Por ciertas cosas tuve algunas complicaciones con este capítulo, así que anule su publicación.

Ahora ya lo puedo traer sin tener el mismo problema. (o eso espero)
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Sin apenas notarlo las cinco semanas se habían ido volando.

Bajo la supervision de Goku y la co-supervision de Suna-Le (durante la semana de entrenamiento en el caso de Suna) las cadetes habían encontrado una enorme convicción para hacerle frente a su duro entrenamiento.

Poco a poco iban preparando sus cuerpos y sus mentes para afrontar la complicada vida de una Pandora. El entrenamiento físico del instructor Son Goku era en cierta medida fuera de lo común, pero resultando bastante efectivo.

La peculiar personalidad del instructor había influido bastante en el desempeño de las cadetes para que estuvieran motivadas y determinadas a superar los diferentes desafíos que se les presentaran.

Bastante alejado de la habitual actitud "malvada" de los instructores militares Son Goku había adoptado mantenerse justo como era él, alguien carismático y con quien resulta sencillo empatizar, pero siendo bastante estricto en el entrenamiento.

Repetir ejercicios desde el principio, incluso quedando castigadas sin poder comer, eran algunas pruebas de ello.

De a poco las 12 cadetes aprendian cuál debía ser su objetivo como Pandoras, si no estaban preparadas para lo que se les presentara solo les podía esperar una sola cosa, morir, la asistente Suna se los había dicho en reiteradas ocasiones.

Además gracias a su instructor iban aprendiendo lo que él quería enseñarles, en lugar de simplemente tener la certeza de que iban a morir, debian tener la esperanza de que podían conseguir un mejor futuro, pero que debían esforzarse para poder conseguirlo.

El tiempo que pasaron bajo la supervision de su instructor consiguió que todas desarrollaran una profunda admiración por él.

Su fuerza fuera de lo común para ese mundo, su manera de enseñar, su actitud, para ellas eso lo volvían alguien digno de admirar.

En el tiempo que estuvieron entrenando consiguieron los avances deseados, sus desempeños en los ejercicios básicos eran simplemente magníficos, el crecimiento que llevaban estaba por encima de lo que se esperaba comparándolo con otros grupos. Siendo que hasta las cadetes menos prometedoras había conseguido causar buenas impresiones en las demás instructoras.

Dado los buenos avances que mostraban en los entrenamientos al rededor de la cuarta semana de entrenamiento Goku le había aumentado el peso a las camisetas ponderadas que les había dado, este había sido un desafío bastante duro para las chicas pero con la esperanza de poder conseguir un mejor futuro afrontaron el desafío con determinación, aunque unas mostraban más ánimos que otras.

Aunque solo tenían una duda al respecto...

¿Como y cuando habia sucedido el cambio de ropa?

Justo cuando despertaron se habían encontrado con que sus camisas pesaban aún más, y ni siquiera las chicas que estaban de guardia tenían una respuesta.

Su instructor en ningún había entrado por la puerta esa noche.

Con más preguntas que respuestas simplemente no cuestionaron nada al respecto, por norma no tenían ningún tipo de potestad para preguntar o cuestionar el entrenamiento de su instructor.

Las últimas dos semanas del entrenamiento fueron las más complicadas para las chicas, muy aparte de tener que cargar cinco kilos más, la rutina de su entrenamiento había tenido ciertos cambios, volviéndose aún más complicada, la cantidad de ejercicios, el tiempo que entrenaban, todo había aumentado.

En ese tiempo las detractoras de Goku no tuvieron más remedio que reconocer de mala gana el buen trabajo que el saiyajin estaba haciendo, sin contar a las cadetes más prometedoras de cada sección, en general el grupo de Goku era que mejores resultado estaba mostrando, los resultados hablaban por si solos.

Por lo que no les había más remedio que dejarlo en paz y que siguiera con lo suyo.

Al final el último día había llegado, la prueba que era el último obstáculo para convertirse en Pandoras había llegado.

Una prueba demasiado peligrosa, tanto que si llegarán a cometer un solo error, iban a morir.

..

..

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Era el último día del entrenamiento básico para las cadetes, justo en este momento se encontraban en un barco el cual navegaba sobre una zona especial preparada por Genetics para las pruebas y prácticas de las Pandoras, absolutamente todas llevaban trajes especiales para el buceo.

- Ésta es la última parte de su entrenamiento chicas, su objetivo será colocar bombas anti-novas en los lugares que ya les explicaron - dijo Goku señalando con su dedo una pizarra donde estaba el plan que debían seguir las chicas.

