KARA

Observé a Sam, mientras esperábamos impacientes a que el cirujano hablase. Ambas estábamos muy preocupadas, pero tratamos de mantener la calma. Cuando el hombre se aclaró la garganta solo deseé que Lena estuviera bien.

Lena se había convertido en alguien imprescindible en mi vida. No podía perderla ahora, cuando tenemos tantos planes por hacer. Cuando tenemos un futuro esperándonos a la vuelta de la esquina. Nuestra historia no podía terminarse aquí.

-Cirujano: Buenas noches, soy el Dr. Derek Shepherd. Les comunico que la paciente está estable, dentro de la gravedad. Llegó con una hemorragia interna qué pudimos controlar rápidamente y el arma, afortunadamente, no dañó ningún órgano vital - dijo, y suspiré aliviada- Sin embargo, la paciente sufrió fuertes contusiones en el abdomen y, como resultado, el bazo quedó muy dañado y tuvimos que extirpárselo. Pero no se alarmen, podrá llevar una vida normal siempre que tome ciertas precauciones. En cuanto a la conmoción cerebral, no hemos visto nada extraño en los escáneres, pero hasta qué no desaparezca la inflamación no podremos descartar lesiones más graves. Ahora está en un coma inducido

-Sam: ¿Lena está en coma?

-Dr. Shepherd: Si, dada su situación y, por prevención, lo hemos creído conveniente. Por la mañana le realizaremos más pruebas para evaluar su evolución y, si todo está en orden y no se aprecian lesiones cerebrales, la despertaremos

-Sam: Está bien, ¿puedo entrar a verla?

-Dr. Shepherd: Sí, por supuesto. Agente, acompáñela a la UCI - dijo, marchándose.

-Policía: Señora, si es tan amable...

-Sam: Kara, ¿vienes conmigo?

-Policía: Espere, ¿es un familiar?

-Sam: No

-Policía: Entonces no puede acompañarla, lo siento. Solo familiares y autorizados

-Sam: Pero...

-Kara: Tranquila, ve tú

-Sam: ¿Segura?

-Kara: Sí. No hagas esperar al agente

-Sam: Está bien, pero espérame aquí

Asentí y observé cómo Sam se alejaba con aquel agente de policía, sintiéndome fatal por no poder acompañarla. Me senté, tratando de contener mis lágrimas, pensando qué Lena estaba en la Unidad de Cuidados Intensivos, con un coma inducido. Estaba aliviada de qué la operación hubiera salido bien. Pero me preocupaba tanto que Lena pudiera tener lesiones cerebrales... Y sabía que la incertidumbre no dejaría de lastimarme hasta qué amaneciera.

Alrededor de veinte minutos después, Sam apareció con los ojos enrojecidos y supe que había estado llorando. Se acercó a mí y, antes de que pudiera decir nada, la abracé.

-Kara: Samantha... ¿Cómo la viste?

-Sam: Mal. Tiene el rostro muy golpeado y está llena de cables - dijo, con la voz quebrada- Ni siquiera he podido entrar a verla. Solo me dejaron verla a través del vidrio

-Kara: Bueno, seguro que en la mañana podrás entrar - dije, intentando calmarla- Tal vez consiga que me autoricen para entrar contigo

-Sam: No creo que te guste verla así, estaba tan lastimada, tan indefensa... Mi hermana no se merece lo que le ha pasado - sollozó.

-Kara: Lo sé - dije, abrazándola fuerte, tratando de reprimir mis lágrimas. Pero fue inevitable acabar llorando. Lloramos juntas durante un rato, abrazándonos. Hasta que mi móvil empezó a sonar y deshice el abrazo, disculpándome - Perdona, es Alex. Tengo que contestar

-Sam: Tranquila. Voy un momento al aseo - dijo, levantándose y alejándose por el pasillo.

-Alex: Kara, ¿estás en el hospital?

-Kara: Sí, lo siento. Debería haberte despertado, pero salí a toda prisa - dije, como disculpa- Espera, ¿cómo sabes qué estoy en el hospital?

-Alex: El jefe Jones me llamó. Estoy al tanto de lo ocurrido en Kandor. Sé que la psicópata esa ha agredido a tu paciente, ¿cómo está?

-Kara: Estable, pero le han inducido un coma por si hay lesiones cerebrales. Hasta la mañana no la despertarán. Estoy con su hermana

-Alex: ¿Con Sam? Dile qué siento mucho lo que le ha pasado a su hermana

-Kara: Se lo diré. Otra cosa, ¿cuándo pensabas decirme que Morgan Edge está en libertad?

-Alex: ¿Qué?

-Kara: Samantha me lo ha contado todo esta noche. Que Lionel retiró los cargos y que...

-Alex: Lo siento ­-interrumpió- no era mi intención ocultártelo. Me enteré cuando volvimos de Midvale y con eso de que estabas en el hospital por tu operación de apendicitis no me pareció el mejor momento. Además, hablé con Sam tan pronto como lo supe y me dijo que lo tenía todo bajo control

-Kara: Bueno, ya no importa. Entonces... ¿a ti también te han llamado para participar en el operativo de búsqueda de Alicia y su banda?

-Alex: Sí. Aunque me dejaron en comisaría para coordinarlo todo

-Kara: Menos mal, porque esa mujer es muy peligrosa y no me gustaría qué te pase algo malo a ti o al bebé

-Alex: Tranquila, estaré bien. ¿Vas a quedarte esta noche en el hospital?

-Kara: No lo sé. Pero tal vez sí Samantha se queda me quede con ella para qué no este sola

-Alex: Buena idea, seguro que estará destrozada al ver a su hermana así

-Kara: Sí... Lo está.

Y yo también. Pero no podía decírselo.

-Alex: Bueno, te dejo. Solo quería asegurarme de que estás bien. Cuando entré en tu habitación para avisarte de qué tenía que ir a comisaria me asusté al no verte en la cama

-Kara: Pues tranquila, estoy bien

-Alex: Te llamaré por la mañana

Cuando Alex cortó la llamada, Samantha regresó del baño, sentándose a mi lado.

-Kara: ¿Qué vas a hacer ahora? ¿Te quedarás a pasar la noche en el hospital o te irás a casa y volverás cuándo amanezca?

-Sam: No creo que pueda dormir con esta preocupación y, la verdad, lo último que quiero ahora es volver al apartamento. Cuando escuché tu mensaje vine a toda prisa, aprovechando que Morgan estaba en la ducha. Probablemente esté molesto por haberme ido sin avisarle.

-Kara: Bueno, seguro que cuando le expliques qué viniste por Lena lo entenderá

-Sam: Debería. Pero cuando Morgan está molesto no atiende a razones y lo más probable es que actúe antes de que pueda explicarme. Así que creo que me quedaré en el hospital, esperando que por la mañana esté más calmado

-Kara: En ese caso me quedaré contigo

-Sam: No te preocupes, estaré bien

-Kara: Yo tampoco podré dormir. Así que, si quieres compañía...

-Sam: Está bien, quédate. Tal vez podamos aprovechar esta noche para conocernos un poco mejor

-Kara: Sería genial. Además, eso nos ayudará a mantener la mente ocupada y, con suerte, las horas pasarán más rápido

-Sam: Vale, pues... Empieza tú. Háblame un poco de ti.

Viernes, 1 de enero de 2021

NIA

Desperté con Cait durmiendo a mi lado, completamente desnuda, y fue la mejor sensación. Pasamos una noche increíble y me desperté especialmente cariñosa. Acaricié la mejilla de Cait y la besé con suavidad para despertarla. Ella abrió los ojos y mi corazón se aceleró.

-Nia: Buenos días, preciosa

-Caitlin: Hola... - dijo, estirándose- ¿Dormiste bien?

-Nia: Muy bien. Me dejaste muy relajada anoche - dije, acariciando su vientre, subiendo hasta el límite de sus pechos.

-Caitlin: Nia... - jadeó- ¿No tuviste suficiente anoche?

-Nia: No. Después de pasar la noche contigo ahora quiero más... - susurré, buscando sus pechos con mi boca y lamiendo sus pezones.

-Caitlin: Para... Mi hermana está durmiendo en la habitación de al lado. La escuché llegar anoche

-Nia: Estará de resaca. Seguro que ni se entera. Pero, sí eso te asusta... - dije, acariciando sus pechos- podemos tener sexo silencioso

-Caitlin: No lo tomes a mal, pero después de haberte escuchado gritar a pleno pulmón anoche no creo que seas capaz de estar calladita

-Nia: Bueno, en ese caso... déjame qué sea yo quién te de una alegría de buena mañana - dije, acomodándome entre sus piernas con la clara intención de hacerle un oral.

Anoche me sentía insegura por mi falta de experiencia. Pero hoy me desperté sintiéndome capaz de todo.

-Caitlin: Olvida lo que estás pensando...

-Nia: Vamos, Cait. Déjame probar, tal vez sea buena y todo - sonreí, dispuesta a hacerlo.

-Caitlin: No lo dudo, pero no es el momento.

Y en tanto dijo eso, su hermana adolescente se asomó sin llamar y Cait me acorraló entre sus piernas cubriéndome rápidamente con el edredón.

-Caitlin: ¡Kay!

-Kay: Mierda, no sabía que estabas ocupada - dijo, y la escuché irse.

Cait me liberó de su agarre, completamente sonrojada.

-Caitlin: Anda, sal de ahí

-Nia: Joder... ¿crees que me ha visto?

-Caitlin: Probablemente

-Nia: ¿Y si me escondo en tu habitación hasta que se vaya?

-Cait: No digas tonterías, no eres ninguna prófuga

-Nia: Ya, pero me da vergüenza qué tu hermana sepa que te estaba dando una alegría mañanera - dije, sonrojándome.

-Cait: Para empezar, Kay nos interrumpió antes de qué llegases a hacerme nada. Y, para seguir, no pensaba dejarte hacerlo. Así que, ¿bajamos a desayunar? Tengo hambre

-Nia: Está bien, vamos

Nos levantamos de la cama, nos vestimos y salimos de la habitación, bajando por las escaleras. Entramos en la cocina y Kay estaba desayunando con la mirada perdida en su móvil. Parecía entretenida mirando sus redes sociales.

-Caitlin: ¿Café?

-Nia: Sí, por favor - dije, y Cait me sirvió una taza.

-Kay: Sabía qué algún día te rendirías a los encantos de mi hermana - dijo, sin apartar la vista del móvil- Por cierto, Cait - dijo, mirándola- ¿Qué tan buena es Nia en el sexo oral?

-Caitlin: No es lo que crees. Malinterpretaste la situación. Nia y yo no estábamos haciendo nada

-Kay: Sí, claro. Y por eso Nia estaba entre tus piernas - dijo, acusándome con la mirada- ¡Vamos, chicas, qué tengo dieciséis años! ¡No soy estúpida! Sé lo suficiente sobre sexo para saber que si alguien se acomoda entre tus piernas es para hacerte pasar un buen rato

-Nia: ¿Ah, sí? ¿Y tu novio te hace pasar un buen rato a menudo? - pregunté a la defensiva.

-Caitlin: ¡Nia! - protestó- No me interesa escuchar sobre la vida sexual de mi hermana pequeña

-Kay: Pues sí, estoy bien servida. Gracias por preguntar

-Caitlin: Kay, basta ya

-Kay: ¿Qué? Ella preguntó y ya que tengo la suerte de tener un novio que sabe cómo hacer un oral en condiciones es casi una obligación para mí presumir de ello

-Caitlin: Me alegro por ti, pero no necesito imaginarme a tu novio entre tus piernas haciéndote... eso

-Kay: Un oral, Cait. Llamemos a las cosas por su nombre. En fin, yo me marcho ya - dijo, terminándose el café- He quedado con unas amigas y estaré fuera todo el día, así que tenéis vía libre para dar rienda suelta a vuestra pasión - dijo, poniéndose el abrigo y saliendo por la puerta.

-Nia: ¿Qué hacemos? - pregunté cuando se fue- ¿Volvemos a tu habitación?

-Caitlin: Nia... - dijo, girando los ojos- Estamos desayunando

-Nia: Bueno... - dije, terminándome el café de golpe y sonriendo- Yo ya desayuné

-Caitlin: ¿A qué tanta prisa? Ya oíste a Kay, estará con sus amigas todo el día

-Nia: Tienes razón, tú termina de desayunar. Voy a hacer una llamada

-Caitlin: Claro, ve

Salí al jardín trasero y marqué a Alex. Esta mañana me aventuré a hacerle un oral a Cait, pero después de la interrupción de su hermana ya no me sentía tan optimista. Seguía queriendo hacerlo, pero quería hacérselo bien. Así que esperaba que Alex pudiera darme algunos consejos.

-Nia: ¿Alex? ¿Estás ocupada?

-Alex: Estoy a punto de tomar un taxi, ¿por qué? ¿qué necesitas?

-Nia: ¡Uy! ¿Es que estuviste pasando la noche con alguien? - pregunté, curiosa.

-Alex: Ya me gustaría. Pero no, me pasé la noche en comisaria

-Nia: ¿Trabajaste anoche?

-Alex: Sí. Pasó algo y... ¿acaso no has visto los noticieros de la mañana?

-Nia: No. Cait y yo acabamos de despertarnos. ¿Por qué? ¿Ha pasado algo?

-Alex: ¿Recuerdas la paciente de Kara de máxima seguridad? ¿Esa tal Alicia?

-Nia: ¿La psicópata esa? Sí, ¿qué pasa con ella?

-Alex: Anoche su banda entró en plena madrugada y la ayudó a escapar de Kandor. Mataron a casi todos los guardias y también hirieron a la paciente intersexual de Kara, Lena Luthor, seguro que la recuerdas

-Nia: Si claro, la adicta al sexo

-Alex: Sí. Esa

-Nia: ¿Y está bien?

-Alex: Bueno, los médicos tuvieron que inducirle un coma después de operarla. No sé más. Kara me dijo que en principio la despertarán hoy en la mañana. Ella se quedó esta noche en el hospital para hacerle compañía a su hermana Sam, y yo voy ahora para allá

-Nia: Vaya... espero que esa mujer esté bien

-Alex: Yo también lo espero. Sam adora a su hermana y no me quiero ni imaginar cómo le afectaría sí no se recupera como debería. En fin, ¿qué querías?

-Nia: Nada, no importa

-Alex: ¿Seguro? Podemos hablar mientras voy en el taxi

-Nia: No te preocupes, es una tontería. Te llamaré luego. Dale un abrazo a Kara de mi parte, y muchos ánimos para su hermana. De verdad espero que todo vaya bien

-Alex: Se lo diré, hablamos luego - dijo, cortando la llamada.

-Caitlin: ¿Va todo bien? - preguntó, abrazándome por detrás.

-Nia: Sí, bueno, una presa peligrosa se ha fugado de Kandor esta noche - dije, girándome- Una paciente de mi hermana está en el hospital

-Caitlin: Vaya... ¿Y es grave?

-Nia: No lo sé, acabo de hablar con Alex y me ha dicho que tuvieron que inducirle un coma. Pero hoy tienen previsto despertarla. Justo ahora estaba yendo al hospital para estar con Kara y con su hermana, que han pasado allí la noche

-Caitlin: ¿Quieres irte con ellas?

-Nia: No, tranquila. Además, solo estorbaría. Prefiero llamarlas más tarde y qué me cuenten

-Caitlin: Bien, en ese caso... - dijo, rodeándome por la cintura- ¿Quieres qué hagamos algún plan juntas?

-Nia: Creí que teníamos una cita en tu cama... - dije, colocando mis manos por debajo de su camiseta, acariciándola- Vamos, me apetece olvidarme de todo por unas horas - dije, besándola.

ALEX

Cuando el taxi llegó a destino, me bajé y caminé hacia la entrada del hospital. Estaba lleno de periodistas, así que los esquivé como pude y entré. Crucé el vestíbulo y me dirigí hacia la sala de espera que me indicó un policía al que pregunté, luego de haberme identificado como agente.

Cuando llegué vi a Kara sentada y me acerqué a ella. Parecía agotada. Probablemente no había dormido en toda la noche.

-Alex: Kara...

-Kara: ¿Alex? ¿Qué haces aquí?

-Alex: Acabé mi turno hace un rato y decidí pasarme. ¿Cómo estás?

-Kara: Nerviosa. Hace media hora un enfermero nos ha avisado de que iban a despertarla. Ojalá esté todo bien

-Alex: ¿Y Sam?

-Kara: Se fue a por un café

-Alex: ¿Y cómo está?

-Kara: Mal. Está muy preocupada

-Alex: Ya imagino

-Kara: Mira, por ahí viene - dijo, y me giré.

-Sam: Alex... Hola - dijo, visiblemente cansada.

-Alex: Hola, Sam. Imagino que Kara te lo habrá dicho anoche, pero siento mucho lo que le ha pasado a tu hermana - dije, y me abrazó por sorpresa.

-Sam: Gracias - dijo, apartándose y dándome un beso en la mejilla.

-Kara: ¿Maggie? - preguntó, y me giré, buscándola con la mirada- ¿Qué haces aquí?

-Maggie: Hola Kara, pensé que pasarme por el hospital sería mejor que llamarte. Mi compañera ya me puso al día, sé que la operación salió bien. Pero qué por prevención dejaron a Lena en un coma inducido

-Kara: Hola, sí. Estamos esperando a que nos digan algo

-Maggie: Hola Alex

-Alex: Hola...

En ese momento apareció un médico acompañado de un policía.

-Médico: Buenos días - dijo, acercándose- la paciente ya está despierta y, a falta de realizarle unas últimas pruebas, todo parece normal. Si gusta verla - dijo, mirando a Sam- este policía le acompañará a la UCI. Y, por favor, es importante que mantenga la calma y que no la agobie. Aún está un poco aturdida

-Sam: Si, no se preocupe. ¿Puede venir ella conmigo? - preguntó, señalando a Kara.

-Médico: ¿Es familiar?

-Sam: No, pero...

-Médico: Lo lamento. Solo familiares y autorizados

-Sam: Por favor, doctor. Lleva toda la noche esperando...

-Médico: Lo lamento, la paciente es una convicta y hay muchas restricciones. Pero prueben a hablar con la directora de la Unidad de Custodia Hospitalaria, ella es quién se encarga de las autorizaciones

-Sam: Está bien, gracias - dijo, y luego miró al policía- Llévenos con la directora, por favor

-Kara: No te preocupes por mí. Tú ve con tu hermana. Yo buscaré a la directora para hablar con ella y conseguiré que me autoricen. ¿Sí?

-Sam: ¿Y si no te autoriza?

-Kara: Pues...

-Alex: Lo hará - dije, muy convencida- Yo me ocuparé de ello

-Sam: Gracias Alex. Kara - dijo, mirándola- Te estaré esperando

-Kara: Si no consigo autorización dile a Lena qué... bueno, tú ya sabes el qué

Me quedé mirando a Kara, con la sensación de que me estaba perdiendo algo. Sam asintió y se marchó con aquel policía.

-Maggie: Conozco a la directora de la UCH, te ayudaré

-Kara: Gracias Maggie

-Alex: Os acompaño

Kara y yo seguimos a Maggie, qué nos llevó hasta el despacho de esa mujer. Golpeó la puerta y se asomó.

-Maggie: Directora Yang, con permiso. Necesito tratar de un asunto con usted

-Dir. Yang: Agente Sawyer, pase - dijo, y entramos con ella- ¿De qué se trata?

-Maggie: Verá, sé que en la UCI las visitas están restringidas a familiares y autorizados. Pero necesito que autorice a la Dra. Danvers para que pueda entrar a ver a Lena Luthor

-Dir. Yang: No puedo hacer eso, el protocolo es muy estricto en estos casos

-Maggie: Lo sé. Pero se lo pido como favor a título personal

-Dir. Yang: Lo siento, pero...

-Maggie: Directora Yang, no olvide todo lo que he hecho por su sobrino. De no ser por mí ahora mismo estaría en un centro de menores. Así que, por favor, solo le estoy pidiendo que autorice a esta mujer, que además es su psiquiatra, para que pueda acceder a verla. Seguro que puede hacer una excepción

-Dir. Yang: ¿Quién de ustedes es la Dra. Danvers? - preguntó, mirándonos.

-Kara: Yo. Kara Danvers - dijo, tendiéndole la mano.

-Dir. Yang: Cristina Yang - dijo, estrechándosela.

-Kara: Por favor, yo solo quiero ver cómo está mi paciente

La mujer se quedó mirando a mi hermana, en silencio, como si se lo estuviera pensando.

-Dir. Yang: Está bien, lo autorizaré - dijo, y Kara suspiró aliviada- Dejen que haga una llamada - dijo, descolgando el teléfono. Esperamos mientras hablaba con alguien- Un policía vendrá a por usted Dra. Danvers, pueden esperarlo fuera

-Kara: Muchas gracias

-Maggie: Gracias, directora Yang - dijo, abriendo la puerta.

-Kara: Muchas gracias Maggie, de no ser por ti...

-Maggie: No me las des, me alegro de haberte podido ayudar

-Policía: ¿Dra. Danvers? - preguntó, acercándose.

-Kara: Si

-Policía: Acompáñeme, por favor

-Kara: Alex, ¿me esperas aquí? Nos iremos juntas a casa cuando salga

-Alex: Claro, aquí estaré - sonreí.

Kara se alejó y Maggie me miró.

-Maggie: ¿Puedo invitarte a un café? - sonrió. Y verla sonreír me hizo sentir un cosquilleo en el estómago.

Suspiré, tratando de ignorar unos sentimientos que hace tiempo qué debería haber enterrado y qué, de pronto, estaban más vivos que nunca.

-Alex: Gracias, pero prefiero quedarme en la sala de espera

-Maggie: Está bien, cómo prefieras. Pero, si cambias de opinión, estaré en la cafetería

Dejé que Maggie se marchase y volví a la sala de espera de la UCI, sentándome. Mientras esperaba me puse a mirar mi móvil. Al final hice caso a Kara y me descargué una aplicación de citas.

Llevaba una semana tonteando con mujeres, pero hasta ahora todo se había quedado en un cruce de mensajes. Ninguna me había gustado lo suficiente como para intentar vernos en persona. Ni siquiera para tener sexting, algo que no había vuelto a hacer desde la noche de Navidad cuando mi desconocida, si es que realmente es una mujer, desapareció tras confesarme qué me había estado observando mientras me masturbaba.

Y, aunque fue muy inquietante, lo cierto es que luego de una semana seguía pensando en ella. Incluso tuve la tentación de escribirle estos días atrás, pero nunca me atrevía.

En ese momento recibí un mensaje suyo y sonreí, por la casualidad.

Desconocida: Hola, y perdona qué no te haya escrito estos días

Alex: No importa, ya creí que no volvería a saber de ti

Desconocida: En realidad, el trabajo me ha tenido ocupada

Alex: ¿Solo el trabajo? ¿No será que estabas avergonzada?

Desconocida: Sí te refieres a lo de la otra noche, solo estaba bromeando. Siento si te incomodé, la verdad es que sonaba más divertido en mi cabeza

Alex: ¿Entonces no me estabas observando mientras me masturbaba?

Desconocida: No

Alex: ¿Y por qué desapareciste sin más?

Desconocida: Recibí un aviso para atender una emergencia y no pude avisarte. Y, como acabo de decirte, fue una semana muy ocupada

Alex: Entiendo

Desconocida: Pero en fin, aquí estoy de nuevo. Confieso que extrañé hablar contigo

Alex: No sé si debería reconocerlo, pero yo también

Desconocida: ¿Ah, si?

Alex: Sí. Hablar y... otras cosas. Como lo que pasó la otra noche

Desconocida: Me alegro que lo comentes, porque yo también he pensado mucho en ello

Alex: Tal vez podríamos repetirlo

Desconocida: ¿Ahora?

Alex: No, esta noche

Desconocida: ¿Me enviarás alguna foto tuya esta vez?

Alex: ¿Y qué te parece sí vienes a mi apartamento y te espero desnuda?

Me quedé mirando el móvil, esperando su respuesta. Pero no contestó. Tal vez había sido demasiado directa.

Solté el móvil, y me quedé esperando a Kara. Mientras no dejaba de pensar en que Maggie estaba en la cafetería y que yo estaba siendo muy infantil por seguir evitándola.

KARA

Caminé por los pasillos acompañada del policía. Cuando llegamos a la UCI, otro policía custodiaba la entrada. Me intimidaba un poco qué hubiera tanta seguridad, pero, al mismo tiempo, me hacía sentir segura. Estábamos en la Unidad de Custodia Hospitalaria, que es la zona donde están ingresados los presos y, aunque Lena no es peligrosa, no podía decir lo mismo de las demás personas que estaban allí ingresadas. Así que la seguridad estaba más que justificada.

-Policía: Puede pasar - dijo, cuando llegamos a la habitación de Lena- tiene quince minutos

-Kara: Gracias - dije, entrando.

Sam estaba hablando con Lena y, cuando ésta me sintió entrar, se giró para mirarme. Tenía el rostro hinchado y amoratado. Y se me encogió el corazón de verla así.

Me acerqué a ella, intentando estar lo más calmada posible. El médico nos había dicho qué tratásemos de no alterarla, y sabía que si Lena me veía mal se pondría mal.

-Lena: Kara... - susurró- Te estaba esperando

-Kara: No te imaginas lo feliz que me hace verte despierta, Lena. Estábamos tan preocupadas por ti... - dije, tratando de contener mis lágrimas- Y temíamos tanto perderte que... - sollocé.

-Lena: No llores... Estoy bien

-Kara: Y doy gracias por eso. No sé qué habría hecho si...

-Lena: No lo digas - interrumpió, buscando mi mano y sosteniéndola- Kara, yo... quiero pedirte perdón.

-Kara: ¿Perdón, por qué?

-Lena: Yo no quería, pero ella... me obligó. Y me siento muy culpable

-Kara: ¿De qué hablas?

-Lena: Harley... - dijo, tragando saliva- Me la follé anoche

-Kara: ¿Qué? ¿Y quién es Harley? - pregunté, confusa.

-Lena: La Dra. Quinzel. Tiene un trastorno de personalidad. Ella me forzó, no tuve otra alternativa. Iba a matarme, Kara... -dijo, nerviosa.

-Kara: Eh, tranquila. Respira hondo y cálmate. No te conviene alterarte

-Lena: Ella me hizo esto, Kara. Me apuñaló y me golpeó.

-Kara: ¿Estas segura? - pregunté y asintió.

Y entonces recordé lo que me comentó Maggie anoche sobre que algunos testigos habían visto a la Dra. Quinzel con Alicia. Si Lena estaba en lo cierto, y mi jefa tiene ese trastorno de personalidad, su versión, aparentemente sin sentido, podría encajar y confirmar los rumores.

-Lena: Creí que no volvería a verte - dijo, tocándose un corte superficial en su garganta y supe lo cerca que había estado de perderla.

-Kara: No pienses en eso ahora - dije, tratando de mantenerme fuerte- Estoy aquí, ¿sí? No permitiré que vuelvan a hacerte daño

-Lena: Bésame

-Kara: Lena... - sonreí, con ternura- No podemos. Aquí no

-Sam: Tranquila, hazlo

-Kara: ¿Qué?

-Sam: Los policías no están mirando

Miré a través de la pared de vidrio hacia el exterior de la sala y me fijé que los policías estaban de espaldas, custodiando la puerta.

Me acerqué a Lena y, con cuidado, posé mis labios en los suyos. La besé con suavidad y ella se abrió paso con su lengua en mi boca.

-Lena: Qué rico... - sonrió- Dame otro - dijo, poniéndome ojitos.

-Kara: Lena...

-Sam: No os preocupéis, yo me ocupo de vigilar. Tomaros vuestro tiempo - dijo, girándose para darnos intimidad.

-Lena: ¿Me perdonas?

-Kara: No tengo nada que perdonarte, Lena. Como has dicho, esa mujer no te dio otra opción

-Lena: Te echaba de menos

-Kara: Y yo a ti - dije, besándola. Lena buscó de nuevo mi lengua con la suya, y un beso llevó a otro y a otro. Y, cuando la sentí animarse, tuve qué frenarla- Creo que es suficiente por hoy

-Lena: No...

-Kara: Cualquiera diría que acabas de despertar de un coma

-Lena: Tus besos son mi medicina. Dame otro...

-Kara: Está bien, uno más- Lena asintió y la besé de nuevo, mientras sentía cómo acariciaba mi trasero con su mano- ¡Oye! - protesté- ¡Esa mano...!

-Sam: Eso, Lena. Compórtate

-Lena: Jo... - dijo, haciendo un puchero.

-Kara: Tu hermana tiene razón, estás recién operada. Y tienes que guardar reposo. Imagino que ella ya te habrá puesto al tanto de todo - dije, y Lena asintió.

-Sam: Sí, Lena ya sabe qué tuvieron que extirparle el bazo y qué la recuperación será lenta. De seis a ocho semanas, aunque ella asegura que estará perfectamente en solo cuatro

-Kara: Espero que estés bromeando - dije, mirando a Lena- Por poco te perdemos en ese quirófano. Así que espero que te lo tomes con calma, nada de esfuerzos

-Lena: Odio los hospitales

-Kara: Bueno, según nos han dicho solo estarás aquí una semana. Luego te trasladarán a Kandor para seguir con tu recuperación

-Lena: ¿Y la Dra. Quinzel? Pienso denunciarla por esto

-Kara: No te preocupes ahora por ella. Tú ahora céntrate en descansar y reponerte. Yo me ocuparé de todo.

En ese momento uno de los policías se asomó, interrumpiéndonos.

-Policía: Dra. Danvers, se acabó el tiempo. Debe acompañarme

-Kara: Sí, ya voy

-Lena: No te vayas... - susurró, con la mirada triste.

-Kara: Lo siento, el protocolo es muy estricto - dije, con pena- Pero trataré de venir a verte mañana, ¿sí?

-Lena: Pero...

-Sam: Tranquila, Lena. Ya oíste a Kara, volverá mañana

-Lena: ¿Lo prometes?

