CHAPTER SIX
,, ·˚ ˏˋ ˗↳CAPITULO.-O6.
lucas varetti
EL FESTIVAL PARA EL HÉROE DE LA CIUDAD ESTABA a tan solo dos días de comenzar, varios fanáticos ya estaban colocando anuncios y muñecos en honor a Spiderman, muchos tenían la ilusión de que aquel enmascarado apareciera pero Peter tenía otros planes y por una vez en su vida el asistir bajo una máscara no estaba en ellos.
La noche anterior con Lucas le había ocasionado de alguna extraña manera mucha alegría y pensó que talvez se debía a lo tan cálido y tranquilo que se sintió junto al pelinegro, pues no recordaba la última vez que se sentará hablar con alguien como si el no fuera Spiderman, solamente Peter Parker.
—¿Y cuándo conoceremos a ese amigo tuyo? —pregunta Thomas acomodando algunas galletas para el invitado de Peter—. Preparé mi receta especial. Aún no me creo el hecho de que le hablaras de mis galletas.
—Son deliciosas —es lo único que responde pues toma sus cosas para ir directo al restaurante, dónde Lucas ya lo estaría esperando—. Regreso en una media hora, el restaurante si está bastante lejos.
—Tu tranquilo. Nosotros estaremos preparando las cosas y ten por seguro que no damos malas impresiones —dice Annette, sonriendo para darle confianza al castaño.
—Sean ustedes —agrega el arácnido—. Son buenas personas y estoy lo bastante seguro de que Lucas no los miraría mal.
—Ve por el Peter.
Cuando estuvo fuera de la pastelería tomo el primer taxi, alrededor de veinte minutos ya se encontraba frente al restaurante e inexplicablemente con una gran sonrisa en su rostro. Al entrar al lugar el exquisito olor de la comida lo inundó pero ese no era su objetivo aquí.
—¡Hola Peter! Que gusto verte por aquí —saluda cierta pelirroja con una pequeña sonrisa—. Vienes por Lucas ¿cierto?
—Tambien me da gusto verte —menciona siguiendo a la chica—. Y estás en lo correcto.
—Dame un segundo —pide caminando hasta la parte trasera, específicamente en un pasillo donde talvez daba a la oficina—. ¡Lucas!
—Maddy, un día de estos ni siquiera viviré para contarlo —menciona recogiendo los papeles que debido al susto tiro—. ¿No puedes entrar como una persona normal?
—No, eso me quitaría lo única y perfecta que soy -dice recorriendo sus mechones de cabello hacia atrás de forma elegante—. Tengo una buena noticia para ti querido amigo.
—Dime y procura no quererme causar un paro cardíaco.
—El chico guapo está aquí.
—¿Hablas de Peter? No me gustan las bromas y lo sabes perfectamente.
—Por supuesto que es Peter —sonrie tomando los papeles y empujando a su amigo hacia la salida—. No lo hagas esperar más. Tranquilo, yo termino de acomodar el desastre.
—¿Estoy presentable al menos? —pregunta mirando su atuendo un poco formal, pues era algo muy característico de el—. ¿Es muy formal?
—Te vez perfecto tal y como estás.
—Gracias, Maddy.
¿Estaba nervioso? Por supuesto que sí, tenía mucho de no conocer gente nueva y el hecho de hacerlo nuevamente le emocionaba pero le causaban mucho pánico a la vez.
—¡Hola, Peter! —saluda interrumpiendo la burbuja imaginaria del contrario—. ¿Nos vamos?
—Vámonos, Lucas —sonrie.
La pastelería a simple vista se veía preciosa, la decoración no era ni tan colorida ni tan oscura, mantenía colores elegantes y eso le agrado bastante al muchacho.
—No estés nervioso, Lucas —habla Peter deteniéndose cuando no observo movimiento en Lucas—. Les agradaras.
—¿Y si no, Peter? No soy muy bueno socializando —murmura formulando una pequeña mueca.
—Eres una grandiosa persona, le agradarias a cualquiera —sonrie tomando inesperadamente la mano contraria—. Si no estás cómodo nos iremos y volveremos después.
De esa manera el pelinegro fue llevado hacia la pastelería dónde los hermanos Bell al verlo caminaron a saludarlo con grandes sonrisas.
—¡Esperábamos conocerte, Lucas! —exclama la rubia—. ¡Que descortés de mi parte, soy Annette Bell, un gusto!
—Lucas Varetti —sonrie— Que lindo nombre, Annette.
—Pero si eres muy dulce, Lucas —halaga invitando al chico a sentarse—
—. Siéntete a gusto, en unos minutos viene mi hermano con los aperitivos que preparamos para ti.
—Gracias, Annette.
Nuevamente el dúo quedó en completa soledad, hasta este punto Peter no había querido soltar su mano y Lucas no era nadie para negarse cuando la sensación le gustaba.
—Annette es una muy linda persona —confiesa rompiendo el tenso silencio—. Tenías mucha razón cuando me hablaste de ella.
—Y espera a que conozcas a Thomas es bastante divertido.
—¡PETER, VOLVISTE! —grita Thomas, trayendo en sus manos dos charolas con diferentes aperitivos sobre ellas—. ¡TU DEBES SER LUCAS!
—Thomas, no grites —regaña Annette dejando las tazas junto al café—. Lo normal por aquí Lucas.
—Tranquila, paso la mayor parte de mi tiempo en un restaurante —comenta—. Mucho gusto Thomas.
—¿Sabes mi nombre? Ah, quien te habrá hablado de mi —menciona mirando de reojo al castaño—. También me da mucho gusto conocerte. Me atrevo a decirte que tienes muy bonitos ojos, tus pestañas son muy largas ¡Por dios!
Aquel comentario había ocasionado una extraña sensación en Peter, talvez había sido porque no había comido en todo el día debido a la universidad.
Si, solo eso.
—Gracias, Thomas —rie por lo tan agradable que era el muchacho—. Los postres se ven deliciosos y me encantaron las diferentes figuras.
—¿Encerio? Me esfuerzo haciendo las figuras, no siempre se ven en las pastelerías —comenta Thomas—. Pero si quieres probar mis fabulosas recetas primero tienen que soltarse las manos.
Sus mejillas se encontraban totalmente rojas, Lucas fue el encargado de romper aquella conexión de sus manos, Peter solo miro a otro lado sintiendo las miradas intensas de sus amigos pero ya después hablaría con ellos.
Había sido una de las maravillosas tardes del pelinegro. No recordaba cuando se había divertido de aquella manera y esperaba algún día presentarles Maddy.
—¿Te divertiste? —pregunta Peter cuando ambos se encontraban llendo hacia el restaurante nuevamente—. ¿Quieres que pida un taxi? Si está algo lejos y no me gustaría llevarte todo el camino caminando.
—Me divertí mucho, Peter. No, me gustaría seguir caminando sino te molesta.
—Por supuesto que no.
—¿Piensas volver al restaurante? Sonara un poco extraño pero hecho de menos elegir tus postres.
—Solamente si mi mesero favorito me atiende —comenta logrando un sonrojo en el más bajo—. Y aún me falta mucho por recorrer en esa larga lista de postres.
—Bastante, Peter —rie cerrando su saco debido al intenso frío que ya se empezaba a sentir—. ¿Piensas asistir al festival de Spiderman?
—Ire con mis amigos, ¿Y tú?
—Con Maddy, es una gran fanática de Spiderman.
—¿Y tú lo eres? —pregunta curioso por su respuesta.
—Admiro mucho su valentía, arriesga su vida por personas que no conoce y siento que el festival es muy poco para agradecerle todo lo que ha hecho por nosotros. Y si, soy fan de Spiderman.
—Tienes lindas formas de expresarte, Lucas.
Lucas le hacía lo olvidar todo su alrededor, había olvidado que la cafetería de MJ se encontraba a tan solo unos metros de ellos y debido a su extrema distracción había vuelto a chocar con alguien.
—¿Estás bien? Lamento no haberme fijado.....
El pequeño temblor en su cuerpo se presentó y las pocas palabras se habían esfumado. La misma MJ se encontraba a un metro de el con una mirada algo molesta pero extrañada por como la miraba dicho desconocido.
—Tranquilo, solo fíjate la próxima vez —dice sacudiendo su ropa debido a la caída—. Trata de mantener la mirada al frente, chico.
—Si, lo haré —susurro.
Lamentablemente la chica había vuelto a retomar su camino sin darle la oportunidad de decir algo más, todo siempre le sucedía cuando no estaba listo.
—¿Conoces a la chica, Peter? —pregunta Lucas haciendole saber su presencia, pues desde el choque con la chica todo se había vuelto extraño y el castaño seguía mirando hacia donde se había ido—. Te encuentras muy nervioso.
—Es una ex compañera de la preparatoria —responde aún perdido por el momento.
—¡Oh, de acuerdo! Ya necesito irme y espero volver a salir nuevamente —dice sintiéndose algo lastimado por la actitud del chico, le hacía sentir que lo ignoraba—. Ten linda noche, Peter.
—Igualmente, Lucas.
Era una persona muy sentimental, la chica con anterioridad no solamente había sido una compañera pues Peter le había mirado de una forma muy amorosa, como si fuera solamente la única persona del planeta, le había ignorado incluso al momento dónde la chica despareció y eso le había lastimado.
Peter, o era muy tonto para notarlo o muy despistado.
Mientras tanto el menor se había llevado una desilución más, a Peter no le gustaban los chicos.
ayyyyy mi bebé lucas)):
apenas estamos empezando y ya comienza el punto más importante para un futuro, las consecuencias del pasado de Peter.
los amo, gracias por su paciencia y su apoyo <3
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