En un pequeño departamento en un barrio de Seúl, Minsu ajustaba su ropa para ir a trabajar frente al espejo. Su semblante era tranquilo, pero sus ojos cansados, casi vacíos, traicionaban las emociones que guardaba en silencio. Las paredes del lugar estaban llenas de marcas, como si los gritos y golpes de días pasados hubieran quedado impregnados en ellas.

Del otro lado de la habitación, Thanos, su pareja desde hace dos años y que además al cumplir un mes de relación Thanos le habia propuesto vivir en su departamento para "estar mas juntos" él era una figura imponente con una voz grave y autoritaria, revisaba su teléfono, aparentemente ajeno a la tensión que flotaba en el aire. Aunque sus manos estaban quietas, su energía irradiaba control absoluto. Había algo aterrador en su manera de existir; cada palabra suya era una orden, cada gesto un recordatorio de quién tenía el poder.

Y pensar que cuando lo conoció él no era así...

-Minsu, ¿ya terminaste? -preguntó Thanos, sin siquiera mirarlo. Su tono era impaciente, como si cualquier cosa que no fuera obediencia inmediata fuera una ofensa personal.

-Sí... ya voy -respondió Minsu con voz temblorosa. Apretaba el cinturón de su pantalón, no porque no estuviera ajustado, sino porque necesitaba aferrarse a algo para no derrumbarse. Salió de la habitación y antes de dirigirse hacia la puerta de salida sintió esa presencia detrás de él; abrazándolo desde atrás con una fuerza posesiva. La diferencia de estatura era muy obvio y Minsu odia eso, odia sentirse pequeño a lado de él.

Thanos empezó a besar su cuello y dejando pequeñas marcas en la zona, quería protestar pero no podía hacer nada ni decir nada.

-No me gusta cuando tardas tanto. No sé cómo esperas que confíe en ti si ni siquiera puedes salir a tiempo. ¿Qué haces cuando no estoy? ¿Hablas con alguien?

Minsu tragó saliva. El miedo hacía que las palabras quedaran atrapadas en su garganta.
-No, no hablo con nadie... Solo... voy al trabajo y regreso.

Thanos lo volteo quedando cara a cara, Minsu no quería verlo solo se mantenía con la cabeza baja, la sombra de Thanos cubría a Minsu como una tormenta inminente. Le tomó la barbilla con fuerza, obligándolo a mirarlo.
-Espero que sea así. Sabes que no me gusta que me des razones para dudar de ti.

Minsu asintió rápidamente, sintiendo el dolor en su mandíbula, pero sin atreverse a quejarse.

Que razón había de hacerlo si te todos modos él hacia lo que quería con Minsu era su Títere favorito.

Esa era la vida que llevaba desde que había conocido a Thanos. Al principio, todo había parecido diferente. Thanos tenía un carisma que atraía a cualquiera; su confianza y poder parecían ofrecer seguridad. Pero con el tiempo, esa seguridad se había convertido en una prisión. Cada día que pasaba, Minsu sentía cómo su propia identidad se desmoronaba, pieza por pieza, hasta quedar reducido a un reflejo pálido de quien había sido.

A pesar de los malos tratos e insultos Minsu aun tenía que la fe que iba a cambiar que iluso.

Sin más que decir Minsu se volteo para irse pero tras eso recibió una pequeña nalgada por parte de su pareja.

- Llega temprano hoy en la noche viene Namsu- Aviso volvió al sofá y prendiendo el televisor. Minsu nomas tuvo que asentir e irse cerrando la puerta con cuidado.

Soltó un pequeño suspiro, a pesar lo que cansado que estaba su trabajo era su única escapatoria tan solo por unas horas. Minsu era un trabajador de una pequeña cafetería se encargaba de atender a los clientes y bueno a su pareja no le gustaba para nada siempre salía con el cuento qué le estaba siendo infiel con uno de los clientes y hasta con sus compañeros de trabajo.

El sueldo era el mínimo pero suficiente para sostener el departamento y los servicios. Bueno en si Thanos ayudaba un poco con los gastos, él trabajaba como bartender en las noches y sabrá dios que hacia ahí. Minsu nunca se atrevía a visitarlo y bueno el que no era tipo que le gusta ir a esos lugares o más bien por que lo teme si es que Tranos ve que piso ese lugar.

A Minsu no le agradaba para nada el amigo de Thanos ese Namgyu aunque él le llama Namsu. Iba al departamento casi con frecuencia y ya estaba harto de verlo además odia la manera en como lo mira, sus palabras burlonas y más que todo que lo toque...

Tan solo recordar que viene esta noche le dio un escalofrío y solo reza a que no beban.

Llego a la cafetería, es un lugar lindo pequeño pero cómodo sufiente para 15 personas el lugar pertenece a una abuelita con su hijo, a Minsu lo tratan a uno más de familia, también su amiga Semi se encuentra ahí como cajera es su única amiga desde la universidad y bueno es la única de su círculo tampoco es bueno haciendo amigos, tenia algunos más pero desde que formó una relación con Thanos solo le queda Semi.

Entro al lugar y vio a su amiga en la caja sacando cuentas y al hijo de la señora acomodando una mesas.

-Buenos días Minsu ¿todo bien? Te veo algo cansado, si deseas puedes tomar este día libre- Hablo con preocupación dejo de hacer su trabajo para dirigir su atención en Minsu y bueno Se-mi no se quedó atrás a penas la campanilla sonó de la puerta lo saludo con una sonrisa.

-N-no se preocupe Yong-sik estoy bien solo no dormi bien- respondió con una sonrisa no debía de preocupar a los demás por cosas que bueno solo no quiere lidiar con más problemas.

-Hey Minsu ¿el idiota te sigue molestando?- Sobresalto un poco con la pegunta de Semi bajando la cabeza todos de la tienda saben su relación con Thanos y como no saberlo si se conocieron acá.

Minsu no sabía exactamente cómo había terminado en una relación con alguien como Thanos. Desde el principio era alguien muy carismático, atento y empalagoso pesar de su semblante violento el era dulce y bueno ahora es todo lo contrario.

Vaya las personas si que saben fingir su apariencia.

Se conocieron en la cafetería, aunque bueno ese tiempo Minsu solo era un cliente que frecuentaba ahi después del trabajo (trabajo que dejo por su pareja para evitar mas pelear) . Y ahí lo vio a él estaba sentado en una esquina, mirando fijamente su teléfono. Parecía molesto, tal vez por algo que acababa de leer. Minsu lo miró de reojo de nuevo, sintiendo una mezcla de curiosidad y cautela. Cuando sus ojos se cruzaron, él no desvió la mirada. Simplemente lo observó, como si estuviera calculando algo.

-¿Siempre vienes aquí?- preguntó de repente, con un tono bajo y cortante que sorprendió a Minsu.

-Ah... sí. Es tranquilo-, respondió Minsu, nervioso.

Asintió, como si la respuesta fuera suficiente. -Tranquilo es bueno-, murmuró.

Esa fue la primera conversación, breve y sin complicaciones. Pero a partir de ese día, él empezó a aparecer con más frecuencia en el café. No hablaba mucho, pero siempre se las arreglaba para sentarse cerca de Minsu, compartiendo un espacio silencioso que, de alguna manera, lo hacía sentir visto. Cuando finalmente se presentó, lo hizo sin rodeos.

-Soy Choi Su-bong pero llamame el gran Thanos. Y tú eres Park Minsu, ¿no?"

El tono directo hizo que Minsu se sintiera expuesto, como si ya supiera todo sobre él. A pesar de ello, se sintió atraído por esa seguridad y ese tono juguetón. Era un contraste total con su propia personalidad. Minsu era reservado, siempre buscando evitar conflictos. Choi Su-bong bueno Thanos, en cambio, no parecía temerle a nada ni a nadie.

Con el tiempo, compartieron números, salieron a algunas citas aunque a algunas si le daba un poco de desconfianza pero siempre asistía, con él tuvo todo, su primer beso y también le entrego algo puro que Minsu lo guardaba para alguien especial y ese momento Thanos era ese alguien especial. Y bueno mientras más avanzaba la relación él le propuso mudarse con Minsu, grave error, fue rapido pero Minsu estaba cegado por el amor y con el tiempo Thanos empezó a dominar más partes de la vida de Minsu, de manera tan gradual que al principio parecía natural. Una invitación a cenar se convirtió en un hábito. Un comentario sobre cómo Minsu debería vestirse mejor se convirtió en una crítica constante.

-Te queda mal esa camisa-, dijo Thanos una noche mientras se preparaban para salir.

-¿De verdad? Pensé que...-

-No pienses tanto. Hazme caso-, interrumpió Thanos, sin mirarlo siquiera.

Aunque esos comentarios molestaban a Minsu, siempre los justificaba. "Él solo quiere lo mejor para mí", pensaba. Pero las cosas empezaron a cambiar cuando Thanos dejó de limitarse a comentarios y comenzó a exigir.

Minsu seguía en su trance recordando como se estaba cayendo su relación.

-¡Hey Minsu!- el grito de Se-mi lo despertó -Mejor quédate en mi casa si es que deseas escapar de ese idiota.

-Pequeño no quiero entrometerme pero déjalo no vale la pena seguir con esa persona.- interrumpió Yong-sik.

Los miro con suavidad odia preocupar a los que quiere pero no conocen a Thanos y teme que los haga daño a ellos por culpa suya.

-Tranquilos estoy bien, mejor ya hay que seguir estan llegando los clientes y gracias por su preocupación pero estoy bien- Les enseño una pequeña sonrisa mientras se dirigía a acomodar la mesa para el cliente.

Ellos solo se les quedó viendo, no podían hacer nada de pues de todo.

Se-mi soltó un largo suspiro y se puso a trabajar pero sin antes de volver su mirada hacia Minsu notando las pequeñas marcas en su cuello y era claro que eran apropósito.

-Ese idiota...- Murmuró para sus adentros.

Minsu tomo los pedidos de los clientes y se dirigió hacia la barra para entregarle al joven los pedidos y antes de irse no sin antes de que de Se-mi lo detuviera del brazo para acercarse.

-Minsu igual toma mi consejo sabes que te puedo ayudar- hablo con un tono suave y entregándole un corrector de maquillaje en su mano -Tapalo con esto.

La vergüenza lo invadio de pies a cabeza haciendo que sus mejillas se calienten -G-gracias Se-mi.

Iba ser un día muy largo.