A pesar de ser una cuidad pequeña, Semyeong estaba plagado de dinero y era una de las ciudades mas ricas del estado, por lo mismo era bien conocida por el apodo "hermano menor", ya que era la primera ciudad en probar cualquier producto recién salido al mercado. No había cuidad que lo hiciera antes. También era reconocida por su extensa tradición en cultivo de ciruelas; la ciruela más grande, la mas jugosa, la más dulce, ellos habían ganado todos esos premios.

Por eso no fue de extrañeza para la cuidad, toparse con la salida de una nueva marca de ciruelas. De hecho hubo más emoción que ningún otro sentimiento ya que la mayoría de productos creados en la cuidad no solían salir de ahí, todo para asegurar el turismo. Estas ciruelas serían otra historia; su creador era oriundo de la cuidad y planeaba llevar esas ciruelas hasta otros piases, pero claramente tendría que atravesar el gusto critico de toda la ciudad primero.

Con esta información dada ¿no notas algo fuera de lugar? 

Yo lo hago. De todos los lugares, de todas esas opciones ¿por qué elegirías destruir a tu propia cuidad? ¿por qué querrías ver al lugar que te vio crecer hecho trizas?

Tal vez te sentiste traicionado alguna vez, o quizá jamás te sentiste parte de ese lugar. 

La fórmula fue extrañamente funcional. Cualquiera que la mordiera, la ingiriera o simplemente la oliera sería capaz de desatar, en ciertas medidas, su yo deshumanizado, aquel que busca sangre de quien sea para proclamarse el rey de todo.

Sus efectos variaban y dependían de la cantidad de feromonas que ingirieras de la fruta y así mismo, el tiempo de reacción. Si ingerías una o más de este jugoso fruto, te convertirías en una bestia sin pies ni cabeza en un par de horas y el efecto duraba dos o tres días aproximadamente. En caso de solo conseguir una mísera mordida de la ciruela, los efectos aparecerían en unas 5 o 6 horas y estos mismos desaparecerían en las próximas 24 horas, esta opción te convertía en una bestia más dócil pero no débil. Sin embargo, al solo oler una pequeña cantidad de feromonas, el efecto se daba en minutos y se convertía en una extraña sensación de valentía.

Ninguna persona en el pueblo sabía de aquello, solamente el extraño creador bajo el seudónimo de Viper.

Pov Enid  

Llevábamos al menos 10 minutos trotando (casi corriendo) por todo el bosque, algo nos había comenzado a asechar y mi temor de morir joven se instaló de manera oportuna en ese momento, dejándome tomar las riendas de la situación, eso y el olor asqueroso a ciruela. 

— Mer- Merlina.. — Intentaba recuperar el oxigeno lo más pronto posible para poder hablar — Si morimos aquí-

Fui cortada rápidamente por la voz rasposa de la gótica, algo malditamente atractivo y claramente no se lo mencionaré — No hables de eso — Se escuchaba débil pero aún así no dejó de correr — Vamos a sobrevivir.

Y aunque para mi eso parecía una total mentira, con la voz de Merlina todo comenzaba a verse claro para nuestro futuro. 

Yo dejé de ver el camino por observarla a ella. Su rostro se veía enfadado con la situación, el entrecejo fruncido, sus labios estaban siendo débilmente atacados por sus propios dientes, y una gruesa línea de sudor bajo desde su frente hasta el inicio del cuello; demasiado atractiva para solo estar huyendo de la muerte. 

Algo hizo que su ceño fruncido se deshiciera y en su lugar trajo una mueca de pánico. Sin esperarlo (nuevamente) ella me tacleo como la primera vez que nos reencontramos después de años. Un puñado de arbustos aliviano nuestra caída y otros más nos mantuvieron ocultas de esas cosas.

Fueron segundos antes de que ella se sentara a mi lado, su respiración tan pesada como la mía, pero con jadeos más audibles que los míos. Ambas estábamos agotadas de esta aterradora carrera.

— Tu voz es tan malditamente sexy cuando está rasposa — Salió sin mi permiso de mis labios, me sonrojé inmediatamente pero no dije nada más. Ella solo pareció avergonzarse antes de soltar una risa nasal y una sonrisa torcida, luego solo evitó mi mirada.

— ¿Ahora sueltas las cosas sin más? No recuerdo esa Sinclair — Lo que lanzó pareció más un recordatorio para ella que algo que en realidad quería decir en voz alta. Negó con la cabeza antes de volver sus ojos a mi — Debemos quedarnos aquí unos minutos más antes de continuar con nuestro trayecto.

— Está bien por mi parte, mis piernas comenzaron a arder y no es una sensación linda — Ella se burló de mi debilidad exagerando sus gestos, linda.

Nos levantamos, en lo que para mi fueron unos cuantos segundos, y continuamos sigilosamente el camino a nuestro lugar seguro. De mi boca se escapó una pregunta débil: — ¿Crees que lo lograron?

— Confío en que lo hicieron. Son una familia unida y seguramente llegaron mucho antes que nadie.

— ¿Sabes algo? — Sus ojos conectaron con los míos y yo continué con la oración — Realmente lamento haber hecho eso con ustedes. Ahora me doy cuenta de todo lo que me perdí por actuar de manera tan idiota pero.. para mi yo joven, esa discusión tenía sentido.

— Ya pasó Enid, no debes lamentarlo más.

— Es que en serio no creo que ya haya pasado. Me siento fuera de lugar y todo es mi culpa.

Ella se detuvo, así que yo también lo hice.

— Lo arruinaste, pero de nada sirve recordarlo porque ya estamos heridas, y que lo lamentes no arregla la herida que dejó marca — No quise hablar más porque parecía debatirse muy en su interior si decir lo que tenía en mente valía la pena. Parece ser que sí — De verdad me gustabas.

Que lo dijera en voz alta solo me hizo darme cuenta que fui una total idiota con ella y sus sentimientos.

— Tú también me gustabas — Me acerqué más a ella de lo que planeaba, esperando por un empujón que jamás llegó — Aún me gustas.  

— Entonces ¿por qué.. — Ella dejó al aire la pregunta y yo sabía exactamente a que se refería. Me tomé el atrevimiento de sujetar su mano entre la mía.

— ¿Recuerdas esa canción que siempre escuchabas cuando ibas a mis entrenamientos? — Aclaré un poco mi garganta para poder cantarle un trozo de la canción — But with everybody watching us, our every move, we do have reputations, will you keep it secret? won't let them have it.  

— A mi no me importaban ellos, Enid. Yo te amaba.

— También te amo, pero mi madre era parte de mi y no podía darme el lujo de dejarla verme débil ante tu presencia — Tomé su rostro entre mis manos, anhelando tanto un beso suyo. Mi interior comenzaba a sentirse como "Pink in the Night".

It's like a summer shower - With every drop of rain singing: "I love you, I love you, I love you I love you, I love you, I love you I love you, I love you, I love you!"

I could stare at your back all day - I could stare at your back all day - And I know I've kissed you before, but - I didn't do it right - Can I try again, try again, try again - Try again, and again, and again.

— Te odio — Esa frase salió de sus labios en modo de reproche — Te odio porque a pesar de todo lo que hiciste no puedo evitar que mi corazón se desviva por ti y que mis pensamientos solo se basen en ti. Y ahora me odio a mi misma por lo que hice.

Mi cara se volvió en clara confusión ¿Lo que hizo? Ella no hizo nada en mi contra, yo fui quien arruinó todo. El sonido de pasos nos sacó de la ensoñación, pero ella no pareció querer huir.

— Por mucho tiempo te guardé rencor que amargó por completo mi alma y me hizo hacer lo más horrible e inimaginable. Cuando supe que volviste a la ciudad, y que ahora eras solo tú en el paquete, hice lo que tenía planeado. Me arrepiento ahora, de hecho lo hago desde que te vi escapar de tu casa con esa maleta casi vacía — Mis manos se resbalaron hasta sus hombros y ahora eran las suyas las que tomaban mi rostro. Todo parecía una fantasía. Los pasos a mis espaldas se escuchaban más fuertes y también se multiplicaban, pero algo en mi interior no se decidía entre escapar o simplemente morir — Perdóname por crear esto, pero realmente deseaba con toda mi alma que las personas fueran más que una masa de cobardía como tú. Se salió de control y ahora me siento culpable.

— ¿De qué hablas, Merls? — Quise creer que tal vez mi cerebro ató los cabos mal, ella no pudo crear semejantes demonios ¿o sí?

— De esto, de esas cosas. Perdóname — Ella me besó y en seguida sentí mi espalda ser apuñalada múltiples veces. No grité, solo disfrute la suavidad y dulzura de sus labios que, ahora sabía, besaría por ultima vez. Lo único que logró separarnos fueron mis piernas débiles por la perdida de sangre y ella siendo alejada de mi con un brazo apretando su cuello.

Más pronto de lo que pensé, ella cayó inconsciente entre la maleza y con mis ojos a punto de cerrarse, también pude presenciar como era arremetida una y otra vez por dos mujeres con palos filosos. Después de eso todo era negro, ya no había nada, ni dolor, ni sentimientos.

——

Disculpen mi desaparición, ahora si le estoy echando ganas a la escuela, me quiero graduar con buen promedio o algo así bskjgvf. De verdad no sé que pedos mentales tenía en el momento en que escribí esto, pero es una joyota.

Los amo, no me olviden porque se vienen cositas.

-willy