DÉCIMO TERCER CAPÍTULO
Mark con dieciséis años
Mark ahora se encontraba dirigiéndose a la salida, su mano rodeando el brazo de Renjun y jalándolo consigo sin siquiera saludarlo o decir a donde se dirigían. Renjun solo pudo percibir una mano rodeando su brazo hasta la salida del instituto. Las personas miraban a Renjun con lastima, era mucho mejor que reunir valor para mirar a los ojos a Mark, porque ellos le tenían miedo, un miedo que según Renjun era totalmente innecesario.
_Sera mejor que me sueltes antes de que alguien llame a la policía. No ves que estas asustando a todo el mundo sujetándome así. _Renjun hablo con calma, no quería ofender a Mark.
_Discúlpame ¿Te hice algún daño? _Mark pregunto mientras miraba el brazo de Renjun, para luego deslizar su mano hacia abajo soltando el agarre.
_N-o, es solo que tu repentino acto, ha asustado a esas chicas de allá, las cuales ahora te ven como un abusador. _Renjun bajo la mirada ante Mark, su cara tornándose roja de un momento a otro.
_Ellas no pueden creer que el nuevo del instituto callo en las garras del repugnante Mark Lee. _Mark lanzo una mirada a las chicas que observaban con lastima a su acompañante. _ Ellas están celosas, porque te quieren a ti. Pero yo no las veo intentando acercase, así que eres mío por hoy. Sígueme.
_ "Eres mío" _ Esas palabras resonaban en el cerebro de Renjun. Mark había dicho que era suyo y ahora su corazón palpitaba estrepitosamente contra su pecho.
Renjun diviso la mano de Mark que termino agarrando la suya, para luego caminar hacia la salida del instituto. Ahora no era solo las chicas de la banca sino uno que otro par más de ojos observándolos.
Tomarse de las manos era una práctica de parejas en el instituto, pero Mark no parecía saber las reglas o simplemente no le importaba nada a su alrededor. Renjun no veía necesario que sus manos estuviesen entrelazadas, pero tampoco le molestaba.
Mark termino llegando al estacionamiento del instituto, abordando su auto junto con Renjun, para luego conducir por espacio de media hora sin decir ni una sola palabra. Un silencio cómodo alojando el ambiente, hasta que se dio cuenta que Renjun se había quedado dormido en el asiento del copiloto.
_Renjun...Renjun...Renjun... Despiértate Renjun. _Mark paso su pulgar en la mejilla de Renjun una y otra vez, esperando poder despertarlo a punta de cosquillas.
Renjun sintió la frialdad de las manos de Mark sobre sus labios, los pulgares del chico acariciando sus mejillas, así que abrió los ojos lentamente, divisando el rostro de Mark cerca de él. _ ¿Qué haces? _ Menciono Renjun apacible, sus ojos juzgando los movimientos de Mark.
_Despertándote. _Mark se encogió de hombros y retiro su mano de la cara de Renjun pera seguidamente salir del carro. _ ¿Cómo es que solo te despertaste cuando toque tu cara? _
_Mi madre suele despertarme con caricias. _Renjun bajo la mirada. Era un niño de papa y mama, no tenía por qué negarlo.
_ ¡Qué suertudo! A mí me despiertan a golpes. _Un tono de nostalgia se pudo ver en las palabras de Mark.
Renjun se preguntó si el estigma que tenían las personas para con Mark era, porque secretamente sabían a lo que los padres del pelinegro se dedicaban ya que después de un año de haber conocido a Mark el ya no lucia tan endeble ante sus ojos, pero seguía siendo mal visto por el resto del instituto. Mark había cambiado su cabello de ramen por un cabello negro bastante corto. Renjun lo encontraba adorable y le recordaba a sosouke. Renjun comprendía el miedo a Mark con su cabello alborotado, chaquetas de cuero y ropa rasgada. Pero ahora el ya no se veía así ¿Por que tenían que seguir evadiéndolo? Siendo prejuiciosos con Mark. No era justo para él, ya tenía suficiente con sus padres como para ser ignorado por sus compañeros de instituto. Mark solo tenía un par de amigos que podía contar con sus manos y le sobraban dedos, uno de ellos era Renjun.
_Tu cabello...Mark tu cabello... Eres idéntico a sosuke. _Renjun se atrevió a decirle al pelinegro.
_Sosuke..._Eso fue todo, una herida había vuelto a abrirse dentro de Mark.
Ponyo y Sosuke, era la caricatura favorita de Mark y Donghyuck. Solían verla juntos desde que eran unos niños. Los recuerdos llegaron a la mente de Mark de repente. Donghyuck se identificaba mucho con Ponyo, desde su color de piel, hasta su amor por el mar, porque Donghyuck amaba rostizar su piel en la playa y sumergirse en el agua salada. Mark prefería quedarse en la orilla debajo de unas palmeras, para ocultarse de los rayos del sol. La imagen de Donghyuck persiguiéndolo, para cargarlo y sumergirlo en el agua, mientras ambos reían a mas no poder. Mark podía escuchar la risa de ambos retumbando en su mente, desvanecerse a medida que volvía a la realidad.
_ ¿Te sucede algo Mark? _Renjun movió su mano frente a la cara de Mark, quien parecía estar muy absorto en sus propios pensamientos.
_No, solo me perdí en mis memorias, por un momento. _Mark trato de sonreír para despreocupar a Renjun, pero no pudo. Sus labios no lograron formar una sonrisa convincente para Renjun.
_Eran buenas memorias, lo pude ver en tus ojos. _ Renjun sonrió para Mark.
Mark se quedó en silencio, mientras miraba la sonrisa de Renjun. Estaba seguro de que alguien con un alma tan pura como Renjun, merecía conocer un lugar como en el que se encontraban. Renjun miraba hacia el gigantesco árbol que se encontraba frente a ellos. Las enormes ramas que se precipitaban hasta el suelo creando una especie de refugio una vez entrabas en ellas, los rayos de luz del atardecer filtrándose en el gran árbol y creando un efecto etéreo.
_Este es mi lugar favorito para escribir. Suelo ponerme debajo de ese gran árbol que ves, escribir mientras los rayos de sol descienden a lo largo de sus ramas y el atardecer cambia de colores, para dar paso al anochecer. _Mark observo hacia delante y sus ojos color almendrados se encontraron con los rayos del sol.
_Es muy hermoso, desearía haber traído mi cámara ¿Por qué no me avisaste? _Renjun miro el perfil de Mark concentrándose en como la luz iluminaba cada rasgo del rostro del azabache, sus ojos color miel combinaban con los rayos de luz del atardecer. Renjun no supo que le parecía más mágico.
_Se supone que era una sorpresa, además no sabía cómo reaccionarias, algunas personas no les gusta la naturaleza. _Mark volteo su rostro hacia Renjun.
_Deberías ver la memoria de mi cámara, conservo una buena cantidad de fotos de paisajes. _Renjun movió su rostro evitando la mirada curiosa de Mark.
_No te conozco demasiado. Solo ha pasado un año de haberte encontrado, es normal que no sepa todo de ti. _ Mark volvió a mirar hacia delante, se venía enterando de que Renjun había evitado su mirada más veces de las que deseaba.
_Tiene sentido. _Renjun jugo con sus manos, miro alrededor fingiendo una naturalidad innecesaria.
Ambos caminaron hacia dentro del árbol, el interior del mismo era una mezcla entre rayos del sol y sombra dando un aspecto angelical al interior del lugar.
_ Si no fuese porque es un cuento de hadas, diría que aquí vive Peter Pan y Campanita. El lugar es bastante mágico desde aquí adentro. _ El castaño rodeo el lugar, miro de arriba abajo fascinado por la iluminación.
_Eso es lo que más me gusta de este árbol. _ Mark giro para mirar a Renjun de arriba abajo, dudando un poco de lo que iba a decir. _ En respuesta a que me parezco a Sosuke, debo decir que tú te pareces a Peter Pan, con el cabello color castaño claro. _
_A diferencia tuya, yo lo tomare como un cumplido. No creo que me parezca a Peter Pan. Él es hermoso, yo no_ Renjun no se sentía confiado con su aspecto, sus frenos linguales actuaban muy lento para su gusto, su físico era bastante pobre.
Mark encontraba a Renjun bastante fairy , ese chico siempre lucia delicado como la porcelana. _ ¿Te gusta Peter Pan? _
_Amo a Peter Pan. Tengo todas las ediciones de Peter Pan que te puedas imaginar. Todas dicen lo mismo, pero cada portada es diferente, no puedo evitar coleccionarlos. _Los ojos del castaño brillaron mientras hablaba.
Mark lo observo hasta que algo vino a su mente. _Tu aspecto es tan lindo como el de Peter Pan, no tienes nada que envidiarle. Tú aspecto es bastante puro. _
_ ¿Te parezco un chico puro? _ Renjun ladeo su cabeza.
Mark puso sus manos en los bolsillos de su uniforme, mientras miraba a Renjun directamente a los ojos. _Por fuera. _
Renjun esbozo una sonrisa irónica mirando hacia otro lado_ ¿Y por dentro? _
_No lo sé, dejemos que el tiempo me lo diga. _Mark se giró para empezar a caminar.
_ ¿Puedo hacerte una pregunta? _ Dijo el castaño.
_ ¿Tengo otra opción? _ Se encogió de hombros el azabache.
_ Sé que no soy la primera persona que has traído aquí ¿Podría saber quién fue la primera? _ Renjun hablo muy rápido, su corazón de un momento a otro empezó a palpitar un poco más rápido.
Mark detuvo su paso bruscamente, se giró en sus talones para levantar una de sus cejas. Evidentemente estaba juzgando al castaño por su repentina pregunta. _Donghyuck y yo descubrimos este lugar juntos. Tú eres la primera persona que he traído a este lugar. _
Renjun trago hondo después de finalmente poder escuchar su nombre. _Debe ser muy difícil estar aquí solo. _
Mark negó con una mirada sombría. _Después de que Donghyuck se fue, no vine por un largo tiempo. _
_ ¿Cuanto? _ A este punto el corazón de Renjun parecía ser el que estaba manejando dicha conversación.
_Un año. _ La mirada de Mark estaba sobre Renjun, no parecía estar interesado en dar muchos detalles.
_Y la única manera de venir aquí sin sufrir tanto era trayendo a alguien contigo. _ Renjun dio un paso más hacia Mark, moviendo su rostro de un lado al otro, tratando de buscar alguna expresión la cual le permitiese leer a el azabache.
_Si. _ Simple y seco. Así fue como salió de los labios del azabache.
_ ¿Por qué yo? _A este paso Mark terminaría por hartarse de él, pero cada detalle de la vida de Mark era oro puro para Renjun.
_Los otros chicos ya me han visto sufrir lo suficiente, me prohibieron venir aquí para empezar. Y pensé que sería una buena idea traerte a ver este lugar, como agradecimiento por todo lo que haces por mí. _ Mark finalmente parecía querer llorar, pero ni una lagrima parecía surcar esos hermosos ojos.
_No tenías por qué ocultarme las cosas. Cada razón que tengas, dila. Yo soy tu amigo, estaré por ti y para ti. No importa lo que pase. _ Renjun sintió la necesidad de abrazarlo pero no, era demasiado para Mark, quien estaba luchando para no verse más débil frente a él.
_Es difícil confiar en las personas, pero prometo confiar en ti tanto como pueda permitirme hacerlo. _ A Mark no le gustaban las promesas, pero no podía evitar decir lo que los ojos de Renjun le pedían.
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