Capítulo 26
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Todas estaban reunidas en la sala principal de la casa confundidas, Astrid las había reunido en aquel lugar, pero ella había salido de imprevisto, cuando apareció la vieron arrodillada en medio de todas con la cabeza agachada.
- Perdónenme - Hablo que alguna de ellas lo hiciera primero- Perdónenme por todo lo que les hice, como le dije a Bella, perdónenme por ser tan imbécil con ustedes, fui una patán como dice mi hermano, fui injusta y dura con ustedes desde el primer segundo de conocernos, no fui buena compañera, las trate mal y negué toda relación con ustedes - Mantuvo la cabeza agachada totalmente arrepentida
>> Me cerré tanto ante ustedes, les hice daño por ello y por involucrarme sexualmente con alguien más, me arrepiento de todo, debí ser mejor pareja para todas ustedes, pero tengo miedo, miedo a todo lo que me hacen sentir, miedo a que la profecía se cumplía y mi objetivo de nacer no se cumpla - Negó con la cabeza con lentitud- No me da miedo, me de terror que aquello no se cumpla y que ustedes tengan el control de mí como Renesmee lo está teniendo en mí
>> Entenderé que tarden en poderme perdonar o que simplemente no puedan hacerlo, las entenderé, fui una total estúpida con ustedes, no merezco el perdón de alguna de ustedes o que cambien sus decisiones de querer algo conmigo, lo entenderé - Alzo su cabeza para mirarlas
Todas estaban en silencio procesando todo, notaron el arrepentimiento en sus ojos y voz, podían notar su miedo a lo que sentía por ellas, Jasper les decía que, si sentía amor por ellas, pero se negaba y ahora podían verlo con mayor claridad.
- Tienes razón, fuiste una estúpida y patán - Espeto Rosalie- Pero eres nuestra compañera, por más que no queramos rechazarte o darte un poco de tu propio chocolate, no podríamos, aparte que no somos como tú para hacerlo
- Pero no significa que no tengamos la dignidad y el orgullo tan bajo para perdonarte ahora mismo - Hablo Tanya cruzada de brazos- Nos hiciste daño y nos rechazaste por mucho tiempo, nos tomaremos el tiempo para ver tus mejores cambios, después cada una te perdonara cuando se sienta lista
Astrid asintió parándose del piso, los pasos de Renesmee junto a los de Edward llenaron el silencio que se había creado después de la indicación de Tanya.
La menor apenas miro a la rubia corrió hacia ella para brincar un poco y abrazarla por el cuello, fue bien recibida por Astrid.
- Hola bodoque - Beso su mejilla- ¿Cómo te la pasaste con tu padre?
- Fuimos al cine - Le dijo con emoción- Después al parque y me compro helado
- ¿De chocolate? - Le pregunto con diversión
- ¡Sí! - Asintió con euforia haciéndola reír- ¿pasa algo? - Miro al resto
- Cosas de nosotras, pequeña - Le sonrió- Nada de qué preocuparse, pudimos solucionarlo juntas, como pareja
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Todos estaban en el patio trasero viendo como Kate seguía ayudando a Bella con su don, Renesmee estaba en la reserva con Jacob así que podían entrenar sin distracciones.
Alice dio un pequeño salto en su lugar cuando de repente unos brazos la rodearon por su espalda, siempre se sorprendían la facilidad de Astrid para asustarlas, cosa que era difícil ya que sentían su presencia desde kilómetros.
- Buenas tardes, cariño - Le murmuro al oído erizando la piel de la más baja
- Buenas tardes - Le murmuro sintiéndose segura y completa entre sus brazos
Los labios suaves y carnosos de Astrid cuando apenas tocaron su piel de su mejilla besándola con cariño hicieron estragos en su estómago, esas reacciones que solo con Jasper sentía, ahora las sentía igual con ella.
- Hueles a flores frescas y miel - Ronroneo deslizando la punta de su nariz en el cuello de la más baja- Hueles tan exquisito
- Astrid - Suspiro sintiendo su agarre tan posesivo
- Pero más exquisito es escuchar mi nombre de ti no podemos - Beso su cuello castamente- Lamentablemente no sucederá algo más, tengo que ganarme su perdón de forma justa - Con su magia hizo aparecer un ramo de flores- Espero este pequeño presente alegre su tarde, señorita Cullen - Beso nuevamente su mejilla para mirar al frente el entrenamiento
Alice observaba el ramo de rosas entre sus manos, eran flores mágicas, no las reconocía haciendo que se vuelvan más especiales para ella.
Alzo su cabeza para verla, se encontró con los ojos bicolores de Astrid mirándola con ternura y amor, ya no eran fríos y vacíos como antes, una linda sonrisa adornaba los labios carnosos que ya había tenido la dicha de besarlos.
- Gracias - Sonrió ampliamente poniéndose de puntillas para alcanzar su mejilla
Planto un casto beso en este para irse con sus flores adentro de la casa, sentía la mirada intensa de Astrid en ella poniéndola nerviosa.
- Usando trucos antiguos - Bromeo Kate al ver que logro lo que quería
- Son presentes que a todas les gustan - Se encogió de hombro con inocencia- No veo lo malo - Apareció una hortensia blanca para ponérsela en su oreja- El blanco es lo tuyo, querida - Halago para besar su mejilla suavemente
- Tú eres lo mío - Agarro la túnica de Astrid atrayéndola a ella para besarla con posesividad
Ambas ronronearon al sentir sus labios danzando con sincronía, las manos firmes y posesivas de Astrid se posaron en la espalda baja de Kate terminando de pegar su cuerpo al de ella.
- Eso no es ser muy fuerte, Kate - La regaño Tanya haciendo que se dejen besar
- Sino mal recuerdo, paso lo mismo cuando la atacamos por acostarse con alguien más - Alzo una ceja- Dejaste que te besara para que después te excusaras que era alguien estúpidamente atractiva
Tanya resoplo para irse a dentro de la casa, Emmett se carcajeo a la lejanía seguido de un golpe, todos se lo atribuyeron a que Rosalie lo reprendió por reírse.
- Mía - Gruñó posesivamente para besarla de nuevo
Kate jadeo de sorpresa cuando la beso tan inesperadamente con tanto posesividad, la lengua de Astrid había aprovechado para colarse en su boca cuando jadeo, ambas estaban ronroneando ante como todo estaba elevándose con facilidad.
La mayor gruñó molesta cuando la menor corto el beso, hizo un puchero con su labio inferior preparándose para hacer un berrinche.
- No me dejes así después de provocarme - Berrincho sin soltarla
- Créeme que quiero joderte tanto que solo puedas decir palabras cortas - Beso castamente el puchero- Pero tengo que ganarme su perdón limpiamente
- Si haces todo el trabajo, te perdono - Le dijo sugerentemente- No me molestaría que... - Bajo su mano derecha para llegar a su entrepierna- Todo esto entre en mí a como gustes - Lo apretó levemente haciendo que gima
- Eres una diablilla - Sonrió con diversión- Pero esta vez no, amor - La beso castamente en los labios para irse a dentro de la casa dejándola frustrada
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