CAPÍTULO OCHO
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ɴᴇᴇᴅ ᴀ ᴘʟᴀᴄᴇ ᴛᴏ ʜɪᴅᴇ,
ʙᴜᴛ ɪ ᴄᴀɴ'ᴛ ғɪɴᴅ ᴏɴᴇ ɴᴇᴀʀ
ᴡᴀɴɴᴀ ғᴇᴇʟ ᴀʟɪᴠᴇ,
ᴏᴜᴛsɪᴅᴇ ɪ ᴄᴀɴ'ᴛ ғɪɢʜᴛ ᴍʏ ғᴇᴀʀ
ɪsɴ'ᴛ ɪᴛ ʟᴏᴠᴇʟʏ, ᴀʟʟ ᴀʟᴏɴᴇ
ʜᴇᴀʀᴛ ᴍᴀᴅᴇ ᴏғ ɢʟᴀss,
ᴍʏ ᴍɪɴᴅ ᴏғ sᴛᴏɴᴇ
ᴛᴇᴀʀ ᴍᴇ ᴛᴏ ᴘɪᴇᴄᴇs, sᴋɪɴ ᴛᴏ ʙᴏɴᴇ
ʜᴇʟʟᴏ, ᴡᴇʟᴄᴏᴍᴇ ʜᴏᴍᴇ

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Washington, D.C.
Estados Unidos de América
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LLEGÓ UN MOMENTO en el que Beatriz se cansó de permanecer quieta en aquella cama. Estuvo mirando un punto dijo de la pared por tanto tiempo que ya había perdido la cuenta de la cantidad de minutos que pasaron desde que la trajeron de vuelta, y muy a pesar de que su cuerpo aún se sentía adolorido debido a los golpes, trató de encontrar la fuerza suficiente para apoyarse sobre los codos.

Sus huesos se sentían como gelatina, y le dolieron cuando hizo el primer intento. No recordaba haber sufrido de una molestia así de pesada desde las clases de gimnasia en la secundaria.

Inmediatamente, Sam se levantó del colchón contiguo y la sujetó por los hombros con delicadeza. No permitiéndole mover ni un solo músculo más.

━No deberías moverte. Te puedes hacer más daño del que ya te han hecho ━le aconsejó, recibiendo una negativa por parte de la joven, quien agitó la cabeza renuente.

━Está bien, Capitán Wilson. Las heridas sanarán por sí solas. Siempre lo hacen.

━Aún así creo que no debes ponerte en pie.

━Solo quiero enderezarme un poco, no demasiado ━insistió, y convencido de que no podría hacerla cambiar de parecer, Sam liberó un hondo suspiro y se inclinó un poco para ayudarla a reincorporarse━ No tiene que molestarse, yo puedo sola.

━Eso no me parece a mí ━le dijo, señalando lo que era más que obvio━ Pero vale, prometo no preocuparme demasiado. Siempre y cuando dejes las formalidades de lado y comiences a llamarme por mi verdadero nombre. Que es Samuel por cierto. Mucho gusto.

Ella hizo el esfuerzo de sonreír un poco, mientras lo veía volver a sentarse donde antes, apoyando los codos en las rodillas.

La pequeña celda de paredes blancas se sumió en un perpetuo silencio, en el que Sam se quedó observando la piel amoratada de sus brazos con fijeza.

No quería recordar el estado en el que la habían dejado. Era demasiado horrible y ese solo pensamiento lo hacia sentir más culpable que antes. Sin embargo, tenía que preguntarle qué había pasado en aquella reunión, aunque puede que a ella no le gustara rememorar los hechos.

━Beatriz ━la llamó, y la joven volteó la cabeza en su dirección━ Necesito preguntártelo ¿Qué sucedió para que acabaras así?

Al principio se quedó callada, presionando los labios con cierta incomodidad.

━Lo provoqué ━dijo finalmente━ Me negué a ayudarle y le dije que jamás llegaría a Wanda a través de mí. Eso lo hizo enfurecer, y mandó a que sus hombres me golpearan y me dejaran en un cuarto cerrado toda la noche.

Ante esto, las facciones del rostro de Sam se endurecieron considerablemente, y sin embargo, ante sus ojos no terminaba de lucir del todo atemorizante, solo molesto. El papel del soldado mal humorado ya se lo había llevado Barnes.

━Hijos de perra ━Beatriz abrió los ojos cuando lo escuchó maldecir en baja voz, segura de que esto no era algo que acostumbrara a soltar así porque sí━ Tarde o temprano recibirán su merecido. Ya verás

Con un ligero asentimiento, acompañado por una sonrisa reconfortante, la joven reportera le mostró que estaba de acuerdo con sus palabras. Todos los que estaban involucrados con la Ley de Control Mutante pagarían por aquella injusticia. Aunque solo quedaba esperar a que sus amigos pudieran cumplir con su promesa y encontrar la forma de sacarlos de allí antes de que fuera demasiado tarde.

Donde sea que estuvieran, Beatriz confiaba plenamente en que Wanda no dejaría que más mutantes salieran lastimados por culpa de Priest, así como tambien estaba segura de que el sargento Barnes la apoyaría en cada paso del camino.

Sam, por otro lado, solo esperaba que lograran esquivar todas las trabas que les pusieran delante, y mientras pensaba en una forma de ayudar al resto de los prisioneros desde allí dentro, se quedó mirando con atención hacia la marca que ahora poseía la castaña. Abarcando una nueva interrogante entre ceja y ceja.

━¿Por qué lo hiciste?

━¿El qué?

━Negarte a cooperar ━dijo ante la mirada confusa de Beatriz━ Tienes una vida fuera de este lugar, un buen trabajo, estabilidad, amigos... ¿Por qué sacrificar todo eso solo por ayudarnos?

━Esto es mi lucha tambien, Sam, y estas personas son mi gente. Quedarme de brazos cruzados mientras ellos son sometidos sería como traicionarme a mí misma ━respondió, sorprendida de que aún le hiciera esa pregunta━ Además, Priest esconde algo mucho más peligroso lo sé. No podía dejar que usara a Wanda.

La decisión con la que lo había dicho, su expresión afligida, y la manera tan audaz de haberse enfrentado ante Priest y haber desafiado sus órdenes hizo a Sam darse cuenta de algo sobre su nueva compañera que antes había pasado por alto.

━Tu... sientes gran admiración por ella ¿No es así?

Beatriz tragó en seco, agachando la mirada cristalizada hacia sus manos. De repente, volvió a sentirse como aquella chica incomprendida de dieciséis años, la que tenía miedo de ser vista y se escondía detrás de las sombras fingiendo ser alguien que no era para evitar que lograran descubrirla.

━Era mi vengadora favorita ━respondió━ ¿Sabes? Antes, cuando era adolescente, solía mirarme al espejo y odiar lo que veían mis ojos porque muy dentro de mí sabía que no era como el resto de las personas y eso me molestaba. De solo pensar en la manera en la que todos me mirarían si llegaban descubrirlo... me asustaba todavía más.

Ella hablaba con calma, despacio, como si tuvieran todo el tiempo del mundo para quedarse allí sentados escuchando aquella historia. Cada palabra era dicha con honestidad, sin saltarse nada.

━Entonces llegó esta chica, diferente como yo, que no tuvo miedo alguno de mostrar sus habilidades al mundo ━continuó diciendo━ Ella solo... no se escondía como el resto, y ayudaba a los Vengadores a salvar personas con sus poderes. Recuerdo que todo lo que quería era ser como ella. Armarme de valor y gritarle al mundo quien era en realidad, pero siempre había algo que me lo impedía.

Cobardía.

Eso era algo que ella tenía y que Wanda no. Pero aún así, no había hecho que la admirara menos. Todo lo contrario, eso solo aumentaba su orgullo hacia sí misma. Pero el mundo nunca pensaría igual.

━Siempre supe que lo que sucedió en Lagos no había sido intencional, así como detestaba que luego de los Acuerdos de Sokovia se refirieran a vosotros como criminales cuando, en realidad, eran nuestra única esperanza ━suspiró━ Supongo que no importa cuanto lo intentes, si eres humano o mutante, ellos nunca dejarán de juzgarte por cada mínima cosa que hagas.

Entonces, por primera vez desde que comenzó a contarle aquella parte importante de sí misma, Beatriz se atrevió a mirarlo. Había un brillo de sinceridad en sus pupilas.

━Cuando la saqué de aquella jaula supe que me metería en un montón de problemas... pero no podía dejarla allí. No a la única persona que me hizo entender que no había nada de malo en ser como soy.

Y le creyó. Después de escuchar sus motivos, Sam logró comprender lo que la había llevado terminar arriesgando su vida por ellos, y por un instante, también se preguntó como una persona tan buena como Beatriz pudo haber venido de un ser tan horrible como lo era Alan Priest.

━Solo espero que ella y el sargento Barnes encuentren la forma de sacarnos de aquí.━dijo segundos después, apoyando la espalda contra la cabecera━Pero mientras, nosotros tenemos nuestra propia misión.

━Déjeme adivinar ¿Ayudar a todas estas personas?

Ella asintió.

━Y hallar la manera de acceder a la oficina de Priest para robar el disco duro.

🇺🇸. ° 💥.*ೃ༄ ୨୧‧⁺̣ ❨🔮❩

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Houston, Texas
Estados Unidos de América
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La dirección que les había dejado en el mapa los llevó hasta un edificio residencial de la ciudad de Houston, cerca del Cambridge Village Park. Una zona muy concurrida dado a que las personas solían visitar sus alrededores muy a menudo, ya fuera por un almuerzo planeado en familia o para pasear a sus mascotas cada mañana.

El Sol estaba en su punto más alto cuando Wanda y Bucky bajaron de su motocicleta y se encaminaron hacia la edificación con pasos rápidos. Paseando su vista de un extremo a otro de la calle para asegurarse de que nadie los reconociera. Aunque Wanda estaba segura de que sería algo muy obvio al estar usando gorras similares con la leyenda I love Texas y un par de gafas oscuras para ocultar sus rostros.

Claramente Bucky no tenía buen gusto para los disfraces. Porque vamos, si eso no gritaba "SOMOS FUGITIVOS" con una flechita fluorescente apuntando a cada uno, entonces no sabía qué más lo hiciera.

━Este es el lugar ━suspiró cuando se detuvieron delante de la puerta de un apartamento.

Ambos se miraron mutuamente antes de que el sargento presionara el timbre de la entrada. Esperando unos segundos hasta escuchar una voz que les habló del otro lado.

━¿Quien es?

Era una mujer, y a juzgar por el tono con el que les había respondido, debía de estar muy asustada.

Por eso, Bucky trató de que su respuesta fiera lo más serena posible.

━Venimos aquí de parte de Beatriz Abernathy ━esperó unos segundos antes de agregar:━ Usted debe saber quién es ¿No es así?

Ella no respondió, solo escucharon el sonido de los miles de pestillos siendo movidos desde el interior del apartamento. Al final, la mujer abrió la puerta a medias, asomando su cabeza por el resquicio mientras estudiaba a aquellos dos desconocidos que estaban en el pasillo.

━Pasad.

Wanda esperó a que James diera el primer paso, atrapando sus ojos en una interrogante que él captó enseguida, justo antes de hacerle una seña para que lo siguiera.

Adentro el salón estaba oscuro, más de lo que podría considerarse normal. Las luces estaban apagadas y las ventanas cerradas, dejando entrar apenas una hilera de rayos solares por cada resquicio, y los cuales solo alcanzaban a iluminar una parte de la habitación.

Parecía la casa de un vampiro.

Bucky notó que había varias cajas ubicadas en distintos rincones, algunas mas grandes y otras mas pequeñas, como si alguien estuviera planeando mudarse pronto.

━Disculpen por el desorden y la escasez de luz. La lámpara del techo se rompió la otra semana━se disculpó la desconocida. Su cabello era abundante y lleno de rizos dorados, recogidos con un sencillo broche para que no se le escaparan.

━Pero podría abrir las ventanas ━sugirió el castaño, notando rápidamente cómo su rostro palideció.

━Eso... no creo que sea una buena idea en estos momentos ━dijo━ Como sea. Sentaos donde mejor les parezca ¿Puedo ofrecerles algo? ¿Un vaso de agua o jugo?

Wanda hizo un gesto con las manos mientras tomaba lugar encima de un sillón.

━Estamos bien así, gracias.

━Vale... lo siento, es que nunca en mi vida pensé tener a dos vengadores sentados en el salón de mi casa, y menos en estas circunstancias ━rió, aunque sonaba más como una risita nerviosa, nacida de la desesperación. Acto seguido, se alisó la falda con sus manos temblorosas━ Me llamo Norah Lane, trabajo en la sección de noticias internacionales del diario de Houston.

━Reportera ━señaló Bucky, y esta se mostró contenta ante su acierto━ Supongo que debe saber por qué estamos aquí.

━Claro que sí. Beatriz me advirtió desde un inicio que estaba metida en un lío de los grandes y que probablemente acabaría mal parada. Por eso confió en mí para guardar el archivo. Somos amigas desde la Universidad ¿Sabe? Compartíamos cuarto juntas... la conozco lo bastante bien como para saber que nada bueno ha de haberle ocurrido si vosotros estáis aquí en su lugar.

Ambos cruzaron miradas, sin saber qué decir al respecto. Pero Norah levantó ambas manos para hacerlos callar. Negándose a involucrarse más de lo que ya lo había hecho.

━Lo envió hace dos meses. Dijo que era importante y debía esconderlo muy bien; y en caso de no volver a saber nada de ella en dos semanas, me hizo prometer que se lo haría llegar al Capitán América ━les contó, a la vez que iba hacia una de las cajas y sacaba una carpeta sellada que dejó en manos de Wanda━ Anteayer volví a recibir una llamada suya advirtiéndome de que las cosas habían cambiado y alguien más vendría a por él.

━¿Sabe lo que hay adentro? ━cuestionó Bucky.

━No ¡Y Dios me libre de saberlo! Yo no quiero más problemas en mi vida ¿vale? y mucho menos si estos involucran a gente peligrosa.

Sosteniendo la carpeta entre sus dedos, Wanda se preguntó qué cosa tan secreta habría detrás de aquella superficie empapelada y cuán importante podría ser, tanto para ellos como para sus enemigos.

━Lamentamos mucho haberla involucrado en esto. ━dijo, pero la rubia solo suspiró.

Puede que por palabras lo negara, pero por dentro se estaba arrepintiendo grandemente.

━No se disculpe, en esto me metí yo sola. Beatriz ha hecho tantas cosas por mí anteriormente que lo menos que podría hacer por ella ahora sería mostrarle un poco de mi lealtad.

Ellos le dedicaron una mirada de agradecimiento, pero fue James quien habló:

━Gracias por su ayuda, señorita Lane.

Esta volvió a sonreírles, y sus hoyuelos se notaron cuando lo hizo.

━¿Sabe? Es irónico ━dijo de pronto, sin apartar sus ojos verdes de la ex vengadora━ Tuve que escuchar a Beatriz hablar sobre Wanda Maximoff por años. Básicamente todo nuestro tiempo en la Universidad de Yale ¡Y ahora está aquí! Incluso tenía un póster suyo en la pared de la habitación y cada vez que entraba ¡Uh! ahí estaba... Ella realmente era su fan.

Le fue imposible no mostrarse desanimada al escuchar eso, porque pensar en el tipo de persona que había sido antes ahora le parecía algo demasiado lejano. Ya no quedaba nada de aquella muchachita de Sokovia, ni de la niña que disfrutaba ver programas americanos con su familia, o siquiera de esa persona a la que Beatriz idolatraba.

Dicen que el tiempo y las circunstancias hacen cambiar a las personas. Pero sin duda a ella le tocó la peor parte.

━Realmente desearía poder ser merecedora de ese tipo de admiración ━murmuró en baja voz, agachando la cabeza con algo de vergüenza.

James se quedó mirándola confusamente, sintiendo la curiosidad picar en la punta de su lengua. Aquella era una de las muchas veces que la veía quedarse en blanco, como perdida, y eso comenzaba a preocuparlo.

Suavemente, tiró de su brazo para advertirle que debían ponerse en marcha y ella lo siguió.

━Esperen... ━la voz de Norah los hizo voltearse al unísono━ Hay algo más que deben saber.

Ella movió los labios para articular una frase que nunca llegó. Puesto que antes de que pudiera siquiera reaccionar, una bala atravesó su frente de la nada.

Wanda se quedó paralizada viendo el cuerpo caer, justo cuando la puerta del apartamento se abrió y dos hombres entraron disparando.

James sacó su arma del bolsillo y abrió fuego también, lanzándose sobre ella para tirarla al suelo y cubrirla con su brazo metálico mientras parapeteaba detrás del sofá.

━Quédate aquí ━le ordenó en algún momento, saliendo de su escondite para enfrentarse cara a cara con los asesinos.

La castaña continuó encogida detrás del mueble, todavía en shock, aferrada a la carpeta como si de esta dependiera su vida. Podía escucharlos forcejear, e incluso a uno de ellos ser derribado por otro, pero el sonido que realmente la hizo reaccionar fue el de un arma caer al piso.

Podría no contar con sus poderes, pero James estaba equivocado si creía que iba a dejarlo solo en esa situación.

Mientras tanto, el Soldado del Invierno había logrado deshacerse de uno de sus oponentes lanzándolo de lleno contra la pared, y ahora solo le quedaba uno más. Ambos habían perdido sus armas en la pelea, y ahora se debatían en una batalla de golpes y patadas que los había llevado a crear un verdadero desorden dentro de la sala de estar.

Bucky lo tenía acorralado, pero el centinela lo apartó de una patada que lo hizo trastabillar hacia atrás. La fuerza de aquel hombre era descomunal, incluso tanto o más que la suya, lo cual era algo ilógico teniendo en cuenta que él era un super soldado.

En un momento, su espalda terminó colisionando contra la superficie fría del suelo, provocando que liberara un quejido doloroso debido al impacto. No le dio tiempo de reaccionar cuando la figura del asesino se colocó encima suyo, apuntándole directamente con su arma.

Entonces, se escucharon dos disparos.

Uno para desestabilizar. Otro para matar.

El cuerpo sin vida del hombre cayó a su lado. Detrás de él, Wanda sostenía la pistola en alto. El pecho le subía y bajaba agitadamente, como si estuviera a punto de explotarle.

━¿Estás bien? ━se suponía que tenía que ser ella quien hiciera esa pregunta, no él.

Sin embargo, asintió efusivamente, pero la respuesta era no.

No lo estaba

Al verla tan pálida, Bucky se reincorporó con miedo de acercarse y que esto pudiera perturbarla más de lo que ya parecía.

Wanda sintió que sus manos le temblaban.

Su mirada verde volvió a clavarse en el rostro de Norah, en sus ojos vacíos y sin sustancia. No era la primera vez que miraba a un cadáver a los ojos, pero esta se sentía asquerosamente diferente.

Ella no había tenido culpa de nada de lo que estaba sucediendo ¡Solo les dio un maldito papel! Ella no... ni siquiera sabía. No tenía la culpa. No la tenía...

Pero ellos tampoco la tuvieron ¿O sí?

De repente, Wanda comenzó a sentirse mareada. Su cuerpo le pesaba como nunca antes y una serie de imágenes comenzaron a dar vueltas en su cabeza, repitiéndose una y otra vez hasta darse cuenta de que no eran solo eso.

Vision

Una sensación ácida se extendió por todo su cuerpo hasta concentrarse en su garganta.

Reed Richards

Esta presionó con fuerza, haciéndola soltar una arqueada.

Margaret Carter.

Luego otra más.

Blackagar Boltagon
Maria Rambeau
Charles Xavier...

Abrumada, terminó doblándose sobre sí misma y vomitó. Vomitó hasta sentir que las entrañas se le retorcían en el interior y ya no quedaba nada, absolutamente nada.

James tuvo que sostenerla por los hombros para evitar que se desplomara sobre su propio desecho, y ella se limpió la boca con el dorso de la mano, asqueada, exhausta, queriendo irse a casa. Pero al darse cuenta de que esto no sería posible, terminó haciendo algo que alarmó todavía más al sargento.

Se echó a llorar.

Las lágrimas bajaron por sus mejillas amargamente, y ella no hizo el intento por apartarlas. Tampoco se detuvo a pensar si sus quejidos de angustia alertarían al resto del edificio, o si lo habían hecho los disparos. Ya no sentía nada más que aquel desgarre dentro de su pecho y una voz que en su cabeza la llamaba: Asesina. Asesina. Asesina.

Apenas pudo notar cuando unas manos le acunaron el rostro de la nada, una cálida y otra fría, apartando los mechones de pelo de su cara, limpiando sus lágrimas de a poco y susurrando que se calmara.

━Oye, oye... ━la obligó a mirarlo a los ojos, no como una orden, sino como una súplica━ Sé lo que se siente, lo sé. Pero tu no estás sola ¿Vale?... tranquila, ya pasó todo...

Aferrándose a sus palabras, Wanda trató de hacer como le decía y calmar el ritmo de sus respiraciones, aunque le estaba resultando muy difícil, y Bucky no necesitó otra señal como esta para rodearle los hombros con un brazo y tirar de ella para sacarla de aquel sitio antes de que las autoridades llegaran.

Necesitaban salir de allí. Ya luego tendrían tiempo de hablar sobre lo que había pasado.

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Pido disculpas con antelación.

Saben que si fuera por mí no la hacía sufrir más... pero en mi defensa, era un detalle necesario. No podemos esperar que Wanda no sienta asco de sí misma por todas las cosas que hizo, y en mí opinión, el primer paso para superarlo es enfrentarlo directamente.

Espero que les halla gustado jjj.

¿Qué piensan de las palabras de Beatriz sobre Wanda?

¿O qué harán ella y Sam para escapar?

Más importante.

¿Alguien tiene curiosidad por saber qué hay en la carpeta?

🤭

Dejarlos con las dudas es mi especialidad.

Nos leemos prontooooo ♡

Debbie.