—Entonces... ¿te besó?

—  No, no lo hizo.— JooHyunnegó  con la cabeza dejando más confundida a la pelinegra frente a ella.

— ¿Entonces para que me llamaste?

— porque...también podemos hablar.

— Y con hablar te refieres a la chica con la que has estado estos meses.

— Park SooYoung.— Advirtió, pero al parecer, para la pelinegra solo fue un pase para molestarla aún más.

— Vamos, lo único que vas dicho ha sido: "SeulGi esto, SeulGi aquello."— SooYoung movio sus brazos exageradamente.

— yah, cállate, no he hablado solo de ella.

— bueno, si no es ella es bonggie y cuando hablaste de el te desviaste nuevamente a esa tal "SeulGi"

JooHyun solo bebió de su malteada mirando hacia otro lado tratando de que la vergüenza que sentía en ese momento se fuera.

— Hyun...¿me vas a contar lo que pasó?

— Es que ni yo lo sé. Ella vió la hora, dijo que era tarde y se despidió, pero creo que no besó mi mejilla.— En este punto, las orejas y mejillas de JooHyun estaban completamente rojas.

— Te gusta SeulGi.

— No, no me gusta.— respondió bebiendo lo ultimo de su vaso.

— No pregunté, Hyun, lo afirmé. Además, te ves animada con ella, nunca sonríes tanto cuando hablas de alguien.

— ash, te odio.— Siseó viendo la sonrisa traviesa de su mejor amiga.

— Bien, yo debo irme, tengo cosas que hacer, y tu... una confesión que preparar. — Se levantó de la cómoda silla.

— ¿¡Qué!? ¿Qué estás diciendo?

— ¿Te lo guardaras? Debes decirle a esa "SeulYi" que te gusta.

— Se llama SeulGi. Y no me gusta.

— Eso dije... me voy, cuídate, Hyunnie. — Besó la mejilla de una enojada castaña que estaba apunto de matar a la más alta, y tal vez era una razón del porque se había ido.

JooHyun iba a levantarse cuando un chico llegó a su lado, pidiendo que pagara la cuenta.

Y ella no pudo estar más furiosa, porque SooYoung le había dicho que ya habia pagado.

La castaña llegó a su casa, abrió la puerta apoyándose en la misma para cerrar. El pequeño corgi ya estaba saltando en sus pies y jugando.

— Hola, bonggie-ah... ¿Te aburriste sin mí?— Se agachó  a su altura y tiró la pequeña pelota de goma y el cachorro fue a perseguirla.

JooHyun se desplomó en el sofá sintiendo un peso más en su regazo, sin mirar solo estiro su mano para acariciar la cabeza del pequeño anaranjado.

— ¿Qué hago ahora?... a mi no me gusta SeulGi ¿Cierto? Solo estoy así porque no he estado con alguien nuevo  desde hace mucho.

El cachorro sólo gruñia jugando con la misma pelota de goma que antes.

— SooYoung solo dice tonterías, SeulGi y yo solo somos amigas...