Padre
Aveces creo no conocerte,
Te ves como un hermano.
O un desconocido mientiendome.
No quiero matarte, pero no me abrazaras.
Porque nunca me has hablado.
Era tu sombra, ya solo oí otra clave.
Si dijiera, que yo seria del mismo hueso.
Reirias porque es una falsedad.
Escuchabas la afinacion de popular.
Te gustaba la voz de la alma cercana.
Y la ambicion, repentina inteligencia.
Creo que ya no me interesa.
Sensible, humedecido.
Esta condicion, ya te adverti.
No respondiste la pregunta.
Cuando en soledad me odie.
Ni una mano me quizo consolar.
Asi que corte mi camino a un semaforo sin esquinas.
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