15 || Mudanza sorpresa
A tres días del estreno de PíxelesRP, Lana y Seren convocaron una última reunión con el equipo de programadores para concluir detalles. Aunque el servidor estaba listo y ya habían hecho pruebas con muchas personas para evitar que se cayera en pleno evento, ellas querían probar todo, así sería excelente.
A dos días, tuvieron una reunión con todos los streamers que participarían, así respondían dudas.
Y a un día, Seren era un manojo de nervios. A prueba y error, sabían que todo estaba perfecto, pero a ella le encantaba dar vueltas al mismo asunto.
¿Y si no salía perfecto? ¿Y si se caía el servidor? ¿Y si algún streamer faltaba?
—Tenemos streamers en la lista de espera por si alguien no llega, Serenata, por el amor de Dios. Te pido calma y sosiego —dijo Lana, bebiendo su tercera botella de cerveza.
Alguien en esa mesa, además de Seren, estaba nerviosa. Pero evitaba decir alguna cosa más, así la rizada no se estresaba de más.
—Aparentar calma para que yo no me estrese tampoco está bien —dijo Seren señalándola. Lana se echó a reír y alzó la botella para brindar.
—Hermana, me están matando los nervios. ¡Salud!
Seren sonrió de lado y miró su reloj.
—Lo otro que me está estresando es lo siguiente: Alejandro dijo que llegaba hoy, ¿cómo pretende mudarse de país y tener el estudio listo para mañana?
Seren tomó la botella de Lana y le dio un pequeño trago al líquido amargo que no había bebido desde aquella fatídica noche en la fiesta de SLR.
—¿Quieres una respuesta? Es Alejandro. Ahí está tu respuesta. Ese niño se va a mudar de país, va a tener el estudio listo para mañana y va a tener todo instalado. Además, tendrá a todo el equipo de cadetes en fila para enseñarles sobre leyes policiales que seguro en este mismo instante todavía no se sabe. ¿Sabes por qué? Porque tú y él parecen hermanos. Lo tienen todo bajo control, aunque no lo parezca.
La rizada suspiró y sonrió de lado, negando un poco la cabeza.
—Me tienes mucha confianza.
—Por supuesto. Creo en ti y en tu poder. Eres la mejor. Jamás lo olvides. —Lana la señaló, y dicho eso, le quitó la cerveza para terminársela. Luego aclaró la garganta—. ¿Ya nos vamos al aeropuerto? Tú manejas.
—No me digas —contestó rodando los ojos.
Era su auto, y la rubia tenía tres cervezas encima.
Todavía les quedaba algunos minutos antes de ir al aeropuerto, así que Seren aprovechó en avisar por redes que empezaría directo más tarde porque tenía asuntos personales. Su comunidad estaba preocupada por ella. Un día faltaba, otro día llegaba tarde. Definitivamente no era algo a lo que estaban acostumbrados, sin embargo, le dieron su espacio y nadie se comportó mal.
No tenían por qué, de todos modos.
—Ve a darte una ducha antes de salir —pidió Seren al salir de su estudio, Lana había estado sentada en el sofá desde que se separaron.
—Sí, mamá —respondió cansada. No estaba ebria, pero sí un poco contenta. Lo suficiente para que necesitara una ducha fría antes de ir al aeropuerto.
—¡Y no te demores, no quiero llegar tarde! —gritó eso último mientras la rubia se dirigía al baño.
Seren sonrió de lado y se sentó el sofá en donde su amiga había estado antes.
Asher
«Estoy despierto» 10:21
Seren(a)
«Buenos días. Lana está ebria.» 10:25
Asher
«A las 10 de la mañana?????» 10:25
Seren(a)
«No es su día más tranquilo. Lo del estreno de mañana nos tiene con los nervios de punta. Agarró una botella "porque tenía calor" y en la tercera tuve que detenerla. En breves nos dirigimos al aeropuerto» 10:25
Asher
«Me imagino... Si necesitan ayuda con algo para el estreno, me dices :D Nosotros también salimos en un momento. Creo que Vad fue a buscar un paquete que Alex pidió» 10:26
Seren(a)
«¿A ustedes también los está utilizando de almacén con cosas que compró por internet para su nueva casa?» 10:26
Asher
«JAJAJAJAJAJ sí» 10:26
«No es fácil mudarse de país, lo entiendo» 10:26
Seren(a)
«Sí, no es el único. Somos muchos» 10:26
«Lo comprendo también» 10:27
Asher
«oye y... salió todo bien con la visita familiar? Te oí un poco extraña en tus últimos streams» 10:27
Seren colocó el teléfono sobre su frente y cerró un poco los ojos antes de contestar. Pensó en lo que sucedió unos días antes. Lo loco que había sido volver a su hermano después de mucho. Ella y Santiago estaban llevándolo mejor. Después de un par de días del espacio que ella marcó entre ambos para pensarlo, volvieron a hablar.
Entonces el tono de una llamada la sobresaltó y separó el teléfono de ella al ver que estaba haciéndole una videollamada a Asher. Presionó el botón rojo de inmediato, justo cuando Asher contestó.
Seren(a)
«PERDÓN» 10:27
«Presioné la pantalla sin querer» 10:27
Asher
«Ah, pensé que me querías ver» 10:27
Luego adjuntó el sticker de un gato alzando una ceja.
Seren(a)
«jaja ya te voy a ver hoy en un momento, no es necesario que sea dos veces» 10:27
Asher
«Ah, pero luego te veo en mi stream siempre» 10:27
Seren(a)
«Al igual que tú. Chismoso» 10:27
Asher
«Por supuesto, amo el chisme y me encanta poner tus streams de fondo mientras juego. Es un delito??? No lo creo» 10:27
—Ya me bañé —anunció Lana, asomando la cabeza por el pasillo. —Ya no siento alcohol en mi cuerpo, ni felicidad.
—Es muy temprano para tener alcohol en el cuerpo, Lana.
—Seren, yo amo el verano y el sol, pero hace mucho calor, ¿qué quieres que haga?
La rizada quitó la vista de su teléfono y la miró de lado.
—Mmm, no sé, ¿tomar agua helada?
La rubia agitó la mano con desdén y negó.
—Aburrido. En fin. Me voy a cambiar, me pondré más preciosa de lo que ya estoy, e iremos a buscar a mi hombre. Creo que más tarde haré algunos Tiktoks, me está yendo muy bien en esa red social. Es sorprendente.
Seren(a)
«Ok Asher» 10:28
Asher
«Ok Serena» 10:28
Seren(a)
«Seren» 10:28
Asher
«Así te presentaste la primera vez que nos vimos, Serena» 10:28
Seren(a)
«Te estás ganando un raid de odio» 10:28
Asher
«Ay qué miedo, qué me van a hacer los pixelones?» 10:28
Seren(a)
«Ok Asher Bancroft» 10:28
Asher
«Ok Serena Altamirano» 10:28
—¿Por qué le dije mi apellido? —cuestionó negando.
Seren(a)
«Respondiendo tu pregunta...» 10:28
Asher
«La visita familiar...» 10:29
Seren(a)
«Mi hermano regresó. Santiago. Es como si lo hubiéramos invocado el día que te conté de él» 10:29
Asher
«Wow, en serio? Regresó? Cómo?» 10:29
Seren(a)
«Pues en un avión, supongo» 10:29
Asher
«Te apasiona la comedia, no?» 10:29
Seren(a)
«Es un poco largo, si quieres te cuento luego, pero sí, volvió» 10:29
Asher
«Pero estás bien con ello?» 10:29
Seren(a)
«Mejor de lo que esperaba» 10:29
—¡¡Seren!! ¡Auxilio! —gritó Lana, aquello alertó a su amiga—. ¡Tengo una emergencia de moda!
Y eso la tranquilizó.
Seren(a)
«Lana tiene una emergencia de moda, supongo que no sabe qué usar para hoy. Hablamos más tarde» 10:29
Asher
«Yo también tengo una emergencia de moda, no sé si usar ropa oscura o completamente negra» 10:30
Seren(a)
«Hacen 30 grados afuera, Asher, por Dios. Te vas a achicharrar» 10:30
Asher
«Y arruinar mi estilo emo soft grunge gótico punk???? NO GRACIAS» 10:30
Seren sonrió y negó con la cabeza antes de ponerse de pie y caminar hacia la habitación de su mejor amiga.
La rubia en efecto, era un desastre. Tenía ropa por toda la cama y se estaba peleando con una blusa que estaba atorada en su cabeza.
—Creo que la ropa no se usa así, pero como no soy una experta, no voy a opinar —comentó apoyando su cuerpo sobre el marco de la puerta.
—Seren, abre Pinterest e ilumíname. Summercore outfit.
—¿Vas a dejar que yo elija que vas a usar? Wow, sí estás muy nerviosa. Ok, vamos a ver qué podemos hacer.
Luego de varias opciones, las amigas estuvieron de acuerdo en unos shorts de denim, un top verde y unas converse junto a un pañuelo celeste en la cabeza serían un buen atuendo para ese calor.
Lana se maquilló rápido, Seren estaba lista desde antes, así que solo se retocó un poco el labial, y por fin estuvieron listas para salir.
—Espera, antes de salir de aquí, tengo que hacer una llamada —anunció Seren, justo cuando estaba por encender el auto. El tono sonó menos de tres veces y contestaron desde el otro lado. —¡Leonardo! Hola, escúchame. Estoy de camino al aeropuerto, ¿ya estás con el camión de mudanza?
—Hola, Seren. Sí, voy de camino a casa de Alejandro, ¿necesitas algo?
—Sí, después de buscar a Alex, ¿puedes pasar por mi casa? Tengo algunas cosas que no entraron en mi auto.
—Sí, lo alquilé por unas horas, podemos hacer eso. ¿Ya están saliendo?
—Estamos en el auto, ya vamos para allá. Te veo al rato.
Luego de una corta despedida, Seren encendió el auto y Salió el sol de Don Omar empezó a sonar.
—¡¡Qué canción!! —gritó Lana alzando los brazos. Seren se echó a reír cuando su mejor amiga empezó a bailar en su asiento.
Luego encendió el aire acondicionado, porque no sabía si podría bailar mucho más que veinte segundos con el calor que hacía.
Checó la temperatura y verificó que estaban en treinta y cinco grados y subiendo.
—Y yo quiero saber cómo es que baila la Julieta —la acompañó Seren, Lana agitó la cabeza, provocando que el pañuelo cayera sobre sus piernas.
—¡Julieta baila sexy con la mano en la cabeza!
—Julieta necesita un té helado antes de ir al aeropuerto o va a sufrir un desmayo mientras maneja —comentó la rizada, girando a la derecha, lugar contrario a la avenida que las llevaba al aeropuerto.
Luego de un corto desvío por una bebida helada con extra hielo, volvieron a su camino.
Desde una perspectiva omnisciente, Vad y Asher, Lana y Seren, y Reno y Gus se dirigían al aeropuerto, porque Alex un día decidió mudarse de país y decidió que sus amigos serían partícipes de aquella increíble experiencia.
Palabra de él, por supuesto. Los demás solo querían que se mudara de una vez.
En menos de tres horas, Alejandro llegó a la Ciudad del Rey, alborotó a todos en el aeropuerto y recibió ochocientas llamadas de los Robles, sobre todo de su madre. Doña Lola estaba muy preocupada por su hijo mayor.
—Y eso que soy el hijo menos problemático de todos, imagínense cómo se puso cuando Verónica se fue a vivir a Counterville —dijo Alejandro, más para sí que para sus amigos. —Una hecatombe, mi madre casi sufre un infarto.
Aunque parecía decirlo como una broma, Doña Lola sí estuvo a punto de sufrir un infarto.
La pobre mujer vivía con los nervios a flor de piel si no tenía cerca a sus seres queridos.
—Yo estoy igual que Doña Lola, se te ocurre mudarte un día antes del estreno, Dios —dijo Seren cuando todos llegaron al estacionamiento. No solo estaba nerviosa por lo anterior, sino porque estaba rodeada de amigos streamers, y si alguien los reconocía, sabrían quién era ella.
—Hola, Seren, yo también estoy feliz de verte.
La rizada, que tenía el ceño fruncido, sonrió de lado y le dio un beso en la mejilla para darle un gran abrazo.
—Sí estoy feliz de verte, pero ahora voy a meterme a mi auto con aire acondicionado y ventanas polarizadas. Entra rápido que me toca llevarte a tu nuevo hogar.
—Yo llevo el equipaje al maletero —se ofreció Vad.
—Yo te ayudo —dijo Gus—. Ya que Leonardo fingió que estaba llevando cajas a tu casa para no tener que venir a verte.
Alex se echó a reír y al darse la vuelta, se encontró con Asher y un gran abrazo. Alejandro sonrió y saltó para corresponder el abrazo.
—Te quiero mucho, amigo —dijo Asher, moviéndolo un poco mientras se reían.
—Yo también te quiero. Estoy feliz de tenerte aquí, ¿ahora podemos hacer pijamadas?
Seren tocó la bocina del auto interrumpiendo la pregunta y provocando que Asher saltara del susto.
—Sí, podemos. Ahora tenemos que separar nuestros caminos unos minutos. Mi madre vino a buscarme. Le preguntaré si luego podemos salir a jugar —bromeó Alejandro, señalando el auto de Seren. Asher le dio otro abrazo y mientras le gritaba que lo quería, alejaron sus caminos por un momento. Lana entró del lado del copiloto mientras el menor abrió la puerta de atrás.
—¡¡Alex!! —gritó alguien que venía de frente hacia él, Seren abrió los ojos cuando notó que era una suscriptora que lo había reconocido. La rizada agradecía tener las ventanas polarizadas, pero si Alejandro no cerraba la puerta, la iban a ver.
—Ey, ¡hola! —saludó él, bajando del auto y cerrando rápido.
Seren respiró en paz.
—No sé cuánto más voy a poder soportar esto —susurró Seren. Lana la miró y sonrió de lado.
—Tú dispusiste esto, Serenata, puedes romper el maleficio cuando quieras. Tienes el poder.
Dicho esto, se colocó los lentes de sol y encendió el reproductor de música en donde «Simplemente pasan» de Morat y Cami comenzó a sonar.
Ambas en silencio escuchando la canción, al darse cuenta de la letra, giraron a mirarse.
«Que bailara una de Juan Luis por siempre conmigo, y emborracharnos por la ciudad con Dios de testigo, ya quiero decirle que bailemos, que lo peor que puede pasar es que nos gustemos, que a lo mejor de alguna otra vida nos conocemos. Ay, qué suerte la mía que hoy te volví a encontrar en este lugar...»
—¿Es una broma? —dijo Seren pestañeando un poco.
—Es su canción, amiga.
—¿Qué canción? —preguntó Alex entrando al auto. Seren cambió la canción por Don de Miranda y encendió el auto. —Uy, qué buena canción. ¡Amigas! ¡¡Ya estoy aquí!!
—¿Cuándo es la fiesta? —preguntó Lana.
—Hoy no, definitivamente. Tal vez mañana después del estreno de Píxeles. ¡Fiesta en mi casa! Lo primero que haré hoy será: armar mi cama, mi estudio y computadora.
—Lo tienes todo —dijo Seren con una sonrisa.
—Oh, y me compré un minibar para mi estudio.
—Tienes tus prioridades bastante claras, Alex. Igual estaría bien tener algo para comer.
—Pft, ya hice las compras. Las pedí a casa de Leonardo hoy en la mañana.
—Hablemos de eso, ¿hemos sido tus amigos y también tu almacén de mudanza? —La rubia giró a mirarlo, Alejandro tenía una sonrisa gigante y sus ojos brillaban. Podían notar que el chico estaba ilusionado.
—Yo necesitaba espacio para guardar mis cosas y tengo amigos que viven en mansiones, ¿por qué no iba a utilizar ese privilegio?
—Lo dice la persona que sí tiene una mansión familiar en casa.
—La casa de los Robles es un espacio que acoge a turistas, no es lo mismo. Además, agradezcan que aquí tienen un clima seco. Imaginen este calor, pero con humedad. Yo estoy bastante a gusto aquí.
—Amigos, necesito llegar a casa de Alex ya mismo. Me voy a desmayar del calor —pidió Lana echándose aire.
Seren había apagado el aire acondicionado porque si lo tenía mucho tiempo prendido, le hacía mal a la garganta. Y lamentablemente era eso, o no poder hablar.
—Ya estamos cerca, Lana. Si el auto de adelante avanza y deja de estar con el teléfono, llegaremos en dos minutos.
Seren tocó la bocina y el auto avanzó.
—Odio a la gente y odio el calor —murmuró Seren. —¡¡Odio el verano!! —gritó eso último.
Seren pasó esos dos minutos odiando al sol y a la gente que realmente había provocado el calentamiento global.
—Ya les digo, voy a encontrar a esas corporaciones, gobiernos y millonarios que están haciéndole esto al planeta tierra y los voy a tomar por el cuello y... —Seren había bajado del auto y con mímicas, estaba ahorcando a alguien en el aire.
—¡Yo sigo! —gritó Asher acercándose a ellos, Vad sonriendo iba detrás de él. —¿De qué hablamos?
Lana y Alejandro se echaron a reír.
—Vamos por el equipaje—dijo Vad, Alejandro y Lana asintieron y fueron con él, dejando solos a Asher y Seren.
—Hola —sonrió el de cabello gris, Seren giró a mirarlo y soltó un poco de aire.
Asher estaba usando unos shorts negros, una camiseta blanca extra grande y sus Converse de siempre.
—No lo puedo creer, no estás de negro. ¡Es un milagro!
Él se rio y giró un poco la cabeza, luego se tocó el cabello, despeinándolo y peinándolo a su modo.
—Está dentro de mi escala de colores permitidos. Bonito vestido, por cierto.
Seren llevaba un vestido blanco largo con las mangas abullonadas y pequeñas flores lilas por todos lados, además de una abertura en el lado de la pierna izquierda y unas zapatillas blancas.
Ella bajó la cabeza para observar su atuendo y se sonrojó un poco.
—¡¡Llegaron las dos personas más enamoradas de este grupo de amigos!! —gritó Gus alzando la mano que no tenía ocupada, la otra sujetaba la mano de su esposa.
—Y creo que llegamos tarde porque solo veo a la segunda pareja más enamorada —añadió Reno acercándose a Asher y Seren. La rizada frunció el ceño en silencio. —¿Dónde están los demás?
—Sí somos. Y están detrás del auto de Vad, dijeron que iban a sacar el equipaje de Alex —contó Asher con una sonrisa.
Seren solo rodó los ojos y dejó al grupo para unirse a los otros.
—Ya quisieras —fue lo único que susurró.
Ya quisiera yo, pensó.
El grupo de amigos ayudó a Alex, no solo con la mudanza, sino a armar muebles. Los que se supone que tomaría un par de horas, terminó siendo de muchas más. Eran las siete de la tarde, solo pararon un momento para almorzar, y fue porque Seren decidió pedir algo a domicilio.
Lo principal para Alex, era su estudio y un lugar para dormir, y eso fue lo que hicieron.
—Bueno, creo que la mejor manera de verificar que todo esté bien, es hacer un directo —dijo el rizado. Todos giraron a mirarlo.
¿Todavía tenía energía?
—Amigo, si lo haces, te acompaño. De todos modos, ya no iba a prender hoy —respondió Asher mirando su reloj.
Y poco a poco, todos estuvieron de acuerdo. Incluso Seren, que decidió acompañarlos fuera de cámara.
Leonardo ofreció buscar los paquetes que faltaban en la casa de Seren mientras ellos estaban en directo, por lo tanto, solo estaban ellos.
—Ok, acabo de avisar que haré directo. Nadie, salvo la chica del aeropuerto, saben que estoy aquí. Así que debería ser una sorpresa.
—Bueno, sorpresa doble —respondió Lana señalando al grupo.
—¿Qué vamos a hacer? —cuestionó Reno sentándose en la silla que Gus le había pasado.
También habían armado un par de sillas, además de las que Alejandro tenía para futuros invitados. Así que el estudio era una mezcla de sillas gamer con sillas de comedor, y un puf para Seren. Ella estaba más cómoda que todos.
—No tengo idea, conversar un rato. Ya se nos ocurrirá algo. No estaré tanto tiempo, tengo que estudiar sobre leyes policiacas para mañana —comentó Alex sin mirar a su amiga, sabía que ella lo estaba juzgando por no estudiar. Luego acomodó todo para empezar la transmisión y puso la pantalla de espera que indicaba que estaba por iniciar. Algunos minutos después, y cuando vio que todo estaba en orden, cambió de escena. —¡Hola, hola, gente! ¿Cómo están hoy? A ver, antes de que empiecen a preguntar, porque están viendo muchas cosas distintas... Ya me mudé. Llegué a Altagracia hoy. Quería que sea sorpresa y nada emotivo, así recogí mis cuatro cosas, y me mudé sin avisar. —Presionó el labio en una línea—. O sea, no les avisé a ustedes, a mi familia sí... Bueno, no importa. Lo segundo que veo que ya están preguntando, es: ¿Por qué hay tantas sillas a mi alrededor? Buena pregunta, mis estimados. Como les dije, hoy llegué a Altagracia, y gracias a Diosito, tengo unos amigos increíbles que me ayudaron con todo. No solo los utilicé de almacén para guardar mis cosas, sino que quisieron ayudarme a instalar el estudio, así que, en agradecimiento, decidí darles un poco de exposición en este canal tan famoso que tenemos. Quiero que le den un fuerte aplauso a esta gente que recién empieza en el mundo de los streams. Con ustedes, Asher, Lana, Vad, Gusi y Reno. También tenemos una voz a la que me gusta llamar mi conciencia, que estará participando aquí de forma auditiva. Como todos saben, Seren no existe, es solo una voz que habla con nosotros, así que tenemos a Seren también. Su voz, su cuerpo no existe. Es un alma que deambula por ahí.
—Ya entendimos, Alejandro —dijo ella riéndose.
El chat de Alejandro estaba enloqueciendo, de pronto se había mudado e inició stream con todos sus amigos en una misma habitación.
Los números, por supuesto empezaron a crecer cuando distintas comunidades se enteraron de ello.
Además, cada streamer avisó, dándole un poco más de exposición al asunto.
alex: me mudé e invadieron mi casa
asher: estamos en directo en casa de la criatura y gente que huele a streamer
vad: ale alejandro
seren: ¡Holi, Pixelitos! Alejandro nos lio un poco la tarde y esa es la explicación por la cual no estoy en directo en mi canal, ven al de Alejandro y lo descubrirás.
lana: citaré el tweet de Seren, vengan a vernos <3
gus: ESTOY EN LA MISMA CASA QUE ASHER
reno: ven al canal de alex a vernos o no respiro, apúrate, tú decides
Todos dejando el link que redirigía al canal de Alex.
Aquella tarde en donde nadie sabía qué iba a pasar, resultó una bastante tranquila y divertida. El grupo estuvo casi dos horas en directo, hablando de la vida y cómo sus caminos se habían unido para terminar armándole los muebles a Alex. También respondieron preguntas del chat y se pusieron a gritar cuando Seren saludó a la cámara con su mano.
Todos gritaron porque mostró su mano. No se imaginaban cómo sería cuando decidiera mostrar el rostro.
Al terminar el directo, todos empezaron a despedirse. Gus y Reno se fueron primero, poco después, Vad dijo que se iría, pero Leonardo todavía no llegaba con la llave de Seren, así que ofreció llevar a Lana a su casa mientras tanto, y eso hizo que Asher decidiera quedarse a acompañar a Seren hasta que su agente apareciera.
—Eh, sí. Está bien... Puedo llevarte a tu casa después —dijo Seren mirando a Asher, él sonrió y asintió.
Lana alzó una ceja con una sonrisilla y giró a ver a Vad, él estaba igual. Alex estaba peleándose con la puerta de su armario nuevo, ya que alguien había puesto mal los tornillos.
Probablemente Gus.
—Ok, entonces me voy con Bernardo —anunció la rubia, enroscando su brazo con el de Vad.
—¿Cómo que Bernardo? ¿Quién te dijo eso? ¿Asher? —cuestionó el pelinegro mirando a su mejor amigo, pero el otro alzó las manos porque no sabía nada.
—Vad, fui yo. Recuerda que supimos tu nombre cuando empezaste a editar mis videos. Sin embargo, le dije que no te llame así —reprochó Seren, cruzando los brazos y mirando a su amiga.
—Ay, pero si Bernardo suena adorable, por favor. —Lana agitó la mano y se acercó a Seren para besar su mejilla. —Te veo en casa. Y tú, pórtate bien —le dijo a Asher señalándolo, luego miró a Alex. —Y tú deja esa puerta. La arreglas mañana, ya vete a estudiar, que a mi amiga le va a dar algo.
Poco después de ello, Lana se fue con Vad diciéndole «ya vámonos, Bernardo».
Leonardo
«Llego como en diez, tal vez menos, me atrapó el tráfico. No contesto, estoy manejando. Cambio y fuera» 22:14
—¿Tráfico de dónde? ¿En Ciudad del Rey hay tráfico? —cuestionó Seren confundida.
—De drogas, tal vez. ¿De qué hablas? —preguntó Alex colocando los tornillos de la puerta. Asher se rio. —Voy por mi desarmador estrella, ya vuelvo.
No le había hecho caso a Lana.
—Me parece que la avenida Banco Colonial, podría ser, ¿no? Cruza con Diagonal, y ahí sí que se llena de autos, sobre todo desde las seis de la tarde.
—Puede ser, pero yo creo que Leonardo se fue a hacer otras cosas y luego fue a mi casa. Lo conozco como la palma de mi mano.
Seren estaba dando vueltas por el estudio de Alex con el teléfono en su mano y Asher decidió hacer lo que hacía mejor. Ya vivía con Vad, que era básicamente igual que su jefa.
La tranquilidad en persona hasta que se estresaba por algo en específico.
Seren no estaba así por la llave, ella estaba así porque pensaba en el evento del día siguiente.
El de cabello gris se puso de pie, y con delicadeza se acercó a Seren para tomarla de los brazos, esperó alguna reacción por si no quería que la tocara, pero al verlo a los ojos, ambos se quedaron como estaban.
—Leonardo va a llegar pronto con tu llave, y si no fuese así, Lana tiene la suya. Si tuvieras que irte pronto por algún motivo, hay otra solución. Lo mismo pasará mañana con el estreno. No pasa nada si las cosas no salen perfectas. No siempre tienen que salir así. La perfección no siempre es perfecta —dijo. Seren vio en los ojos de Asher el color de ópalo y también el color de su cielo perfecto. Así se veía el cielo cuando viajaba a la playa con sus abuelos. De sus momentos y recuerdos favoritos sucedían cuando ese color aparecía.
Eso la llevó a pensar en el mar y la brisa marina, cuando hacía un poco de frío por la tarde, pero no lo suficiente para poder correr por la orilla persiguiendo a sus primos más grandes.
La rizada presionó los labios en una línea y se acercó un poco más para abrazarlo. No lo pensó mucho, solo lo hizo. Lo abrazó por la cintura y él correspondió abrazándola por los hombros. Asher le dio un pequeño beso en la cabeza y sintió cómo Seren tomó una gran bocanada de aire.
—A veces cuesta recordarlo.
—Puedo recordártelo las veces que lo necesites.
—Encontré el desarmador —anunció Alex entrando a su estudio, y se quedó de pie alrededor de dos segundos, luego se dirigió a su armario, como si no hubiera visto nada.
Seren se separó de Asher y le sonrió, pero al instante sonó su teléfono, era una llamada de Leonardo.
—Ya llegué, estoy entrando, estoy manejando. Voy a colgar —avisó su agente, luego le colgó sin dejar que contestara.
Seren cerró los ojos y costó hasta diez.
—Ok, Leonardo llegó. Supongo que esa es nuestra llamada de salida —anunció la chica.
Alex se acercó para abrazarlos a los dos.
—Gracias por venir, amigos. Los quiero mucho.
Seren le dio un beso en la mejilla y Asher lo despeinó.
Luego salieron. El encuentro con Leonardo tampoco fue muy largo. Su agente insistió en que estaba muy apurado y no podía dar explicaciones. Así que luego de dejarle los paquetes a Alex, que junto a Asher subieron a su apartamento, se fue.
—Así se pone cuando sabe que está en falta. Parezco su mamá —dijo Seren negando con la cabeza. Luego encendió el auto. Asher se estaba colocando el cinturón de seguridad, luego encendió el reproductor de música.
—¿Puedo?
Seren hizo una seña, dejando que eligiera la canción en su lista de reproducción compartida con Lana.
La flaca de Jarabe de Palo empezó a sonar.
Luego de un par de indicaciones, Seren supo dónde estaba la casa de Asher. Más o menos a una hora de donde ella vivía.
Tenían un largo viaje por delante.
—Por un beso de la flaca daría lo que fuera —cantó Asher bajito, Seren bajó un poco su ventana porque necesitaba un poco de aire fresco. Agradecía que no hacía tanto calor como en la mañana, pero el verano seguía ahí.
—Mi hermano solía tocar esta canción en la guitarra cuando estaba aprendiendo —comentó—. Mi abuelo, Polo, le enseñó lo básico cuando viajamos por vacaciones. Era verano también, pero hace muchos años. Luego se arrepintió de hacerlo —dijo entre risas—. A Santiago no se le daba tan bien la música, pero esta canción en específico, sí le salía bien.
—Es de mis canciones favoritas. La pusieron en la boda de mis padres por elección de ellos. Hicieron todo un show y la interpretaron en la fiesta. Mi papá no sabe hablar español, entonces todo fue mucho más gracioso.
Seren giró a mirarlo aprovechando el semáforo en rojo. Ella recordaba que había hablado sobre su padre antes, que era una persona estricta, y con esa imagen en mente, no lo veía siendo el mismo que cantaba esa canción en su boda.
—Tu papá...
—No es mi papá realmente —interrumpió Asher—. Digo, para mí es mi papá. Mi padre biológico vive aquí, él es la razón por la cual mi madre y yo nos fuimos a vivir a Inglaterra.
Todo tenía más sentido.
—Qué padres nos tocaron, eh —dijo sonriendo de lado, luego volvió a manejar al ver que el semáforo cambió de color.
—Ya ves —respondió Asher. —Por cierto, dijiste que tu hermano se llama Santiago. Santiago Altamirano, ¿a qué se dedica?
La chica frunció el ceño, confundida.
—Es... ingeniero. Es socio de una marca que pronto lanzará un videojuego.
—¡¡Lo sabía!! Lo que pasa es que a Vad le llegan catálogos de juegos que saldrán este año porque es de la comunidad anglo y esas cosas, el caso es que anunciaron un juego tipo shooter de una empresa nueva llamada Dungeon y uno de los dueños se llamaba así.
—¿Ya lo está anunciando? —chilló Seren emocionada. —No me había dicho eso, quiero contactarlo con Leonardo para que podamos probarlo en vivo. Además, si es tipo shooter, muchos van a querer hacerlo. Alex y Lana aman los juegos así.
—Me parece genial, sí, estoy dentro —respondió Asher feliz.
—Muchas gracias, Asher. Estoy feliz de tener a mi hermano más cerca. Verás, si todavía quieres saber la historia completa...
—Tenemos mucho tiempo, cuéntame.
Seren revivió aquella escena de nuevo mientras se la contaba a Asher. Él la escuchaba atento e intercalaba reacciones de vez en cuando. Incluso tuvo que detenerse un momento cuando se emocionó, no quería manejar en ese estado. Luego de un momento pudo continuar.
Esa noche, Asher y Seren conversaron mucho. Incluso cuando ya habían llegado a su casa, se quedaron estacionados en el auto, porque les parecía más interesante conversar que despedirse.
Y de pronto Ocean eyes de Billie Eilish comenzó a sonar.
—Yo amo esa canción —comentó Seren subiendo un poco el volumen.
—Yo tengo los ojos del color del océano —dijo Asher, como presumiendo. Ella volteó a mirarlo y solo sonrió.
Y estaba de acuerdo. Porque desde que lo conoció, asoció aquella canción con él.
Entonces aclaró la garganta y se fijó en la hora.
—No son once y once, pero son doce y doce, pide un deseo. —Seren cerró los ojos y pensó en algo que realmente quería.
«Ganarle al estúpido de Ryu en Ace of cups»
Y al abrir los ojos, Asher la estaba mirando con una sonrisa.
—¿Pediste tu deseo?
—Por supuesto, y espero que se haga realidad. ¿Y tú?
—También —dijo Asher, sin dejar de mirarla. —Pero bueno, creo que ya debería entrar a mi casa, así no regresas tan tarde a la tuya.
Seren asintió sin decir mucho más que «adiós». El de cabello gris se acercó a ella y le dio un beso en la mejilla, uno incluso más largo del que solía darle siempre. Uno, dos, ¿tres segundos?
Ella giró a verlo cuando se estaba alejando y una energía magnética los volvió a unir, como si no quisieran alejarse. Pasó saliva al verlo a los ojos y Asher estudió su mirada y recorrió el puente de su nariz hasta sus labios. Se acercó un poco más a él, y él a ella.
—¿Asher? —escucharon de lejos. Ambos se separaron y Seren bajó la ventana del lado del chico.
Era Vader.
En su defensa, las ventanas eran polarizadas y él no sabía que había interrumpido algo.
—Hi, buddy. Me estaba despidiendo de Seren. Uhm, gracias por traerme.
—Sí, cuando quieras —respondió ella asintiendo rápido. —Hola, Vad. Adiós, Vad. Adiós, Asher. Adiós a ambos.
Estaba nerviosa y se veía nerviosa.
—¿Interrumpí algo? —intentó susurrar cuando Asher salió del auto, pero Seren escuchó.
—Sí, interrumpiste algo —respondió Asher en el mismo tono.
Seren se rio bajito y negó con la cabeza.
Subió la ventana y retrocedió para volver a su casa.
El camino se hizo un poco más corto porque no había muchos autos a esa hora. Seren regresó a su hogar con Ocean eyes de Billie Eilish en bucle. Y cuando llegó a su habitación, justo antes de acostarse, volvió a ponerla.
Miró el techo por varios minutos con esa canción de fondo.
Pensó en lo que estuvo por suceder, en cómo sus impulsos le ganaron a la razón. En cómo el corazón era más rápido que su mente. Porque ella decía que no quería tener nada con él, pero sus estúpidos sentimientos decían otra cosa.
Seren supo desde ese momento, que esos ojos azules le iban a arruinar la vida de la peor forma.
O de la mejor, si lo veía desde otra perspectiva.
Esa noche durmió con un bebé. Se despertó varias veces por la noche y no lloró para despertar a sus padres solo porque vivían en otro país (y porque sinceramente, no quería verlos).
No despertó temprano, no hizo ejercicio y solo desayunó una taza de café.
Sentía el estómago revuelto por los nervios y porque todo le recordaba a Asher.
—¡¡Buenos días, Serenata!! ¡Hoy es día de estreno! —gritó Lana apareciendo en el comedor en donde su mejor amiga estaba sentada con su taza de café a medio tomar. —Uy, qué cara. ¿Qué pasó?
—Me arruinó, Lana. No puedo dejar de pensar en él —dijo mirando un punto fijo.
Lana, que no había entendido bien hasta que recordó con quién había estado ayer.
—¿Qué pasó?
—Estuve así de besarlo, amiga. —Seren señaló una distancia muy pequeña entre sus dedos. —Si no fuera por Vader...
—Te odio, Bernardo —susurró Lana presionando el puño. —Enemigo público de esta casa desde ahora.
—Lana, estoy arruinada. Préstame atención —se quejó la rizada, apoyando su frente en la mesa.
—Ya, ya. Tranquila. Hoy es día de pensar en Píxeles y nada más que en Píxeles. Ya tendrás tiempo de pensar en Asher cuando vayamos a la fiesta de Alex hoy en la noche.
Seren alzó la cara y miró a su amiga.
—¿Qué fiesta?
—¿No viste el grupo? Alejandro confirmó que hará una fiesta hoy, por su mudanza y por el estreno de Píxeles. Solo estaremos nosotros, así que puedes ir perfectamente.
—¿Va a estar Asher?
—Por supuesto.
—Paso.
Lana rodó los ojos cuando Seren volvió poner la frente en la mesa.
Por supuesto que iría a esa fiesta.
NO FAAAAAAAAAAAIR YOU REALLY KNOW HOW TO MAKE ME CRY WHEN YOU GIVE ME THOSE OCEAAAAAN EEEEEEEEYES
HOLA MUY BUENAS NOCHES CÓMO ESTÁ MI GENTEEEEEE E E E E E EE E
UN APLAUSO PARA ESTA PAREJA QUE ESTÁ ENAMORADAAAAAAAAAAA
hola jaja
:D
vivan los nobios diría willyrex
yo me voy de aquí, que para ustedes son las 4 de la tarde, pero yo estoy dejando programado esto a la 1:15 am y yo ahora soy una señora que duerme temprano (no siempre) y se levanta temprano (a veces)
guenas noches
tkm
baaaaai <3
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