Me pregunto con frecuencia: ¿Por qué el tiempo parece más un parpadeo que una vida extensa?

Hoy después de notar que cada atardecer es diferente al del día anterior, comprendí que tenía veintiún años, mañana tendría treinta y dos, y cuando llegara el fin de mes... Caería en cuenta de que la edad de setenta años me cayó encima con un montón de sueños que dejé para el día siguiente.

Entonces solo pude pensar en una sola cosa: No soy, ni seré inmortal. Porque mientras piense que mis palabras y consejos quedarán inmortalizados en una hoja, lo más probable es que sea borrado por las mentes de plástico que habitan este mundo actual y que se ignoran mutuamente llevándose al límite del "Yo", del ego, hasta quedar sumidos en una profunda tristeza a la cual no le haya lógica ni razón.

Aquellas palabras que me dice mi madre 《Eres joven, tienes toda la vida por delante.》 me parecieron una triste oración cubierta de ilusiones que no existen, no puedo limitarme a la promesa de la infinita juventud. No tengo el tiempo por delante, solo tengo el ahora. Un ahora que por breves instantes parece una eternidad, pero que desde el punto de vista consciente, solo es una línea de tiempo frágil, un hilo que fácilmente puede cortarse con el asomo de un accidente u enfermedad. Y esto, esto es lo único que me queda... Vivir el ahora, porque solo el presente me llevará a un futuro. Dejar el pasado atrás, porque el pasado solo me estancará, me llevará directo a tener setenta años, de ser así puede que me termine convirtiendo en una mente deteriorada por la competencia que llevamos contra el mundo y no por nosotros, por olvidar lo finita que soy.