Shuichi Saihara
   Tengo a Rantaro acostado en mi cama, como Pedro por su casa, mirando atentamente todos mis movimientos, y la verdad me está dando ansiedad.

⁽⁽—¿Puedes recordarme por qué estás en mi casa mirándome como camara de seguridad?.—⁾⁾ pregunto para cerrar los ojos por un segundo

⁽⁽—Kaede me envió para asegurarse de que le hablaras a tu Ouma-kuuuun.—⁾⁾ dijo burlándose de la situación

⁽⁽—Mmm.—⁾⁾ es cierto, esto pasó ayer..

( ✿ ∆ ✿ )

   Con los chicos decidimos acompañar a Gonta-kun y a Ouma-kun a sus casas, ya que mientras Ouma-kun trabajaba nos quedamos hablando con Gonta hasta que dieron las 10:36 p.m.

   Dejamos primero a Gonta y mientras caminábamos hacia la casa de Ouma-kun.

⁽⁽—Pss~ Shui.—⁾⁾ susurró Kaede a mi lado

⁽⁽—¿Qué pasa?.—⁾⁾ susurro igual

⁽⁽—Pídele una cita.—⁾⁾

   Con esa oración sentí como el aire se fue de mi cuerpo.

⁽⁽—¿¡Ehh!?, ¿qué dices?.—⁾⁾

⁽⁽—¡Shhh~!.—⁾⁾

   Volteamos hacia Ouma-kun y vimos que estaba hablando muy animado con Rantaro. Es obvio que lo tenían planeado desde antes; ¡y no me avisan, traidores!.

⁽⁽—Más te vale que cuando lo llevemos a su casa le pidas una cita porque te quedas sin culo.—⁾⁾ sus amenazas van evolucionando cada vez más

⁽⁽—Pobre de mí..—⁾⁾

   Seguimos caminando hasta llegar a su casa, y ahí empezó sus actuaciones.

⁽⁽—Bueno, nosotros nos separamos aquí, ¡nos vemos luego Ouma-kun!.—⁾⁾ saludó Kaede abrazándolo

⁽⁽—Cuidamelo bien, Ouma.—⁾⁾ bromeó Rantaro palmeando su hombro

⁽⁽—No se preocupen~ yo lo cuido por ustedes, ¡tengan cuidado al cruzar!.—⁾⁾
saludó con la mano, y cuando ellos doblaron la esquina se aferró a mi brazo ⁽⁽—¿Nos vamos, Saihara-chaaan?.—⁾⁾

   ¡Mierda!, Ouma-kun es muy tierno.

⁽⁽—S-Si Ouma-kun.—⁾⁾

   Cuando llegamos a su casa, sacó las llaves de su bolsillo y abrió la puerta.

⁽⁽—Es muy tarde para que vayas solo, ¿quieres entrar en lo que llamas a un taxi?.—⁾⁾ preguntó con los ojos brillando y las mejillas sonrojadas

   ¡Mierda!, Ouma-kun es muy lindo.

⁽⁽—Esta bien, con permiso.—⁾⁾ entro y él cerró detrás de mí

   Wow, la casa de Ouma-kun es muy bonita y espaciosa teniendo en cuenta que por fuera se veía más pequeña. Al entrar me dio directo a la sala, a la izquierda había una entrada y al fondo un pasillo para las demás habitaciones.

⁽⁽—Iré por un refresco, ¿quieres algo?.—⁾⁾ preguntó dejando su saco blanco

   Que ahora que pongo atención, tenía botones de distintos colores y formas; pude notar los primeros botones negros y de repente uno amarillo de gran tamaño y otros rojo más pequeños. Que extraño.

⁽⁽—Un vaso de agua, por favor.—⁾⁾

⁽⁽—¡De inmediato!.—⁾⁾

   Pareció casualidad de la vida, pero cuando él se fue a la cocina me llegó un mensaje de Kaede.

   Bueno, ¿ya qué?. Sé que si no le hago caso, las consecuencias serán peores, además, salir a caminar con Ouma-kun es de lo más normal. ¿Qué podría pasar.

( ✿ ∆ ✿ )

⁽⁽—Era pedirle una cita, Saihara, ¡una
cita!, ¡y tú vas de idiota pidiéndole su
teléfono!.—⁾⁾ bueno, pero no grite

⁽⁽—¡Entré en pánico!, ¿¡bien!?, nunca le pedí una cita a alguien antes.—⁾⁾

⁽⁽—Porque antes no te gustaba nadie, pero ahora estás interesado en Ouma, por eso te costó en realidad.—⁾⁾ dijo posando su mentón en sus manos

⁽⁽—No estoy interesado por Ouma-kun, es lindo y amigable, no lo negaré, pero no es que me guste ni nada.—⁾⁾

⁽⁽—¡Por favor!, si siempre que salimos quieres ir a Dangan Ronpa para ver a tu “Ouma-kun”, y cuando hablamos de él te pones nervioso por “Ouma-kun”.—⁾⁾ dijo con un tono burlón, algo esperado de él ⁽⁽—Aunque... Podrías enviarle un mensaje ahora.—⁾⁾

⁽⁽—Lo haré más tarde.—⁾⁾

⁽⁽—No lo harás más tarde.—⁾⁾ su cara me dice que está harto de esta situación

   ¿Y qué hay de mí?.

⁽⁽—¿Por qué desconfías de mí?.—⁾⁾

⁽⁽—Te conozco, no le mandarás un mensaje, te pondrás a cuestionar por una hora y no harás una mierda.—⁾⁾ dijo cruzándose de brazos

   Vaya, no encuentro fallas a su lógica; fuera de bromas, no le enviaré un mensaje ahora, ni siquiera sé que le debería decir y ellos quieren que lo invite a una cita. Una completa locura.

⁽⁽—Iré por un vaso de agua.—⁾⁾ aviso para salir de mi habitación

   No pasaron cinco minutos que fui y volví que lo encuentro con mi celular.

   ¡¡¡HIJO DE PUTAAAAA!!!.

⁽⁽—¿¡QUÉ ESTÁS HACIENDO!?.—⁾⁾

⁽⁽—Para ser un detective, me saliste bien pendejo.—⁾⁾ ¡maldito aguacate!

⁽⁽—¿¡No te enseñaron a no tomar lo que no te pertenece!?.—⁾⁾ corro hacia él para tomar mi celular

⁽⁽—¡No iba a dejarte esta sagrada oportunidad en tus manos!, ¡la cagarías hasta el fondo!.—⁾⁾ dijo y ahí lo veo todo

   ¡¡¡¡AHHHH!!!, ¡¡¡LE ESTÁ HABLANDO A OUMA-KUUUUUUUUUN!!!.

⁽⁽—¡¡¡DÁMELOOOOOO!!!.—⁾⁾

⁽⁽—¡¡Noooo!!.—⁾⁾

   Estuvimos forcejeando por unos minutos hasta que tomo una almohada y le pego en la cara para distraerlo y quitarle MI teléfono, mientras que me subo y le aplasto las costillas para que no se mueva.

⁽⁽—¡¡Quitate, culo huesudo!!.—⁾⁾ me empuja hacia atrás intentando sacarme

⁽⁽—¡¡CALLATE, PALTA PODRIDA!!.—⁾⁾ le retengo las manos para ver que mierda le mandó

⁽⁽—¡¡¡RANTARO!!!.—⁾⁾

⁽⁽—De nada.—⁾⁾

   ¡¡Estúpido!!.

⁽⁽—¡Me hiciste ver como un idiota desesperado, maldito!.—⁾⁾

⁽⁽—¿Y qué eres ahora?.—⁾⁾

⁽⁽—¡¡Te odio!!.—⁾⁾

⁽⁽—Me amas bebé, lo sé.—⁾⁾

   Me salgo de arriba de él y tomo una almohada para tapar mi cara, cosa que al gritar no se escuche en todo la casa, aunque estemos nosotros sólos.

⁽⁽—Detente, te vas a quedar sin voz para tu cita con él.—⁾⁾ dijo riendo como el imbécil que es

⁽⁽—¿¡Qué voy hacer!?, ¡pensará que soy un intenso por tu culpa!.—⁾⁾

⁽⁽—¡Oye!, no es mi culpa que dejaras tu celular a mi disposición, ¡esto es TU culpa!.—⁾⁾ ¡¡hijo de puta!!

   Con la misma almohada que tenía en mis manos le empiezo a pegar y él se ríe cubriéndose con sus brazos.

⁽⁽—¡Ya ya para!, lo siento, ¿si?.—⁾⁾ toma la almohada y me la quitó ⁽⁽—Y ni tanto, no exageres que solo fueron cuatro mensajes preguntando como está.—⁾⁾ alza la ceja

⁽⁽—¡Aghh!.—⁾⁾ me tiro boca abajo para estampar mi cara contra el colchón

⁽⁽—Tranquilo Sai~ esperamos a que responda y te digo que decirle.—⁾⁾ palmea mi espalda animándome

   Bueno, ¿qué tan malo puede ser?.

( ✿ ∆ ✿ )

⁽⁽—¿Respondió?.—⁾⁾

⁽⁽—No..—⁾⁾

⁽⁽—Amigo, ya pasó una hora y ni una sola respuesta, ¡ni siquiera los vio!.—⁾⁾

⁽⁽—Lo sé...—⁾⁾

   Y es verdad, son como las cuatro con diecisiete minutos y Ouma-kun no me responde; ahora que recuerdo, nos habían dicho que cambiaba su turno a las cuatro. Quizás esté yendo a su casa.

⁽⁽—Pregúntale si esta bien.—⁾⁾ dijo y le hago casa

   Pasaron unos diez minutos y no responde. ¿Me debería preocupar?, no lo sé, hay personas que tardan mucho en responderle a sus amigos. Es probable que Ouma-kun sea una de ellas, además de que podría estar llegando a su casa o estar bañándose.

   No hay nada de que preocuparse.

   Suspiro y bajo la vista hacia mi celular, pero ahí me doy cuenta de que no lo tengo. Miro a Rantaro y este cabeza de pasto tiene mi celular en su oreja, y escucho el sonido de llamada entrante.

   ¡¡AHHHHHHHHHHHHHHHH!!