La primera sensación que el mundo se te ponga de pies a cabeza.
La primera mirada que te eriza cada centímetro de tu piel.
El primer beso que te estrella miles cosas en tu interior con el rose de sus labios.
La primera entrega de nuestros cuerpos que se funden en uno sólo.

¡Pero aprendí algo!
Que todos estos hermosos recuerdos quedan en el pasado cuando en la relación tu pareja ya no te trata igual, te matrata verbalmente, ya no es el mismo cuando empezaron su relación.

Pero aprendí que cuando tu te aferras a todos esos recuerdos se convierten en una obsesión porque esa persona fue la primera en todos los sentidos de tu vida y te da temor darle la oportunidad al segundo amor.

El primer amor es maravilloso pero cuando no funciona no debemos aferrarnos a lo que nos hace daño porque se convierte en una relación tóxica mientras podemos dejar en lo más profundo de nuestro corazón el primer amor y darle la oportunidad al segundo amor.