Oh, cariño,
atravesaría las llamas por ti,
solo déjame adorarte,
como si fuera la única cosa que haré el resto de mi vida.
Como si fuera la única cosa que haré el resto de mi vida

El precioso chico de ojos grises estacionó su lujoso auto en la entrada del hospital y entró a urgencias queriendo buscar al chico que no esperaba que aceptara su propuesta. No estaba feliz de cómo iban a surgir las cosas, pero tenía que aprovechar esa única oportunidad que la vida le estaba dando o mejor dicho, que el dinero le estaba comprando.

—Disculpe —preguntó en la recepción—. ¿Park MinHa está internada en este hospital?

—Así es, sus hijos están con ella ahora mismo.

—Oh, gracias —Iba a seguir caminando, pero regresó a hablar con la recepcionista—. Una pregunta, ¿podría darme la cuenta del hospital? 

—Disculpe, no podemos hacer eso y no es información que tengamos de primera mano, eso es en cajas.

—Lo que pasa es que quiero ayudar a mi… —¿cómo decirle?—. Soy amigo cercano de la familia y quiero ayudarles.

La mujer dudó, pero ese chico tenía una sonrisa que derretía a cualquiera, llamó al departamento correspondiente e hizo los movimientos para entregarle la cuenta. 

Baekhyun se sintió un poco mal cuando vio la cantidad, para él no era nada alta, incluso la ropa que traía puesta costaba más de lo que en ese momento había pagado. Sus padres siempre le decían que era un niño privilegiado, sobre todo porque él fue adoptado, los señores Byun no pudieron concebir y después de un largo proceso de adopción llegó un recién nacido a sus vidas. No dudaron en llenarlo de todo lo que su fortuna les podía dar y no por eso Baekhyun era precisamente un niño mimado. Solo que su concepto de amor y amistad estaba basado en la gente que se acercaba a él por interés y muchas veces lo usaba a su favor para estar siempre rodeado de gente, por eso cuando Chanyeol no le hizo caso le dolió un poco y cuando supo su situación no dudo en aprovecharse un poco de eso.

—¿Qué haces aquí? —La voz de Chanyeol lo hizo despertar de sus pensamientos—. Yo no te dije que vinieras.

—Perdón, solo creí que tal vez podrías necesitar ayuda —contesta Baekhyun tímidamente.

—Mi hermana se quedará toda la noche con mi madre, yo tengo que ir a mi casa a buscar el dinero para pagar.

—Yo lo he pagado —Chanyeol lo miró un momento y se acercó a él.

—No tenías porque hacer eso, no hemos firmado un trato —dijo en voz muy baja.

—Considéralo un bono o algo parecido. Te llevaré a tu casa y ahí platicaremos un poco de los términos.

—Está bien.

No le quedó de otra, ya había dado su palabra y la iba a cumplir. Además, no estaba en posición de rechazar tal trato, no sabía cuándo conseguiría trabajo y necesitaba que Yoora cuidara a su madre todo el tiempo. Se sentía mal, se sentía usado, creyó que haría muchas cosas por su familia, pero jamás creyó que se tuviera que vender.

🎇

Cuando entraron a la casa Baekhyun observó todo con curiosidad, la casa era incluso más pequeña que su departamento. Todo estaba acomodado y limpio, le gustaba el olor a pino que desprendía la casa y también olía a café.

—Pasemos al comedor —pidió Chanyeol. Baekhyun mordió su labio y lo siguió.

Se sentó y vió como Chanyeol ponía a calentar un poco de agua, lo había visto sin uniforme en muy pocas ocasiones y verlo desenvolverse en su casa de aquella manera lo hizo sonrojarse, pronto lo tendría en su casa probablemente haciendo lo mismo. Se imaginó tomando su cintura por detrás y regalándole sonrisas preciosas.

—Aquí tienes —Chanyeol asentó la taza frente a él—. Tengo mis condiciones.

—Y yo las mías —contestó Baekhyun

—Bueno, empieza.

—Antes que nada, quiero que mañana tengamos una cita para conocernos mejor —Baekhyun se sonrojo cuando dijo eso.

—Está bien.

—Mis padres hace mucho querían comprometerme, les hice creer que salía con alguien —Baekhyun no sostenía la mirada hacía Chanyeol—. Cuando te presente ellos creerán que tenemos una relación desde hace un tiempo.

—Me interesa saber cómo va a estar lo de la boda y todas esas cosas —Chanyeol se ve poco interesado en la plática, a él solo le interesa apurar todo.

—Bueno, en mi familia se tiene que hacer una fiesta de compromiso, espero no te moleste.

—Baekhyun, la cosa es que esto tiene que ser rápido para iniciar con la cláusula del año de una vez por todas.

—Bueno ¿Te parece si hacemos la fiesta de compromiso en una semana? —pide el de ojos grises.

—La boda —empieza a advertir—. No quiero que sea grande y que haya extravagancias, de hecho, me gustaría que solo fuéramos con un juez, todo privado.

—Pero... mis padres.

—Les diremos que estamos perdidamente enamorados y no quisimos esperar. Cumpliré con pedir tu mano frente a ellos, pero nada más, esto no es algo que estoy haciendo por placer.

—Yo lo sé, pero quiero pedirte algo —Baekhyun tomó la mano del chico—. Quiero que mi oportunidad sea real, Chanyeol, no quiero que simplemente me veas como tu empleador, quiero que me des la oportunidad de enamorarte en serio, yo no soy malo.

—Otra cosa —Ignorando todo lo que Baekhyun dijo—. No vamos a tener sexo.

—¿Qué?

—No creo que sea lo correcto, este matrimonio es básicamente un contrato.

