Cuando bajé del coche de Peter no pude aguantarlo más, entre a mi casa con todas mis mejillas llenas de lágrimas. Cerré la puerta y me recargué en ella bajando poco a poco hasta quedar sentada en el suelo.

-¿Kate?Hija ¿que ocurre? -Preguntó mi mamá acercándose a mi.

Me paré limpiando mis lágrimas con mis brazos.

-Nada mamá, sólo quiero ir a mi cuarto -Mi madre parecía confundida pero no dijo nada.

Entré a mi cuarto, cerré la puerta, fui a mi baño y me lavé la cara.

Tomé mi pijama del closet, me quité la ropa que traía y me puse la otra.

Cuando levanté el short (que había dejado en el suelo al momento de quitármelo) vi que cayó un pedazo de papel doblado. Se me hizo extraño, lo tomé y lo leí.

"Hola cariño, lamento que presenciaras el accidente de Ezra, se repondrá, ya verás, te dejo mi número y el de Alice"

A continuación estaban los números telefónicos de Mae y de Alice.

Si hubiera tenido a Mae enfrente le hubiera agradecido por darme sus teléfonos, pero volví a leer la carta y me di cuenta que decía "lamento que presenciaras el accidente de Ezra", eso significaba que había escrito la nota después de eso, pero recordé en mi mente y Mae jamás se acercó a mi de nuevo, sólo pudo haberme puesto la nota en el bolsillo trasero con una velocidad inhumanamente posible para que no me diera cuenta.

Pero después de unos minutos de repasar la escena en mi mente y no ver a Mae cerca de mi creí que probablemente no la había visto, pues yo estaba demasiado ocupada viendo los raspones y la sangre correr por todos los orificios de Ezra.

Tomé mi celular y agregué ambos números, decidí mandarle un mensaje a Alice.

~Hola, soy Kate, lamento haberme ido, quería acompañarlos con el incidente de Ezra pero Peter dijo que sería mejor que me fuera y me trajo a casa, por favor, dime como sigue Ezra.

No me respondió así que me fui a dormir no sin antes ver a Ezra ensangrentado siendo cargado hacia la bodega una y otra vez en mi mente.

Cuando me desperté eran las 10:00 am, tomé mi celular y vi un mensaje de Alice.

~Si, gracias por tu preocupación, pero se repondrá, estará bien.

Decidí que lo mejor era no ir a su casa para no molestarlos, me sentiría horrible si tuvieran que hacerse cargó de mi y de Ezra al mismo tiempo.

Pero seguía preguntándome por que rayos todos me decían que Ezra se repondría si acababa de ser atropellado y lo llevaron a una bodega en vez de a un hospital.

Una semana después le envíe un mensaje a Mae preguntándole por Ezra.

~si, ya está bien, ya va a trabajar. Si quieres puedes volver a venir ~respondió.

Le pregunté si podía ir al siguiente día y me dijo que si. También me preguntó quien me iba a traer, y yo le dije que me iba a ir en taxi, se ofreció a ir por mi, al principio no quise pero insistió.

A la mañana siguiente Mae me envió un mensaje de que iba por mi, creí que ya no iba a ir, pues eran las 6:00 pm, mis padres se estaban preparando para ir a cenar por su aniversario, así que me dejaron ir, con la condición de que les estuviera mandando mensajes a cada rato, acepté, pero no planeaba arruinar su velada con mis mensajes.

Mae pasó por mi, se me hizo raro que supiera en dónde vivía, pero no me importó al pensar que quizá Peter le hubiera dicho. Cuando llegamos a la casa lo primero que hice fue preguntar por Ezra.

-¡Oh! Está en su estudio, si quieres pasa... -Me dijo.

-Eh... ¿Y en dónde es su estudio? -Pregunté.

Me sonrió al darse cuenta que jamás había entrado a éste -Si claro, ven.

Me llevó hasta una puerta y se fue, la seguí con la mirada, cuando ya no la vi toqué la puerta.

-¿Si? -Preguntó la voz de Ezra.

Asomé mi cabeza y me quedé con la boca abierta. Ezra estaba sentado en un escritorio que estaba en medio del estudio, frente a una computadora. Yo esperaba verlo con marcas de cicatrices y raspones en la cara, pero no, su cara estaba completamente intacta, como si jamás hubiera pasado nada. 

-¿En qué te puedo ayudar? -Me preguntó sacándome del trance.

-Eh... Yo... -Entré al estudio y cerré la puerta -Yo sólo... Quería ver como seguía...

-¡Ay por favor no me hables de usted! -Dijo sonriéndome y estirando la mano para señalar una silla indicándome que me sentara. Le sonreí y me senté. -¿Cómo me vez?

-Eh... Como si jamás hubiera pasado nada... -Respondí.

Me sonrió -Entonces supongo que me veo bien.

Le sonreí de vuelta.

-¿Cómo es eso posible? -Pregunté después de unos segundos.

-¿El qué?

-Que tu piel haya sanado tan rápido. Cuando te vi tenías sangre en toda la cara, que salía por todos tus orificios y cortadas.

Sonrió -Suerte, supongo.

-¿Eres hermano de Peter y Jack? -Le pregunté para sacar platica.

-Si, y esposo de Mae.

-Mae es muy linda.

-¡Es encantadora! -Dijo y sus ojos se llenaron de... Amor... No hay mejor manera de describirlo.

Bajé la mirada.

-¿Qué sucede? -Me preguntó.

-Es que... Todos aquí sin muy lindos conmigo, quizás me odien, pero son lindos...

Ezra rió y recargó sus codos sobre el escritorio -No te odiamos Kate.

-¿Y Peter?

Se movió incómodo en el asiento -Tampoco.

-¿Por qué parece que me odia?

-¿Ya se lo preguntaste?

-Si -Por alguna razón me importaba muchísimo lo que Peter pensaba de mi, y jamás me ha importado lo que la gente piensa de mi.

-¿Qué dijo?

-Nada...

Ezra suspiró -Te contaré un secreto 

Levanté la vista y vi sus castaños ojos viéndome directamente.

-Peter una vez estuvo casado, pero ella fue asesinada, él jamás logró superarlo, después se enamoró de otra chica, pero no le respondió de la misma manera, ella se enamoró de alguien más, y él lo aceptó. 

-¿Pero por que me odia?

-No creo que te odie... Quizá... Quizá él... -Suspiró.

Abrió la boca para decirme pero en ese momento entró Jack.

-¡Oye Ezra! ¿Crees que...? Oh... Lo lamento ¿interrumpí algo? -Dijo él.

-No nada -Contestó Ezra, volteo a verme y entendí que lo mejor sería irme.

Fui a la cocina y vi a Peter bebiendo algo rojo de una bolsa de plástico, pero al verme la tiró a un bote de basura.