Pérdidas.
A lo mejor no era el momento indicado,
o quizás, simplemente, no estábamos hechos el uno para el otro.
Puede que, de todas formas, fuéramos a terminar gritándonos a cada momento,
llorando de impotencia y consolándonos en otros brazos.
Lo nuestro era demasiado intenso,
casi me dolía despertarme sin ti a mi lado, y me enloquecía dormirme sin tenerte.
Ni siquiera sé si todo eso era amor,
pero está claro que ni funcionó... ni habría funcionado.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro