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Holis, aquí su desamparada favorita. Que no se note que en el capítulo anterior hice una pequeña parodia a No Game No Life y sí, pondré parodias porque es divertidísimo ¿Qué opinan del Chidori x Junpei xd? Amo al equipo azul, es que fue comiquísimo lo de la muerte y ellos corriendo como locos. Y que me dicen del Monopoly. Bueno ahora, volvemos a la Gekko pero tenemos una misión de luna llena ¡Spoilers! ¡La segunda shadow de Luna llena viene! Disfruten el tercer capítulo. ¡PERSONA!
Capítulo 3
Hoy estaba pronosticada algunas lluvias en la mañana. Mikky veía las gotas caer frente a ella. Estaba junto a su hermano en un pequeño cine, resguardándose de la lluvia. Akihiko estaba empapado porque le había dado su paraguas a su hermanita.
— No pensé que la lluvia empezara tan temprano — comentó Akihiko, secándose su uniforme y revisando su mochila —. Odio la lluvia. Ahora tendré que volver a pasar mis apuntes de física.
— ¿A sí? A mí me encanta la lluvia, el sonido que hace es muy relajante — Mikky se sentó en las escaleras de cine, mientras Akihiko sacaba una libreta vacía y comenzaba a pasar sus apuntes llenos de agua —. Aki como siempre muy estudioso.
— No tengo opción, me quedo dormido o me mandan a buscar cosas en medio de la clase y luego no entiendo. Le tengo que pedir los apuntes a Mitsuru y a Shinji — Suspiró, revolviéndose el cabello —. Amo a esos dos.
— Ahora mismo nos vas a amar más — dijo la inconfundible voz de Mitsuru. Traía una capa y se la puso a Akihiko, cubriéndose Shinjiro y ella con una sombrilla cada uno —. Listo, vamos a la escuela, Aki.
— Ah, gracias… — La mochila de Akihiko fue tomada por Shinji y Mitsuru se encargó de cubrirlo con su paraguas. Mikky les seguía, colgada como siempre de Akihiko.
— Por cierto, el trío Strega está allá atrás reteniendo a Ryoji — El pelilargo señaló detrás suyo, donde se veía a Ryoji retorcerse entre los brazos deJin y Chidori que lo sostenían y Takaya riéndose a su lado.
— Desde que le dijimos que podías haberte empapado por culpa de la lluvia, no se quedaba quieto y varias veces intentó venir por ti. Por suerte, tenemos un trío excelente encargándose de él — Akihiko suspiró, dejando de mirar al chico de la bufanda y negando con la cabeza. Nunca entendería que tiene ese idiota con él.
— ¿Y los demás? — preguntó Akihiko, enarcando la ceja.
Mitsuru le explicó que los otros a excepción de Fuuka y Yukari que se levantaron mucho más temprano de lo normal, se quedaban en el dormitorio. Aigis no quería que a sus circuitos le sucediesen algo, Junpei ni se levantó, Ken y Koromaru decidieron que lo más sensato era no salir con la lluvia. No sabía si más tarde irían.
Llegaron a la escuela a duras penas. El día transcurrió con normalidad, y el tiempo voló hasta la hora de almuerzo. Fuuka miraba por la ventana del aula, admirando la lluvia cuando sintió a alguien tirarse en el asiento al lado suyo.
— Oh, Takaya eras tú… ¡Me asustaste! — Fuuka rió, encantando al pelicenizo — ¿Y qué haces aquí?
— Vine a verte — Tomó con suavidad la mano de la chica y depositó un beso en él —. Y para invitarte a una acalorada partida de Minecraft con nosotros.
— Como gustes — La sonrisa de Fuuka no disminuyó, yendo junto a Takaya al gimnasio, donde estaba todo S.E.E.S. reunido haciendo diferentes cosas.
Mitsuru y Jin andaban revisando redes sociales ajenas, Mikky estaba separando a Ryoji de Akihiko; Chidori, Junpei y Yukari estaban haciendo una tarea evaluativa que debían entregar anteayer y Shinjiro y Ken estaban tirados en una esquina esperando por Takaya. Aigis estaba almorzando, como toda persona normal. Pero espera… ¿Aigis no era una robot? En fin, vamos con los desamparados.
— ¡Pero no te robes mis diamantes pendejo! — Le gritó Takaya a Ken.
— ¡Eso por mis maizales, hijo de put4!
— ¡ESO, MATANSE! ¡TNT! — Fuuka rió como loca, explotando un montón de dinamita en la aldea de Shinjiro y Ken.
— ¿Quién nos manda a olvidar por completo la tarea evaluativa de Matemáticas? — Junpei sudaba frío, sin dejar de escribir — ¡Akihiko, ayúdanos!
— ¡A eso iba! ¡Demonios, aléjate! — Gruñó Akihiko, apartando a Ryoji —. Mira que fastidias.
— ¡Chidori retén ahí al pendejo ese a ver si yo puedo terminar mi tarea! — Bramó Junpei, señalando a Ryoji —. ¡AKIHIKO! ¿CUÁNTO ERA 1+1?
— 4 digo, ¿cuál era la pregunta? — Dio un salto cuando Ryoji apartó a Strega y su bufanda empezó a atacar a Akihiko — ¡ADEMÁS DE JODER AHORA ME QUIERE MATAR!
— ¡Akihiko~! ¡Déjate atrapar! — Cantó el chico de la bufanda, lanzando certeros ataques contra el peliblanco. Chidori tomó su hacha plegable de la mochila y arremetió contra Ryoji.
— ¡Aléjate de mi hermano, bicho asqueroso! — Mikky (quien estaba almorzando mientras veía la pelea) se metió a defender a su hermano. Tomó un grimlett que traía oculto debajo de la saya y fue a apuntar a Ryoji con él.
— Chicos ¿Qué paso en los 45 minutos que no estuve mirando? — dijo Mitsuru, tocándose la sien —. Jin, dame “eso”
— ¿Estás segura, Mitmes? — Jin sacó “eso” tan preciado y peligroso.
— Claro mi querido Jinson — Tomó eso y se paró en medio del gimnasio, todos le miraron — ¡Declaro abierta la tercera guerra mundial! ¡Juguemos Yu-gi-oh! y que gane el mejor duelista!
Los miembros de S.E.E.S. se miraron, tomando cada uno un deck de los que Mitsuru trajo. Incluso los desamparados dejaron Minecraft para ponerse a jugar Yu-gi-oh!
— ¡Invoco a mis tres dragones ojiazules! — dijo Mitsuru a Aigis, invocando a los tres dragones azules al campo de batalla — Coloco dos cartas boca abajo y acabo mi turno.
— ¡Ja, no vas a sobrevivir este turno, senpai! ¡Llamo a la quinta parte de EXODIA! — gritó la robot, cuando Mitsuru intervino.
— ¡PROTESTO! — Mitsuru rió, levantando su carta boca abajo — ¡Activo mi carta trampa! ¡Raigeki! ¡Pagando puntos de vida, destruye todos los monstruos en tu campo! ¡BUAJAJAJAJAA! ¡ATACA, DRAGÓN OJIAZUL! ¡DESTRÚYELA! ¡BURNS OF DESTRUCTION!
— ¡NOOOO! ¡ESTO NO PUEDE SER POSIBLE! — Aigis tiró sus cartas, yéndose derrotada. Mitsuru le había destruido con sus tres dragones de ojos azules — ¡Ya verás Mitsuru, hoy en la Dark Hour te derrotaré! ¡Solo espera!
Regresaron al dormitorio luego de un día muy divertido y alocado. Los desamparados — cuyos miembros iban en aumento — pasaron por el arcade a comprar Pokémon Masters y se la pasaron allí hasta la noche. Mitsuru, Mikky, Yukari y Aigis tenían una salida de chicas, comprando ropa y zapatos y por supuesto, Jin llevaba las compras. Chidori y Junpei tenían una muy romántica cita, Ken jugaba junto a Josefa, Maiko y Koromaru y por último Ryoji estaba buscando nuevas maneras de joderle la vida a Akihiko.
— A-ki-hi-ko~ A-ki-hi-ko~ — Ryoji se dirigió a la habitación del capitán del club de boxeo, tocando cuatro veces — ¿Estás ahí?
— ¿Qué quieres, Ryoji? — El peliblanco abrió la puerta. Tenía unas ojeras bajo los ojos y un ligero rubor en las mejillas.
— ¡Quiero abrazarte! — Ryoji se le lanzó a Akihiko, quien, por culpa del peso, cayó contra la puerta de la habitación — ¡Mentira, si usualmente esquivas eso!
— Para que hoy no es mi día — El pelinegro notó que estaba mucho más cansado de lo normal y apoyó sus manos en las mejillas de Akihiko.
— ¡Estás ardiendo en fiebre Akihiko! ¿Es por lo de esta mañana? ¡No voy a dejar que vuelvas a salir bajo la lluvia nunca más! — Ryoji hizo un berrinche, golpeando con suavidad el pecho de Akihiko —. Te me cuidas que si no ¿quién me soportaría?
— Sigh como quieras — El chico de la bufanda le ayudó a levantarse, llevándolo hasta la cama y acostándolo.
— Mm, lo primero será bajar esa fiebre — Creó con su poder como Shadow un martillo de hielo — ¿Crees que con este hielo será suficiente o más?
— ¡RYOJI ME VAS A MATAR CON ESA COSA! — El nombrado tiró el martillo sobre la cabeza de Akihiko, dejándole en shock y haciendo que viera hasta a su madre —. Ay mamasita hace rato no te veía, orale.
— Ay, creo que le reinicié el window. Ahora es latinoamaericano — Le volvió a dar — ¡VUELVE A LA FORMA HUMILDE QUE MERECES!
— Ryoji deja… que cuando me despierte… de esta no sales… — Ryoji le dejó el martillo en la cabeza.
— Bien, ahora sí parece él mismo. Lo siguiente debería ser… ¿reposo? ¡Oye Akihiko, necesito que poses varias veces! — El chico de la bufanda zarandeó de los hombros a Akihiko, casi le despega la cabeza del cuello.
Akihiko se levantó adolorido, mientras el otro buscaba ropas para ponerle.
— Mitsuru — Akihiko tomó su celular, llamando a la pelirroja con 99 —. Necesito que te encargues de un idiota.
La noche llego y gracias a los muy no saludables métodos de Ryoji, Akihiko pudo incorporarse a S.E.E.S. esa misma noche. Mitsuru, Chidori y Fuuka recibieron extrañas señales de un monorriel. Al parecer, allí había aparecido una shadow como la que Strega derrotó el primer día. Con ese motivo, se dirigieron al monorriel.
— ¡Equipo azul, acabemos rápido con esto para que pueda ver a Akihiko! — Animó Ryoji, tomando su katana y su evoker. Tenía la gran aspiración de curarle cuando llegara Akihiko malherido y ganarse su aprecio — ¡Adelantémonos, equipo azul!
Entraron primeros al monorriel, viéndose aturdidos por las shadows que les esperaban. Una shadow con un arco fue a dispararle a Ryoji.
— ¡Oh sí, disparame! ¡Así mi amor será correspondido!
— Genial, cuando quieras matarte ya tienes tu katana ¡PERSONA! — Yukari invocó su persona, creando un torbellino que absorbió las flechas de la shadow.
— ¡Persona! — Junpei invocó a Hermes, que creó una hilera de fueguitos por todo el pasillo. Yukari lo miró con cara de psicópata —. Es que se ve cool, Yuka-taaaan.
— Vuelves a decirme Yukatan y vas a acabar en el medio del Tártaros— Amenazó la castaña, sacándose la bota —. O si quieres, botazo.
— No, no, tranquila, yo estoy bien así — Movió los brazos, negando.
El equipo azul atravesó el pasillo del monorriel, ahora iluminados por múltiples fueguitos, huyendo de las shadows y avanzando de vagón a vagón. En el tercer vagón, se toparon con el equipo amarillo.
— ¡Equipo Amarillo! — Ryoji se decepcionó al ver que no había rastro del equipo rojo por ningún lado.
— Si buscas a Aki, está cayéndose a madrazos con la shadow — comentó Shinjiro, sentándose en una esquina y sacando su laptop —. Ken, una partida de Monster Hunter ¿Qué tal?
— Voy a eso, senpai — Ken se tiró a su lado, sacando también su laptop y poniendo el juego —. Chicos, relájense, el equipo rojo ya está con la shadow.
— ¡Pos yo voy con el amor de mi vida! — gritó Ryoji, avanzando al siguiente vagón — ¡AKIHIKOOO~!
— Iniciando modo persecución — habló Aigis, sacando sus armas — ¡VUELVE AQUÍ ENGENDRO DEL MAL!
— ¡AUUUUUUUUUUU! — Koromaru aulló, siguiendo a Aigis.
Dos miembros restantes del equipo azul se miraron, encogiéndose de hombros, cuando oyeron un sonido familiar… unas cadenas que se arrastraban.
— ¡STUNPEI, CORRE POR TU VIDA! — Se mandaron a correr al siguiente vagón, dejando atrás a Shinjiro y a Ken.
De pronto, el tren comenzó a moverse.
— ¡El tren comenzó a moverse! — advirtió Fuuka.
— ¿Eso era malo o bueno? — preguntó Chidori, frunciendo el ceño —. Digámosles que van a morir a ver si se ponen las pilas y puedo dormir mis ocho horas de sueño.
— Uff, sueña — respondió la pelirroja. Invocó su Persona —. Equipo rojo, derroten rápido a la shadow o se mueren.
— Equipo amarillo, ¡Vayan a apoyar al equipo rojo! ¡SÍ SHINJIRO, DEJA EL MONSTER HUNTER! ¡AIGIS POR TU VIDA DEJA DE PERSEGUIR A RYOJI! ¡NO TAMPOCO LE PUEDES DAR CON UNA SILLA!
— Mitsuru protégeme, esa me da miedo — Chidori y Mitsuru se abrazaron, temerosas por la actitud de Fuuka.
Al equipo rojo le andaban dando madrazos a diestra y siniestra. Akihiko estaba congelado tipo Frozen, Mikky trataba de atacar a la shadow con sus cuchillas y Jin y Takaya estaban haciendo estrategias y malabares de la nada para esquivar sus ataques.
— ¡Alguien ayude a Akihiko o vamos a terminar con un duro frío en vez de nuestro líder! — dijo Mikky, disparándose e invocando a Magnus — ¡Persona!
Mikky creó un carámbano de hielo con su poder, tirándolo hacia la shadow, quien reflejó el ataque hacia Akihiko.
— Genial, además de Frozen I tenemos Frozen II — Takaya negó con la cabeza, sacó de la mochila una medicina y la usó con Akihiko.
— Líder, la próxima nos avisas de que eres débil al hielo. No quieras volverte Ventus en Kingdom Hearts Birth by Sleep — Jin mandó a su Persona a atacar a la shadow, tumbándola.
— ¡AKIHIKOOOO~! — La inconfundible voz de Ryoji resonó por el vagón — ¡TE EXTRAÑÉÉÉÉ!
Ryoji fue a tirársele arriba como hacía a menudo, pero la shadow le tiró una lanza de hielo.
— ¿Ah, porque no quieres que vea a Akihiko? — Ryoji alzó su katana, disparándose una bala de theurgy — ¡ACÁBALA, THANATOS!
El monorriel pasó a ser un espacio lleno de estrellas donde solo se veía con claridad la luna llena y color brillante de la hora oculta. Un centenar de lanzas negras rodearon a la shadow, atravesándola una a una. Thanatos apareció, atacando al boss y volviéndolo una masa negra que pronto desapareció. El monorriel volvió a ser como antes.
— ¡AKIHIKO~! — Ryoji se le colgó del brazo, ante la mirada perpleja del equipo rojo y Mitsuru, pero igual no se preocuparon mucho, seguía siendo el mismo idiota de siempre.
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