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Capitulo I "Muerte y Vida"

En un frondoso bosque, ubicado en una esquina del mundo, se veían 2 figuras corriendo entre los árboles.

Una grande y cuadrúpeda, que zigzageaba entre un árbol y otro, la figura grande era perseguida por una figura pequeña y humanoide que saltaba entre las ramas de los árboles.

Durante su carrera las 2 figuras pasan por una zona iluminada revelando su aspecto.

La figura grande era un ciervo de 3,5 metros de alto y casi 5 de largo, sus cuernos eran de un rojo tan brillante como un rubi, su pelaje era corto y de un color violeta en el lomo, que se volvía de color celeste al acercarse al vientre. Lo más peculiar en este ciervo era que tenía 2 pares de ojos, ambos de color dorado, tan brillantes como el oro.

La figura pequeña era un chico, no parecía tener más de 16-17 años, el chico llevaba una armadura de cuero ligera color negro, pelo negro no muy largo, y unos ojos de color ceniza.

Los 2 continuaron con la persecución hasta que el ciervo dio un paso en falso, en el momento en que el ciervo titubeo el chico le tiro un cuchillo arrojarizo a la cabeza, el cual impactó justo en el centro del cráneo, llegando al cerebro.

El ciervo se tambaleo unos segundos hasta que calló al suelo. En el momento de su caída, el chico se acercó.

'TIEMPO'- Cuando el chico reviso el pulso y confirmó la muerte, gritó al aire, para que unos arbustos se movieran y de ellos salió un hombre de mediana edad con pelo negro.

'Mejoraste, 7 minutos con 38 segundos, 2 minutos menos que el anterior "Ojos de Pepita" que cazaste'- Al oír el tiempo en la cara inexpresiva del chico, apareció una pequeña sonrisa- 'Felicidades colmillito, ese es mi hijo'- Pero al oír las palabras que su aparente padre le decía, esa sonrisa se convirtió en una cara irritada.

'No me llames así, te lo he pedido muchas veces'- Al hablar el chico tenía un tono cansado en su voz.

En respuesta su padre sólo se ríe a carcajadas, ignorando el pedido de su hijo, una vez más.

*Suspiro* Que más da, sólo metelo en el saco y vamos a casa, por favor'- Al ver que lo ignoraban el chico pide a su padre que ponga al ciervo en el saco para irse a casa.

'Tienes razón, vámonos antes de que lleguen Bestias Mágicas por el olor de la sangre'- Al dejar de reír su padre responde, estando de acuerdo en volver a casa para evitar a las "Bestias".

Después de poner al cadáver en el saco, el par de padre-hijo se alejaron en direccion al oeste.

◇◇◇◇◇

Después de caminar por un tiempo, el par llego a un pueblo no muy grande.

Al acercarse más, algunas personas los vieron y con sonrisas en sus rostros, les dieron una cálida bienvenida.

Una señora un poco mayor (como de 40-50 años), se adelantó al resto y le habló al par.

'Bienvenidos de vuelta, veo que les fue bien en la caza de hoy'- dijo mientras veía al padre y al hijo- 'Hoy llegan antes de lo usual, normalmente llegan al atardecer.

Mirando al horizonte, se ve que al sol aún le faltan un par de horas para ocultarse.

'Tuvimos suerte al buscar una presa, jejeje, o más bien él la tuvo, por que a los minutos, se desvió y lo encontró'- El padre con una pequeña risa, le responde a la señora.

'Ooohhhhhh, ¿de verdad? Eso es impresionante'- Dijo como alabanza al chico mientras tiene una expresión de ligera sorpresa con una sonrisa, aunque no se nota si es real o si es sólo una actuación para hacer feliz al chico.

'Entreno mucho'- Se limitó a responder el chico, mientras en su cara apenas aparece una sonrisa, supuestamente arrogante.

'Como siempre, tu expresión apenas si cambia'- Dijo al ver la reacción del chico. Es bien sabido en el pueblo que este "pequeño cazador", como es conocido, no es muy expresivo, facialmente al menos.

'Bueno, un gusto verlos, luego de procesar y dividir los materiales de esta bestia podrán comprarlos donde siempre'- Dijo el padre después de charlar con los aldeanos por un rato.

'Adiós'- El chico se despide mientras inclina un poco la cabeza.

Luego de caminar hasta el otro lado del pueblo y llegar al bosque, el par camina unos minutos más hasta que se ve una cabaña de 2 pisos.

En la parte frontal de la cabaña había una puerta y una gran ventana con rejas que se abrian por la mitad.

Al llegar a la puerta el padre sin contenerse en lo absoluto entra y grita- 'ESTAMOS DEVUELTA CARIÑO'- Con una sonrisa de oreja a oreja.

'Haaaa~, ya te dije querido que no llegarás a casa gritando'- Le respondió con un suspiro y unas palabras una mujer ligeramente mayor, con cabello castaño y ojos ceniza como los del chico.

'Hola Ma'- Con un simple saludo el chico va a la sala de estar y de una caja debajo de la mesa saca una roca de afilar, unos trapos, y un tarro.

'Como siempre, apenas llega, le das mantenimiento a sus armas. Este chico en serio nació para ser cazador, jejeje'- Dice el padre con una pequeña risa mientras lo ve.

'Podrías al menos preguntar si la comida está lista, "hijo cerebro de animal"'- Dice la madre con una cara inexpresiva como la de su hijo, mientras le tira un tazón de madera a la cabeza, el cual impacta.

'¿Para qué preguntar si siempre está lista cuando llegamos?'- Pregunta el chico con los ojos un poco entrecerrados, pero manteniendo su inexpresividad .

'Educación'- Responden en un instante tanto el padre como la madre con una sonrisa, sólo que la de la madre no es muy amistosa que digamos.

'...'- El chico sólo se levantó y fue a comer, evitando la mirada de sus padres, en especial la de su madre.

El resto del día paso con tranquilidad, comieron, convivieron, y hablaron de viajar a la capital para ver a la hermana del chico. Al caer la noche, todos fueron a dormir, el chico en su cuarto y los padres en el suyo.

Era una noche normal, pero a un par de horas antes del amanecer, el chico paso de tener una expresión tranquila, a un ceño fruncido. Él empezó a revolcarse en su cama.

En algún momento él empezó a liberar un ligero brillo blanco. Cuando el sol empezó a asomarse en el horizonte el brillo se detuvo y la expresión del chico se volvió a tranquilizar.

◇◇◇◇◇

Han pasado unos días desde el "brillo", nadie se percató de este, ni el chico ni sus padres.

Justo ahora se puede ver al chico y a su padre haciendo calentamiento, algo de todos lo días antes de ir a cazar.

'Vamos a ver si hoy logras un nuevo récord, estuviste muy cerca de hacerlo ayer'- Decía el padre con una sonrisa mientras hacía girar su brazo.

'Te apuesto que lo haré, me he estado sintiendo más ligero estos días'- Le responde mientras da pequeños saltos y algunas volteretas.

'Ooooh, veamos si no te arrepientes de esa apuesta, porque quien pierda, tiene que darle la mitad de su cena al ganador, ¡ADIÓS!'- Apenas dijo la última palabra, el padre salió corriendo a la velocidad de un corredor olímpico en dirección al bosque.

'...Estupido viejo'- A los segundos el chico sale disparado en la misma direccion con casi la misma velocidad

Alcanzando a su padre los dos estuvieron recorriendo un área extensa por varias horas hasta que ya casi no se veía el sol.

'Que extraño, normalmente ya tendríamos una o hasta dos presas en la bolsa, pero... hoy pareciera que casamos en un bosque muerto'- Dijo el padre mientras miraba a su alrededor y sentía que el bosque estaba vacío y carente de vida.

'Es verdad, todo pareciera estar muerto... o apunto de morir'- Coincidió el chico al sentir la ausencia de la vida que suele tener el bosque.

De repente los dos sintieron un escalofrío en la espalda, el chico al instante se subió a un árbol y al llegar a la copa vio a lo lejos múltiples columnas de humo desde la dirección del pueblo.

'¡¡¡ALGO PASO EN EL PUEBLO!!!'- El chico inmediatamente después de ver el humo le grita a su padre y sale corríendo al pueblo.

Corriendo a toda su velocidad llegó 1 hora después al pueblo con la respiración agitada, al salir del bosque vio varias casas en llamas, y muchas personas en el suelo sin vida.

*Zumbido*

*Explocion*

Sin aviso una explocion lo saco del shock momentáneo y lo regreso a la realidad que, para él, parece una auténtica pesadilla.

Al dirijir su mirada hacia la explocion ve a varios hombres desarreglados con armadura de cuero gastadas, uno de ellos disparaba bolas de fuego desde su mano hacia las casas.

'Oigan chicos miren, un mocoso acaba de llegar'- Uno de ellos nota al chico le dice a los otros.

'Ooh, debe de ser un cazador, puedo sentir que tiene más Elstral que los demas habitantes'- Comenta el de las bolas de fuego- 'Me pregunto, ¿cual sera su Nivel?'

Antes de que siquiera pasará un segundo, el chico salió disparado hacia los hombres y con la misma cara inexpresiva que ha tenido desde que llegó, empezó a cortarlos con la espada corta que tenía en su cintura.

Uno de ellos lo ataca con un mazo más grande que su cabeza, cuando el mazo estaba a unos centimetros de impactar, él dio un salto hacia atras ezquivandolo, y contrataco lanzandole un cuchillo a la cabeza, lo esquivó y dio una sonrisa burlona, pero al volver su vista al frente se encontró con el filo de una espada que al segundo siguiente lo degollo.

Al ver la muerte de uno de los más fuertes del grupo aquí presente, el que disparaba bolas de fuego empezó a actuar- '¡Magia de fuego: Llamrada!'- Al decir esto, de las manos del "Mago de Fuego" salió una columna de llamas en dirección al chico.

Logró esquivarlo por poco, pero sufrió de quemaduras de primer grado en el brazo izquierdo.

'Asquerosa rata'- Al ver que su ataque falló el mago lo insulta en voz baja.

El chico centra su mirada en él y corre en su dirección, esquiva las bolas de fuego que le lanza y cuando está a pocos metros lanza varios cuchillos arrolladizos.

El mago recordando como mato a su compañero a duras penas pudo esquivar los cuchillos sin perder de vista al chico, al ver que el chico, apuntó de atacar con su espada desde arriba, sonrió un poco mientras se preparaba para esquivar ese ataque, pero de repente sintió un gran dolor en la garganta.

El gran dolor fue causado por un cuchillo clavado en su manzana de Adán.

Luego de ver como poco a poco se esfumava la vida de sus ojos, el chico recuperó su cuchillo y lo guardo en una
bolsa de su cinturón

Después de hacer eso ve a su padre luchando con el resto de hombres.

Voltea a ver en generar y su cuerpo se tensa al ver en una dirección en específico.

Había una columna de humo desde donde debería estar en su casa.

En menos de un segundo sale corriendo a su casa, ignorando por completo a cualquier bandido y evitando los obstáculos.

En poco más de un minuto ya había llegado al pequeño claro donde estaba su casa.

Pero al llegar lo que vio fue a tres bandidos con espadas ensangrientadas y a su madre cayendo al suelo. Los tres primeros estaban rodeados por más de cincuenta bandidos.

'¡¡AAAAAAAAAAAAHHHH!!'- El chico salió disparado a los bandidos, cuando se acercó a ellos volvió a gritar y la figura de un lobo blanco apareció a su espalda. En el momento de su aparición su velocidad se duplicó y decapito al primer bandido.

Empezó a matar a diestra y siniestra a todos los que se metieran en su camino para llegar a los tres que mataron a su madre, quienes se habían quedado en el mismo lugar desde que lo vieron llegar.

Durante todo esto, el chico mostraba una furia feroz en su rostro.

Cuando estaba apunto de llegar a los tres, fue atravesado en el pecho por una lanza. En el momento en que se detuvo por la lanza, otras armas lo atravesaron por todo el cuerpo.

*Risas*

Al levantar la mirada el chico ve a los tres bandidos riéndose y burlándose de él con obvio sudor en sus rostros.

'Grr... ¡¡MALDITOS DESGRACIADOS!!'- La mirada del chico al instante se llenó de odio y con lo que le quedaba de fuerza agitó su espada, estaba muy lejos para cortarlos, pero sin aviso el lobo blanco volvió y la espada se envolvió en luz blanca, y al cortar el aire, un corte de luz blanca salió disparado hacia los tres hombres, decapitandolos a los tres sin poder ejercer algún tipo de resistencia.

Al ver como los tres principales culpables de la muerte de su madre perdian la vida, el cuerpo del chico cayo junto al de los tres al suelo, y con una sonrisa melancólica casi imperceptible junto a unas lágrimas, dio su último aliento en esta vida.

◇◇◇◇◇

En medio de una inconmensurable oscuridad, se puede ver una figura humana de color negro que sostiniene una guadaña siniestra y desgastada, tan negra como su portador, aunque sea de un color tan negro como la oscuridad, aún así se puede distinguir de la oscuridad de el ambiente de manera inexplicable.

Frente la figura, se encontraba el chico inconsciente en un suelo inexistente.

Pero el cuerpo del chico tenía algo extraño, la parte inferior de su cuerpo no estaba, en su lugar había un humo gris. La parte superior por otro lado parecía estar hecha de de este mismo humo, sólo que se veía como si fuera sólido a la vez que era gaseoso.

'Oye mocoso, por cuanto tiempo piensas estar inconciente'- Dice la figura mientras patea al inconciente chico en las costillas.

'AAARRRGG, ¡¡MALDITA SEA, ESO DUELE!!'- Él se despertó por la patada, y empezó a rodar el suelo por el dolor mientras maldecia.

'Callate-de-una-VEZ'- La figura le gritó al chico por quedarse sin paciencia después de unos minutos de oírlo gritar sin parar.

'Aaahh, eso duele... espera... ¡¡¡MAMÁ, PAPÁ Y EL PUEBLO, ¿QUÉ LES PASÓ, QUÉ PASÓ CON LOS BANDIDOS?!!!'- El chico al olvidar el dolor, inmediatamente recordó lo que estaba pasando antes de, según él, sumergirse en la oscuridad y caer inconsciente.

'Bueno, eso es una de las cosas de las que te quiero hablarte, así que...'- La figura al cortar sus palabras, se acerca al chico mientras inala profundamente, y al estar a sólo medio metro del chico -'CALLATE DE UNA BUENA VEZ, MALDITA SEA'- Le grita con todo en el oído.

'Okey okey, me callare, sólo no me grites en el oído'- El chico respiró profundamente por un par de minutos más. En este tiempo la figura no dijo nada, sólo esperó a que terminará de calmarse -'Bien ya me calme lo suficiente'-

'Genial, primero que nada, estas muerto, y en seg...'-

'¡¡¿QUE ESTOY QUÉ?!!'- El chico interumpio a la figura por la impactante noticia, ganandose un golpe del mango de la guadaña en la cabeza.

'Podrías cerrar la boca de una vez'- La figura le reprochó con una voz que, aunque no parecía tener ninguna emoción, poseía un tono de ultratumba que hizo temblar no sólo al chico, si no al espacio mismo.

'C-claro'- Sin pensar y con una voz tembrorosa respondió y se sentó en dogeza, aún sin tener piernas.

'Bien como decía, tu estas muerto, pero no te preocupes por eso. Normalmente sólo cosecharia tu alma y luego te irías al Ciclo de Reencarnación, pero como me caiste bien y tienes potencial, te daré otra opción, conviértete en un Shinigami, un "Segador de Almas".

Si lo haces podrás seguir un el Plano Terrenal y sólo tendrás que cumplir con las misiones que te enviaré de vez en cuando'- Después de decirle la situación al chico la figura le extiende la mano -'Si aceptas toma mi mano y te daré una gota de mi Esencia para que renazcas como Shinigami'- Al dar su oferta extendio su mano -'Yo, Dios Principal de la Muerte, Parca, te doy la oportunidad de volverte parte de mi élite, la oportunidad de volverte un Shinigami. Si quieres unirte a mis fieles seguidores, toma mi mano y di tu deseo, el cual se convertirá en la base de tus nuevos poderes'- Al terminar su discurso la mano que tenía extendida fue envuelta en una niebla violeta oscura con detalles negros.

'... Acepto'- Después de pensar por unos momentos, toma su mano y se levanta de un tirón, al momento de tomarla, una niebla grisasea envolvió la mano del chico, a su vez una luz blanca apareció en su espalda. De la luz salió un lobo de un metro de alto totalmente blanco y se posicionó al lado del chico.

'Mi deseo... Es ser capasalcanzar el poder suficiente para acabar con mis enemigos sin importar quien sea, y proteger a los míos de cualquier calamidad siendo el cazador que mi padre me enseñó a ser'- Al oír esto, la figura, mejor conocido como Parca, el principal Dios de la Muerte, mostró una sonrisa y una mirada llenas de locura -' Y no me importa, de donde provenga ese poder'- Al decir esto último los ojos ceniza del chico brillaron y el lobo aulló. En ese instante la niebla gris en la mano del chico se extendió por todo su cuerpo y empezó a girar a su alrededor.

La niebla violeta en la mano de Parca fue arrastrada y por la niebla gris. Y el lobo, que seguía aullando, se convirconvirio en una niebla blanca que se junto con la gris y la violeta, la cual se había vuelto negra, para empezar a girar y envolver al chico.

'Ooooohh, parece que tu espíritu animal está de acuerdo contigo, aunque... ¿cómo lidiaras con la energía positiva del espíritu, a la vez que absorbe mi Esencia negativa?'- Parca simplemente vería todo sin quitar su sonrisa.

'¡¡AAAAAAAAARRRRRHHH!!'-

*Crujido*

Se escuchó un grito de dolor seguido del sonido de algo desquebrajandose.

El grito continuo por varios minutos, hasta que todos los colores de la niebla a su alrededor se mesclaron y formaron un gris opaco.

Esta niebla emitió un brillo y desapareció junto a la figura en su interior.

'Bueno... Esto será interesante'- Parca al ver que el chico se había ido, hizo aparecer un tipo de proyección.

◇◇◇◇◇

Justo al frente del hogar De el chico, estaban los bandidos que sobrevivieron y los cadáveres de los que murieron. Los bandidos estaban recogiendo los cadáveres para quemarlos.

Cuando unos bandidos estaban apunto de recoger el cadáver del chico, sintieron un escalofrío pasar por sus espaldas, lo cual los paralizó. Un segundo después, todos los bandidos del área tuvieron el mismo escalofrío.

Del cadáver del chico empezó a salir un humo gris, que en pocos segundos formó una figura humanoide. La figura era casi idéntica al chico, sólo que está poseía orejas y cola de lobo, más unas garras de 2 cm de largo.

La figura se mantuvo quieta por casi un minuto, todos los bandidos se quedaron donde estaban, todos ellos sentían que si daban un paso, sería su FIN.

Sin aviso previo, la figura abrió sus ojos, el derecho era más negro que el carbón, y el izquierdo era más blanco que una perla, ambos ojos no tenían pupila. Junto a los ojos, apareció una siniestra sonrisa llena de colmillos que emitía un brillo violeta.

Todos los bandidos sintieron terror, pues esos ojos y sonrisa traían algo con ellos, una inmensa sed de sangre.

Antes de que cualquiera de ellos diera un paso, la figura ya había decapitado a uno de ellos, iniciando así su matanza.

Los gritos de los bandidos se oyeron por por los alrededores durante unos minutos, hasta que sólo quedé el silencio.

Al final de todo, la figura quedó al frente de un cadáver en específico, el cadáver de una mujer con ojos color ceniza.

La sonrisa de la figura había desaparecido, sólo le quedaban los ojos.

Se pudieron oir unos pasos desde el bosque, la figura al volter se encontró con la mirada de una chica, se veía de unos ventitanto años y tenía los ojos de color ceniza. Traía puesta una armadura plateada y una espada ensangrentada su mano.

La figura la miro por unos segundos hasta que lentamente cerró los ojos. Al cerrarlos por completo está empezó a volverse cenizas que se desaparecían en el aire.

◇◇◇◇◇

Devuelta con Parca en el espacio negro.

'Bueno, esto fue... realmente interesante, a la vez que algo triste'- Dijo mientras la figura gris aparecía enfrente de él y comenzaba a caer, pero antes de tocar el piso, Parca la trataría -'Je, realmente eres interesante, ¿verdad? Espero que disfrutes de tu nueva vida cuando despiertes, chico'- Al acabar de hablar, dejaría la figura en una cama muy similar a un ataúd que apareció de la nada mientras sonreía.

FINAL DE CAPITULO I.

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