11 || Vecinos
El servidor de Minecore tenía solo dos días de haberse estrenado, pero Asher y Seren ya habían agotado todas las horas de estar en él.
Dentro de las reglas, no existía alguna que les limitara el tiempo, sin embargo; tenían la condición de no equiparse demasiado, así el juego era equitativo para todos.
Con esa simple regla, ambos entendieron que podían entrar cuando quisieran, y con eso estaban satisfechos.
A todo el mundo le pareció extraño ver a Asher empezar tan temprano, incluso contó que había desayunado y nadie se lo podía creer.
Seren, al ver su nombre cuando se conectó en el servidor, se tapó la boca del asombro.
—Oigan, ¿ustedes están viendo lo mismo que yo? ¿qué hace Asher a estas horas despierto? —preguntó la muchacha con una risilla, entonces su chat le contestó. —Minecraft lo vuelve loco, dicen. Sí, bueno, no puedo decir mucho. Estoy aquí a la misma hora que él, no soy la persona adecuada para juzgarlo. —Seren se echó a reír y suspiró negando con la cabeza. —En fin, vamos a la mina un rato. Sigo sin saber qué material usar para mi casa. —Seren acomodó un par de cosas en un cofre para poder tener espacio en el inventario. Se había hecho una pequeña casa de madera mientras pensaba qué casa tener. —Ayer por la noche estuve haciendo un par de diseños, pero no me convence ninguno. ¿Ustedes creen que sería muy pretencioso hacer una mansión? O nos hacemos una casa más simple. ¡Uh! Escuchen, píxeles, escúchenme bien. ¿Y si me hago una casita parecida a la de...? ¡Oh! ¡Ya sé qué voy a hacer! —chilló emocionada, e incluso aplaudió un poco. —Ya sé qué no están entendiendo nada, pero les prometo que va a tener sentido luego. Tengo que escribirle a Lana y de paso voy al baño. Denme un segundo.
Seren salió de su habitación y corrió hacia donde estaba su amiga, se encontraba justo de camino a su estudio, pero Seren la abordó a tiempo y la tomó de los hombros.
—¿Qué se te ocurrió, Seren? —preguntó Lana mirándola a los ojos. Seren, que tenía una gran sonrisa, supo que su mejor amiga le iba a seguir el juego.
—¿El rol que pensábamos hacer? Tengo una idea, ¿estás dentro?
—Ya te he dicho que te sigo hasta el fin del mundo, hermana. Cuéntame tus ideas —comentó Lana, rodeando el hombro de su amiga, y juntas caminaron hacia la puerta del estudio de la rubia.
La rizada le habló brevemente de sus planes, lo suficiente para que Lana le gritara que sí, y que le parecía una muy buena idea. Después de eso, Seren volvió para no levantar sospechas. Nadie sabía que ellas vivían juntas, y querían que eso mantuviera así.
—Volví —comentó Seren, su chat estaba comentando emotes de Serencries y la muchacha no entendió lo que estaba pasando. —¿Por qué lloran? Solo me fui un minuto —rio tratando de entender, pero entonces otros comentarios llegaron. —¿Asher estuvo aquí? ¿y por qué lloran? ¿Cómo que los insultó? ¡¿Les dijo pixelones de nuevo? ¿Pelones? ¿Pelones, o pixelones? ¿Las dos? —Seren se rio bajito y aclaró la garganta. —No pasa nada, chat. Vamos a solucionar esto. Saben que pueden llorar si lo necesitan, pero jamás por un hombre. Acompáñenme, vamos a aclarar las cosas.
Seren cambió su espada de hierro por una nueva y tomó un arco también.
Luego salió de su casa y corrió hasta la casa de Asher porque supuso que estaría ahí.
serenanoestoy: holaaaaa
jimmyneutron: hola sereeeen
Megara: hola guapa
ashersinuser: buenass
Seren entrecerró los ojos al ver a su presa contestando el mensaje, así que decidió escribirle por privado.
serenanoestoy: /msg ashersinuser dónde estás?
ashersinuser: r/ en casita, por?
serenanoestoy: r/ voy
—¿Holaaa? —saludó, incluso golpeó la mesa para simular que estaba tocando la puerta. —¿Hay alguien en casa?
—¡Hola, vecina! ¿Cómo estás? —saludó Asher abriendo la puerta de su horrible casa.
Eso fue lo que pensó Seren. Era un cubo de piedra con una sola antorcha en medio para iluminar lo suficiente para que no aparecieran mobs.
—Hola, hola, vecino. Bien, estoy muy bien, ¿y tú? —preguntó pasando junto a él. El personaje de Seren movió la cabeza para observar todo. Tenía tres cofres llenos de cosas inservibles. Todo desordenado.
—Bien, ¿por qué estás revisando mis cofres?
—Solo estoy viendo, no voy a robarte tus... patatas venenosas. ¿Por qué tienes eso?
El personaje de Asher estaba cocinando algo en el horno; por lo tanto, estaba de espaldas a ella, pero Seren notó que había cambiado la perspectiva de su juego con la tecla F5 porque veía hacia arriba de una forma muy extraña. Por lo tanto, estaba viendo lo que Seren hacía a sus espaldas.
—Yo guardo todo lo que encuentro, luego lo ordeno. ¿Por qué haces tantas preguntas? ¡Aaaaah! ¡¡Aaaaaah!! —empezó a gritar cuando Seren lo atacó con la espada y lo persiguió por toda la casa. —¡Tramposa, no tengo armadura que me proteja! ¡Soy un ser indefen...! ¡Seren! ¡No me mates! ¡Rompí mi cama! ¡Me vas a mandar al pueblo! ¡Auxilio! —gritó él, mientras corría por su casa, y cuando estuvo a punto de llegar a la puerta, Seren lo terminó de matar. Para suerte de él, el juego tenía puesto el mod para revivir al personaje en un conteo de sesenta segundos.
—Discúlpate con los píxeles por llamarlos pelones y te reviviré —dijo Seren, señalándolo con su espada.
—¿Qué píxeles? ¿De qué hablas? ¡No sé qué es eso!
—No estamos roleando, Asher. Discúlpate, o digo donde vives y tu nombre completo —amenazó poniendo su voz más grave. Asher se echó a reír al escucharla, pero vio como el tiempo se iba terminando.
—¿Así estamos? ¿Me estás amenazando? ¡Seren, revíveme! ¡Me voy a morir! ¡Perdón! ¡Perdón a los pixelones! ¡No les volveré a llamar pelones! Aunque no creo que eso sea un insulto, y si ellos lo tomaron a mal, entonces quienes están mal son ellos.
—¡Porque lo dijiste como si fuese algo malo! ¡Deja de maltratar a mis niños! —le gritó Seren dándole clic al personaje de Asher con la tecla derecha del ratón.
—No merezco este trato —se quejó caminando de nuevo al horno. Lo que había estado cocinando era hierro para hacerse una armadura completa. —Oye, ¿tienes diez de hierro?
—¿Para ti? No —respondió Seren dándose la vuelta y caminando hacia la puerta.
—¡¡Por favor!! ¿Qué vas a hacer ahora? —le preguntó siguiéndola. Seren estaba yendo hacia su casa para terminar de equiparse, pero se detuvo para hablarle.
—Voy a la mina, necesito materiales para mi casa.
El personaje se puso a bailar mientras Seren hablaba. Ella se echó a reír cuando vio lo que estaba haciendo y siguió caminando.
—¡Genial! Te acompaño, yo necesito diez de hierro para mi armadura, pero también necesito materiales.
—¡No te estaba preguntando si querías ir conmigo!
—Muchas gracias por la invitación, Seren. Vengo en un minuto para ir a la aventura. ¿Tienes diez de hierro, por casualidad?
Seren rodó los ojos y sacó diez de hierro para lanzarlos al suelo. El personaje de Asher los recogió. Él sonrió y comentó que volvería de inmediato.
—Listo, ya los defendí. Pero eso me costó diez de hierro, ¿ven lo que hago por ustedes? Merezco que se suscriban —bromeó entrando a su casa. Todos en los comentarios le estaban enviando corazones y de pronto alguien regaló veinte suscripciones. —No, Alex, que era broma. ¡Gracias, amigo por esas suscripciones regaladas! Chat, mándenle corazones a Alejandro, los está manteniendo. Díganle gracias. —Seren sonrió de lado y siguió jugando.
Comentó que necesitaría cuero para hacerse una mochila, pero luego pensó que, si iba con Asher, seguro no llevaría una, así que termino haciendo una para ella, y una para él.
El personaje de Asher que, por cierto, era un lobo, apareció por la ventana de Seren como lo prometió. Ambos se fueron juntos un poco más lejos de su vecindario para poder buscar una mina natural decente, y al no encontrar nada, decidieron cavar ellos mismos.
Su dinámica era bastante impredecible, un momento Asher le estaba rezando por regalarle una mochila «a un pobre señor», y en otro momento se estaban gritando porque Asher le quitaba el agua con un cubo cuando ella quería saltar y no morir por una caída tan alta.
Ambos se encontraban en la mina, uno cerca del otro, pero haciendo sus propias cosas. Asher iba en busca de hierro, y Seren en busca de cualquier material que le pudiera servir. Además, conseguir hierro y un poco de carbón no le parecía una mala idea.
—¡¡Diamantes!! —gritaron los dos al mismo tiempo.
—¡Yo los encontré! —chilló Seren, pero Asher hizo que su personaje negara con la cabeza.
—¡Mentirosa!
—¡Ladrón!
—¡Tramposa!
—¡Dibujas horrible! —se defendió Seren, pero Asher sonrió y negó.
—Ok, a ver. No pasa nada. Mitad y mitad, ¿estás de acuerdo? Gritamos que los encontramos al mismo tiempo. Yo creo que es una buena idea. ¿Qué dices? —preguntó él. Seren rodó los ojos y aceptó resignada. De todos modos, esos diamantes no les servían de nada en ese momento. No se podían utilizar hasta que llegara el evento en donde se permitirían. —Tú primero.
Seren picó los de arriba y alrededor para revisar que había nada más, Asher picó los de abajo, y cuando estaba por agarrar el último, picó la piedra de al lado para revisar que no hubiese nada más, y lava salió de ahí, quemando dos diamantes de los suyos.
—¡¡Noooooo!!
Seren puso una piedra de inmediato, porque Asher empezó a incendiarse y le echó agua mientras el otro gritaba.
—¿Cuántos conseguiste?
—Menos los dos quemados que ya no están, tres. Pero no escuché lava —se quejó guardando los diamantes en su nueva mochila.
—Te daría diamantes, pero tú tienes problemas con Minecraft, te aseguro que en dos minutos vas a tener el doble. Vamos, sigamos por aquí, y revisa que tienes los sonidos del juego activados. Yo los tenía bajos, por eso no escuché la lava.
—No sé si me acabas de halagar, o dijiste que era un enfermo del Minecraft, así que asumiré que es lo primero. Muchas gracias, Seren.
Ella se echó a reír justo cuando el personaje de Asher se adelantó y picó un poco hacia arriba para seguir con su búsqueda.
Ambos separaron sus caminos varios minutos para buscar lo que necesitaban. Seren consiguió los materiales que quería en la mina, pero no los que quería para su casa, porque en el camino se le ocurrió lo que podía hacer con la idea que había compartido con Lana. Fue casi media hora cuando de pronto Asher apareció en donde ella estaba, supuso que la había buscado con el mapa, porque nunca le preguntó su ubicación.
—¡Deja de gritar! ¿Qué pasa? —cuestionó ella, aturdida. Asher estaba gritando como un loco y le lanzó un diamante.
—¡Soy millonario! ¡Tengo treinta y cinco diamantes! Bueno, treinta y cuatro ahora mismo, ¿me devuelves el diamante que lancé?
—No —contestó Seren de inmediato. —Felicidades, te dije que lo ibas a hacer, ¿ves? ¿Conseguiste lo que necesitabas?
—Sí, no, en realidad no. Pero tengo diamantes, ¿quién necesita otra cosa? ¿Qué vas a hacer ahora?
—Necesito cantidades obscenas de arcilla. Quiero terracota y ladrillos —Seren movió el ratón para mirar al personaje de Asher. —¿Vienes?
—¿Me vas a pagar?
—Nop —respondió rápido de nuevo. Asher sonrió y luego se rio.
—Bueno, está bien. Vamos por arcilla.
Los dos cubitos siguieron con la aventura de buscar materiales en el agua, lugar donde se encontraba la arcilla. Y mientras picaban, empezaron a conversar. Alguna que otra cosa que preguntaba el chat de alguno de los dos, otra cosa graciosa que decía alguno. Ambos estaban muy tranquilos conversando, algo incluso sospechoso. Estuvieron casi quince minutos sin gritarse nada.
—¿Cómo vas con la arcilla? Tengo cinco stacks de arcilla, ¿cuántos voy? —preguntó Asher mientras su personaje nadaba hacia la superficie. Seren sonrió de lado.
—Muy presumido, pero no sabes multiplicar, ¿no? Un stack, son sesenta y cuatro. ¿Cuánto es sesenta y cuatro por cinco, Asher?
—Trescientos veinte, Seren. ¿Te conté que tuve el primer lugar en la escuela porque no tenía amigos y un padre muy exigente? No solo eso, sino que fui el ganador del torneo de Mario Kart.
—Eso no era un torneo, ni ganaste nada. Ganaste la última partida.
—Y la más importante.
—¿Me das la arcilla, por favor? —pidió. De forma automática el personaje de Asher soltó los stacks de arcilla y Seren los recogió. —¿Vas a seguir hablando de eso? ¿Es lo único que ganaste en la vida? —cuestionó Seren picando lo último de arcilla que necesitaba. Pensó que, para empezar, era suficiente.
—No, también gané treinta y cinco diamantes. Treinta y ocho si cuentas los otros después del incidente.
—Treinta y siete, no pienso devolverte el que lanzaste.
Seren puso una TNT y la encendió, luego salió corriendo para que no explotara cerca de ella, pero Asher fue más rápido y lanzó agua con el cubo que tenía en su inventario. Así detuvo la explosión.
El personaje de Seren seguía corriendo por su vida mientras Asher se reía y le gritaba que le devolviese su diamante. Ella se encerró en su casa, y no volvió a salir.
ashersinuser: AVISO PÚBLICO
ashersinuser: jamás confíen en Seren
ashersinuser: ME ROBÓ UN DIAMANTE
Jimmyneutron ardió en llamas.
Megara: Mentira, Seren jamás haría algo así. Debes estar mintiendo. No te creo.
jimmyneutron: regla número uno, jamás creas en un hombre
Megara: tú eres uno???
jimmyneutron: ah
jimmyneutron: bueno, no me crean
Jimmyneutron se ahogó.
Lana se ha conectado.
ashersinuser: LANA SEREN ME ROBÓ UN SDIAMANTE
Lana: primero que nada, buenas tardes
Jimmyneutron cayó de un lugar alto.
Lana: segundo, te creo. Vamos a quemarle la casa
ashersinuser: OK
Vader se ha conectado.
Jimmyneutron cayó de un lugar alto.
Vader: Hello amigos
Vader: ¡Hoy será un gran día! Mi plan es hacer un huerto de patatas. Espero que tengan un excelente día.
Jimmyneutron cayó de un lugar alto.
Vader: Jimmy?
Jimmyneutron: ESTOY CONSTRUYENDO MI CASA, IGNOREN MIS MUERTES. NO ESTOY BIEN.
Megara: Hola, Vad. Lana y Asher planean quemarle la casa a Seren
ashersinuser: ME ROBÓ
Lana: VENGANZA
Jimmyneutron cayó de un lugar alto.
Jimmyneutron: Estoy en el pueblo central :) Perdí mi cama y mi punto de reaparición en casa :) Y me morí otra vez. :)
—Chat, ¿De verdad Jimmy no tiene cama? —cuestionó Seren mirando la pantalla, todos le respondieron que no, que la había perdido. Así que hizo rápido una y salió de su casa para dirigirse a la de Jimmy. Él se encontraba llegando, justo después de haber perdido todas sus cosas.
—Seren, soy un desgraciado.
—Primera regla, siempre ten una cama de repuesto —dijo ella, soltando la cama que había hecho para él. —También ten comida, armas, antorchas y una armadura. Tenemos el mod de la mochila, utilízala. Tienes un inventario extra. ¡Ah! Y ten un cubo de agua, así evitas morir al caer desde muy alto. ¿Tienes hierro?
—No tengo nada, Seren, soy un ser desahuciado —lloró provocando la risilla de la rizada.
Seren saltó un poco de hierro para él y le dio cuero para la mochila.
—Anda, hazte la mochila. Deja de morir, por favor —pidió dándose la vuelta.
—Te amo —dijo él, alargando un poco las sílabas.
—Y yo a ti, ciudadano promedio.
Jimmy se rio mientras Seren regresaba a su casa.
—¡Hola, vecina! —saludó Vad, justo cuando Seren pasó por encima de su huerto.
—¡Hola, vecino! —regresó el saludo, pero volvió al ver que el personaje de Lana estaba en su «balcón» mirándola. —Mmm, huele a bruja por aquí.
—Sí, qué bueno que lo dices, ya báñate —mencionó Lana.
—Ah, ahí está la ladrona —añadió Asher, llegando a su casa.
Vad, que seguía plantando sus patatas, aclaró la garganta.
—¿Alguien tiene una pala?
Seren soltó una y se dirigió a su casa sin decir una sola palabra más.
—Ahora sí, vamos a construir la casa. Que esta gente me distrae. Necesito un árbol con hojas rojas, ¿tendremos algún mod así? —cuestionó Seren revisando los mods que tenían instalados. Y al ver que tenía algo que le podía servir, empezó a construir la base de lo que sería su casa, alrededor de lo que ya tenía hecho. —Un segundo, chat.
Seren silenció el micrófono al fijarse que tenía un mensaje de audio de Alex.
—Sereeeeeeeeen, no sé si recuerdas que hoy iba a hacer un stream con Lana. Jaja, historia graciosa, estoy en la puerta de tu casa. Ella no me contesta y nadie me abre. ¡Auxilio! ¡El vigilante me está mirando raro —susurró eso último, provocando la risa inmediata de ella.
—Deja te abro la puerta, Lana debe tener el teléfono en silencio como siempre —respondió Seren por otro mensaje de audio. Corrió a la puerta y se encontró con Alex, que subía las escaleras. La chica sonrió emocionada al verlo. Porque empezaba a acostumbrarse a su presencia, todavía le parecía increíble verlo en persona. —Buenas tardes, señor Alejandro. Pase, por favor.
La rizada, con una pequeña referencia señaló su casa y su amigo sonrió.
—Gracias por dejarme pasar, si fuera por Lana, me hubiera quedado en la calle hasta mañana. —Alex se asomó para darle un abrazo, gesto que ella correspondió de inmediato.
A Seren le gustaba abrazar a sus amigos más cercanos. Aquello no era algo que hiciera con todo el mundo.
Salvo besar a extraños en fiestas, pero eso ya había quedado en el pasado.
—Toca la puerta de Lana, yo tengo que volver al estudio. Termino directo en un momento.
—¿Detuviste tu directo para dejarme entrar a tu casa? Eso es amor, definitivamente.
—Así es, Alejandro. Valóralo. —Palmeó su hombro.
—Te quiero, te quiero, te quiero.
Dicho esto, la chica le regaló una sonrisa de lado y señaló la puerta del estudio de Lana poco antes de entrar al suyo y volver a trabajar.
—Listo, he vuelto —mencionó quitándole el silencio al micrófono. —Me llegó un paquete y tenía que recibirlo. ¿En qué estábamos? Ah, sí. La casa. Vamos a hacer un poco de terracota mientras cocinamos hierro. ¿Qué habitaciones debería ponerle a mi casa, píxeles? —cuestionó Seren, como si nada hubiese pasado. Ignoró cualquier comentario en donde mencionaban que Alex había llegado a casa de Lana y se concentró en lo que quería: construir su casa.
Alex tocó la puerta de la rubia, esperando que no demorase en abrir otra vez. Pero fue rápido, no porque Lana escuchó, sino porque su chat oyó que estaban tocando.
—¿Cómo que tocan la puerta? —preguntó Lana poniéndose de pie. Incluso se había quitado los audífonos para escuchar mejor. —Lo que pasa es que los auriculares de SRL son tan buenos que cancelan el sonido, si entienden a lo que me refiero —dijo alzando el dedo índice, luego guiñó y abrió la puerta encontrándose con su amigo. Entonces chilló y se lanzó sobre él para abrazarlo. Alex atrapó su cintura en el aire y ella presionó su cuello, tanto que oyó el quejido de su amigo cuando le cortó un poco el aire. —¡Ovejas, me acaba de llegar un regalo de Navidad adelantado!
Lana quería sorprender a su comunidad con un directo en colaboración con Alex, pero olvidó que era ese día, por lo tanto también se sorprendió al verlo.
Alex caminó con ella aún cargada y la dejó sobre su silla riéndose. Se inclinó un poco hacia adelante para saludarlos mientras todos comentaban corazones.
—Hola, búfalos. ¿Qué tal todo?
—Son ovejas de colores, respeta —dijo Lana poniéndose de pie para buscar una silla para Alex. Sabía que en el almacén tenían al menos dos o tres que ya no usaban.
—¿Son ovejas de colores, chat? Imagino que ese nombre no lo eligieron ustedes, ¿por qué se dejan tratar así? —cuestionó sentándose en el sitio de Lana. Todos empezaron a comentar emotes llorando. —Gracias Larita por esos bits, a ver, ¿qué dice?
—Lana un día despertó y decidió bautizarnos así. Tocó acostumbrarse, jefe, no podemos hacer nada —dijo el lector de texto.
—Chat, ustedes tienen voz y voto, ¿sabían? Porque la rubia sea guapa, no significa que los puede dominar de esa forma. Pónganle carácter, no se dejen, chat. No se dejen.
—¿De qué estás hablando? —preguntó Lana, apareciendo detrás de él. Alejandro ya la había visto por la pantalla, pero fingió que no lo había hecho y se echó a reír.
—Nada, les ando enseñando un poco de cómo comportarse en la vida. Entonces me decías, ¿ovejas de colores?
—Así es, como en Minecraft, ¿algún problema? —La rubia se sentó en la silla que había llevado para Alex y dejó que fuese el protagonista un rato. Lana cruzó las piernas como de costumbre y giró a mirarlo.
—O sea que, ¿si les pongo la etiqueta de Jeb_, se van a dar vuelta y van a ser multicolores? —Alex sonreía en grande. Todos notaban que estaba feliz de estar no solo con ella, sino con sus amigos. Había tenido esa cara cada día desde que hizo estrenó el evento. Al ver que Lana solo lo miraba sin contestar, decidió tomar el teclado y meterse al juego. —Vamos a jugar. ¿Qué estabas haciendo antes de que llegara?
—Asher me dijo que quería hacerle una emboscada a Seren porque le robó un diamante, pero ahora mismo nada. Solo estaba ordenando mis cofres.
Alex miró el chat y sonrió al ver lo que escribían.
«Venganza 👉🏻🌱 Venganza 👉🏻🌱 Venganza 👉🏻🌱»
—¿Se supone que Seren es la planta?
—Alex, ¿no viste los audífonos que tiene? ¡Tienen un planta en la parte de arriba! ¿Quién ama las plantas? ¿Quién tiene plantitas como adornos en todas su redes sociales?
—No sabía que ellos sabían de los audífonos ya que nunca la vieron —se defendió, pero Lana se rio.
—Fan falso, fuera de mi casa —comentó indignada. —Seren ha mostrado los auriculares antes. Bueno, ¿qué hacemos? ¿Quieres hacer algo?
—Sí, tengo una idea. ¿Qué te parece si juegas, y yo hablo por ti. Seremos un equipo. Pondré una voz aguda, todos se lo van a creer. Y si no, estamos roleando. Tendrán que fingir que nos creen. —Alex se puso de pie para cambiar de sitio con Lana y se sentaron en sus propias sillas. —¿Por qué estás a oscuras, por cierto? —preguntó al ver que su pantalla se veía negra.
Lana picó un bloque y se dio cuenta que alguien la había encerrado en una pared de piedra.
Lana: QUIÉN ME ENCERRÓ
Escribió en el chat del juego, pero nadie contestó hasta que segundos después, Vad apareció en su casa y la saludó agachándose con la tecla shift.
—Helloooo.
Lana abrió los ojos y miró a Alex para que le contestara.
—What's up, bro? —dijo, con su voz más grave.
Vad se rio bajito, alejándose del micrófono.
—Oh, Lana. Tu voz está un poco distinta.
—Sí, sí. Es que tengo un poco de tos —respondió Alex con la misma voz, pero luego aclaró la garganta y habló mucho más agudo. —¿Cómo estás, guapo? ¿Necesitas algo?
—Oh... —Otra risilla salió de él—. No, no. Solo venía a saludar.
—Es una lástima, yo podría darte muuchas cosas —respondió él. Lana giró a mirarlo y articuló un «¿Qué dices?» mientras se reía en silencio. —Ya sabes, como materiales y eso —aclaró.
—Ah... Sí. Eso. No, estoy haciendo mi huerto. Es mi tarea de hoy.
serenanoestoy: Me voy, amigos!! Nos vemos mañana. Besitos <3
Serenanoestoy se ha desconectado.
—Ya se fue la loca, menos mal —añadió Lana.
—Oh, volvió tu voz.
—Va y viene —respondió Alex. Ambos se estaban riendo. —Oye, ¿qué te parece si vamos a molestar a Asher? Digo, a visitarlo.
—No, molestarlo me parece una buena idea. Vamos —dijo Vad.
Alex y Lana, acompañados de Vad, decidieron que su tarea de ese día sería molestar a Asher. No solo le explotaron cosas y le desordenaron la casa, sino que Lana iba «cambiando de voz» mientras le gritaba cosas. Todos se estaban divirtiendo mucho, incluso Seren, que al terminar su stream, quedó como espectadora de Lana.
Alex y Lana, al salir del servidor, jugaron un poco más y conversaron en directo, y por primera vez, Seren se arrepentía de no mostrar la cara. Le apenaba no poder estar con sus amigos y compartir esos momentos de forma presencial, pero eso había sido una decisión propia, y no le quedaba de otra que soportarlo.
jaja
apareeeezco :p
bueno, pasaron cositas.
ando fuera de mi casa, pero me traje la compu para subirles capítulo <4
ya ando escribiendo el siguiente y lo subiré esta misma semana uwu
baaaaaaaai <3
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