Narra: (Melina)

Michael y yo vivimos un bonito momento juntos

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"Mi estrella sombria ahora empieza a brillar regalándome su luz y su destello, una preciosa esperanza nace en mi corazón, al fin la oscuridad se va alejando y le da paso a la luz, a la mágica luz del amor"

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La mágica luz de amor de mi estrella sombría.

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Mientras me bañaba estuve pensando en que Michael tal vez me abrazó a modo de agradecimiento por el consejo que le dí, sé que fuí yo quién se acercó a sus labios, fuí yo, no fue él, por eso se molestó porque no me ha dado la confianza para besarlo, yo tuve la culpa de todo, no debí de acercarme tanto a su rostro; solo sé que lo amo y que ese amor siempre estará ahí para él, siempre, pase lo que pase, solo debo alejarme de él lo más que pueda para no salir lastimada.

Después de ponerme mi piyama, saco la foto de mi bolsillo, la miro, Michael parece un príncipe en esa foto, abro mi portaretratos, coloco la foto en el lugar que siempre estuvo vacío, ahora por fin tendré las fotos de las dos personas más importantes de mi vida conmigo siempre, me pongo mi portaretartos —sonrío ahora— me acuesto, el aroma de Michael viene a mi mente, saco la ropa que usé para ir al funeral, la huelo, aún huele a él, imagino que el perfume que él usa es muy potente que hasta ahora se ha quedado impregnado en la ropa, cierro los ojos, me relajo, ¡te amo Michael!

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Hoy es la segunda vez que llego tarde a la universidad, corro al ascensor, entro presurosa.

Parece eterno el tiempo que demora el ascensor en subir; llego al tercer piso, me acerco al salón, entro, instintivamente volteo a mirar a Michael, veo que él al notar que volteé a mirarlo, guardó algo en su bolsillo, se puso nervioso al hacerlo, por esa actitud imagino que lo que guardó son drogas, no puedo creer que siga consumiendo esas terribles y dañinas sustancias, buscaré la forma de robárselas, en lo que pueda evitaré que dañe su cuerpo drogándose.

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Veo que Michael está muy distraido leyendo, miro a mi alrededor y veo que todos están distraidos estudiando, el profesor también está distraido leyendo, ya sé lo que haré, me acercaré a gatas a la carpeta de Michael, para mi suerte él colgó su casaca en el respaldar de su asiento, eso me favorece para poder sacar las drogas de su bolsillo...

Muy despacio me empiezo a arrastrar, a gatas avanzo hasta la carpeta de Michael, nadie me ha notado, muy suavemente meto mi mano al bolsillo de su casaca, cierro los ojos, mi corazón está a mil ahora, siento algo, son unos sobres, los saco muy despacio, gracias a Dios nadie me ha notado, me regreso a gatas a mi carpeta.

—¿Te pasa algo Melina? —oí la voz del profesor Brown, me detuve de golpe en medio camino, ¡no puede ser!, ¡me ha pillado!

—No, no me pasa nada, se me cayó un arete y lo estoy buscando, por eso me agaché para ver bien —improvisé, me paro, menos mal las ideas vienen rápido a mi mente.

—Entiendo que estés buscando tus aretes, es solo que no está bien que dejes de estudiar por eso, te pido que vuelvas a tu lugar —el profesor me corrigió.

Todos, incluido Michael se quedan mirándome, siento pena, me regreso a mi lugar, ¡ay este amor! ¡las locuras que me obliga a hacer!

No puedo tener estas drogas conmigo, esperaré un momento más y luego iré al baño a botarlas al inodoro.

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Entro al baño, cierro la puerta, saco los sobres de mi bolsillo, veo que contienen un polvo blanco, de seguro es cocaína, boto los sobres al inodoro, bajo la llave, sé que un día Michael me agradecerá por lo que hago ahora por él.

Salgo del baño, me acerco al salón, ¿qué raro?... veo a unos hombres, están vestidos como de investigadores, otro es policía, me acerco a ellos, muy disimuladamente veo sus placas en sus cinturones... confirmado, son investigadores, ¿para qué habrán venido?

Entro al salón, veo a otro investigador, está parado al lado del profesor, veo que todos están sacando sus cosas de sus mochilas,¿qué está pasando?...

—Melina, ¿puedes por favor sacar tus cosas de tu mochila? —el profesor me pidió, ¿por qué quiere que haga eso?

—¿Qué pasa? ¿por qué tengo que hacer esto? —le pregunté al profesor sacando mis cosas de mi mochila.

—Se supo que venden drogas dentro de la universidad, los señores que ves aqui son de la "DEA", ellos solo quieren confirmar si eso es verdad.

¿Qué? ¿cómo se supo que se venden drogas? ¡no puede ser!, espero que Michael no esté metido en problemas, el otro día lo ví entregándoles a unos estudiantes unos sobres, ahora confirmo que les estaba vendiendo drogas, tengo miedo que lo descubran, espero que Michael entre en razón y deje de hacer eso, 《¡Dios mío ayúdalo por favor!》Exclamo en mis pensamientos.

Los investigadores buscan en las pertenencias de todos, uno de ellos va a buscar a la mochila de Michael, puedo notar que él se incomoda...

Menos mal los investigadores no encontraron nada en su mochila, ahora le piden su casaca, él se niega a dársela porque cree que encontrarán los sobres con cocaína ahí, los investigadores le piden de nuevo su casaca, él les da...

Cuando Michael vió que los investigadores no encontraron nada se soprendió, nunca pensé que lo iba a librar de que encuentren drogas entre sus pertenencias, de no haberlas robado para botarlas otra seria la historia, menos mal que Scarlett no ha venido porque tal vez le hubieran encontrado las drogas a ella y como Michael es su novio lo hubieran involucrado en la venta de ellas, espero que esto que está pasando lo haga entrar razón y deje de usar drogas ya que le traerán muchos problemas, no sé cómo es que se supo que se venden drogas en esta universidad, en lo que de mí dependa siempre le robaré esas drogas a Michael no solo para librarlo de que lo dañe si no de que se meta en problemas con la policía.

*******

Menos mal que los investigadores no le encontrarón drogas a nadie, respiro tranquila de saber que he librado a Michael de que lo involucren en la venta de esas sustancias, yo haría lo que sea por él.

Veo a Michael y Scarlett en la salida de la universidad, están hablando algo alterados, algo me dice que están hablando sobre lo que pasó hoy con esos investigadores de la DEA, quisiera irme pero no puedo porque tengo que decirle a Michael que hoy iré otra vez a su casa a hacer la maqueta y la redacción, no puedo creer que no haya podido hacerlo otra vez, ayer estaba super angustiada y perturbada por lo que pasó; lo peor de todo es que solo faltan cinco días para presentar el proyecto y no hemos avanzado casi en nada, ni hemos ido más que solo a tres lugares a investigar, que Dios me ayude a hacer un buen trabajo.

Michael y Scarlett siguen hablando, a él lo noto muy alterado, ella también se altera, están discutiendo, me gustaria saber por qué lo hacen, nunca los ví discutir, estoy más que segura de que el motivo de su discusión es por las drogas.

Scarlett se va, Michael la ve subir a su auto y mueve la cabeza, exclama malas palabras, sé que va a desfogar conmigo su rabia, si no estaria con el tiempo a las justas no me atreveria a hablarle cuando está asi de alterado, cierro los ojos, respiro profundo, trago saliva, 《¡Dios mío ayúdame!》Exclamo dentro de mí acercándome a él. Siento que estoy a punto de avivar el fuego y ocasionar un incendio al decirle a Michael que hoy iré a su casa otra vez.

—¡Hola Michael!, este... yo... haa, esta tarde iré a tu casa a hacer la maqueta y la redacción, estamos muy atrasados en nuestro trabajo, te aviso para que lo sepas y no caer de sorpresa, te pido por favor que me devuelvas mis cosas y mi celular.

Michael me mira, mira al jardín que está a nuestro lado, piensa, me mira de nuevo.

—Está bien, no hay problema, entiendo que tienes que hacer tu trabajo, no te preocupes que hoy mismo te devolveré tus materiales y tu celular —me habló amablemente sonriendo...

¿Qué?, creo que estoy soñando,¿Michael asi de atento?... no, de seguro me está tendiendo una trampa como el otro día que me secuestró, ese día actuaba igual de atento conmigo, ¿no será que en verdad me quiere matar?...

—Este... entonces nos vemos dentro de un momento, ahora iré a almorzar—le dije alejándome de él.

—¡Melina espera!, ¿te gustaría almorzar conmigo? —oí su voz tras de mí.

Creo que estoy soñando, ¿Michael quiere almorzar conmigo? ¿él asi de atento?... me pellisco las manos para sentir que no estoy soñando, me acerco a él... creo que todo esto es real, ¿qué le pasa?, ¿y si me quiere hacer algo malo?, no sé qué pensar.

—¿Te pasa algo? —me preguntó asombrado.

—No, no me pasa nada, estoy bien, este... la verdad es que... mejor ve a almorzar tú solo, no quiero molestarte, igual agradezco tu invitación.

—No quiero ir a mi casa, tampoco quiero ir solo a almorzar, además... quiero... quiero agradecerte por haberle dicho a mi papá que te estoy pagando por lo que haces por mí.

No sé por qué Michael está actuando asi de raro, confieso que me gusta que sea asi de amable y atento conmigo, aunque... tal vez me está tendiendo una trampa otra vez.

—No hay que agradecer nada, yo nunca causaria que tengas problemas con tu papá, solo que no está bien que le mientas, es tu padre, no es bueno mentirles a nuestros padres Michael.

—Si, sé que tienes razón, gasté más dinero de lo debido de la tarjeta de mi mamá y cuando mi papá me preguntó que en qué lo gasté se me ocurrió... ya sabes, ¡lo siento!

—Bueno, ya sabes que iré hoy a tu casa, te lo aviso para que no te enojes como ayer —le dije alejándome de él.

—¿No irás a almorzar conmigo? —me detuvo cogiendo mi mano, me estoy desvaneciendo ahora, creo que...

—¿Estás seguro de lo que me estás diciendo?

—Si Melina, claro que si, toma esta invitación como una manera de agradecerte por todo lo que has hecho por mí, incluso por haber evitado que Jennifer y Mike... ya sabes...

Creo que Michael está consumiendo algún tipo drogas que hacen cambiar de carácter, incluso de manera de ser, lo que no entiendo es de donde sacó esas drogas si yo le robé todo lo que encontré entre sus cosas; de seguro tiene más, me muero por ir con él a almorzar pero tengo miedo de que me esté tendiendo una trampa.

—La verdad es que no sé qué decir,¿estás seguro de querer almorzar conmigo Michael?

—Si claro, espero que aceptes antes de que me arrepienta.

—Bueno está bien, vamos, espero que no me estés tendiendo una trampa como el otro día, ¡siento decirte esto!... es solo que tú...

Michael se ríe, con lo que amo verlo sonreir, me mira.

—Si quisiera hacerte algo malo solo me bastaria con taparte la boca y manotearte cuando estés distraida y encerrarte en mi sótano para siempre—me dijo sonriendo, sabia que me quiere hacer algo, ¿y si lo que me dijo es verdad?, ¿y si me quiere secuestrar para siempre?, lo miro, me alejo de él—. ¡Solo bromeaba! —exclamó riéndose.

—Espero lo digas enserio.

—¡Ay Melina!... bueno, vamos a almorzar que muero de hambre.

Michael y yo caminamos juntos hacia la salida de la universidad, él desactiva la alarma de su auto, se coloca sus gafas de sol, abre la puerta, juro que siento algo raro en mí, algo que nunca antes he sentido, siento miedo, gusto y emoción a la vez, a veces siento que esto no es real, que todo es parte de mis ilusiones.

—Entra —me dijo señalando el asiento del copiloto.

Por más que quiera ir a su lado en el auto, siento miedo de hacerlo, mejor iré en el asiento de atrás.

—Yo iré atrás, asi me sentiré mejor —le dije abriendo la puerta de atrás, entro, me siento.

—Como quieras —me dijo entrando a su auto.

Hasta este momento siento que estoy soñando, mi mente no puede procesar la actitud tan atenta de Michael, no logro entender cómo es que él cambió asi de repente, tal vez se dió cuenta de que yo nunca le hice nada para que me odie, si no son las drogas las que han provocado que él haya cambiado asi de repente, lo más seguro es que él haya dejado a Dios tocar su corazón haciendo que cambie de actitud conmigo, solo espero que este bonito momento sea el inicio de una futura amistad entre él y yo, me muero por decirle que lo amo, qué lo amé desde el primer día que lo ví, ¡mi amor! ¡mi Michael!, al fin me está dando la oportunidad de ser su amiga, ¡lo amo!

Michael saca un cigarrillo, lo enciende, pone música.

—Espero no te moleste el olor del tabaco —me dijo volteando a mirarme.

No le diré que me molesta el olor ni que no está bien que fume para que no se enoje y no se arruine este mágico momento, si él sigue asi con esa actitud conmigo podré más adelante decirle eso.

—No, descuida no me molesta el olor.

—¿Qué te provoca almorzar?, te lo pregunto para saber a dónde ir.

¿Qué? ¿hasta me pregunta que qué me provoca almorzar?, la verdad es que no sé qué decirle, yo como de todo, no me provoca nada en especial.

—La verdad es que no me provoca nada en especial ahora.

—A mí me provoca ir a un McDonald's, hace tiempo no como pollo frito y esas delicias que ahí venden, amo sus sodas y sus helados,¿quieres ir ahí?

—Si claro, como tú quieras.

—No se diga más ¡vamos a un McDonald's!, dime algo Melina, ¿cómo lo haces para entender esas fórmulas y no aburrirte? —me preguntó empezando a conducir, cada vez me sorprende más su manera de tratarme, si no fuera porque me estoy mordiendo los labios juraria que estoy soñando.

—A mí me gusta estudiar y aprender, nunca me aburro.

—A mí no me gusta estudiar ni nada de eso, a mí me gusta la música, tocar en los clubes, ser Dj, es más, estoy a punto de iniciar mi carrera como Dj y productor, conocí a Thomas Gold en persona —me contó, ¿quién es Thomas Gold?, ¿si supiera que yo sé que quiere ser Dj?...

—Disculpa pero ¿quién es Thomas Gold?

Michael al oir mi pregunta se detuvo de golpe, creo que se molestó.

—¿No sabes quién es Thomas Gold? ¿es enserio Melina?

—No, no sé quién es.

—Él es un gran Dj productor, no es como David Guetta o los Swedish House Mafia pero su música es alucinante, él me dijo que impulsará mi carrera como Dj.

La verdad es que no sé quién es... Swedish... esos que él mencióno, solo sé que es fan de David Guetta y Green Day.

—¡Lo siento Michael pero no sé quienes son esos Swedish... Swedish...¿qué dijiste? ¿como era su nombre?

—Son los "Swedish House Mafia", son tres super Dj's de Suecia, ¿enserio no los conoces? ¿acaso no escuchas música o qué?

—La verdad es que yo no suelo escuchar música, no tengo un artista o canción favorita, siempre que puedo y tengo tiempo de escuchar música es de adoración y alabanza a Dios y me gustan un par de canciones de Selena Quintanilla.

—¿Te gusta el texmex? —me preguntó asombrado.

—No específicamente.

—Enserio tenemos gustos diferentes,¡si que los tenemos!, en fin, ahora que lo pienso... ¿te puedo pedir un consejo?, ayer me ayudaste mucho con tus consejos, ven aquí a mi lado para conversar mejor —Michael me señaló el asiento de su lado.

Mi corazón se detuvo por un segundo cuando él me dijo que me siente a su lado, ¡me muero!, creo que hoy es mi día, espero que no me esté tendiendo una trampa, ¡Dios mío protégeme!. Con mucho cuidado me paso a su lado, respiro profundo, me estoy desvaneciendo cada vez más, me tiemblan las manos, espero que él no note eso.

—Dime, ¿en qué te puedo ayudar?

—El otro dia, Thomas Gold, el Dj del que te acabo de comentar me dijo que tengo talento como Dj, me dijo que él tiene un estudio aquí en Los Angeles y que me guiará a hacer mi mejor trabajo, también me dijo que impulsará mi carrera como Dj y productor, la verdad es que su propuesta me cayó de sorpresa, primero me sentí alegre por eso pero estoy empezando a sentir que no seré capaz de ser un Dj profesional como David Guetta o los grandes Dj's, ¿tú que piensas? ¿acepto su propuesta si o no?

Juro que no esperaba lo que Michael me iba a preguntar, la verdad es que no sé qué decirle, yo no sé nada sobre Dj's o ese tipo de música que ellos hacen, no sé qué es una carrera de Dj y productor, lo único que sé es que tiene que centrarse en sus estudios y luego en eso de los Dj's, tampoco quiero desilucionarlo, lo único que le puedo decir es que siga a su corazón, sé que Dios habla a nuestro corazón y las decisiones del corazón son las decisiones de Dios.

—La verdad es que yo no sé nada sobre Dj's y eso de que tú me acabas decir, solo te puedo decir que sigas a tu corazón, déjate llevar por lo que él te dice, Dios le hablará a tu corazón, solo te aconsejo que sea cúal sea la decisión que tomes no descuides tus estudios, hazlo por tu papá —le dije lo que pienso.

—No esperaba que me dijeras eso Melina, te juro que no lo esperaba —me habló sorprendido, se queda pensativo, me mira, mi corazón está a mil ahora de tenerlo tan cerca a mí, no sé como me estoy conteniendo de no lanzarme a sus brazos, besarlo y decirle cuanto lo amo.

—Pídele a Dios que te guie hablando a tu corazón, solo déjate llevar por eso, no por lo que te digan los demás.

—Yo no soy creyente ni religioso pero últimamente he sentido que Dios si existe y que nos ayuda cuando le clamamos, tal vez si tienes razón.

—Te puedo asegurar que Dios no es una religión, él es un ser precioso que siempre ha existido, nos ama y quiere lo mejor para nosotros sus hijos —le dije poniendo mi mano sobre la suya, nuestras manos quedan apoyadas sobre sus piernas, no sé cómo me atreví a hacerlo, a poner mi mano sobre la suya, siento que corté el cable incorrecto, tal vez la bomba está a punto de explotar.

Michael mira mi mano sobre la suya, mira fijamente mi cara, piensa, me estoy desvaneciendo toda, esto es más que mágico, ¡ay mi amor! ¡mi Michael! ¡lo amo tanto!

—Espero que asi sea, ¡gracias por tus consejos!, lo pensaré muy bien para tomar una buena decisión —me habló incómodo quitando su mano de bajo la mía, lo que me impresiona es que no se haya molestado.

—No olvides tus estudios, no seria correcto —le aconsejé.

—No, no lo haré, solo espero que me ayudes con lo de la uni.

—Cuenta conmigo para lo que sea, no olvides que te hice una promesa.

—¡Gracias!, este... dime algo... ¿por qué?... ¿por qué haces todo esto? ¿lo haces por mí? ¿o lo harias por cualquier persona que te pida ayuda?—me preguntó.

¿Y ahora qué le digo?, si le digo que lo hago por él sospechará que lo amo, que estoy enamorada de él, no puedo decirle la verdad, no quiero arruinar este momento y que me odie por saber que lo amo, lo mejor será que le mienta.

—La verdad es que lo haria por cualquier persona que me pida ayuda, yo soy asi —le mentí, ¿si supiera que daria mi vida por él?

—¡Ha!, bueno, eso habla bien de ti... —me mira fijamente—. ¡Mejor vámonos ya!, me ruge la barriga del hambre que tengo —me habló desanimado, empieza de nuevo a conducir.

Michael no me dice nada, siento que le dije algo que le molestó, o tal vez se haya dado cuenta de que está conmigo, no me extrañaría que me bote de su auto en cualquier momento.

*******

Después de unos minutos llegamos al restaurant McDonald's, Michael se estaciona.

—¡Al fin llegamos! ¡muero de hambre! —exclamó saliendo de su auto, abre la puerta del otro lado para que yo salga, ¡vaya que está actuando raro!, nunca pensé que seria asi de atento conmigo—. ¿Has probado el sundae de moras, caramelo y chocolate? —me preguntó caminando delante de mí.

Nunca oí sobre ese "Sundae", ¿qué será?

—No, nunca lo he probado, ni siquiera sabia que eso existia.

—Pues ahora lo probarás, sé que te va a gustar —me comentó.

Entramos al lugar, está lleno, Michael elige una mesa que está al fondo, acomoda la silla para que me siente, él se sienta frente a mí, se nota que es educado, que es todo un caballero, solo que yo recién estoy descubriendo como es él realmente, una mesera se acerca a nosotros, nos da la carta del menú a cada uno, la verdad es que no tengo hambre, no podría sentir hambre con el hombre que amo tan cerca a mí, es más, me falta el aire ahora, tanto que no podría probar vocado alguno, Michael le pide a la mesera que le traiga un combo especial que contiene dos presas de pollo frito, patatas fritas tamaño grande y dos latas de soda, no sé de dónde saca tanto hambre.

—¿Tú qué deseas? —Michael me preguntó.

—Te agradezco mucho pero ahora no deseo nada, no tengo hambre, solo quisiera un vaso con agua.

—¿Agua? ¿quieres almorzar agua? ¿acaso no tienes hambre? —me preguntó asombrado.

—No, no tengo hambre, tal vez más tarde coma algo, ahora solo deseo agua.

—Pero tú no puedes dejar de comer Melina, te ves débil, tienes que cuidarte y alimentarte bien.

¿Qué? ¿Michael se preocupa asi por mí? ¿le importa que me alimente bien?, juro que cada vez me asombra más, hasta ahora siento que estoy soñando.

—Te prometo que me alimento bien es solo que ahora no tengo hambre.

—Y si no tienes hambre, ¿por qué aceptaste venir a almorzar conmigo?

¿Y ahora qué le digo? ¿que acepté venir a almorzar por estar a su lado y disfrutar de él porque lo amo?... ¡claro que no!

—Porque... porque... porque no quería ser grosera contigo Michael, me sentí mal de rechazar tu invitación, ¿qué diria tu papá de mí si se entera que desprecie una invitación tuya? —le mentí, me siento mal de hacerlo.

—Eso explica mucho, bueno, por lo menos pídete un helado —insistió.

¿Qué le pasa a Michael el día de hoy? ¿por qué se interesa tanto por mí? ¿tan drogado está?... o... tal vez se ha dado cuenta de que yo no le he hecho nada para que me odie, solo le aceptaré el helado porque no quiero ser grosera con él.

—Tal vez desee el helado pero más adelante, ahora solo quiero agua.

—Bien, al menos me acompañarás a almorzar.

Michael me mira, ¿si supiera que me desvanece esos bellos ojos verdes claro preciosos que tiene?, no sé qué decirle, no quiero decir algo que le moleste, me muero por abrazarlo, lo amo cada segundo más.

—¿Cuanto falta para terminar el proyecto? —me preguntó.

—Solo faltan cinco días, tenemos que terminar la maqueta y la redacción sobre lo investigado en la constructora de tu tío para poder ir a otra gran empresa o industria a investigar, tenemos muy poco tiempo, le pido a Dios que nos ayude a hacer nuestro mejor trabajo, espero que la situación de Mike y Jennifer no interfiera en su investigación —le comenté lo que pienso.

—¿Te refieres al embarazo de Jennifer?

—Si Michael, espero que ellos no descuiden el proyecto, el exámen y sus estudios por eso.

—Hablaré con ellos, no te preocupes—me dijo cogiendo mi mano que está sobre la mesa, estoy en shock ahora, me tiemblan las rodillas, me cuesta respirar, no puedo creer que Michael esté actuando asi de gentil conmigo.

—¡Gracias!, ¡muchas gracias!, no sabes el bien que le haces a tus amigos.

La mesera trae su pedido, a mí me trae mi agua.

—¡Bien! ¡pollo McDonald's! ¡bien! —Michael exclamó del gusto al ver el combo delante suyo, empieza a comer muy rápido, se nota que tiene mucha hambre, amo verlo celebrar como un niño.

—¡Disfruta! —le dije, bebo mi agua.

Michael no me dice nada, come con mucho gusto, disfruta tanto que hasta se chupa los dedos, bebe mucha soda, a veces siento que no debe de comer comida chatarra, no sé por qué le gusta todo lo que daña el cuerpo, lo bueno es que lo disfruta.

*******

—¡Estuvo delicioso! —Michael exclamó limpiando sus manos y su boca.

—Me da gusto que hayas disfrutado.

—¿Y tú no comerás nada? ¿ni un helado? —me preguntó.

No me provoca nada ahora, solo le aceptaré el helado porque me siento mal de despreciar su invitación.

—La verdad es que me gustaria probar un helado.

—Tienes que probar el sundae de chocolate, caramelo y moras, es el mejor helado del mundo, el más delicioso.

—Entonces ese quiero probar —acepté, es la primera vez que probaré ese helado llamado "Sundae"

Michael le pide a la mesera dos helados sundae, me asombra que después de comer tanto aún tenga ganas de un helado.

Mientras esperamos los helados él me mira, sonrie, mira a un lado, se nota que se incomoda, o quizás me parece, no puedo creer que sonria al mirarme, esto es un verdadero milagro, aún no asimilo que estemos asi, juntos y en buen trato de él hacia mí, ¡no lo puedo creer!, me siento bien ahora.

La mesera trae los helados, Michael se avalanza a su helado, a mí me pone frente a mí el mío, es un helado tamaño gigante, nunca antes ví uno asi, no sé si lo vaya a terminar.

—¿Te parece si tomamos nuestro helado mientras caminamos por ahí?—me propuso.

¡Hasta quiere caminar conmigo! ¡me muero!, espero que él siga asi de lindo para al fin confesarle mis sentimientos.

—Si claro, como quieras —acepté.

Michael se va a la caja a pagar, yo le devolveré el dinero de mi helado y el agua, me da pena que él pague algo que yo consumí, lo estoy esperando en la salida del restaurant, pruebo mi helado, ¡wow!, es muy rico, en verdad tiene sabor a moras, me provoca más, creo que lo terminaré, nunca antes he probado un helado así de rico, es más, nunca imaginé comer un helado así de grande y menos en un McDonald's

—Veo que te gusta el sundae de moras, sabía que te iba a gustar, es el mejor helado que existe —me comentó sonriendo, come su helado con mucho gusto.

—Si, me gusta, nunca he probado un helado tan rico como este, lo confieso—le dije probando el helado—. Dime,¿cuanto te costó el vaso con agua y el helado?

—¿Por qué lo preguntas?

—Porque quiero devolverte el dinero que gastaste en eso.

—No, no me tienes que pagar nada,¡tranquila!, yo te estoy invitando.

—Déjame hacerlo ¡por favor! —insistí sacando dinero de mi bolsillo.

—No me tienes que pagar, yo te estoy invitando, tómalo como una manera de agradecerte por todo lo que has hecho por mí.

—Bueno, está bien, pero la próxima vez yo invito, asi me sentiré mejor, bueno si es que... tú y yo... volvemos...

—¡Tranquila!, mejor disfruta de tu helado.

Solo porque no se enoje no le insistí en pagarle del agua y del helado y con lo delicioso que está este helado, Michael disfruta de su helado también.

—¡Está muy rico! —exclamó—.¡Vamos ya! ¡hay mucho por ver aquí!, esta zona de Los Angeles es muy bonita, conocerás muchos lugares.

—Está bien, vamos a esos lugares que dices, solo no olvides que tenemos que hacer el trabajo del proyecto —le avisé, siempre soy precavida con lo de la universidad.

—No Meli, ¡claro que no!, solo caminaremos un poco nada más, tenemos toda la tarde para hacer esas maquetas y... y eso que siempre haces.

¡Me quedé estupefacta cuando Michael me llamó "Meli", "Meli", asi solo me llama Todd que es mi mejor amigo, como mi hermano y... Joseph aunque a él no le dí la confianza para que me llame asi, ahora mi amor, mi Michael me llamó asi, ¡me muero!, estoy desecha por dentro, me tiemblan las manos tanto que se derramó un poco de mi helado, ¡me llamó Meli!, amo que me llame asi, ¡no lo puedo creer! ¡gracias mi Dios por este maravilloso momento!

—Estás derramando tu helado, ¿qué te pasa? ¿te sientes bien? —me preguntó asombrado.

—Si... estoy... bi... bien —titubeé de lo nerviosa que estoy.

—Bueno, vamos ya que la hora pasa—me dijo tomando mi mano.

Siento una corriente eléctrica en mi corazón al sentir su mano con la mía, me muerdo los labios para darme cuenta de que esto no es un sueño, me cuesta mucho respirar, siento que esto es la gloria misma, me desvanezco toda, creo que me voy a desmayar, no puedo con tanto, 《¡Gracias mi amor por tratarme asi de lindo! ¡te amo mi Michael》 Le digo en mi mente mirándolo.

*******

Cuando estábamos entrando a un mall, escuché que el celular de Michael timbra, él se detiene, suelta mi mano, se aleja un poco de mí.

—Espera, me están llamando —me dijo contestando la llamada, yo entre tanto respiro profundo, siento que estoy flotando en una nube color rosa ahora.

Mientras me voy relajando, escucho que Michael le dice al que está hablando nuestra ubicación, sonríe, creo que alguien vendrá a aquí, espero me equivoque, no quisiera que nadie arruine este bello momento.

—Las chicas ya vienen, les prometí que seria su guía turístico, no les puedo fallar, me gustaria llevarte a mi casa pero ya no hay tiempo, te prometo que mañana haremos el trabajo de la uni —Michael me dijo arreglando su ropa, se limpia la boca del helado.

¿Chicas? ¿qué chicas? ¿a quién se refiere?, creo que le tengo que decir adiós a este maravilloso y mágico momento que estamos pasando Michael y yo, mis ojos se llenan de lágrimas, no esperaba que este bello momento termine tan pronto.

—¿Qué chicas? —le pregunté con la voz algo ahogada.

—Camila y Gloria ¿las recuerdas?, son las bellas turistas que conocí en el hotel, tú también las conoces, me dijerón que me vieron en la portada de la "Fashion & Glamour", me llamaron porque quieren que les muestre los mejores lugares de la ciudad, ¿ves? ¡soy una celebridad! ¡al fin lo soy! —exclamó sonriendo.

¡Tenían que ser esas...! ¿por qué justo hoy? ¿por qué?

—¿Entonces te irás? —le pregunté aguantándome de no llorar.

—Si, las chicas vendrán en unos minutos.

Qué me queda más que resignarme y fingir que no me duele que se vaya.

—¡Que te vaya bien con ellas!, yo me iré a hacer mi maqueta, nos vemos mañana ¡Dios te bendiga! —me despedí acercándome a él.

—Te espero mañana en mi casa, las chicas me están llamando de nuevo,¡adiós Meli! —se despidió contestando la llamada, al menos me llamó "Meli".

Michael se aleja de mí, yo lo miro por unos segundos, dejo caer mis lágrimas, 《¡te amo!, ¡te amo mucho mi amor! ¡gracias por este maravilloso momento que me regalaste!, ¡gracias por cambiar de actitud conmigo!》 Le hablé mirándolo a lo lejos.

Si lo pienso bien es demasiado que Michael haya sido asi de atento conmigo, no sé qué lo hizo cambiar asi de repente, no lo sé, solo sé que si no estaba fingiendo esto es el inicio de algo que podria convertirse en una bella amistad o tal vez en... ¡una mágica y maravillosa relación de pareja!... mejor no me hago ilusiones,¡te amo Michael! ¡te amo cada día más!

Me hubiera gustado estar al lado de Michael toda la tarde pero esas turistas lo arruinarón todo, me hubiera gustado descubrir en qué habria terminado el mágico momento que acabo de vivir con él,¿tal vez en un beso?... de solo imaginarlo mi corazón se estremece, no sé por qué me siento cansada ahora, me siento en una banqueta que hay en el mall, respiro profundo, abro mi portaretratos, veo la foto de Michael, sonrío, también veo la foto de mi perrita, corren mis lágrimas, lloro, solo puedo llegar a la conclusión de que solo sé amar, amo y amaré a Luly como a una hija, como a parte de mi familia y ahora amo a Michael más que a mí misma, ¿cómo no valorar mi portaretratos si llevo con él parte de mí?

Ahora iré a la cafetería a trabajar hasta las diez u once de la noche, creo que era demasiado hermoso para ser realidad el hecho de que Michael y yo estemos juntos y en armonía toda la tarde, en fin, espero que él siga así de lindo conmigo.