—Pero, de vez en cuando tal vez tu y yo.

—No está a discusión.

—Quiero conocer a tu familia —pide tímidamente—. Además, quiero que ellas estén en la fiesta de compromiso, me comprometo a velar por ellas para que nada les haga falta.

—Que tenga el dinero y que me case contigo no hará que deje de trabajar. Buscaré un trabajo.

—Yo puedo hacer que consigas un trabajo en...

—No, Baekhyun, yo puedo ver cómo estás acostumbrado a vivir y debes saber que son cosas que yo no podría darte, pero déjame trabajar porque si lo de nosotros no funciona como tú quieres... —El de ojos grises se levantó de la mesa y se iba a ir, pero fue detenido—. No he terminado de hablar.

—No podemos hacer esto de esta manera, ni siquiera hemos convivido un día y estás hablando del hecho que no va a funcionar. No estás siendo justo, yo estoy accediendo en todo y tú solamente estás...

—Tienes razón, discúlpame —pide Chanyeol.

—Mañana traeré el contrato y después tendremos nuestra cita. ¿Te parece?

—Está bien.

Baekhyun se puso de puntillas y le robó un pequeño beso a Chanyeol, él lo empujó un poco y le cerró la puerta en la cara prácticamente, se sentó en su sala y suspiró muy fuerte porque estaba molesto. Él no quería llegar a ese grado.

✨

Baekhyun había ido a casa de sus padres, él vivía en un departamento que le habían regalado ese mismo año por su cumpleaños. Él solamente tenía veinte años y no estudiaba una carrera universitaria, ayudaba a su padre con la composición y con eso igual le iba muy bien. Sus padres no lo obligaron a estudiar porque creían que obligarlo a hacer cosas que no quería acabarían en un desastre. 

Su madre lo recibió con los brazos abiertos y su padre beso su frente, no había tesoro más preciado para los señores Byun que el sol que alumbró su oscuridad.

—Pasemos a la mesa —dice la señora Byun—. Hoy le dije a JiHee que preparará los hotcakes que tanto te gustan.

—Gracias, mami.

—Hijo, ¿cómo vamos con la canción? —ese fue su padre

—Excelente, papá, tengo una que estoy seguro te va a encantar, pero hoy no vine a hablar de eso con ustedes.

—Pasemos a la mesa y platiquemos mientras desayunamos, te ves demasiado flaco. —Su madre lo tenía abrazado mientras hablaba y lo guió por el lugar que ya conocía.

La mesa de los Byun no era grande como esas que mostraban los dramas que tanto le gustaban a la señora Baekhee. Era una pequeña mesa para cuatro personas porque sentían que una mesa grande es estar muy separados.

El desayuno favorito de Baekhyun constituía en Hotcakes, huevos revueltos, tocino y jugo de naranja, justo como estaba servido, su madre tomó su plato y le dio su porción, a pesar de contar con una cocinera, a la señora Byun le encantaba ser quien les sirviera a sus hombres, pues no hacía mucho en casa y eso estaba totalmente a su alcance.

—Bien —empieza su madre—. ¿Qué quieres decirnos, querido?

—¿Se acuerdan de mi novio?

—El que no has querido presentarnos, por cierto —replicó su padre.

—Él vendrá en estos días a hablar con ustedes, quisiera que por favor lo escuchen.

—Claro —contesta el hombre mayor.

—Además, quiero que sepan que no es alguien de apellido importante, no es un futuro CEO o un cantante o un modelo, es un chico que conocí trabajando en una cafetería.

—Baek... —su madre quiso hablar pero Baek no lo permitió.

—Él es un chico simple a lado de nosotros, su casa incluso es del tamaño de nuestro recibidor y anda en autobús, pero estoy enamorado de él desde hace tanto y quiero estar a su lado para siempre, quiero aprender tanto de él.

—Baek...

—Incluso él se hace cargo de su hermana y su madre, es tan buen hijo, espero que el día que tengamos nuestros hijos...

—Baek ¿él te quiere? —Ojalá pudiera contestar que sí.

—Yo sé que lo hace.

—Entonces su vida no es importante, ni de dónde viene o que hace, siempre y cuando ustedes se quieran —dijo el señor Byun—. Eres lo más valioso que tenemos, hijo, te hemos cuidado con tanto amor y dedicación que es lo mínimo que te mereces en una pareja, lo demás ustedes lo construirán solos. —Ambos padres tomaron su mano y Baekhyun se sintió sumamente feliz, él en serio quería conseguir ese amor.

✨

Chanyeol estaba en el taxi junto a su madre y su hermana, cuando llegaron a su hogar vieron el lujoso auto estacionado y maldijo no recordar la cita, ahora tenía mucho que explicar.

—¿Quién es él? —Si bien, Yoora sabía de su stalker personal, no sabía quién era.

—¿Te metiste en apuestas, Chanyeol? —preguntó su madre.

—No, es...

El taxi se detuvo y Baekhyun se entusiasmó cuando vio a las tres personas bajarse del auto y les sonrió de una manera preciosa. Los tres se acercaron y Chanyeol ni siquiera sabía cómo presentarlo.

—Madre, me presento soy Baekhyun —da una reverencia de 90 grados y sonríe.

—¿Madre? —Yoora lo miro confundido.

—Él…. es mi novio —ambas mujeres voltearon a ver a Chanyeol—. Además, de que... madre perdón, sé que tu salud no es buena para darte este tipo de impresiones, pero es mi futuro esposo.

Las mujeres abrieron los ojos casi como si fueran a salirse de su lugar, mientras Baekhyun veía con una sonrisa amplia y esperanzada a su futuro esposo.