Tres, dos, uno...

- Pau, pau, pau-hu - camino en dirección al pasillo de mi casillero. Otro día en la escuela, pasando desapercibido las clases aburridas gracias a mis amigos. Por un lado está Jungkook que es como un hermano para mi y mi segundo mejor amigo es Taehyung.

Aún es temprano y creo que desperté con el pie derecho, el cielo esta despejado y con un azul tan brillante, que pareciera irreal. Es un día perfecto sin dudar.

Sigo tarareando aquella canción y no puedo evitar mover mi cabeza de acuerdo a la melodía, así como mis pies. Nada fuera de lo común, soy un chico normal que ha quedado embobado por una única canción. Puede que en unos días lo olvide o me canse de ello, por mientras seguiré molestando a mis amigos con ello...

- Auch - tropiezo con alguien.

- Yoongi - me petrifico - perdón hyung, estaba distraído - ¡Hombre! Que suerte la mía. Esta mañana me sentía seguro, pero ahora que he enojado al chico que me quita el sueño, no puedo decir lo mismo.

- Tranquilo jimin, veo que alguien ama las mañanas - habla suga mientras busca sus libros, de su casillero. De acuerdo, puedo decir que soy afortunado porque su casillero esta a lado del mío.

- Um, si... - acerco mis dedos temblorosos al candado, para poder sacar mis libros también, todo va en orden mientras suga no sospeche todo lo que provoca en mí - ya sabes, a veces los días suelen parecer perfectos sin ninguna causa. Sólo pasa - sonrió hacia su dirección y el me devuelve le gesto, que para que sepan suga no suele hacerlo con frecuencia. Muy pocos logramos ser cercanos a él.

Si... soy un chico con suerte. Intento no mostrar la gran sonrisa que me provoca. Actúa normal Jimin, actúa normal.

- Te creo, nos vemos luego... - no puede terminar su oración, porque una lámpara hace corto circuito. Ambos bajamos la cabeza por puro instinto y nos quedamos peculiarmente cerca.

- Alguien debe dar mantenimiento a este lugar - digo, controlo mi respiración y evito su mirada.

- Tienes razón, se dará cuenta el conserje pronto - suga inspecciona a nuestro alrededor e igualmente que yo la mayoría de nuestros compañeros se están dirigiendo a clases - te veo luego - se despide y se dirige hacia su clase de Inglés. 

Yo por otra parte no comparto clase con él, es un año mayor que yo - Nos vemos hyung... - Respondo a su saludo tarde, me quede mirándolo solamente.

Llevo mis manos a la cabeza, ¡tan cerca de él! 

- ¡Es un gran día! - y bailo hasta llegar a mi salón de física.

- ¿Por qué tan feliz Jimin? - pregunta Taehyung.

- Hablé con él y pude oler su colonia - 

- Me enfermas amigo, calma esas hormonas - responde tae.

- Tu preguntaste - Me siento en la banca a lado de mi amigo y abro mi libreta en la lección pasada, no puedo evitar mover mis dedos de acuerdo al ritmo de la canción, de sólo acordarme del encuentro con suga mi felicidad aumenta.

Escucho llegar a Jungkook que se queda parado mirándome como bicho raro - ¿Otra vez suga? -

- ¿Lo dudas? - responde Taehyung

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- ¿Otra vez Jimin? - pregunta un curioso Hoseok.

- Sip - responde un alegre suga.

- Algún día le dirás que sabes sobre sus sentimientos? - 

- Si, pero no encuentro el momento indicado, tal vez la siguiente semana - suga abre su libro para despejar su mente, no es tan fácil decirle al chico que le gusta que corresponde a sus sentimientos.

>> Me di cuenta que faltan más historias felices en nuestras vidas y que sean jimsu. Así que se me ocurrió dar un poco de arcoíris y azúcar a mi perfil. P.D. seguiré con mis historias pero ténganme paciencia y adoro que comenten tantas cosas lindas en mis historias. Los adoro y son muy importantes para esta escritora n.n