Mi verdadero amor.
Mi refugio a la tempestad invernal.
Mi calor de hogar.
Manchado por Cronos, pero eterno.

Tú que calmas mi dolor, con dulces besos de madre.
Amor eterno, amor puro.
Dejadme unirme a ti, y juntos vencer al tiempo y la muerte.

Hambre y sed tengo de ti, como esperanza.
Alimenta mi alma, y mi alma alimentará la tuya.
Con mi sangre que tinta se volverá.

¡Que mi sentir se vuelva eterno!