CHAPTER FIVE
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warm christmas
EL TAN ESPERADO DÍA LLEGÓ A LA GRAN CIUDAD, muchas personas ya se encontraban comprando todo lo necesario para la cena navideña. El frío clima acompaño a todos durante todo el día, cada vez la temperatura bajaba pero a nadie le importaba eso al contrario, la felicidad inundaba cada hogar de la ciudad.
Los hermanos Bell se encargaron de terminar la decoración de su departamento y después de vender sus postres más pedidos para la navidad cerraron el lugar justo a las ocho pues habían prometido estar con Peter, porque no dejarían a su amigo solo.
—Peter es una persona muy amable y a pasado por muchas cosas que no me imagino lo triste que estará en estos momentos —dice Annette acomodando todos los platos y utensilios—. Debemos hacerlo sentir muy feliz hoy.
—Los días anteriores estuvo muy feliz, antes solo llegaba de la escuela y después no lo veíamos pero desde tiempo atrás estuvo saliendo muy seguido y llegaba muy tarde —informa colocando las copas—. Es como un hermano para nosotros y estoy de acuerdo con hacerlo feliz en esta noche especial.
Unos momentos más tarde Peter ingreso al departamento trayendo consigo el postre favorito de los hermanos, ensalada de manzana y algunos roles tanto de canela como de chocolate.
—No te hubieras molestado con los postres —dice Thomas colocando los postres en algún lugar de la mesa—. Pero muchas gracias Peter, todo se ve delicioso.
—Ponte cómodo mientras traigo la cena —dice Annette regalándole una tierna y amable sonrisa, Peter devolvió el gesto retirando su saco para posteriormente dejarlo en el perchero.
—¿Qué tal la ciudad, Peter? En la mañana luche contra una señora solo por una lata de duraznos.
—Tambien es un caos. Las manzanas se agotaron en minutos y me fue muy difícil conseguir para la ensalada.
—Al menos no te peleaste con alguien.
Alrededor de cinco minutos los amigos ya se encontraban degustando de la exquisita cena, durante un rato solo se mantuvieron en silencio pero poco tiempo más tarde ya se encontraban hablando de anécdotas divertidas y sobre las nuevas cosas en sus vidas.
—Tambien he pensado en retomar mis estudios —confiesa Thomas llevándose un bocado a la boca.
—¿Encerio? ¡Que alegría, Thomas! —felicita Peter.
—Ya ha descansado un rato y mis padres también hablaron con el, o mejor dicho el hablo con ellos —menciona Annette—. Me alegra que retome los estudios.
—¿Y lo demás?¿Qué tal todo? —pregunta el arácnido—. La pastelería ha resultado bastante bien pero dejando el lado laboral qué tal lo personal.
—Hemos estado reuniéndonos con nuestros padres en varias ocasiones, al parecer después de mucho me han aceptado —menciona la chica sonriendo—. Mentiría si dijera que no los extrañaba.
—Mi hermana fue muy valiente y la admiro mucho por eso —halago el ojiazul.
—¿Cómo supiste que eras bisexual? Si mi pregunta te molesta no la contestes —pregunta nerviosamente el arácnido. Las miradas curiosas no hicieron esperarse, Thomas para ocultar su sonrisa bebió de su copa.
—Desde que tenía dieciséis años —responde la rubia—. Bese a una chica y desde entonces supe que no era simplemente curiosidad, bueno, tarde algunas semanas en aclarar las cosas pero después tuve mi primera pareja y supe que no solo me gustaban los chicos.
—¿Por qué lo preguntas, Peter?
—Simple curiosidad.
Ni siquiera sabía si verdaderamente lo preguntaba por curiosidad, pero había algo en su interior que le molestaba, pero tampoco era de la mala manera.
Desde la llegada de Lucas muchas cosas se removían dentro del castaño, no solamente era por la amabilidad con la que lo trataba sino también por aquellas tantas sonrisas que lo dejaban hipnotizado.
—Pero lo descubrirás cuando esa persona correcta llegué —habla Annette.
—Pero yo...
—Todos empezamos de esa misma forma, Peter.
El tan inesperado momento llego y cuando los obsequios estuvieron en la sala los respectivos dueños se acercaron para intercambiarlos.
—Bueno Annette, me fue muy difícil encontrar un buen regalo para ti pero después de muchas tiendas creo que lo encontré —Peter toma el obsequio con la envoltura color amarillo y se lo entrega a la sonriente joven—. Espero te guste.
—¡Son preciosos Peter!¡Muchas gracias! —agradeció cuando de la pequeña caja saco un collar y unos aretes con la diminuta forma de unos cupcakes.
—La pastelería siempre ha sido algo muy valioso y pensé que esto quedaría perfecto con lo que significa para ti.
—Es perfecto —dice para posteriormente abrazar al castaño por tan lindo regalo—. Ahora te toca abrir el mío.
—Hace unos días nos dijiste que extrañabas mucho a tu tía —menciona mientras tomaba aquel pequeño collar con las siglas de su tía May—. Debió de ser una gran persona por lo que nos contaste, así que lo pensé mucho en estos días y me pareció un lindo regalo de mi parte. ¿Te gusta?
—Me encanta. Muchas gracias, Annette —sonrie abrazando tiernamente a la rubia—. Lo llevaré siempre, lo prometo.
—Nos alegra que te gustará Peter, pero te toca abrir mi regalo —menciona Thomas entregándole la caja color azul—. ¡Ábrelo!
—Antes de abrirlo me gustaría darte el tuyo. Recuerda aquella vez que me dijiste lo mucho que te gustaba la fotografía —Peter sonrío ante la actitud infantil de su amigo, pues el ojiazul asintió varias veces sin quitar la sonrisa—. Ya sabes lo que es.
—Es magnífica Peter —dice admirando la cámara entre sus manos—. En verdad muchas gracias.
—Muchas gracias por la sudadera y el saco, no puedo creer que sepas más de mis gustos que yo mismo —agradece—. Aunque no entiendo porque la sudadera tiene una pequeña araña y mi nombre abajo.
—Simplemente un detallito para que siempre me recuerdes Parker —sonrie inocentemente—. Es precioso el decorativo.
—No creen que debamos inaugurar esa camara con una foto nuestra —propone la chica.
—Estoy de acuerdo.
El arácnido después de una horas más de convivencia decidió salir un poco a la ciudad y de paso visitar a su tía para desearle una feliz navidad, los chicos habían propuesto a acompañarlo pero Peter les respondió con querer hacerlo solo, asegurándoles que estaría bien.
Era una primer navidad sin la cálida compañía de su tía, sin la deliciosa comida que comúnmente preparaban juntos y por supuesto su primer navidad sin tenerla deseándole una feliz navidad para después abrazarlo. La extraña, y mucho.
PETER RECORRIÓ TODAS LAS CALLES SIN rumbo alguno, disfrutaba la fría brisa golpear su rostro mientras se columpiaba por la ciudad, quería disfrutar un poco más de la hermosa noche antes de visitar a May. Tenía muchas cosas por decirle y talvez contarle un poco sobre Lucas, aunque no estuviera con el siempre estaría presente en la mente del arácnido y sabía muy en el fondo que May lo escuchaba y estaba muy orgullosa de todo lo logrado en tan poco tiempo.
—He conocido una nueva persona May —informa el arácnido mientras acomodaba las flores—. Es bastante sonriente y muy amable.
Sonríe un poco al recordar la hermosa sonrisa que lo dejo cautivado desde un principio, la culpable de sus revuelta de emociones y pensamientos.
—Debes estar muy orgullosa de mi, ya he podido socializar con más gente —su sonrisa se desvanece en cuanto recuerda el suceso con Lucas hace unas semanas—. Lamentablemente me he alejado de esa persona, no sabes lo mucho que me gustaría que estuvieras aquí para aconsejarme. Tengo miedo May, miedo a que esto suceda de nuevo, no puedo permitirlo.
Inesperadamente unas lágrimas se escapan de sus ojos.
Ya había pasado mucho tiempo, ¿Por qué aún seguía doliendo como la primera vez? Talvez la única respuesta sería seguir adelante pero vivía constantemente con miedo, pero también tenía el obstáculo de recuperar su pasado a pesar de lo difícil que sería.
¿Era un tonto? Si, pues aún creía que las cosas perdidas llegaban nuevamente hacia ti, pero era muy difícil sabiendo que todo mundo te había olvidado.
De regreso optó por la opción de caminar, aún quería disfrutar de la estupenda noche. Faltaba alrededor de una hora para la tal inesperada navidad, muchos locales aún seguían abiertos y el olor a cafe no se hacía esperar haciendo sentir cálido al arácnido.
Demasiado distraído que no noto a la persona frente suyo ocasionando que está perdiera el impulso y se fuera directo hacia atrás, pero los buenos reflejos de Peter lo tomaron por la cintura evitando una dolorosa caída.
—Lo siento mucho estaba muy distraído....
Su oración no logro ser terminada pues la mirada sorpresiva de Lucas fue traspasada al castaño. Pasaron unos segundos más para que el cuerpo de Lucas fuera posicionado correctamente.
—Tranquilo Peter —sonrie arreglando su saco, debido al movimiento este se arrugó—. También yo venía distraído.
—¿Estás bien? Talvez fui un poco brusco al sostenerte —pregunta apenado.
—Estoy muy bien gracias por preguntar —rie por lo nervioso que se encontraba el contrario—. ¿Te gustaría tomar un café? Digo, sino tienes algún problema.
Peter estaba un poquito en trance así que solo asintió como respuesta.
—¿Si tienes problema o si quieres tomar ese café?
—Si me gustaría tomar ese café.
Ambos jóvenes se encaminaron a una iluminada cafetería, estaba muy cálido a dentro y los exquisitos olores lograron en volver al dúo.
—¿Qué te gustaría ordenar Peter? Yo invitó.
—No, yo invito.
-¿Te parece si dividimos la cuenta?
—Me parece perfecto.
Después de ambos obtener su pedido se acercaron a la mesa más cercana y con con una buena vista desde la ventana, al parecer ambos compartían el mismo gusto.
—¿Te gusta mucho eso? —pregunta Lucas cuando nota lo perdido que se encuentra Peter por la vista que deja ver la ventana.
—Es muy relajante en mi opinión —responde—. ¿Y tú, Lucas?.
—Opino lo mismo, me hace despejar un poco de la realidad —sonrie llevándose un bocado de pastel a la boca.
—Escuche sobre el asalto al restaurante y espero no te moleste pero tú amiga me contó sobre lo sucedido contigo, ¿Todo bien, Lucas? —se anima a preguntar. Peter esconde una sonrisa cuando nota las mejillas contrarias ligeramente sonrojadas.
—Tranquilo, no me molesta. Estoy muy bien, al parecer el disparo no afecto nada importante pero tengo que caminar mucho para evitar algún problema en mi pierna.
—Me da gusto saber que te encuentras bien.
—Por cierto, muchas gracias Peter.
—¿Por qué lo dices?
—Por haberte preocupado aquel día que visitaste el restaurante —sonrie tratando de no sonrojarse aún más-. Fue lindo de tu parte.
—Simplemente quería saber cómo estaba mi mesero favorito.
¿Lo había dicho? Por supuesto que sí lo dijo, pero ya era bastante tarde para arrepentirse. Ahora jugaba nervioso con su cubierto mientras observaba la tierna sonrisa del pelinegro.
—Seguire diciendo que es muy lindo de tu parte preocuparte por las personas.
La conversación siguió fluyendo, ambos contaban un poco de si mismos para conocerse mejor, el ambiente era muy alegre y podría decir Peter que Lucas le robó muchas sonrisas en aquel tiempo.
Ambos terminaron sus respectivos pedidos, en ningún momento dejaron de charlar al contrario buscaban un tema el cual fuese interesante para ambos y aúnque no lo fueran siempre escuchaban hablar del otro sin juzgar.
—Pronto será navidad —dice Lucas mirando su reloj.
—Paso el tiempo muy rápido —murmura Peter—. Me agrado tu compañía Lucas.
—¿Nos volveremos a ver? —pregunta con un pequeño toque de ilusión—. Últimamente no has ido al restaurante pero no te reclamaré por eso, solo quiero volver a conversar contigo, me caiste muy bien Peter.
—Por supuesto. Iré entre semana al restaurante y prometo llevarte a la pastelería de la cual te hablé —sonrie.
—Me encantaría probar esas galletas con combinación extraña.
—Te encantarán, es un hecho.
Ambos intercambiaron números, antes de seguir su camino Lucas se armó de valor para lanzarse sobre Peter y envolverlo en un abrazo, uno que Peter sintió como el más cálido y tierno.
—Feliz navidad, Peter —murmura llenándose de la exquisita colonia del contrario, un olor muy adictivo según su gusto.
—Feliz navidad, Lucas —responde abrazando con un poco más de fuerza el delicado cuerpo.
Aquello solo era el inicio para nuevas cosas, muchas las cuales llegarían a sanar heridas del pasado pero como en toda historia habría tropiezos de los cuales no podían evitar sino solucionar.
días sin actualizar por aquí, lamento mucho la demora pero está semana me tocó ir a clases y bueno, es último semestre de preparatoria)):
awwwww el abrazo de mis bebés, son tan lindos <3
muchas gracias por todo su apoyo, los amo
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