Narra Sophie:

Miré hacia dónde estaba Robbie y lo hallé tirado en piso inconsciente por lo que me acerqué y comprobé que al menos tuviera pulso, un suspiro de puro alivio brotó de mi labios al solo saber que estaba desmayado pero vivo.

-¿Cuánto creen que estará así?-pregunté observando a mi cuñado.

-no lo sé, quizás unos minutos-respondió Sam-recuerda que la sombra pudo haberle hecho cualquier cosa y debemos estar preparados para cuando despierte.

-esta bien-asentí regresando junto a Peter.

-¿Listos para ver arder a la sombra?-preguntó Dean, mientras encendía la fogata.

-por supuesto-respondió Peter, a lo que yo simplemente asentí.

No pasó mucho para tener ya todo listo, Sam le pasó el coco a Peter para que lo haga él.

-Sombra me has dado una nueva oportunidad en esa vida tan miserable que tenía, me abriste una ventana a un mundo mejor, pero ya es tiempo de que te vayas.-lanzó la fruta en sus manos, dejando que las llamas consuman a la que fue hace mucho tiempo sombra de su padre.

-¿Qué pasó?-nos giramos encontrando a Robbie sentado en el piso algo confundido-¿En dónde estoy?

-primero hermano estás en la tierra o el mundo sin magia-le comenzó a explicar mi marido-segundo, te liberamos de la sombra.

-Lamento mucho lo que les hice, Jamás me voy a perdonar el haber lastimado a Andrew.-se puso en pie.

-esta bien, sabemos que no fuiste tú-intenté tranquilizarlo-te perdonamos.

-¿Qué haremos ahora? ¿Volveremos a Neverland?

-¿Quieres regresar?-pregunté sorprendida.

-no, creo que no.

-pues entonces te dejaremos en Storybrooke-resolvió Peter-y luego nosotros iremos por Alice.

-no, ustedes vayan por Alice y yo veré que hacer.

-¿Seguro?

-si, quizás esta sea una nueva oportunidad para mi.-sonrió.

-entonces te veremos luego, hermano-dijo Peter apoyando una mano en su hombro.-¿Vamos?-giró a verme estirando su otra mano.

-a la segunda estrella a la derecha y directo hacia el amanecer-murmuré lo mismo que dije la primera vez que fue por mi para llevarme a nuestra amada isla, tomé su mano y me sujeté fuerte de él por más que me tenía bien sujeta de la cintura.

Traspasamos la fina capa de lluvia al entrar en Neverland y descendimos en la playa.

-no puedo creer que al fin podremos sacar a Alice de esta isla-dije rompiendo el silencio entre ambos.

-yo tampoco-suspiró-tampoco puedo creer que la sombra ya no este, es difícil teniendo en cuenta que el me dió otra oportunidad y fue parte de mi padre, pero se volvió un... un monstruo.

-amor olvídate de eso ¿Sí?-tomé su mano y la apreté-vamos, hay que ir por Alice.

Tiré de él hasta llegar al campamento dónde encontramos a todos los niños perdidos haciendo sus respectivas tareas.

-¿Peter?-nos giramos encontrando a Félix.

-¡Rubio!-chillé abrazándolo, lo había extrañado.

-¿Cómo esta la señorita Pan?-rió.

-muy bien-sonreí mientras nos separábamos.

-ya no hay sombra-informó Peter.

-¿Está muerta?

-si-frunció el ceño mirando hacia todos lados-¿En dónde está Alice?

-Salió a pasear con Zack, creo que él le iba a enseñar como usar la espada-respondió.

-¡Ayuda!-todos giramos para ver, Alice apareció estaba muy agitada, me acerqué rápidamente.

-Alice amor ¿Qué pasó?-peiné un poco su cabello intentando tranquilizarla.

-Zack-lloriqueó.

-¿Qué tiene?-preguntó Cody, quién se acercó ni bien escuchó el nombre de su hermano.

-esta herido, fueron unos... unos...-se quedó pensando-¡Indios!

-los pieles roja-oímos a Peter-¿En dónde está?

-vamos-seguimos a Alice por el bosque hasta llegar al árbol de reflexión justo en frente estaba el rubio sentado con una mano presionando su abdomen.

-¡Zack!-exclamó su gemelo corriendo hacia él.

-Cody-sonrió-lamento mucho el haberte tratado como si fueras inferior a mi, eres todo lo contrario sólo lo hacia porque sabía que...-respiró hondo-yo no era igual a ti, no lo soy, tú eres el inteligente y eras el más querido por nuestros padres.

-no, sabes que no es así-tenía los ojos llorosos-y ni se te ocurra despedirte, porque encontraré la forma de salvarte.

-el agua de manantial no podrá curar esto, ya es demasiado tarde.

-vamos, cargenlo hasta el campamento-ordenó Peter luego de haberlo inspeccionado.

A la vuelta todos íbamos en silencio, creo que estábamos afectados por lo que le había pasado a Zack

-¿Crees que podamos salvarlo?-le pregunté a mi esposo, quién me tenía abrazada mientras caminábamos.

-no lo sé-suspiró-la posibilidad es escasa, casi nula.

Narra Alice:

Había escuchado a mi padre decir que quizás Zack no se salve, por eso tomé la decisión de ir yo por la cura.
En cuanto todos se durmieron me deslicé muy despacio por la cama en la que previamente había estado durmiendo con mis padres, fue un poco difícil pues mi padre me tenía fuertemente agarrada.
Salí de la cabaña y me adentré al bosque buscando el árbol de las hadas, en uno de mis tantos paseos lo descubrí y no estaba muy lejos del campamento así que llegué rápidamente

-¿Hay alguien?-pregunté cuando estuve frente al árbol-¿Hadas?

-¿Sí?

Una pequeña luz dorada salió desde un agujero del tronco, esta se hizo un poco mas grande permitiendome ver a una mujer miniatura con ropajes muy finos y una corona que adornaba su cabello recogido.

-necesito de su ayuda, mi amigo está herido-expliqué-y no quiero que muera.

-creo que puedo ayudarte-sonrió.

-usted es la reina ¿Verdad?

-así es, la Reina Clarion.-suspiró-esta flor tiene propiedades curativas, pero solo funciona si le cantas.-me pasó una pequeña flor amarilla que brillaba como el oro.

-¿Usted tiene la letra de esa canción?

-sí-me dió también un pergamino-esto es todo lo que necesitas. Sabes tu abuela era igual a ti, muy valiente y audaz.

-¿Enserio? ¿Conoció a mi abuela?

-de hecho era un hada, pero cometió el error de enamorarse de un humano.

-no fue un error porque de no ser así, mi padre no hubiera existido ni yo, ni Andrew, incluso Christopher. Además él es una persona increíble, siempre mira películas conmigo aunque sean repetidas y siempre jugamos juntos.

-¿Peter Pan?, no te ofendas Alice pero me es muy difícil de creer.

-mi padre no es el diablo, Reina-miré la flor-sólo cometió errores y aunque no me los haya dicho sé que fue por una razón pero él se arrepiente de todo eso.

-lo sé-asintió con elegancia.

-¿Qué?-estaba confundida.

-sólo fue una pequeña prueba, eres muy especial Alice Emma Kay.

-me lo han dicho-sonreí.

-¿Qué esperas?, ve a salvar a tu amigo-me alentó.

-¡Muchas gracias Reina Clarion!-exclamé para luego correr de nuevo al campamento.