T H I R T Y T W O
UH. Bueno, espero que le hayan rezado a san Juditas, huarcos. Nunca se me había complicado tanto escribir de esta historia, y se los digo por que hay altas probabilidades de que no les guste ni les entretenga este capítulo.
Sin más, les dejo esta basca.
Lunes otra vez. Ah. ¿Saben cuál es la mejor parte de estudiar una carrera universitaria? Y no, los amigos no cuentan y tampoco decir "prepararme para la vida real y conseguir un buen trabajo".
¿Lo captan? ¡No hay, no existe!
Bueno, para ustedes porque yo tengo a Arthur. Pero eso me está volviendo loco, literalmente. Estamos todos esperando la clase de literatura, han pasado exactamente siete minutos y el profesor –Arthur—no llega. Eso es muy extraño, demasiado si consideramos que es un maniático de la puntualidad.
"No hay tiempo de tolerancia. La puntualidad es una virtud"
Eso había dicho en una de sus clases cuando yo, irónicamente, había llegado tarde. Tampoco ha llegado Feli, aunque eso no es tan extraño pero es ahora cuando me doy cuenta de que necesito más amigos. O al menos uno de emergencia y que no sea un hermano de algún mafioso ni tampoco un homicida-secuestrador-invasor de la privacidad en potencia. No pido mucho.
--Hola, ¿hiciste el trabajo?—alguien me pregunta desde atrás, mientras toca mi hombro con su palma...espera ¡¿trabajo?! Volteé a verlo tan rápido que quitó su mano—El análisis del libro...--sigue hablando porque creo que se dio cuenta de mi expresión.
--¿Cuándo se supone que dejó eso?—le pregunté gritando por lo bajo, y él hizo una expresión serena. Es castaño claro, tan claro que casi se vuelve rubio. Sus ojos también lo son y de hecho creo que es algo parecido a mí, menos por mi atractivo, claro. Además se ve muy delgado y se viste al estilo sureño.
--Lo dejó hace un par de semanas...pero ahora que recuerdo tú estabas vetado—y me miró como curioso, siento que él sabe algo. ¿Debería preocuparme?—Soy David, mucho gusto.
--Ah, un gusto yo me llamo-
--Alfred, toda la clase lo sabe—suelta una risa muy leve, yo le sigo de vuelta aunque fue por nervios e incomodidad. ¡No es que no me guste ser notado pero apuesto que ríen por el día que Arthur me echó de su clase! Oh, esperen ¡él dijo bien mi nombre!—Eres popular, o eso pienso yo.
--¿Popular?—mierda, esto es genial--¿desde cuándo?—mi sonrisa va a romper mis labios, debo calmarme pero ¡AHHHH SOY POPULAR! ¡EN TU CARA, ESTÚPIDO ALFRED DE SECUNDARIA!
--¿Eres amigo de Branks, no?—what? ¿Y ese quién es? Por alguna razón mi sonrisa fue desapareciendo a medida que él se propuso a aclarar lo que estaba diciendo—El que fue arrestado, ya sabes...mide como dos metros.
--¿Iván?
--Él, es sólo que no deja que nadie lo llame por su nombre y como no sabemos pronunciar bien su apellido...bueno ¡Todo el campus habla de él! Y como eres su único amigo, pues también de ti...
Pero qué cara-
--¡No hay clase!—gritó un compañero, inmediatamente todos comenzaron a tomar sus cosas y a salir. Yo me quedé pensando unos segundos he hice lo mismo, aunque sin mucho ánimo como el resto.
David puso una de sus manos sobre mi hombro, logrando que reaccionara y me diera cuenta de que estaba a punto de caer por las escaleras.
--¿Oye, estás bien Jones? Eres el único que se pone así a pesar de que no hay clase...
--Eh? No, es sólo que recordé algo...--Es la primera vez que Arthur no asiste a dar clase, además Iván no me ha texteado aún...--ÑAHAHAHA ¡No es nada!—lo convencí para que ya no hiciera preguntas, no me afecta el hecho de que se entere pero justo ahora no es el mejor momento para presumir de mi vida...--¿Quieres tomar el almuerzo conmigo?
--Uh...claro—me respondió con cara sorprendida. No sabría decir si fue por emoción o por nervios. Espero que sea lo primero porque no quiero ahuyentar a la gente estilo Iván.
Sonreí por su respuesta, comenzamos a caminar juntos con dirección a la cafetería y en el camino se me ocurrió algo agradable.
--Hey dude—comencé y el me prestó atención--¿Puedo llamarte Devie?
.
.
.
--FROGY—entré dando fuertes pasos, estoy cien por ciento seguro que éste barbas locas sabe lo que yo necesito saber. Incluso más, porque es la señora chismosa del campus.
--Oh~ Pero si es mi muchacho favorito~--canturreó como siempre hace—Supongo que has venido en busca de tu damisela en peligro~
--Al grano Francis, dime lo que sabes—cerré la puerta de su oficina y me quedé parado, con los brazos cruzados para controlar mis impulsos—Y si me sales con una bromita te juro que no volverás a ver tu cabello de señora en un buen tiempo.
--Pero sí que eres rudo, mon ami—suspira como si le aburriera el asunto—Está en la estación de policía-
--¡¿Policía?! ¡¿Qué hizo?! ¡¿Iván escapó?!
--Deja que termine, S'il vous plait—me arrojó un papel arrugado a la cabeza. Era el pago de una fianza...firmada por Arthur Kirkland--¿qué significa...?
--¿Recuerdas al hermano menor de Arthur?—me pregunta con una sonrisa ladina. Yo asiento con la cabeza...pero según sé son dos hermanos—El que tiene cara de fresa echada a perder—Ah, el pelirrojo...PFT.
--¿Él qué tiene que ver?
--Bueno, Arthur es el tutor legal de ese diablo. Resulta que Scott fue atrapado mientras vendía...algunos artículos extranjeros—hace una pausa para calar su cigarro, que apenas noto desde que entré—Tu damisela está bien, sólo fue a encargarse de eso. No te preocupes y quita esa cara de espanto, mon ami~
AH. MI CORAZÓN ESTÁ IMPARABLE.
--Damn! Te juro que estaba a punto de explotar...--me tiré sobre el sofá que Frogy tiene, sin fijarme siquiera. Sentí que las piernas me fallarían en cualquier momento. Suspiré, cerré mis ojos y traté de tranquilizarme. Mi teléfono celular vibró entonces, yo lo saqué de mi bolsillo; un mensaje de un número desconocido.
"Deja ya la cueva del bastardo libidinoso y haz tu parte del trato, cazzo!"
...¡¿Cómo consiguió mi número?!
"No soy tu esclavo, dude! Además no sé dónde encontrar a Anthony!"
Respondí de vuelta y en menos de un segundo recibí su respuesta.
"Gimnasio"
Luego otro mensaje, una imagen que tardó en cargarse un poco. Una foto, se ve una casa y dos personas vestidas de negro...MIERDA.
Otras fotos llegaron.
Una en donde acompaño a Iván a la tienda de armas y vodka. Otra de la vez que besé a Arthur fuera de su casa...Y DE LA VEZ QUE IVÁN SE PUSO EXTRAÑO Y ME ACORRALÓ EN SU AUTO.
"¡No le envíes eso a nadie más! Ahora mismo voy a hacerlo, ¡te lo juro!"
Ya no me respondió. Me levanté de un salto y fue corriendo hacia el gimnasio. Escuché a Frogy decir algo mientras me iba pero no le entendí. Corrí por los pasillos, brinqué algunos escalones y ya cuando estaba a punto de llegar, alguien se atravesó y tuve que detenerme...me caí en el proceso.
--The fuck! ¡Ve con cuidado...! ¿Feli?
--Ve...Alfredo—me tendió la mano, no creí que fuera lo suficientemente fuerte para levantarme pero, con un jalón me impulsó hacia adelante para que me parara...estoy demasiado sorprendido y no me gusta—Tengo algo que decirte...--me dijo medio desanimado, ansioso y preocupado. Este día ha sido el más intenso, sin duda.
--¿Qué es? No pongas esa cara Feli, te ayudaré en cualquier cosa que me pidas. ¡Recuerda que somos amigos!—ah, tengo que aprender a controlar lo que digo.
--Ve...es que es algo sobre la escuela—comenzó a decir—no estoy seguro que te guste y por eso necesito tu opinión...--su cara se tornó seria, se paró firme y me miró con seguridad—Voy a dejar la universidad.
...
...
Con mi puño cerrado le di un golpe en la cabeza, no tan fuerte para no lastimarlo pero sí lo suficiente para que reaccionara.
--¿Ya regresaste al mundo real, Feli?
--Ve! ¡Te estoy hablando en serio!—se soba la cabeza y arruga la nariz— ¡Además voy perdiendo el semestre, es ahora o nunca!
--Pues ya sabes lo que pienso al respecto—me cruzo de brazos— ¡Yo también voy perdiendo algunas materias pero no por eso me estoy rindiendo!
--Te ibas a rendir con Arthur sólo por algo que viste—me recrimina. Pero la seriedad se va y recupera su sonrisa vaga.
--Golpe bajo Feli, ¡muy bajo!
Nos comenzamos a reír, siento que así recuperamos el buen humor y nos relajamos. Ya ni siquiera recuerdo por qué estaba corriendo tan desesperado.
--Por cierto Alfredo~--me habla Feli mientras ladea su cabeza—No le vayas a decir nada sobre Lud a mi hermano o tendré que matarte~
QUÉ.
DEMONIOS.
FUE.
ESO.
--...Eh...?—cuando reaccioné Feliciano ya estaba alejándose mientras brincaba contento y despreocupado. Con amigos así, para qué quiero enemigos. Ahg! Eso también hizo que recordar al otro italiano loco...carajo, me están explotando peor que a un negro...
Uh, mal chiste.
Perdóname Lincoln.
Tú también tío Obama.
Bueno, volví al mundo real. Estaba parado frente al gimnasio y al entrar fue imposible no encontrar a la primera al señor nalguirucho. Al parecer está en el equipo de vóley y siendo sinceros, no juega nada mal. Tuve que esperar a que terminara su entrenamiento así que fui a sentarme a las gradas. Jugué un rato en mi teléfono, me reí de algunos memes y le mandé un mensaje a Arthur preguntándole si podía verlo hoy en la noche.
--Este deporte es para chicas, dah—
--AH!—mi grito fue tan fuerte y poco masculino que todos voltearon a verme. Me encogí en mi lugar y algunos comenzaron a reír pero, en cuanto movían un poco la mirada y veían a quien estaba sentado a mi lado, se detenían. Finalmente volvieron a lo suyo...vi a Anthony reconocerme y me saludó con la mano, yo le devolví el gesto y luego volteé a ver a Iván— ¡Te he dicho que no hagas eso!
--Llevo más de quince minutos a tu lado, dah—dice mientras se acomoda la muñequera. Bajé la mirada para verlo por completo, está vestido con su uniforme de básquetbol--¿Cómo me veo? Es mi primer partido, dah.
--¡Wow, te queda genial amigo!—me puse de pie y el también para verlo mejor, la verdad es que le queda muy bien...esperen ¿Iván está más musculoso que yo?—Me siento intimidado viejo, ¿por qué eres así?
--Jejeje~ ¿te quedarás a ver el partido?—se vuelve a sentar, con las piernas abiertas y sus codos recargados en cada una—he estado entrenando sólo para que veas cómo soy el mejor.
--...Iván...—suspiré, miré apenado a mi amigo que tiene la mirada fija en la duela del gimnasio, o tal vez en algo más en su mente—¡pero claro que me quedaré a verte!
Un mensaje llegó a mi teléfono. Rápido lo saqué para leerlo. La respuesta de Arthur.
"Claro, ¿podemos ir a tu apartamento?"
...
¿Por qué a mí? ¡Acabo de decirle a Iván que me quedaría! Mierdamierdamierda.
¡MIERDA!
Oh. Al menos Anthony ya acabó. Bajé rápido y lo intercepté en los vestidores y no, no miré su trasero.
Bueno, un poquito.
¡No es cierto, no lo vi!
--Hey! Alguien te manda a decir esto...--suspiré para tomar aire y decir todo de una vez-- ¡Olvidastetutangaenmicasabastardo!
Y me largué rápido antes de que me usara de mensajero también.
Saliendo choqué accidentalmente con alguien, quedé demasiado impresionado y el otro tipo también. Nos quedamos en trance, no dejábamos de vernos con los ojos casi de fuera. Era un shock, y uno de los feos porque ¡juro que he encontrado a mi gemelo perdido! Iba a decir algo pero un men interrumpió.
--¡Ya vamos a calentar Matthew!—y se lo llevó de un jalón.
Lo vi alejarse, al parecer es de la universidad rival y tiene nombre de niño bonito. ÑAHAHAHAHA.
Oh, yisus. Esto sólo pasa una vez cada alineación estelar, no puedo desperdiciar algo así. Necesito quedarme a ver este partido pero también necesito ver a Arthur mi amorcito Kirkland.
¿Qué hago? ¿Qué hago oh kami sama?
.
.
.
Comer.
Sí, es una buena opción pero...bueno, a la mierda todo. Tal vez una hamburguesa me ayude a pensar, yes.
Me sorprende que hayan llegado hasta aquí (?) Bueno, como han votado en el capítulo anterior y el resultado fue que se tomara en cuenta pues... PREPAREN EL CLORO Y LA MIEL POR SI ACASO.
Timotaj~
Por cierto, ¿qué les parece la portada? Denme sus críticas prego!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro