Arianne

Consulté la hora, ya eran las ocho y cuarto de la tarde cuando por fin terminé de trabajar, había sido un largo día pero entretenido, aún así estaba muy cansada y estaba deseando llegar a casa. Salí del edificio y visualicé rápido la boca de metro. Odiaba las horas puntas, son estresantes.

-¿Te llevo a casa?

Miré a mi compañero y negué con la cabeza- No te preocupes, estoy acostumbrada en meterme en vagones como si fuese una lata de sardinas.

Él río y negaba con la cabeza, Jaebum podía ser muy cabezota y hasta que no aceptase su invitación no estaría satisfecho.

Fue una auténtica sorpresa encontrarme a Jaebum en la misma empresa, aunque en verdad fue él quien me recomendó el puesto de trabajo pero en ningún momento me dijo que él trabajaba ahí hasta que llegué en mi primer día de trabajo.

-¿Cómo esta Haeri? ¿Al final encontraste a alguien para que la cuide? -preguntó él sin dejar de mirar la carretera.

-Oh mierd-maldije pero me corté, Jaebum giró su cabeza y me enseñó una sonrisa divertida- ¿Conoces a alguien dispuesto a cuidar a mi hija unos días? Es que ahora se esta quedando con alguien pero me interesaría otra persona.

-¿Y eso por qué? ¿No la cuida bien?

-Nonono, no es eso pero, da igual, déjalo, cuando llegue a casa buscaré alguna solución.

Jaebum paró el coche enfrente del edificio donde vivía y le agradecí por traerme.

-Hasta mañana -me despedí saliendo del coche.

-Hasta mañana, descansa-dijo él mostrándome una sonrisa.

Esperé que el ascensor llegará y una vez dentro pulsé el botón de mi piso, me miré en el espejo y me peiné con la mano. Cuando las puertas se abrieron solté un suspiro, espero que Jimin haya cuidado bien a Haeri.

Ahora solo entraría, le daría las gracias, se iría a su casa, prepararía a mi hija para que se vaya a dormir y buscaría como una loca alguien que pueda cuidarla estos días.

Me paré enfrente de mi puerta y cuando iba a introducir la clave empecé a escuchar música fuerte que procedía de ahí dentro. Después gritos y pasos correteando. Introduje la clave rápidamente y me adentré en casa. Corrí al salón y abrí la boca anonadada al ver todo mi alrededor.

-¿Pero qué...?

-¡Arianne, ya has vuelto! -gritó Jimin mostrándome una sonrisa y con mi hija en sus hombros.

-Bueno, bueno pero cuánto tiempo sin vernos - Jin salió de la cocina con un delantal rosa que tenía por ahí guardado y además uno que jamás había tocado.

Veo a Jungkook y a Taehyung corriendo de un lado a otro y al verme se han quedado estáticos, a Namjoon en la mesa del comedor trabajando en su portátil que me mira desde ahí, Hoseok esta bailando una canción de Red Velvet mientras estas salen en un programa que dan por la televisión y veo a Yoongi tumbado en mi sofá sobando.

-¿Se puede saber qué hacéis todos aquí? ¿En mi casa? -Nadie contesta y eso me molesta mucho- Jimin ¿Puedes explicarme todo esto?

- Pero bueno ¿no nos vas a saludar? -me pregunta ahora Taehyung que parece indignado.

- Eso, llevamos años sin vernos-habla Namjoon.

- Yo no os he invitado a MI casa -dije enfurecida y dejando mi bolso a un lado-Jimin baja a Haeri inmediatamente de tus hombros -le ordené y Jimin abrió los ojos haciéndome caso-Jin deja de hacer lo que estés haciendo en MI cocina, Namjoon, Taehyung y Jungkook recoged vuestras cosas e iros de aquí-les dije señalándoles con mi dedo.

-Pero Arianne tranqui-Jimin abrió su boca e hizo mal.

-Ni tranquila ni mierdas, tan solo te pedí que cuidaras a mi hija, no te he dado el permiso para que te trajeras a tus amigos.

-Ha sido por casualidad -explicó Jungkook y lo miré con cara de pocos amigos-Nosotros veníamos a visitarlo y nos colamos en tu casa.

-Sí, porque queríamos verte, Arianne -habló Hoseok serio y le miré a los ojos. Todos me habían fallado.

-Me da igual. Yo no quiero veros aquí.

- Sabemos que no hemos estado en contacto contigo estos años pero estamos agradecidos de volverte a ver, además, enhorabuena por Haeri, tienes una hija preciosa-habló ahora Namjoon, yo jamás quise que ellos conocieran a mi hija, tuve que cerrar los ojos porque estaba apunto de explotar.

-Chicos -habló Jimin- Será mejor que os marchéis -todos asintieron con la cabeza un poco decepcionados. Me quedé con los brazos cruzados. Haeri los miraba a todos con una cara apenada, al parecer no quería que se fueran. Miré a Jimin que sonreía un poco apenado a sus compañeros mientras recogían sus pertenencias y se iban marchando.

-Despertad a Yoongi -ordené.

-Ya estaba despierto -se levantó del sofá gruñendo y me miro sin ninguna expresión-Gran recibimiento, eh.

-Fuera.

-Ya, Arianne, ya se van -intervino Jimin intentando calmarme pero solo me ponía más histérica.

-A tí también te quiero fuera de mi casa. No quiero que vuelvas a cuidar de Haeri.

Jimin me miró a los ojos con una expresión seria y terminó asintiendo con la cabeza.- De acuerdo, ningún problema.

-¡No, mamá! -gritó mi hija cogiendo de la mano a Jimin que estaba marchándose. Los demás ya se habían ido-¡Yo quiero que se quede!

-No, Haeri, él no se puede quedar.

-¡Sí, sí puede! Yo no quiero ir con la tía Nicole, quiero que él me cuide.

Jimin soltó una pequeña risa mirando a mi hija y le acarició la cabeza- No digas eso, no quiero morir tan joven... -le dijo entredientes y Haeri me miró con pucheros.

-Agradezco que hayas cuidado bien a mi hija pero no puedo aceptarlo, solo era hoy.

-Esta bien, lo entiendo -aceptaba Jimin con una sonrisa.

-¡Mamá! -Haeri gritó- Porfaaaaa, porfa, porfaaaa -empezó a lloriquear y a dar pataditas.

-No Haeri, Jimin no puede cuidarte, él también tiene cosas que hacer.

- En verdad yo n...

Le fulminé con la mirada y él cerró la boca de inmediato. Entonces Haeri empezó a llorar y a mí se me rompió el corazón. Me agaché para limpiarle las lágrimas. Jimin también se agachó preocupado. Mi hija es mi debilidad y verla llorar me afectaba demasiado. Jimin acarició su cabecita y le sonreía mientras la consolaba con palabras como ''No llores pequeña no llores...'', ojalá Jimin me hubiese consolado así todas aquellas noches que me las pasé llorando...

Jimin hizo contacto visual conmigo ya que me había quedado estática observándolo. Reaccioné girando la cabeza y concentrándome en Haeri y me obligué a borrar todo tipo de pensamientos sobre el pasado.

A ver, en verdad no tenía a nadie con quien dejarla y Jimin estaba libre al parecer. Al menos hasta que vuelva Nicole me sirve.

-De acuerdo -dije después de suspirar rendida y ambos me miraron esperando que siguiera hablando-Jimin puede cuidarte.

-¡Chiiiiiiiiiii! -gritó de alegría Haeri y saltó a mis brazos. Me reí, eso no me lo esperaba y vi a Jimin sonreír plenamente mirándonos. Borré la sonrisa de mi cara y tragué en seco volviendo a ser yo.

-¿Te va bien? -le pregunté a él. Asintió con la cabeza- ¿Cuánto quieres?

-¿Cuánto quiero qué?

-¿Qué cuánto quieres que te pague o piensas hacerlo de gratis?

Jimin soltó una risa nasal y se tapó la cara-¿Sabes que no necesito dinero, cierto?-sigue siendo un engreído, en fin...

-¿Gratis?

-Claro, no hay problema.

Bueno, pues mejor para mí, ni me quejo.

-Mañana Haeri empieza la escoleta de 9 a 12 del mediodía -dejé a mi hija en el suelo y ella salió dando saltitos hacia su cuarto-por las mañanas voy yo a dejarla porque me pilla de paso para ir al trabajo, pero no puedo ir a recogerla. En este caso debes ir tú con una autorización que mañana te dejaré ¿Puedes ir?

-Sí.

- A ver, lo digo porque eres un famosillo de estos y es posible que te reconozcan si sales y-me interrumpió.

-No te preocupes por eso -dijo él tranquilo y encogiéndose de hombros-Nadie nos verá.

-Espero que tengas cuidado con eso, paso de ver noticias con la cara de mi hija... Bueno, eso es todo.

- De acuerdo, si no hay nada más que decir, ahora me iré -asentí con la cabeza, su presencia me ponía bastante nerviosa- Hasta mañana, Arianne -se despidió él con una sonrisa en su cara y salió de mi casa. Cuando se hizo el silencio me llevé las manos en la cara y solté un suspiro.

Dios, en serio, Jimin va a joderme la vida.

-♥-

Volví ♡ Me demoré un poco más porque estuve descansando estos días del viaje que por cierto, ha ido todo muy bien. Ahora estoy triste porque Japón es la experiencia más bonita e increíble que he podido vivir. Yo no quería volver a España >:'v *se va a llorar*