✿ 13 ✿
¡VOY A MATARLO!.
⁽⁽—¡Rantaro, cuelga!.—⁾⁾
⁽⁽—Estoy en una llamada importante, pendejo maleducado.—⁾⁾
Estúpido, no me tomes el pelo.
⁽⁽—¿¡Es en serio!?.—⁾⁾
⁽⁽—¡Shhh~!.—⁾⁾
Irrupen mi casa, se acuestan en mi cama como si nada, toman mi celular y escriben en mi chat cosas que yo no deseaba, ¿¡y el maleducado soy yo!?.
⁽⁽—¡Está respondiendo!.—⁾⁾ dijo con una emoción igual a la de un niño que recibe su primer juguete ⁽⁽—¡Esta respondiendo, Paihara!!.—⁾⁾ ¿ven lo que digo?
—¡Hola!, ¿¡quién es!?.—
Del otro lado de la llamada, se escucha a Ouma-kun agitado y apurado. Yo sabía que estaba ocupado, seguro que estaba bañándose o algo así.
⁽⁽—Listo, hablale.—⁾⁾
¿¡¿QUÉÉÉ?!?.
⁽⁽—¡Cla-Claro que no!, tú hiciste esto, ¡tú habla con él!.—⁾⁾ susurro para que no me escuche Ouma-kun
⁽⁽—¡Vamos Putohara!, no puedo hacer todo por ti, mueva el culo, pendejo.—⁾⁾ vuelve acercarme el celular
¡¡Y yo soy tan imbécil!!, ¿¡por qué lo estoy tomando!?.
—Amm hola Ou-Ouma-kun, so-soy Saihara, y-yo..—
¡¡Rantaro, ayudame!!. Y mis súplicas fueron escuchadas, ya que me hace señas con sus manos ayudándome!.
—Llamaba para preguntarte como estas.—
—¡A-Ah!, Saihara-chan, eras tú, hola...—
No me responde, solo se escuchan ruidos de pasos y su respiración agitada. ¿Qué está pasando?.
—¿¿Ouma-kun??.—
—¡Ah si!, hola Saihara-chan.—
¿Me está volviendo a saludar?.
—Hola Ouma-kun, y-yo... Llamaba para preguntarte como estás, ya qu-que no respondías a mis mensajes.—
—Oh, si, estoy bien.. Yo..—
En eso se escucha un impacto fuerte hacia algún lugar, como si hubiese sido un golpe a una pared.
—¡¡AHHHHHHHH!!.—
—¡¡Ouma-kun!!, ¿¡qué haces!?.—
Con Rantaro escuchamos los pasos de Ouma-kun hacia no sé donde.
—¡Ouma!, ¡contesta por favor!.—
—¿¡Qué mierda crees que haces, demonio de cuatro patas!?.—
—¡¡Ouma, dinos que pasa!!.— interviene Rantaro preocupado
Volvemos a escuchar algo, esta vez fue como un objeto frágil rompiéndose.
—¡¡NOOOOOOOOOOOOO!!.—
⁽⁽—¡¡OUMA-KUN!!, ¿¡QUÉ SUCED-!!, se cortó la llamada.—⁾⁾ ay no, ¡AY NOOO!
⁽⁽—¿¡No será que el barba de chiva lo siguió a su casa!?.—⁾⁾
¡¡Callate maldito aguacate!!, ¡¡¡ME ESTÁS PONIENDO NERVIOSO!!!.
⁽⁽—¡Debemos ir a su casa!.—⁾⁾
No cuestiono su petición y fui a buscar mi arma autorizada que tengo en el cajón de la mesa de luz, una pistola taurus TS9.
Solo espero que no le haya pasado nada malo a Ouma-kun.
( ✿ ∆ ✿ )
Ya parados en la puerta, mantengo mi mano en la cintura justo donde se encuentra mi pistola, indico a Rantaro que toque la puerta y él lo hace. Hasta ese momento no se escuchó nada, pero en solo unos segundos se escucha pasos y el llanto de un bebé.
No entiendo, ¿hay niños en el medio?, ¿se encontrarán en peligro también?.
La entrada se abre con Ouma-kun sosteniendo a un bebé que lloraba más fuerte que antes; se ve cansado, con ojeras de tonalidades violáceas y su ropa desarreglada. ¿¿Ehh??.
⁽⁽—¿Saihara-chan?, ¿Amami-kun?, ¿¿qué hacen aquí??.—⁾⁾ pregunta meciendo al bebé suavemente
No me explico, ¿por qué había gritado antes y ahora se encuentra “tranquilo”?, ¿y qué tiene que ver este bebé?.
⁽⁽—Nosotros te habíamos llamado antes y nos preocupamos cuando gritaste.—⁾⁾ responde Rantaro rascando su nuca
⁽⁽—¡Oh!, ¡lo siento chicos!, no queria preocuparlos.—⁾⁾ reverencia sosteniendo firmemente al bebé ⁽⁽—Pasen.—⁾⁾
¿Qué?.
⁽⁽—No quisiéramos molestarte.—⁾⁾ Rantaro me golpea con el codo
⁽⁽—Tranquilo, no son una molestia, además los preocupe tanto para que vinieran desde muy lejos.—⁾⁾ dijo con una sonrisa tímida
Nunca le dije donde vivo.
⁽⁽—¿Cómo lo sabes?.—⁾⁾
⁽⁽—Ahora lo sé.—⁾⁾ que astuto ⁽⁽—Vamos, pasen.—⁾⁾ entra a su casa como si nada
Somos unos completos desconocidos que llegaron a su casa de la nada, ¿por qué Ouma-kun no nos tiene miedo?.
⁽⁽—Yo sé que no me harían nada.—⁾⁾
⁽⁽—¿¿Ehhh??.—⁾⁾
⁽⁽—¿A qué viene eso, Ouma?.—⁾⁾ pregunta Rantaro igual o más perdido que yo
⁽⁽—Nishishi.—⁾⁾ se ríe mientras camina hacia la mesa del living y toma un biberón lleno ⁽⁽—Hace un momento te preguntabas el porqué no les tengo miedo, y yo te respondí, ¿o me equivoco, Saihara-chan?.—⁾⁾
¿¿¿Ah???, imposible. ¿Será que Ouma-kun practica magia negra y esas cosas?. No es que crea en esas palabrerías, pero si les tengo respeto.
Por no decir miedo.
⁽⁽—No pensarán que soy un brujo o que practico magia negra, ¿cierto?.—⁾⁾ dijo dándole de comer al niño en brazos
Si, estoy sintiendo miedo ahora...
⁽⁽—Ouma..—⁾⁾ no soy el único asustado
⁽⁽—Ah-hahaha~ solo bromeo chicos, pasen y cierren la puerta, por favor.—⁾⁾ dijo y nosotros solo obedecimos
⁽⁽—Ouma-kun... ¿Está todo bien?.—⁾⁾ si, me paso con mis preguntas
⁽⁽—¡Si!, ahora si.—⁾⁾ me sonríe para enfocarse en alimentar al bebé
⁽⁽—¿Qué fue lo que pasó cuando te llamamos?.—⁾⁾ ¿ven?, esa pregunta si vale la pena ser preguntada
Lo que si me salió maleducado, pues sin cuestionárselo mucho se sentó en el sofá al lado de Ouma-kun. ¿Dónde quedó el “con permiso” y el “por favor?.
⁽⁽—No te tomes tanta confianza.—⁾⁾ lo regaño y él me saca la lengua
Que guacamole más feo.
⁽⁽—No te preocupes Saihara-chan, puedes sentarte también, sería de muy mala educación dejar parados a los invitados, ven por favor.—⁾⁾ dijo viéndome con esa sonrisa tierna
¿Cómo negarle algo?.
⁽⁽—Respondiente Amami-kun, ustedes justo me llamaron cuando peleaba con una pequeña rata.—⁾⁾ dijo acariciándole el rostro al niño
⁽⁽—¿¿Una rata??.—⁾⁾ preguntamos al mismo tiempo
⁽⁽—Yeaaah~ es realmente agotador tratar con ella.—⁾⁾ suspira cansado
Y en eso, se escucha algo caerse.
⁽⁽—¿Qué fue eso?.—⁾⁾ pregunto y de repente recibo al bebé que sigue bebiendo de su leche ⁽⁽—¿Uh?.—⁾⁾
⁽⁽—¡YA SE MATÓ ESTA NIÑA!.—⁾⁾
Sale corriendo hacia el pasillo y aprovecho este momento para ver al niño; tiene la piel blanca, aunque no tanto como Ouma-kun, sus pocos cabellos que le están saliendo son negros y unos grandes ojos grises.
Estaba a punto de dormir, pero se escucha la risa de un niño, siendo más específico, la de una niña.
⁽⁽—¡Ahhh-hahahaha!.—⁾⁾
Oh Dios.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro