____________________________________________________________________________________

- Onno-san definitivamente estás enfermo - Jonh-Soo le quito de la boca un termómetro moderno a Yuuta, éste se encontraba acostado mientras tenía un trapo húmedo en la frente y se encontraba tapado.

El día había empezado normalmente con la única diferencia de que que Yuuta había despertado con una gran fiebre y dolor en todo el cuerpo, había agarrado un fuerte resfriado.

- Si se trata de un virus?, deberías retirarte esta temporada junto a Goku-san, y dejar todo en mis manos, así podrás recuperarte, todos ganamos, ¿no? - diría con aparente preocupación.

- Jeje creí que mi salud era buena pero falle, pero no estoy tan enfermo créeme -

- Ésta es como esas fiebres que le da a los bebes cuando recién les salen sus dientes... O como cuándo te sientes enamorado y no te corresponden - respondió riendo estúpidamente por la debilidad.

- ¿Te enamoraste Onno-san? -

- No... Yo no - respondió mientras reía otra vez recordando lo que pasó ayer, si bien el no está involucrado le daba mucha gracia.

- ¿Cómo que tu no? - Jong estaba confundido por eso y a la vez curioso.

- ¡Jajaja! Es una broma olvídalo - se hizo el estúpido para ahorrarse un problema.

- Yuuta, en serio no te ves bien - era la voz de Goku la que escucharon ambos, este hiba entrando a la tienda de acampar.

- *Ya casi es hora, tendré que irme* - pensaba Jong con seriedad.

- ¡¡Oh Goku-san que bueno verte!!, es bueno que estés aquí, por favor cuida a Onno-san mientras voy a preparar la medicina con las hiervas locales - Jong se mostraba con aparente alegría y alivio, para luego salir a toda prisa del lugar.

- Jeje lamento que me veas así Goku - se lamento Yuuta con algo de tristeza, a lo que el saiyajin solo niega con la cabeza.

- Tranquilo Yuuta, se lo que es estar enfermo así que no te dejaría así - empatizo de cierta forma con el técnico Chevalier.

Sigue sin olvidar aquella sensación en su corazón, ahora siente más empatia cada que ve a alguien enfermo.

- Creo que mejor dormiré un poco - Yuuta se acostó lentamente siendo dominado por su condición, su fatiga era excesiva.

- ¿Uh? - Goku volteó a ver en dirección de la entrada, sintió algunas presencias conocidas acercase rápidamente, y no parecían estar muy bien.

- *Luna ayer nos dijo que no nos quería cerca, ¿por qué viene ahora? - se cuestionaba el porqué sobre ese cambio de idea, sentía sus presencias algo alteradas.

¿Que ocasiono que Luna vaya en busca de ellos dos?

Retrocedamos unos minutos, en el lugar donde la familia que lidera al clan vive.

Luna se encontraba sentada en el suelo, mientras costuraba algo con tranquilidad y serenidad. Pero su paz lentamente se vio destruida por la llegada de alguien.

Rana había entrado al lugar, y parecía nerviosa o ansiosa por algo por lo que comenzó a moverse al rededor de Luna, poco a poco fastidiando a ésta llegando a un punto en el que no pudo más.

- ¡RANA! - llamó a su hermana con un tono de voz molesto.

- ¡¿Dime?! ¡¿Qué pasa?! - Rana estaba nerviosa por ver a su hermana molesta.

- Si tienes algo que decír entonces dímelo, y si no quieres nada entonces ven y ayúdame - replicaria molesta.

- Eh... Pues... - Rana se rasco una mejía nerviosa pensando como iniciar la conversación, y Luna solo tenía una mirada cómica de molestia.

- ¿Qué te pasa? Solo suéltalo de una vez - Luna le resto importancia tratando de volver a lo suyo pero aún así poniéndole atención a lo que dira su hermana.

- Muy bien, entonces dime de-Arimasu... Ayer por la noche... -

- ¿Qué estabas haciendo con Goku-san de-Arimasu? - preguntaría de forma acusatoria a su hermana.

Y al escuchar esa pregunta el cuerpo de Luna se estremeció por completó al mismo tiempo que se sonrojaba poniéndose muy nerviosa.

- ¡¿Ayer por la noche...?! ¿Con Goku-san?, no se de que me estas hablando - Luna sin mirar a la cara a su hermana jugaba nerviosa con sus manos para tratar de calmarse.

- Hermana.... - Rana sólo puso una cara cómica de molestia que podría interpretarse como un "¿Enserio piensas que voy a caer?".

- ¡Ah... Si! Lo encontré, pero tan solo hablamos un poco nada más - alzó uno de sus dedos como si estuviera explicando un punto importante mientras veía al techo aún nerviosa.

Y por la respuesta Rana solo sonrió con malicia y picardia.

Cerró sus ojos mientras pensaba como responder, cuando se le ocurrió abrió uno de ellos, viendo a Luna de una forma un poco altanera.

- ~Ya veo~ Entonces....

¿Qué tipo de conversación tuvieron para que tu estuvieras recostada en sus piernas de-Arimasu? - Luna al escuchar eso abrió tanto como pudo sus ojos, su sonrojo incremento mientras comenzaba a sudar comicamente.

- ¿Y también... ¿Por qué te fuiste corriendo con la cara sonrojada De-Arimasu? - Rana se cruzó de brazos mientras un tono burlon se hacía presente. Luna sólo bajo su mirada aún con su rubor mientras apretaba los dientes.

- ¡Ya basta! ¡Tan solo lo estás malinterpretando!. ¡¡Yo nunca me acostaría en las piernas de un forastero!! - Luna grito con cierta desesperación para eludir el tema.

- ¿Jamás? ¿Estás segura de-Arimasu? - preguntaría con sorpresa fingida y con un tono burlon.

- ¡Así es, jamás! ¡Hazme caso, no viste nada! - Luna grito con la cara algo roja mientras sudaba cómica mente nerviosa por la situación.

- ¿Así que quieres que lo mantenga en secreto de-Arimasu? - Rana tenía una cara cómica de burla mientras cruzaba sus brazos.

- ¡Es que no hay nada que ocultar! ¡Por favor has como su nunca hubiera pasado! - Luna suplico comicamente mientras se le acerca a Rana con la cara aún roja.

- ¡¡Somos hermanas!! ¡¿No?! -

- Bueno si tanto quieres que....

No pudo terminar su frase al ser interrumpida por una tercera persona.

- ¡¡Luna-San!! - un hombre entraria apresuradamente al lugar tomando por sorpresa a las hermanas.

- ¡Por favor venga rápido! La esposa de Klukuku esta dando a luz pero... El parto se ha complicado - pidió, no, suplico por ayuda, el asunto era realmente grave.

Las hermanas pusieron una mirada de sorpresa mezclada con espanto.

- Por favor.... ¡Por favor salve a mi hijo y a mi esposa! - el esposo de la mujer le suplicaba a la encargada. Se veía desesperado por la situación, llevaban incluso más tiempo del estimado.

La madre sólo apretaba con todas sus fuerzas un pañuelo producto del dolor que estaba sintiendo en ese momento.

- La situación es grave, muy grave - la anciana encargada se levantó viendo a los presentes con preocupación.

- El niño viene al revés, lo primero en salir serán los pies, si no hacemos algo pronto ambos estarán en el cielo muy pronto - esta información horrorizo a los presentes, y más al padre, ahora su miedo era mucho mayor, la vida de su esposa e hijo peligraban al 100%.

- No... ¡No!... ¡Por favor no! - negaba con desesperación el padre.

- ¡¡Luna-sama está aquí!! - el hombre que fue a buscarlas entró en escena.

- ¿Cuál es la situación? ¿Y cómo se encuentran? - preguntaría Luna con mucha preocupación.

- El niño viene al revés, si no hacemos algo ambos morirán a este paso - la anciana diría casi como si se estuviera resonando al cruel destino.

- ¡Por favor! ¡Se lo suplico! ¡Salve a mi esposa y a mi hijo! - el padre se puso de rodillas viendo con a los con desesperación a Luna.

- ¿No hay nada que podamos hacer? - la hermana mayor vio a la anciana esperanzada.

Quién solo negó con la cabeza.

- Lo siento mucho tristemente no hay nada que hacer... - miro al suelo ya resignada, y el padre al oir eso comenzó a desesperarse aún más.

- ¡¡Si que la hay de-Arimasu!! - el grito de Rana llamó la atención de todos los ahí presentes.

- ¡Onno-san y sus compañeros pueden ayudar!, ¡Ellos saben de medicina moderna que se usa en la ciudad! -

- ¡Si los llamamos pueden ayudar! - grito con gran fuerza mientras apretaba uno de sus puños.

- ¡No seas estúpida! ¡No podemos permitir que un forastero ayude en el parto de uno de los nuestros! - negó con molestia y enojo la anciana, parecia ser tipo radical con sus reglas.

- ¡¡No seas estúpida!! - señaló con enojo a la anciana con enojo, ésta acción asustó a todos menos a Luna, que sólo estaba sorprendida.

- ¡¡No pienso quedarme sin hacer nada!!, ¡¡Todo lo que dieces son mentiras de-Arimasu!! - Rana la miro muy molesta y enojada, no pensaba permitir que dos de los suyos murieran por la teruqedad de otros.

- ¡¡Rana cuida tu forma de ha... - la anciana no pudo terminar pues una voz más imponente se hizo presente.

- Rana - Luna habló con autoridad haciendo que todos la miren - Por favor acompáñame - bajo la cabeza oscureciendo su mirada saliendo del lugar.

Rana miró ésta acción sorprendida y feliz por la sensatadesicion que tomó su hermana.

- ¡Ya voy hermana! - Rana comenzó a seguir a Luna, ambas iban a paso rápido.

Y así llegamos a la actualidad, Goku no tardo más de dos minutos en esperar su llegada.

- ¡¡Onno-san!! ¡¡Goku-san!! ¡¡Necesitamos su ayuda!! - Rana entro primero al lugar con desesperación, y atrás de ella venia Luna que tenía la mirada algo baja no queriendo verlo a los ojos por lo que pasó ayer, y ahora venía a pedirle ayuda, no se sentía cómoda.

- ¿Qué sucede Rana? - preguntaría curioso Goku. Normalmente iría sin cuestionar mucho, pero Yuuta necesitaba ayuda.

- Lo que pasa es que... -

- Un parto se ha complicado - Luna tomo la palabra con seriedad atrayendo la atención de todos, inclusive la de un semi inconsiente Yuuta.

- El niño viene al revés y no podemos hacer nada... Por favor ayúdanos - suplico viendo a los ojos al saiyajin.

Quién fue tomado por sorpresa, no tenía ni idea de que hacer.

- Ce... Ce... Ce... - la debil voz de Onno Yuuta llamó la atención de Goku.

- Cesaría...cesaría... - diría mientras suspiraba cansado.

Goku ha sabiendas de que trataba de decirle algo importante llevo su mano a la cabeza de Yuuta dispuesto a leer su mente, y el saiyajin corría con suerte, ahora que Yuuta había pesando en eso, en su mente estaba pasando todo lo relacionado a esa palabra.

Y así lo hizo, leyó su mente sorprendiendose por lo que vio, Yuuta estaba sugiriendo hacer una operación para que el bebé nazca sin muchos problemas, y así madre e hijo vivan.

Pero... ¿Qué podría hacer él?

En relación a salud solo sabía como hacer té's, medicina natural con hierbas, reacomodar huesos, y ahora solo podía curar heridas... ¡Curar heridas!.

Si hacía lo que vio en la mente de Yuuta y sanaba a la madre con su habilidad para curar podría hacer algo.

Pero eso no implicaba que sería indoloro... Necesitaba hacerla insensible al dolor de alguna forma.

Se acerco al lugar donde Yuuta y Jong-Soo guardaban la indumentaria médica, y se puso a buscar algo en especial la anestesia, por lo que había podido ver en la mente de Yuuta era algo muy efectivo para que la mujer no sintiera dolor.

- ¿Pu-puedes hacerlo? - preguntaría casadamente Yuuta.

- Lo haré... ¿En donde se encuentran? -

Las hermanas guiaron al saiyajin hasta donde se encontraba la esposa de Klukuku, quien aún se encontraba pujando del dolor.

- ¡Trajimos ayuda! - Rana abrió el telón para luego entrar los tres.

Goku se le acerco a la mujer, no hacia falta usar su habilidad para sentir Ki para darse cuenta del delicado estado de la mujer.

- Es tal como lo dijo Yuuta... Solo queda hacer esa llamada cesaría -

- ¿Una cesará de-Arimasu? - preguntaría Rana.

- Espera... ¿Te refieres a abrirle el vientre y que por ahí sacaras al bebé? - preguntaría Luna consternada, y el resto se horrorizo un poco ante la idea.

A lo que Goku solo asintió.

-Por lo que se no hay otra forma, si no ambos morirán... - diría afilando un poco la mirada, la situación requería que se pusiera serio.

Goku sintió como algo estaba aferrado a su pie, al bajar la mirada vio como se trataba del padre del bebé, estaba llorando de la impotencia de no ser capaz de hacer algo.

- Por favor se lo ruego... ¡¡Salvelos!! ¡Salve a mi esposa y a mi hijo! - Goku viendo eso solo puso su mano en el hombro del señor.

- Lo haré - respondió con seguridad, no comprendía como se estaba sintiendo pero puede ver que su angustia era enorme.

Tras unos minutos a cómo pudo le colocó la anestesia, y tras unos minutos la mujer quedó dormida, y lista para la operación.

En el lugar solo estaban presentes las hermana Linchen y el padre, Luna permitió que se quede al no querer negarle su derecho.

- ¡Espera! ¿No necesitas una cuchilla de-Arimasu? - Rana estaba consternada viendo como Goku no tenía con el ningún objeto punso cortante.

A lo que Goku sin verla y viendo fijamente el vientre de la mujer alzó su dedo índice que lentamente comenzó a emitir un brillo para la sorpresa de todos los presentes.

El brillo blanco lentamente tomó la forma de una especie de cuchilla muy filosa, y al terminar acerco lentamente su dedo al vientre de la madre dispuesto a realizar esa operación.

Y la operación dio comienzo... Terminando hasta al anochecer.

- ¡UWAHHH! -

- ¡UWAHHH! -

- ¡UWAHHH! -

Se escuchaba al bebé llorar y llorar, el cual estaba en los brazos de su madre que trataba de calmarlo.

Y justo enfrente estaba el padre de rodillas mientras lloraba de felicidad, era básicamente un milagro lo que habían visto.

Se encontraban solos, siendo únicamente acompañados por Luna que veía todo con felicidad y alivio.

- Felicidades, yo paso a retirarme, solo les pido que recuerde lo que Goku-san pidió -

- ¡Por supuesto! - acepto Klukuku, tenía una enorme deuda con el saiyajin, así que el y su esposa aceptarían esa petición.

- Aunque no se como fingir estar herida jeje - se reiría la madre por esa situación.

Luna se retiro del lugar, caminando un poco hasta llegar justo donde se encontró con Goku la noche anterior antes de quedar inconsiente.

Con calma se sento en el suelo mientras veía el cuelo nocturno, parecía esperar a alguien, tras unos minutos unos pasos comenzaron a escucharse, al ver de reojo vio que se trataba de Goku así que regreso su vista al cielo esperando su llegada.

Cuando el guerrero de otro mundo llegó justo detrás de Luna ella solo optó por hacer algo.

- Gracias -

- ¿Eh porque? -

- Salvaste a dos de los nuestros, no hay manera en la que te pueda demostrar mi gratitud, aparte de cumplir con lo que nos pediste - antes de retirarse del lugar Goku solo pidió una cosa, que no le dijeran a nadie sobre lo que habían visto de él ese día.

- Tienes habilidades muy interesantes... - Luna noto como al menos ahora no conseguíria algo de información por parte del guerrero acerca de él optó por solucionar otro tema pendiente.

- Perdón... Lamento como te trate anoche, en serio lo siento, con tu ayuda Klukuku podrá vivir con su familia sin preocupaciones, te lo agradezco en nombre del clan - Luna inclino la cabeza en señal de gratitud, y también de disculpa.

- No hay problema - respondió con una leve sonrisa el guerrero, quien cerró los ojos para luego abrirlos con algo de seriedad.

- Luna, sobre lo de ayer, estuve hablando con Yuuta, y enserio es importante que nos acompañes, puedes confiar en mí, se de alguien que te puede ayudar - ante ésto Luna solo bajo la mirada.

- El festival Kunlun será muy pronto, ahí seré presentada como la nueva líder del clan, hasta entonces no puedo dejar al clan... -

- Pero... -

- ¡¡Aunque este en peligro no puedo traicionar las esperanzas de todo el clan!! - grito Luna con frustración y enojo.

- Ya veo, ¿"hasta entonces", eh?, eso significa que después podrás irte, ¿cierto? - inquirio Goku sonriendo.

- Esto.. Si -

- Entonces prométeme ésto, cuando eso de tu festival pase, me acompañaras para que te puedan ayudar, ¿que tal? -

- Esta bien, te lo prometo Goku-san -

- Solo dime Goku -

- De acuerdo Goku - Luna se puso de pie dispuesta a irse, pero fue detenida por que comenzó a hablar.

- De hecho hay otra cosa de la que necesito hablarte - Goku se rasco la mejía un poco nervioso por lo que tenía que decir.

En caso de tener que esperar para ir con Gengo había que hacer algo para mantener a raya el estigma de Luna, era hacerle constantes revisiones y aplicarle algunos tratamientos... Con su cuerpo al descubierto.

- Si dime ¿que ocurre? - Luna sonrió de forma agradable esperando lo que Goku tenga que decirle.

Y así el saiyajin le comento lo que ocurría, y como era de esperarse Luna se exalto por la noticia.

- ¿Quieres... examinar mi cuerpo? - preguntaría con un fuerte rubor.

- Ya veo... No queda remedio ¿eh?, si así son las cosas, entonces dejaré que cuides de mi Goku - Luna dio una bella sonrisa mientras miraba a Goku.

- *¿No era Yuuta el que tenía que revisarla?* - se preguntó confundido y nervioso, esto de hacerle se Dr no era para nada lo suyo.

Y así pasaron las semanas, Yuuta instruyó a Goku sobre cómo debía revisar a Luna y la recolección de datos que debía hacer, cosa que le resulto muy aburrido a éste, siendo que la mayor de las Linchen solo confiaba en él debía ocuparse de éste asunto.

Por cuestiones de seguridad Goku estuvo junto a Luna todos esos días, incluso parecía ser su sombra en algunas ocasiones

Ocasionando que muchos miembros del clan comenzarán a murmurar cosas acerca de dicha cercanía.

Por muy buena persona que fuese Goku para ellos no dejaba de ser solo un forastero por lo que no les parecía completamente correcto que estuviera tan cerca de su próxima líder.

- *Esto es vergonzoso* - pensaba apenada Luna, ella estaba descubierta de la parte superior de su ropa con sus senos al aire, mientras Goku siguiendo las instrucciones de Yuuta parecía estarla revisando.

Quien por cierto no era la primera vez que lo hacía, y al igual que en las otras ocasiones no hubo ninguna reacción de su parte por la semi desnudez de la mujer.

- ¿Y bien? - preguntaría Luna mientras se ponía su ropa aún con un rubor en su rostro.

- Por lo que puedo sentir eso se complica... -

- Ya veo - respondió dando un suspiró pensado, luego de que ocurra el invierno que se aproxima el festival estaría a la vuelta de la esquina, y así ella podría dar la excusa perfecta para poder irse y ser debidamente atendida.

- ¡¡Luna-sama!! - un hombre entró gritando al lugar tomando por sorpresa a Luna que se estaba terminando de poner su ropa.

- ¡¿De qué se trata?! - preguntaría de forma alterada mientras disimulaba tanto como podía que se estaba poniendo su ropa.

- ¡Acaban de llegar unos hombres que dicen que estás
tierras les pertenecen!! - gritaria alterado, dejando en shock a Luna.

- Traen consigo maquinaria, ¡¡Y quieren comenzar a trabajar
inmediatamente!! - el shock de la mujer solo se hizo más grande por esa noticia.

Cómo era posible eso, su clan ha estado viviendo en estas tierras ahí durante siglos, y ahora vienen y quieren quitárselas.

Tenía que ir ver que ocurría.

- Luna iré contigo - diría Goku algo serio, la cosa pintaba a algo complicado.

Y la mujer aceptó sin poner oposición, no le vendría mal la ayuda que le pueda dar el saiyajin.

Y ahora con las personas que traían la maquinaria...

- ¿Cree que los va a engañar señor? - preguntaría uno de ellos temeroso.

- Tranquilo, solo son míseros campesinos que no saben lo que es un contrato - diría el aparente jefe de construcción con cierta arrogancia.

- Pero jefe, se dice que cada uno de ellos posee puede dar golpes con la fuerza de 10 hombres, es como enfrentar a un pequeño ejercito - diría el trabajador con preocupación.

- Jejeje - se reía con malicia el jefe.

- No hay de que preocuparse, después de todo no hay nada que puedan hacer en contra de nuestros "refuerzos" - finalizó viendo hacia atrás a dos mujeres.

Una de ellas tenía una mirada que transmitía arrogancia y malicia, y la otra tenía una expresión de no importarle mucho lo que ocurría.

..

..

..

Fin del capítulo.

¡¿Qué ondaaaa?!

En fin, este arco se acaba en el próximo capítulo, corto lo se, pero ya ni modo :v.

Espero que hayan disfrutado del capítulo.

Bueno nos vemos, ¡Bye!.