hierro y batea ese Pulso Dragón de vuelta!

Las tres colas de Tauros brillaron de blanco y se dio una voltereta justo cuando Dragonair disparaba el Pulso Dragón. La esfera golpeó las tres colas, y salió despedida de vuelta directo hacia Dragonair.

- ¡¿Qué?!

Pava se vio sorprendida por esto, y Dragonair apenas tuvo suficiente tiempo para disparar un Lanzallamas que apenas logró parar el ataque rebotado antes de explotar. La explosión en la zona de impacto provocó una gran nube de humo, obscureciendo de la vista a Dragonair y Pava.

- Dragonair... – Pudo escuchar claramente la voz de Pava, llena de preocupación y arrepentimiento. – En verdad lamento que siempre resulte así. Nunca hemos tenido suficiente tiempo, y al final tienes que llevar todo el peso. No quiero que terminemos aquí. Quiero ir solo un poco más lejos, y sé que tú también lo deseas. Por favor, que sigas allí cuando el humo se aclare.

El humo continuó disipándose desde la zona de impacto sin ningún sonido, antes que un fuerte bramido resonara desde adentro. Y luego lo siguió un enorme estallido luminoso que disipó el humo completamente, revelando una masa que se transformaba donde antes estaba Dragonair.

Ash no se arrepintió de soltar una maldición en televisión nacional cuando su madre lo estaba observando. Tauros resopló nerviosamente mientras la luz se disipaba, revelando a un recién evolucionado Dragonite.

- ¡Brooooo!

- ¡Y estoy seguro de que esto no es lo que Ketchum esperaba ver después de dos golpes directos con ataques superefectivos, aunque sin duda Gilbane debe estar muy emocionada!

- Yo... lo estoy, ¡claro que lo estoy! ¡Dragonite!

Dragonite volvió a lanzar un bramido, antes de formar una esfera azul en una sola mano y lanzársela a Tauros. Tauros no pudo reaccionar a tiempo antes que el ataque lo golpeara en toda la cara.

- ¡Oh, eso fue una Onda Certera!

Tauros todavía seguía de pie después del ataque, aunque estaba temblando un poco.

- ¡No me imaginé que tuvieras ese ataque, ¿lo acabas de aprender?! ¡Dragonite, eres asombroso! Muy bien, Onda Certera, Pulso Dragón, Lanzallamas, Aqua Cola... ¿todavía tienes...?

Dragonite hizo brillar su cola de blanco metálico, y entonces Pava señaló a Tauros.

- ¡Grandioso! ¡Usa Cola de Hierro!

Dragonite echó a volar hacia Tauros con la cola brillando, y Ash no pudo más que tensarse.

- Viene demasiado rápido y atravesará el Rayo de Hielo... ¡usa Cabezazo Zen!

La cabeza de Tauros comenzó a brillar de azul, y golpeó de frente el ataque de su enemigo. De nuevo la cabeza golpeó de frente la cola, y esta vez los dos quedaron bastante igualados.

- ¡Usa Lanzallamas!

Dragonite canceló la Cola de Hierro y la levantó, dejando que Tauros siguiera corriendo un poco antes de soplarle sus llamas. Tauros lanzó un grito al recibir el ataque, antes de colapsar derrotado. Dragonite aterrizó en el suelo y lanzó un bramido de victoria al cielo.

- ¡Broooo!

...

- Ese Dragonair ya era capaz de evolucionar desde hacía tiempo: las palabras de esa chica fueron el empujón final que necesitaba.

Ante las palabras de Iris, Misty miró al Dragonite con gran preocupación.

- ¿Qué puede hacer Ash para derrotarlo? Se ve realmente fuerte.

- Lo es. Charizard probablemente sea su mejor opción. ¿Lo trajo consigo?

Misty adoptó una mirada nerviosa, como si no lo supiera. Ella tampoco lo sabía, era una buena pregunta.

...

Bueno, así no era como esperaba que sería su primera ronda. Ante la mirada desafiante de Dragonite, lo único que podía decir Ash era que tenía suerte de que Dragonite todavía evidenciaba el daño de los ataques que había recibido. Pero eso era todo, y tenía que admitir que era su problema.

Aparte de los dos Tauros que ya habían sido vencidos, tenía a Togepi (a quien de ninguna manera iba a enfrentar contra este Pokémon), Serperior (que no tenía ventaja de tipo, y tampoco tenía una idea clara de su género), y Muk (que podría aguantar el daño, pero no infligirlo de vuelta.)

Aún le quedaba un segundo Pokémon con nivel similar a Serperior, pero no estaba totalmente seguro de si sería una buena idea ahora. Pero ya había predeterminado su equipo, y era su mejor opción. En el peor escenario, le tocaría usar un Movimiento-Z y revelarlo en público en la primera ronda.

- ¡Todo depende de ti! – exclamó Ash. Sin presiones.

- ¡Y Ketchum elige a un tercer Tauros! ¡Acaso esta estrategia le dará frutos hoy, o sus planes de jugar de manera inteligente lo han condenado a una victoria de gran regreso a manos de su oponente?

Tauros miró al Dragonite, resoplando con anticipación.

- Brro. [Otra vez Pummelo, ¿huh? Bueno, creo que disfrutaré de esto.]

Ash asintió antes de señalar con el dedo encima de Dragonite.

- ¡Usa Avalancha de Rocas!

El quinto movimiento de Tauros cayó desde arriba con un solo bramido, seguido de un montón de piedras que comenzó a lloverle a Dragonite desde el cielo. Estas le cayeron encima de sorpresa antes de que pudiera apartarse, atrapando al dragón bajo varias pesadas rocas mientras intentaba volver a ponerse de pie.

- ¡Ahora, Fisura!

Tauros azotó el piso con su casco frontal, mandando una ola de energía agrietando la tierra hacia el inmovilizado Dragonite.

- ¡Nuestro retador de Pueblo Paleta ha combinado dos poderosos movimientos para sortear las ventajas aéreas de Dragonite!

- ¡Usa Lanzallamas!

En respuesta al grito de Pava, Dragonite lanzó un chorro de fuego contra la energía de la Fisura. Sin embargo, las llamas fueron dispersadas por el poder del ataque terrestre, que golpeó a Dragonite sin que nada pudiera detenerlo. El campo se quedó en silencio por un momento, y Ash pudo ver a Pava temblando de horror.

Las piedras cayeron esparcidas fuera de Dragonite, que no pudo más que desplomarse. Pava seguía temblando, mientras el réferi tomaba su decisión.

- ¡Dragonite es incapaz de continuar! ¡El ganador es Ash Ketchum de Pueblo Paleta!

- ¡Y con un montón de Tauros y estrategias a su nombre, Ash Ketchum ha ganado su primera ronda!

Tauros se quedó observando al derrotado Dragonite, luego miró su casco, y después al Dragonite otra vez.

- Brooo. [¿Así que así es como se ve cuando golpeas algo con Fisura?]

Ash asintió mientras veía a Pava retornar a Dragonite, con el cuerpo todavía temblando y lágrimas en sus ojos. Estaba feliz por haber ganado, pero ver llorar a Pava hizo que la victoria se sintiera un poco mal de alguna manera.

Quiso decirle algo, pero ella salió corriendo antes de que pudiera hacerlo.

...

Aunque no se sentía del todo bien por su victoria en el campo, fuera de él todo eran vítores y celebraciones.

- ¡Así se hace, Ash! ¡Uno fuera y quedan ocho más!

Él y Misty chocaron sus vasos: no de alcohol sino de jugo. Los cuatro podrían echarse unos tragos de adultos en el futuro cercano, pero ese tiempo no era ahora.

- Sí, aunque solo puedo esperar a que sean más sencillos que ese. Admito que podría haberme llevado un mejor equipo para esa pelea, y me sorprende que esa idea de usar Avalancha de Rocas y Fisura funcionara tan bien como lo hizo.

- Bueno, admito que me equivoqué, humano, por raro que sea. Ese Tauros lo hizo mejor de lo que me esperaba como equivalente de Serperior.

El Pokédex no estaba realmente celebrando, aunque estuviera mostrando luces de colores parpadeantes en su pantalla. No eran exactamente reflectores de una discoteca, pero era un buen intento.

- Solo me alegro de que hayamos logrado ese movimiento. Tauros realmente necesitaba una mejor opción para atacar a largo alcance a los oponentes aéreos, y me alegra ver que todo el trabajo que pusimos en ello valió la pena.

- Tal vez al final resultó mejor tratar de ser menos inteligente, pero al final fue una victoria, y no fue pírrica.

- ¿Pírica? ¿Esa palabra no significa fuego? ¿Acaso hay un problema con el fuego del que no estaba enterada?

Ash también levantó su mano, cuestionando el término.

- De hecho estoy de acuerdo con Iris en esta. Creo haber escuchado ese término antes, pero no tengo idea de lo que significa exactamente.

- Significa ganar una batalla con tantas pérdidas que básicamente también terminas perdiendo. Usualmente hace referencia a batallas que costaron una gran cantidad de bajas en tu ejército, o la pérdida de un comandante invaluable.

Algo como lo que pasó cuando Harrison lo venció en Johto. Blaziken había quedado tan lastimado que Harrison no tuvo a su mejor Pokémon para la siguiente ronda, y como resultado perdió.

- ¿Eso no es a lo que se le llama una victoria vacía?

- Similar, pero no es exactamente igual. "Ganar la batalla, pero perder la guerra" es un mejor término para comparar esa expresión.

En respuesta al pitido del Pokédex, Iris simplemente sacudió su cabeza.

- La gente de verdad tiene demasiadas formas para decir las mismas cosas.

(--0--)

Un poco más tarde...

Después de su banquete post-victoria, y de algunos ejercicios de entrenamiento ligeros con Iris, el grupo regresó a la cabaña donde se estaban hospedando. Afortunadamente las comodidades incluían una computadora con conexión a internet que los competidores podían consultar para verificar a sus posibles oponentes, o simplemente surfear para entretenerse

Anabel ahora se encontraba sentada frente a ella, revisando las respuestas a su última entrada en el blog. A pesar de que aún seguían los ocasionales haters y trolls que comentaban solo para fastidiar, la recepción ahora era notablemente más positiva. Después de la primera ronda, varios de los participantes se habían sentido lo bastante valientes como para preguntar si vio sus encuentros y hasta presumir un poco de sus triunfos.

Sin embargo, entre la cantidad de comentarios alegres, uno de los más recientes era de alguien identificado como "MasterBuilder87", cuyo icono era de un casco protector del que usaban los trabajadores de construcción. Dicho comentario rezaba lo siguiente:

Doncella del Salón, no sé si este es el mejor lugar para hablar de esto, pero aquí voy. Tal vez habrás visto mi encuentro, aunque fui eliminada en la primera ronda. Me siento terrible por perder, pero más por cómo me comporté después que perdí. Estaba muy nerviosa; esta era mi primera competencia después de todo. Creo que mi oponente lo notó y aunque fuéramos enemigos en el campo trató de darme algunas palabras de aliento. Eso definitivamente me ayudó, y por un momento creí tener la victoria en mis manos, pero al final él me venció con todas las de la ley. Ni siquiera me digné darle las gracias o felicitarlo por su victoria, sino que salí corriendo y llorando como una niñita. ¿Qué debo hacer?

Anabel leyó y releyó el mensaje una y otra vez. Aunque no tenía forma de saberlo con exactitud, su intuición le decía fuertemente que la autora de ese mensaje debía ser la chica a la que Ash había derrotado. Su relato coincidía con cómo había resultado el encuentro, demasiado para ser una simple coincidencia.

- Pobre chica. Tal vez necesita alguien con quien hablar ahora.

Fácilmente podría tipear una respuesta en el blog, pero si se sentía tan mal como decía, un encuentro en persona parecía más apropiado. Con suerte, tal vez no se habría ido todavía.

Primero lo primero, sin embargo: no podía dejarse identificar allá afuera. Tendría que salir de incógnita.

- Oye, Ash. – llamó al entrenador, que estaba sentado cambiando los canales en el televisor, con Pikachu en su regazo.

- ¿Sí, qué pasa? – preguntó.

- ¿Tendrás una gorra y una capucha de sobra que me prestes?

...

Como resultó, sí las tenía. Al salir de la cabaña simplemente les dijo a Ash y las otras que iría a caminar un rato y regresaría a tiempo para la cena. No quiso incomodarlos con lo que iba a hacer, pero afortunadamente no hicieron preguntas.

Ella afortunadamente traía consigo un par de gafas de sol redondas y gruesas que le servirían para ocultar sus ojos, y junto con las prendas que le tomó prestadas a Ash, servirían como un disfraz perfecto. Salvo por ocasionales miradas curiosas, nadie se fijaba en ella; todos estaban demasiado ocupados con la excitación por la Liga, y hasta había alguno que otro con apariencias aún más estrafalarias, así que no iba a destacar.

A pesar de todas las emociones que flotaban en el aire, Anabel no se sentía abrumada. Pese a que había los ocasionales pensamientos de rabia o tristeza por haber perdido, la mayoría de la gente se enfocaba más en el entusiasmo por la competencia, ya fuera de los participantes o de aquellos que habían venido para apoyarlos, e incluso algunos de los que ya habían sido eliminados se lo estaban tomando de la mejor manera posible. Eso era siempre algo bueno.

- Ahora, ¿dónde podría estar?

El problema era, no tenía forma de saber si Pava se encontraba todavía en los terrenos del Estadio Índigo, y entre tanta gente, iba a ser muy difícil ubicarla. Tampoco sabía en qué área se estaría hospedando, y aunque el Pokédex posiblemente podría haberlo averiguado, estaba demasiado ocupado dando reportes a Ash sobre su árbol genealógico como para ayudarle con eso, lamentablemente.

Había dos lugares donde era altamente probable que estuviera: en la zona de los restaurantes, posiblemente yendo a buscar algo de comer para consolarse a sí misma, o en un Centro Pokémon para tratar a sus Pokémon heridos. En el segundo caso, cualquier entrenador que se preocupara por su equipo haría esa parada obligatoriamente, lo que la hacía más probable, de modo que decidió dirigirse hacia allá primero.

Por el número de competidores, obviamente había una gran cantidad de Centros Pokémon por todo el lugar, pero casi todos se encontraban en la misma área general. Si Pava se encontraba allí, posiblemente tardara un poco en ubicarla, pero no sería tan difícil como cuando Ash fue secuestrado por Sabrina.

- Vale la pena intentarlo. Pava Gilbane... ¿dónde te encuentras ahora?

Usando el mapa en el panfleto para orientarse, se ubicó en la plaza central, de esa manera tendría un radio de acción a toda el área. Si Pava se encontraba allí, solo tenía que irradiar un poco su telepatía para poder ubicarla en unas dos o tres cuadras a la redonda.

Otro motivo para llevar las gafas de sol: así nadie vería el brillo de sus ojos mientras lo estaba haciendo.

- Uno... dos... tres.

Y con eso, de inmediato envió una onda telepática dentro del área de los Centros Pokémon. Se mantuvo concentrada, tratando de ubicar pensamientos específicos.

- ...no tengo ninguna posibilidad, esa chica Fisher...

- ... cuidado con los novatos, uno de ellos le ganó a Mandi el año pasado y hay más este año, aunque de alguna manera pasó de la primera ronda esta vez...

- ... ¡todo al nieto del Profesor Oak!

- ... no era necesario decir "patético", ¿o sí?

Los pensamientos aleatorios pasaron uno tras otro en sucesión rápida. Tal vez necesitara una o dos vueltas más para encontrarla.

Sin embargo, un par de minutos después o algo así, no hubo necesidad, cuando captó la mente de una Enfermera Joy que estaba de turno.

- ...Dragonite está bien, pero es mejor que descanse por esta noche. Tuvo suerte de no sufrir fracturas severas en sus alas. Además, necesitará tiempo para adaptarse a su nueva forma.

- Gracias, Enfermera Joy. Vendré a recogerlo mañana.

Esa era. Anabel estaba segura de ello. No era una sorpresa, después del daño sufrido contra los tres Tauros de Ash, era lógico que Pava hubiese ido al Centro Pokémon. Al menos eso aseguraba que no se iría antes de mañana, si tenía que esperar a que se recuperase.

Con eso en mente, Anabel siguió la señal mental. Podría teletransportarse para ir más rápido, pero en medio de tanta gente lo mejor era no delatarse.

Tardó un poco en encontrarla, pero finalmente dio con ella. Pava iba caminando muy tranquilamente, mientras hablaba por su teléfono celular. Anabel leyó brevemente su mente y se dio cuenta que estaba hablando con su familia y avisándoles que volvería mañana.

- "Quizás... es mejor abordarla mientras esté sola. Para que nadie nos moleste."

Sí, eso era lo mejor. Por ahora, lo único que podía hacer era seguirla discretamente. Con toda certeza regresaría a su cabaña de huéspedes para descansar. Había sido un día muy largo después de todo.

...

Pava hizo una breve parada en una heladería, y tras ahogar sus penas en un gigantesco banana Split, se dirigió de vuelta a la zona de descanso. Irónicamente, no estaba tan lejos de donde se estaban hospedando Ash y ellas, y le extrañaba un poco que no se hubieran cruzado.

Solo para estar segura, hizo un escaneo mental rápido para confirmar que Pava se encontrase sola dentro de su cabaña. Al parecer no había traído más acompañantes, así que podría hablar con ella sin ningún problema. Respirando profundo, se aproximó a la puerta.

- Aquí vamos. – dijo antes de sonar tres veces.

Pava tardó un poco en responder, y cuando abrió la puerta, Anabel pudo ver que era apenas un poco más alta de estatura que ella, y que todavía tenía los ojos un poco rojos por tanto llorar. Pobre chica, esa derrota le había afectado mucho.

- ¿Sí? ¿Puedo ayudarte? – le preguntó.

- Recibí tu mensaje. Creí que tal vez querrías una respuesta en persona.

- ¿Mensaje? ¿De qué estás...? – dijo la chica, y retrocedió ligeramente antes de darse cuenta de algo. – Espera un momento, ¿acabo de oírte dentro de mi cabeza?

- Así es. – Anabel respondió sin mover la boca para dejar claro su punto. – Cuando dije que quería encontrar mi voz, es porque literalmente la perdí. No puedo hablar directamente, pero puedo comunicarme de este modo.

- Entonces tú... ¿tú eres quien escribió ese blog, la Doncella del Salón? – La cara de la chica se iluminó, y Anabel pudo percibir que de pronto sus ánimos se levantaban.

La bloodliner le sonrió, pero hizo un gesto para que fuese más discreta.

- Shhh, por favor, que no oigan que estoy aquí. ¿Me permites pasar? Como dije, creo que necesitamos hablar, si es posible en privado.

- C-claro. A-adelante.

Anabel entró a la cabaña y Pava colocó el cerrojo detrás de ella. El lugar se veía idéntico al de ellos, sin muchos cambios excepto que lo tuviera solo para ella. El sitio se sentía bastante grande sin gente con quién compartirla.

- ¿Entonces es cierto? ¿Eres una Bloodliner de verdad? – dijo con una voz que sonaba como la de alguien que acababa de conocer a su estrella favorita. – Siempre quise conocer a uno, en serio. ¿Cómo es? ¿Qué clase de poderes tienes además de esa telepatía?

Anabel simplemente sonrió y alargó la mano hacia un perchero que tenía colgada una chaqueta, y la atrajo hacia sí. Por suerte para ellas los cristales de las ventanas eran opacos y nadie se daría cuenta aunque intentara espiarlas.

- Puedo hacer cualquier cosa que hacen los Pokémon Psíquicos. Me ayuda a entenderme bastante bien con ellos.

- Eso es genial. Me gustaría poder hacer lo mismo.

Anabel volvió a sonreír. Realmente parecía una buena chica, y era bueno hablar con alguien más de esa manera sin ocultar lo que era.

Aunque técnicamente estuviese ocultándole QUIÉN era.

- Pero no vine a hablar sobre mí. En efecto, hoy vi tu batalla. Parece ser que esa derrota te afectó mucho, ¿no?

La sonrisa de Pava se desvaneció al instante. La chica bajó la cabeza, evidentemente todavía avergonzada por su forma de actuar. Pero Anabel percibía que había algo más aparte de la derrota en sí por lo cual se estaba sintiendo mal.

Pava suspiró y finalmente se dignó hablar. – Supongo que mi suerte tenía que acabarse tarde o temprano. Aun así... realmente es frustrante que me eliminaran en la primera ronda. No quería que sucediera.

- No hay por qué avergonzarse por haber perdido. – le aseguró Anabel. – La verdad lo hiciste muy bien, solo... te tocó un oponente más fuerte de lo que esperabas.

Eso era verdad. Aunque su desempeño inicial dejó mucho qué desear, su Dragonair, ahora Dragonite, se notaba bien entrenado y fuerte, pero parecía el tipo de Pokémon que la mayoría de entrenadores se guardaría para rondas posteriores.

- Sí, ese chico de los Tauros era realmente bueno. – admitió Pava. – Es más, si Dragonair no hubiera evolucionado cuando lo hizo, dudo mucho que hubiéramos aguantado hasta el último asalto. Cuando evolucionó creí... creí que podría volver a hacer el milagro, igual que siempre lo había hecho.

- ¿Siempre? – preguntó Anabel.

Pava la miró fijamente a los ojos. Aun sin leer su mente, la expresión de la chica denotaba que estaba a punto de hablar de un tema delicado y que evidentemente no le gustaba tocar. Aunque llevara las gafas por seguridad, por un momento se sintió tentada a quitárselos para que la chica pudiese verla a los ojos, aunque fuese para inspirarle más confianza.

Afortunadamente, eso no iba a ser necesario.

- Casi todas mis batallas importantes las gané gracias a Dragonite. Sé que no está bien que le haga llevar todo el peso pero... no sé qué más hacer. Solo tuve tiempo para entrenarlo a él, y siempre cuando las cosas se veían difíciles, él lograba que saliéramos victoriosos. Y creí que esta vez sería igual, pero... bueno, nuestra racha tenía que terminar tarde o temprano.

Anabel se quedó viendo a la chica fijamente. Una de las reglas de oro para cualquier entrenador era que un equipo Pokémon debía ser eso, un equipo bien formado y entrenado. Una cosa era que cada Pokémon avanzara a su propio ritmo, y otra muy distinta era concentrarse en fortalecer a un solo Pokémon, dejando de lado al resto.

Sin embargo, Pava acababa de decir que solo tuvo tiempo para entrenar a su Dragonite, lo cual implicaba que más bien fueron las circunstancias las que le obligaron a tomar dicha decisión.

- Acabas de decir que solo tuviste tiempo de entrenar a tu Dragonite. – dijo Anabel. – Puedo ver que hiciste un buen trabajo con él, y por eso me extraña que tus otros Pokémon no estuvieran ni de cerca a su nivel. ¿Asumo que habrá una historia detrás de eso?

Pava suspiró de nuevo. – Es una larga y aburrida historia. Una que seguro no querrás oír.

- Yo seré la que decida eso. – insistió Anabel. – Quién sabe, quizás te sientas mejor si me la cuentas. Por el tiempo no te preocupes, no es que tenga planes para el día de hoy.

No había prisa, e incluso si resultaba ser bastante larga, Ash y las demás lo entenderían. Hasta entonces, Pava necesitaba alguien que la escuchara, y ella había decidido ser esa persona.

- Mi familia tiene un negocio de construcciones. – comenzó a relatar la rubia. – A veces les ayudo, cargar ladrillos y sacos de cemento es bueno para mantenerse en forma, como puedes ver.

Al decirlo mostró sus bíceps con algo de orgullo. De pronto el alias online y el casco protector en el icono parecían tener más sentido.

- Pero desde hacía tiempo que quería ser entrenadora y viajar por toda la región para competir aquí. Sé que tendré que encargarme del negocio familiar algún día, pero hasta entonces, quisiera hacer otras cosas.

Anabel asintió. La presión de los deberes familiares nunca era fácil de sobrellevar.

- Todo iba muy bien, hasta que un par de meses después de que salí, mamá me llamó. Papá había tenido un accidente en el trabajo, y de hecho todavía está en rehabilitación, así que... eso truncó mis planes de viaje, al menos hasta que él se recupere.

Anabel se llevó la mano a la boca involuntariamente. Por fin las cosas comenzaban a cobrar sentido, y a medida que la chica seguía su relato, su actitud ante la derrota pronto se hizo más y más comprensible.

Pava le relató cómo tuvo que rogarles a sus padres para que le permitieran ser entrenadora. Aunque no renegaba del negocio familiar, ella quería abrirse su propio camino y hacer algo más con su vida. Después de que obtuvo su licencia como entrenadora, parecía que todo resultaría bien.

Pero las circunstancias cambiaron cuando su padre sufrió ese accidente. Estaban cortos de personal, y aunque sabía que tarde o temprano tendría que hacerse cargo del negocio de construcciones, una parte de ella esperaba que fuese más tarde que temprano. Aun así, la sangre era más espesa que el agua, y se vio forzada a interrumpir su viaje sin siquiera haber terminado de reunir un equipo.

A raíz de eso, con todo el trabajo que tenían que hacer su tiempo era muy limitado. En sus días libres podía llevar a Dratini (por un golpe de suerte, lo había encontrado poco antes de tener que volver a casa) a hacer entrenamiento en el Club de Batallas, y eventualmente logró hacerlo evolucionar. Se hizo lo bastante fuerte para desafiar a un gimnasio por una medalla de entrada instantánea para la Liga Índigo, y así era como habían logrado obtener su pase para la competencia. En cuanto al resto de su equipo... a veces no tenía más alternativa que recurrir a concursos de captura de bichos, solo para llenar los puestos vacíos reglamentarios.

Para cuando terminó su relato, la chica rubia exhaló un suspiro, pero Anabel percibió que se sentía mucho mejor tras dejar salir todo eso de su pecho. No entendía por qué se avergonzaba de hablar de ello, ella no lo veía como algo malo.

- Y bien, esa es mi historia. – concluyó. – Patética, ¿verdad?

- Para nada. – Anabel negó con la cabeza. – Tenías muchas presiones encima. Esta competencia significaba mucho para ti, ¿verdad?

- Sí. Por eso no quería que terminara tan rápido. – dijo Pava. – Pero creo que me lo merezco por hacer que Dragonite llevara el peso de nuestras batallas. Y aunque me sienta tan frustrada, no tengo excusa para haberme ido como lo hice. Ese chico no tiene la culpa de que yo sea tan mala entrenadora.

Eso era estirarse un poco de más. Ciertamente no tomó las mejores decisiones en su método de entrenamiento, pero tampoco era que tuviese muchas alternativas. El hecho de que su familia no parecía apoyarla lo suficiente tampoco ayudaba.

En ese punto, pasar tiempo junto con Iris le había dado suficiente conocimiento sobre los Pokémon Dragones para entender lo difícil que era entrenarlos, especialmente para los principiantes. Pero el esfuerzo siempre valía la pena si se hacía bien, y Pava lo había demostrado. Anabel sabía lo que necesitaba oír en ese momento.

- No eres una mala entrenadora. Pudiste criar bien a tu Dragonite para alcanzar ese nivel, y no muchos principiantes pueden jactarse de hacer eso. – dijo Anabel. – Con el tiempo y dedicación necesarios, todos tus Pokémon pueden y llegarán a ser igual de fuertes.

- ¿Pero qué pasará con, ya sabes, el negocio de mi familia?

Ahí estaba el verdadero problema. Anabel nunca tuvo que lidiar con ese tipo de presión familiar, pues su tío a pesar de haber sido un militar nunca la presionó para que siguiera la misma carrera que él. De hecho, parecía más que intentaba activamente alejarla de ella.

Pero bueno, el mensaje de Pava en el blog decía al final que quería saber qué debía hacer. No podía irse sin darle al menos un consejo.

- Cuando tu papá se recupere, creo que es justo que pidas compensación por el tiempo que te quitó el trabajo. Está bien que quieras ayudar a tu familia, pero eso no quiere decir que debas negarte lo que quieres hacer y que te haga feliz. Usa ese tiempo para entrenar a tus otros Pokémon, y que se pongan a la altura. Si pudiste entrenar a tu Dragonite, puedes hacerlo con todos los demás.

- ¿Tú crees? – dijo la chica, recuperando un poco sus ánimos.

- Vale la pena intentarlo.

Infortunadamente, en ese instante sonó un pitido en el bolsillo de la bloodliner. Sacando el dispositivo, se percató de que Ash había utilizado el Pokédex para enviarle un mensaje escrito y decirle que seguían esperándola para la cena.

- Lo siento, es mi señal para irme. Me están esperando.

- Qué lástima. Estaba empezando a sentirme a gusto hablando contigo.

- Podemos seguir en contacto por el blog, si lo quieres. Quizás no pueda venir siempre en persona, pero si necesitas hablar o lo que sea, allí estaré. Para eso lo abrí, después de todo.

- Suena bien para mí. Gracias, ya me siento mucho mejor. Lamento que hayas tenido que venir a ayudar a una extraña.

- No fue nada. Me alegro de haberte podido ayudar.

Anabel se puso de pie y se dirigió a la puerta. Pero antes de marcharse, le quedaba una última cosa que decir.

- ¿Puedo pedirte un favor? Mantengamos esta pequeña charla entre nosotras. No le digas a nadie que me conociste en persona, ¿está bien?

- Mis labios están sellados.

Anabel se despidió de Pava y abandonó la cabaña, dirigiéndose sin prisa a reunirse con sus amigos para la cena. Considerando todo, era una buena manera de concluir el día.

Le alegraba ver que su blog había servido para ayudar a alguien. Con suerte Pava sería solo la primera de muchas.

(--0--)

Día 2 de la competencia...

Bostezando, Ash caminó por la cabaña de huéspedes que le fue otorgada como competidor, aunque esta mañana solo estaba un poco despierto. Era apenas el inicio del segundo día, y con él la segunda ronda. Tenía tiempo de sobra antes de su batalla, así que no tenía nada de prisa.

Tenía toda la mañana para despertarse, y eso quería decir que podía tomarse el tiempo para darse una buena y relajante ducha.

Pero apenas abrió la puerta de la ducha, se encontró mirando frente a frente a una Iris totalmente mojada y desnuda secándose con una toalla. De pronto se sintió muy despierto, y la alerta le llegó como si fuera un rayo masivo de pura concentración.

- Buenos días, Ash.

Él no pudo más que hacerle un gesto con la cabeza a Iris, que continuaba secándose. La tela blanca de su toalla contrastaba con su piel oscura, cubriendo y revelando partes de su cuerpo mientras se movía. Ash tuvo que forzar sus ojos a seguir el camino que recorría dicha toalla.

Vagamente recordaba haberse dado cuenta que la cabaña de huéspedes era un espacio más pequeño que su casa, especialmente con todo Pueblo Paleta a su alrededor, pero las ramificaciones con ello solamente se le volvieron aparentes justo ahora.

- La ducha es toda tuya. Misty y Anabel probablemente seguirán dormidas por un rato.

Y sin más, Iris arrojó la toalla en la cesta para lavandería y salió del baño, todavía desnuda. Sus ojos todavía la siguieron mientras atravesaba la puerta y desaparecía de la vista, y luego miraron hacia abajo.

- Ducha fría.

...

Mientras entraba al cuarto que compartía con las todavía durmientes Misty y Anabel, un pensamiento le vino a la mente a Iris. ¿Podría haber besado a Ash justo en ese momento y lugar?

Se quedó pensando en ello por un momento, y luego negó con la cabeza. Claramente Ash no era el único que podría estar pensando en hacer mejores estrategias en Índigo.

Aunque eso implicaría que ella habría estado planeando que él se topara con ella mientras se duchaba. Había sido solamente un accidente muy divertido.

(--0--)

En otra parte...

Mientras Ash tenía que lidiar con su excitación previa a la batalla, otros ya tenían batallas por ganar en la segunda ronda. El Campo de Agua en ese momento tenía una batalla entre un Butterfree y un Pidgeot, y uno pensaría que esto era ligeramente problemático para el Butterfree. Y ese sería el caso, si no fuese porque se trataba de cierto hueso duro de roer quien lo comandaba.

- ¡Pidgeot, Ataque Celestial!

El Pidgeot iba volando hacia Butterfree con un feroz ataque, pero el Butterfree al ser golpeado desapareció de la existencia en un estallido de humo poco después del impacto, dejando una nube de polvo rojo tras de sí.

- ¡¿Qué?!

- ¡El arriesgado ataque de Pidgeot ha sido desviado fuera de curso, gracias a una combinación de Polvo Furioso y Substituto! ¡El verdadero Butterfree ahora puede lanzar un peligroso contraataque, ¿pero cómo lo hará?!

- ¡Rápido, Butterfree, usa Electrotelaraña!

Ante la orden de A.J, el Butterfree había volado alto por detrás del Pidgeot y lanzó una red electrificada desde arriba directo hacia él. Pidgeot graznó en un shock mental antes de chirriar al recibir el choque de electricidad, y la red lo dejó atrapado contra la superficie del agua. Aunque no se hundió, la electricidad se mezcló con la humedad, afectando a Pidgeot para un combo que incrementaba el daño.

- ¡Miren eso, amigos! ¡Luego de darle la vuelta contra Venomoth y Poliwrath, Pidgeot por fin conoce a su rival! ¡Esto podría ser todo, fanáticos!

Pidgeot continuó convulsionándose por un minuto antes que la telaraña se desvaneciera, y al terminar, simplemente se quedó flotando sobre el agua totalmente inmóvil.

- ¡No!

- ¡Pidgeot es incapaz de continuar! ¡El ganador es A.J!

Butterfree flotó de vuelta donde estaba A.J, que chocó su puño con él de alegría.

- ¡Sí! ¡Con eso son dos por fuera y quedan siete más! ¡Buen trabajo, Butterfree!

- ¡Free!

Butterfree revoloteó a su alrededor por un momento, mientras A.J se ponía el dedo pensativo en el mentón.

- Me pregunto cómo le estará yendo a Jeanette. Nuestros encuentros están programados a la misma hora...

(--0--)

Entretanto, en el Campo de Roca...

Jeanette tomó una expresión sombría al ver a su Golduck caer al suelo, derrotado. El Golem de su oponente celebraba la victoria, y a su vez dicho oponente se reía burlonamente de ella.

- ¡Entiendo que básicamente tuviste que desperdiciar a un Pokémon con ese Beedrill tuyo, pero de verdad deber ser una novata si creíste que vencerías a mi Golem solo por la ventaja de tipo!

- Dicho Beedrill derrotó a tus dos Pokémon anteriores, ¿o eso se te escapó de la mente?

Su oponente le mandó una mirada rabiosa. – Solo envía de una vez a tu último Pokémon, así Golem podrá demolerlo igual que los dos anteriores.

Después de retornar a Golduck sacó su última Pokébola para esta batalla. Habría preferido no utilizarla de manera tan temprana, pero se había quedado sin opciones.

- ¡Ve!

Y con eso, envió a su Bellsprout, quien apenas apareció provocó que su oponente estallara en una histérica carcajada.

- ¡Chor chor chor chor! – Y se reía de manera muy extraña.

- ¡Y por lo visto es un movimiento desesperado de la joven Jeanette! ¡Debe estar confiando mucho en la ventaja de tipos si espera salir de este atolladero!

- ¡Espero que estés lista para inclinarte de vergüenza! ¡Golem, usa Puño de Fuego!

Golem cargó contra Bellsprout, con su puño ardiendo en llamas para golpear a su pequeño as directo en la cara. Ella no dio ninguna orden, pues su Bellsprout sabía exactamente lo que tenía que hacer.

- ¡Bell!

*¡SLAM!*

La multitud se quedó en silencio total ante lo que acababa de pasar, y solo pudo quedarse mirando ante lo que siguió después.

SLAM! ¡SLAM! ¡SLAM!*

- ¡Están viendo exactamente lo que están viendo, amigos! ¡Me hice exámenes para verificación de drogas y les aseguro que estoy viendo a un Bellsprout zarandear a un Golem como si no fuera nada, igual que todos ustedes!

Su oponente solo podía observar completamente incrédulo cómo su regreso le era devuelto por una simple Bellsprout, que arrojaba a su Golem contra el campo de batalla de roca y rompiendo los pilares de piedra. Golem no se movió después de eso, y ella sonrió. Eso estuvo demasiado cerca para su gusto, pero con eso ya habían pasado de la segunda ronda.

Con suerte, ella esperaba que la batalla de A.J hubiera resultado mejor que la suya, aunque tenía la certeza de que él también habría pasado de esta ronda.

- ¡Golem es incapaz de continuar, el ganador es Bellsprout!

- ¡Y bien, amigos, ese fue el resultado que les diría la ventaja de tipos, pero no me parece que Bellsprout haya utilizado ningún movimiento superefectivo!

- ¡Buen trabajo, Bellsprout!

- ¡Bell!

(--0--)

Al mismo tiempo...

Entretanto, en el Campo de Hierba estaba concluyendo otra batalla no relacionada.

- ¡Electabuzz, termina esta batalla con Híperrayo!

Electabuzz formó una esfera naranja entre sus manos antes de lanzarle el rayo a su oponente. El Machamp que se enfrentaba a él trató de salir huyendo, pero la parálisis que recibió por la Descarga actuó en ese momento, y recibió de lleno toda la potencia del Híperrayo. Machamp se desplomó derrotado, y la batalla fue declarada a su favor.

De inmediato Otoshi sonrió, no solo por su victoria y el desempeño de Electabuzz, sino por el hecho de que hasta ahora había hecho un gran trabajo ocultando a Marowak.

Se habían esforzado mucho para dominar su nuevo poder, tanto que hasta le preocupaba un poco sobre cómo se desempeñarían sus otros Pokémon en comparación. Pero Parasect, Dodrio, Electabuzz, Pinsir y Tangrowth, todos habían tenido un buen desempeño en las primeras dos rondas, y sus preocupaciones comenzaban a aliviarse.

Le quedaban solo siete batallas hasta el final, y el poder de la Evolución Rompedora continuaba siendo un secreto para revelar solo cuando llegara el momento.

(--0--)

De regreso con Ash...

Teniendo todavía unas pocas horas antes de su batalla, Ash había decidido aprovechar el descanso entre batallas de gente que conocía en los monitores y pantallas omnipresentes (Paul acababa de vencer a su oponente con Hypno y Red con Poliwrath) para hacer una parada rápida en el baño.

Había estado repasando sus posibilidades de equipos desde hacía una hora completa, y aunque le agradaba pensar que ya tenía una idea de cómo hacerlo mejor que en la primera batalla, necesitaba un descanso antes de volver a revisar.

- Hola, víctima.

La voz le llegó de la nada justo cuando había terminado, y tuvo suerte de que ya se había subido la cremallera en sus pantalones cuando se sobresaltó y dio la vuelta para ver quién lo había sorprendido de esa forma.

Se encontró con un completo extraño: un sujeto de cara enorme, con boca y nariz masivas, y una mota de pelo castaño. Aunque Ash era más alto, el hombre que le devolvía la mirada era notablemente más ancho y corpulento que él, aunque no por los músculos.

- ¡Pi-Pikachu! [¡Su nombre no es "víctima", y no deberías sorprender a la gente así! ¡¿Quién te crees que eres, el Equipo Rocket?!]

El hombre no reaccionó a las palabras de Pikachu, muy probablemente porque no podía saber lo que decía. Simplemente se quedó viéndolo con una expresión que se veía casi hambrienta. Honestamente, le hacía sentir bastante incómodo, ya que el sujeto estaba demasiado cerca de él para su gusto.

- Como dije, solamente te estaba saludando. Me gusta ser educado con mis víctimas antes de demolerlas por completo.

Sus palabras tenían un aire como si estuviesen cubiertas en aceite, y su aliento olía como si hubiese comido algo a la vinagreta. Ash al menos ya sabía quién era este sujeto: no le sonaba su cara, pero pudo asumir que era el mismo tipo que le tocaba enfrentar el día de hoy. Aunque se le escapó el nombre, pues el aliento a vinagreta lo estaba distrayendo.

- ¿Te importaría abandonar mi espacio personal?

- No.

El tipo se paró de puntillas para parecer más alto, poniéndole la cara más cerca de la suya. Pikachu estaba echando chispas amenazadoramente, pero no parecía darse cuenta de ello. Con suerte no sería porque sabía que, si Pikachu llegaba a electrocutarlo, las Jennys se le vendrían encima en masa.

- Te recuperaste rápido: usualmente cuando hago esto ustedes los novatos se acobardan mucho más. Debe ser por la estatura, o tal vez de verdad te crees muy duro. Todos los novatos lo hacen, al menos hasta después de que quedan bien destrozados. Esa es mi especialidad, ¿sabes? Soy el Demoledor de Novatos, y voy a demolerte en el Campo de Hielo.

La forma en como el sujeto lo dijo estaba llena de orgullo, como si le alegrara tener un título como ese.

- Por supuesto, estoy seguro que entiendes por qué me gusta lo que hago. Digo, tú de verdad hiciste pedazos a esa chica del Dragonite, hiciste que se fuera corriendo llena de lágrimas.

Ash miró desafiante al sujeto, usando todo lo que podía en su lenguaje corporal para enviar el mensaje de que no estaba de acuerdo con él.

. Para que conste, no me alegré nada por eso. No me gusta hacer llorar a la gente, a nadie le gusta.

- Oh, pero ahí es donde te equivocas, novato. A muchos les encanta ver a la gente totalmente destrozada, que los pongan en su lugar. Es emocionante, es divertido, y es para lo que vivo.

- Pika. [Bueno, entonces claramente no tienes una vida. Nadie puede tener una vida de solamente hacer miserables a otras personas.]

De nuevo, el sujeto no podía entender a Pikachu, así que no le respondió a su comentario.

- El día de hoy, tú te convertirás en el octogésimo-octavo novato al que voy a demoler, y lo voy a disfrutar. Después de todo, escuché rumores de que tú eres uno de esos novatos de primera fila. Como aquel fenómeno que ganó la Liga Kalos el año pasado con un super Steelix o algo así, o aquel otro de Unova con un Pokémon Psíquico comiéndose su cabeza. Oh sí, será especialmente emocionante verte destrozado como todos los demás, aunque temo que no resulte tan entretenido como espero que lo sea.

- Oh, ¿y eso por qué? – No supo con exactitud por qué hizo la pregunta, y menos por prolongar su exposición a este... individuo, pero ya la había hecho y no podía deshacerla.

- Porque tengo una extraña sospecha de que no eres un novato en absoluto, Ash Ketchum. He vencido a muchos que no son novatos, y esas batallas no me sirven. Son victorias vacías, sin significado para mí como resultaría ganar aquí en Índigo.

Y con eso se echó para atrás, con una sonrisa desafiante mientras salía del baño caminando en reversa.

...

- ¡Y aquí nos encontramos en vivo, en el Campo de Hielo a punto de comenzar un emocionante encuentro de la segunda ronda! ¡En la esquina roja tenemos al novato Ash Ketchum de Pueblo Paleta, y en la esquina verde tenemos a alguien con su propio nombre, pero todos lo conocemos por un título diferente! ¡El Demoledor de Novatos!

Cuando lo nombraron a él recibió vítores, pero cuando nombraron al Demoledor de Novatos lo único que este último recibió fueron fuertes abucheos, aunque entre todo el ruido podía escuchar algunas voces roncas y duras que le echaban porras.

- ¡Aplástalo!

- ¡Hazlo llorar!

- ¡Muéstrale su lugar!

- ¡Vamos, Demoledor!

El susodicho Demoledor parecía solo escuchar los ánimos que había para él, y dramáticamente enviaba besos a la multitud como si estuviese gozando de su vida rodeado por fans que lo adoraban.

- Pika... [Eso es lo que hacen los rudos, ¿verdad? Así es como los llaman en la lucha libre, ¿verdad?]

Ash se encogió de hombros. Probablemente ese era el término correcto, pero más bien parecía un luchador de sumo que un entrenador Pokémon. Si tenía un Pokémon que estuviese más metido en las luchas probablemente tendría una mejor idea de lo que era un "rudo" exactamente.

Aunque hablando de cosas que estaban por ponerse rudas...

- Este será un encuentro de tres contra tres, y el ganador será decidido cuando uno de los dos pierda tres Pokémon. ¡Comiencen!

- ¡Exeggutor, vamos a enseñarle a este niño lo que se siente una buena demolición!

- ¡Yanma, yo te elijo!

Hablando solo por tipos, Ash querría pensar que el resultado estaba cantado. Mientras Yanma zumbaba sobre el campo, supo que tenía el tipo de su lado. Y no solo el tipo, sino la velocidad y movilidad. Un Exeggutor podía ser muchas cosas, pero no era ningún patinador artístico.

Aunque estaba seguro de que el sujeto tendría ideas de cómo sortear eso, él podría manejar cualquier truco que tuviera bajo la manga.

- ¡As Aéreo! – ordenó, y Yanma comenzó la batalla moviéndose velozmente hacia el Exeggutor, que no retrocedió ni un pelo.

- ¡Doble Equipo!

La orden del Demoledor fue dada con calma aunque con autoridad, y Exeggutor se duplicó formando un anillo completo de Exeggutors. La duplicación no se detuvo allí, pues los Exeggutors continuaron formando varios anillos.

Yanma atravesó velozmente una línea completa de ellos antes de desaparecer, y pasó de tajo un tercio de rotación de la segunda línea. Su cuerpo comenzó a brillar de verde al ir atravesando al último de dicha línea.

- ¡Ese Doble Equipo tiene cantidad extensiva, y Yanma los atraviesa a todos en busca del verdadero! ¡Con ayuda de Impulso de Velocidad, caerán rápidamente!

- ¡No cuenten con ello! ¡Comencemos a destrozarlos!

El Demoledor acababa de sacar un par de gafas oscuras de su camiseta para colocárselas en los ojos. Pero no era solo para tratar de verse bien. Exeggutor soltó un bramido en respuesta y cada uno de sus clones desapareció en una luz brillante y cegadora. Todo el campo se vio de repente bañado por un masivo domo de luz demasiado intenso para observarlo fijamente.

- ¡Gahh!

- ¡Yan!

- ¡Pika! [¡¿Qué está ocurriendo?!]

Todo el tiempo, el Demoledor estaba riéndose histéricamente.

- Normalmente, cuando un duplicado de Doble Equipo usa un movimiento, solo es una ilusión, un truco de la luz. Puedes sacar cincuenta Lanzallamas de eso a la vez. Sin embargo, el movimiento Destello es una luz brillante utilizada para cegar a un enemigo o iluminar un área. Parece ser la excepción a la regla general con el Doble Equipo. Debo admitirlo, ese humano es muy ingenioso son sus movimientos.

- ¡No lo digas tan alto, solo le darás satisfacción!

A pesar de sus mejores intentos por reclamarle a su Pokédex quedamente, el Demoledor de Novatos ya tenía lista una carcajada.

- ¡Me alegra tener un nuevo fan, aunque se trate de un simple P.D.A sin botón de silencio!

- ¡No soy un P.D.A.! ¡La luz se está desvaneciendo, ordénale a Yanma que lo destruya!

No necesitó la motivación del Pokédex para hacerlo. La luz ya se dispersaba y aunque todavía tenía que entrecerrar los ojos, ya podía ver un poco el campo. Yanma estaba mareado y desorientado, pero fuera de eso estaba bien.

- ¡Yanma, usa tus ondas sónicas y destruye a los duplicados! ¡La precisión no importará si haces eso!

Yanma comenzó a agitar las alas, acumulando la fuerza de impacto que convertía a su especie en una peste en algunas partes del mundo.

- Oh, esa es realmente una buena idea, novato. ¡Lástima para ti que es un poco demasiado tarde! ¡Exeggutor, usa Cabezazo Zen!

Podría haber sido idea suya al entrecerrar los ojos, pero le pareció que Exeggutor desapareció de la existencia en un borrón y reapareció enfrente de Yanma, antes de impactar su cara brillando de azul contra su Pokémon Insecto. Yanma se estrelló contra el suelo, destruyendo algunos de los duplicados de Exeggutor mientras el agresor volvía a perderse entre la multitud una vez más.

- ¡¿Yanma, te encuentras bien?!

Yanma se esforzó por levantarse de nuevo, resbalando un poco sobre el hielo, pero vibró las alas para dar una respuesta afirmativa.

- ¡Bien, vamos por un Ataque Rápido! – exclamó Ash. Yanma asintió, y su cuerpo brilló de blanco.

- ¡Bomba de Semilla!

Yanma estuvo a punto de salir disparado como vehículo de propulsión, pero en un parpadeo varias semillas comenzaron a llover sobre él desde el campo de duplicados. Le cayeron a Yanma como granizo, aplastándolo contra el hielo con tanta ferocidad como el Cabezazo Zen.

Y todo el tiempo, el Demoledor se reía sonoramente.

...

- No lo entiendo. Yanma es rápido y Exeggutor no. Yanma debería ser capaz de reaccionar más rápido. ¿Acaso ese sujeto está usando un ataque de tipo Psíquico para moverse más rápido?

Ante la pregunta de Misty, Anabel negó con la cabeza. Ellas podrían haberlo visto si ese era el caso. Ni Yanma ni Exeggutor estaban brillando de la manera en que se mostrara un aumento de poder psíquico o agresión.

- Eso es exactamente lo que está pasando, pero no de la manera que ustedes creen.

Iris señaló hacia el campo, lo cual atrajo las miradas confusas de Anabel y Misty, antes que ambas se percataran de ello: el brillo de color púrpura que envolvió todo el campo momentáneamente.

...

- ¡¿Usaste Espacio Trucado?!

Al ver el breve destello púrpura, el Demoledor sonrió ampliamente.

- Sip. ¿Y qué es lo que vas a hacer al respecto, novato?

- ¡Espacio Trucado es un movimiento de tipo Psíquico que distorsiona las velocidades de movimiento de los Pokémon atrapados en su interior! ¡Un Snorlax podría ganarle a un Jolteon en una carrera a pie utilizando Espacio Trucado! ¡Este movimiento tiene a Ash Ketchum contra las cuerdas!

La declaración del comentarista sobre el Espacio Trucado hizo que Ash gruñera de frustración, antes que se le ocurriera una idea. Yanma no le iba a servir en esta batalla, pero sí tenía un Pokémon que podía tomar su lugar.

- ¡Conozco esa mirada! ¡Exeggutor, usa Bloqueo!

Unos lásers rojos salieron disparados de los todavía presentes clones de Exeggutor, obligando a Yanma a continuar la batalla.

Un movimiento similar había sido utilizado por Giovanni contra Yanma anteriormente, pero ahora él tenía el medio para sortearlo.

Ahora él haría lo mismo aquí, especialmente ya que había entrenado de una manera en especial para poder sortear dicha técnica desde entonces. Además serviría para agotar el Espacio Trucado.

- ¡Cabezazo Zen!

- ¡Detectar!

Los ojos de Yanma flashearon de verde mientras Exeggutor aparecía enfrente de él, con todas sus cabezas brillando. Con apenas unos segundos de sobra Yanma flotó fuera de su camino, haciendo que Exeggutor se estrellara contra el hielo sin recibir daño.

- ¡Ahora, Ida y Vuelta!

Espacio Trucado podía afectar drásticamente la velocidad, pero con apenas menos de diez centímetros de distancia entre ellos, eso no importaría demasiado.

Yanma, con un resplandor verde en su cuerpo que no era del mismo tono que el de Impulso de Velocidad, embistió al caído Exeggutor. La selva lluviosa andante gritó de dolor mientras Yanma resplandecía totalmente de verde, antes de tornarse en una luz verde que salió disparada entre Pikachu y él mismo.

Ash levantó la Bola de Parque que Yanma llamaba su casa, y lo succionó adentro con un retorno rápido.

- ¡Hey! ¡¿Qué pasó con mi Bloqueo?!

- ¡No funciona si utilizas Ida y Vuelta o Voltio Cambio! ¡Esta no es la primera vez que alguien intenta ese truco contra Yanma! – declaró Ash, haciendo que el Demoledor de Novatos le gruñera de rabia.

- ¡Y con un contraataque digno de un maestro, Ash Ketchum rompe el bloqueo en el que los puso el Demoledor de Novatos a él y a su Yanma! ¡Pero ahora que se libró de esa atadura, tendrá que enviar a un segundo Pokémon! ¡¿Quién será?!

Ash cogió la Bola Sanadora de su cinturón. – ¡Yo te elijo!

La Bola Sanadora explotó en el aire, liberando a su ocupante y aterrizando en el campo con un choque aplastante, enviando una onda de choque que dispersó unos cuantos Exeggutors falsos. El verdadero se había enderezado, justo a tiempo para mirar a Goodra antes de volver a crear un remolino de duplicados para esconderse una vez más.

- ¡¿Pikapi?! [Ash, ¿estás usando a Goodra ahora? ¡¿Qué pasó con lo de ser estratégico y eso?!]

- Si tu Pikachu se estaba quejando por tu elección de Pokémon, por una vez en la vida estoy de tu lado aquí, humano.

Dejando de lado la división por sus decisiones, era tiempo de darle vuelta a este encuentro.

- ¡Danza de Lluvia!

Goodra lanzó un bramido, y una nube de lluvia espiral se formó encima del campo. El diluvio comenzó, y aunque no se deshizo de los clones Exeggutor, sirvió para exponerlos: las gotas de lluvia los atravesaban, mientras que el verdadero Exeggutor quedaba empapado. También sugería que sus problemas de velocidad acababan de ser resueltos, al menos por ahora.

- Un Pokémon de Agua, ¿eh? ¡Exeggutor, Bomba de Semilla!

¿No sabía qué tipo era Goodra? Bueno, Goodra no se parecía a otros Pokémon de tipo Dragón. Eso podía aprovecharlo.

- ¡Goodra, usa Ola Tóxica!

Emergiendo alrededor de Goodra surgió la gran oleada de desechos tóxicos, que salió disparada velozmente fuera de Goodra por todo el campo. La Bomba de Semilla se vio totalmente consumida por los desechos y continuó hasta golpear a Exeggutor, que se resbaló hacia atrás cayendo sobre el ahora húmedo hielo al impactar el ataque.

Los dos factores dejaron al Pokémon planta en el suelo, y con ello vino la declaración del réferi.

- ¡Exeggutor es incapaz de continuar!

...

Observando tranquilamente la batalla transmitida en vivo hacia su lugar, Giovanni se rio mientras tomaba un sorbo de su copa.

Ketchum de verdad había sacado algo más de su batalla aparte de una medalla que no necesitaba después de todo.

...

El Demoledor de Novatos retornó a Exeggutor en silencio, antes de observar a Goodra con fastidio.

- Un Pokémon raro que nunca antes había visto, eso sí que es molesto. Pero no creas que eso te salvará, chico. ¡He estado demoliendo novatos desde antes que tú nacieras! ¡Voy a aplastarte igual que a tus ochenta y siete predecesores! ¡Ve!

Y con esa declaración, el Demoledor de Novatos envió a su segundo Pokemon. Dicho Pokemon resultó ser un Snorlax, cuyo aterrizaje dejó varias grietas en el hielo.

- Dime algo, novato, otro de los de tu clase utilizó a un Snorlax aquí en la ronda anterior. Se parecía un poco a ti, y le daré crédito por sus ideas. ¡Dicho eso, este Snorlax va a darle una paliza a esa cosa tuya a mi propio estilo!

- ¡Acábalos!

- ¡Demuéstrenles su lugar!

- ¿Y qué clase de Pokémon es ese? ¡Parece una bola de caramelo!

Las burlas llegaban una tras otra entre el público, y la última de ellas dejó a Ash confundido.

- ¿Qué aspecto creen que tienen el caramelo?

- ¡Comiencen la batalla!

No había tiempo para hacer preguntas, pues la batalla volvió a reanudarse.

- ¡Deslízate contra esa cosa!

Al oír la orden del Demoledor, el Snorlax se lanzó velozmente hacia adelante, moviéndose rápido no solo gracias al Espacio Trucado. El agua ayudaba a mover a Snorlax a moverse: la lluvia y el hielo se mezclaban juntos para formar una superficie resbalosa para desplazarse, y su estómago ahora venía directo hacia Goodra, que se tensó ante el inminente choque.

- ¡Venganza!

Goodra asintió, justo cuando la fuerza de la enorme mole impactaba contra él. El golpe lo empujó hacia atrás, dejando un aura roja de tamaño considerable a su alrededor. El Demoledor de Novatos observó el movimiento con desdén.

- ¿Oh, en serio, Venganza? ¡¿Te parezco alguien que caerá con ese truco tan simple?! ¡Snorlax, Bostezo!

Snorlax abrió la boca grande, y liberó una tormenta de burbujas púrpuras contra Goodra. Con cada impacto de una burbuja en Goodra su postura se tambaleaba, pero entonces una onda recorría su cuerpo y le daba un choque para despertarlo, como una taza de café recién hecho. El aura roja de Venganza creció un poco más con cada chispazo tras casi quedarse dormido. No era un incremento muy grande al poder general del ataque, pero serviría para acumularlo.

El Demoledor miró arriba hacia la nube de lluvia que todavía estaba cayendo sobre el campo de hielo y finalmente entendió. – Hidratación. ¡Mierda!

- ¡Vamos! – Entretanto, Ash no tenía ningún problema con la Hidratación de Goodra, y con la carga extra agregada, Goodra disparó un poderoso rayo concentrado para dañar a Snorlax.

Snorlax recibió el rayo de frente, deslizándose por el hielo como un disco de curling. El golpe fue sólido, pero la batalla estaba muy lejos de haber terminado.

- ¡Acerquémonos mientras todavía queda algo del Espacio Trucado! ¡Snorlax, Puño Trueno!

Snorlax asintió antes de salir disparado al frente, apareciendo delante de Goodra como si acabara de utilizar una técnica de paso veloz. Con un par de puños electrificados, Snorlax comenzó a bombardear a Goodra con una serie de puñetazos veloces que eran tan rápidos, al menos bajo el efecto del Espacio Trucado, que Ash no era capaz de seguirles el paso.

- ¡El Espacio Trucado se está agotando, pero el Demoledor de Novatos está aprovechándolo a todo lo que puede con una serie de golpes devastadores! ¡Devastadores, al menos en papel!

El Demoledor de Novatos miró hacia la cabina del comentarista en shock.

- ¿En papel? ¡¿Cómo que en papel?! ¡¿Alguna vez te ha golpeado un Snorlax superveloz?! ¡Es muy doloroso, y es una contradicción a las leyes de la naturaleza al mismo tiempo! ¡Además, esa cosa es un Pokémon de Agua, así que seguramente tiene que estar sintiendo esos golpes!

- ¿Estás seguro de eso? – preguntó Ash.

El Demoledor lo miró con total confusión, antes de volver la mirada otra vez hacia Goodra y Snorlax. El Espacio Trucado ya había desaparecido, así que los Puños Trueno estaban empezando a ralentizarse. Goodra ahora podía moverse hacia los lados para evitar los golpes, y encima de todo no parecía estar muy dañado por el intercambio.

- ¡¿Pero qué mierdas, ese no es su tipo?!

- Te lo voy a mostrar: ¡Goodra, usa Pulso Dragón!

Goodra acercó su cabeza hacia la de Snorlax, y empezó a formar el ataque de tipo Dragón. Casi pudo escuchar a Snorlax maldecir algo cuando el Pulso Dragón le dio en toda la cara.

Snorlax salió disparado por todo el campo, dejando un enorme hueco de grietas a causa de la caída.

- ¡Ese fue un golpe crítico si alguna vez vi uno! No me imagino cómo hará Snorlax para... ¡oh cielos!

Snorlax se las había logrado para levantarse después del golpe, volviendo a erguirse con dificultad. Su mirada de fastidio solo podía compararse con la del Demoledor.

- Inteligente, chico, muy inteligente. Pero ahora ya tengo tu número, y tu llovizna está a punto de terminarse. ¡Voy a hacer pedazos y a noquear a ese Dragón tuyo! ¡Disfruta de los últimos momentos de lluvia que te quedan!

Ash le devolvió la mirada desafiante al enfadado Demoledor. – ¡Y claro que lo haré! ¡Goodra, usa Trueno!

El cuerpo de Goodra se vio rodeado por un resplandor amarillo que salió disparado hacia el cielo. Goodra entonces bajó violentamente la mano izquierda, haciendo caer un rayo directo sobre Snorlax. El ataque eléctrico le dio un gran choque al ya empapado Snorlax para lo que Ash estaba seguro sería un daño masivo.

Entretanto, Pikachu asintió con aprobación. Les había llevado un poco de tiempo hacer que Goodra lograra ataques eléctricos en los últimos meses, luego de que lo intentaron anteriormente para Goomy hacía tanto tiempo. Originalmente había sido Atactrueno, pero Trueno era un buen movimiento para aprender "por accidente".

Pikachu y Goodra habían hecho bastante trabajo, y ciertamente dio sus frutos al ver como un Snorlax que echaba humo y se desplomaba en el campo con un golpe seco, al tiempo que desaparecía la última nube de lluvia.

- ¡Snorlax es incapaz de continuar!

- ¡Y con eso el Demoledor de Novatos está siendo demolido por este novato! ¡La ventaja que nuestro competidor veterano tenía al inicio se ha erosionado gracias al factor sorpresa del Goodra de Ash! ¿Podrá darle la vuelta a su favor?

El Demoledor de Novatos sentía temblar su cuerpo, y su mano no pudo quedarse quieta mientras retornaba a Snorlax. El temblor continuó, escalándose más y más, hasta que explotó.

- ¡Él! ¡Nunca! ¡Me! ¡Demolerá! ¡YO! ¡SOY! ¡EL DEMOLEDOR! ¡DE NOVATOS! ¡Yo soy quien lo debe destrozar a él, no al revés! ¡Ningún novato jamás me derrotará! ¡No, esperen, eso no va a suceder de ninguna manera! ¡Él no es ningún novato, es un farsante! ¡FALSO! ¡Su alma no está verde para aplastarse! ¡Voy a destrozar a ese farsante! ¡Ya he vencido antes a los aburridos, pero, oh no, por una vez voy a disfrutar de esto! ¡Voy a liquidar a ese bastardo novato falso!

Sus extremidades se agitaban, todo su cuerpo se movía constantemente mientras saltaba, gruñía y lanzaba mordiscos al aire. Casi era divertido, aunque le hacía querer alejarse un poco más al ver cómo se descontrolaba. Goodra también retrocedió ligeramente.

- Pikapi. [El hecho de que no está exactamente equivocado sobre lo de ser novato hace que esto sea un poco raro, ¿o es idea mía? El hecho de que en realidad tiene razón sobre eso hace que esto sea una experiencia diferente, aunque no estoy seguro de cómo exactamente.]

Y también tenía razón al llamarlo bastardo, pero eso no era ni aquí ni allá. Y su uso de la palabra "bastardo" no era exactamente en el contexto correcto, por precisa que fuese la palabra. Justo ahora parecía que estaba por hacer que Jessie y James parecieran cuerdos.

- Participante verde, si acaba de sufrir una completa pérdida de sus facultades mentales será descalificado del encuentro. Bajo las reglas de la octogésima quinta Conferencia Plateada...

- ¡No estoy tratando de arrancarle la careta al impostor a mordiscos, así que estoy perfectamente cuerdo! ¡Lo único que voy a hacer es demolerlo hasta convertirlo en polvo, pero con mucho más deleite de lo que jamás he demolido a nadie!

Podría tal vez ser la imaginación de Ash, pero el juez casi parecía listo para alzar una bandera, como si quisiera darle una amonestación no oficial por su cuestionable cordura.

- ¡Wigglytuff, hora de barrerlo totalmente!

Su último Pokémon salió al campo, aterrizando con menos impacto mientras observaba desafiante a Goodra.

- ¡Wigglytuff, el Pokémon globo y la evolución final de Jigglypuff! Un tipo Normal y Hada, el pelaje de este Pokémon es bastante suave. En regiones más frías algunos duermen con ellos para permanecer calientes durante las noches frías. Yo sin embargo no te recomiendo dormir con este, ya que podría estrangularte mientras duermes con sus sorprendentemente flexibles orejas.

En efecto, el Wigglytuff se veía bastante más aterrador de lo usual. Les estaba echando ojos de pistola, con una capa púrpura bajo sus ojos y una sonrisa amenazadora. Ya antes había visto a un Wigglytuff como este. Y en Índigo nada menos, aunque no fue en un combate de la Liga.

- Pikakaan. [De acuerdo, ya lo olfatee. Estoy plenamente seguro de que no es ese mismo Wigglytuff raro que tenía Harley, pero podrían ser parientes. Tal vez un primo del árbol genealógico de "Wigglytuffs raros".]

Goodra miró desafiante al Pokémon, y Ash se preguntó si debería mantener a Goodra afuera para enfrentar a Wigglytuff. Hasta ahora había hecho un buen trabajo, y le ayudaría a esconder un Pokémon. Y ya que no había traído a un Tauros el día de hoy, cualquiera de los otros Pokémon que había traído consigo seguirían siendo desconocidos en el torneo, y con Yanma estando tan cansado como estaba, no se sentía con muchas ganas de enviarlo de nuevo a menos que de verdad tuviera que hacerlo.

Pero al mismo tiempo, no estaba seguro de cómo resultaría este encuentro para Goodra.

- Goodra, ¿quieres seguir o tomar un respiro? ¡Tengo una idea de cómo manejar a este, y pero en caso de que falle dependerá de ti y de Yanma para terminar el trabajo con algo de tiempo para recuperarte!

Goodra asintió. – ¡Goo! [Sí, creo que eso me gustaría.]

Ash parpadeó, sorprendido de que había entendido las palabras que dijo entonces. Aun así, retornó a Goodra con una sonrisa que rápidamente removió la sorpresa de su rostro.

- ¡Y para concluir esta batalla, Ash Ketchum está cambiando de Pokémon!

- ¡Eso no funcionará, impostor! ¡Wigglytuff devastará lo que sea que le envíes totalmente!

Aparte de Yanma y Goodra, había traído otros cuatro Pokémon consigo. Pikachu era obvio, y también tenía a Squirtle, Exeggutor y Ambipom. Podía ver en su cabeza cómo cualquiera de ellos podía hacerlo, pero iba a asegurarse de obtener la victoria sin ninguna derrota a su nombre el día de hoy (como se lo merecía que se la infligieran a este abusón), y solo había un Pokémon que podía utilizar.

Uno que podría tomar una página del libro de recetas de cocina de May sobre como derrotar a Wigglytuffs siniestros (y con un 94% menos de probabilidades de recrear la sorpresa púrpura de May en el proceso).

- ¡Ambipom, yo te elijo!

Con eso, envió a su Pokémon final, y Ambipom hizo un giro en el aire al ser liberada antes de aterrizar resbalando ligeramente sobre sus dos colas.

- ¡Comiencen!

- ¡Tuff!

Y con la señal de inicio Wigglytuff comenzó a flotar, levitando sobre el campo como un globo de desfile que planeaba comerse a alguien. O al menos, eso era lo que denotaba su expresión.

- ¡Buena suerte golpeando a un Pokémon globo, falso novato! ¡Ahora prepárate para derretirte! ¡Wigglytuff, usa Llamarada!

Wigglytuff abrió la boca grande, revelando una gran bola de fuego en su interior. Acto seguido escupió las llamas hacia abajo, saliendo impulsado hacia el aire por la expulsión de una poderosa ráfaga caliente.

- ¡Desvíalo con Contraescudo!

- ¿Contra qué?

Ambipom respondió rápidamente a la pregunta del Demoledor saltando al aire y girando en una ráfaga de Rapidez. Las estrellas veloces colisionaron contra la Llamarada, destruyéndola en chispas inofensivas bien lejos del hielo que estaban intentando derretir.

La mona aterrizó de vuelta en el hielo mientras Wigglytuff permanecía flotando sobre las estrellas restantes sin recibir daño, volviendo a bajarse luego de haber subido por el empuje de la Llamarada.

- ¡Y me imagino que eso era un Contraescudo! ¡Nuestro casi triunfante novato logra prevenir un derretimiento del hielo potencialmente catastrófico al tiempo que nos da un gran espectáculo! ¡¿Tal vez tenga algún interés en Concursos Pokémon?!

No en realidad, señor comentarista, pero si Ambipom viera uno y quisiera participar, y si no estaban haciendo nada que fuera de urgencia, él con gusto entraría.

- ¡Todavía no triunfa, maldita sea! ¡Wigglytuff, usa Canto!

Wigglytuff tomó un profundo respiro, antes de escupir varias notas musicales brillantes.

- ¡Bloquéalas con Garra de Sombra!

Ambipom empujó sus dos colas al frente, brillando con energía sombría que se expandía un poco más lejos de lo usual. Las sombras hinchadas recibieron las notas de frente, haciendo que explotaran sin impactarle.

El Demoledor se puso a gruñirle, y Wigglytuff tomó la señal para disparar más notas de Canto hacia Ambipom. Esta vez, ella extendió las Garras de Sombra en sus colas más lejos, y las usó para atravesarlas antes que se le acercaran demasiado.

- ¡¿Hemos llegado a un punto muerto, gente?! ¡Wigglytuff está fuera del rango de Ambipom, y a su vez Ambipom puede parar cualquiera de los ataques de Wigglytuff!

- No nos descarten todavía. ¡Ni siquiera hemos empezado a atacar! ¡Usa Rapidez y apunta arriba de Wigglytuff!

Ambipom quizás no fuera su Pokémon entonces, pero sí recordaba cómo May había acabado a su propio Wigglytuff que te hacía morderte las uñas. Con un solo barrido de sus colas, disparó dos ráfagas distintivas de Rapidez, que se curvaron a su alrededor e impactaron una contra la otra justo detrás de Wigglytuff.

La explosión resultante mandó a Wigglytuff a precipitarse directo hacia el hielo, mientras agitaba sus extremidades desesperadamente. A su vez, el Demoledor no pudo hacer otra cosa que mirar lo que acababa de suceder, totalmente incrédulo.

- ¡Ahora, salta detrás de Wigglytuff y golpéalo sin piedad!

Ambipom asintió, y con sus colas brillando con Doble Golpe se impulsó hacia arriba, justo por encima de donde Wigglytuff venía cayendo, para luego darle un Doble Golpe como un martillo a la amenaza rosa.

Wigglytuff comenzó a descender todavía más rápido hacia el hielo, y luego rebotó como un balón al tocar el suelo. Esta vez, con un Puño Incremento Ambipom golpeó de nuevo, impulsándolos de nuevo por el impacto.

Sin embargo, justo cuando Ambipom volvía a elevarse sobre el punto de impacto, Wigglytuff rebotó en el hielo, y ambos empezaron a rebotar o a caer una contra el otro, haciendo una repetición del espectáculo.

Dos golpes más de Puño Incremento, otro rebote de Wigglytuff en el hielo. Lo mismo siguió ocurriendo una y otra vez en una acción de movimiento perpetuo y daño constante, hasta que llegó el quinto, cuando pudo ver las llamas empezando a prenderse en la boca de Wigglytuff.

- ¡Acabemos con esto de un solo golpe final!

Su grito llegó a oídos de Ambipom, que asintió mientras los puños de sus colas comenzaban a brillar de azul intenso.

- ¡Ahora, antes que Wigglytuff pueda derretir el hielo y salir de nuestra trampa con física en el agua! ¡Ambipom, termina esto con Golpe Centrado!

Con toda la fuerza que pudo reunir, Ambipom impactó a Wigglytuff con dos Golpes Centrados simultáneos. Ante el impacto el campo de hielo estalló en docenas de bloques de hielo flotantes, y docenas de pequeñas olas de impacto. Ella rebotó con el impacto, aterrizando en un bloque de hielo más grande a pocos metros de donde se había estrellado Wigglytuff a través del hielo, lista para continuar la pelea si era necesario.

Sin embargo, tras unos pocos momentos, las olas trajeron a Wigglytuff rodando, revelando unos ojos mareados, y un Pokémon derrotado. El único sonido que pudo escuchar fue un grito ahogado del Demoledor.

- ¡Wigglytuff es incapaz de continuar! ¡El ganador del encuentro es Ash Ketchum de Pueblo Paleta!

La multitud estalló en vítores de gran alegría positiva, aunque la gente que había estado echándole porras ruidosas al Demoledor se encontraba notablemente silenciosa.

Al principio al menos.

- ¡¿De verdad es un novato?!

- ¡Ningún novato había sido capaz de ganarle al Demoledor! ¡Debe ser algún veterano disfrazado!

- ¡¿De verdad tiene quince años?!

- ¡Es una planta! ¡Planta!

Sin embargo, seguían siendo una minoría muy escandalosa, comparado con el resto del público que seguía vitoreándolo por su triunfo.

- ¡Después de aprovechar hábilmente las fortalezas de Wigglytuff y usarlas a su favor, Ash Ketchum obtiene una arrolladora victoria en la segunda ronda contra el infame Demoledor de Novatos! ¡Es el primer novato que ha logrado demoler al Demoledor en sus más de dos décadas de experiencia en lo que hace! ¡Su racha ahora ha terminado con la perfecta victoria de Ash Ketchum de Pueblo Paleta!

Ash tomó una expresión sombría. Si hubiese sido perfecta Yanma no hubiera recibido todo ese daño. Pikachu le tocó el cuello, mientras Ambipom rebotaba de un bloque de hielo a otro para venir y darle un abrazo.

- Pikapi. [Perseguir un récord perfecto no lleva a ninguna parte, solo acepta el cumplido. Y si no, al menos disfruta del escenario.]

Pikachu señaló al Demoledor, que se había puesto completamente pálido y parecía, hasta donde Ash podía ver, haberse desmayado estando de pie.

Al menos no parecía oír o ver nada de lo que pasaba fuera de él, incluyendo al todavía derrotado Wigglytuff que seguía flotando en lo que quedaba del campo de hielo.

- Médicos, por favor vengan al campo. El retador verde parece haber dejado de responder.

(--0--)

En otra parte, observando vía streaming por un teléfono...

Estaba mirando con cierto nivel de asombro y diversión como el enorme desgraciado era levantado en una camilla, y sacado de la arena por un equipo de asistentes, dejando a su medio hermano a solas con su victoria.

Se le veía bastante alegre en sus abrazos de celebración con sus Pokémon. Sin duda él apreciaba a la gente abierta. Así como también apreciaría una mejor resolución que la del teléfono de Hilda, pero eso era algo inevitable.

- Bueno, eso no es lo que se esperaría de la apariencia de un retador de la Liga Pokémon. Hasta los mayores generalmente se ven algo atractivos, aunque sea solo por afuera. Él ni siquiera tenía eso. ¿Cómo le llama la gente a los de su clase, un fracasado?

Se rio ante la visión despectiva de Hilda sobre el retador al cual Ash Ketchum acababa de vencer.

- Es un punto aislado, estadísticamente. Descártalo y la información se correlaciona apropiadamente con lo que se esperaría que fuera. Aunque por todo lo raro que es, hay algo sobre él que me intriga.

- ¿El porqué todavía existe el "Demoledor de Novatos"?

Negó con la cabeza ante el gruñido de Hilda.

- No, la maldad sigue siendo muy buena para persistir. Allí no hay ningún misterio. No, simplemente atrajo mi atención hacia una ecuación sin resolver que ha estado enfrente de mí todo este tiempo, pero no me había dado cuenta. Ni tú tampoco, para que lo sepas.

- ¿Una ecuación que ninguno de nosotros había notado?

Levantó entonces un dedo, y luego un segundo.

- Este es más o menos el segundo año que hemos visto de lo que son capaces mis hermanos. Un número de ellos han desafiado gimnasios y ligas como parte de eso. Por mucho que me duela decirlo, ese autoproclamado "Demoledor de Novatos" tenía razón. Ash realmente no parecía un novato, ¿verdad?

Hilda lo miró como si lo que decía no tuviera sentido.

- Vi a sus Pokémon en acción en Fuchsia. Esos no eran veteranos en las batallas. A menos que haya empezado totalmente desde cero, no puedo verlo. Incluso los entrenadores que empiezan con nuevos equipos generalmente mantienen al menos a un Pokémon más experimentado con ellos. ¿Estás seguro de que no le estás tomando las palabras a un patán furioso y chiflado con demasiada seriedad? Vermell era más habilidoso en sus batallas, y Ash claramente cometió errores. ¿Acaso eso convierte a Vermell en un novato falso también?

Se encogió de hombros.

- No puedo explicarlo; tal vez solo sea todas las demás rarezas que lo rodean. Crear Cristales-Z, y esas pequeñas y molestas locuras que sientes de verlo cuando tiene sus batallas, y que no vi en ninguno de nuestros demás hermanos y hermanas. Hay más en él de lo que sabemos.

Hilda le dio una mirada de reojo.

- ¿Así que quieres que vuelva a espiarlo?

- Ciertamente. Piensa en ello como la oportunidad de probar que me equivoco, o de ver lo que yo estoy viendo.

Esta historia continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro