—Felix, Jeongin y yo nos vamos ya, por favor llega puntual por una vez en tu vida, Hyunjin.

Seungmin no dejó tiempo al nombrado de responder y cerró la puerta, Hyunjin no había visto todavía a Felix, tampoco podía hacerlo, decían que ver al novio antes de la boda daba mala suerte.

Una vez se fueron, Hwang se permitió estresarse un poco. Él, aparte de tener que estar listo a tiempo para llegar a la ceremonia, tenía que preparar a los niños, cosa que no era tarea fácil.

Su amigo Jisung, junto a su pareja Minho, había propuesto ayudarle pero sabía que no le serviría mucho ya que ellos dos estarían en su mundo, solo pedía que no le dificultarán más la tarea.

—Perfecto, yo y los mellizos ya estamos listos, ahora solo queda... ¡HAN JISUNG! ¿¡QUÉ HACES CON MIS HIJOS!?

Jisung y Minho estaban de rodillas en el suelo, enfrente de los dos mellizos, de más o menos un año, quienes estaban sentados en el suelo mirando para cualquier lado distraídos.

—¡Carrera de bebés!

—Vamos Channie, ven con tío Minmin.

—Sh, calla Honnie. —Entre risas, Han me dio un pequeño golpe a Minho quien también estaba riendo. —Binnie bonito —Llamó, dirigiéndose ahora al otro bebé y sacó ante sus ojos un dulce —Tío Hannie tiene un chupachus para tí.

—¿Un pachus? —El bebé comenzó a gatear hacia Jisung.

—Eh, eso es trampa.

—¿Quién lo dice?

—Si tú juegas sucio, yo también lo haré. —Minho sacó de su bolsillo un cochecito de juguete, capturando toda la atención de Bangchan.

—¡Brum Brum! —Pronunció Chan y empezó a gatear también.

Hyunjin suspiró y agarró las orejas de sus amigos, tirando de ellas haciendo que se levantaran del suelo quejándose por el dolor.

—Que uno coja a Chan y el otro a Changbin y metéos en el coche. Ahora iremos nosotros. —Iba a irse de la sala pero antes de pasar por la puerta dijo. —Por cierto, dales el coche y la piruleta antes de que se pongan a llorar.

Hyunjin empezó a buscar por toda la casa a su hija mayor.

Yeji estaba muy emocionada con la boda, hasta pidió tocar con el piano la entrada, había estado esforzándose mucho tiempo en aprender a tocarla correctamente, casi se la sabía de memoria.

—Yeji, cielo ¿Dónde estás? —Hwang se dirigió al único lugar de la casa que le quedaba por ver, el cuarto de la pequeña.

Al entrar vio a su hija tumbada en la cama en posición fetal, abrazando una almohada.

¿Por qué no miró allí antes?

—-Bonita ¿Qué pasa? —Se acercó a la cama y se sentó cerca suyo. Yeji se giró mirando a su padre, estaba llorando.

—Papá, n-no quiero ir. —La niña escondió su cara en la almohada que abrazaba mientras se deshacía en sollozos.

—¿Por qué, mi vida? Si ayer estabas muy emocionada.

—Y-ya no. Quiero quedarme en c-casita, por favor. —Hyunjin empezó a acariciar la espalda de Yeji, le dolía mucho verla en ese estado.

—No te puedes quedar en casa ¿Quién va a tocar en la entrada? —Yeji se incorporó, sentándose al lado de su padre, mientras sobaba sus ojitos con sus manos y negaba. —¿Ya no quieres?

—Nop, no quiero.

Hyunjin la miró. Tenía un puchero en sus labios, gesto que Felix hacía siempre que no le gustaba algo. Sonrió levemente y siguió acariciando la espalda de la menor.

—Pero si tocas genial, eres una mini-Mozart.

—No, papá. Me va a salir muy mal. —Soltó un pequeño suspiro, intentando no llorar otra vez.

—¿Por qué piensas eso, princesa? Claro que no te va a salir mal, llevas practicando mucho tiempo.

—Estoy nerviosa. No quiero fallar en tu boda y en la de papá Lix. Quiero que estéis orgullosos.

—Cielo, nosotros siempre estaremos orgullosos de ti, todo el esfuerzo que has hecho ya es digno de admirar. Y si fallas, no va a pasar nada cariño, todos cometemos errores ¿Okey?

Yeji asintió levemente y absorbió su nariz.

—Papá, creo que hay una manera de qué me salga bien la entrada.

—¿Cuál es esa manera?

—Me saldrá bien si llevo mi tutú de la suerte. —Hyunjin frunció el ceño.

Yeji, a pesar de que nunca había ido a ballet, tenía un llamativo tutú rosa que era su prenda favorita.

—¿No sirve el vestido blanco que te compramos el otro día para la boda, mi vida? Es muy bonito, seguro que te da suerte también.

—No creo, solo el tutú da suerte, papá, por eso se llama el tutú de la suerte. —Dijo como si fuera lo más obvio del mundo.

—Pero igual a papá Felix no le hace mucha gracia que no lleves el vestido... ¿No quieres aparecer en las fotos con el vestido blanco? Cómo una chica mayor. —Yeji pensó unos segundos.

—Mmm... De verdad me va a salir muy bien si llevo el tutú de la suerte, lo prometo. —Yeji le miró con ojitos de cachorrito.

—Solo una vez, solo tenía que llegar puntual una vez en su vida, una sola vez. —Refunfuñaba Seungmin.

Todos los familiares, amigos y demás invitados ya habían llegado y estaban sentados esperando a que la ceremonia empezara.

La boda se celebraría en el propio sitio donde luego comerían y pasarían el día. Estuvieron varias semanas buscando el lugar perfecto y se pusieron de acuerdo en un restaurante, estaba alejado de la ciudad y tenía un jardín bastante grande y bonito.

En ese jardín estaban colocadas varias sillas decoradas, y un pequeño altar decorado también, flores y cintas blancas adornaban el lugar.

En la actualidad, todos los invitados ya estaban sentados en sus respectivas sillas.

En la fila de adelante había un par de sillas vacías, reservadas para Minho y Han, que todavía faltaban.

Felix esperaba de pie en el altar, estaba bastante nervioso.

—Ey, tranquilo, lindo. —Dijo Jihyo, quién era amiga de los dos novios y le habían propuesto a ella guiar la ceremonia. Los papeleos oficiales ya los habían hecho, ellos querían hacer una bonita celebración aparte junto a sus seres queridos.

—¿Por qué está tardando tanto? -Felix se estaba desesperando. —¿Crees que se haya podido...

—¿Arrepentir? Hyunjin es un poco tonto, pero no tan tonto como para echarse atrás en un momento así. —Le dedicó una sonrisa a Lee. —No tardará en llegar, no te preocupes.

Se oyeron voces y empezó un revuelo entre los invitados.

Un "Ya ha llegado " llegó a los oídos de Felix poniéndole aún más nervioso si es que eso era posible.

Jeongin guío a Yeji, Han y Minho (quienes llevaban a Chan y Changbin) hasta sus sitios. Los adultos se sentaron en las sillas reservadas para ellos en primera fila junto a los sitios de Seungmin y Jeongin.

Yeji caminó dando rápidos saltitos hasta el piano que está a al lado del altar, se sentó, colocó su tutú para estar más cómoda y miro hacia atrás, Seungmin le haría una seña para que empezara a tocar.

Kim estaba con Hyunjin algo alejados, detrás de un pequeño muro donde no se les veía.

—Vamos, Hyunjin ¡Pareces un manojo de nervios!

—¡Es que soy un manojo de nervios! —Hwang no dejaba de temblar y de colocar un poco su traje, estaba impecable pero para sus ojos no estaba perfecto.

—Todo saldrá bien, Hwang gelatina Hyunjin. Estamos tus amigos y tu familia contigo, no te preocupes. —El contrario asintió. —Ahora, ve, Felix te espera en el altar

—Sí... Espera. Pensaba que iba a ser yo el que esperaría a Lix en el altar.

—Haber llegado antes. —Seungmin se encogió de hombros y se fue, hizo una pequeña seña y la música empezó a sonar.

Hyunjin respiro hondo, obligándose a tranquilizarse, y se hizo ver. El silencio se hizo presente entre los invitados.

Hwang empezó a andar por el camino que hacían las sillas, frente al altar. Todos le miraban pero Hyunjin solo tenía ojos para su Felix.

Andaba a paso lento hacia él, ambos sonriéndose, dedicándose miradas solo para ellos. Felix apretó un poco el ramo que tenía entre sus manos por la emoción.

—Hola, Lixie. —Cuando llegó al altar se acercó dejando un rápido beso en la mejilla de Lee y se colocó frente a él. —Perdón por llegar tarde.

—No pasa nada, lo importante es que ya estás aquí.

Hyunjin miro por un momento a sus amigos.

—¿Estás llorando, Innie? —Susurró Kim y el nombrado se limpio los ojos con rapidez.

—Yo no lloro, tú eres el que llora.

Hyunjin sonrió (aunque no había dejado de hacerlo) al ver a Seungmin abrazar a Yang soltando una risa bajita.

Seungmin se atrevió a confesar sus sentimientos a Jeongin días después de que Hyunjin y Felix les contarán que eran pareja.

Cuando Jeongin le dijo que también estaba enamorado, empezaron a salir como novios, cosa que destrozó a Han, porque él también estaba enamorado de Jeongin.

El grupo paso por unas semanas de mal ambiente, Jisung con el corazón roto y Seungmin y Jeongin sintiéndose algo culpables.

Todo parecía no mejorar hasta que apareció Minho, el nuevo alumno de su instituto fue bienvenido al grupo de amigos y le integraron muy bien. El humor de Han mejoró en cuestión de días y un part de meses después Jisung y Minho comenzaron con su noviazgo.

Volviendo a la ceremonia, esta pasó volando entre risas causadas por los nervios de ambos. Hyunjin tartamudeaba bastante y Felix actuaba de una forma verdaderamente tierna al ver a su novio tan nervioso.

—Ya pueden besarse los novios.

Hyunjin y Felix se miraron, Lee tenía el rostro completamente rojo, paso sus brazos al rededor de su cuello, abrazando este. El mayor tenía una mano posada en la cintura del contrario y la otra agarraba su mentón, impidiendo que Felix le pudiera besar.

—Hyun... —Felix giró su cabeza un momento para ver a los invitados quienes se reían en forma baja de la situación.

Le devolvió la mirada a Hwang, este tenía una sonrisa traviesa en sus labios.

—¿Sabés, Lix? Me gustaría ser un caramelo. —Susurró para que solo le pudiera oír Felix.

—Otra vez con tus cosas raras. —El australiano mostró una pequeña sonrisa.

—Para poder derretirme en tu boca. —Hyunjin terminó de decir su piropo y juntó sus labios con los de Felix de una vez por todas, ganándose aplausos de los invitados.

Y Jisung consiguió agarrar el ramo. Fin.

Hola hola!

Ya era hora de que subiera el epílogo, perdón por haceros esperar.

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Con la finalización de esta adaptación pondré en curso otra, "Boyfriends?" también es HyunLix, agradecería mucho si le dieras una oportunidad! (Publicaré el primer capítulo nada más publicar este epílogo).

Hasta pronto, gracias por leer 💗💗