Es hermoso ver a un padre jugar con sus hijos, es hermoso ver como los hace volar, los hace sentir querido.

Quisiera haber tenido un padre que llegara a casa para contarme historias a media noche o algo solo para dormir.

Que me mintiera que el mundo es bueno, que él es de hierro por eso su trabajo no lo cansaba.

Quería un padre que no llegara con olor a alcohol para demostrar su cariño, aun así sentía alivio al saber que los borrachos dicen la verdad.

Él en ese estado nos decía, me decía que éramos lo mejor que habíamos pasado en su vida.

Fuimos su mejor creación y valdría la pena cada esfuerzo que hacía por vernos feliz.

Quisiera ese padre diario pero sin ese olor a bebida.

Mi madre, la luz de mis ojos, la señora más fría y amorosa que conocí en el mundo.

La señorita, señorita porque a simple vista parece mi hermana, es tan joven que el tiempo no la alcanza todavía.

La señora que me decía que de amor no se vive, los sentimientos son una mierda, eso es cosas de débiles y que el mundo no está preparado para ellos.

Quisiera decirle que sabía que ella tenía un corazón hermoso oculto en esa capa de hielo y muro de concreto sólido.

Que sabía que cada noche ella se acostaba en mi cama, acariciaba mi cabello mientras susurraba una y mil veces, lo mucho que me quería, lo mucho que me amaba.

Pero odiaba cuando decía: "Pero".

Cuando decía: "pero quiero que no seas, como yo, tan sentimental porque sufrirás mucho, lo sé porque yo era como tú".

Quisiera haber tenido el valor para abrir los ojos y decirle que cada noche escuchaba lo que me decía.

Quería unos padres que estén orgullosos de mí, que cada vez que llegaban me hubieran dado un abrazo.

Que cada vez que estaba llorando no me castigaran hasta que se me pase, que cada vez que hacía mi escena no era para hacerlos quedar mal, sino porque quería un minuto de su atención.

No me avergüenzo de tener los padre que tuve, aunque en el fondo quería que fueran un poco más compresibles y cariñosos.

Estoy orgulloso de ellos que a pesar de todo, hicieron un buen trabajo, que este hijo que tienen cuando pueda les dará todo lo que soñaron.

Que si la vida me deja, me iré lejos de ellos y el día que vuelva tendrán al hijo que tanto soñaron.

Mis padres no son los mejores, los más perfectos, pero son mis padres y me dieron la vida, qué más puedo pedirles.

Y aunque nunca se los diga, ustedes saben que los amo.

No olviden votar y comentar que les pareció... Les deseo siempre buenas vibras.