Capítulo 62
✥——————✥——————✥
- ¿Cambiaste de opinión y cambiaras tus creencias? - Le pregunto Rosalie cruzada de brazos
- Es más que obvio que eso jamás pasara - La miro- ¿Te recuerdo quién soy?
- Sé quién eres perfectamente - Espeto- Eres mi mujer, pero estas cegada ante la influencia de esa niña
- No la metas en esto - Le dijo entre dientes manteniendo la calma- Recuerda como termino todo cuando la metieron la última vez y esta vez no será diferente
- ¿Por qué ella está por encima de nosotras? - Le pregunto Carmen mirándola
Astrid ignoro su pregunta para levantarse de su silla y caminar hasta su vitrina personal, agarro ocho frascos con un líquido rojo brillante, se acercó a su escritorio y los acomodo en filas enfrente de ella.
Se sentó en su silla y miro las pociones para mirarlas a ellas, se aclaró la garganta ya que se le estaba creando un nudo en esta.
- Solo les vengo a proponer algo - Empezó mirándolas detenidamente- Si ustedes quieren regresar a mi castillo y a mi lado, son bienvenidas, siempre y cuando no me vuelvan a pedir cambiar mis creencias al igual que las de mi mujer, aparte que tendrán que aceptar como son las cosas ahora
- ¿Y si no queremos? - Le pregunto Irina cruzada de brazos- ¿Si seguimos firmes a nuestras peticiones?
- Tomaran una poción cada quien, sentirán un escalofrió y podrán a volver a retirarse de mi castillo, pero sin dolor alguno - Sonrió de lado- Ya que la poción cortara definitivamente nuestro lazo y dejaremos de ser parejas destinadas las nueve, está en sus manos - Se recostó en el respaldo de su silla
- ¿Qué? - Le pregunto Esme confundida- ¿Dejaremos de ser parejas para siempre?
- Para siempre - Asintió- Solo seguiré siendo pareja de Renesmee y Daphne, ambas seguirán viviendo en mi castillo, seguiremos nuestras vidas perfectas y ustedes convivirán con Renesmee ya que son sus tías y madre, llevaremos la fiesta en paz entre nosotras de una vez por todas
- ¿Y si no queremos ninguna de las dos opciones? - Le pregunto Carmen mirando la poción- ¿Si no queremos dejarte definitivamente ni aceptar tus condiciones?
- No hay otra opción, querida - Apoyo su codo en el reposabrazos y su mentón quedo en sus nudillos- Es una u otra, no más ni menos, ahora escojan... No tenemos todo el tiempo, tengo a mi familia esperándome abajo y a ustedes Renesmee y esposos
- No te dejare - Murmuro Irina- Ya perdí un compañero, no perderé otro, pero no quiero aceptar vivir aquí y dejar que sigas cometiendo atrocidades
- Toma la poción, Irina - Le sugirió- Nada ni nadie en este castillo dejará sus creencias por ti o alguna de ustedes, nadie se preocupará si tienen tu aprobación o no, no eres nadie para este castillo, exceptuando a Renesmee y a mí
- Estoy como Irina - Murmuro Tanya- Te he esperado siglos, no te perderé, pero no quiero vivir aceptando todo lo que pasa en este castillo
- Vuelvo a repetir - Ladeo un poco su cabeza- Toma la poción, Tanya, solo hay dos opciones, no tres ni cuatro
Ninguna se atrevía a tomar la poción y dejarla, pero tampoco querían vivir aceptando todo lo que sucedida en aquel castillo lleno de maldad.
- ¿Y por qué no la tomas tú? - Le pregunto Bella con su típica curiosidad
- Porque si la tomo cortare todos los lazos, incluyendo el de Renesmee y Daphne - Le contesto- Y no las dejare, ellas son tan mías como ustedes lo son, pero no obligaré a nadie estar conmigo, un "monstruo" - Hizo comillas recordando todas las veces que la llamaron así
El silencio volvió a llenarse en el despacho de Astrid, nadie se movía, solo se miraban entre ellas, la poción y Astrid, quien tenía su rostro inexpresivo y su postura relajada.
