Todos tenemos dentro una reserva de fuerza insospechada que emerge cuando la vida nos pone a prueba.

La brisa helada y húmeda acompañada del petricor que se colaba por su nariz lo hizo abrir los ojos (aún somnolientos debido a la falta de sueño) la execrable pesadilla que había reflejado su cabeza la noche anterior, borró cualquier rastro de deseos por abandonar su cuerpo en los brazos de Morfeo.

Restregó sus orbes y tambaleándose se adentró al baño para relajar su cuerpo depauperado debajo de la falsa lluvia.

Bajó las escaleras ya vestido y con mucha hambre, estar despierto casi toda la noche no le ayudó en nada, ni siquiera a despejar las dudas que afloraban en su cerebro desde que llegó a esa casa.

Y justamente estaba frente a él el causante de su caos mental.

–Buenos días– dice al llegar a la mesa junto a Jimin, no había tenido la oportunidad de charlar con el tranquilamente pero era conocedor de su nombre porque las personas que lo rodeaban así lo llamaban.

–Buenos días– responde alegre– toma asiento y come algo.

Hizo lo que le dijo y empezó a saborear las delicias que habían puesto para él, esa mezcla perfecta de sabores que inundaba su paladar era única e inigualable, jamás en su vida había probado algo parecido, tampoco es que se acordara, pero las señales de anoche fueron más que claras, el diablo, como se hacía llamar, le confirmó que tenía un pasado y no exento de maldad y crimen, temía por las personas que lo rodeaban, eran pocas, pero habían sido las únicas que le tendieron la mano cuando lo necesitó y con eso era más que suficiente para anhelar su protección.

–¿Qué querías hablar conmigo?– le recuerda las mismas palabras del día anterior.

–¡Ah!, ya se me olvidaba, quería saber si estabas dispuesto a recibir clases sobre diversos temas.

–¿Y cómo porque tendría que hacerlo?.

–No me malinterpretes, solo quiero que tengas al menos cultura y conocimientos acerca de las cosas que te rodean, pero si no quieres está bien, no te puedo obligar– siguió comiendo de su desayuno.

Pensó ese momento en las cosas que había echo el rubio por él y sabía que eran más que suficientes, pero tenía mucha razón, estaba ajeno a todo lo desconocido a su alrededor y un poco de sabiduría lo ayudaría a desenvolverse en ese inmenso mundo.

–Está bien, acepto lo de las clases, aunque quiero que sepas que con lo que has echo es suficiente y estoy muy agradecido, no quiero que te molestes más con mis cosas.

–No me molesta para nada, lo hago con todo el gusto del mundo– dijo sin pensar y luego se arrepintió al ver los ojos del chico abrirse del asombro– digo, es que, bueno, lo habría echo por cualquier persona que se encontrara en la misma situación.

El ambiente tenso se relajó un poco con esa frase pero las constantes miradas crecían aún más con el pasar de los minutos, ambos estaban nerviosos, y no era para menos, aunque trataban de disimularlo era completamente visible ante cualquier mirada, como las de la señora Kang que los veía ilusionada desde la cocina.

–Creo que yo me voy a la oficina, tengo algo de trabajo pendiente, puedes hacer lo que quieras en la casa, pero por favor no salgas, evitemos que el incidente de ayer se repita– dijo y el contrario asintió– bueno, adiós.

En ese instante una idea titiló en su mente, no estaba seguro de si podía funcionar, o que peligros conllevaría aquello pero no tenía otra salida que recurrir a ese método y a pasos furtivos pero seguros subió en dirección a su habitación decidido a invocar al ser que había encendido la primera chispa de su pasado.

                      ..............

–¿Si, diga?– contesta el rubio.

–El señor Choi acaba de llegar, dice que viene a verlo.

–Así es Lin, hazlo pasar.

A los pocos segundos se escuchan toques en la puerta.

–Adelante.

–Buenos días señor, vengo a recoger las muestras.

–Si, aquí las tengo– saca de su portafolio el vaso de cristal y se lo entrega– de ahí puedes recolectar el ADN, también deben de encontrarse sus huellas, necesito que investigues todo sobre él.

–Está bien– hace ademán de retirarse pero Jimin lo llama nuevamente.

–Necesito eso lo antes posible, ¿para cuando estará listo?.

–Voy a mover fichas para que lo tenga a más tardar mañana.

–Gracias Choi, estaré esperando los resultados, ya puedes irte– alegó mientras se frotaba las sienes, su frustración crecía con cada minuto que pasaba, tener a alguien bajo su techo y desconocer totalmente su vida era un poco perturbador.

Pero a pesar de todas esas dudas en el fondo tenía confianza en el chico, no se veía mala persona y se podía decir que desde su llegada la vida del rubio ya no era tan monótona y el deseo de ir pronto a casa lo invadía por completo.

El estrés y la sobrecarga de ese día de trabajo lo tenían muy exhausto, jamás había trabajado tanto en su vida como ahora.

Ya eran las 11:03 pm e iba rumbo a su casa, no había recibido ninguna llamada de su nana por lo que podía figurar que todo estaba perfectamente bien con el chico.

En cuanto llegó bajó de su auto y al ver todo completamente a oscuras se hizo la idea de que estaban durmiendo.

Entró sigilosamente a pasos lentos a su habitación y luego de despojar toda sobrecarga mental con un fresco baño quiso dormir, pero antes de eso quería verificar si el chico estaba bien por lo que no tan seguro caminó sin hacer ruido a la habitación del contrario.

Abrió la puerta lo más lento posible cuidando de no emitir ningún sonido y se detuvo a su lado observando lo plácidamente que dormía, se veía tan lindo así, que la ternura se apoderó de su ser y de su control, se acercó aún más y pasó la mano muy suavemente por su cabello, definiendo el contorno de las cejas, los ojos, la nariz y la boca con su dedo índice, todo era perfecto en él, absolutamente todo.

Despertando de sus oscuros deseos se levantó ya dispuesto a irse a su habitación pero una mano lo detuvo con fuerza y firmeza.

–No te vallas, quiero que duermas conmigo– dijo el chico.

Acaso fue mi mente, pensó, eso no podía haber salido de sus labios, era totalmente irracional, por lo que decidió darse vuelta y ahí estaba, mirándolo de la manera que Jimin siempre quiso que lo hiciera a pesar de no ser consciente, el rostro aniñado del chico había desaparecido debajo de esa mirada, ahora tenía el porte de todo un hombre posesivo y muy caliente, esas eran las palabras exactas que lo describían por completo.

–¿Pe..pero que dices?– expresó un tanto nervioso por el momento.

–Quiero que duermas conmigo– esa voz dominante le hizo efecto en todo el cuerpo, principalmente en su entrepierna y temía no poder controlarse si esto pasaba a mayores.

Pensaba que se estaba volviendo loco, a el le gustaban las mujeres, jamás imaginó que un hombre despertara así sus deseos más íntimos.

–Cre..creo que yo mejor me voy– volvió a intentar irse pero esta vez no pudo escapar, el contrario lo agarró más fuerte y tiró de él cayendo al costado libre de la cama.

–No te lo estaba preguntando, era un aviso, vas a dormir hoy conmigo.

El corazón de Jimin estaba a punto de salir por su boca, latía de manera desenfrenada como un caballo a todo galope en un campo libre, y saltó aún más cuando el contrario lo abrazó por la cintura pegando más su cuerpo al de él.

¡Dios! Y ahora que hago, su firme erección dolía y latía debajo de su pantalón y aquel acercamiento no ayudaba a ocultarla, sabía que no lo iba a lograr, y se acabó de convencer al escuchar la risa del muy cambiado chico en su odio. No le cabía más la vergüenza, seguramente su rostro estaba más rojo que un tomate en ese momento.

–Se que me deseas– dijo mordiendo suavemente el lóbulo de la oreja de Jimin– yo también te deseo– besó su cuello– pero hoy solo vamos a dormir– fijó más ambos cuerpos.

Para Jimin aquello era un sueño, ¿cómo es posible que una persona cambie tanto de la noche a la mañana?, algo estaba pasando, o tal vez no, ya no sabía que creer, cada día que pasaba el chico estaba más envuelto en enigmas sin solución para el rubio, esperaba que los resultados de la prueba mostraran algo concreto que revelara su identidad.

Trató de respirar hondo y calmar su ilusionado corazón.

Y no recuerda si fue la comodidad, el calor o la satisfacción lo que lo hizo caer en el más profundo de los sueños.

                       .................

El trinar de los pájaros en la ventana lo hizo despertar muy calmado.

Misma tranquilidad que desapareció en cuanto se dio cuenta de que alguien lo abrazaba por detrás y en ese momento aparecieron en su mente todas la imágenes de lo ocurrido ayer y su nerviosismo se hizo presente golpeando aún más fuerte su ya acelerado corazón.

Con cuidado de no despertarlo intentó mover su mano pero lo que consiguió fue que el contrario aferraba más su agarré.

–¡Joder, Jeon Jungkook podrías soltarme!– dijo alterado pero divertido a la vez.

–¡Oh!, lo siento, yo..no me había dado cuenta, pero, ¿cómo me llamaste?– preguntó sorprendido.

–Jeon Jungkook.

–¿Es un nombre?, ¿igual que el tuyo?.

–Yo diría que más bonito– expresó mientras se sentaba en la cama.

–¿Porqué?, ¿tiene algún significado?

–Si, significa centro o pilares de la nación, tú eres mi centro y yo giro a tu alrededor– soltó de una vez lo que sentía aunque sabía perfectamente que él no lo iba a entender muy bien que digamos.

–¿Cómo que soy tu centro?.

Jimin con risa nerviosa dijo:

–Creo que mejor me voy a mi habitación.

–¡Espera!– lo detuvo– por lo de anoche, la verdad lo siento, no se que me pasó, fui un inútil, perdón.

–Está bien, no te disculpes, yo debí haberte detenido pero no lo hice, es más culpa mía que tuya.

–Gracias– dijo con una sonrisa– ¡Ah! y me gusta mucho mi nuevo nombre.

–No tienes porque agradecerme, ese nombre siempre me ha gustado y cuando te vi me vino a la mente.

Salió de allí lo más rápido que sus pies le permitieron, el pánico estaba inundando su ser, ¿Qué había sido eso? Con cada momento que pasaba se volvían más cercanos y Jimin temía por ello, por las cosas que pudiera sentir y que luego dejarlas ir le sería imposible.

                           ..............

Ya juntos en la mesa y tranquilamente desayunando a Jungkook le vinieron las imágenes del día anterior.

                     FLASHBACK

–Sal de donde quiera que estés– dijo un poco alto pero no lo suficiente para que su voz fuera escuchada por la señora Kang– me debes muchas explicaciones y quiero que des la cara.

–Eres muy escandaloso, no me dejas dormir– dijo el diablo apareciendo frente a sus ojos– ¿Qué es lo que quieres?

–Se perfectamente que sabes todo de mi pasado, y quiero que me digas quien soy y que hago aquí.

–Si, se todo tu pasado y lo que te ocurrió también- habló mientras recorría la habitación.

–¿Y qué esperas para hablar?– dijo ya enojado.

–Veo que estás recuperando tu anterior carácter, eso no te conviene para nada, me gustas más así, dócil.

–¡¡Habla de una maldita vez, no tengo todo el día para jugar con infantes!!.

–¿Yo soy un infante?– las estruendosas carcajadas retumbaban como tambores en las paredes del lugar– vale..me calmo, efectivamente se todo sobre ti, hasta porque existes para ser exacto, y lo que te puedo decir es que no perteneces a este lugar llamado mundo, eres más bien– meditó una respuesta– de los cielos, esa es la frase correcta.

–¿Los cielos?, no te entiendo.

–Tu hogar no es este, sino ayá arriba– señaló a través de la ventana abierta el inmenso mar sobre ellos.

–¿Podrías ser más específico? No entiendo tu punto de referencia– expresó.

–Tu lugar no es aquí, es en el Reino de los Cielos, estás en la Tierra debido a la constante misión que tienes que cumplir cada quinientos años, eso es todo lo que te voy a decir por ahora, cuando cumplas nuestro acuerdo sabrás lo demás.

–¿Qué acuerdo es ese?– preguntó dudoso.

–Hace setecientos años atrás te pedí una cosa muy importante para mi, te dije que la quería cuanto antes, y con total confianza me dijiste que lo ibas a cumplir, la verdad no se si fue que quisiste darme largas para que me olvidara, porque llegó tu momento de partir y yo me quedé sin nadie que hiciera el trabajo, ahora has vuelto y quiero que culmines lo que has empezado– terminó su discurso y se sentó junto a la ventana.

–¿De que cosa me hablas?

–La manzana, quiero la manzana del Árbol del Bien y el Mal.

Esa frase hizo que la cabeza de Jungkook doliera y con ello trajo varios recuerdos consigo, personas aladas diciendo que tomar una manzana de ese árbol traería consecuencias graves a cualquiera que lo intentara, que eso estaba prohibido.

–Yo no puedo hacer eso– dijo con voz firme.

–¿Qué te hizo cambiar de opinión?, dijiste que me la darías.

–Lo pasado es pasado, olvídate de aquello, eso que quieres nunca lo tendrás– expresó.

–Recuerdas porque hicimos ese trato, ¿verdad?– Jungkook niega– bien, pues déjame recordarte, todo fue a cambio de que desapareciera de la fas de la Tierra y terminara con la maldad y la destrucción que lo habitaban.

–Y es lo que vas ha hacer.

El diablo desató la más estrepitosa de las carcajadas haciendo que todo temblara.

–Si tu no cumples tu parte yo no tengo porque hacerlo.

–Es que no te queda otra opción que acabar con eso.

–Estás muy equivocado, el que no tiene opción eres tú, así que decide, ahora soy yo el que no tiene todo el día.

Se encontraba entre dos caminos, el bien y el mal, si escogía el primero el mal acabaría con el mundo y todo sería un caos total, si elegía el mal, todas las cosas buenas se irían de su vida y ya nunca más volvería a sonreír, todo estaba en el tipo de decisión que se tomara, tenía que ser siempre pensando en el bienestar de la humanidad y con total seguridad y orgullo dijo:

–No te voy a ayudar con lo que quieres, hacer eso está prohibido, busca a alguien más que lo haga por mi, y quiero que desaparezcas de la existencia misma si es necesario– dijo muy decidido y sin desliz en su voz.

–Está bien, si eso es lo que quieres, pero lo de desaparecer, temo decirte que no va a suceder– dijo en tono irónico– de ahora en adelante no me hago responsable por lo que pase, de eso el único culpable serás tú– y con esas últimas palabras desapareció por completo dejando al pelinegro con más nervios de lo habitual, sabía que hablaba en serio y que haría de todo para hacer que cambiara de opinión, pero su decisión fue firme e irrevocable, ya no había vuelta atrás..

               FIN DEL FLASHBACK

–¿Jungkook? ¿Estás bien?, ¿me escuchas?

–¿Eh? Ah, sí, si te escucho, perdón– se disculpó.

–Estabas como ido, ni siquiera has tocado el desayuno, ¿te pasa algo?– preguntó preocupado.

–No, no es nada, no te preocupes.

–Está bien, te estaba diciendo que hoy viene tu profesor– miró su reloj– de hecho debe de estar por aparecer.

En ese instante tocaron la puerta de la entrada la cual fue abierta por la señora Kang.

–Hola– dijo el hombre al entrar.

–Hola Jackson, adelante, siéntate y desayuna con nosotros– le indicó.

–No gracias, ya desayuné, estoy aquí para conocer a mi alumno.

–Ah, sí claro– dijo sonriendo– el es Jungkook– lo señaló– Jungkook el es Jackson tu profesor de ahora en adelante.

–Encantado– dice el pelinegro al estrecharle la mano.

–Puedes llamarme Jack, estamos en confianza, Jimin y yo hemos sido amigos por muchos años, le tengo un gran aprecio.

–De acuerdo Jack– al escuchar esa frase no pudo evitar sentir un poco de celos por conocer a Jimin antes que él.

–Yo los dejo, me voy a la oficina, cualquier cosa solo llamen– dijo Jimin y se dispuso a salir.

–¡Espera!– Jungkook lo detuvo.

–¿Qué pasa?– se giró.

–Cuídate, por favor.

Sorpresa fue lo que reflejó el rostro del rubio al escuchar esas palabras, pero aún así asintió y salió en dirección a su trabajo.

–¿Te gusta él?– preguntó Jackson.

–¿Qué?, no, para nada.

–No te hagas, vi perfectamente como lo mirabas, y él a ti también, ¿Qué se traen?– preguntó entrecerrando los ojos.

–No es lo que te imaginas, él solo me está ayudando eso es todo, por cierto, quería preguntarte algo.

–Adelante, dime.

–¿Qué significa "tú eres mi centro y yo giro a tu alrededor ".

–¿Porqué me haces esa pregunta?– dice sospechoso.

–Es solo una duda que tengo, ¿sabes la respuesta?

–En el contexto que más claro se escucha, tiene como significado que esa persona gira a tu alrededor, no puede vivir sin tí, te necesita en su vida para mantenerse fuerte y feliz, tu eres ese motor que le da energía para superar los momentos malos y las desgracias, tu eres su centro, sin ti, no existiría.

El asombro en el rostro de Jungkook y la sonrisa que se extendió por sus labios era increíblemente hermosa para los ojos de cualquiera, hasta para Jackson que lo notó de inmediato.

–¿Estás raro, que te pasa?– dijo sonriendo.

–Es solo que me alegraste el día con esa respuesta.

–Eres muy extraño, pero bueno, vamos a comenzar con la lección de hoy.

Y así dio inicio su primer día de estudio del cual estaba seguro que no podría concentrarse, su mente estaba en el momento en que Jimin llegase y al fin poder decirle que el también era su centro, a pesar de los pocos días de conocerse tenían un fuerte vínculo que los ataba de todas las maneras posibles, ya con eso ambos eran felices.

                           ...........

–Aquí está señor– le extiende a Jimin un sobre con el resultado de las pruebas.

–Muchas gracias por tenerlo justo a tiempo– dice tomándolo.

–Muy bien, yo me retiro– dijo para luego cruzar la puerta de salida.

–Por fin sabré quién eres en realidad, espero no decepcionarme– abrió el sobre con mucho cuidado de no romperlo, desdobló la hoja que sacó de este leyendo lo en ella escrito:

Nombre: ____________
Prueba No: 8197449-20.
Amelogenin: Desconocido.

Basado en las muestras recibidas yo el director del laboratorio y bajo escrito declaro de que la data es totalmente fuera de lo normal, por lo tanto no coincide con ninguna persona en el mundo.

Los orbes de Jimin estuvieron a nada de salir disparados de sus cuencas, como podía ser eso posible, era totalmente sobrehumano, no había cabida para ser cierto, el cromosoma presente no existía, la frustración comenzó a ganarle por lo que la última opción que le quedaba era llamar a Choi y verificar si se había equivocado. Tomó su celular y realizó la operación.

–Diga señor– respondió al otro lado de la línea.

–Choi, ¿estás seguro de que el examen está correcto?– pregunta preocupado.

–Si, ¿porqué?, ¿pasó algo?.

–Es solo que el resultado es totalmente irracional, no tiene explicación para mi.

–Lo siento señor, pero estoy totalmente seguro, la prueba fue realizada por mi personal de confianza y ni las muestras ni la huella fueron alteradas, eso se lo aseguro.

–Está bien, solo quería saber eso, gracias– corta la llamada.

Su miedo comenzaba a abrirse paso en su interior amenazando con salir en cualquier momento, que clase de criatura sobrenatural tenía viviendo en su casa, nunca había creído en ese tipo de cosas, estaban fuera de su imaginación pero comprobarlo con sus propios ojos era una nueva historia.

Agarró su chaqueta y se dirigió a casa, tenía que pedir explicaciones acerca de todo lo que había presenciado.

                      .................

Jungkook se encontraba mirando por la ventana la tarde caer, el arrebol que la llenaba era totalmente hermoso ante su vista perdida en el paisaje, sentía una tranquilidad enorme e indescriptible, no podía esperar el momento a que Jimin estuviera frente a él y pudiera sacar todo eso tan fuerte que se había formado en su corazón a tan solo pocos días, ya estaba decidido, sin importar las consecuencias iba a decir todo lo que sentía.

Su corazón se aceleró en cuanto divisó el auto de Jimin llegar a la entrada, estaba a punto de bajar pero la voz en su subconsciente lo detuvo.

–Te dije que ibas a lamentar haber incumplido nuestro acuerdo– se regodeó.

Aquella voz, ya muy familiar, le hicieron sentir el miedo más grande que jamás había sido capaz de experimentar.

Miró a Jimin con ojos aterrados y abiertos a más no poder.

–No, no, a él no, con él no te metas, te lo suplico– dijo con voz llorosa y lágrimas escurriendo por sus mejillas.

–Demasiado tarde.

En ese instante a tan solo pocos metros el auto del que Jimin a penas alcanzó a salir voló por los cielos en la más estruendosa explosión nunca vista en la historia.

–¡¡¡¡NOOOO!!!, ¡¡¡¡JIMIN NOOOO!!!!– los agónicos gritos desgarrados que salieron del pecho de Jungkook fue lo último que escuchó Jimin antes de caer.

                       ...............

Las personas que más amamos en la vida son la causa por la que seguimos vivos en este cruel mundo, si ellos sufren, nosotros lo hacemos aún más, por eso aprecia lo que tienes, ama como si hoy se fuera a acabar la existencia, vive, ríe, perdona y disfruta con tus seres queridos, porque hoy están, pero mañana quien sabe...el destino nos juega malas pasada y nos pone obstáculos para demostrar cuán fuerte somos, no te dejes vencer y valora a los que están a tu alrededor, porque uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y esa, esa es la más sencilla pero acertada verdad.