Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

VIGÉSIMO OCTAVO CAPÍTULO

Actualidad

Hay rastros que no se pierden ni con el paso del tiempo, cosas que parecen no estar destinadas a cambiar, alusiones inquebrantables, a las amplias vueltas que da la vida. En una lista de presagios se veía venir aquella situación, en la que dos amantes estaban dispuestos a correr a un precipicio sin fondo, cayendo sin algún lugar en donde padecer, anhelando alguna especie de final para lo incierto de su relación.

De alguna manera lo sabían, pero no había algo más de donde sostenerse, no había cosa alguna, más que sus manos entrelazadas y la calidez del roce de sus cuerpos. En aquella habitación de cuatro contundentes paredes e iluminación que padecía sin cesar, sus gemidos apaciguados por el caer de la lluvia y gritos cayados por los temerarios truenos.

Mark tenía su lasciva mirada en aquel cuerpo desnudo, puesto en la cama a su merced, el brillo en aquellos ojos le indicaba que lo estaba haciendo bien, que estaban a punto de volver a apaciguar sus guerras. Repartía besos en cada centímetro de la piel del moreno, dejaba ir sus manos por doquier. Donghyuck se dejaba hacer con gusto, aceptando cada disculpa en forma de mimos, olvidando todas las batallas que se habían desencadenado durante la semana.

_ ¿Que estas tratando de hacer? _ Donghyuck llevo sus ojos a lo largo del rostro de Mark.

_Estoy tratando de que me perdones. _Mark habla sobre los labios de Donghyuck, casi parece besarlos de a poco.

Donghyuck se aparta reacio a las provocaciones de Mark. _Sigue intentándolo si quieres, no te perdonare. _

_ ¿Por qué no lo harías? _ Mark habla sobre el oído de Donghyuck, más que una pregunta, es una reafirmación.

Donghyuck bufo, apenas podía conservar la cordura. _ ¿Perdiste la memoria o quieres que te la refresque? _

_No hace falta, sé que hice mal. _Mark murmura, consiente de sí mismo, pero totalmente decidido.

_Bien por ti y tu conciencia. _ Donghyuck silbo, sus palabras mordidas.

_Anda perdóname, no es para tanto. _Mark utiliza ese tono meloso otra vez, sabe que le funcionara en la posición en la que se encuentra, solo es cuestión de tiempo.

Donghyuck respira con dificultad debajo de Mark, apenas puede ordenar ideas en su cerebro, cuando lo único que desea es envolverse en lo que sea que el azabache le dé, está desesperado por aquel ofrecimiento, su dignidad está a punto de surcar los suelos, pero no le podía importar menos, siempre ha sido así de todos modos.

Donghyuck niega rotundamente. _Estoy enojado, muy enojado. _

Mark deja ir una socarrona risilla. _Más bien estas excitado, muy excitado. _

_Deja de provocarme. _

Mark se le queda mirando a las acciones de Donghyuck, está seguro de que el chico no para de contradecirse a sí mismo. _ Quieres que te joda, lo estas deseando. _

_Deja de leerme. _

Donghyuck se aferra a esa espalda lechosa, acercándose hasta que puede unir sus labios con los de Mark. Donghyuck captura con toda la rabia que habita en su cuerpo, sostiene en una constante lucha de dominancia y disfruta en busca de esa paz que tanto necesita. Mark se está dejando besar sin chistar, justo como siempre quiso que reaccionase, en aquellos años en los que pensaban que aquello era una especie de pecado, pero a quien querían engañar, seguían teniendo el cielo bien negado, solo por el hecho de seguir amándose.

Donghyuck recorrió sus manos a lo largo del cuello del azabache, apretaba con alguna especie de sorna, ejerciendo dominancia al obligarlo a seguir sus movimientos. Mark era una especie de complemento en esos momentos, comprendía cada una de sus peticiones y no estaban utilizando palabra alguna. Mark jadeo ante una constante falta de aire, cosa que solo hizo que Donghyuck se encendiera de más. Las respuestas de sus entrepiernas estaban más que claras, empujando en una constante combinación entre placer y dolor.

Donghyuck dejo salir un sinnúmero de barbaridades desde sus labios, cualquiera podía pensar que se estaba volviendo loco, pero Mark solía saber que esa era la señal. Mark se apresuró a remojar sus dedos en aquel liquido viscoso sabor a fresa, disponiéndose a darle placer al moreno, incrustándolos en su entrada. Los deslizo lentamente, siendo tomados con facilidad, los movió con una deliciosa fluidez.

_Joder Mark..._ Donghyuck jadea ante la sensación de placer. _ Mueve esos dedos. _

Mark deja salir un quejido de pura expectativa. _Te arrepentirás de tus palabras. _

Donghyuck deja salir una risilla de sus labios, solamente para provocar las acciones impulsivas de Mark. _Dudo que eso suceda. _

Donghyuck se arrepiente de su suma confianza, cuando los dedos de Mark son remplazados por su miembro sin previo aviso. Donghyuck contiene la respiración y entierra sus uñas en la espalda de Mark. Donghyuck parece ver las estrellas con la primera estocada, a esa le sigue otra y luego otra más. Contento de que sus provocaciones han hecho efecto, empieza a olvidar su enojo de a poco, incluso sabiendo que Mark ha ganado una vez más.

_Sigues siendo deliciosamente estrecho, me encanta que seas solo para mí. _

Donghyuck gruño entre una mezcla de placer profundo y lo que parecía ser un instinto animal. _Eres un posesivo de mierda, pero quiero que me des más, que me lo hagas más rápido. _

_Tus deseos son ordenes, siempre que grites por mí. _

Mark dio estocadas constantes, reduciendo el cuerpo de Donghyuck en un mar de gimoteos, que no hacían sino volver el momento aún más intenso. Mark gruño a medida que aumentaba sus empujes, castigando la entrada sin descanso alguno, disfrutando de como esta se ajustaba cada vez más y apretaba en cada terminación nerviosa de su extensión. Mark sintió como el sudor recorría su frente, viajaba por el puente de su nariz y aterrizaba en sus labios. Mark convino el sabor salado de su sudor, pasando su lengua para probar la piel del moreno, la combinación de sabores lo hizo perder el control. Mark se perdió en su propio ritmo, en sus propios sonidos.

_Mark, Markshi... _Donghyuck sintió como las lágrimas bajaban por sus mejillas, se colaron entre sus labios y pudo sentir el sabor salado. _Así si, sigue... _ Donghyuck trago hondo ignorando el sabor salado, se le antojaba algo aún más salado en su paladar. Pensó en ello de inmediato, pensó en chupar, en tenerlo en su boca, en tragar todo. _Mark ah... _

El nombre de Mark se consumió en la boca entreabierta de Donghyuck, quien ahora tiraba su cabeza hacia tras de puro placer. Aferraba sus manos a la amplia espalda del azabache y enredaba sus piernas en la cintura. Donghyuck tomo su pene entre sus manos, empezó a acariciarlo desesperadamente, a la par de las constantes embestidas. Le gustaba llevar el par, el placer se volvió insoportable, empezó a perder el conocimiento. Termino por escuchar la respiración ahogada de Mark, seguida de un profundo gruñido y una sensación cálida dentro de su ser.

Donghyuck sintió el peso de Mark acomodándose sobre su cuerpo, muy lejos de molestarle, ya estaba bastante acostumbrado. Se quedaron ahí por unos segundos, tratando de recobrar sus respiraciones, de formular palabra alguna. Donghyuck pudo sentir la mirada de Mark, se aseguró de complementarla de inmediato, estaba seguro que diría algo cursi después del sexo, sonrió ante la idea de que nueva frase utilizaría.

_ ¿Que estas mirando? _Donghyuck hablo seriamente.

_Nada en especial, es solo que, eres perfecto para mí. _

Mark se acostó sobre Donghyuck, tenía algo de vergüenza de la nada. Justo como cuando lo beso por primera vez, la imagen mental lo había descolocado. Mark sabía que habían pasado años, que habían pasado muchas cosas más, pero seguía sintiéndose como siempre, como si siguiese enamorado, esperaba que fuese algo reciproco.




Después de dormir hasta que la lluvia se disipará, ambos se habían metido en agua tibia, compartiendo la bañera mientras bebían algo de soju. Donghyuck tomo un trago de la botella tal agua, termino siendo detenido por la mano de Mark. Donghyuck vio como Mark se acercaba para secar sus labios con su pulgar y dejar un casto beso sobre estos. Donghyuck se limitó a hacer una mueca y termino pringando de agua a Mark.

_ ¡Ya! _Donghyuck exclamo con una sonrisa divertida en sus labios.

Mark pidió la palabra con un gesto rápido. _En primera instancia, no deberíamos estar aquí, terminaremos borrachos y haciéndolo otra vez. _

Donghyuck le dio una mirada a Mark, literalmente había escaneado su cuerpo desnudo. _Pensé que ese era el plan, aun me debes miles de disculpas. _

_Deja de provocarme, tengo que ir a trabajar y tu también. _

Donghyuck respiro profundamente con aires de decepcionado, esperaba ser lo suficientemente convincente. _Eres un aguafiestas, mejor déjame subirme en ti, será una cosa rápida. _

_ ¿Te me estas insinuando? _Mark indago.

_ ¿Y que si lo hago? _Donghyuck se acomodó más en la bañera, empezó a abrir las piernas, ganándose la atención que quería.

Mark se le quedo mirando a Donghyuck, deseo que el agua enjabonada no existiese. _Habrá consecuencias. _

_ ¿Como cuáles? _

_Te tomare aquí, en estos momentos. _

_Entonces hazlo, sabes que quieres. _

_ ¿Si te lo hago, me dejaras? _Mark intento negociar.

_Tendrás que esmerarte en que me corra rápidamente, así no llegaremos tarde al trabajo. _

Donghyuck desliza su cuerpo un poco más, está a centímetros de distancia de Mark. Las miradas de ambos se entrelazan, una costumbre que nunca pasa de moda en ellos, parecen compartir miles de secretos en aquellos juegos de miradas, secretos que algunas personas quieren descubrir. Donghyuck tienta el beso acercándose a esos finos labios que complementan perfectamente con sus abultados labios. Mark es el que termina cortando la lejanía de sus labios y los une con una desesperación que los hace reír a ambos.

En un movimiento ágil Mark atrae el cuerpo de Donghyuck hasta treparlo encima de su regazo, da gracias a los cielos porque ambos están totalmente desnudos y da aún más gracias de que ya están totalmente excitados. Sus miembros se rozan levemente mientras se acomodan y los gemidos no se hacen esperar. El agua caliente solo intensifica sus erecciones y la manera en como sus cuerpos friccionan los mantiene al límite.

_Sabes que no hace falta prepararme, puedes hacerlo de una vez. _

_Sigues siendo muy estrecho después de todo, debo prepararte antes de... _

Mark toma el trasero de Donghyuck a manos llenas, desliza un par de dedos que están humectados debido al agua de la bañera y estos empiezan a darle placer a la entrada. Donghyuck chapotea en el agua al ritmo de las manos que le dan placer, se contiene de los hombros mientras mira fijamente a Mark. Donghyuck empieza a sentirse inofensivo ante el toque, sabe que su cara se ha colocado roja y que sus piernas están temblando.

_Mark por favor... _Donghyuck se queja en desesperación.

_ ¿Perdón? _Mark finge demencia.

_No me hagas suplicar otra vez, te matare cuando esto termine. _

_Está bien, está bien... _

Mark da una nalgada doble con sus amplias manos, un quejido de Donghyuck se escucha en el eco del baño, le parece el mejor sonido del maldito mundo, termina mordisqueando sus labios mientras se posiciona desesperadamente, quiere entrar en él, quiere empujar su extensión hasta el final y lo hace. Donghyuck puede sentir como su entrada se familiariza con más facilidad, después de todo lo están haciendo por segunda vez y de manera aún más desesperada.

Donghyuck puede sentir como las estocadas se aceleran, su cuerpo se mueve al compás del de Mark. El movimiento de sus cuerpos es un tanto incomodo al resbalar, pero consiguen marcar un ritmo que les cause placer. El agua se mueve hasta el punto de desbordarse, hasta el punto de que la bañera se empieza a quedar sin agua, debido a la manera en como ambos están follando sin control.

Donghyuck se sostiene de los bordes de la tina para seguir hundiéndose en Mark, sus piernas tiemblan más que nunca, su boca empieza a balbucear barbaridades en el oído del azabache, el cual sonríe entre constantes gemidos. Mark sostiene las caderas con más fuerza y empuja con su regazo para acelerar. Es algo rápido, como sus respiraciones, como sus embestidas y sus murmullos de placer.

Ambos terminan sobre el otro, el agua se llena de ellos o más bien lo que queda de esta. Se quedan mirando unos segundos, entre sus labios morados y sus pieles cenizas por el agua. Una sonrisa surca los labios de estos cómplices, mientras miran el reloj de la pared y se dan de cuanta que han logrado su cometido.




Mark se limitó a realizar su trabajo por el resto de la tarde, aunque no les había hecho caso a las advertencias de Donghyuck, al menos evitaba pisar la casa de sus padres, solo lo hacía cuando era estrictamente necesario y no platicaba más de lo habitual, claro que había algunas excepciones mortales y por mortales se refería a ser golpeado sí o sí. En esos momentos estaba de vuelta a la casa de sus padres, dejaría el dinero de las entregas, agradecido de que no fuesen muchas.

Mark pisa la entrada de la casa y abre con las llaves de repuesto. Entra de inmediato encontrándose a su madre, sumida en el más profundo sueño de post intoxicación de cocaína. Mark cierra los ojos tratando de pensar que no es real, que su madre no se está matando de a poco, a causa de ese polvo blanco, del que su padre la hizo una adicta. Mark se topa de frente con su padre, este lo está esperando sentado, mientras acomoda los paquetes de pastillas.

_ ¿Cómo estuvo lo de las entregas? _Minseok le dio una mirada a su hijo.

_Bien. _

Minseok hizo una mueca. _Puedes dejar las cosas en la mesa y tomar tu paga de esta semana. _

_Bien. _

Mark dejo las cosas en la mesa, tomo el dinero de inmediato. Su padre apenas le resto atención mientras lo hacía, dio gracias por eso. Mark se dio la vuelta dispuesto a retirarse, no quería perder más tiempo en ese lugar, más cuando dio un par de pasos, su padre hizo un sonido que lo detuvo de seguir.

_Espera un momento, tengo algo que decirte. _ Minseok hizo un ademan para que su hijo se acercase.

_Si padre. _

_Tendrás que trabajar este fin de semana, mi vendedor le dieron una lección y ahora tiene las piernas rotas. _

Mark trago hondo. _Este fin de semana no puedo. _

_ ¿Por qué no? _Minseok sonó molesto.

_Es el cumpleaños de Donghyuck, los chicos y yo... _

_ ¿Y qué? _ Minseok le dio una mirada a Mark, siguió contando el dinero en sus manos. _Es solo un amigo. _ Minseok traqueo el fajo de billetes en la mesa. _ ¿No es así? _

Mark palideció ante la mirada de su padre. _No es solo un amigo, es mi mejor amigo. _

_ ¿A sí? _ Minseok sonrió retorcidamente.

_Si. _

Minseok se levantó de su asiente de un solo golpe, en un momento se acercó a Mark y tomo su rostro para acercarlo. Minseok apretó su agarre con fuerza, pero no recibió respuesta alguna, eso lo impaciento de mil maneras. Mark ya no era un niño débil del que se podía aprovechar, al que podía controlar tal marioneta. Mark se había convertido en un hombre fuerte, le sobrepasaba la altura y su voz era más profunda. Minseok solo le quedaba una cosa por picar, algo que nunca había cambiado con los años, el sensible corazón de Mark.

_Siempre me he preguntado, si se me su historia por completo, si me he estado perdiendo cosas. Estoy empezando a pensar, que un amigo no hace por ti, las cosas que Donghyuck ha hecho. _

_ ¿Qué quieres decir? _Mark miro a los ojos de su padre, en busca de algo de comprensión, pero de ella ya no quedaba absolutamente nada.

_Que talvez no tuve la oportunidad suficiente para advertirte sobre esto, pero no me agradaría la idea de que fueses un completo maricón. _

Mark se congelo por completo. _No lo soy. _

_ ¿Qué cosa? _Minseok miro hacia la nada siguiendo su juego de palabras.

_ ¡Que no soy un maricón! _

Minseok asintió, dejo ir la cara de Mark. Una vez la dejo ir, esta tenía clavada sus uñas, dejando unas limpias líneas, que estaban recubriéndose en sangre. Minseok sonrió al verlas, sabía que Mark fingía su resistencia, pero no duraría para siempre, aun conocía su punto débil, solo le faltaba cerciorarse de que fuese así, de que Donghyuck siempre había sido, aquel punto débil, que vivía en su corazón.

_ ¿Y qué hay de Donghyuck? _

Mark evadió la mirada de su padre. _No lo sé, no es mi problema. _

Minseok asintió con exageración, dio vueltas en círculo, para luego parar en seco. _Espero que no me estés mintiendo, porque se me podría olvidar que eres un adulto y te terminaría matando a golpes. _

Mark respiro profundamente, olvidando las amenazas, olvidando el ardor, olvidando el pánico. _Si. _

_ ¿Sí que? _Minseok alzo la voz.

_Si padre. _




Donghyuck cambio una vez más la cantidad de la dosis, es que estaba como en las nubes ese día y lo peor era que se sabía la razón de su estado mental. Ya había fallado la receta de las pastillas tres veces, si su jefe lo descubriese lo echaría. Llevaba trabajando hace varios años en esa empresa, era un químico del resto, pero ganaba para sobrevivir y seguir ocultándose de sus padres.

Donghyuck finalmente acertó la receta, se apresuró a guardar la mezcla y se empezó a dedicar a otra cosa. Comer, por ejemplo, no había comido en todo el día y su estómago no resistía más. De pronto olvido eso de comer, su estómago se retorció por completo. Donghyuck corrió hasta el baño sin parar, aterrizo en sus rodillas apenas llego al cubículo, ahí estaban los efectos secundarios de aquellas pastillas para adelgazar. Pastillas de las que nadie sabía, él era astuto en ocultarlas.

El escalofriante sonido de las arcadas ocupo el cubículo, vacío lo que había en su estómago, que se resumía en licor. Se resignó al bajar la cadena, supuso que empezaría su merienda con el estómago limpio, algo que no había planeado. Donghyuck se enjuago la boca con algo de enjuague bocal, también cepillo sus dientes en un apuro. Listo otra vez, como nuevo. Donghyuck se miró al espejo, su aspecto denotaba lo agotado que estaba.

_Malditas pastillas, al menos están funcionando. _

_ ¿Estás bien? _

Donghyuck se giró mientras secaba su cara, diviso la figura de Jaemin en el umbral de la puerta del baño. Donghyuck soltó la respiración que había contenido, mientras el chico se acercaba a verlo. Jaemin sonrió como de costumbre, coloco una mano en el hombro de Donghyuck y empezó a reconfortarlo. Donghyuck le dio una ojeada a Jaemin aún no se acostumbraba a lo amable que era.

_Me asustaste. _

Jaemin le dio una mirada de represión a Donghyuck. _Debe ser por tu conciencia, no quiero ni saber por qué estabas vomitando. _

Donghyuck rodo los ojos en blanco. _Córtala ya Jaemin, mejor dime que haces aquí. _

_Pasaba por aquí, dejaba a una clienta. _Jaemin hablo coloquialmente.

_No me jodas Jaemin, todas las mujeres aquí tienen cuarenta. _

_Hay que trabajar, de algo hay que vivir. _Jaemin sonrió con descaro.

_¡Qué asco, mejor retírate! _

_Deja de sermonearme y mejor vamos a comer. _

_¿Cómo sabes que es mi hora de almuerzo? _Donghyuck unió sus cejas.

_No lo intuí, lo digo por tu cara. _

Jaemin señalo el rostro de Donghyuck en el reflejo del baño. Donghyuck ya se había visto a si mismo, pero no soportaba verse más de una vez, se veía demacrado, se permitiría comer. Donghyuck llevo su vista hasta Jaemin, asintió un par de veces mientras se acercaba.

_Bien, bien, bien. _ Donghyuck se engancho del brazo de Jaemin, fingiendo ser una de sus clientas, ganándose una sonrisa de su parte. _ Estas de suerte, aceptare tu invitación. _




Llegaron a un restaurante que quedaba a la literal vuelta de la esquina, Donghyuck lo había elegido por ser uno de sus favoritos y Jaemin no había puesto problema alguno. Ambos pidieron sus almuerzos rápidamente, las ordenes no se demoraron en llegar. Jaemin insistió en pagar la comida, Donghyuck termino por resignarse, al menos había convencido al otro de pedir por su cuenta. Jaemin parecía más interesado en hacerlo comer de mas, lo convenció de pedir el plato más grande y Donghyuck se zafo pidiendo una ensalada.

Jaemin lo miraba comer, apenas tocaba su comida. Donghyuck esperaba que el otro dijese algo, si no lo hacía, encendería su modo hablador, ese que usaba en su vida de ídolo, de la cual solo quedaban restos. Donghyuck pensó en que decir, abrió la boca para decir algo, mas vio como Jaemin estaba a punto de hablar y se detuvo abruptamente.

_¿Solo vas a comer una ensalada? _Jaemin sorbió sus fideos, viéndose como de la realeza.

_Tu estas teniendo un simple ramen. _Donghyuck pico una hoja de lechuga.

Jaemin trago para mirar a Donghyuck. _Yo tengo gastritis ¿Tu que tienes? _

Donghyuck puso sus labios en una línea. _ ¿Podemos cambiar de tema? _

_Claro que si, si me dices por que estabas vomitando. _Jaemin sonó coloquial.

_Dijiste que no querías saber. _

_Cambie de opinión. _

Donghyuck titubeo unos segundos, que le parecieron años. _Si te digo, te enojaras, así que es un no. _

Jaemin se le quedo mirando a Donghyuck. _Entonces déjame intuir, porque más nadie lo hará. Te conozco desde hace años, siempre has comido poco, pero nunca has lucido tan delgado. _

_Basta Jaemin... _

_Créeme que te comprendo, mi estómago es un desastre debido al licor que tomo, la gastritis jamás me va a abandonar. Pero tu Donghyuck, tú tienes opciones, muchas opciones de donde elegir ¿Por qué tomar la peor de todas? _

_Estoy bien. _Donghyuck se limitó a decir.

_ ¿Pero hasta cuándo? _Jaemin sonó severo.

_Yo sabré cuando toco fondo, mientras tanto, ni una palabra de esto a nadie. _ 




Perdón por demorarme tanto en actualizar, es que esta historia a penas tiene respuesta y eso me ha estado desmotivando un poco. Eso no significa que no la terminare, amo demasiado esta historia , así que la seguiré actualizando con mas frecuencia. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro