Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

5


"Como podría llegar a ser posible que sus manos fueran las mías y que su piel atravesara mi ser, que en algún momento (ahora inimaginable) fuéramos unos, por esos momentos en los que solo somos egoístas con el mundo y nos dedicamos a dar placer."

 "Tanto placer quería darle a aquella mujer que parecía una diosa y sus manos sanadoras me curaban de todo menos de la calentura, porque por mucho que me toque con sus calidez era casi imposible que lograra tocar el lugar correcto, ese donde todo es mas caliente y rígido"

"Quisiera tener sus piernas abiertas para mi o su trasero alzado esperando ansiosa y húmeda por mi, que espero que descienda con calma sus bragas blancas y que bajo de ellas encuentre el paraíso que quiero conquistar y soporte el peso de mi miembro rígido"

SuHa entrecruzó la piernas haciendo presión sobre su clítoris adolorido luego del masaje luego de leer aquello en la computadora de NamJoon.

Había ido a la cocina por agua fresca y de vuelta a su cuarto vió la luz del portátil encendida. Entró a la oficina para apagarlo encontrándose con escritos tecleados por el mismos Kim NamJoon, el hombre de los hoyuelos y el pecho rebosante y firme.

"Introducirme en ella hasta que sus jugos se derramen por sus piernas y el sonido sexual se haga presente en la habitación. No me importa si no gime mi nombre, pero si quiero sentirla jadear de cansancio luego de hacer que se corra para mi y asfixie mi miembro dentro de ella"

"Llevarme sus pechos a la boca y lamerlos hasta quedar si saliva, marcarlos con mis dientes haciéndola sentir mía, solo mía bajo mi grande y grueso cuerpo que implora por ella"

"Verla por mi casa es un maldito infierno, quisiera que usara lencería coqueta y nada más que eso mientras me cocina y me tiende con dulzura"

SuHa no tuvo mejor forma de aliviarse de su dolor de entrepierna que acariciarse con sus manos mientras que leía con paciencia las paginas escritas, los apuntes calientes que había hecho él donde ella era su máxima y ardiente musa.

"Quisiera tomarla por detrás y restregarle el miembro con lentitud para que supiera como me pone y lo que tiene que hacer con él. Que lo tome con sus menudas manos o se lo pase por el pecho rozándome con sus pezones erectos y perfectos"

Los dedos de SuHa paseaban por sus pliegues vaginales imaginándose bajo el cuerpo poderoso de Nam mientras él la hacia suya con la gran figura cilíndrica que llevaba esa noche en sus pantalones.

—NamJoon— susurró bajo antes de correrse sobre la silla del escritorio.

Sus muslos internos comenzaban a chorrear, había sido un orgasmo delicioso que la tenia empapada, estaba lista para ser tomada con fuerza como él al parecer quería y por su mente orgásmica aparecía la descabellada idea de ir a meterse a su cama, restregarse contra él presentándose húmeda como estaba, lista para que se hundiera en ella.

Pero no.

Solo entró a su cuarto apresurada y se dió una ducha para calmar sus ansias.

NamJoon despertó esa mañana mejor que nunca, tanto que pudo sentarse en la cama y apoyar sus pies sin dolor e intentó pararse y caminar hacia la ventana con pasos cortos, casi arrastrando sus pies. Se apoyó contra la pared para descansar hasta llegar a la ventana y abrió las persianas para ver el sol entre los lejanos montes.

—Buenos días... ¡NamJoon!¡ Dios mio como llegaste allá!— SuHa espantada al verlo parado en el ventanal se acercó a él rápidamente.

—Había olvidado lo lindo que se ve desde acá — miró emocionado él hacia el paisaje.

—¿Estás cansado?— le acarició la espalda.

—Más me canso de que me duela el culo en la silla— sonrió haciendo que sus ojos desaparecieran y sus hoyuelos relucían en sus mejillas.

SuHa lo miró admirando cada rasgo de su rostro incluyendo el vello crecido de su barbilla, sostuvo la cintura de NamJoon con fuerza para evitar que se cayera y este acarició sus manos por enfrente, ella se estremeció y NamJoon fue capaz de notarlo, él estaba más que complacido por ese acto de afecto.

—Necesitas descansar— repitió SuHa algo preocupada.

— Lo hice por casi 3 meses SuHa, déjame aquí parado mirando el paisaje— NamJoon sintió que sus ojos bajaban unas lagrimas de emoción de poder sentirse a si mismo esa mañana.

—Te dejaré entonces— SuHa quiso soltarse de su espalda pero NamJoon sostuvo sus manos.

—No dejes de abrazarme así SuHa, me haces sentir protegido— tomó las manos de la chica y las subió a su pecho y las paseo por sobre su camiseta dejándolas apoyadas contra sus pectorales.

—NamJoon— SuHa apoyó su frente contra la espalda y cerro los ojos.

—¿Sí?— él miró sobre su hombro

—Vamos a desayunar— ella no hizo ningún movimiento, no quería despegarse de ese abrazo.


La presencia del cuerpo femenino de SuHa tras de él lo hacia sentir reconfortado, hace mucho que no sentía la presencia femenina contra su piel. El haber visto que las bragas de SuHa estaban húmedas la noche anterior le devolvieron la esperanza de sentirse hombre, sentir que lograba excitar a una mujer.

Recordar la última vez que tuvo sexo con su ex mujer era doloroso. Esa noche había llegado de un viaje y ella se alistaba para salir. NamJoon no había dejado de pensar en ella y por mucho que en su viaje por la editorial salieran oportunidades de intimar con más de una mujer, jamás dejó de pensar en Min-Ah, su prometida con tres años de relación.

Ella en su vestido ajustado azul marino salía esa noche a verse con unas amigas, y accedió a darle una cogida de espaldas a él afirmada contra el lavamanos, él deseoso de ella, ella impaciente por irse con su amante una noche más a escondidas.

—¿Seguro no quieres nada más? Hay más jugo fresco de naranja para beber— SuHa le ofreció una vez sentados en la terraza. NamJoon sentado en su silla de ruedas.

—Quiero leer un libro contigo SuHa, el de oficina para dos de Lee Nari— le dijo con ánimos de conversar —Es una novela nueva que he estado leyendo y creo que tu no has abierto ninguna pagina.

—No he tenido tiempo, a veces leo investigaciones del proceso de recuperación y rehabilitación de fracturas por ti—bebió de su jugo.

—Ve por el libro, está en mi escritorio— le ordenó NamJoon a la chica quien se levantó sin más y caminó al lugar tomando el libro en sus manos de vuelta a la terraza.

SuHa le entregó el libro a NamJoon pero este se negó haciendo que lo sostuviera aún en sus manos.

—Quiero que me leas tú. Quiero escucharte leer en voz alta— dijo con una sonrisa hacia ella.

Una brisa fresca en ese día de primavera removió la piel de ambos pero en ningún momento se quitaron la mirada, ambos estaban iniciando un juego del que ya no podrían escapar.

¡Santo cielos Kim NamJoon!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro