Capítulo 8- Absolem, el sabio y la oruga azul.
Después de estar caminando por un par de minutos por ese atroz lugar, se comenzaron a acercar a un especie de cueva la cual estaba bastante simétrica, eso hizo pensar a Aki de que este lugar estaba siendo habitado por alguien conocido de Sam y Tod, pero todavía tenía que asegurarse de eso. Salió de sus pensamientos al darse cuenta que estaban parados enfrente de una puerta enorme de unos dos metros de altura y al estilo rústico y viejo, Sam toco la puerta haciendo una especie de código secreto con cada toquido
-Bueno, esta es la caverna de Absolem, el sabio- dijo Salam, enseñándole su más brillante sonrisa para poder calmarla- No te preocupes todo estára bien
-Salam, ese idiota ni es sabio ni es un maldito santo- Toder tenía el ceño fruncido por las palabras de ánimos que proporciono su compañero- Así que ya deja de ilusionar a esta niña
-¡Oye, yo no soy una niña!- Aki se separó de el y lo señalo con mucho enojo ante esas palabras que siempre salían de los labios carnosos de su madre- ¡Yo tengo casi la misma edad que ustedes!
- ¿Así niña? ¿Y cuando supiste nuestra edad?- Al chico pelinegro se le notaba una sonrisa sarcástica y llena de enojo, posiblemente la causa de eso era los problemas que se hacían más notorios con cada paso que daban o por el mismo lugar tan oscuro- ¿Y que edad tienes?
-Bueno...solo lo deduci pero se ven de mi edad y yo tengo 16- la chica aparto la mirada ya que prefería no pelear en esos momentos y menos con sus salvadores, pero dada las palabras sarcásticas de aquel chico, no podía evitar sentir un gran enojo.
-¿16? Pff....¡jajaja!- Tod se cubrió el rostro y comenzó a reír con fuerza, como si lo que la chica hubiera dicho, tuviera gracia, pero claro que Akire eso le enfadaba en cierto sentido- Sabes, nosotros tenemos 18 años. Deberías informarte mejor.
- Tod, ya basta,- observo su amigo comi si este estuviera apunto de meter la pata- tenemos cosas mas importantes que hacer y no podemos desperdiciar el tiempo en peleas estupidas- Sam observo a su amigo de un modo enojado, aunque realmente solo fingía ese enojo para poder protegerlo, ya que sabia que la arrogancia de su amigo podría matarlo- Tiempo, tiempo...ya es tarde- susurro repetidamente para di mudmo como un modo de calamarse
Pero antes de que cualquiera de los tres pudiera protestar mas, la enorme puerta de dos metros comenzó a abrirse con un fuerte sonido y dejando un túnel al interior que era bastante oscuro y que tenía olores fétidos, como muerte y sangre, si uno prestaba más atención a ese lugar, podía verse que habían huesos en el suelo y colgando, sin embargo Akire noto que no todos esos huesos eran de humanos, ya que habían algunos con unas formas bastante peculiares y tenebrosas, pero prefirió evitar observarlos ya que le causaba cierto escalofríos por todo su cuerpo. Sam les ordenó a avanzar y así lo hicieron, pero cada paso que daban, resonaba con un fuerte eco y con crujidos al pisar los huesos de aquellas personas, tal vez eran gente que murieron entrando a ese lugar o gente que posible que quizo declarar su propia muerte ahí. Cada vez más se sumían a la oscuridad que aquel lugar, del que posiblemente no haya retorno, o eso es lo que creía la chica hasta que comenzó a escuchar música en vivo con diferentes instrumentos que ella conocía, habían violines, armónicas, pianos, trompetas y una infinidad de exquisitos sonidos que hacían que los oídos de uno bailaran; pero antes de que la chica reaccionara habían llegado a una habitacion inmensa, donde podrían entras mas de 200 personas, el lugar estaba lleno de gente bailando, tocando instrumentos y comiendo, al parecer era una fiesta, las paredes era de piedra, pero el suelo era de mármol, habían varias estatuas de gárgolas que causaban una gran incomodidad, ya que pareciera como si te observarán a cada momento de tu estancia; habían grandes comedores, donde la gente reía y hablaba con sus colegas o familias, también podías notar que del techo colgaban candelabros que era de un gran estilo victoriano que se encontraban en gran conservación. Pero lo que mas llamaba la antencion, era el enorme sofá que se encontraba hasta el fondo, estaba adornado con joyas, dinero, entre otras cosas llamativas y en esta había una persona que no dejaba de observarlos.
-Creo que ya nos estaba esperando- Toder suspiro con pesadez al notar que esa persona no dejaba de observarlos de un modo bastante divertido, posiblemente había tenido unas diferencias con el, ya que su actitud era bastante molesta.
Comenzaron a cruzar empujando a la gente con mucho cuidado para no causar peleas y menos cuando ya habían bebido bastante, Aki mantenía el paso con velocidad ya que Tod y Sam eran bastante rápidos e impacientes al momento de proponerse algo, pero mas que nada por su fuerza y agilidez era lo que dificultaba poder seguirlos y la gente de ese lugar no ayudaba para nada. Antes de que pudieran darse cuenta ya es encontraban frente a ese sofá y a esa persona con aquella sonrisa divertida, aunque parecía un chico joven de cabellos azules y brillantes a causa de algún producto de belleza, ojos verdes como hojas recién nacidas, piel bastante pálida, se notaba que sus rasgos eran como las de un muñeco de porcelana, delicados pero resistente y ropa muy llamativa para sus gustos, tenia una especie de cigarrillo de un fotma extraña y una amplia sonrisa cargada de emoción
-Absolem, el sabio los estaba esperando, pero pueden llamarme... La oruga azul- la persona de la sonrisa burlona finalmente hablo y dio una probada a su cigarrillo
Y pues hasta aqui el capitulo de hoy. 7u7 espero les haha gustado y disfrutado, al igual que muchas gracias ñ.ñ
¿Que les parecio las aventuras por el mundo de la oscuridad?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro