Han pasado dos días desde la fiesta y, aunque Junghyuk le había dicho a Jimin que no había problema en que siga quedándose con ellos, él no quería quedarse más tiempo allí. Era cálido y acogedor pasar tiempo con sus mejores amigos, pero Jimin se sentía incompleto.

Había conversado con Taehyung y Hoseok un par de veces, y por más que intentó no pudo acercarse a hablarle a Yoongi. El mayor casi ni salía de su cuarto y cuando lo hacía, Jimin nunca estaba cerca. De cualquier forma, el de cabello anaranjado iba perdiendo más la paciencia conforme pasaba el tiempo. No sabía cuánto de éste necesitaba el mayor y mucho menos qué debía hacer para tratar de volver a hablar sin que Yoongi salga corriendo de su lado.

Estaba a punto de seguir torturándose por su propio remolino de pensamientos, cuando la puerta de su cuarto provisional se abrió dejando ver a un Junghyuk sonriente.

"Chim, vamos a ir a comer afuera" Avisó, moviendo su cabeza de lado a lado. Se veía entusiasmado.

"No tengo ganas de salir ahora" Respondió sin mucho ánimo. La expresión del otro decayó y entró a la habitación, cerrando la puerta detrás de él. Avanzó con seguridad y se sentó al lado de Jimin.

"¿Estás así por el mini hyung?" Preguntó, acariciando su cabello. Jimin cerró los ojos y pensó un poco en su respuesta.

"Algo así" Dijo finalmente. "Es decir, ese tema aún me tiene pensando. No sé si hago bien quedándome aquí o si debería insistir un poco más. Supongo que estoy algo así como frustrado" Soltó una risita nerviosa. "Sí, eso es".

"Ah, pequeño Chim. Haces bien dándole un tiempo, pero no aislándote de nosotros" Jimin asintió, escuchando atentamente. "Yoongi hyung es un poco tonto, ¿no lo es? Lento también. En realidad, es muchas cosas, pero no parece cobarde. No huirá siempre de ti, debes saberlo" Los ojos de Jimin se cristalizaron, mientras Junghyuk seguía acariciándolo suavemente.

"Lo extraño... un poquito"

"Solo han pasado dos días" Jimin bufó. "Bien, entiendo. ¿Entonces sí quieres ir a comer con nosotros?"

"Claro, tú invitas, ¿no?" Bromeó como lo hacía casi siempre y Junghyuk supo que era una buena señal.

"Por supuesto que lo haré" Dijo sincero. Si era por Jimin, esta vez no le importaría pagar de más.

━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━

"Levántate o te patearé el trasero, tonto" Taehyung rezongó, moviendo los hombros de su mejor amigo. "Vamos, Hobi, ayúdame a levantar a esta marmota" El pelirrojo no protestó y se acercó a la cama del mayor también.

"Arriba, Yoongi. No te vas a quedar aquí todo el tiempo".

"Déjenme en paz" La voz del de cabello menta fue amortiguada por la almohada que el chico tenía enjaulada en sus brazos. "Ya terminé el libro que tenía pendiente, no hay más que deba hacer por ahora" Taehyung se mostró indignado y abrió la boca para, seguramente, regañarlo, pero Hoseok se le adelantó.

"¿Qué te parece ir y hablar con Jimin, eh? Estás siendo duro con él"

"Corrección: está siendo un tonto. No entiendo por qué hace eso, ¿no ve lo mal que está? Jimin está igual" Taehyung agregó. Yoongi aprovechó ese momento para salir de su escondite.

"Estoy protegiéndolo" Justificó en voz baja. Taehyung alzó una ceja.

"¿En serio? ¿No crees que en lugar de eso tú eres el que está protegiéndose?" Confrontó, claramente decidido a no dejar el tema allí. "Sabes que te quiero, Yoon, pero ahora me siento un poco decepcionado contigo. Debes ir y hablar con él".

"¿Y qué se supone que le diga?" Esta vez Yoongi actuó de la misma forma mecánica que lo haría un resorte y se sentó sobre la cama, aún abrazando la almohada. "Cuando pienso en ello, llegan tantas cosas a mi cabeza, Tae. Todo es tan confuso y ya no quiero arruinarlo más" Hoseok vio cómo Yoongi sacaba un papel arrugado debajo de la almohada. "Como no encuentro una manera de decirle todo lo que pienso, decidí escribirlo. Ya saben, eso se me da un poco mejor" Los rostros de sus amigos se iluminaron al oírlo, Yoongi alzó su mano para evitar que sigan haciéndose ilusiones. "Por favor, no hagan esas caras de cachorritos felices. Hacen que me sienta raro".

"Raro o no, te queremos ¿o no, Hobi?" El pelirrojo asintió. "Anda, debes darle eso"

"Debe estar molesto conmigo..." Razonó en bajo volumen. Hoseok lo escuchó a duras penas y le golpeó levemente.

"Quizá lo esté, pero no durará mucho. Jimin no es de los que guarda rencor. Una disculpa y palabras sinceras bastarán".

"Tienes razón" Acordó el mayor, sintiéndose más motivado que antes. "Bien, lo haré" Taehyung aplaudió. "Deséenme suerte".

"¡Tienes todo lo que necesitas!" Hoseok animó, dándole una palmadita cuando el mayor se puso de pie. "O todo lo que él quiere" Agregó, juguetón. Las orejas de Yoongi se tornaron rojas por la vergüenza.

"Ya cállate" Habló como pudo, caminando hacia la puerta. Los otros dos solo se rieron de ello y Yoongi salió haciendo una mueca. Definitivamente tenían una buena amistad.

━━━━━━ ◦ ❖ ◦ ━━━━━━

Yoongi sí había ido a buscar a Jimin tal y como se lo había dicho a sus amigos. Se había alistado y animado mentalmente, abriendo su mente ante cualquier panorama posible. A pesar de ello, cuando llegó a las puertas de la residencia Kappa y tocó un par de veces, nadie salió. Esperó un poco más y fue más paciente que en otras ocasiones, pero el resultado siguió siendo el mismo.

Una vez resignado a que nadie saliera, se fue de allí. Iba a tirar la carta y deshacerse de cualquier cosa que le recuerde su último fracaso, cuando una despampanante cabellera rosada lo sacó de contexto. Bien podría recordar ese encuentro para siempre, se dijo a sí mismo. Jimin venía cargando a Junghyuk en sus hombros y Jungkook lo tenía del otro lado. Tantas cosas pasaron por su cabeza entonces, era como tener frente a él una pregunta de múltiple opción y él, sinceramente, no había estudiado nada para ello. No se sentía listo aún.

No tuvo tiempo para retractarse o pensar en otra forma de actuar cuando la mirada de Jimin se posó sobre él. Fue como caer y levantarse en un parpadeo. Fue también como tener dentro de su cuerpo una carrera de caballos desatándose fiera y tentativamente cerca de su corazón. No importaba lo que fuese, sucedió.

Jimin no dejó de andar y sostuvo con más ímpetu a su mejor amigo, pegándolo hacia él. Yoongi seguía estático y no porque no supiera qué hacer sino porque tenía miedo. Mientras más se acercaba el trío de amigos, más nervioso se ponía el mayor. Era un sentimiento electrizante y completamente nuevo. Quizá debería estar aterrado, pero, en su lugar, se encontraba algo ilusionado.

Junghyuk fue el segundo en notar su presencia y sonrió débilmente al dirigirle la mirada. Yoongi corrió hacia él.

"¿Qué...?" Intentó preguntar al ver el aspecto de los tres. Jimin captó su atención al instante. Ligeros, pero no poco notorios hematomas hacían presencia en su bien cuidada piel.  Jungkook lo miró ceñudo, casi bufando, con un color negro bordeando su ojo izquierdo. "¿Qué es lo que ocurrió?"

"¿Ahora resulta que te importa?" Desafió el gemelo que no tenía el labio sangrando. "Te vas y ahora llegas como si nada, ¿quién crees que eres?"

"Yo..." Quiso defenderse, pero Jimin se interpuso.

"Déjalo ya, Kookie. Hay que llevar a tu hermano adentro" El de cabello anaranjado señaló, mirando hacia el suelo. "Junghyuk es lo más importante" El mencionado, al escuchar aquello, elevó su rostro en un santiamén, dejando sorprendidos a todos.

"Ah, hyung, solo peleamos con unos idiotas. Recibimos unos golpes y ellos también. Nadie murió" Comunicó a duras penas y luego se dirigió a Yoongi en exclusivo. "Tú, en cambio, correrás riesgo si es que llego a mejorar y no has arreglado tu asunto con Jimin".

Jungkook solo suspiró y tiró de Junghyuk, sacándole un leve quejido. "Yo lo llevo, Chim. No pesa tanto y no llegué a recibir muchos golpes, así que estoy en perfectas condiciones. Tú, eh, habla con él mientras tanto. Ya oíste a mi hermano. No lo arruines" Eso último había sido dirigido para el mayor de todos y fue él quien asintió firme ante la advertencia explícita.

"Lo harás bien, mini hyung. Solo sé sincero" murmuró Junghyuk, cuando pasó cerca de Yoongi y este último le regaló una leve sonrisa.

Los Jeon se alejaron a paso calmo y el ambiente que dejaron para los otros dos se tornó tenso de inmediato. Jimin aún miraba al suelo y Yoongi lo observaba sin hacer ningún comentario. Podría tener más moretones pintando su piel, pero no cabía duda de que seguía siendo el mismo chico hermoso que vio hace un par de días afuera de su habitación.

"Lo siento" Se animó a decir finalmente. Jimin alzó su mirada hacia él. "Lo siento por alejarme así sin darte una explicación. Necesitaba pensar, pero no creo que haya sido la manera correcta".

"Bien" Jimin estiró sus labios en una sonrisa, con una ligera mueca de dolor. "No voy a decir que no me dolió, pero entiendo".

"Ni siquiera sé por dónde empezar" Jimin rio suavemente y Yoongi sintió que la melodía cepillaba su corazón. "¿Sabes? Antes me avergonzaba recordar a Agust" Empezó titubeante, arreglándose las gafas con nerviosismo. "No me gusta beber mucho, solo lo hago ocasionalmente y esa noche... esa noche fue diferente" Yoongi suspiró. "Tú eres diferente. No fue la bebida o el cambio de aspecto lo que me animó a intentar charlar contigo, aunque eso haya sido lo que quise creer en un inicio. Fuiste tú. Tú y tu forma de ser. Con tu coqueteo nada sutil y tu manera tan peculiar de ver las cosas. Me cautivaste y nadie había hecho eso antes, ¿te haces idea de cómo me sentí cuando me enteré que eras tú?" Jimin negó.

"Después de eso, estuve perdido por el chico de los poemas" Aclaró, sintiendo ruborizarse. "Me gustaba lo que leía, era como escapar de la acomodada rutina que me consumía y era genial. Jimin, tú lo eres" Halagó sincero. "Yo solo soy muy cobarde con estos asuntos, pero ten por seguro que nunca quise dañarte y si lo hice, no fue mi intención. Prometo que nunca lo será".

"Yoongi, yo..." El más bajo fue interrumpido por un chico castaño que venía corriendo en dirección al mayor.

"¡Yoon, mira!" El castaño desaceleró a medida que estuvo más cerca de su objetivo. Yoongi miró a Liam con clara sorpresa, extrañado por su misteriosa aparición, y tomó en manos lo que este le tendía: el periódico de la universidad. "Dijeron que tú recibieras la primera impresión, así que aquí estoy" Se encogió de hombros, percatándose de repente de la presencia de Jimin y saludándole levemente. "Bien, yo me voy. Styles me tiene en la mira, ¡nos vemos!".

Yoongi miraba con suma atención y cautela el papel que tenía en sus manos, como si guardara un gran secreto en él. Jimin terminó con ese corto periodo de ensoñación.

"Adelante, ¿no estás ansioso por ver el poema de la semana?" Incentivó. Yoongi alzó una ceja, porque ni siquiera era viernes, pero se limitó a encogerse de hombros antes de abrir el papel, yendo directamente a la página que conocía tan bien. "Esquina superior derecha" Jimin volvió a decir, aumentando los nervios del contrario.

"Lo sé" Respondió el más alto.

"Sí, tú sabes" Comentó fanfarrón. Yoongi sacudió la cabeza, ligeramente divertido, y se dispuso a leer con atención.

Amarillo cuando te veo.

Azul cuando no estás

En el verde te encuentro

Y con el negro te vas.

Dime, color del cielo, dime si es verdad

¿Son los colores un universo o eres tú nada más?

Si los grises fueran míos, tú los harías brillar

Y si pintáramos unidos, amaríamos de verdad.

Colores vivos. Park Jimin.

"Jimin, tú..."

