Narra: (Melina)

Comenzando una nueva vida

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He venido a la constructora, me he puesto ropa formal que sea adecuada para este lugar y este tipo de trabajo, me maquillé, me quité la gasa que cubre la herida, ya que está cicatrizando favorablemente, cubrí bien la cicatriz con maquillaje, también me puse labial color rojo bajo y me solté el cabello, quiero parecer una trabajadora más de esta constructora; salgo del ascensor, voy hacia la oficina de Joseph, toco la puerta.

Joseph abre la puerta, se queda mirándome, me mira de pies a cabeza, sonríe.

—¡Meli!, no pensé verte tan pronto por aquí.

—¿Podemos conversar?

—Si claro, entra.

Entro a su oficina, me siento en un sillón, Joseph se sienta a mi lado, me mira y sonríe, él es asi, es dulce.

—¿Pasa algo Meli?, te noto preocupada.

—Si, estoy preocupada por lo que vayas a pensar de mí después de saber lo que hice.

—¿Qué pasó? ¿qué hiciste?

—Robé el exámen resuelto que el profesor guardó en su armario, tenía miedo de reprobar... fuí descubierta, me expulsaron de la universidad, perdí la beca, lo siento, debes pensar lo peor de mí —le dije llorando.

—La verdad es que me parece extraño que hayas hecho eso, tú eres super inteligente, ¿por qué pensaste que ibas a reprobar?.

—No he estudiado como debe ser últimamente, eso es todo, tuve miedo de perder la beca y ahora... ahora lo he perdido todo, siento mucho eso.

—Ven aquí, no llores —me dijo abrazándome.

—No quiero decepcionarte.

—No lo estás haciendo, tranquila.

—No quiero que pienses mal de mí.

—Yo nunca pensaría mal de ti Meli, sabes que eres alguien muy importante para mí, sé la clase de persona que eres, puedes estar tranquila, yo nunca te voy a juzgar.

—Gracias amigo, más bien te diré el por qué estoy aquí.

—Si claro, dime.

—Ya que no iré a la universidad, quisiera empezar a trabajar desde hoy, espero que siempre quieras que trabaje, quizás creas que porqué he sido expulsada o porque no he estudiado como debe ser me será impedimento para trabajar aquí pero  puedes probar mi manera de trabajar, si no te parece a ti o a tu papá me dicen y no vuelvo más.

—¿Por qué piensas eso?, aquí tienes un trabajo seguro, no te preocupes, mi papá ni nadie tiene por qué saber lo que pasó, mira, hagamos una cosa, si alguien incluso mi papá te preguntan por qué ya no vas a la universidad les dirás que estás estudiando en línea desde tu casa, ya que has empezado a trabajar aquí.

La verdad es que la idea de Joseph está bien, solo que no me siento cómoda de mentir tanto, mentir es malo, es un pecado, que Dios me perdone por mentir, ojalá algún día cuando mi vida mejore pueda aclarar todas las cosas y decir la verdad siempre.

—Me parece bien, está bien, no me gusta mentir pero qué me queda.

—Yo te protegeré siempre, no estás sola en esto, me encargaré de que siempre tengas trabajo, de que siempre estés bien, yo te protegeré mi niña —me dijo acariciando mi mejilla, su forma tan dulce de tratarme siempre me hace sentir bien, bueno al principio me hacía sentir incómoda pero ahora me hace sentir protegida.

—Gracias, muchas gracias por dar tanto por mí, en verdad deseo que Dios te bendiga abundantemente, te quiero mucho —lo abracé llorando.

—Melina, no pensé verte tan pronto por aquí —oí la voz del señor Jamie, Joseph deja de abrazarme de inmediato.

—Desde hoy ella trabajará aquí papá, hay que presentarla a todos.

—Me parece muy bien que hayas decidido empezar a trabajar ya —me dijo el señor Jamie.

—Les prometo que daré lo mejor de mí para que su empresa crezca y mejore en todos los aspectos.

—Muchas gracias, si mi hijo confió en ti es por algo, sé que así será.

—Serás mi asistente personal, mi brazo derecho en todo, vamos a la oficina del directorio para que todos te conozcan y sepan que estarán bajo tus órdenes cuando yo no esté —me dijo Joseph parándose del sillón.

Confieso que tengo algo de temor e inseguridad de saber que trabajaré aquí.

—Está bien, vamos —dije arreglando mi cabello, el señor Jamie sale de la oficina, Joseph sale tras de él, yo salgo también, los sigo por un pasillo.

Llegamos hacia una oficina, la puerta es grande y de vidrio, se supone que de afuera no se ve nada pero de adentro si.

—Entra Meli —Joseph me dijo abriendo la puerta.

Entro, la oficina es grande, más grande que la oficina de Joseph, hay una mesa larga con doce sillones a su alrededor, un televisor grande, como de cincuenta pulgadas, adornos lujosos y costosos imagino, lugares así solo he visto en películas, es increíble el lugar.

Veo que Joseph habla con una chica, ella está vestida formalmente, luego él viene a mí, el señor Jamie se sienta en un sillón a la cabecera de la mesa.

—Le dije a la secretaria que llame a todos los miembros del directorio para que te conozcan y sepan que desde hoy eres una colaboradora más de la constructora, siéntate —Joseph me dijo señalando un sillón de alrededor de la mesa, él se sienta a mi lado.

—Me siento algo nerviosa —le dije a Joseph dándome aire con la mano, me siento sofocada.

—Tranquila, no te sientas así, ya verás que después de unos días te sentirás muy cómoda —Joseph me dijo sonriendo.

—Eso espero —dije respirando profundo.

El señor Jamie escribe en su laptop, Joseph mira su celular, yo entre tanto trato de relajarme.

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La puerta se abre, entran el señor Harry, Joe y... Ben... al verlo trago saliva, inmediatamente viene a mi mente la imagen de él y Scarlett teniendo intimidad, confieso que Ben me hace sentir muy incómoda, también no pensé que el señor Harry y el papá de Scarlett son miembros del directorio, el papá de Scarlett también me hace sentir muy incómoda.

—¿Melina? ¿qué haces aquí?, pensé que estabas en la universidad —me dijo señor Harry.

—Lo que pasa es que...

—Si tío Harry, desde hoy Melina trabajará aquí con nosotros, ella será como yo mismo, después de mi papá a ella le deben obediencia y respeto —dijo Joseph.

—¿Tú no eres la compañera de mi hija? —Joe me preguntó mirándome de pies a cabeza.

—Si, ¿por qué? —le respondí.

Ben se sienta frente a mí, me mira de una manera horrible, se ha quedado así, con la mirada fija en mí, me intimida mucho, me hace sentir muy incómoda.

—¿No crees que eres muy joven para trabajar aquí?, por lo que tengo entendido tú estudias en la misma universidad que Scarlett, recién comienzas tu carrera ¿cómo es posible que hayas conseguido trabajo tan pronto en una empresa de prestigio como esta? —me dijo Ben, no sé por qué siento que tendré problemas con él.

—Yo confío en Melina Ben, gracias a ella ganamos el concurso, lo sabes muy bien, ella está altamente capacitada para trabajar aquí —le dijo Joseph.

—Esperemos que así sea, ojalá no la hayas contratado por algo más que su alta capacidad —Ben le dijo a Joseph de una forma desafiante.

¿Qué es lo que trata de dar a entender Ben?... pero... ¿qué se puede esperar de alguien que engaña a su esposa con la hija de su socio?

—¿Qué tratas de dar a entender Ben?, dime claramente, no hables en doble sentido, dime exactamente lo que quieres decir —Joseph le habló a Ben muy molesto.

—¿No tienes que decir algo tú Joseph?, ¿por qué un día de pronto te pasas en atenciones con la compañera de tu primo? —Ben le preguntó.

—Porque él es mi mejor amigo, como mi hermano, él es parte de mi familia —le dije a Ben, no podía permitir que piense mal de Joseph, o que dé a entender cosas que no son.

—Ohhh, ya veo, te felicito por elegir a un chico millonario como mejor amigo —Ben me dijo sonriendo maliciosamente, sabía que me iba a complicar la vida.

—¿Qué te pasa Ben?, Melina es una chica de muy buenos sentimientos, ella es cristiana, no des a entender cosas que no son sobre ella —el señor Harry le dijo a Ben.

—Estoy totalmente de acuerdo contigo tío Harry, Ben está muy equivocado, Melina es una chica muy diferente a las demás, no vuelvas a mencionar cosas que no son sobre ella ¿entendiste? —Joseph le dijo a Ben.

—Está bien, no te enojes, solo decía —dijo Ben.

—Mejor hay que mostrarle a Melina como funciona todo aquí, la logística, los contratos, las finanzas y los balances de la constructora —dijo el señor Jamie prendiendo el televisor.

Siento que trabajar al lado de Ben será muy difícil, en fin, le pido a Dios que me favorezca en todo, daré lo mejor de mí en esta empresa.

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Joseph y el señor Jamie hicieron oficial mi contrato, desde hoy soy u trabajadora más de esta constructora, lo cual es un desafío para mí, nunca imaginé que en tan poco tiempo iba a trabajar en una empresa tan prestigiosa como esta, ahora comprendo que Dios tiene muchos mejores planes para nuestra vida que nosotros mismos. Joseph está leyendo unos documentos, estamos en su oficina, él puso un escritorio frente al suyo para mí en lo que me preparan una oficina propia.

—Mira Meli, aquí están los balances de los últimos contratos e inversiones que hicimos en los últimos seis meses, ¿los puedes revisar tú también y así darme tu opinión?, es que últimamente mi papá y yo hemos notado ciertas irregularidades en las inversiones y contratos —Joseph me mostró esos documentos.

—Si claro, ahora mismo los revisaré.

Veo que son contratos y balances de montos de dinero, supongo que son inversiones, estudié sobre estas cosas cuando me preparaba para el exámen de admisión.

—¿Por qué no puedo encontrarte en whatsapp?, agregué tu número y no me sale nada.

Olvidaba que Joseph no sabe que mi celular no es como los que todos usan, ¿y pensar que no me pude comprar uno porque lo que mi tía me pagaba apenas me acalzaba para comer?...

—Yo no uso esos celulares modernos, este es mi celular, mira —le mostré mi celular.

—Ya veo, no te preocupes, ahora mismo te entregaré un smartphone, es necesario que uses uno al trabajar aquí.

—Yo me lo puedo comprar, no es necesario que me des uno tú.

Me incomoda que me regalen cosas, a mí me gusta ganarme todo lo que poseo.

—Cada trabajador de esta empresa recibe un smartphone al empezar a trabajar aquí, espérame un momento —Joseph me dijo parándose del sillón, sale de su oficina.

Mientras vuelve reviso los balances, la verdad es que de primera vista hay cosas que no encajan, los montos de dinero invertido no encajan con las ganancias, ahora entiendo por qué Joseph me dijo que notó irregularidades; lo mejor será que me lleve estos papeles a mi apartamento, en la noche cuando esté tranquila los podré revisar al detalle.

Ahí está Joseph, veo que trae una caja pequeña en sus manos, imagino que es un celular.

—Aquí está Meli, tu celular, dame el celular que has estado usando para sacarle el chip y colocarlo en este.

—Si claro, toma —le doy mi celular—. He estado revisando los balances que me diste, la verdad es que yo también he notado ciertas irregularidades, si me lo permites puedo llevarlos y revisarlos en la noche, sé muy bien como resolver problemas como este de inversiones y ganancias.

—Está bien, llévalos, ha, otra cosa, ahora mismo después de almorzar iremos a comprarte una laptop, necesitarás una para tu trabajo, tranquila, se te descontará de tu sueldo.

—Si es así está bien.

—Vamos a almorzar.

—Si claro, vamos, yo invito  —le propuse, me siento incómoda de que sea él el que siempre invita.

—Claro Meli como lo desees, vamos ya, tengo hambre —me toma de la mano, sonríe, salimos de su oficina. La verdad es que Joseph me hace sentir bien, es como un ángel, me siento más que bendecida de trabajar junto a él.

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Joseph y yo hemos venido a almorzar a un restaurante de comida a base de pescado y mariscos, el lugar es muy elegante y por lo que veo los platos deben ser muy costosos, este restaurante es más lujoso que el restaurante de comida italiana que fuimos días atrás, si hace un año atrás me hubieran dicho que dentro de un año iba a almorzar en un lugar así de lujoso no lo hubiera creído.

—¿Te gusta el lugar Meli? —Joseph me preguntó.

—Si claro, es bellísimo.

Veo que una mesera uniformada viene hacia nosotros, nos pregunta qué es lo que queremos comer, yo le doy una vista rápida a la carta, ordeno un plato que consiste en pescado cocido al vapor con ensalada mediterránea, Joseph se pide sushi, para acompañar la comida pidió vino blanco, no me gusta el licor pero no se lo digo a Joseph porque no quiero incomodarlo.

—Este es el restaurante preferido de mi papá —Joseph me comentó.

—Tiene buen gusto.

—Hablando de papá... mira —me señaló con la mirada al señor Jamie, veo que ha venido con una mujer muy bonita, se nota que ella es menor que él, ambos están sentados en una mesa frente a nosotros, no nos han visto.

—¿Quién es ella?, perdón por preguntar.

No debí de preguntarle eso a Joseph, a mí no debe importarme la vida privada de los demás, ¿por qué fuí tan curiosa?, miro disimuladamente hacia la mesa donde ellos están, veo que el señor Jamie acaricia su cabello y le toma la mano sonriendo.

—Ella es la pareja de mi papá, es su ex secretaria, ahora entiendo por qué mi papá volvió tan pronto, pensé que iba a volver después del año nuevo.

—Es muy bonita.

—Si, es bonita, es doce años menor que él.

—Pensé que tus padres estaban juntos todavía.

—Mis padres se divorciaron cuando yo tenía ocho años, no sabes cuanto me afectó eso, sufrí mucho porque tenía que viajar de Los Angeles hacia Pensilvania para estar seis meses con mi mamá y seis con mi papá, fue muy duro para mí.

—Lo siento mucho, de verdad siento mucho eso, lo bueno es que al menos tus papas te querían, en cambio a mí me rechazaron, no conozco a mi papá y mi mamá me abandonó cuando tenía cinco años.

—No sabia eso Meli —se lamentó mirándome con tristeza.

¿Si supiera lo doloroso y difícil que es crecer sin una madre y al lado de una persona malvada?... afortunadamente Dios llegó a mi vida, mejor dicho, yo le entregué mi vida a Jesús y fue ahí que nunca más me volví a sentir sola.

—Descuida, aún duele pero ya lo he superado con el amor y la gracia de Dios.

—Entiendo, admiro tu fe, admiro el hecho de que hayas superado algo así solo con fe; mi soporte en ese momento fue Michael y eso que tenia cinco años, solo él me apoyó en un momento tan difícil... oh... perdón por hablarte de él.—se lamenta.

Juro que siento mucho dolor en mi alma de saber que Michael y Joseph se hayan querido tanto y que ahora estén distanciados, me siento muy culpable.

—No, no me pidas perdón, al contrario me siento mal por ser la culpable de que ustedes se hayan distanciado, ¿no sería bueno si hacen las pases?

—Imposible, él tiene que pagar por todo el daño que te ha hecho.

—En verdad no deseo eso, solo quiero que ustedes vuelvan a ser tan cercanos como antes, por favor, intenta acercarte a él, hagan las pases.

—Él tiene que aprender a tratar a una dama como tal, te juro que lo desconozco, Michael no era así, él siempre fue un chico de buenos sentimientos, como te conté, él fue el único que me apoyó cuando mis padres se separaron, es por eso que desde ese momento se traumó al verme sufrir.

—¿Se traumó? ¿cómo así?

—Michael me apoyó en todo momento desde que mis padres se separaron, años después cuando ambos éramos adolescentes él comprendio que mis padres se separaron porque mi papá le fue infiel a mi mamá, él me veía sufrir tanto que me dijo que lo que más odia en la vida es la infidelidad, que él le iba a ser fiel a la mujer con la que se case hasta la muerte.

No sabia eso, ¿si Michael supiera que Scarlett le es infiel?... el día que se entere de eso...

—Entiendo, no hay peor cosa en este mundo que la infidelidad, pienso igual que él.

—Michael siempre fue un buen chico, todo un caballero con las mujeres, es por eso que no logro entender por qué ha cambiado tanto.

Sé que Michael siempre ha sido un caballero, no es que haya cambiado, el solo es así con las mujeres que él aprecia, no con alguien a quien considera inferior a él y peor con una ladrona, mentirosa y cínica... aunque... aquella vez que fuimos al McDonald's, él fue muy educado conmigo... no, no fue genuino, él actuó así porque estaba bajo los efectos de las drogas.

—¿En qué piensas Meli?

—En nada en especial, mira ahí viene la mesera con lo que ordenamos —dije para evadir la conversación, hablar de Michael me hace sentir muy incómoda, me lastima.

—Todo se ve muy rico —comenta mirando los platillos.

—Si, se ve delicioso.

Empiezo a comer, está muy rico esto, nunca he probado una comida así de deliciosa, bebo un sorbo de vino, la verdad es que mi paladar no tolera el alcohol ya que es muy fuerte, creo que no podré terminar lo que hay en la copa.

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Iré a dormir dentro de un momento, estoy muy cansada, este día fue muy agitado, he estado trabajando en mi laptop, también he estado revisando los balances de inversión e ingresos de la constructora, hay algo que anormal que he notado, los balances no cuadran, sé que tipo de fórmulas matemáticas se usan para estos cálculos y hay algo que está mal, falta cierta cantidad de dinero, el monto asciende a más de diez millones de dólares, he usado varias veces el mismo tipo de fórmula y siempre me da el mismo resultado, es como si alguien estaría desviando el dinero a alguna cuenta bancaria secreta ya que las que usan en la constructora están registradas, he revisado también esas cuentas y todas ellas están conformes, entonces... ¿dónde está esa cantidad de dinero que falta?...

De tanto revisar y revisar me ha dado dolor de cabeza, mañana seguiré, también tengo que ayudarle a Joseph a organizar una fiesta que él llama cóctel a la cual asistirán prestigiosos invitados, el evento será en el hotel Sheraton, ese hotel... ya no quiero recordar todo lo que Michael me hizo allí.

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Joseph ordenó que se realice una junta de los miembros del directorio, él va a dejar a alguien que lo reemplaze porque va a viajar con su papá a Abu Dabi, tengo todo listo y ordenado para la junta.

Ahí viene Joseph.

—¿Está todo listo verdad? —me preguntó abriendo su laptop, escribe en ella muy rápido, se nota que está apurado.

—Si, está todo listo.

—Vamos ya a la oficina del directorio —dice caminando hacia la puerta.

—¿Yo también debo ir?, ¿eso es necesario? —le pregunté, la verdad me incomoda mucho eso, sobretodo porque ahí estará Ben.

—Si claro, tú eres como yo mismo aquí, tu presencia es vital.

—Está bien, vamos —dije saliendo de la oficina, Joseph sale tras de mí.

Solo acepté porque Joseph ha hecho mucho por mí y me siento mal de no obedecer lo que él ordena.

Caminamos por el largo pasillo, llegamos a la oficina del directorio, Joseph abre la puerta, yo entro tras él.

¡No puede ser!... ahí está Michael, sentado al lado de su papá, me mira fijamente y de forma desafiante, ha venido vestido con ropa formal, de terno negro, camisa blanca y corbata roja, confieso que se ve más mayor y... muy atractivo, tanto que me hace tragar saliva, me tiemblan las manos, como siempre él me hace sentir que me desvanezco, me mira de pies a cabeza, yo lo miro fijamente también, nuestras miradas se quedan así, fijas por varios segundos...

Miro para otro lado, así será mejor, ya no soportaba su mirada fija, me siento igual de impactada y asombrada que el primer día que lo conocí y eso, precisamente eso es lo que no quiero sentir, esa atracción fatal e inentendible, no quiero sentirme atraída por él, odio sentir esto... me pregunto: ¿para qué ha venido?... algo me dice que esto me traerá muchos problemas, solo le pido a Dios que no permita que sufra, simplemente no soportaría un maltrato más de parte de Michael.