La puerta se abrió dejando ver a Daphne cambiada, ahora vestida un hermoso vestido rojo con detalles dorados, su cabello rubio estaba suelto peinado con lindos y delicados tirabuzones, su maquillaje era muy simple y sus labios pintados de un rojo sangre.
- No han decidido por lo visto - Miro las pociones y a las ocho inmorales- ¿Interrumpo? - Miro a Astrid que estaba embellecida ante ella
- Jamás - Apareció enfrente de ella- Estás bellísima, amada mía - Agarro su mano para besar el dorso de esta- Por favor, acompáñame en esto, no quiero perder la poca cordura
- Siempre te acompañare - Beso la comisura de Astrid haciéndola ronronear
Ambas caminaron hasta la silla de Astrid bajo las intensas miradas de las ocho mujeres que fulminaban con la mirada a la menor, Daphne se sentó en las piernas de Astrid quien no podía despejar su mirada de ella.
- ¿Entonces? - Le pregunto arrogantemente- ¿Dejaran en paz a mi mujer y familia o aceptaran nuestra forma de vida y vivirán en el castillo? - Los ojos ahora carmesíes de Daphne las miraba con desdén
- Ella no...
- Ella puede estar aquí – Astrid interrumpió toscamente a Irina- Es la señora y ama de este castillo a mi lado, ella está involucrada en todas y cada una de las decisiones que se toman en este castillo - Las miro con severidad- Si no entienden eso, tomen la poción y sigamos con nuestras vidas
Todas apretaron sus mandíbulas mirando como Daphne seguía tan arrogante entre los brazos de Astrid.
- Bien - Espeto Rosalie- No quiero ver como vives entre la desdicha - Agarro la poción
- ¿Por qué viviría en la desdicha? - Le pregunto confundida- Tengo al mundo mágico y muggle bajo mi control, tengo dos parejas leales a mí, tengo tres preciosos hijos, tengo la vida perfecta... solo falta que ustedes acepten ello y se unan a mí, recuerden; Si no puedes vencer a tu enemigo únete a el
- Mi mujer no es su enemigo, pero se están empeñando a que así sea - Les dijo Daphne peinando los cabellos platinados de la mayor- No lo fue antes ni lo será ahora, pero piensen como les irían después - Las miro- Que pasara al ya no tener la protección del lazo que las une, recuerden que allá a fuera todo el control lo tenemos nosotras, ustedes son inmunes a lo que pasa allá a fuera, gracias a Astrid - Miro a su mujer- ¿O me equivoco amor? - Con el dedo índice y pulgar agarro el mentón de la mayor haciendo que la mire
- Ni un poco - Murmuro mirando los labios rojizos no esta
Ahí lo notaron, Daphne estaba manipulando tan fácilmente a Astrid con solo hacer que la mire, aquello hizo que vibraran del enojo, la poción en la mano de Rosalie estallo cuando esta la apretó con fuerza.
- Eso responde nuestras incógnitas - Murmuro Daphne mirando el líquido rojo deslizarse por la mano de Rosalie- Tendremos a las ocho en casa - Miro a la mayor que seguía perdida en sus labios haciéndola sonreír de lado
- Me están usando - Murmuro Astrid alzando su mirada a los ojos carmesíes de esta- Y la verdad, no me molesta ser usada por ti - Ronroneo apegando más a la menor a ella con posesividad haciéndola jadear
- Seguimos aquí - Dijo Kate entre dientes
- Mil disculpas - Aclaro su garganta- Ya con su decisión tomada, es hora de informársela a Renesmee y se iniciara su traslado de Nueva York al castillo - Daphne se levantó de sus piernas para que ella se pudiera parar- Las pociones estarán a su disposición cuando ya no puedan más - Las agarro para volverlas a guardar e irse del despacho
- No soportaran ni un poco mi mandato - Les sonrió- No podrán soportar la cantidad de sangre que se derrama en mi castillo, mucho menos ver tantas personas siendo torturadas o amenazadas a muerte y querer intervenir - Alzo más su rosto con altanería- Tengo a Astrid en las palmas de mis manos, una sola mala mirada o comentario hacia mí y ustedes volverán a estar fuera de mi castillo, pero para siempre y lo más seguro que muertas- Se rio levemente
✥——————✥——————✥
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro