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Capítulo 31

Pikachu volvió lentamente en sí al abrir los ojos y saltó de inmediato sobre sus cuatro patas, en posición defensiva.

"¿Dónde?! ¿Dónde está ella?! ¿A dónde fueron?!" gritó. "¿Dónde está Eevee?" Miró detrás de él.

Ella se había ido.

"¡¿Eevee?! ¡Desapareció!" exclamó desesperado antes de correr hacia Serena, quien abrió sus brazos y lo atrapó cuando él saltó hacia ellos.

"¡Pikachu! ¿Estás bien?" le preguntó la chica, preocupada.

"Pika Pika! ¡Pika Pikachu Pika! (¡Eevee! ¡No está por ningún lado!)" No podía dejar de repetir su nombre, una y otra vez, hasta que Serena lo miró con gravedad.

"Se escaparon, Pikachu... y se llevaron a Eevee con ellos. Solo puedo esperar que esté bien..." dijo, sintiéndose destrozada.

"Vamos. ¡Vamos a buscar al resto del equipo!" Se levantó, decidida. "Vamos a recuperarla."

Pikachu la miró con ojos momentáneamente brillantes antes de volverse igualmente decidido. "¡Pika! (¡Leíste mi mente!)"

Pancham y Braixen lanzaron gritos enérgicos también, antes de que los cuatro dejaran el bosque.

...

"Abuela Nymphia", dijo Eevee después de que su abuela terminó la historia. "Tengo que ver a mi papá."

"Lo sé. Debes volver a Kanto, querida", dijo la reina.

"El problema es... que nunca supe que era de Kanto."

"Una vez lo supiste, hace mucho tiempo, y debes regresar. No puedo decir que eres parte de alguna profecía legendaria... pero ahora mismo, las Eeveeluciones, y tal vez los Pokémon en general, te necesitan, Eevee", explicó Nymphia.

Eevee se rió, frunciendo el ceño. "¿Ellos necesitan a una pequeña Eevee?"

"Serás más que eso, dependiendo del camino que elijas", dijo Sylveon. "Me temo que no puedo decir más, ya que no está en mi conocimiento..."

"¿No puedes decirme nada sobre... eh, mi pérdida de memoria?" preguntó la pequeña bola de pelo, para asegurarse.

"¡Nope! Lo siento, querida", respondió Sylveon.

"Maldición. ¿Cómo voy a saber sobre mi pasado?" Frunció el ceño.

"Poco a poco, recordarás tu pasado, eso creo", añadió la Reina Nymphia, como si leyera su mente. "Empezando desde el principio... hasta el punto más oscuro."

Eevee se quedó en silencio por un minuto. "No sé. Tengo que pensar bien esto. ¿Irme a Kanto? Antes no tendría ningún problema. Pero ahora... tengo una familia, Abuela. No puedo simplemente irme."

"Una chica humana cuida de mí. Y sus Pokémon me tratan como los hermanos que nunca tuve. Los otros Pokémon también son muy amables. Y está Pikachu... tuvimos momentos difíciles, pero ya me siento muy cercana a él."

"¿Quieres decir que...?"

"No puedo simplemente irme, Abuela. No puedo ir a Kanto."

La Sylveon brillante la miró antes de bajar la vista y suspirar. "Hmm, ya veo"

"¡P-pero no quiero ser grosera, o-o nada de eso! ¡Solo quiero cumplir mis sueños!" La pequeña Eevee entró en pánico ante la idea de herir los sentimientos de su abuela.

"Yo... quiero bailar y hacer presentaciones con Serena... Quiero ver a Pikachu luchar más... tal vez en la Liga Kalos! Y quiero dejar de ser tan tímida..." Bajó la cabeza, jugueteando con sus patas.

"Hmm, ya veo", repitió la monarca femenina.

"Solo quiero ver a todos a mi alrededor crecer y tener éxito! Shynee dice que es mi prima... ¿es verdad? ¡Se evolucionó en una hermosa Glaceon! Bunnelby me hace sentir protegida, como un hermano mayor. Y Pikachu realmente quiere estar conmigo..."

Sonrió felizmente. "Me siento muy amada, Abuela."

"Hmm, ya veo. No quieres dejar a tus amigos."

"Exactamente", respondió la otra.

"Entonces, ¿por qué no te vas con ellos?" le preguntó, haciendo que Eevee quedara completamente asombrada.

"¡¿Qué-! ¿Con todos ellos?!"

"No, solo con uno~", Sylveon se rió. "O tal vez dos, quién sabe."

"¿Cómo voy a llegar hasta allá?" preguntó.

"Deja eso en mis manos"

"Te daré hoy. Mañana te recogeremos, ¿está bien? Queremos que te vayas lo antes posible", declaró la Sylveon brillante.

"Hmm... está bien", aceptó Eevee.

"Ahora déjame llevarte a casa antes de que tu familia se vuelva loca."

...

Mientras tanto, en el Centro Pokémon...