"Alto ahí, Yoonie" El menor se aclaró la garganta. "Sí, me gustas. Y sí, eso era para ti. No sé cómo conseguí gustarte con mis palabras, nunca me consideré realmente bueno con ellas. Sin embargo, ahora que te veo sonriendo de ese modo solo por algo que hice, siento que no he hecho nada mejor que eso hasta ahora" El de cabello anaranjado le regaló una tímida sonrisa, casi suspicaz. "Eres lindo y agradable. Con el color que uses, realmente no es de mucha importancia" Soltó una risita atropellada por el temblor en su voz. "Es decir, ¡te gusté incluso si nunca me habías visto! Dime cuántas veces has visto algo parecido, ¿eh? Somos especiales, ¿no lo ves? Ahora solo es cuestión de ambos para empezar de nuevo: iniciar bien".

Yoongi tarareó bajito y se acercó al contrario, sosteniéndole la mirada hasta que estuvieron a muy corta distancia.

"¿Eso significa que estoy perdonado por ser un tonto contigo?" Jimin hizo un sonidito de aprobación.

"Significa que empezaremos a salir formalmente y dejaremos atrás los malos ratos, solo si prometes no volver a caer en ellos" Advirtió, pinchándole la nariz con diversión sana. Yoongi si echó a reír.

"Prometo dar lo mejor de mí para eso".

"Trato hecho entonces, Yoonbobito" Jimin guiñó el ojo derecho. "Ahora, ¿qué opinas sobre ir a nuestro cuarto para aplicarme una crema sobre los moretones que sé pronto van a tornarse de color morado o algo por el estilo? Luego podemos, no sé, ver películas en la laptop. Algo se nos ocurrirá".

"Eso suena como un buen plan, Jiminie" Habló dulce y Jimin hizo su mejor trabajo para fingir no derretirse por dentro. Fue peor cuando Yoongi juntó sus manos para caminar juntos hacia su cuarto. Jimin no recordaba haberse sentido así de bien con alguien más.

Como el camino no era tan largo, teniendo en cuenta que la residencia estaba cerca de las otras habitaciones comunes, no tardaron mucho en llegar a su destino. Como por obra de magia, Taehyung, quien parecía haberse aburrido de esperar fuera de la puerta del cuarto que compartían los dos tortolitos, los vio llegar juntos. Jimin le dedicó una sonrisa amigable y Yoongi, disimuladamente, le dio la carta que había escrito. El de cabello celeste no preguntó por qué no era Jimin quien la tenía. Estaba seguro que Yoongi había dicho lo que tenía escrito y aún más. Estaba bien, porque había hablado con el corazón. No había otra explicación lógica para lo que sus ojos presenciaban.

"¡Luego tienes que contarme todo, eh!" Fastidió un poco, antes de alejarse a paso rápido. Yoongi asumió que iría a avisarle a Hoseok y se preparó mentalmente para la ronda de preguntas que se vería obligado a responder después.

"Ah, casi lo olvido" Jimin sonrió, acomodándose el cabello con nerviosismo. "Esto es para ti, Yoonbobito" Dijo, dejando un papel arrugado sobre la palma del contrario. "¡Yo elijo la película, eh!" Se despidió alegre, entrando a la habitación y sin darle chance al mayor de negarse. No es como si Yoongi fuera a hacerlo de todos modos.

"Ah, Jiminie, nunca dejarás de sorprenderme" Razonó en voz baja, antes de leer, por segunda vez en el día, un escrito de su chico de letras favorito.

El amor es una persona.

El amor eres tú.

El amor es un poema.

Y mi poema eres tú.

Poéme. Park Jimin.

Yoongi sonrió tan amplio como pudo y guardó el papel en su bolsillo.

"También eres mi poema, Park Jimin. Te demostraré eso".

Abrió la puerta y supo que todo estaba bien. No iba a esperar menos del chico que lo conquistó dos veces, ni del chico que lo había hecho volver a creer. Estarían bien y se esforzarían para que nadie lo arruinase. Algo que fue construido con poemas y bebidas no podría terminar con facilidad. Yoongi mantuvo ese pensamiento presente cuando cerró la puerta de su cuarto, sabiendo que, en contraste a la realidad, ahora se encontraba abriendo las puertas de su corazón. Aún quedaba mucho camino por recorrer.

Ni siquiera quiero pedir disculpas de nuevo, porque en serio tengo mucha vergüenza por tardar tanto jajaja. Es solo... algunas cosas pasaron y no podía concentrarme. Espero que hayan disfrutado esto, al menos un poquito jaja. Yo me sentiré bien sabiendo que, por lo menos, en historias como las mías el amor siempre triunfará.
Les mando fuerzas desde donde estoy, sonrían mucho y coman bien.
Gracias por leer ♡.