Después de haber conocido y ayudado a una chica llamada Keiri, ahora Damian va en compañía de ella. Y ambos están tratando de hacerse más fuertes, buscando entrenadores hábiles a los cuales enfrentar, en el Pueblo Ataifor, pero sin encontrar a ninguno. 

-¿Que tal difícil puede ser encontrar entrenadores que quieran una batalla?- Dice Damian algo aburrido, y bastante cansado. 

- *Jadeo* Tal ves deberíamos tomarnos un descanso- Dice Keiri. 

Damian se desploma en el suelo y hace que Sprigatito caiga de su cabeza. 

-Si, parece que ya hace falta- Comenta Keiri quien también está cansada. 

Ambos chicos se sientan en una banca, en al que al fin puede descansar. 

-Se siente muy bien descansar después de caminar por tanto tiempo- Dice Damian mientras acaricia a Sprigatito, que está dormida en el regazo de Damian. 

-Ni que lo digas. Iré a traer algo de helado, regreso en un momento- Dice Keiri mientras se aleja. 

Damian se relaja un poco, y empieza a contemplar los alrededores del pueblo. 

-Vaya, el Pueblo Ataifor es bastante agradable, fue buena idea haber parado aquí- Se dice Damian así mismo mientras continua relajado. 

En un momento Damian mira al lado suyo, y se lleva un gran susto, al ver un Pokémon que hace unos segundos no estaba ahí. 

-*Suspiro* Solo es un Ralts, pero, ¿No se supone que ellos no aparecen por está zona?- Dice Damian confundido. 

El grito de Damian había hecho que Sprigatito se despierte, y cuando se percata de la precensia de Ralts, comienza a mirar al Pokémon con curiosidad. Sprigatito se acerca a Ralts, y Ralts responde tocándole la nariz a Sprigatito. Esta ve que Ralts no es una amenaza, y jugando sube sus patas sobre la cabeza de Ralts. 

-Parece que ustedes dos se están llevando bien-. 

De repente, llega Keiri al lugar, y se sorprende al ver a Ralts. 

-¡Wow! Un Ralts ¿Cómo llego aquí? Por lo que se no hay Ralts en esta zona 

-Eso mismo me pregunté, tal ves sea de algún entrenador. Sería genial que pudiera decirnos ella misma- Comenta Damian. 

Ambos voltean en dirección a Ralts, y se percatan que está viendo uno de los helados sus Keiri llevaba. Los dos se dan cuenta que es lo que quiere. Keiri se sienta y le da uno de los helados a Ralts, quien mira con detenimiento el helado, hasta que decide probarlo, y al instante le gusta. 

-Por su expresión parece que le encantó- Dice Keiri.

Damian saca una Pokebola, y la la acerca a Ralts, y cuando la Pokebola hace contacto con el Pokémon, no funciona. 

-Si, mi teoría era cierta, está Ralts tiene un entrenador- Dice Damian mientras despega la Pokébola de Ralts. 

Ralts deja su helado a un lado, y después estira sus manos en dirección a Damián, y al mismo tiempo da pequeños saltitos. 

-¿Que hace?- Pregunta Damian confundido. 

-Parece que quiere que la levantes- Le responde Keiri. 

Damian levanta a Ralts con ambas manos, y Ralts se acerca a la frente de Damian y la toca con una de sus manos. Esto hace que Damian repentinamente empieza a ver cosas, es como un recuerdo, era de noche, está justo enfrente de un chico, solo que a este lo ve bastante grande, y parece que chico está diciendo algo. 

-Bien Ralts, tengo algo sumamente importante que hacer, quédate aquí, volverte por en un rato, te lo prometo.  

El chico se aleja por completo, y Damián deja de ver esa extrema escena que se proyectaba en su mente. Este mira a Ralts, y parece que empieza a comprender las cosas. 

-Oye ¿Ese era un recuerdo tuyo?- Pregunta Damian con curiosidad. 

Ralts siente con la cabeza. 

-Ya veo- Dice Damian. 

-¿Ah que te refieres? ¿Viste algo?- pregunta Keiri. 

-Lo hice, Ralts me mostró un recuerdo suyo, parece que su entrenador le dijo que tenía algo importante que hacer, y la hizo esperar aquí. Y por lo que veo, aún no a vuelto. 

-Oh, pobre Ralts, seguramente estás preocupada por no saber dónde está tu entrenado- Dice Keiri compadeciéndose  del Pokémon. 

Ralts se ve algo triste, y esto hace que Damian también se compadezca. 

-¿Extrañas a tu entrenador verdad?- Le pregunta Damian a Ralts. 

Esta asiente con la cabeza, algo triste. 

-Pues tranquila, nosotros te ayudaremos a encontrarlo- Le dice Damian para animar la. 

Ralts mira a Damián y a Keiri, para después abrazar el brazo de Damian. 

-Cuenta con nosotros Ralts, seguramente tu entrenador se encuentra bien- Dice Keiri con una sonrisa.

Ralts está bastante feliz, al saber que ya cuenta con la ayuda de dos personas. 

Damian se levanta de la banca para iniciar la búsqueda, pero inmediatamente sus piernas se debilitan por la larga caminata que realizó. 

-¿Podemos descansar un poco antes de empezar?- Dice Damian mientras vuelve a sentarse. 

Después de unos cuantos minutos de descanso y espera, deciden comenzar con la búsqueda. 

-Bien ¿Por donde deberíamos empezar?- Pregunta Damian.

-Cierto, eso no lo habíamos pensado- Comenta Keiri.

Ambos se ponen a pensar, pero inesperadamente a quien se le ocurre una idea es a Sprigatito. Da unos ligeros golpecitos a la cabeza de Damian para llamar su atención. 

-¿Que pasa Spri?- Le pregunta Damian a su Pokémon. 

Ella apunta hacia enfrente, donde hay múltiples personas disfrutando de la tranquilidad del pueblo. 

-Espera, creo que ya se a lo que te refie- nah olvídalo, no se que quieres decirme- Dice Damian quien creyó haberse dado cuenta.

Sprigatito chica su pata contra su cara por qué Damian aún no había captado. 

-Si estoy en lo correcto, quiere decirnos que deberíamos preguntar a las personas del pueblo por el entrenador de Ralts- Dice Keiri, quien al parecer entendió. 

Sprigatito da un maullido afirmando lo, y después mira hacia Damian.

-Oye no es mi culpa, sabes que entender las señas no es lo mío.

-Vayamos a preguntar a algunas personas- Menciona Keiri mientras empieza a caminar. 

Ambos se acercan a una persona que iba pasando, y Damián decide preguntar por el entrenador. 

-Disculpa, ¿Ah visto a algún chico por aquí, en específico alguien rubio y de ojos marrones, que mida 1.70, tal ves 1.65? Es difícil saberlo, lo vi desde la perspectiva de Ralts- Pregunta Damian. 

-Lo siento, no e visto a nadie así por aquí- Dice el tipo, que niega a verlo visto 

-Vaya, supongo que esto será más tardado de lo que esperaba- Dice Keiri. 

Ralts baja la cabeza algo triste, esto es visto por Damián y va a animarla. 

-Descuida Ralts, no pararemos hasta encontrar a tu entrenador, te lo prometo- Dice Damian para después acariciarle la cabeza.

Ralts ya no está tan triste gracias a las palabras de Damian, y ahora ya no piensa perder las esperanzas. 

Tanto Damian como Keiri se disponen a buscar a alguien quien sepa quién es, o donde está el entrenador de Ralts. Aunque, por mas personas a las que les pregunten, no tienen suerte, hasta el punto en el que ya le han preguntado a todos en el pueblo. Y derrotados, se sientan en la banca de antes para descansar un poco. 

-Esto no puede quedar así, te prometí que no me detendría hasta encontrar a tu entrenador... *Suspiro* Supongo que no me estoy esforzando lo suficientemente- Dice Damian algo decepcionado. 

-Damian, te estás esforzando y lo sabes, no puedes culparte por está situación- Dice Keiri intentando animarlo. 

Ralts estaba bastante triste, pero al ver a Damian un poco decepcionado, toca su mano y después le regala una sonrisa, para animarlo. Damian no puede votar sonreír al ver qué ambas están animando lo, y decide que no se rendirá todavía 

-Je, tiene razón, ¿Cómo pude pensar en decepcionarme tan pronto?, hice una promesa y la cumpliré- Dice Damian ya mucho más animado.

Pasan unos cuantos segundos, en eso pasa una persona por ahí, y ve a Damián y a Keiri, y nota que ambos se ven bastante cansados. 

-Oigan, ustedes dos se ven de la patada. ¿Qué fue lo que hicieron?- Pregunta la persona. 

-Buscamos al entrenador de está Ralts, te preguntaría quien es, pero lo más probable es que no lo conozcas- Le dice Damian. 

-Tal ves si me cuentas, podría saber de quien hablas-. 

-Es un tipo de cabello rubio, ojos marrones, y si no mal recuerdo vestía de blanco-. 

-ummmh, creo que, lo eh visto en alguna parte... *Chasquea los dedos* Lo tengo, ahora lo entiendo. Ese Ralts es de un chico llamado Dereck- Les menciona la persona. 

-Si, sospechaba que tu tampoco lo sabr- espera, ¿Dijiste que si lo conoces?- Le pregunta Damian sorprendido. 

-Claro, de hecho, es un amigo mío, normalmente lo veo buscando entrenadores fuertes con los cuales pelear, en específico en una zona un poco alejada que se encuentra en esa dirección *apunta con su dedo al norte*-. 

-¿Escuchaste eso Ralts? Al fin te reencontraras con tu entrenador- Le dice Keiri a Ralts. 

El Pokémon se ve bastante feliz, ya que deposites de todo si volverá a ver a su entrenador. 

-Muy bien, pues haya iremos- Dice Damian mientras se levanta de la banca. 

El grupo se marcha, no sin antes darle las gracias al tipo. 

-¡Por cierto! ¡Muchas gracias!- Le grita Damian a lo lejos. 

-¡No hay de que! ¡Díganle hola ah Dereck de mi parte!-. 

-¡Lo aremos!- Le afirma Keiri. 

Todos marchan a la dirección que les fue dicha, y en el camino se topan con un lugar de hierva alta. 

-Creo que debemos tener cuidado por aquí, veo varios Pokémon que podrían ser potencialmente peligroso- Les advierte Keiri. 

-Por favor, me e enfrentado a estas situaciones antes, los Pokémon no son agresivos si no los molestas- Le dice Damian a Keiri de manera confiada. 

A lo lejos, ven como un Pokémon se les acerca lentamente y con curiosidad. 

-¿Ves? ¿Esta cosita te parece peligrosa? Ven aquí pequeñín. 

Damian estaba con claras intenciones de darle un abrazo al tierno Pokémon, pero en eso, Damian y Keiri sienten como el suelo tiembla un poco, y en un fugas momento, otro Pokémon se acerca y embiste al inocente Pokémon y lo manda a volar lejos. 

-Hay dios, que es esa cosa- Dice Damian asustado. 

-Es un Tauros, solo que este pertenece a esta región- Le comenta Keiri quien también está sorprendida por la aparición del Pokémon. 

Sprigatito no se quiere quedar observando, así que salta de la cabeza de Damian y se pone entre el Tauros y Damián. Sprigatito maulla ferozmente, aunque esto le la igual al Pokémon, y empieza a rascar el suelo con su pezuña, como si estuviera tomando impulso. La actitud de Sprigatito inspira a Damian, quien deja el miedo y se dispone a derrotar a Tauros. 

-¡Bien Spri! ¡Hagámoslo! ¡Usa hoja ma-!- Damian no termina su frase, ya que Tauros embiste a Sprigatito y hace que choque contra Damian, quien de inmediato sale disparado junto con Sprigatito. 

-¡Auch! ¡Auch! ¡Eso dolió más de lo que me hubiera esperado-. 

-¡Oye! ¡No está bien que ataques a Pokémones y sus entrenadores solo por qué si, supongo que te tendré que detener antes de que sigas causando daño. ¡Eevee! ¡Ve!-. 

Keiri saca una Pokebola de su bolsillo, de la cual sale Eevee. Eevee se pone en posición de combate, y está dispuesta a pelear. 

-Bien Eevee ¡Usa ta-! - Keiri tampoco termino de hablar, y al igual que Sprigatito, Eevee también es embestida chocando contra su entrenadora.  

-¡Auch! No creo que esto vaya a terminar bien- Menciona Keiri algo adolorida. 

El Tauros comenzó a tomar impulso, alejando se, poco a poco. Hasta que empieza a correr con mucha fuerza en dirección a Damián y Keiri. Ambos abrazan a sus Pokémon, esperando el golpe de Tauros.

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.

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-¿Eh?- Dice Damian confundido. 

Los chicos abren los ojos, y ven algo sorprendente. Ralts estaba usando sus poderes psíquicos para levantar a Tauros, aunque se veían que le costaba un poco, aún así, Ralts lo levantaba, y en un momento, lo azota contra el suelo, asiendo que esté se asuste y salga corriendo. 

-¿C-como hiciste eso?- pregunta Keiri. 

Damian se acerca a Ralts, y luego la carga para después abrazarla. 

-Gracias gracias, nos salvaste la vida. Por un momento sentí como si mi vida pasará frente a mis ojos- Dice Damian alegre por qué sigue vivo. 

-Ralts si que es más fuerte de lo que aparenta- Dice Keiri mientras acaricia la cabeza de Ralts. 

-Seguro que cuando le contemos a tu entrenador que nos salvaste, este muy orgulloso de ti- Dice Damian a Ralts. 

El grupo continua su recorrido, después del problemita con el Tauros salvaje. Caminaron por un par de minutos, hasta que a lo lejos ven que dos entrenadores se están enfrentando en una batalla Pokémon. Damian reconoce al instante a uno de los entrenadores, a quien estuvieron buscando por tantas horas. 

-¡Es el! ¡Al fin lo encontramos!- Dice Damian aliviado. 

-¿Ese es tu entrenador Ralts? Vaya que se ve muy fuerte- Le dice Keiri a Ralts. 

Tanto Keiri como Damian se quedaron impresionados con la batalla que estaban presenciando. Quién parece ser el entrenador de Ralts, está usando un Krookodile. 

Y su oponente un Pawmot. 

-Pawmot ¡Usa Impactrueno!-. 

El Pawmot del chico se cargar de energía, y estaba apunto de lanzar su ataque, pero su oponente fue más listo. 

-No tan rápido ¡Krookodile! ¡Usa Excavar!-. 

Krookodile dio un salto, y rápidamente comenzó a girar como si fuera un talador, y excavó en la tierra logrando evitar el ataque de Pawmot. 

-Maldición ¿Por donde saldrá ahora?- Dice el entrenador de Pawmot. 

-Je, ¡Ahora Krookodile! ¡Sal y usa Colmillo ígneo!-. 

Krookodile sale bruscamente del suelo, y de su boca emana una gran cantidad de fuego, y inmediatamente muerde el cuello de Pawmot, para después arrojarlo a un lado, logrando debilitarlo. 

-*Suspiro* Descansa amigo, te lo mereces- El chico saca su Pokébola, y hace que Pawmot entre ahí.

-Eres muy fuerte, creo que jamás podré derrotarte- Dice el chico algo decepcionado. 

-Tranquilo, ni lo hiciste tan mal, aunque comparado conmigo, lo hiciste del asco- Dice mientras en su cara tiene una expresión bastante engreída. 

El otro chico se va derrotado, y algo decaído por su derrota y las cosas que le dijeron. 

-Wow, eso fue impresionante, lograste derrotarlo como si no te hubiera costado trabajo- Dice Damian impresionado, mientas se acerca al lugar. 

-Eso me lo dicen siempre, dime niño, ¿En qué puedo ayudarte? 

-Oh, es cierto, ven Ralts, acércate- Le indica Damian a Ralts. 

Ralts se acerca a ese lugar bastante emocionada por ver a su entrenador. 

-Ella es tu Ralts, pasamos por muchas cosas para traerla hasta aqui, pero por suerte logramos encontrarte- Dice Damian.

-Ouh, emmh, esto, es bastante incómodo, jeje- Dice el chico mientras se rasca ligeramente la ñerte trasera de la cabeza. 

-¿Eh? ¿Ah qué te refieres?

-Pues, ¿Cómo te explico? Yo, no la quiero de vuelta- Dice el chico algo serio. 

-..... JAJAJA, que buen chiste amigo, Ralts, no me dijiste que a tu entrenador le gusta hacer bromas- Dice Damian mientras le limpia una lágrima del ojo. 

-Eh, Damian, yo no creo que esté bromeando- Le dice Keiri. 

-Espera ¿Lo estás diciendo encerio?- Dice Damian quien de un momento a otro pasa de reírse a estar confundido. 

-Como escuchaste amigo, mira yo no quiero tener que ver nada con esa Ralts, de hecho, ten *Le lanza una Pokebola a Damian* Es toda tuya. 

-Oye, ¿Cómo puedes decir algo así? ¿No escuchaste que pasamos por muchas cosas para llegar hasta aquí? ¡Ella estuvo todo el tiempo preocupada por ti!- Le reclama Damian al chico. 

-*Suspiro* No me conviene tener problemas en este momento- Dice el chico. 

Ralts mira al chico, y comienza a acercarse, alza la cabeza, y este logra ver la expresión de tristeza de Ralts, incluso parecía tener una expresión de estar apunto de llorar. 

-¿Cuál es tu problema? Esa Ralts quiere estar contigo, ¿Y tú intentas desacerte de ella?- Le dice Keiri al chico. 

-Te diré cuál es mi problema, esa Ralts es solo una perdida de tiempo, cada enfrentamiento que tenía, terminaba humillado gracias a esa incompetente. 

-¡Ella no es una incompetente! ¡En el camino me demostró ser fuerte! ¡No voy a permitir que hables así de Ralts- Le dice Damian, bastante molesto.

-¿Quieres que te lo demuestre? Bien ¡Krookodile! ¡Usa Colmillo ígneo!-. 

Krookodile de impulsa en dirección a Ralts, y así atacarla, pero de manera repentina, algo lo taclea bruscamente, evitando que le haga daño a Ralts, se trata de nada mis ni nada menos que de Eevee y Sprigatito, quienes miran a Krookodile con una expresión bastante molesta.

-Entiende lo, ella es un Pokémon sumamente débil, ni siquiera a dominado sus poderes Psíquicos, un Ralts normal ya abría encontrado a su entrenador sumamente fácil- Dice el chico.

-De acuerdo, tengamos una batalla Pokémon, Ralts contra tu Krookodile, te demostraré lo equivocado que estás- Dice Damian mientras reta al chico. 

-Je, pues hagámoslo, esto será demasiado fácil-. 

Damian se acerca a Ralts, y empieza a hablarle. 

-Ralts, se que ahora te sientes muy triste por todo lo que dijo, pero, debes demostrarle todo lo contrario, yo sé que eres un Pokémon muy fuerte, confío plenamente en ti-. 

Ralts no sabe que sentir exactamente, se siente muy traite por su entrenador, pero a la ves, se siente inspirada y feliz por la confianza que Damian siente en ella. Pero, al final, decide que lo ara, quiere demostrar que si es fuerte, y está más se desidia. 

-¿Estás listo niño?-. 

Damian no le dirije ni una sola palabra. 

-Que más da, empecemos. Krookodile ¡Usa triturar!-. 

Krookodile estaba por tomar a Ralts entre sus dientes, pero rápidamente Damian pensó en algo. 

-Ralts ¡Usa teletransporte!-. 

Ralts se teletransporta, y aparece instantáneamente detrás de Krookodile. 

-No podrás evitar sus ataques por mucho tiempo, ¡Krookodile! ¡Usa Golpe mordaza!-. 

-Ralts ¡Usa teletransporte de nuevo!-. 

Ralts logra teletransportarse a un lado de Krookodile, pero por muy poco. 

-Eso estuvo muy cerca, pero no volverá a fallar. Krookodile ¡Usa Excavar!-. 

Krookodile logra enterarse debajo de la tierra, justo como lo hizo con su anterior oponente. 

-Maldición, no puedo ver cuándo ni donde saldrá, ¡Ralts! ¡Trata de esqui-. 

Damian no alcanza a dar la orden, lo que provoca que su contrincante ataque eficazmente. 

-¡Krookodile! ¡Hazlo ahora!-. 

Krookodile sale rápidamente del suelo, y cuando lo hace golpea fuertemente con su cabeza a Ralts, y la hace volar por los aires. Y eso no se termina ahí, ya que, mientras está estaba suspendida en el aire, el chico decide atacar una ves más. 

-¡Ahora! ¡Usa Cola Dragon!-. 

Krookodile da un gran salto, y de un giro golpea a Ralts con su cola haciéndola impactar contra el suelo. Ese ataque había dejado muy herida a Ralts. 

-¡Ralts! ¡No!- Dice Damian preocupado. 

Este se acerca para ver cómo se encontraba Ralts, luego la agacha y recarga la cabeza de Ralts en su mano. 

-¿Te encuentras bien?. Lo lamento, no debí hacer que pelearas, eres fuerte, y comprendí que no tienes que pelar con un idiota para demostrarlo.

Ralts, aunque estaba débil, si quería demostrar de lo que era capaz, así que, con las fuerzas que le quedaban, se levanta, y está dispuesta a continuar luchando. 

-Ralts, mírate, estás completamente herida, no tienes que-. 

Ralts voltea hacia Damian, y le sonríe, esto hace que Damian detenga lo que iba a decir, y entiende que Ralts desea demostrar su potencial.

-Ralts... Muy bien, comprendo cómo te sientes, y si ese es el cazo ¡Yo te apoyaré!-. 

Mientras la pelea iba a continuar, Keiri continuaba mirando, y estaba sorprendida por Damian y Ralts. 

-Damian, Ralts, ellos, se ven tan decididos, tienen todas las intenciones de ganar, incluso si la balanza no está a su favor. Vaya, Damian no me deja de sorprender. ¡Oigan! ¡Den su mejor esfuerzo y derroten a ese chico!- Les dice Keiri para animales. 

Damian escucha las palabras de Keiri, y no puede evitar sonreír. 

-Ralts, no importa que no domines por completo tus habilidades, confío plenamente en tu fuerza-. 

-Terminemos con esto ¡Krookodile! ¡Usa Garra umbría!-. 

Las garras de la pata derecha de Krookodile se impregnaron de una extraña energía obscura, y con ellas pretendía atacar a Ralts. 

-Ralts ¡Esquivalo!-. 

Ralts logra evadir el ataque justo a tiempo. 

-¡Ralts! ¡Rápido! ¡Usa Cabezazo zen!-.

Ralts de apresura, y de un salto hacia Krookodile, logra darle un buen golpe justo en el estómago, lo cual empuja un poco a Krookodile. 

-Je, nada mal, veamos cuánto más pueden seguir así !Krookodile! ¡Golpe cuerpo! ¡Ahora!-. 

Krookodile dio un gran salto, y pretendía caer con fuerza sobre Ralts, pero Damian fue más listo, y cuando Krookodile estuvo apunto de impactar, Damian dio la orden. 

 -¡Ralts! ¡Usa Teletransporte!-. 

Ralts se teletransporta rápidamente lejos de Krookodile, haciendo que este choque contra el suelo y se lastime. 

-¡Maldición! ¡No pienso perder! ¡Krookodile! ¡Usa Enfado!. 

Krookodile no pierde ni un segundo más, y da un potente rugido, para liberar toda su irá. Ahora Krookodile estaba listo para seguir luchando, ahora con más fuerza. 

-Ahora se ve mucho más fuerte, *Cierra los ojos* Ummmh *Abre los ojos* Lo tengo, aunque es un poco arriesgado, se que funcionará.

-¡Krookodile! ¡No te detengas! ¡Usa Golpes furia!-. 

-¡Rápido Ralts! ¡Usa Teletransporte para evadirlo!-.

Ralts logra hábilmente evadir cada golpe de Krookodile teletransportandose, hasta que en un momento, Damian pone en marcha su plan. 

-Lo tengo justo donde lo quería, ¡Ralts! ¡Usa fuerza Psíquica para retenerlo!-. 

El cuerpo de Krookodile, parece contenerse un poco. 

-Parece que no has entendido, puede que Ralts haya mejorado, pero sus poderes Psíquicos siguen siendo débiles, ¡Krookodile! ¡Acaba con esto! ¡Libérate y usa derribo!-.

Krookodile usa su gran fuerza para liberarse de los poderes de Ralts, y se abalanza con todas sus fuerza hacia Ralts y poder terminar con el combate de una ves por todas. Pero no salió bien para el. 

-Ralts ¡Ahora! ¡Usa Teletransporte!-. 

Ralts hace lo que le pidieron, y se teletransporta sin ningún problema, y esto hace que Krookodile impacte contra unas rocas, y cuando trata de levantarse, se ve demasiado desorientado. 

-¡Krookodile! ¡No puede ser!-. 

-Que no te sorprenda, el uso de enfado, y el buen golpe que se dio, solo le hizo mucho daño-. 

Krookodile no podía seguir en pie, y por obvias razones, cae debilitado. Ralts no lo podía creer, había ganado su primer combate. 

-¡Si! ¡Ganamos! ¡Ganamos!- Dice Damian muy entusiasmado. 

Damian cargar a Ralts, y después le da un pequeño abrazo. 

-Damian, Ralts, ¡Estuvieron increíble! Fue un una pelea muy emocionante. 

Sprigatito también le pareció una pelea increíble, y maulla felizmente por la victoria de su entrenador.

-Si que lo fue, jaja. ¿Ves Ralts? Te dije que eras fuerte. 

Ralts le sonríe a Damián, ya que esté demostró durante toda la batalla, confiar plenamente en ella. Era un lindo momento, que compartían los chicos y los Pokémon, pero, este se.vuo rápidamente interrumpido, ya que vieron que Krookodile de levanta bastante herido, y mira bastante molesto a Damián y Ralts. Esto sorprende tanto a Damián como al entrenador de Krookodile, pero, lo más impactante fue que, Krookodile comenzó a cargar una energía de color morado en su boca, y con mucha potencia, dispara un rayo con el mismo color directo a Damián y los demás. Pero valientemente Ralts salta de los brazos de Damian, y se interpone entre ellos y el ataque, recibiendo todo el daño y levantando bastante humo, que no permitía ver el estado de Ralts. 

-¡Ralts! ¡No!-. 

Los presentes estaban impactados por la ecena, y Damian se sentía muy angustiado, ya que ese ataque muy probablemente la dejo demasiado herida... O, eso pensaban ellos, ya que, en medio del humo, se vio como algo resplandesia intensamente, esto dejo bastante desconectados a los que estaban viendo lo. Poco a poco, el humo iba desapareciendo, y deja ver qué en efecto, algo resplandesia, y estaba demás decir quién era el responsable. 

-¿R-Ralts?-.

Esa figura continuaba resplandesia do, hasta que en un momento, se detiene, y por fin se puede ver de lo que se trataba. 

Era Ralts, quien sorprendentemente, había logrado evolucionar. 

-¡Evolucionaste! ¡Nunca había visto una evolución en persona! Es asombrosa- Dice Damian quien está sumamente sorprendido.

Keiri también está sorprendida, así que saca su Pokédex y la apunta hacia la evolución, y dice lo siguente. 

-Kirlia, el Pokémon Psíquico y la forma evolucionada de Ralts. Al percibir la alegría de su Entrenador, refuerza sus ataques psicoquinéticos. Cuando está contento, da vueltas y baila.

-Waow, esto es impresionante- Comenta Keiri. 

Krookodile continuaba molesto, y parecía que atacaría una ves más, pero este no podía hacer un solo movimiento más, y ahora sí termina debilitandose. 

-¡Maldita sea! ¿¡Cómo pudiste perder!?- Dice el chico bastante molesto. 

El toma su Pokébola, y hace regresar a Krookodile. 

-Supongo que ahora no piensas que es débil ¿O si?- Pregunta con un tono algo burlón. 

-Pff, para lo que me importa, váyanse de aquí ahora, no quiero tener que ver a ese estupido Pokémon en mi vida-. 

Este les da la espalda, esperando a que se vayan del lugar. Aunque, después de unos segundos, siente como alguien le tocara el hombro. 

-*Suspiro* ¿¡Que no piensan ir- Este no termina de hablar, ya que Damian se apresura y le da un fuerte golpe en la cara, empujando al chico y haciendo que choque contra un árbol, y se queda desmayado. 

-Sin vergüenza, aprende a respetar a los Pokémones y apreciar el esfuerzo de los tuyos- Dice Damian con una expresión seria en el rostro. 

Damian se truena los dedos mientras se aleja del chico inconsciente, luego se acerca a Kirlia y se se inclina para estar a su altura. 

-Kirlia, quisiera decirte algo *Aclara la garganta* ¿Quisieras unirte a mi aventura? ¿Y convertirte en mi Pokémon- Dice Damian esperando su respuesta. 

Esta asiente felizmente con la cabeza. Luego Sprigatito mira a Kirlia, y maulla feliz por qué hay un nuevo integrante en el equipo.

-Estoy feliz de que hayas aceptado formar parte del equipo. Seguramente contigo vendrán grandes aventuras- Dice Keiri mientras sonríe al Pokémon.

Kirlia también le sonríe, esta alegre al saber que tendrá tan buenos acompañantes. 

El grupo no se quería quedar parado sin hacer nada, así que deciden continuar el viaje de una ves por todas. 

-Oye, debo admitir que fue bueno que hayas golpeado a ese sujeto- Le dice Keiri a Damián.

-Si, alguien tenía que poner a ese patán en su lugar. Y ya que mencionas lo del golpe. ¡Auch! ¡Auch!, ¿Por qué rayos tenía la cara tan dura?- Dice Damian mientras se sostiene la mano por el dolor. 

-Creo que sera mejor idea continuar el viaje mañana, así podrás recuperarte- Dice Keiri. 

-Mejor pasemos antes con un médico, creo que me disloque la muñeca-. 

-No será necesario, puedo poner esa muñeca en un su lugar- Le comenta Keiri a Damián. 

-Espera ¿No estarás pensando en-. 

-Vamos, se como hacerlo, prometo ser cuidadosa- Dice Keiri. 

-Ni lo pienses- Le responde Damian. 

-Bien, supongo que no podré convencerte... Asi que tendré que hacerlo a la fuerza- Dime Keiri mientras trata de atrapar a Damian. 

-¡Espera! ¡Creo que ya me siento mejor! ¡No hay necesidad de hacerlo!- Dice Damian mientras corre para que Keiri no lo atrapé. 

-¡Damian! ¡Juro que no dolerá mucho!- Dice Keiri mientras lo persigue. 

-¡No quierooooo!- Dice Damian mientras continua corriendo. 

Damian, gracias a sus esfuerzos, logro que un Ralts abandonado demostrara todo su potencial, y a causa de eso, termino evolucionando en Kirlia, y ahora forma parte de la aventura. Ellos continuarán con su travesía, y no se detendrán hasta llegar a su meta.