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Vieron como la rubia buscaba en su túnica hasta que saco una pequeña poción, le quito el corcho que la tapaba y tomo de golpe en contenido negro.

Tiro la botella dentro de su túnica y puso sus manos en sus ojos mientras gruñía molesta, unos segundos después vieron como su cabello se aclaraba más, estaba perdiendo el color rubio levemente quedando en un rubio casi cenizo.

- Mejor - Murmuro sacando sus manos de los ojos

Vieron como una hermosa joven aparecía en la sala, tenía su cabello castaño corto bien peinado a pesar de estar suelto, era pálida, pero no al nivel de todos ellos, podían escuchar perfectamente su corazón resonar en la habitación.

- Querida - Se acerco a Astrid- No sé qué le hiciste o le dijiste a tu acólito que estaba temblando del miedo - Acomodo la túnica de la rubia estando demasiado cerca de ella, cosa que no le agrado a ninguna de las chicas

- Los planes se adelantaron - Le soltó de golpe- Ahora ve a preparar todo, lo haremos ahora

- No - Negó rápidamente- No puedes adelantarlos, no ahora

- No tengo la culpa que te comprometieras con tu noviecito - Espeto- Sabes que me interesa un bledo tus planes

- Eres una maldita egoísta - Alzo una mano para golpearla, pero esta jamás impacto en la mejilla de la rubia al ser agarrada con facilidad por Astrid con su mano izquierda

- Que no se te olvide quien soy - La abofeteo con su mano derecha rompiendo su labio- No estas tratando con su estúpido noviecito - La soltó sin tacto mostrando las marcas de sus dedos en la muñeca de la castaña

- Iré con el ministerio y le diré todo - Gruñó molesta- No arruinaras mis planes

- ¡Oh claro! - Sonrió con burla- Anda, ve llorando con el ministerio y cuéntale todo - Borro su sonrisa- Pero también diles como me dabas información de Potter, del ministerio, de Azkaban, de cómo eres una de mis acólitas - La agarro de su cuello- Vamos, dile a todo, que no se te olvide que tú sola te acercaste a mí, pero también que no se te olvide que llegaste a mí y te estuviste ofreciendo como la prostituta que eres

>> Diles como por meses estuvimos teniendo sexo, de cómo engañabas a tu tonto novio mintiéndole sobre que hacías, dile a papi y a mami que su linda hija perfecta y superficial se ha comportado como una fácil - Gruñó molesta viendo como Pansy intentaba salir de su agarre- Ahora prepárate y haz lo que estaba planeado - La soltó sin tacto haciendo que caiga al suelo jadeando por aire

Las marcas de la mano de Astrid eran muy notorias, el rostro pálido de la castaña se había puesto ligeramente morado por la falta de oxígeno, cuando estuvo más tranquila desapareció de la casa.

Astrid saco un conjunto de ropa de su túnica para después irse a la habitación que le habían asignado, una mujer y tres hombres acompañaban al joven que había mandado a preparar todo, los cinco mantuvieron la cabeza agachada mirando el suelo temerosos a lo que podía pasar.

Esme le iba a ofrecer algo cuando Astrid regreso a la sala, se quedaron observando con suma atención su conjunto, se veía hermosa con su ropa más oscura de lo habitual, solo su blusa era de un color más vivo.

Su cabello estaba bien peinado, pero suelto dejando ver lo rizado y largo que era, se acercó hacia sus acólitos que temblaron más del miedo ante su presencia.

- Esta todo mi ama - Le dijo el joven alzando la cabeza- Todos esperan que haga lo planeado

- Espero que no cometan ni un solo error, Everett - Le dijo entre dientes- No quieres acabar como su primo, ninguno de ustedes en realidad - Miro a los tres más

- Esta todo listo - Le dijo Pansy apareciendo detrás de ella- Solo falta que te presentes

Vieron como su labio y cuello estaban como nuevos, su ropa era diferente a la que había usado hace unos minutos atrás y su rosto estaba inexpresivo.

Todas gruñeron molestas cuando el brazo de Astrid rodeo su cintura apegándola todo lo que podía a su cuerpo, iban a decir algo ante aquello, pero los siete desaparecieron dejándolas con la palabra en la boca.

Astrid junto a sus acólitos aparecieron enfrente de la fuente del ministerio, la rubia nunca aparto su brazo de la cintura de la castaña que ya se había apegado más a ella pintando una sonrisa de autosuficiencia en su rosto.

Los reporteros rápidamente empezaron a tomarles fotos mientras las bombardearon de preguntas y peticiones de algunas palabras para sus revistas o periódicos correspondientes.

- Astrid - La llamo Harry- Veo que la señorita Parkinson logro convencerte

- Así es - Sonrió de lado mirando de reojo a la castaña- La señorita Parkinson y yo dialogamos bastante, me abrió los ojos ante toda la situación y me hizo ver un nuevo panorama

Hermione y Ron que estaban detrás de Harry no les agradaba ni un poco aquello, menos cuando la persona que todo el tiempo los molesto en Hogwarts había podido convencer a Astrid, los miraba con soberbia y superioridad junto a esa sonrisa burlona.

- Astrid y yo tuvimos varios desacuerdos al principio, pero nada que una buena conversación no lo pueda solucionar, Potter - Le dijo Pansy con superioridad

- Señorita Grindelwald, ¿Entonces ayudara a la captura de los mortifagos restantes? - Hablo Rita Skeeter

- Así es, ayudare a la captura - Asintió- Pero agradézcanselo a la señorita Parkinson, ella fue la autora de todo, me abrió los ojos haciendo que me dé cuenta que si capturamos a los mortifagos sería para el bien de todos y esa es mi causa, si no mal recuerdan - Sonrió

- Señorita Parkinson, ¿Usted cómo logro dicho suceso? - Le pregunto otro joven

- Con palabras - Sonrió de lado- El poder de las palabras y del dialogo, pueden hacer esto y más, con Astrid fue algo tardado, pero se pudo llegar a un punto medio donde se ha podido mejor el panorama de todo

Las preguntas siguieron mientras les tomaban fotos, el trio de oro no les agradaba que Pansy Parkinson fuera la autora de todo, pero también estaban agradecidos con ella, ahora tendrían a Astrid ayudándolos en la captura en los mortifagos restantes.

- Astrid, bienvenida - Le dijo el ministro- Gracias por sumarte a esta causa

- Es por el bien de todos, ministro - Estrecho su mano con la de él- Y los mortifagos no hacen el bien, así que hay que pararlos, deben de afrontar la ley tarde o temprano

- ¿Unas fotos ministro junto a la señorita Grindelwald? - Le propuso una joven

- Claro, será un honor - Ambos se acomodaron a lado del otro para las fotos

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