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La alarma de Minho sonó anunciando que debía levantarse y alistarse para llegar temprano a su trabajo. Se intentó levantar pero un brazo y una pierna alrededor de su torso y cadera se lo impidieron; se giró a su lado izquierdo notando a Chan completamente dormido. "Duerme horrible",penso Lee.

— Chan... ya despierta. — dijo soltándose del agarre de su amigo quien aún no daba señales de querer abrir los ojos. — Chan~ — insistió moviendo un poco sus hombros varias veces. — ¡Christopher Bang, despierta de una vez! — grito empujando a su amigo con fuerza y tirandolo del otro lado de la cama por accidente.

Chan despertó asustado y se levantó del suelo sobandose el trasero debido a la caída.

— Maldito seas Lee Minho. — bufo mientras el otro se reía a sus anchas por la desgracia de su amigo.

— Ya, no seas dramático. — dijo recogiendo las sábanas. — Alistate para el trabajo. — ordeno mientras caminaba hacia el baño para darse una ducha. Chan no acostumbraba a bañarse por las mañanas, lo hacía por la noche, así que Minho no se preocupó por eso.

Al salir de la ducha llego a la cocina en donde se encontraba Chan preparando el desayuno aún si cambiarse la pijama.

— Te dije que tenías que alistarte para el trabajo. — hablo mientras lo ayudaba a servir el café.

— Si pero el desayuno es primero, prefiero desayunar bien y llegar un poco tarde que estar con el estómago vacío. — contesto cuando ambos se sentaron para por fin desayunar.

— Suenas como mi mamá. — río el castaño llevándose su taza de café a la boca.

— ¿Y si te casas conmigo? — dijo Chan en broma, pero Minho pareció tomarlo enserio pues escupió su café y se comenzó a ahogar. — Era broma, hombre.

— Idiota. — giro los ojos un poco molesto.

— ¿Qué? Tu y yo seríamos una gran pareja, somos como almas gemelas; creo que no es necesario estar enamorado de tu alma gemela, puede ser tu mejor amigo, alguien de tu familia, etcétera. — explicó aún con Minho viéndolo sin entender nada. — Si tu vecino no te hace caso y yo no logro obtener una relación estable nos tenemos que casar. — hablo con una sonrisa. — Aunque no lo veas como un matrimonio, si no como... compañeros de vida, así de simple.

A Minho no le pareció mala idea, de hecho el estaba más que de acuerdo con que el y Chan eran almas gemelas, sin necesidad de amor romántico y su mejor amigo sería el mejor compañero de vida que podría tener si el destino no le manda al amor de su vida.

— Esta bien, acepto. — dijo con una sonrisa en el rostro.

— ¿Lo prometes? — pregunto Chan extendiendo el dedo meñique frente a él.

— Lo prometo. — ambos entrelazarón sus dedos y siguieron con su desayuno.

Luego de terminar Chan por fin se arregló y salieron.

— ¿Y tu auto? Deberías llevarme por dejarte dormir en mi casa luego de tu despecho. — bromeo Lee.

— No lo traje, capaz moría en un accidente por estar distraído.

— Bien, yo nos llevo; pero la próxima vez que salgamos juntos tu conduces. — dijo dando la vuelta para subir a su auto chocando con alguien en el camino que claramente no era Chan.

— Lo siento, hyung. — se disculpó Felix y la mirada de Minho rápidamente se iluminó.

— No pasa nada, ¿estás bien? — pregunto.

— Ah... si. — contesto con un leve sonrojo.

— Tu debes ser Felix — la voz de Chan sonó de repente, el menor asintió y observó al rubio frente a él con cierta curiosidad. "¿Quién es y porque está con hyung?" — Mi nombre es Bang Chan, soy el mejor amigo de Min.

— Ah... bien, y-yo me tengo que ir, nos vemos luego hyung; un gusto conocerlo a usted también. — hizo una rápida reverencia y salió corriendo hacia la parada de buses como era costumbre.

— Simpático. — hablo Chris y luego entro al auto, Minho lo siguió y se pusieron rumbo a su trabajo.

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— Me hubiera gustado ver eso. — dijo entre carcajadas el menor de los tres.

— No te burles, me dolió mucho cuando me tiro. — bufo Chan, con un puchero infantil.

— No te hubiera tirado si te hubieses levantado de inmediato.

— Bueno eso ya no importa. — interrumpió Changbin. — Dijiste que conociste al famoso Felix, ¿cómo es?

— Es guapo, hay que aceptar que Minho tiene buenos gustos. Pero es raro o esa es la primera impresiónque da. — Lee solo hizo una mueca.

— No es raro, solo no lo conoces.

— Defendiendo a su príncipe azul. — se burló Seo y Minho solo rodo los ojos.

— ¿Y tu si lo conoces bien? — pregunto con una ceja levantada el mayor del grupito.

— Pues... planeo invitarlo a salir pronto para saber más sobre el. — sabía a que se refería Chan, pero quería evitar de momento el hecho de que el menor aún no confiaba lo suficiente en él para contarle su supuesto secreto.

— Sabes que no es a lo que me refiero.

— Sabes que no quiero hablar de eso. — contraatacó.

— Incomodo. — hablo por lo bajo Changbin.

Dejaron de hablar y siguieron con su almuerzo.

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Al llegar de nuevo a casa de Minho, luego de pasar por ropa de Chan para que se quedara ahí más tiempo  se encontraron con Felix sentado frente a la puerta de la casa.

— Oh, Felix... ¿qué haces aquí? — pregunto Minho. El menor se levantó viendo como de nuevo el tal Chan estaba detrás de Lee con una sonrisa de oreja a oreja.

— Nada... solo quería decirle algo, pero veo que está ocupado será otro día. — hablo aún sin quitarle la vista a Chan.

— No estoy ocupado. — respondió Minho. Chan logró sentir el ambiente pesado y la mirada del menor sobre el lo incomodaba así que decidió entrar a la casa.

— Yo... voy a preparar la cena. — hablo entrando rápidamente.

Antes de que Minho pudiera hablar el menor lo hizo primero, pero no se esperaba lo que le diría.

— ¿Son novios, hyung? — pregunto sin ningún filtro.

— ¿Eh? ¿Quienes? — una mueca de confusión se formó en su rostro.

— Chan hyung y usted. No me creo que sean solo amigos como lo dijo en la mañana.

— ¡No! Solo es mi mejor amigo y ya, esta pasando por un momento difícil así que se esta quedando aquí conmigo, no es por lo que piensas. — respondió rápidamente.

El menor sólo asintió con una leve sonrisa en el rostro, pero aún así se le hacía raro que Chan se quedara con Minho solo por estar triste y eso le despertaba un sentimiento raro que no había tenido desde que...

— T-tu... ¿qué era lo que querías decirme? — pregunto el mayor interrumpiendo sus pensamientos.

— Oh, cierto. Acepto salir con usted el domingo, siempre y cuando regresemos temprano, tengo que ir a la escuela al día siguiente. — le respondió con un sonrojo algo notable que a los ojos del castaño lo hacía ver más hermoso de lo que ya era.

— Genial — dijo con entusiasmo. —, te recogere a las tres, ¿te parece? — el menor asintió y después se despidió de Minho para regresar a su casa. Hasta que este entro Minho también lo hizo.

— ¡Cuenta todo! ¡¿Qué te dijo?! — grito Chan desde la cocina.

— ¡Que metiche eres Bang! — río el castaño.

— Gracias, me esfuerzo demasiado. Ya dime. — dijo saliendo de la cocina mientras colocaba los platos sobre la mesa.

— Bien, pero primero hay que sentarnos.

— Bueno. Por cierto antes de que me cuentes... tu preparas el desayuno y la cena mañana, será turnado.

— ¿Eso es negociable? Sabes que soy pésimo en la cocina.

— No. — respondió el mayor con una sonrisa maliciosa.

— Bien... — luego de eso comenzaron a hablar sobre la salida de Minho el domingo y después se prepararon para dormir.

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Hola!
¿Vieron qué cambie la portada? La otra no me gustaba mucho jsjs.
Bueno les dejo este capítulo y me voy.
Nos leemos después :3.