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× Capítulo veintidos. ×

— ¿Sucede algo Simón? ¿Te sientes bien?— pregunta el falso Raphael.

"Estoy jodido, muy jodido. Soy muy joven para morir por un demonio con la apariencia de la persona que me tortura la vida. "

— Para ser yo, debes trabajar mucho, demonio estúpido.

Veo al verdadero Raphael detrás del falso Raphael y la espada atravesando su cuerpo haciendo que la punta de esta casi toque mi cuerpo, un agujero negro comienza a aparecer en el cuerpo del individuo frente a mí, pudiendo ver como se desintegra frente a mis ojos con un chillido parecido a un grito, antes de que lo desaparezca pude ver su forma natural y puedo jurar que es una imagen que nunca voy a poder olvidar en mi vida y de seguro me va a torturar en los sueños, más que Raphael. 

Entonces saliendo de ese mal momento, el verdadero Raphael camina hacia mí y me da un golpe en la cabeza como forma de reprimenda por mi torpeza a no reconocer antes del peligro que tenía a mi lado, pero no es mi culpa, nunca me había cruzado con una de esas criaturas antes.

— Agradece que estás criaturas no quieren hacerte daño, sino ya estarías más que muerto, inútil —murmura lo último por lo bajo.

Y por primera vez, desde hace mucho tiempo, al escuchar su ofensivas palabras le sonrío como forma de respuesta, este es el verdadero Raphael que conozco, que no tiene consideración con sus palabras, que te humilla de la peor manera y puede hacerte sentir bien o mal en solo momentos, gracias a reconocer esos malos comportamiento fue una de las ayuda para reconocer al falso Raphael y estoy feliz en cierto punto por haber tenido que vivir este lado de temperamento feo que tiene. El vampiro me mira un poco confundido y me da un golpe suave en la cabeza. Pero estoy feliz.

— ¿Qué?— dice de manera brusca.

— Gracias por salvarme, Raphael.

— Que no te van a hacer daño— me dice molesto— pero de seguro ibas a gritar y empeorarías todo.

Comenzamos a caminar, el vampiro mayor va delante de mí con dos espadas mientras está atento a los pasillos, yo a pesar de que siento que soy protegido por él, no puedo dejar de caminar muy cerca de la espalda de Raphael por si acaso, tengo mucha preocupación de lo que puede suceder mientras estamos aquí, porque puedo escuchar las espadas y como golpean abajo, pero acá está tan silencioso que me da miedo.

— ¿Por qué te separaste de Alexander?— le digo casi susurrando.

— Porque Magnus me dijo que te fuiste conmigo después de salir del portal, cuando obviamente que no era así, así que vine por ti, porque sabía que no sabes nada de demonios.

— ¿Y qué noticias hay?

— Primero, tu hermana y tu cuñada están aquí, buscándote— dice— y segundo, alguien nos ha traicionado, sabían que no estaríamos aquí y atacaron, hay muchos vampiros muertos por demonios, Elisabeth está trabajando con demonios.

— ¿Por qué me buscarían?

— Te quieren hacer líder y obviamente matarme Simón, si yo soy asesinado tú serás jefe— me mira de reojo— ¿No te tienta ser líder?

¿Yo, líder? Ja, eso ni soñarlo, no es que no pueda serlo, creo que nadie nace siendo líder sino que detrás de ello va una enseñanza y un proceso, además de todas las responsabilidades que conlleva eso, y el equilibrio que debe mantener en su bienestar mental, además de la preparación para tener esos comportamientos para que nadie se rebele y sobrepase por encima de él. No me gustaría ser nunca un líder de algo tan grande, mejor que lo sea Raphael y que se ocupe solo. Además de todo, no me gustaría que muera ¿Qué será de su familia sin él? Si es como el sostén de toda la familia, todos lo quieren, que desaparezca sería como muy doloroso para muchos. No puedo pensar en que muera.

— No gracias, no vine a este hotel para eso, ni quería ser elegido pero no me quedo otra opción— respondo con total sinceridad.

Veo una sonrisa posarse en la cara del vampiro, una sonrisa que duró más tiempo que antes, y creo que por el momento en que estamos, es algo que me tranquiliza y da calidez a mi cuerpo. Creo que estoy comenzando a delirar por el mal momento que estamos pasando, que me está comenzando a agradar esta persona ¿Puede ser verdad que sí dos personas pasan por algo importante o malo, se pueden agradar mutuamente? Creo que sí, porque no me desagrada tanto hoy como lo hace normalmente.

— ¿A dónde vamos?— le pregunto.

— Estamos yendo hacia el corazón de este problema— dice— vamos hacia dónde están las culpables de esto.

— Pero nos estamos poniendo en peligro— le murmuro ansioso.

— Claro que no, tú no, ellas están esperando por ti, pero yo sí lo estoy y no me iré de acá sin sacar a las basuras que han usurpado mi hogar.

— ¿Y qué haré cuando las vea?

Raphael no se mueve por unos minutos, entonces vuelve hacia mí y me empuja hacia atrás pegando con una puerta de una habitación, hace que me asusté por su acción tan repentina, abre la puerta casi acercándose muy cerca de mí, y me mete a la habitación cerrando con cuidado para que no se escuche en el pasillo nuestra ubicación, y me mira con sus expresiones serías, guarda una de sus espadas en el encaje de su cinturón para colocar su mano en mi hombro.

— Puedes irte con ella si quieres, yo no te retengo Simón, pero te pediré algo y necesito que lo cumplas y lo mantenga en secreto, si tú decisión es irte. No es lo mejor que se me ha ocurrido, pero por la situación en que estamos no hay tiempo para pensar.

— En lo que pueda ayudarte estará bien. De todas formas no veo otro plan...

Me tira de mi remera y me acerca a él, Raphael es un poco más alto que yo solo algunos centímetros que pueden camuflarse y hacernos ver de la misma estatura para ojos que no ven cotidianamente, pero ahora puedo sentir su rostro tan bajo que llega a mi cuello, trato de alejarlo porque está sobrepasando mi espacio personal, pero a él no parece importarle, mueve su rostro un poco más abajo cerca de mi clavícula, corriendo un poco mi remera lejos de mi hombro, todo el ambiente se ha tensado y yo estoy más que petrificado con esta situación ¿Qué está haciendo? ¿Acaso me volví a confundir y este no es el verdadero Raphael? ¡Oh cielos! 

Pero justo cuando estaba por gritar en busca de ayuda, mi voz no logra salir al sentir una lengua moverse por mi piel de forma rápida y un dolor atravesando en toda mi clavícula esparciéndose por mi cuerpo, y por solo segundo parece que comencé a alucinar por muchos colores que aparecer frente a mi vista, pero sólo duro segundos las imágenes, que ya había vuelto al lugar donde estaba, algo mareado, pero la persona frente a mi no se ve tan diferente de mi, parece tan curioso como yo de lo que ha pasado ¿Habrá visto lo mismo que yo vi?

— ¿Qué fue eso?

— Es un vínculo que hará que nuestra mente y cuerpo sean uno mientras estemos alejados— dice sin siquiera sentir vergüenza alguna— necesito que vayas con tu familia, a su casa y averigües que está pasando. Te necesito como un espía.

— Espera... He oído tipo de vínculos, está el de los Parabatai ¿Qué tipo de vínculos es este? No me digas que no es como de los Parabatai, sino con otros sentidos porque me mato ahora mismo— comienzo a sollozar.

— ¿Otro tipo de vínculos?

— Un vínculo romántico, de esos que hacen que tú y yo...— le digo— seamos eso...

— Puede que sea algo parecido— dice Raphael sin mirarme— pero no es algo que deberíamos hablar ahora, te lo hablaré después cuando calme todo.

— ¡¿Qué?! ¡Yo no quiero ser tu pareja! Tengo suficiente con...

Raphael me tapa la boca y me da un golpe en la cabeza de la cual me hace doler, porque a pesar de que ha sido leve me ha golpeado con uno de la parte inferior de la espada en la cabeza. Trato de hablar así que él me indica que baje la voz al hablar, así que trato de decir algo sin que me lleve a una consecuencia de otro golpe mucho más fuerte.

— Raphael, si has hecho algo juro que te mataré por no pedirme permiso.

— Sh... ¿Acaso fue lo único que oíste? ¿No prestaste atención a la otra parte del plan?— me dice— Y para tu información, yo tampoco quiero ser tu pareja.

— Claro que escuche el plan, pero me preocupa ahora mismo este tema de lo que me has hecho— le digo casi a punto de llorar— yo no quiero estar contigo como pareja.

— Escúchame idiota, no hay en los libros de historias sobre consecuencias por vínculos así de nuestras especies entre hombre y hombre, y si no hay nada registrado significa que no existe— murmura— así que deja de pensar cosas que nunca va a pasar.

— ¿Estás seguro de eso?

— Confío en los libros, si no sale entonces no existe.

Hace una seña de que cierre la boca mientras me da la espalda y abre un poco la puerta para ver sobre ella, como si algo acabara de captar su atención afuera, aunque yo no puedo escuchar ni oler nada como él lo está haciendo, porque veo como olfatea el ambiente, en unos minutos vuelve a juntar la puerta y me mira apenas con una pequeña sonrisa.

— Tu transporte ha llegado, un demonio está afuera buscándote a ti y al otro demonio— susurra— debes salir y dejarte guiar, te encontrarás con tu hermana.

— ¿Crees que es fácil ir hacia alguien que considere muerta por tres años? ¿Cómo quieres que actúe? ¡Además los demonios me dan miedo!

— Está camuflado en una persona Simón, y cuando llegues sabrás cómo actuar, sabes dar buenos show cuando quieres— me dice— solo haces tú drama y entonces todo estará mejor.

— ¿Y qué harás tú?

— Sacar la basura y ahuyentar al enemigo para que vayas a hacer tu trabajo.

— ¿Y si no nos vamos? ¿Y si ellas vienen a quedarse y matar?

Raphael está comenzando a desesperarse por las tantas preguntas que hago, no es la situación indicada pero mi cuerpo se está llenando de miedo y ansiedad que no puedo controlar, y son por razones que no son nada buenas y debo ir a enfrentar.

— Déjamelo a mí, tu sal y ve a hacer tu trabajo de una vez por todas— murmura— te trataré de localizar de alguna manera, solo espera por mí.

Raphael se hace a un lado para abrir la puerta y el quedar detrás como oculto, lo miro por última vez y salgo tan lento que puedo llorar de miedo, pero cuando estoy en mi proceso Raphael me da una patada que me hace salir en un tropiezo y así el cerrar la puerta. 

Es un maldito, me entrega a la presa, me pide que haga un trabajo y no me da ninguna palabra de aliento sino una patada como deshaciéndose de mi ¿Acaso no tiene conciencia que puedo, por enojo, delatar donde está? Veo a Fran venir hacia mí, y al instante me doy cuenta que es un demonio que se está disfrazando de él, porque sé que Fran no está aquí y porque su vestimenta y pelo está muy informal, además de una sonrisa que se que no se lo da a nadie más que a su familia.

— Simón, no deberías andar por aquí solo, es peligroso— dice este— ven, ven vamos a buscar a los demás antes de que nos atrapen, son muchos para nosotros dos.

— Me perdí y no encuentro el camino, me da miedo volver— susurro lleno de miedo.

— No hay nada que temer, estoy para protegerte.

Miro por última vez la puerta de forma disimulada para caminar junto al Fran falso, estoy muy atemorizado por lo que venga después, por lo que me voy a encontrar y como reaccionare a las personas que encuentre, es un tema muy sensible para mí, porque se trata de mi hermana, supuestamente muerta que ahora no lo está, que es una mujer cómplice malvada de su novia loca y avariciosa, y que todo lo que quieren hacer es buscarme a mí. Pero trato de no olvidar mi camino, yo sé que camino ir, yo soy del camino del bien, no importa lo que pase, se mi objetivo, sé quién soy y cuáles son las cosas que debo seguir, el bien y la verdad.

— ¿A dónde vamos?

— Tú sígueme, ellos están por aquí.

Estamos subiendo escaleras para ir a la azotea, significa que ellas están arriba mientras que han mandado a todos esos demonios a matar ¿Qué clase de corazón tienen? Hay muchos inocentes allá abajo, mi cabeza ha vuelto a doler, pero debe ser el motivo de que estoy pensando mucho y no logro pensar con claridad en nada ¿Quién traicionó a Raphael e hizo esto con el hotel? Hay algo de eso que me dice que se la respuesta, a pesar de que no llega a mi cabeza, ¿Por qué me han buscado después de tres años? Raphael dice para que me convierta en líder ¿Podré realizar los objetivos que pidió Raphael? Mientras mi cabeza este clara y se mi camino del bien, haré lo posible para mantener y cumplir el plan. 

Pero hay algo que me mantiene intranquilo, más de lo normal y es la pregunta que se ha repetido más veces en estos minutos de autotortura mental y es ¿El vínculo no me hará enamorarme de ese estúpido de Raphael? Espero que no, suplico que no.

Al llegar a la puerta de la azotea Fran me hace pasar y entonces las veo, mejor dicho, la veo entre las cuatros chicas que están ahí delante de mí. Ali y Emer junto a esa chica Elizabeth o Lilit, cual sea su nombre y a su lado, con el cabello suelto y lacio, de color rubio como mamá lo sabía tener, con una vestimenta cara y una mirada distinta a la dulce que recuerdo, está mi hermana, más viva que lo que recuerdo en su etapa terminal de la enfermedad.

— ¡Simón!— dice está llorando y tratando de acercarse.

Entonces era cierto, tres años viva y nosotros, mamá y yo, sufriendo y tirados en una calle, llore días y noches por ella, llore mucho por algo que no era cierto, ella estaba siendo cómplice de esa mujer viviendo otra vida, caminando al lado del mal. Me siento herido, traicionado, creí que no dolería tanto porque sabía que estaba viva por la boca de otras personas, pero en verdad duele, y mucho.

— No te acerques...

No hace caso alguno.

— ¡¡¡No te acerques a mí!!! ¡No lo hagas!

— Simón...— parece sorprendida.

Nunca en mi años de vida tuvimos una pelea fuerte, éramos muy unidos, pero está situación es mucho para tratarnos de modo pacífico.

— ¡Maldita mentirosa!— sollozo— ¡Maldita!

— ¡Haz algo!— dice Lilit/Elizabeth.

Entonces siento un golpe detrás, justo en mi cabeza y como todo se vuelve negro. Mi corazón está lleno de angustia.

N/a: Gracias por el apoyo que siempre me dan. Acá otro capítulo de nuestra pareja más linda. 💜 ¿Vieron la nueva portada? Una persona la hizo para mí, me encanta ¿Les gusta?

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