Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capitulo 3

Antes darse cuenta o querer evitarlo Seth ya se encontraba siendo sostenido por esos brazos de esa persona de ojos negros, el susto de casi ser arrollada ya debería de haber pasado pero Seth de un segundo a otro perdió fuerza en sus piernas y su respiración era la de un búfalo corriendo desenfrenado.

Todo parecía indicar que su cuerpo está reaccionando tarde a ese susto de casi perder la vida, o también podría ser una reacción de los recordado de ese día en que estuvo muerto envida conectado a esos tubos en el hospital.

Ese hombre de ojos negros sin expresión en su rostro no comprendía del todo la reacción repentina de Seth, estaban hablando normal y de repente estuvo a punto de caer al suelo. Aún en su confusión busco la manera de tranquilizar a Seth para que deje de sentirse tan sofocado.

—¿Le duele algún lugar?—Preguntó e ignorando la humedad en su cabeza provocado por la sangre, a un lado de su frente entre medio de su cabello tiene una cortada no al punto de morir pero si que necesita ser saturada.

—Yo...—Levanto su mirada haciendo contacto visual con esos ojos negros.—No lo sé hay un zumbido en mis oídos y espinas pinchando mi cabeza.

‹Creo que son los recuerdos olvidados los que quieren regresar pero hay una enorme protección en mi cabeza, quiero pero al mismo tiempo no quiere recodar, ¿por qué? ¿Por qué me niego a dejar entrar esos recuerdos? ¿Son tan malos como para ser olvidados?› Las preguntas de Seth también eran respuestas, su subconsciente quería proteger a Seth de esos momentos que fueron malos.

Empezando por como ese tipo de provocó el accidente le obligaba con amenazas el aceptar los regalos, si Seth se negaba amablemente esa persona indirectamente le decía que sus padres deberían de jubilarse, que ya estaban mayores para trabajar en el restaurante. Seth entiendo inmediatamente que esa persona le estaba amenazando.

—Seria bueno que tome asintió.—Busca algún lugar donde puedan estar cómodamente mientras Seth, se siente mejor.—Si me disculpa.

—Uh...—Seth se volvió una piedra al darse cuenta que estaba siendo sostenido cómo una princesa, avergonzado y tímido.—Yo puedo caminar y aquí el lastimado es únicamente usted.—Forcejea queriendo bajarse de los brazos de esa persona.

—No haga eso solo espere casi llegamos a la banqueta...¡Cuidado!—Cayeron al suelo solo que él tuvo la destreza de minimizar el impacto, siendo su cuerpo un suave algodón donde aterrizó Seth.—Agh—Se quejo al sentir el duró suelo.

Esa persona de ojos negros se le veía muy bien como si no fuera él, el involucrado en ese accidente pero la realidad es otra; él está muy mareado y su cabeza duele como el demonio pero no lo demuestra.

—¡¿Está bien?!—Fuí demasiado brusco al intentar bajar de sus brazos para que al final terminara encima de él, vaya escena de película.

Seth se avergonzó de su poco tacto tanto que no quería encontrarse con la mirada de esa persona, sin embargo termino por hacerlo y un leve estremecimiento apareció y se quedó por segundos en su cuerpo.

"El color negro fue siempre así de majestuoso." Pensó Seth mientras su mirada yacía fija en esos ojos negros, sin percatarse que está siendo sostenido por la cintura íntimamente por alguien que no conoce muy bien.

—¡Director ejecutivo!—Vocifero un hombre robusto desde el otro lado de la calle, su cabello simi-largo, castaño, se sacudía al ritmo de su cuerpo al correr.—¿Se encuentra bien?—Pregunta preocupado.

Él al ser la mano derecha de el director, tenía autoridad de movilizar a los demás y borrando cualquier foto que haya sido tomada. No podían permitir haya algún tipo de rumor.

—Joven, ¿necesita ayuda para levantarse?—Pregunta amablemente.

—¡No!—Que humillante todo esto.—Sería bueno que fuera al hospital, señor director.—Se dió cuenta de lo cerca que estaba de esa persona, tomando un metro de distancia.

—No creo que sea necesario.—Se levantó del suelo algo molesto.

El de ojos negros se quedó con sus manos en el aire, sintiendo un gran vacío y la calidez que en su momento estuvo ahí había desaparecido segundos después de que Seth, huyó lejos de sus brazos.

‹Oh pensándolo un poco mejor y detenidamente quizás sí, si es necesario el ir a un hospital pero no por lo que sucedió no hace mucho, mas bien me estoy preocupado por los raros sonidos de mi corazón. También saber si tengo algo en mi cabeza que me hace tener pensamientos extraños más cuando sostuve en mis brazos a ese chico.› creía que ir al neurólogo o al cardiólogo le darían la respuesta a su comportamiento extraños de los últimos días.

—D-Director, creó que el joven tiene....—No pudo decir ninguna otra palabra no después de ver esa mirada negra asesina, queriendo triturarlo en ese torbellino de oscuridad todo por llegar en el momento menos indicado.

"Largo." Dijo solo con los movimientos de sus labios y una mirada a punto de acuchillar a su fil mano derecha, no suele enojarse con él pero en esta ocasión el director creí que esa persona había sido entrometido, llegando justo cuando apreciaba la espléndida vista de esos bellos ojos con heterocromia.

—¡Iré a ver qué todo se este resolviendo correctamente!—Salió huyendo.

‹ Ahora entiendo todo del porque ha estado actuando raro, era por esto. Él jefe está interesado en otro ser humano. ¡Por fin, por fin al jefe le llegó la primavera! Esto tienen que saberlo los demás, tienen que saber que el jefe pronto nos dará una señora y sobre todo es la misma persona que defendió al joven maestro.› Con una gran sonrisa fue con el chisme a los demás.

—Le recomiendo que no sea terco.—Mi oído pica como si estuvieran hablando de mí, no nos distraigamos porque no es importante.—No quiero que me culpen por si ese golpe en su cabeza lo dejan un poco loco.—Dejo saber sus preocupaciones.—Aunque ni debería de pensar en eso porque no tiene nada que ver conmigo, son ustedes quiénes no manejan como es debido.—Señalo.

¿Qué rayos me pasa? ¿Como pude permitir que me abrazara de esa manera? Esa acción fue tan casual nada de incomodidad...¡todo es culpa del shock! Sí todavía estoy en shock por hecho que estuve a punto de volver al hospital cuando ni siquiera tengo más de dos semanas de haber salido de ese lugar.› Suspiró.

Seth piensa que si sigue teniendo percance como este puede que su trauma con los autos, se vuelva mas complicado al punto de no querer volver a subir en uno.

—¿Me está regañando luego de que logré impedir que lo impactaran?—Arquea un ceja.—Ese auto no salió de la nada.—Informó.

—¿Qué?—Tengo un mal presentimiento sobre lo que dirá acontinuación, no quiero escucharlo.—¿Me está diciendo que eso fue premeditado?—Su mirada evasiva me lo confirmo.

¿Por qué? ¿Quién querría hacerme daño? Mis padres son buenas personas, todos a nuestro alrededor son buenos entonces, ¿por qué? ¿Hice enojar a alguien o que?

—¿Como sabe eso?—¿Quién me quiere muerto?—¿Me está acosando?—Se alejó y se abrazo asimismo.—¡¿Como sabe eso?!

—¡No es así!—La expresión sería en su rostro por primera vez se quebró, no esperaba ser atrapado porque así lo haya estado espiando no iba aceptarlo, no iba quedar como un enfermo a los ojos de Seth.

—¡Alejarse de mí!—Retrocede tres pasos hacia atrás.—...Gracias por hacer eso pero espero no volverlo a ver!—Dio la medía vuelta.

‹¿Qué demonios está pasando? Tengo que alejarme de está persona o de cualquier otra, yo necesitó hablar con mis padres...¡Sí, ellos tienen que saber que está pasando..!› Sus pasos se detuvieron abruptamente al escuchar unos quejidos detrás de él, quería pero a la vez no el girar y mirar atrás.

—Maldición.—Termino por dar la medía vuelta.—Le dije que debería de ir a un hospital.—Siento que me voy arrepentir de esto.—Apoyarse en mí.

Al final terminó por ayudarle a ese hombre de ojos negros con un extraño brillo, pasando su brazo sobre los hombros de Seth, quién no notó esa micro sonrisa en los labios del contrario.

‹Me iré al infierno por jugar de está manera, la verdad es que me siento bien aparte de lo mareado todo lo demás está bien, sin embargo tuve que fingir dolencia porque no quería que ser fuera...es la primera vez que hago algo como esto.› También es la primera que se preocupa por su imagen, no quería quedar como un loco u otra cosa enfrente de Seth.

—Su frente no dejá de sangrar.—Una vez mas se acerca para limpiar la sangre de esa cincelada frente.—Seria bueno descarta cualquier lesión que pueda ser perjudicial para su salud más adelante, señor director.—Aconseja.

—Koen.

—¿Qué?

—Ese es mi nombre y significa audaz.

Mantenía sus ojos ligeramente cerrados para no perderse ninguna de las expresiones en ese bello rostro tan cerca del suyo, agarrándose fuertemente de los lados de la banqueta donde se encuentra sentado, solo así lograba mantener sus manos quietas y que no vayan acierta delgada cintura.

‹No sé que me está pasando exactamente, no siento que sea yo mismo cuando estoy cerca de está persona y sobre todo; hay un cierto olor proviniendo de él, es agradable y oloroso. ¿Es algún tipo de colonia de la cual no estoy enterado?› Koen no se percató que su nariz se mueve ligeramente, buscando mas de ese aroma.

—¡Seth!—Exclamaron sus padres, soltando un profundo suspiro de alivio al verlo ahí de pie.

—Mamá, papá.—Fuí abrazado por sus temblorosos cuerpos.—Lo siento por preocuparlos.—Correspondi su abrazo.

—¿Por qué tardaste tanto?—Preguntan.—Tampoco responden el celular.

—Sobre eso...—Les explicó lo que había sucedido.

—¡Qué!—Sus colores se iban y venían.—¡¿Estás bien, verdad?!—Buscan alguna herida.—¡Vamos al hospital inmediatamente!

—Estoy bien, no me lastime gracias a esa persona.—Señala a Koen.—Él se llevó la peor parte.

—¡¿Usted?!—Ella lo reconoció al instante.—¡Muchas gracias!—Sostiene la mano de Koen.—En verdad muchas gracias.

—No fue nada solo estoy pagando mi deuda con su hijo.—Expresó.—Por defender a mi hijo ese día en el hospital.

—Ah, con era eso.—Susurró Seth sin estar a la defensiva.—No era necesario que ponga su vida en riesgo por algo así, solo basta dar las gracias.

—Sí, mi hijo tiene razón.—Con cuerda con Seth.—Hablemos de esto después ya que usted tiene que ir al hospital.

—Bien.—Él se parece mucho a Seth.—Agh.

—Le ayudó.—Koen un vez mas se apoyó de los hombros de Seth.—Lo llevaré hasta su auto...

—No es necesario lo haré yo.

‹Podra estar lastimado, y yo agradeciendo que haya salvado a mi hijo pero esa cercanía no me gusta.› El señor Allen tuvo la inquietud de que querían robar a su pequeño repollo.

—Esto bien.—Koen quería apoyarse en los hombros de Seth, no en los del señor Allen.—Puedo ir por mi cuenta.—Mira discretamente a Seth, este está siendo abrazado por su madre.

—Cuando se sientan mejor puede venir al restaurante, ha hablar de lo sucedido.—Le entregan una tarjeta.— también tendrá comida grátis por un mes.—Él estaba mostrando su agradecimiento por salvar a su hijo.—En serio muchas gracias.—Sostiene las manos de su esposa e hijo.—Adiós.

Koen solo los vió irse y cuando ya no eran visibles chasqueo sus dedos, su mano derecha y los demás aparecieron rápidamente.

—¿Sí, director ejecutivo?

—Hay un auto a metros de distancia de nosotros que desde hace ratos ha estado tomando fotos, quiero que lo sigan discretamente y me digan para quién trabaja.

—Como ordene.

Solo hasta ahora me estoy dando cuenta que esas personas, son nada menos que los que llevaron a juicio a ese mimado joven maestro.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro