ULTIMO CAPITULO

EL FIN DE LAS REALIDADES

DOS ALMAS SE UNIERON POR OBRA DEL DESTINO

EL RENACIO DE LA OSCURIDAD

ELLA CRECIO ENTRE LA LUZ TENUE

¿ERA HORA DE DECIR ADIOS?

HAILEY ROBERTS

- ¿Cuál es tu plan? – me senté en el césped tomando mis piernas.

- Esperar – sonrio de lado sentándose a un lado mío – No me queda mucho, lo puedo sentir, puedo sentir ese cansancio, esa sensación.

- ¿Quieres jugar? – me acomode mirándolo.

- ¿A que quieres jugar? – alzo una ceja con una sonrisa de lado.

- Yo hare preguntas y tu las responderás y viceversa para gastar el tiempo – mordí mi labio para luego soltar una risita al ver como asentía con diversión – empieza tu.

- Mhm... ¿Crees que soy guapo? – le puse mala cara y el se alzó con curiosidad.

- Tal vez, esa será mi respuesta porque luego se te sube – me crucé de brazos y el sonrio triunfante - ¿Por qué sonríes si te dije tal vez?

- Solo la evadiste por lo que contesta mi pregunta- hizo una vuelta con su mano – tu turno.

- Eso no vale, pero ¿Cuál era tu sueño? – mordí mi labio al ver como colocaba una mano en su menton.

- Mhm, mi sueño actual es verlos felices el resto de su vida – mi sonrisa recayó al oir sus palabras – mi turno ¿Qué ocurrió con tu empleo?

- Si... creo que salirme a la mitad de la entrevista no me dio buenos puntos, pero empezare a trabajar en una farmacia, creo que es una avance – tome una hoja que estaba tirada mirándola con curiosidad – mi turno... mhm ¿Has visto un atardecer?

- Obvio ¿Qué clase de preguntas son esas? – rio mientras yo reía bajando la cabeza.

Me sentia nerviosa, no sabia que preguntar, no queria que me dejara... no el... no ahora, pero supongo que era algo que desde un principio sabía que ocurriría.

-Hey mírame... aun sigo aquí, sigo a tu lado – su mirada me buscaba con esos ojos juguetones – aunque pase un siglo prometo estar junto a ti y sabrás que nunca rompo mis promesas – levante mi mirada con una media sonrisa – mi turno, esa vez ¿Por qué me besaste de niños?

- Nunca habia sentido ese cosquilleo y siempre que te miraba te quedabas en mi mente – susurro – recuerdo siempre esperar llegar a la casa de mi abuela con toda de la emocion del mundo... era lo que mas esperaba y ese día al saber que te ibas solo lo hice – respondí al instante sin pensarlo - tu turno

- ¿Quién diria que nos volveríamos a ver de esta manera? – pregunto incrédulo mirando al cielo.

Por un momento senti mis ojos empaparse – no quiero dejarte ir...

-Hey princesita, no llores por mi... no dejare que llores por mi – se incoó delante de mi mirandome como si de una bella flor se tratara.

- No quiero... aun no... no estoy lista – me abrace a mi misma tratando de ocultar lo que sentia.

Un beso calido en la frente me sorprendió, solamente cerre los ojos sintiendo aquellos labios sobre mi piel. Cuando se aleje abrí los ojos observando a aquella persona que me quitaba la poca cordura que me quedaba, aquella persona que tanto anhelaba.

-Siempre voy a cuidarte... - recargue mi cabeza en su pecho, no me importaba la lógica, no me importaba nada, solo queria que se quedara un poco más junto a mí.

- No quiero despertar...- solloce entre sus brazos acurrucándome cada vez más.

- Estará junto a ti en cada despertar, estaré contigo en cada anochecer... jamas estarás sola mi linda princesita- su abrazo se hizo mas calido y me apretaba contra el como su fuera algo que fuera a desaparecer.

- No quiero regresar... aun no, solo un poco más de tiempo – lo mire mientras el pasaba lentamente sus dedos por mis mejillas.

- Ya es hora de regresar... pero creo que podemos quedarnos un poco más – poso un delicado beso sobre mi nariz que solo hacia hacer sentir mi corazón cada vez más pequeño.

- No quiero volver, quiero estar aqui contigo - lo apreté mas junto a mi.

- Si te quedas ¿Qué ocurrirá con Dick? - su pregunta me tomo por sorpresa.

- Yo...

-¿Que ocurrirá con tu mamá?...Ya perdió suficiente...

- Solo...

-¿Quien cuidara a tu cachorro?...

-¡No se! - grite dejando todo salir - no lo se... tan solo queria tenerte un poco mas... ni mi abuela, ni a mi papá los pude volver a ver de esta manera... no es justo.

- Tienes una vida Hailey, yo solo soy un  recuerdo...

-¿Por que no me puedo quedar? Solo quedaba un maldito día solo uno para volver a verte...

-Sabes... - sus ojos azules me buscaron - cuando me marche no me pude despedir, ahora me regalaste esa oportunidad - acaricio mi mejilla con delicadeza - ese accidente no fue culpa de nadie o al menos yo no culpo a nadie y estoy feliz...- asintió mirandome con una sonrisa melancólica - feliz que pude volver a enamorarme de mi Hailey.

- Te amo... - susurre cerrando los ojos – se que no soy la mejor, se que hago todo mal – limpie mis lagrimas tratando de no llorar - ¿Por qué te tuviste que ir? No puedo olvidarte... por fin estábamos bien... aquí estábamos bien – mordí mi labio dejando salir pequeños jadeos – mi suerte me condeno a perderte, pero ¿Por qué? Tan solo tenia que retenerte un poco más... solo eso.

- Hailey... no soy real – me tomo de los hombros – me prometí que jamas te perdería, pero... el destino nos jugó mal – sonrio con sus ojos cristalizados – tienes que regresar y vivir... vivir por mi... vivir por ti. Te amo con mi alma, pero no extrañes algo que jamas ocurrió – abrí los ojos mirándolo.

El cielo de colores del atardecer cambio a uno oscuro con pequeñas estrellas iluminándolo, pequeñas estelas azules relucían con intensidad mezclándose con estelas blancas. Tome sus mejillas y lo mire, trataba de grabarme sus facciones, grabarme esos lindos hoyuelos, grabarme su sonrisa, grabarme sus ojos una última vez.

- ¿Te volveré a ver? – busque su mirada algo que me dijera que cuando despertara el estaría a mi lado.

- Algun día nos encontraremos, es una promesa – junto su meñique junto al mío – sabes que jamas rompo una.

- Te voy a extrañar Russell – lo abrace con toda la fuerza que me quedaba.

- Te voy a extrañar mi linda princesa – correspondió al abrazo de inmediato.

Mire al alrededor observando como todo se desvanecía lentamente, el se desvanecía de mis manos y el terror me gobernaba. Pose un ultimo beso en su mejilla pálida y senti como sonrio, pequeñas lagrimas caían siendo el unico sonido. 

-Te amo... susurre al sentir cuando desparecía entre mis brazos.

...

- ¡Hailey! - la voz de mi mamá resonaba detrás de la puerta. -¡apúrate o llegaras tarde!

Abrí los ojos, estaba en mi cuarto, todo estaba exactamente igual, nada habia cambiado a excepción de aquel dibujo. Me puse de pie tomando una hoja de un cuaderno.

"Un dibujo de sus ojos" pegue aquella hoja en la pared observándola con melancolía.

Me vestí con un suéter gris y unos pantalones azules, mi perrito me miraba desde la cama con una gran sonrisa. Abrí la puerta saliendo, mi madre estaba de lo mas contenta ya que la habían ascendido de puesto y las dos festejamos juntas. Momentos después me despedí ya que era un día importante. 

12 de Diciembre... Nuestra historia era como de cuentos, lo conocí de niños y fue mi primer amor, tiempo después el tuvo que marcharse pero no dejamos de estar en contacto siempre de alguna manera encontrábamos la oportunidad para por lo menos dar señales de vida. Cuando nos enteramos de su enfermedad por un momento senti mi mundo caer, al ver como se rendia, al ver esos ojos tristes y cansados. El día de su regreso yo estaba en un viaje de la escuela por lo que llegaría 4 dias después de su llegada... tan solo quedaba uno cuando recibí la llamada que se habia marchado... que me habia dejado. Esa noche llore, patalee, grite deseando que volviera, teníamos un futuro planeado... si tan solo ese ultimo día le hubiera dicho cuanto lo amaba. 

El panteón tenia un año que no lo visitaba por miedo al saber que no volvería a verlos, 3 de mis personas favoritas dormían aquí. La tumba de mi papá y abuela estaban juntas, me inque colocando un par de flores los cuales les encantaban... luego camine rumbo a su tumba. Y ahí estaba Henry Russell, solo un día quedaba para volver a verlo... tan solo un día.

***

-No me iré un siglo, volveré es una promesa – sonrio dando un beso en mi mejilla - tan solo solo me iré unos meses mi linda princesa.

- Si no vuelves te pateare el trasero - sonreí al sentir el abrazo calido que me brindaba - además tengo el video tuyo bailando asi  si no vuelves te chantajearé con eso - carcajeo marcando su hoyuelo tan hermoso. 

-¿Sabes que me encanta tu sonrisa?  ¿La empacarías para mi?- acomodo su cabeza arriba de la mía posando ligeros besos sobre ella - no te dejare, volveré hasta como un estúpido fantasma pero prometo volverte a ver...

- No digas eso - lo empuje con una sonrisa - yo se que siempre estarás junto a mi y si algun día nos separemos te seguiré porque me hechizaste desde la primera vez que vi tus ojos.

- Que cursi eres - hizo una mueca - me ahogo en azúcar - jugaba con mi mano mientras reía.

Sus ojos azules resplandecían gracias a la luz de sol dejándome ver el mismo cielo en ellos, algunas veces esos ojos mostraban una tormenta pero si ponías atencion podías ver el universo dentro de ellos.

- Todo estará bien... aun este lejos te amare de cualquier manera... - susurro en mi oido.

****

-Dijiste meses ... no un siglo... solo me tenias que esperar un día mas - solloce colocando un video - aun guardo el video ... por favor ¿Puedes volver?

Toby se acurruco contra su tumba y yo me agache posando un beso sobre el frio cemento.

-Todo estará bien... te amare hasta el final de mis dias... te prometo que todo estará bien...

FIN