-Kara: Te lo prometo, Lena - dije, dándole un último beso aprovechando que el policía estaba distraído.

Cuando salí, el policía me acompañó hasta la sala de espera, donde estaba Alex.

-Alex: ¿Va todo bien? - preguntó, levantándose- Has tardado poco...

-Kara: Solo me dieron quince minutos

-Alex: Vaya, ¿y cómo está ella?

-Kara: Convaleciente, pero optimista

-Alex: Me alegro. ¿Y dónde está Sam? Creí que vendría contigo

-Kara: Ella es familiar. Así que supongo que no tiene restricciones de tiempo - dije, con resignación por no haberme podido quedar más tiempo con Lena- Pero bueno, en el fondo lo prefiero ya que así pueden hacerse compañía mutuamente

-Alex: Pues sí... - dijo, pensativa- Por cierto, ¿puedo preguntarte algo?

-Kara: Sí, claro

-Alex: Tal vez solo sean impresiones mías. Pero tengo la sensación de que esa mujer te importa más de lo que debería importarte

-Kara: ¿Qué quieres decir?

-Alex: Pues que pareces muy afectada y... no me malinterpretes, es lógico que te preocupes por ella, es tu paciente. Pero...

-Kara: Obvio que estoy preocupada, Alex. Anoche una homicida con trastorno de personalidad la apuñaló a sangre fría y, por un momento, temí que pudiéramos perderla

-Alex: Justo a eso me refiero. Entiendo qué Sam sufra ante la posibilidad de perderla, al final es su hermana. Pero tú... sé que eres una mujer sensible y qué te afectan mucho este tipo de cosas. Pero por tu comportamiento siento que estás... ¿cómo decirlo? Muy implicada a nivel emocional

-Kara: Bueno, es posible qué me esté implicando más de lo que debería. Pero sí te preocupa que eso pueda afectar a mi competencia como psiquiatra...

-Alex: No, claro que no - interrumpió- Sé que eres una profesional. Solo me preocupa qué... bueno, qué las circunstancias de esa mujer puedan acabar afectándote en lo personal

-Kara: Tranquila, Alex. Sé dónde están los límites. Además, tú mejor que nadie deberías entenderme. Fuiste la policía que atendió la emergencia de Samantha y ahora estáis intentando ser amigas, ¿no?

-Alex: Sí, pero lo nuestro fue circunstancial. Y, aunque tampoco está bien visto qué un policía se relacione con una víctima más allá de lo profesional, ahora ya no hay ningún caso abierto. Lionel retiró los cargos de su marido, así que... no hay nada qué nos impida ser amigas

-Kara: Sí, supongo que tienes razón. Y me alegro de que pienses así porque anoche Samantha y yo estuvimos hablando sobre ti y ella está muy interesada en seguir conociéndote

-Alex: ¿Ah, sí?

-Kara: Sí, me confesó que le gustas y qué le encantaría estar en tu vida

-Alex: ¿Le gusto como amiga o...?

-Kara: Como amiga, obvio. ¿Es que acaso a ti te gusta de otra forma?

-Alex: No sé, ni siquiera me lo planteo. Ella es claramente heterosexual

SAM

Cuando Kara se marchó, yo me quedé un rato más con Lena. Aunque sabía que no debía quedarme mucho, ya que Lena necesitaba descansar. Pero, después de lo mal que lo pasé anoche, necesitaba estar con ella.

-Sam: Siento qué Kara y tú no hayáis podido estar más tiempo juntas

-Lena: No pasa nada. Volverá mañana

-Sam: Sí, estoy segura de ello

-Lena: Nunca antes la habías llamado Kara - dijo, sonriéndome- ¿Por qué ahora sí?

-Sam: No sé, anoche me di cuenta de que era absurdo. Ambas estábamos muy preocupadas por ti, así que le confesé que lo sabía todo sobre vuestra relación y, como futuras cuñadas, pensé que lo más lógico era pasar de las formalidades

-Lena: Me alegra oír eso. Y, ¿qué piensas ahora de ella? ¿Te gusta para mí?

-Sam: Mucho, la verdad. Esa mujer te ama de verdad, Lena. Se ha pasado la noche en vela, sufriendo por ti. Y yo también, obvio. Kara y yo tuvimos mucho miedo de perderte en ese quirófano y, cuando el cirujano nos dijo que todo había ido bien suspiramos aliviadas. Pero luego nos dijo que te habían inducido un coma por si había lesiones y... apenas hemos podido dormir pensando que al despertar pudieras tener daños cerebrales. Por suerte no ha sido así, estás perfecta - sonreí, acariciando su mejilla.

Estuve unos quince minutos hablando con Lena sobre Kara y cómo durante las horas que pasamos en vela aprovechamos para conocernos mejor. Eso le gustó mucho, pues que nos lleváramos bien era muy importante para ella. Y tengo que reconocer que Kara me sorprendió gratamente. Sobre todo, me gustó la forma en la que hablaba de Lena, realmente pude notar en cada palabra y en su mirada, lo enamorada que está de mi hermana.

Y, cuando me contó que planeaba solicitar la libertad condicional para Lena, pude confirmar lo implicada que está en esa relación y que realmente quiere luchar por un futuro con ella fuera de Kandor.

Me moría de ganas de contárselo a Lena, pero Kara no estaba segura de sí el plan funcionaría y me había pedido que no le dijera nada para no darle falsas esperanzas. Así que respeté su decisión. Pero deseo con todas mis fuerzas que funcione, porque Lena se merece ser feliz.

-Sam: Debería irme ya - dije, mirando el reloj- No quiero tener problemas con... - dije, callándome tan pronto como Lena me miró preocupada.

-Lena: ¿Morgan?

-Sam: Sí, bueno. Anoche me fui sin avisarle. Estará preocupado

-Lena: ¿Preocupado o... enfadado? No quiero que vuelva a hacerte daño

-Sam: No lo hará. Ya te dije la semana pasada qué lo tengo todo bajo control

-Lena: ¿Y eso de ahí? - preguntó, señalando mi ceja, que aún no había cicatrizado del todo- ¿Cómo te lo hiciste?

-Sam: Lena, no es lo que crees. Me golpeé con una puerta

-Lena: ¿Vas a seguir mintiéndome? - preguntó, un poco alterada.

-Sam: Por favor, no te alteres, no es bueno en tu estado

-Lena: Aléjate de él - dijo, seria- Dijiste que aceptarías mi ayuda si volvía a golpearte. Habla con Kara

-Sam: Lena, escúchame

-Lena: No, escúchame tú a mí. Ese hombre te está matando en vida - dijo, con los ojos vidriosos- No esperes a que sea demasiado tarde. Por favor, hazlo por mí. No lo soportaré si te pierdo - sollozó.

Un policía entró, interrumpiéndonos.

-Policía: Disculpe, este enfermero tiene que llevarse a la señorita Luthor para repetirle una prueba. Si es tan amable de acompañarme

-Sam: De acuerdo - dije, mirándole, y luego miré a Lena- Lo siento, volveré mañana, ¿sí?

-Lena: Vale... - dijo, sin mucho ánimo.

-Sam: Mírame, Lena, no vas a perderme - susurré, antes de irme.

Cuando el policía me escoltó a la sala de espera, me fijé que Alex y Kara aún estaban aquí.

-Sam: Hola - dije, acercándome a ellas- pensé que ya os habríais ido

-Kara: No, pero estábamos a punto de hacerlo

-Alex: ¿Qué tal con tu hermana?

-Sam: Bien. Después de hablar un rato con ella estoy más tranquila

-Alex: ¿Te gustaría desayunar con nosotras?

-Sam: Gracias, pero no puedo entretenerme más. Otro día mejor

-Alex: Claro, te llamaré

-Sam: Genial, estaré esperando tu llamada - sonreí

-Kara: Alex, ¿sabes si Maggie sigue en el hospital?

-Alex: No lo sé. Hace rato que se fue a la cafetería. ¿Por qué?

-Kara: Tengo que hablar con ella

-Alex: ¿De qué?

-Kara: De un asunto policial - dijo, mirándome- Lena ha identificado a su agresora.

-Alex: Pues no se, prueba suerte, tal vez siga allí

-Kara: Gracias, ¿me acompañas?

-Alex: Prefiero esperarte aquí

-Kara: Está bien. Pero te adelanto que no sé lo que tardaré

-Alex: No importa

-Kara: Bueno, pues ahora nos vemos - dijo, alejándose.

-Sam: ¿Son impresiones mías o estás evitando a tu ex?

-Alex: ¿Tanto se nota?

-Sam: Un poco, ¿quieres que me quede contigo hasta que Kara vuelva?

-Alex: Creí que tenías prisa

-Sam: Diez o quince minutos no marcarán la diferencia. Así que... ¿nos tomamos ese café? Bueno, en tu caso lo que tú quieras

-Alex: ¿Qué parte de estoy intentando evitar a mi ex no entendiste?

-Sam: Bueno, no tenemos por qué ir a la cafetería del hospital. Seguro que encontramos alguna cafetería por aquí cerca. ¿Qué dices? ¿Te apetece?

-Alex: Por mí sí, pero... no sé si deberíamos salir del hospital. Al menos no por la entrada principal

-Sam: ¿Por qué?

-Alex: Por la prensa. Se corrió la voz de lo sucedido en Kandor y los medios ya saben que tu hermana está aquí ingresada. Si sales ahora se te echarán encima, haciéndote mil preguntas

-Sam: Mierda... Sí la prensa se enteró Lionel ya estará al tanto. Y eso significa que.... ¿Morgan? - dije nerviosa, al verle a lo lejos. Alex se giró, viéndole y se quedó estática- Será mejor que te marches... - susurré- No quiero que te vea conmigo, no le gustará...

-Alex: No pienso dejarte sola con él

-Sam: Por favor, no quiero darle más razones para...

Pero no me dio tiempo a terminar la frase cuando Morgan nos vio y empezó a caminar hacia nosotras.

-Morgan: Cariño, ¿cómo está tu hermana? - preguntó, preocupado- Tu padre me llamó esta mañana para contarme lo que pasó anoche en Kandor y qué Lena resultó herida. ¿Por eso te fuiste anoche? ¿Por qué no me avisaste?

-Sam: Lo siento, recibí el aviso mientras estabas duchándote y me vine directa al hospital. Ni si quiera lo pensé. Luego me di cuenta de que mi móvil estaba sin batería y no pude llamarte

-Morgan: ¿Y no pudiste utilizar un teléfono público para llamarme? Estaba preocupado por ti

-Sam: Tienes razón, pero anoche solo podía pensar en Lena. Cuando el cirujano terminó de operarla decidieron inducirle un coma y despertarla en la mañana. Así que me quedé a pasar la noche aquí, siento si te preocupé

-Morgan: Tranquila, está bien - dijo, abrazándome- ¿Cómo está Lena? ¿Ya la despertaron?

-Sam: Sí. Y afortunadamente no tiene lesiones cerebrales

-Morgan: Que bien, me alegro. Seguro que habrás pasado mucho miedo esta noche

-Sam: Sí... la verdad. Pero Lena está bien, tuvieron que extirparle el bazo. Pero se recuperará

-Morgan: Seguro que sí. ¿Ya la viste?

-Sam: Sí, pero se la llevaron a hacerle otra prueba y tuve que despedirme.

-Morgan: Bueno, mañana volverás a verla - dijo, abrazándome otra vez.

Alex carraspeó y Morgan reparó en ella. Y yo recé por un milagro.

-Morgan: Disculpe, que maleducado. Soy Morgan Edge - dijo, tendiéndole la mano- ¿Y usted es...?

-Alex: Agente Danvers - dijo, con ambas manos en sus bolsillos.

-Morgan: Oh - Morgan retiró el saludo y se frotó la mano con nerviosismo sobre su pantalón- Creí que era usted médico

-Alex: No, esa es mi hermana. Yo soy policía - dijo, cruzándose de brazos, en actitud defensiva.

-Morgan: ¿Dra. Danvers? - preguntó en voz alta y luego me miró- ¿Cómo la psiquiatra de tu hermana?

-Sam: Sí... - dije, nerviosa. Morgan no parecía acordarse de Alex, pero me asustaba que en cualquier momento le llegase la lucidez- Resulta que son hermanas. Vaya casualidad, ¿verdad? - dije, tratando de fingir que yo también estaba sorprendida.

-Morgan: Pues sí

-Sam: La policía está investigando la agresión de Lena y... bueno, la agente Danvers me ha estado haciendo algunas preguntas. Estaba acompañándome a la salida cuando te vi aparecer - dije, cada vez más relajada al ver que Morgan estaba reaccionando bien.

-Morgan: Entiendo, ¿y cómo va la investigación? ¿ya saben quién agredió a mi cuñada?

-Alex: No puedo darle detalles sobre la investigación. Pero tan pronto como sepamos algo se lo haremos saber a la familia, así que...

-Morgan: Gracias agente. Espero que le atrapen pronto

-Alex: Para eso estamos señor Edge, para servir y proteger - dijo, enfatizando esto último.

-Sam: Gracias... - dije, sabiendo que la palabra proteger iba para mí- Sí necesita cualquier cosa, no dude en llamarme. Estaré encantada de aportar cualquier información que pueda ayudar en la investigación

-Alex: Muy bien. Gracias por su colaboración. No les molesto más - dijo, alejándose. No sin antes echarme una última mirada de si me necesitas, no dudes en llamarme.

-Morgan: Cielo, ¿dónde tienes el coche?

-Sam: En el aparcamiento subterráneo

-Morgan: Bien, no nos conviene salir por la entrada principal. Demasiado paparazzi y reportero sensacionalista. Qué asco me dan... - dijo, pasándome el brazo por la espalda, caminando juntos hasta el ascensor.

Bajamos y nos subimos en el coche. Estaba cansada así que le pedí a Morgan que condujera y yo me permití descansar en el asiento del copiloto. De camino al apartamento, observé a Morgan y me sentí aliviada de que estuviera tan tranquilo.

Cuando le vi aparecer en el hospital me asusté, pensando que estaría muy molesto conmigo por haber desaparecido así en la noche. Pero lo cierto es que se mostró bastante comprensivo en todo momento. Y, si bien no estaba segura de sí solo estaba fingiendo delante de Alex, por ser una agente de policía, cuando ella se marchó Morgan siguió mostrándose amable. Así qué me permití relajarme.

-Sam: Voy a darme una ducha - dije, cuando entramos en el apartamento.

-Morgan: Bien. Yo tengo que ir un momento a los laboratorios. Pero no tardaré. Hay café, por si te apetece servirte una taza después de ducharte

-Sam: Gracias

-Morgan: Hasta ahora- dijo, besándome y saliendo por la puerta.

Caminé hasta la habitación, saqué ropa limpia y me dirigí al baño. Me desnudé y entré en la ducha, quedándome bajo el agua durante un buen rato, hasta que me quedé a gusto.

Salí, me vestí y acabé tirándome sobre la cama en vez de ir a por ese café. Estaba tan cansada que solo quería dormir. Así que me acurruqué bajo el edredón y cerré los ojos, quedándome dormida enseguida.

KARA

Caminé hacia la cafetería y sonreí al ver que Maggie aún estaba en la cafetería. Me acerqué y vi que estaba distraída con el móvil, así que carraspeé antes de hablar para evitar asustarla.

-Kara: ¿Maggie?

-Maggie: Hola, Kara - dijo, girándose- ¿Qué tal está Lena?

-Kara: Mejor de lo que me esperaba, la verdad - dije, aliviada- Pese a que la vi muy lastimada la noté bastante animada y eso me tranquilizó

-Maggie: Me alegro mucho. Ven, siéntate - dijo, haciéndome un gesto- Deja que te invite a un café

-Kara: Gracias, pero estoy bien así - dije, sentándome- En realidad, te estaba buscando porque quiero hablarte sobre algo

-Maggie: Claro, ¿de qué se trata?

-Kara: Lena ha identificado a una tal Harley como su agresora

-Maggie: ¿Harley? - preguntó, confusa- ¿Es otra paciente o...?

-Kara: No, nada de eso. Al parecer mi jefa podría tener un trastorno límite de la personalidad y esa tal Harley sería una de sus personalidades.

-Maggie: ¿En serio?

-Kara: Sí, y esto confirmaría que los rumores que oíste anoche, sobre que algunos testigos decían haber visto a mi jefa con Alicia, son ciertos.

-Maggie: Eso es muy interesante y ten por seguro que lo investigaremos. Sobre todo para aclarar si esa Dra. Quinzel pudo haber ayudado a la banda del país de las maravillas desde dentro, ya que estaríamos hablando de una cómplice de la fuga de Alicia

-Kara: Sí, y culpable de la agresión de Lena. No lo olvides - remarqué- Si la encuentran quiero que pague por lo que le hizo. Lena quiere denunciarla y yo no descansaré hasta que la encierren

-Maggie: Si se confirma lo que me cuentas, créeme que así será. Aunque es probable que si la procesan como enferma mental acabe en una prisión psiquiátrica

-Kara: Mientras no acabe en Kandor, por mí perfecto. Pero espero que pase muchos años encerrada

-Maggie: Gracias Kara, esta información será muy útil para la investigación

-Kara: De nada, gracias a ti por tu trabajo

Maggie bebió un sorbo de café y me miró fijamente.

-Maggie: Así qué Luthor y tú... ¿eh? Al final esa mujer consiguió mucho más que incomodarte

-Kara: Sí... - sonreí- Aunque, si te soy sincera, no lo tuve claro hasta hace poco. Al principio empezó siendo solo sexo, pero con el tiempo...

-Maggie: Espera, ¿has dicho sexo? - preguntó, sorprendida- Pensé que hablábamos de sentimientos correspondidos. No imaginé que vosotras ya hubierais... ¿Y cómo hacéis para...?

-Kara: En mis turnos de noche. Me encierro en su habitación y pasamos unas horas juntas - dije, sonriendo como idiota. Extrañaba tanto nuestras noches...

-Maggie: Me alegro por ti. Pareces feliz

-Kara: Lo soy. Aunque hubo un momento que estuvimos a punto de perderlo todo por relajarnos demasiado. Pero...

-Maggie: ¿Cómo así? ¿Qué pasó?

-Kara: Digamos que nos expusimos de más y mi jefa empezó a sospechar - dije, sin darle muchos detalles- Pero bueno, conseguí convencerla de que estaba equivocada

-Maggie: Menos mal

-Kara: Aun así, después de aquello Lena y yo decidimos mantener las distancias por un tiempo y no vernos por las noches. Ya sabes, para no levantar sospechas. Pero renunciar a nuestra intimidad es lo peor

-Maggie: Bueno, no creo que podáis tener mucha intimidad hasta que Lena se recupere. Ahora lo que le conviene es guardar reposo

-Kara: Si, aunque sospecho que será difícil controlarnos. Tendrías que haberla visto en la UCI hace un momento, traté de darle un beso suave y enseguida me buscó con la lengua. Me besó con tanta pasión que hasta sentí cosquillas ahí abajo y estoy segura que de no haber estado tan sedada Lena habría tenido una erección ahí mismo

-Maggie: Madre mía. Aunque claro, teniendo en cuenta su trastorno no debería extrañarme esa pasión desmedida suya - dijo, riéndose- A todo esto, ¿cómo llevas eso de estar con una adicta al sexo? Imagino que nunca tendrá suficiente y siempre buscará más, ¿no?

-Kara: Bueno, ya no es tan adicta - dije, y me miró extrañada- Lena y yo llevamos algún tiempo trabajando en su abstinencia y está haciendo muchos progresos. Incluso sin medicación.

-Maggie: Vaya, eso es impresionante. ¿Y cómo lo has conseguido?

-Kara: Con chantaje sexual - dije, riéndome- Verás, todo empezó como una broma. En las vacaciones de Acción de Gracias le pedí que no se masturbase hasta que volviera y le dije que si no cumplía con el trato no me acostaría con ella cuando regresara

-Maggie: Bien jugado. ¿Y cumplió?

-Kara: Sí. La cuestión es que no fueron solo esos cuatro días. Mi vuelta se retrasó porque coincidió con la operación de apendicitis. Así que, para cuando me reincorporé al trabajo habían pasado tres semanas

-Maggie: ¿Vas a decirme que estuvo sin masturbarse durante todo ese tiempo?

-Kara: Sí, veintiún días de abstinencia - dije y Maggie me miró de boca abierta- Sí, se lo que estás pensando, a mí también me sorprendió su fuerza de voluntad. Al principio me confesó que había estado tomándose el inhibidor del deseo sexual por las noches, ya que según ella por el resto del día le resultaba más fácil aguantarse las ganas porque tenía otras distracciones. Pero luego me confesó, y eso sí que no me lo esperaba, que los últimos días antes de mi vuelta consiguió controlar sus impulsos sin necesidad de tomarse la medicación

-Maggie: Joder... ¡Eres una puta genio, Kara! - celebró- Has conseguido utilizar las ganas que tiene esa mujer de estar contigo para conseguir qué se controle. Aunque apuesto a que la recompensa por cumplir con el trato es bien jugosa, ¿eh?

-Kara: Por supuesto. Créeme que se lo compenso con creces. Aunque he de confesar que yo tampoco tengo quejas de ella. Lena me folla tan bien que siempre quiero repetir - solté, cubriéndome el rostro avergonzada tan pronto como vi a Maggie con expresión de asombro- Lo siento, demasiada información

-Maggie: Tranquila, es solo que... bueno, es la primera vez qué te escucho hablar sobre sexo tan abiertamente. Pero me gusta verte tan feliz. Ya era hora de que conocieras a alguien que te haga sentir tanto. Te lo mereces

-Kara: Pues sí, Lena me hace muy feliz

-Maggie: Lo que aun no entiendo es como tus hermanas no se dieron cuenta. Es un secreto a voces que estás loca por esa mujer. No hay más que verte hablar de ella. Cualquiera qué te preste un poco de atención se daría cuenta enseguida de que tienes a alguien especial en tu vida

-Kara: Sí, bueno. Mis hermanas saben que hay alguien en mi vida. Nia lo descubrió y se lo contó a Alex, así que me tocó confesar. Pero no saben qué es Lena

-Maggie: ¿Y qué esperas para decírselo? Estoy segura de que tus hermanas lo entenderán. Incluso tu madre. Ella siempre ha sido muy tolerante

-Kara: Ya... tengo intención de decírselo pronto

-Maggie: Pues ánimo, seguro que irá bien, ya lo verás - sonreí.

En ese momento vi a una policía acercándose.

-Policía: Sawyer, el jefe me dijo que estarías aquí. Se acabó el descanso, toca salir a patrullar

-Maggie: Enseguida voy, Díaz- dijo, terminándose el café- Bueno, Kara, me ha gustado mucho hablar contigo. Espero que podamos quedar otro día, si quieres

-Kara: Claro, me encantaría. Así podré contarte más cosas sobre Lena

-Maggie: Muy bien, pues te llamaré esta semana para tomarnos un café. Cuídate - dijo, levantándose y alejándose con su compañera.

Me levanté y salí detrás de ellas, acercándome a Alex.

-Kara: ¿Nos vamos?

-Alex: Sí, claro. Déjame las llaves, conduciré yo

-Kara: Gracias - dije, dándoselas. Estaba cansada y agradecí el detalle.

Alex condujo hasta el apartamento y, cuando entré, me senté en el sofá.

-Alex: ¿Quieres café?

-Kara: No. Quiero dormir

-Alex: Está bien, en ese caso... te dejaré descansar

-Kara: ¿Tú que harás?

-Alex: Pues no lo sé. Aburrirme, supongo - dijo, sentándose a mi lado.

-Kara: ¿Y Nia? ¿No ha vuelto aún?

-Alex: No, imagino que seguirá con Caitlin. Esta mañana me llamó para preguntarme algo, pero... cuando le dije que iba hacia el hospital me dijo que no tenía importancia y que me llamaría después

-Kara: ¿Y por qué no la llamas tú?

-Alex: No sé, ¿y si están teniendo sexo ahora mismo?

-Kara: No lo creo. Nia nos dijo que estaban tomándoselo con calma

-Alex: ¡Espabila, Kara! ¿De verdad crees que nuestra hermana pequeña sigue siendo virgen? Pasó la noche de fin de año con su novia. Alcohol y hormonas, igual a sexo salvaje hasta el amanecer

-Kara: ¿Tú crees?

-Alex: Ya lo creo que sí... - dijo, afirmando con la cabeza- Es más, ahora que lo pienso estoy casi segura de que Nia me llamó para pedirme consejos sobre sexo

-Kara: Seguro que sí - dije, burlándome.

-Alex: No te burles y apostemos. Cincuenta dólares a qué necesitaba consejo sexual, y cincuenta más a que se trataba de sexo oral

-Kara: No voy a jugarme cien dólares contigo, Alex

-Alex: Porque sabes que ganaré, reconócelo

-Kara: Está bien, tú ganas. Pero, ¿cómo sabes qué va a preguntarte por sexo oral?

-Alex: Porque nuestra hermanita no se ha comido un coño en su vida

-Kara: ¡Alex! - protesté- ¿Hace falta que seas tan vulgar?

-Alex: ¡Vale, perdóneme usted! En fin, hablando de... ¿cuándo vas a darle una alegría al tuyo?

-Kara: ¿Y a ti que te importa?

-Alex: ¡Relájate! Solo me preocupo por tu vida sexual

-Kara: Tal vez deberías empezar a preocuparte más por la tuya y dejarnos a Nia y a mí en paz

-Alex: Y estoy en ello

-Kara: ¿Ah, si? ¿Al final te descargaste una app de citas?

-Alex: Sí. Aunque la verdad es que no he conocido a nadie qué me interese

-Kara: Bueno, date tiempo

-Alex: En realidad, llevo un tiempo hablando con una mujer - dijo, de repente- Pero no es de ninguna aplicación

-Kara: ¿Y cómo la conociste? Porque hace tiempo que no frecuentas un bar

-Alex: Me escribió un día, sin más. Pensé que sería alguien intentando gastar una broma o un psicópata pervertido. Pero seguimos hablando y hace un par de semanas, la noche de Navidad, me confesó que es una mujer y...

-Kara: Espera, ¿has estado mensajeándote con alguien que no conoces?

-Alex: Sí...

-Kara: ¿Estás loca? ¿Quién responde mensajes de un desconocido?

-Alex: Yo - dijo, encogiéndose de hombros- No sé, a mí no me parece tan alarmante. De primeras le contesté porque estaba aburrida y porque tenía curiosidad por saber quién es. Esa persona parecía conocerme, pero prefiere mantenerse en el anonimato

-Kara: ¿Dices que te conoce?

-Alex: Por lo que me dijo, yo entendí que sí

-Kara: ¿Y tú no sabes quién es?

-Alex: No. Su identidad es todo un misterio para mí. He tratado de preguntarle en varias ocasiones, pero siempre me dice que sí quiero averiguarlo tenemos que vernos en persona

-Kara: ¿Y no se te ha ocurrido llamar a ese número?

-Alex: Si, claro. Pero nunca contesta

-Kara: No sé, me da muy mala sensación eso. Tal vez deberías bloquear ese número y olvidarte. Además, probablemente ni siquiera sea una mujer. De seguro te mintió

-Alex: Pues yo espero que sí lo sea, porque hace un par de semanas tuvimos sexting y sí al final resulta que es un hombre sería bien raro

-Kara: ¿Tuvistéis sexting? - pregunté, sorprendida- Nunca antes habías hecho nada así. ¿Por qué lo hiciste?

-Alex: No sé, fue cosa del momento. Estábamos hablando y ella me lanzó la propuesta. Y, para convencerme, me envió un video en el que se estaba masturbando

-Kara: ¿Cómo? ¿Y estás segura de que era un video real?

-Alex: Parecía muy real, sí - dijo, con una sonrisa- Puedo enseñártelo si quieres - dijo, sacando el móvil del bolsillo.

-Kara: No, gracias - dije, apartando su móvil de mí- A lo que me refería es qué si sabes si es de su autoría. Hasta donde yo sé podría haberlo sacado de Internet

-Alex: Sí, podría ser. No puedo asegurar que ese video sea suyo. Pero no me importó, cuando empecé a reproducirlo y escuché unos gemidos de fondo mi excitación se disparó y acabé masturbándome mientras disfrutaba del video

-Kara: Madre mía... - dije, negando con la cabeza- ¿Y en eso te entretienes ahora?

-Alex: No, solo fue aquella vez. Aunque no me importaría repetirlo, la verdad

-Kara: No sé, a mí me sigue pareciendo muy raro y, si te interesa mi opinión, trataría de averiguar quién es antes de seguir con este juego. No me gustaría qué te llevases una decepción

-Alex: Sí, tienes toda la razón. Y por eso le he propuesto vernos. Esta mañana, mientras me escondía de Maggie, estuve mensajeándome con ella y le propuse vernos en mi apartamento esta noche

-Kara: ¿En tu apartamento? ¿Y no sería más conveniente que quedéis en un lugar público? No sabes si esa persona puede ser peligrosa

-Alex: Ya, bueno. Me pareció más divertido decirle que la esperaba desnuda en mi cama - dijo, con una sonrisita.

-Kara: No sé, Alex. Tú verás lo que haces. Eres una mujer adulta y si quieres refugiarte en el sexo casual para superar la ruptura no seré yo quién te lo prohíba. Sería hipócrita cuando yo misma te animé a tener citas. Pero sé responsable, ¿vale?

-Alex: Tranquila, sé lo que hago

-Kara: Bien. Pues ahora, con tu permiso, me voy a acostar un rato. Despiertame y comemos juntas

-Alex: Vale

Entré en la habitación, me puse ropa cómoda y me eché sobre la cama, pensando en cómo serán los próximos días. De seguro será difícil adaptarme a las restricciones en las visitas del hospital.

Pero, si tengo que conformarme con ver a Lena por quince minutos con tal de pasar tiempo con ella cada día, así lo haré. Ya recuperaremos el tiempo perdido cuando esté de vuelta en Kandor y podamos volver a disfrutar de nuestras noches. Esas noches que tanto extraña mi cuerpo...

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