- A pesar de que la prueba es muy peligrosa, les pido que controlen sus emociones y no se dejen dominar por el miedo, ustedes tienen las capacidades para salir victoriosas de esta prueba, confío en ustedes - declaró sonriendoles con confianza, a lo que once chicas asintieron con determinación.

- "Vaya~, saber que esto era el final te tomó con la guardia baja" - pensó Elizabeth mientras daba una leve sonrisa nostalgica. A pesar de lo complicado que era el entrenamiento, gracias a la carismática forma de ser de su instructor no resultó tan difícil soportar las extenuantes rutinas.

Siendo completamente honesta, iba a extrañar a su instructor.

- ¿Te sientes bien Rachel? - la rubia británica se giro para mirar a su amiga de rusia, quien no se veía especialmente bien.

- E-estoy b-bien no ha-hay de que preocuparse - respondió forzando una sonrisa mientras su cuerpo sufría unos pequeños espasmos.

Estaba mintiendo, no estaba bien.

Por desgracia a Rachel le había tocado hacerse cargo de la última guardia nocturna, además de que tuvieron que levantarse muy temprano debido a que tenían que prepararse para la prueba.

Estaba bastante agotada y no se sentía muy bien, probablemente estaba en proceso de desarrollar una pequeña pero molesta enfermedad.

Elizabeth miró a su amiga no muy convencida de sus palabras, no hacía falta tener un postgrado en medicina para saber que no estaba en condiciones de hacer la prueba.

- Explicaselo a Goku-sensei, seguramente encontrara alguna solución - dijo mientras tomaba de la mano a su amiga mirándola a los ojos.

Cuando Rachel estaba por responder un grito había se hizo escuchar cortando cualquier posibilidad de explicar su situación.

Lo siguiente que vieron fue que Goku entraba a la sala de operaciones del barco mientras una Pandora se quedaba con ellas para explicarles por última vez cual era su objetivo en esta misión.

El objetivo era "simple".

Su misión era trasladar y comandar explosivos subacuáticos antinova, su misión será operarlos para que estén en los lugares designados y dar el aviso para que comience la cuenta regresiva para posteriormente retirarse a un lugar seguro para no sufrir por la explosión.

- ¡Metanse en la cabeza la misión! - grito la pandora.

- ¡¡Si señora!! -

Mientras con Goku.

- Dado que es su primera vez en misiones de este tipo le dejaremos el mando a alguien más, ¿algún problema? - pregunto de forma neutra una chica que estaba operando la computadora que mostraba la posición de las chicas además de controlar los explosivos.

- Ninguno - negó Goku sintiéndose aliviado, ésto se veía realmente complejo como para dirigirlo él mismo.

Pocos minutos después la prueba había dado inicio.

- Comenzando de sección bombardero subacuático #28-13 - dijo la operadora.

- Están organizadas en cuatro grupos de 3 y cada grupo lleva una bomba delfin, deben colocarla en el lugar designado para luego activar el temporizador de 8 minutos, por último deben emeger y buscar un refugio para terminar -

- Cada cilindro tiene 20 minutos de oxígeno, rapidez y precisión son elementos esenciales para la misión -

- Recuerden chicas, mantengan la calma y no se dejen llevar por el miedo, ustedes pueden - hablo Goku a través de un micrófono, asintiendo todas.

La misión había transcurrido completamente bien, absolutamente todos los grupos se encontraban colocando y programando las bombas.

- ¡Equipo A en posición! -

- ¡Equipo B en posición! -

- ¡Equipo C en posición! -

- ¡Equipo D, listos! -

Todos los grupos reportaron su posición esperando la siguiente la orden.

- Preparativos para colocar bombas completado - dijo Elizabeth girando a ver a sus dos compañeras.

- OK!, ¿Estas bien Rachel?, vayamos con cuidado.... ¿Rachel?.... - llamo de nuevo al no recibir una respuesta.

- ¡¡Rachel!! - al no recibir una respuesta alzó la voz a su compañera que parecía estarse quedando dormida.

- ¡¿Eh?! - exclamó Rachel algo confundida.

- ¡¿Estás bien?! -

- P-perdoname, lo siento mucho - exclamó nerviosa tomando una de las puntas de la bomba.

- ¡Las bombas están en su sitio! -

- ¡Permiso para activar las bombas delfin! -

La voz de las chicas se hizo presente en el centro de control haciendo que la operadora verificará que todo estuviera en orden.

- ¡Muy bien, permiso concedido! - al decir esas palabras un temporizador de 8 minutos se hizo presente.

- ¡¡8 minutos para la detonación, abandonad el lugar y buscar refugio inmediatamente!! - ordenó la operadora a través del radio comenzando así la cuenta regresiva.

Todo era visto por el saiyajin que mantenía un semblante relativamente serio, al estar manejando bombas que eran mortales para ellas comprendía que éste asunto requería toda su atención.

- "Vamos, confío en ustedes" - pensó mientras estaba atento a alguna señal de peligro.

De regreso con el equipo D.

- ¡Mision cumplida, andando! - exclamó una de las chicas mientras comenzaba a nadar para ascender a la superficie junto a Elizabeth, pero ésta última se detuvo abruptamente para regresar su vista al lugar donde colocaron los explosivos.

- ¡¿Qué crees que haces?!, ¡hay que irnos!! - exclamó la otra chica girando a ver a la rubia del conglomerado inglés.

- ¡Espera un minuto!, ¡Rachel, ella... - no alcanzó a terminar viendo como la joven de Rusia parecía estar cerca de la inconsiencia.

- ¡¿Estas bien Rachel?! - grito Elizabeth expresando su preocupación, tal grito hizo que la joven rusa saliera de su transe dejándola medio desorientada.

- Ah... Perdón... Ya voy... - contesto con cierta debilidad mientras se apollaba en una especie de tubo alarmando a Elizabeth.

- ¡¡Espera, no toques.... - la rubia no fue capaz de terminar sus palabras.

- ¿Eh? - el tubo sobre el que se sostenía se había roto, callendo ella junto a los restos directo al fondo del agua.

Y Elizabeth solo miró con preocupación aquella escena.

Mientras en la sala de control la operadora preguntaba repetidas veces tratando de entablar comunicación con el equipo D.

De la nada había perdido la comunicación solamente recibiendo una señal estática, todo bajo la atenta mirada del saiyajin, que cerró sus ojos concentrándose en buscar la presencia de sus alumnas.

Los escombros comenzaban a descender haciendo que la visión de ambas chicas de hiciera más clara, además de no correr ningún peligro de ser heridas.

- ¡¿Qué se supone que haces?! - preguntó Alice viendo cómo Elizabeth se acercaba a los escombros.

- ¡Hay que irnos! -

- ¡No, Rachel, ella.... - la chica no fue capaz de terminar su frase viendo la complicada situación de su amiga.

Estaba en medio de los escombros con su pierna atorada en estos, imposibilitandole por completo cualquier oportunidad de escapar.

Y la mirada de pánico en el rostro de la pobre Rachel era prueba de cuán complicada se había tornado la situación, el temporizador seguía corriendo, su nivel de oxígeno estaba cerca de terminar, y físicamente no tenía nada que hacer para liberarse.

- ¡Equipo D! ¡Equipo D! ¡Respondan! - un mensaje llego al intercomunicador de Elizabeth.

- ¡Equipo D copia el mensaje! -

- ¡¿Qué sucede?! - la mujer exigió una respuesta con enojo en su tono.

- Una estructura se derrumbó y los escombros tienen atrapada a Jhohansson - Elizabeth explicó con demasiada preocupación.

-... -

- Solicito permiso para.... -

¡Retirada!

- ¡¿Qué?! - cuestionó exaltada.

- ¡Retirada, deja a Johansson y busca un refugio! -

Las frías palabras de la operadora habían dejado completamente helada a la chica.

No sabía que hacer.

- E-elizabeth... Retirate... No te preocupes por mi, e-encontraré una manera para salir de a-aqui - la débil y entre cortada voz de Rachel atrajo la atención de la rubia sacándola de su trance.

Elizabeth sólo veía con una mirada complicada a su amiga, por su tono, parecía estar resignada.

- Eso me gustaría poder decir.... Lo que hay que hacer... Es que... Yo debo ser dejada - alzó su mirada revelando unos ojos que estaban al borde del llanto, mientras que Elizabeth sólo miraba con incredulidad la escena.

- Te falle a ti, le falle a Goku-sensei y me falle a mí misma... - las lágrimas comenzaron a salir de sus mientras su cuerpo temblaba, miedo, impotencia, eran las sensaciones que más predominaba en ella justo en ese momento.

- ¡Deja de decir esas cosas! - grito la rubia con molestia.

- ¿Eh? - lo siguiente que vio Rachel fue como Elizabeth se acerco al escombro que la mantenía cautiva tomandolo con sus dos manos y haciendo su máximo esfuerzo físico posible.

Se reusaba totalmente a la idea de abandonar a Rachel, y haría todo lo que le sea posible para tratar de salvarla.

- "¡Si no fallo volveremos las dos!!" - se repetía una y otra vez en su mente mientras trataba de mover el escombro.

- "¡Debo ir a ayudar!" - pensó con seriedad la chica de Francia mientras miraba como su compañera luchaba desesperadamente por salvar a Rachel.

Cuando se disponía a ir a ayudarla una voz hizo que se detuviera en seco.

- "¡Vete de aquí Alice!" - con sorpresa y cierto nerviosismo giro su cabeza para ver por detrás ella encontrándose con una extraordinaria sorpresa.

Mientras con Elizabeth ella aún no se rendía, no aflojaba ni un solo instante y seguía haciendo fuerza, pero, por más que lo estuviera intentando, no conseguía nada

- "¡No logro moverlo ni un solo milímetro!!" - grito en su mente mientras que en su rostro se notaba el gran esfuerzo que estaba realizando junto a su enorme preocupación.

¿Qué podía hacer?

Esa pregunta no dejaba de rondar en su mente, pero sólo sabía que rendirse y dejar a Rachel no era una opción.

- "¡Vamos, vamos!" - los brazos de Elizabeth temblaban al ya no soportar.

Pegando un enorme grito interno ejerció aún más fuerza, donde por sorpresa el escombro comenzaba a moverse.

- "Has hecho un buen trabajo, pero deja que yo me encargue" - una voz que reconocería donde fuera sonó en su cabeza, girando miró con incredulidad que se trataba de su instructor.

- "¡¿Qué hace aquí sin equipo de buceo?!" - pensó realmente preocupada

Y ahí estaba Son Goku, en lo profundo del lugar, en una profundidad que requería obligaríamente traer una equipo especial para el buceo, pero careciendo de éste.

- Se-sensei - hablo Rachel mientras una mirada llena de esperanza aparecía en ella.

Goku sin perder tiempo tomó con sus manos los escombros para luego hacerlos pedazos usando su propia fuerza, liberando a Rachel la cual ya no corría ningún peligro.

- "Esa demostración de fuerza.... Siempre creí que sólo una Pandora sería capaz de algo así" - pensó mientras observaba con admiración tal demostración de poder.

¿Como era posible que un hombre tuviera esa fuerza?

Esa era la cuestión.

- Sensei, s-si vino - Rachel se apoyo en su maestro mientras le veía con la mayor felicidad que le era posible.

Se habia salvado de morir ahogada, estaba tan contenta que nada podría...

"Cinco segundos para la explosión"

Ese aviso les cayó como un balde de agua fría a ambas chicas, Goku completamente alarmado por la seguridad de ambas tomo por la cintura a Rachel usando su brazo derecho, e hizo lo mismo con Elizabeth usando su brazo izquierdo comenzando así a ascender a la superficie a gran velocidad

- "¡¿Cómo es posible que vayamos tan rápido?!" - la rubia miraba incrédula como se alejaban de las profundidades a una velocidad inhumana, estaba segura de que ni el mejor nadador/buceador del mundo era capaz de algo así.

El saiyajin aumento lo suficiente su velocidad como para emeger a la superficie, y justo después de salir una enorme explosión ocurrió justo atrás de ellos levantando fuertes cantidades de agua.

Haciendo que las chicas y operadoras miraran con incredulidad y horror aquella escena.

- Uuuf, eso estuvo cerca - suspiro Goku mientras iba descendiendo del aire hasta tocar la superficie del barco.

- ¿Se encuentran bien chicas? - pregunto mientras bajaba con cuidado a ambas.

Las dos estaban en completo shock, podían apostar sin miedo a equivocarse de que por un momento estuvieron suspendidas en el aire.

- ¿Les sucede algo? - pregunto mientras miraba completamente confundido sus reacciones.

- "¿Él me habló bajo el agua mientras aguantaba la respiración?" - se preguntó la rubia aún en el mismo estado.

- ¿Chicas? -

..

..

Horas más tarde.

- Haber completo con éxito las seis semanas de entrenamiento es algo de que es estar orgulloso -

En una enorme sala se estaba llevando a cabo una ceremonia de conmemoración para las cadetes que habían completado con éxito las seis semanas de entrenamiento.

- De ahora en adelante señoritas serán asignadas a Genetics donde seguirán el camino de las respetables
Pandoras -

Absolutamente todas las cadetes estaban presentes, por fortuna todas las que se habían inscrito como candidatas a Pandoras fueron capaces de superar el Entrenamiento Básico.

Todas a excepción de una joven chica de lentes que tuvo la desgracia de perder la vida en un accidente, pero que gracias a su valiente acto un pueblo lleno de civiles inocentes había sido salvado.

Tanto que su acto había sido reconocido por los altos mandos.

Después de la ceremonia.

En un salón donde se reunían los instructores se encontraba el saiyajin en compañía de dos Pandoras, una de ellas se encontraba en un computador mientras el Son y la otra mujer sólo observaban.

- Gracias por ayudarme con los datos, no se me dan tan bien estas cosas - dijo Goku con algo de nervios mientras se rascaba la nuca.

- Después de lo injustamente mal que te trate al principio ayúdarte así no es ni lo mínimo que debo hacer - dijo la mujer girando a ver al saiyajin, tratándose nada más y nada menos que de la instructora Park.

- Yo también te debo una disculpa, te subestime tanto y al final fuiste quien mejores resultados consiguió - se disculpo la otra con una expresión nerviosa.

Goku simplemente dijo que no había problema, no las odiaba ni nada, además sería extremadamente complicado que él llegara a odiar de verdad a un ser vivo.

- ¿Y que se supone que son estas cosas? - pregunto Goku alzando un conjunto de 12 papeles perfectamente apilados y amarrados.

- Son cartas de tus estudiantes -

- ¿Cartas? -

- Así es, en ellas tus alumnas expresaran lo que piensan y sienten de ti, además, año con año mientras dure su servicio te seguirán llegando expresando como les ha estado llendo - contestó la mujer de apariencia más amigable.

- En el caso de esta señorita sus estudiantes se irán guardandole mucho rencor - hablo de nuevo con diversión, para luego verse como Park ponía una cara melancólica.

- Perdonate de una vez, no es tu culpa ¿sabes? - dijo la mujer mirando a Park.

Goku simplemente se quedó escuchando en silencio la conversación al igual que cierta "invitada" que se encontraba detrás de la puerta.

Park:

Aquellas chicas fueron el primer grupo del cual me hice cargo...

Fueron totalmente barriadas hace dos años y me parte el corazón que ocurriese por mi responsabilidad.

A esas jóvenes yo las mate...

Una Pandora donde sea, cuando sea debe arriesgar su vida en la primera línea de batalla.

Y si durante estas seis semanas no les haces entender eso cuando entren batalla... Morirán

Ese fue mi error.

- Aunque estén escritas con rencor... - dijo para tomar el manojo de cartas que iban a su persona. - Mientras me sigan llegando sabré que están vivas y que hice un buen trabajo... -

- Me gustaría decir que ese fue el problema que tuve con usted instructor Goku, irracionalmente comencé a tratarlo así creyendo que solo haría que mataran a las jóvenes... -

- Al final puedo ver que hizo un estupendo trabajo, en esas chicas pude ver una mirada llena de determinación... -

- No estoy molesto ni nada, y ahora creo que entiendo mejor tu actitud, quieres lo mejor para las chicas, pero aún así no estoy de acuerdo con tu forma de tratarlas -

- Algunas solo se llenarán de odio, miedo y rencor, y probablemente terminarán desquitandose con alguien más además de volverse arrogantes, creo que en lugar de simplemente "prepararlas para morir" hay que hacer se llenen de un fuerte deseo por seguir fortaleciendose y así tener esperanza para un mejor futuro - contestó Goku con calma.

- Jeje... Tu visión es cuanto menos interesante, pareces saber mucho de la vida -

- Yo todavia estoy aprendiendo, y confío en que Elizabeth y sus compañeras aprenderan a su propio ritmo - expreso con una sonrisa mientras miraba de reojo a la puerta.

Y detrás de ella se encontraba Elizabeth que había escuchado a escondidas toda la charla.

- "Buena persona, un entrenador duro y estricto que se preocupo por mi y mis compañeras... No tengo palabras para explicar el respeto y el aprecio que le tengo...

Viviré, le escribiré año con año expresando mis avances para mostrar que su visión de las cosas no está mal...

Aprendere, descansaré, comeré, entrenare y también jugaré para tener una buena condición...

Aprendí mucho de usted y creo que ahora mismo soy una versión distinta de mi misma.

Y si algún día tenemos la oportunidad de encontrarnos nuevamente le mostraré cuán fuerte me he vuelto junto a mis camaradas

Instructor Goku, aunque usted diga lo contrario, en verdad usted... Una persona admirable.

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Fin del capítulo.

Mirando un par de capítulos atrás me di cuenta de tremenda olvidada que me mande.

Simplemente hice el salto en el tiempo en el capitulo 27 olvidando por completo que Kazuha aún iba a cuestionarle unas cosas a Goku sobre su charla con los de su verso.

En donde se desarrollaria una charla que al menos dentro de mi mente se ve interesante.

Al principio o al final del próximo capítulo haré un añadido colocando eso que mencione.

De vedad perdón por olvidar algo así.

Sin más espero que hayan disfrutado este capítulo y espero sus opiniones.

¡Bye!