"¡Muy bien! ¿Todos están listos?" La voz de Ash resonó. Todos los Pokémon presentes gritaron.

"¡Pika! (¡Vamos!)" El fiel compañero de Ash trepó a su hombro.

"¡Vamos a buscar a la Eevee de Serena!" gritó el entrenador Pokémon.

"¡Sí!" Clemont y Bonnie vitorearon al unísono.

Serena lucía un poco nerviosa. "Espero que podamos encontrarla antes de que sea demasiado tarde..." murmuró, mirando hacia abajo.

Ash puso una mano en su hombro. "No te preocupes, ¡la encontraremos pase lo que pase! ¡Te lo prometo!" Sonrió.

Ella se sonrojó antes de sonreír también.

"Ahora me siento más confiada~ ¡Te encontraremos, Eevee, y te traeremos de vuelta!" exclamó antes de notar una manchita marrón saltando hacia ella.

"¿¡EH?!" exclamaron todos, Pikachu probablemente el más fuerte. "¡¿Eevee?!"

"V-vaya... eso fue más rápido de lo esperado..." Ash se rascó la nuca, como siempre que se sentía avergonzado. Serena suspiró aliviada.

"¡Pi Pikachu! (¡Eevee! ¡Estás bien!)" chirrió el Pikachu de Ash mientras corría hacia ella y la abrazaba.

Eevee rió felizmente. "Sí... solo me fui por una hora."

"Eso ya es suficiente" susurró.

Luego volvió a saltar sobre sus patas. "¿Te lastimaron?! ¿Estás bien?! ¿Quiénes son ellos?!" preguntó una pregunta tras otra.

Eevee le puso una pata sobre la boca para callarlo. "Tranquilo. Te contaré todo en otro lugar", explicó. "¡Vamos!" Se fue sigilosamente y le hizo señas para que la siguiera, lo cual hizo.

...

"¡Ok! ¡¿Qué demonios está pasando ahora?!" exclamó Pikachu.

Antes de despedirla, la Reina Nymphia le había dicho a Eevee que toda la misión debía ser un secreto, así que no debía contárselo a nadie.

Pero Eevee sabía que Pikachu no era 'cualquiera', entonces...

"Resulta que todas las misteriosas Piedras Evolutivas que estuve recibiendo eran parte de un plan ultrasecreto.

Una de las primeras preguntas que Eevee le había hecho al Sylveon brillante fue: "¿Por qué demonios me estuviste mandando todas esas Piedras Evolutivas de maneras tan raras, y al final ninguna funcionó en mí?"

"Estaban tratando de 'demostrar un punto', ver si yo era inmune a esas rocas, porque solo la realeza de los Eevee es inmune a evolucionar contra su voluntad", explicó Eevee al ratón eléctrico. "Y querían asegurarse de que yo era la 'princesa perdida' y esas cosas."

"E-espera un minuto. ¿Realeza de Eevee..? ¿Estás... estás hablando en serio?"

"Sí, soy parte de la realeza de los Eevee."

"Ok... te dejo que me lo expliques." respondió encogiéndose de hombros.

Ella continuó, "Resulta que las Eeveeluciones tienen reyes y reinas. También resulta que estoy en la línea de sucesión al trono. Y también resulta que debería estar en Kanto ahora mismo, pero por alguna razón estoy en Kalos."

El corazón de Pikachu empezó a latir más rápido. "¿K-Kanto?"

"Sí... aparentemente nací ahí. La abuela me contó que hay un Bosque de Eeveeluciones allí, ¡donde solo hay Eevees evolucionados! ¿No es genial?" Eevee divagó, sin darse cuenta.

"S-sí... genial."

"¿Estás bien?" preguntó ella, preocupada.

"¿Debería decirle realmente...? ¡No, qué tonto! ¡Si justo hoy le dije que quería empezar de nuevo y olvidarme de todas esas tonterías!" pensó.

Entonces habló, sonriendo con incertidumbre: "Sí, solo estoy un poco sorprendido. Sabes, Ash y yo somos de Kanto."

"Oh, no lo sabía. Aunque ahora que lo mencionás, tenés un acento medio raro." El pequeño Eevee de pelaje marrón se rió.

"¡¿Qué?! ¿¿Acento??"

"Sí, pero no te preocupes... me parece lindo." Sonrió dulcemente, con las mejillas ligeramente sonrojadas.

Él la miró por un momento antes de bajar la vista, y sus propias mejillas rojas se pusieron más coloradas. "Ah gracias, Eevee."

"Ah, perdón, ¿estoy haciendo que esto sea raro...?" Sonrió con torpeza.

Pikachu se rió alegremente. "No, no. Yo también creo que tu acento kalosiano es lindo."

"¡Aaah! ¿Por qué estamos hablando de acentos otra vez?!" gritó una voz que no pertenecía a ninguno de los dos pequeños.

"¡Shh! ¡Callate, no se supone que sepan que los estamos espiando!"

Pikachu saltó hacia el picaporte y abrió la puerta de la habitación oscura, donde estaban los cuatro espías escuchando a escondidas.

"Ups" Braixen rió nerviosa.

"¿Puedo preguntar qué estaban haciendo vos, Chespin, Pancham y Talonflame?" preguntó el ratón eléctrico.

"Ehm..." Chespin jugueteó con sus dedos, y se sonrojó inmediatamente al ver a Eevee.

"¡No teníamos otra opción, ¿entendés?! ¡Estamos preocupados por vos! ¡Y todo lo que hacés es compartir secretos y reírte en una habitación oscura!" exclamó Pancham enojado.

"Me siento excluida," agregó Braixen, con una pequeña lágrima en el ojo izquierdo.

Pikachu se volvió hacia el Pokémon pájaro. "¿...Y vos, Talonflame?"

"Ah. Estaba aburrida," respondió simplemente.

Pikachu suspiró, algo exasperado por las payasadas de sus amigos. "¿Debería dejarlos entrar...?"

"Bueno, tenía algo que discutir con vos," dijo Eevee, más calmada.

Entonces, los cuatro Pokémon se unieron y Eevee empezó a explicar las partes que no habían oído mientras espiaban.

"Hay una razón por la que no quería contarles esto... es muy secreto. Esta organización... tal vez sea peligrosa, incluso. No quiero que se involucren. Es algo bastante personal.

"Es un viaje de autodescubrimiento... o más específicamente, de redescubrimiento." dijo. "Tengo que encontrar mi hogar de la infancia, mis padres, mis viejos amigos y defender mi herencia."

"Yo realmente pensé que solo eras una Eevee..." Chespin se llevó una mano a la cabeza, sudando.

"Yo también lo pensé. Pero la vida no es tan simple... en fin, mi viejo hogar... está en Kanto," respondió Eevee.

"¡Guau, eso está re lejos!" Talonflame se sorprendió.

"No me tengo que preocupar por el viaje ya que la organización lo va a cubrir, pero... estaba pensando en llevar a uno de ustedes conmigo," dijo el Pokémon marrón.

Los ojos de todos brillaron de asombro.

"¡Una nueva aventura!"

"¡Ir a otra región!"

"Qué emocionante..."

Pikachu solo miraba de un lado al otro, nervioso. "¿Cuál es el propósito de esto...? ¿Me llevará con ella?" pensó.

Después de que la emoción inicial se calmara, Braixen, siendo la más madura, señaló: "Por más emocionante que sea ir a otra región, no creo que debamos tomarlo como si fuera unas vacaciones en este caso."

"Esto es algo serio para Eevee, y probablemente haya peligro en el camino," explicó.

Eevee asintió. "Es muy probable..."

"Además, acuérdense que el nuevo espectáculo de Serena está por llegar, y Pancham y yo no podemos darnos el lujo de relajarnos, especialmente si todavía no decidiste si vas a participar..." agregó, mordiéndose el labio.

Pancham, que antes estaba lleno de emoción, se desinfló al escuchar esto. "Sí... tenés razón. Debemos practicar mucho. Además, no estoy seguro de que Braixen y yo hubiéramos sido muy buenos compañeros para un plan tan importante."

Eevee asintió, con una sonrisa positiva en su rostro. "Está bien."

La voz de Chespin resonó en la habitación: "Entonces, me imagino que estás pensando, '¿Y Chespin? ¿Me acompañará en esta gran aventura?' Yo respondería, 'Sí, claro, mi querida dama." ...Pero Kanto está... tan, tan lejos. Es cansador, ¿sabés? Yo soy más un tipo de chico vago."

Pancham solo lo calló con la mano, irritado. "Él no va a ir."

Chespin rápidamente le quitó la mano. "P-pero, tal vez la próxima vez, si es a un lugar más cerca, lo haré."

"El siguiente..." murmuró Pancham. "¿Y vos, Talon?"

"¿Yo? No sé... ¿realmente sería de mucha ayuda? O sea, soy un tipo Volador," reflexionó. "Pero después, Ash podría necesitarme, y con su pequeño amigo Pikachu yéndose por una semana, especialmente," agregó con una sonrisa pícara.

"¡¿Quién dijo que el ratón se va?!" gritó Chespin. "Vamos, sabés que donde va Eevee, Pikachu siempre está cerca," Braixen sonrió.

"¿Eh? ¿Yo?" Pikachu inclinó la cabeza.

Las mejillas de Chespin se inflaron. "¡No te hagas el sorprendido! Sabías que iba a ser vos."

Pancham lo volvió a callar, suspirando, irritado, antes de decir: "Que tengas un buen viaje"

"Eevee, ¿realmente querés que vaya yo?" preguntó el Pokémon amarillo, sonrojado ligeramente.

"¡Por supuesto!" respondió con esa sonrisa tierna que siempre tiene, luego le susurró: "En realidad, fuiste mi primera opción desde el principio."

Pikachu sonrió tímidamente. "Bueno, supongo que voy a volver a Kanto una Liga antes." le guiñó el ojo al grupo.




Continuará...

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