Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 23

-Porque me dices esto sabiendo que te voy a detener?

-Porque no lo harás, solo vine a decírtelo de frente.

-No puedes hacer esto y esperar que no te retenga aquí.

-Tsuna... solo vine a despedirme...

-No lo digas de esa forma, suena como si tu fueras a mor...- no pudo terminar la frase.

-Nos volveremos a ver, pero por ahora...

-Eres demasiado cruel, porque haces esto? No es tu responsabilidad cobrar venganza, yo puedo hacerlo.

-Se volvió personal- el alpha rozo sus dedos con la mejilla de Tsuna y espero cualquier reacción- sabia de su existencia y sabia que estaba acabando con varias mafias, no hice nada porque... él estaba haciendo algo que siempre quise, pero llego a ti, ese fue un error.

-Porque todos somos iguales- sonrió desilusionado- si seguimos buscando a un culpable terminaremos odiandonos entre nosotros.

-Cualquiera que sea el resultado, no puedo dejar que esto continúe.

-Entonces hagámoslo juntos, sera más fácil y el plan sera más fácil.

-Si me quedo aquí sospechara de todos, no podemos acabar tan fácil con un loco como él.

-Y cual es tu plan? Si vas solo tampoco hay muchas posibilidades.- el castaño enredo sus dedos con los del mayor y trataba de que sus palabras fueran lo suficiente para convencerle.

-Lo siento, no puedo decirte...

-Tu eres un...- fue tomado desprevenido y fue callado con un beso.

-Esto no es fácil, no quiero irme de tu lado... pero tampoco quiero que te hagan daño. Solo déjame hacer esto a mi manera- le suplico sin separarse mucho de sus labios.

El castaño no respondió, acepto devolviendole el beso, que poco a poco se volvió un beso desesperado y exigente.

Mukuro paso sus manos desde la espalda del omega hasta llegar al corte del pantalón, rozando un poco la piel de Tsuna pidiendo permiso para continuar, lo cual le fue dado.

El castaño dejo que Mukuro hiciera lo que quisiera mientras el por su cuenta despojaba de su chamarra y abría la camisa del alpha. Con pequeños besos iba marcando el pecho del mayor, hasta que llego a una parte que no alcanzaba y anhelaba, su cuello.

El alpha, por su parte desabotono el pantalón de su pareja y tuvo acceso a lo que buscaba, poco a poco bajo las manos por el trasero del castaño hasta llegar a su entrada y jugar un poco con ella.

-Mmgh- Tsuna soltó un pequeño gemido que no paso desapercibido para el otro.

-Quieres hacerlo?

-Es injusto si preguntas...

-Aah... no llores- Mukuro se dio cuenta de los pequeños temblores que tenía el menor y detuvo sus acciones- solo... vamos a dormir, esta bien?

-Lo siento... es solo que, todo esto parece realmente una despedida.

-Sabes, cuando me entere de esto te hice la misma pregunta. Porque lo hiciste solo? y creo que ahora lo entiendo...

Re acomodo las ropas del castaño y ambos se acostaron en la cama, Tsuna se aferraba al pecho del mayor y trataba de tranquilizarse.

-El deseo del bienestar de mi familia fue lo que me motivo, pero tu ko tienes que hacer eso...

-Eres mi familia, claro que lo hare- susurro sobre sus labios y al final de la frase se acerco a terminar el beso.

-Asi que ahora si me consideras de esa manera?

-No, no te veo como los demás lo hacen, eres mi familia porque te considero mi pareja.

-Aaah... te odio, como me puedes decir esto ahora?

-Porque siento que es el momento adecuado.

Hubo un gran silencio donde ambos solo se aferraban al otro, hasta que Mukuro tuvo una idea antes de que se durmiera completamente Tsuna.

-Ey...- le susurro mientras jugaba con su cabello.

-Mande...

-Si tuviéramos un bebé que harías?

-No hagas esas bromas- se levanto de golpe.

-Solo... quiero hablar.

-Y porque de ese tema? Sabes lo preocupado que estoy por tu idiotez?

-Solo... olvídalo.

-Un bebé? Estas bromeando? Que voy a hacer con un bebé si desapareces?

-Bueno, es nuestro... así que esperaría que lo amaras...

Escuchar esas palabras lo angustiaba más, se levanto de la cama y salió al balcón de su habitación a tomar aire.

-Eres un idiota- susurro mientras sentía el viento en sus mejillas.

-Te enfermaras, entra al cuarto- le siguió el alpha.

-Necesito despejar mi mente...- me siente en el barandal al borde de caer si hacia un mal movimiento.

-Me estas poniendo nervioso, baja de ahí.

-Talvez así entiendas el como me siento

-Es diferente!

-No lo es!

Los gritos de ambos empezaron a subir de tono y Mukuro no quería llamar la atención.

-Bien, si estarás de esta manera es mejor que me vaya.

Los ojos de Tsuna se llenaron de lagrimas, soltó un grito desgarrador que asusto al de cabellos índigo. Corrió a su lado, temiendo por la vida del otro. Nunca había visto tan mal al castaño y podía asegurar que lo vio en malos momentos, pero esa reacción.

-No me abandones, podemos hacerlo juntos, no quiero perderte... te lo estoy suplicando.

Las palabras de Tsuna le dolían demasiado, pero no podía aceptarlo, su plan funcionaría y con ello lo salvaría, lo estaba haciendo por su bien.

-Tsuna por favor... - susurro el alpha.

-Esto es horrible- se aferro a la cintura del mayor y este lo cargo de nuevo a la habitación.

Se recostaron y Mukuro dejaba salir feromonas para tranquilizar al omega, le susurraba cosas de apoyo y trataba de adormecerlo, al final había sido mala idea ir a verlo.

-Te quiero proteger Tsunayoshi.

-Y yo a ti...

-Esta vez no es tan fácil... déjame cuidarte.

-Si mueres... te matare- contestó después de un largo silencio.

-Esta bien... pero no te daré el gusto.

Ambos sonrieron, si era la última vez, que no todo fuera horrible. Se besaron y abrazaron por un rato, deseando el calor del otro.

-Hana... que se llame Hana si es niña- dijo Tsuna de la nada.

-Porque Hana?- pregunto con curiosidad.

-Porque tu aroma es como las flores...

-La llamaras así por mi?

-Si... me gusta el nombre.

-Bueno... si es niño que se llame Tenma.

-Cielo? Porque ese nombre?

-Es una broma Tsuna? Tu eres mi cielo... el niño debe ser como tu.

-Tonto... es claro que sera guapo como su padre.

-La verdad espero que se parezca a ti... sería aceptado por los demás y no lo juzgarán por ser mi...

-Basta... serias un buen padre.

-Confio más en ti, tienes un don con los niños.

-Tal vez... algún día.

-Si... algún día- el alpha no hablo de sus sospechas, era mejor así. Probablemente Tsuna no estaba embarazado, pero hablar de eso tranquilizo todo...

Inconsciente paso sus manos por el vientre del omega y sonrió.

Algún día...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro