Odio sentirme así,
tan frágil y débil,
tan fácil  de destruir.
No quiero que mi felicidad dependa de tí,
pero la tentación es tan grande que es difícil decidir...
Decidir si quererte es correcto,
o si acaso vale la pena éste tortuoso sentimiento.

Y es que,
la realidad es tan violenta y sabe golpear,
cuando los sueños son destructivo y nos llevan por un camino que está mal.

Y otra vez estoy así,
triste y melancólico,
sin poder discernir todo,
mi sentir y sufrir.
¡Estoy afónico de gritar! "yo no soy el fuerte de mi historia,
solo soy un eslabón,
solo uno más"...

Ese que puede ser fuerte pero no lo ha intentado,
Porque sigue siendo tan solo un niño asustado.

Buscar refugio en los suplicios que le han ofrecido,
cuchillos afiliados que mi fe han corrompido.

No sabía entender,
no son chantajes ni tampoco es algo que estaba obligado a hacer.

Fue mi locura y mi necedad,
buscar dónde no estaba mí felicidad.

¿Quién sabiendo que  se va estrellar acelera?,
¿En que mente puede pasar subir la escalera si le faltan escalones para llegar a la meta?
No lo controlo,
en la ignorancia me encuentro sumergido,
luchar una batalla donde mi enemigo no he conocido...

Y no lo conozco porqué ¡soy yo!,
él dueño del veneno y del antídoto, pero tan sólo por miedo no puedo controlarlo.

Rony Santos