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*Créditos del gif al respectivo artista*

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Este capitulo se desarrolla entre ❝Depredador❞ y ❝Una mente enferma❞

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🩹

Después de una larga semana de clases, los niños como de costumbre, van a la base a disfrutar su fin de semana, al llegar, se bajan rápidamente de sus guardianes para que puedan estirarse. La presencia de Nasu se hace notar, Miko, con su gran entusiasmo y energía, se acerca a saludar vigorosa a Nasu. Ella pega un salto, despegando su atención del monitor.

     —¿Cómo estás Nasu? —pregunta Miko, siguiendo acercándose a la autobot.

     —Estoy bien Miko ¿Cómo te encuentras tú? —Nasu contesta con tono bajo y algo tembloroso.

     —¡Emocionada! Hoy hay camiones monstruo —Miko como saludo, palmea el tobillo de Nasu—.¿Quir.......

La voz de Miko se perdió para los receptores auditivos de Nasu. Un gran vacío la invadió, cada circuito y cable se estremeció debajo de su armadura y piel. Una presión dolorosa, angustiante y desagradable está en su chispa, siente el calor de Miko, su pequeña vida, frágil, muy frágil.

     —¿Ratchet? C-claro, voy de inmediato —habló con voz temblorosa, sin mirar a Miko por un instante—. Ratchet me esta llamando, perdón por rechazar tu invitación.

Nasu con pasos largos, se aleja y va a su cubículo, en gran oscuridad, Nasu se sienta en el suelo, apoyándose en la pared, sus dentas se aprietan y sus labios se fruncen, sus grandes ópticos están al borde de lubricar.

El nerviosismo e incomodidad no pasaron desapercibidos por todo el grupo presente. Los niños se miraron extrañados y Miko se entristeció un poco. Ya han pasado algunas semanas de que Nasu llegó y no ha llegado a establecer una relación muy profunda; más allá de los saludos, y parecía que en los últimos días ella los estaba evitando, siempre tenía una excusa.

     —Bulkhead, ¿Qué le pasa a Nasu? —ingadó Miko—, ¿La incomodamos?     

     —No-no, no digas eso —tranquiliza el gigante verde—. Solo se sigue acostumbrando.

     —Pero...las últimas veces que hemos estado aquí, nos evita —explica Jack.

     —¿Le pasó algo? —pregunta Raf.

     —¿Dijimos algo fuera de lugar? —siguió Miko.

Todos continuaron discutiendo, por el marco del pasillo, Ratchet hizo aparición para tomar el turno del monitor, todos se quedaron callados y los niños se dieron cuenta fácilmente de que Nasu si los estaba evitando a propósito.

     —¿Lo ven? —Miko apuntó con ambas manos a Ratchet.

Ratchet devolvió la mirada extrañado y no pudo evitar fruncir sus crestas ópticas.

     —¿Qué ocurré aquí?

     —Nasu nos está evitando —afirmó Miko.

     —¿Qué...?

     —Que Nasu nos... 

     —Te escuche la primera vez —Ratchet se acerco a los niños—. ¿Por qué crees que Nasu los está evitando?

     —Pues hace un momento dijo que tú, la estabas llamando —contó Miko.

     —Y parece estar incomoda con nuestra presencia —agrega Jack.

Ratchet escucho y analizo, su ópticos se desviaron e intenta recordar alguna eventualidad que le haya afectado a Nasu. Su mirada se enfoco en Arcee y Bumblebee y rápidamente recordó lo que ocurrió hace algunos ciclos, era una posible causa del porque Nasu podría estar evitando a los niños.

     —¿Recuerdan lo que pasó hace unos 10 ciclos?

     —¿Bez beep-beep?

     —¿¡Qué!? —exclama Raf mirando a Bee con rostro sorprendido.

     —¿Crees que se deba a eso? —enfatiza Arcee ante el comentario de Ratchet.

     —¿Qué pasó hace 10 ciclos? —pregunta Jack.

     —Hubo una señal de energon en las costas de África, Gabón, si no me falla la memoria, Arcee y Bumblebee fueron a verificar la señal —comienza a contar Ratchet—. Nasu nos insistió en el poder ir, y se lo permitimos.

     —No hay mucha presencia humana en esa zona, y también era de noche —continua Arcee—. Empezamos a buscar por la costa el energon, no había mucha luz y apenas se veía la Luna, así que podíamos ver lo que nuestras luces iluminaran.

     »Creo que ella estaba distraida viendo el paisaje, cuando soltó un chillido, Bee y yo volteamos y Nasu... había aplastado a una tortuga y algo que estaba enterrando. Nasu colapsó y se puso a llorar y ponerse muy nerviosa, ni siquiera articulaba palabra alguna y su campo EM estaba muy alterado.

     —Después del incidente, Nasu estuvo bastante...deprimida, es probable que tenga miedo de que ocurra un incidente con ustedes —concluye Ratchet, dándole una respuesta a los niños.

     —Pero eso fue un accidente —dice Miko.

     —Lo fue Miko, pero Nasu no lo percibe así y se siente culpable al respecto —responde Ratchet con paciencia.

Nasu hasta el momento es una autobot bastante sensible y mantiene una relación mucha más intima con Ratchet, y estas características no pasan desapercibidas para nadie, y mucho menos para los niños.

Miko ante estos hechos, está determinada a ayudar a Nasu a superar ese incidente, incluso si le tomaba días o semanas, está más que dispuesta a establecer un mejor relación entre sus amigos y ella.

     —Hay que hacer algo —Miko miro a Jack y Raf con una sonrisa y ojos agudos.

     —¿No deberíamos darle su espacio?—sugiere Raf.

     —Evitar el problema no es la solución —Jack mira de reojo a Arcee y luego se enfoca en sus amigos—, mucho menos si es por un trauma ¿Cuál es tu plan?—Jack muestra su apoyo a Miko.

     —Con una actividad o un... juego.

     —¿Qué juego sería? ¿Canasta?

     —¿Qué? no, Raf, atrapadas, la idea es que pierda el miedo a lastimarnos.

     —Creo que es una idea arriesgada —opina Ratchet—. Ese juego requiere de contacto físico y lo que menos quiere Nasu es tener un contacto cercano con ustedes.

     —No le diremos que jugaremos a eso, sino, de forma involuntaria.

     —Pues tengan cuidado, y no la alteren más de lo que ya está —advierte el médico, volviendo a su labor.

     —Si quieren alguna sugerencia, podemos ayudar —comenta Bulkhead con una sonrisa dulce—. ¿Verdad?

Arcee y Bumblebee asintieron, mostrando su apoyo a sus compañeros.

El plan comenzó. Lo primero era incitar a Nasu a perseguirlos; Raf no estaba muy convencido de esto, aún piensa que una actividad de mesa es una mejor opción y más seguro.

     —¿Cómo haremos que nos persiga? —cuestiona Jack.

     —Tomamos algo y ¡listo! —Miko está muy segura de su plan.

     —Me parece bastante difícil, todo lo que es cybertroniano es muy grande —musita Rafael en tono bajo.

     —Se optimista Raf, Nasu necesita confianza.

El tono seguro de Miko alienta a ambos muchachos, motivándolos a seguir el plan de Miko. Los niños buscaron la habitación de Nasu, la puerta está semiabierta, pero lo suficiente para que los niños puedan pasar. No hay mucha luz, más allá de lo que parecía un escritorio muy ocupado, llenos de datpads y objetos en plena construcción. Nasu está erguida frente al escritorio, con algunas herramientas a su alcance y sosteniendo un pequeño proyecto. Miko sabía que no podrían tomar alguna cosa o herramienta en el escritorio de Nasu, es muy alto y lo más pequeño que se veía es del tamaño de Raf. Miko busco algo al alcance y que pudiesen levantar sin muchos problemas, especialmente para Rafael.

Una caja algo baja y muy aplanada le llama su atención, la tapa está abierta. Con sigilo, Miko se acerco, evitando hacer cualquier sonido significativo. Había muchas herramientas, Miko se sorprendió al ver que estas son del tamaño de un block de dibujos. Miko hizo un ademán a Jack, para que viniese a ayudar, él se acerca, con cuidado y en conjunto, los jóvenes levantaron la herramienta, ambos se dieron cuenta del peso de la herramienta, no llegaba a pesar ni 5 kilos; incluso Rafael podría llevarlo sin esfuerzo mayor. Miko tomó la herramienta por sí misma, empezando a caminar fuera de la habitación de Nasu, seguida de Jack, al llegar al umbral de la puerta, Jack choca con un pedazo de tubo de metal, sonando contra el suelo, un sonido escandaloso y  poniendo tensos a todos. Nasu volteo sorprendida, bajo su ópticos en dirección, viendo a los niños, sus ópticos se ensancharon al ver a Miko con una de las herramientas de Ratchet. Un escalofrío le recorrió los cables.

     —¿Miko? ¿Niños? ¿Qué hacen? —el tono de Nasu es tembloroso, acercándose muy despacio a los niños. Miko tiene una mirada traviesa y una sonrisa lobuna.

     —¡Corrar!—exclama eufórica.

Los niños empezaron a correr, tensándola y confundiéndola, estaba desconcertada y paralizada.

     «¿Qué hago? ¿Qué hago? » un gran escalofrío le recorrió nuevamente, devolviéndola a la realidad—. !Miko¡ —Nasu da un paso largo hacia la puerta—. ¡Dame la herramienta! ¡Es de Ratchet!

Los niños ya iban a la mitad del pasillo cuando Nasu salió de su habsuite, ella está nerviosa, si esa herramienta se perdía, Ratchet se iba a molestar mucho con los niños y ella es demasiado grande para perseguirlos, el simple hecho de...

     «Los podría aplastar, ¿cómo lo hago? » Nasu ve su piel y recupera su sentido lógico.

Su modo alterno, era largo, pero media poco más de 3 metros de altura, era muy poco probable que llegase a golpear a uno de los niños con su cola; además, los niños físicamente podían esconderse debajo de ella, con esa altura también es mucho más estable que medir 10.5 metros.

Nasu, después de semanas de no haber utilizado su modo alterno, se siento agradable tener esa segunda piel unida, rodeándole y protegiéndole de manera distinta. La femme empezó a trotar, acostumbrándose otra vez a ese peso y estructura, su equilibrio pronto volvió, empezando a perseguir a los niños, quienes ya le llevaban un considerable distancia. Por el lado de los niños, intentaban pensar en los pasillos que debían tomar sin quedarse acorralados en el proceso, la idea era mantener a Nasu lo más activa posible. Por ahora, estaban pasando por las habitaciones de los bots, sin dificultad, vieron las pedes de Optimus, Jack gritó:

     —¡Optimus!

La pede se detuvo y la cabeza de Optimus se asomo, quedo perplejo por ver a los niños correr con una herramienta, tenía curiosidad, pero se contuvo al escuchar pasos que iban acelerando y pesados.

     —¡Vamos Raf! ¡Acelera! —anima Miko, riendo y jadeando.

Los niños continuaron corriendo, doblando por un pasillo, Optimus le siguió con los ópticos, volteó al escuchar un fuerte frenazo, es Nasu, quien estaba frenó en su traseras, y agarró velocidad en sus cuatros, siguiendo el rastro de los niños. Optimus no puede decir mucho, aunque de alguno forma, hay otro sentimiento, una pequeña alegría, el hecho de ver una armoniosa relación inter-especies, sonrió por el hecho y se fue en dirección a la salida para empezar su turno de patrullaje.

Nasu se detuvo en el cruce del pasillo, este iba en direcciones opuestas, vio hacia ambos lados, era lógico que se habían separado. Su hocico fue hacia el suelo, empezando a olfatear, a pesar de que su modo alterno no se especializaba en esta capacidad biológica, su sensible sensor olfativo de su protoforma era muy útiles, sentía el olor y hormonas de los niños.

     «Jack fue solo... a la derecha, Miko y Rafael fueron a la izquierda, ¿pero quien se llevó la herramienta? »

Nasu se dirige a la derecha, sería más sencillo encontrar a Jack debido a su altura y también quien producía mas hormonas de los tres niños.

     «Es como si estuviese jugando con ellos otra vez » crías de dinosaurios se visualizan en su CPU, no pudo evitar sonreír en su interior.

 ❝...❞

El olor de Jack se intensifico, deteniendo su trote, el pasillo es amplio, hay bastantes cajas en la cual poder ocultarse, la luces están opacas y parpadean cada ciertos segundos. Camina despacio en sus cuatro, está muy atenta, a expectativa de algún movimiento y poder atrapar a Jack. Nasu empezó a caminar alrededor de las cajas, observando con detalle, es consiente de que Jack ya sabe de su presencia, así que es paciente, ve, escucha y  olfatea con cuidado. Llegó a saltar por el ruido metálico, ella voltea en dirección del ruido, viendo la figura de Jack, él voltea brevemente y comienza a correr otra vez.   

     «Él no tiene la herramienta » Nasu suelta un bufido y va tras Jack.

Quizás él no tiene la herramienta, pero sería más fácil conseguirla con Jack cerca, ir atrapando a los niños de uno en uno.

Con menos distancia entre ellos, a Nasu no le costo alcanzar a Jack. Con su hocico, le agarra por detrás de las camisetas, levantándolo con rapidez, aunque sin llegar a lastimarlo; era como agarrar a una de las crías.

     —¡Whoa! —Jack está sorprendido de la fuerza y precisión de Nasu para atraparlo.

     —¿Dónde están? —musito lenta y grave Nasu.

     —No lo sé, nos separamos.

Nasu bajó a Jack, ella se acostó como si una esfinge se tratase, con su cabeza apunta en dirección a su lomo.

     —Sube —pide Nasu, viendo de reojo a Jack.

     —¿De verdad? —pregunta Jack incrédulo, no espera esa reacción por parte de Nasu.

     —Vamos.

  ❝...❞

Miko y Rafael están apoyados en la pared, mientras recuperar aire. Miko está sonriendo mientras Raf luce mucho más acabado.

     —¿Aún crees que-es-necesario esto? —cuestiona Raf entre jadeos a Miko.

     —¡Por supuesto! ¡Raf! Hay que que ayudarla.

     —Lo sé, lo sé, pero creo que seria mejor una actividad menos, movida.

     —Animo, ¿uh? —Miko ve de reojo el pasillo por fuertes pisadas—. Ahí viene, hay que movernos.

Raf suelta una profunda inhalación, no está hecho para este tipo de actividades. Ambos empiezan a correr, llegando a la sala de control, están todos los bots presentes, Bee se estaba preparando para su patrullaje. Los niños ya están en el centro de la sala , jadeando. Los bots los miran y levantaron sus crestas ópticas con curiosidad por el estado de los jóvenes.

     —¿Por qué tan agitada? —pregunta amable Bulkhead, agachándose a la "altura" de su compañera.

     —Nasu nos está persiguiendo —responde rápido Miko, quien sostiene la herramienta.

     —¿Bzzz Beepp?

     —Si... estamos jugando atrapadas —responde Raf a Bee.

     —¿Lograron que jugara? —Arcee está algo sorprendida.

     —Solo tomamos esto —Miko muestra la herramienta, Ratchet reacciono.

     —¡Miko! ¿Qué haces con eso? —Ratchet se acerco con expresión molesta.

     —¡Espera! Lo vamos a devolver y no lo vamos a perder —Miko abraza la herramienta con fuerza.

Pasos acelerados y pesados se acercan con intensidad, todos voltearon su mirada. Miko le dio la herramienta a Rafael y le dijo que se escondiera.

     —¡Pero...! —tartamudea el más joven.

     —¡Vamos Raf!

Rafael busca rápidamente donde esconderse y cree que detrás de los cables del monitor, corriendo en su dirección. Miko, por su parte, toma aire y va en dirección al escáner. Al fin Nasu hace su aparición, con un Jack bien sujetado a ella. Los ojos de Nasu van directo a Miko y solo a ella. A Nasu no le cuesta demasiado estar a la altura de Miko, e igual que a Jack, la agarra y levanta desde su camiseta. Miko se sorprende al principio, luego viene una risa abierta.

     —¡Me atrapaste!

A diferencia de Jack, Nasu no suelta a Miko, está buscando a Rafael con la mirada, siente su olor cerca, es probable que aún estuviera en la sala. Nasu camina en dirección a las escaleras que van hacia la plataforma, deja a Miko en un escalón y luego se acuesta para dejar bajar a Jack. Antes de buscar a Rafael, Nasu suelta un soplido a la cara de Miko, haciéndola reír por la sensación. Por un momento ella se desconecta y se da cuenta de que todo el equipo está presente, un sentimiento bochornoso se presenta, pero desaparece por el sonido de quejas, llama su atención, olfatea y es el olor de Rafael. Nasu se apresura, pasando gracilmente por las piernas de Ratchet y Optimus. La cabellera de Rafael se asoma, luego su cuello, Nasu con rapidez agarró a Rafael, quien abraza con fuerza la herramienta. Nasu lo llevo donde los otros niños, soltándolo con delicadeza.

     —La herramienta, por favor —pidio Nasu con tono grave, mirando a Rafael fijamente.

Raf se la dio, Jack y Miko sonríen entre ellos. Nasu ya no parecía incomoda, incluso llego a agarrarlos y levantarlos corriendo.

     —¿Cómo te sientes? —pregunta Miko con su gran sonrisa.

Nasu le mira con duda y confusión, no sabía como definir lo que sentía, su objetivo era conseguir la herramienta, pero se sentía mejor que hace un rato; aún con la mirada de los bots sobre ella y los niños que siempre le generaba vergüenza, un poco más liberada. De alguna forma, se sentía mucho más segura con su modo alterno que con su modo raíz, especialmente con los niños, en cierto punto, siente que están a la misma altura. 

Nasu no respondió, y solo se dio la vuelta, volviendo a su cubículo a dejar la herramienta en su lugar y tal vez seguir en lo que estaba trabajando.

     —¡Nasu! —el llamado se Rafael la detuvo—. Mañana...¿Te gustaría jugar con nosotros? Podría ser un juego de mesa —propuso el niño.

La tecno-orgánica volteo y asintió, su mirada se dirigió a sus compañeros, que la miraban con gentileza y sus campos EM estaban alegres, ella volteo, no era vergüenza, pero provocaba algo similar, solo que sentía bien, ese hormigueo en su estomago y chispa, continuó su camino, sintiéndose mejor.

     «Dudo que con un juego de mesa los pueda llegar a lastimar » se anima en pensamientos Nasu.  

❝...❞

Antes de irse a sus hogares, los niños decidieron por el juego de mesa que jugarían el sábado, su mejor idea, Jenga, que mejor juego para probar la precisión y delicadeza de sus jugadores. Jack se comprometió a traer el juego, por el hecho de que tenía el tamaño gigante. Al día siguiente, lo llevo a la base, durante el trayecto, Arcee pregunto por el objetivo del juego, Jack respondió.

     —Hay que construir una torre hacia arriba con las piezas de la misma torre original, la idea es llegar lo mas alto posible y no derrumbarla al sacar una pieza —explica Jack.

     —¿Y cuál es su propósito para ayudar a Nasu?

     —Raf se dio cuenta ayer que Nasu uso su modo alterno para seguirnos y atraparnos, cuando su miedo es por su modo robot —cuenta Jack—. Y que mejor juego que este para ayudar a Nasu con su confianza.

     —Espero que funcione —deseó Arcee, recordando muy bien el rostro horrorizado y lleno de culpa de la femme más alta.

Ya en la base, Miko, Rafael y Nasu lo estaban esperando, la última está conversando con Ratchet sobre los inventos que estaba intentando construir, también los acompaña Bee, quien está entusiasta de ver como se podrá desarrollar el juego. Optimus y Bulkhead no están por su turno de patrullaje. Jack se bajó de Arcee, quien se transformo, estirándose.

     —Ya llegamos —anunció Jack, subiendo por las escaleras a la plataforma.

     —¿De verdad es el tamaño gigante? —curioseo Raf al ver el tamaño del bolso.

     —Si —Jack mira a la más alta—. Nasu, ¿vas a jugar?

     —¡Oh! Claro —Nasu le asiente a Ratchet y se acerca a la plataforma—. ¿Cómo estás?

     —Estoy bien, ¿cómo estás tú?

     —Algo nerviosa, aunque creo que es la emoción —responde con su habitual tono suave.

     —¿Beep Bip Bzz?

     —Aún no sé como se juega, ¿cómo se juega? —Nasu mira atenta a los niños.

     —Hay una torre de 54 piezas —empieza a explicar Raf—, la torre se debe seguir construyendo, así que se saca una pieza de la torre y se debe colocar arriba, si la torre se cae, la persona que sacó la pieza es el perdedor y el jugador que nunca haya derribado la torre será el ganador —finaliza las instrucciones el niño.

     —Muy bien... un juego de posibilidades —susurra lo último Nasu, comprendiendo a la perfección las reglas del juego.

Los niños armaron la torre, que es tan solo un poco más pequeña que Rafael sobre la mesa en la que la construyeron. Miko sacó la primera pieza, la de un costado en la tercera fila de la torre, con confianza la coloca en la cima. El siguiente fue Raf, que busco un pieza del medio; la idea era que el juego durará un rato, para que Nasu se acostumbrara, en la quinta fila una pieza está bien suelta y logra sacarla con facilidad y con un poco de esfuerzo, la coloca al lado de la pieza que saco Miko. Después saco una pieza Jack, de la octava fila, una pieza del costado y también sin problemas la coloco en la cima, haciendo un nuevo piso, Nasu está fascinada, hay una pequeña pulsación en su chispa, como si estuviese conteniendo mucha energía y tenía que ser liberada. Sus ópticos miraron con detenimiento la torre, buscando en sus cálculos las piezas adecuadas para sacar sin derribar la torre, encontró una, décima fila, al medio, ahora es sacarla, para los niños, las piezas son grandes, pero para ella, son aún más pequeñas que la herramienta que los niños tomaron; lo único a su beneficio, es que no tiene dedos rectangulares ni gruesos como los de Rartchet o Bulkhead. Con cuidado, empujo la pieza con el índice, golpeando muy suave a la pieza, hasta que la mitad de está salió, la agarró y la empezó a deslizar, no le costo mucho sacarla por completo y fácilmente la colocó en la cima y la acomodo con cuidado.

     —Fácil ¿No? —comenta Miko, mirando a Nasu con una sonrisa.

     —Si... —Nasu le sonríe de vuelta.  

❝...❞

Un rato pasó, Jack y Miko van empatados con 3 partidas perdidas, Raf con solo 1 y Nasu está invicta, su paciencia y gran cuidado la ha hecho tener la ventaja, quedando muy absorta en cuales decisiones tomar y cuales no. Ahora mismo la torre está bastante inestable, todos están muy atentos, incluido Ratchet, quien encontró algo interesante el juego de piezas. Es el turno de Nasu, quien ya estaba haciendo los cálculos, solo había una pieza que podía deslizar, y tenía un probabilidad mayor de que la torre se caería. 

     «58 a 42, vamos, con cuidado. »

Con el mismo cuidado y paciencia, Nasu saco la pieza, la torre tambaleo, la tenso un poco, pero la torre se mantuvo, coloca la pieza en la cima y su racha terminó, la torre cayó y tarde se dio cuenta de que iba a Rafael, lo más rápido que pudo intento agarrar la torre, pero unas piezas cayeron en la cabeza y frente de Raf, quien hizo un quejido bajo.

La culpa la invadió, estaba tan concentrada en el juego que se olvido de las posibles consecuencias en su entorno, tiró la torre a un costado, quería revisar a Rafael, pero tenía miedo de lastimarle con su torpeza.

     —¡Raf! ¡Primus! Que tonta soy, que tonta soy, que tonta soy.

     —Tranquila Nasu, solo me sorprendió.

     —Perdón Raf, perdón, perdón —repetía constantemente Nasu, con esa horrible presión en su chispa—, perdón, perdón.

     —¡Basta Nasu! —Ratchet sujeto el mentón de Nasu, ella le mira con ópticos angustiosos y al borde del llanto—. Fue un accidente, debes dejar de culparte y humillarte por accidentes —exclama con severidad el médico.

     —Yo... —ella se siente tan mareada.

     —No es sano que te degrades y lastimes de esa forma, los niños te están tratando de ayudar —regaña Ratchet—. Tranquilízate, todos cometemos errores —el campo EM de Ratchet se intensifica, intentando rodear y calmar a su creación, cumple su objetivo, Nasu se ve menos alterada.

Ratchet soltó a Nasu y ella mira a Raf otra vez y también a los niños.

     —Discúlpenme, pero es que no quiero lastimar a nadie con mi protoforma, me siento tan torpe y descontrolada, muy abrumada —expresa con angustia la tecno-orgánica.

     —Lo sabemos, sabemos que te sientes pero... —habla Jack.

     —Solo queremos ayudarte —continua Raf.

     —Eres parte del equipo, eres nuestra amiga —finaliza Miko.

Nasu ante los comentario, solto un sonido suave y casi inaudible, pero por la cercanía de los niños con ella, si pudieron escucharlo, quedando confundidos, en cambio, los bots saben muy bien de que se trata el sonido, un sonido triste y agotado. Los bots presentes frotan sus servos por la espalda y brazos de Nasu, brindándole su apoyo. Estas acciones no pasan desapercibidas por los niños, y Miko, siempre activa, se acerca a Nasu y coloca su mano en la frente metálica.

     —Yo te mostraré que no estás descontrolada —aseguró Miko, acercándose a su bolso, debía admitir que Raf tenía razón sobre las actividades de mesa y tenía una idea que esperaba que funcionara.

Ella sacó su block de dibujos, bastante grande y sacó una hoja. La dobló para que se formase un cuadrado y con cuidado, rompió la hoja. Con el rectángulo sobrante, también lo doblo, formando un cuadrado más pequeño y también rompió la hoja.

     —Se que puedes hacerlo.

La japonesa con destreza, empezó a doblar y formar pliegues; era sorprendente verla tan centrada y callada, poco a poco el papel doblado empezó a tomar un forma, cuando terminó, Jack y Rafael supieron de inmediato lo que era, una grulla de papel, perfectamente doblaba y hecha. Miko le mostro la pieza de origami a los bots.

     —Lo que hice se llama Origami, en Japón siempre lo hacía en clases cuando estaba muy aburrida —explica Miko—. Se que si lo haces, se que nunca nos vas a hacer daño —el tono de Miko es tranquilo y serio, no parecía ser la misma niña tan llena de energía.

Miko le extendió la grulla a Nasu, ella la recibió, era tan pequeño, delicado, muy hermoso.

     «¿Es... está la fe de Miko en mi? ¿La confianza de alguien más que solo de la facción en mi? » pensó con dulzura y confort, miro la pieza detenidamente y luego a Miko—. Por favor... enseñarme.

 Miko sonrío y Nasu le devolvió la sonrisa, una sonrisa tímida. La niña empujo los bloques al bolso donde estaban guardadas y se sentó en el piso. Nasu se enderezó y extendió sus manos a la mesa, tomando el cuadrado de papel y esperando las instrucciones de Miko, quien empezó a indicarle, poco a poco tomo la forma y Nasu terminó la grulla, que está un poco desalineada, pero no hay rotura alguna, una prueba de su delicadeza y su control.

Los niños guardaron las piezas faltantes y pasaron la tarde haciendo origami, con Miko guiándoles, mucho más animada. Arcee y Bee observaban tranquilos y felices a sus compañeros. Ratchet de vez en cuando miraba de reojo, sonriendo apacible y orgulloso de que su creación este desarrollando su ausente y necesaria confianza.

Continuará...

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║Y cada viernes, Miko y Nasu

║se ponen a hacer origami

║para estimular la confianza 

║de Nasu.

║Capitulo de desarrollo de personaje,

║y que los niños tengan una 

║mejor relación con mi creación,

║siendo Miko la más activa a mi

║parecer, como se muestra con

║Bulkhead después del capitulo

║toxicidad en la serie.

║Espero les haya gustado y espero

║que pronto pueda traer un nuevo

║cap.

💜

💜Ciao Ciao💜